Amelia A. Carstairs

DATOS BÁSICOS

• Nombre del Personaje: Amelia Anyssa Carstairs.
• Edad: Veintidós años.
• Especie: Bruja.
• Tipo, Clase Social o Cargo: Clase Alta, Baronesa de Escocia.
• Orientación Sexual: Heterosexual.
• Lugar de Origen: Highlands, Escocia.
• Habilidad/Poder: Dominación, Atmokinesis, Barrera.

DESCRIPCIÓN FÍSICA

Every rose has its thorn

Blancura infinita. El beso de hielo sobre sus mejillas. Blancuzca, pálida. Como su suave y delicada piel. Como la nieve que se amontona apacible sobre las montañas, como la nieve que cubre las orillas de las playas y se derrite ante los calurosos veranos. Hielo y fuego. Lava volcánica que se alza en sus ojos, hilos caoba cayendo sobre sus blancas colinas. Frágil como el cristal. Delicada cual pétalos de una rosa. Kissed by fire. Amelia, hermosa y frágil. Un atractivo escurridizo, una beldad llena de espinas. Bella como ninguna. Bella que ahoga. Fragilidad había sido su sinónimo, qué errado cuento de hadas.

Nívea piel, tan blanca como la nieve, tan suave y sedosa como la más exquisita seda. Nunca ha sido buena para los bronceados, pero es prácticamente normal observarla con un suave rubor provocado por los rayos del sol. Su rostro redondeado está adornado con dos ojos grandes y expresivos, de un intenso color caoba. Rasgos castaños cubren sus irises y un verde intenso se oculta alrededor de su pupila y la tonalidad varía, desde el más profundo verde hasta el chocolate más pálido e intenso. Una sutil nariz respingona y más abajo, unos llenos y profundamente rojizos labios hechos para el pecado.

Manos delicadas. Blanca sonrisa. Cabello de chocolate. El rasgo más llamativo de Amelia: su voz. Dulce y melodiosa, un hechizo que recorre la piel y conmueve hasta la última gota de sangre. Un cuerpo curvilíneo, pequeño y delicado, su estatura es algo sorprendente y gracias a la sangre escocesa que corre por sus venas, ha sido dotada de una muy buena altura. Es delgada, hasta el punto de creerla una debilucha. Pero no lo es. Posee fuerza en sus brazos, sus largas y onduladas piernas están hechas para correr grandes distancias.

DESCRIPCIÓN PSICOLÓGICA

The Queen of the cold hearts

Amelia. Una mujer de encanto natural y sosegado, de mirada firma e impasible. La calma después de la tormenta. Acostumbrada desde muy pequeña a conseguir lo que desea y pelear por aquello que quiera tener; es inamovible e imperturbable, difícil de entender a simple vista. Se caracteriza por manipuladora en todos los sentidos, sabe como lograr su cometido y no le tiembla la mano al hacerlo. Racional y política, cada acción y cada pensamiento tiene un sentido y un fin, ella no hace nada simplemente por hacerlo. Caprichosa por excelencia, le gustan los retos y los desafíos. Le cuesta aceptar la derrota y siempre tendrá un as bajo la manga para evitar que sus planes salgan trucados. Si algo le gusta, hará lo que sea por obtenerlo.

Independiente en todos los sentidos y léase en mayúscula con letras boyantes y resaltadas. Nunca ha sido mujer que pertenezca a un hombre, jamás de los jamases. Quizás por eso, siempre ha pensado que no está hecha para la época. No se deja sublevar ni mandar. Ella es la que manda, la que dicta las órdenes, la que tiene el sartén por el mango. Hombres, ¿para qué los necesitas? Todo lo que un hombre puede hacer, Amelia lo hace mil veces mejor. Amante de las armas de fuego, de los sables y las espadas. Inteligente y aguda, nadie ha sido capaz de engañarla ni una sola vez, puesto que sus rápidos ojos son capaces de ver a través del mínimo gesto. Apasionada, amante de los juegos y de las tácticas. Una estratega consumada, un dechado de virtudes. Una mujer de mil y una máscaras. Salvaje, incongruente, un espíritu libre que no se sujeta a nada ni a nadie. Hace lo que quiere, toma lo que desea y se deja llevar por sus más grandes pasiones. Nació para el pecado y en el pecado se queda. Peca de directa, lo dice todo sin ninguna muestra de recato.

Letal como una víbora al acecho, Amelia está loca, es imposible, es increíble. Desde cada uno de los aspectos que la mires. Es un huracán incontrolable e indestructible, una mujer forjada en acero. Impenetrable. Inmanipulable. Le gusta jugar con sus presas, desde el sentido meramente político, tiene demasiadas ambiciones y demasiados sueños para ser únicamente una baronesa. Ansía más, muchísimo más. Toda ella es una peligrosa combinación de dulzura y pasión. Sabe ser la mujer que desean. Se camufla a la percepción y puede cumplir los deseos de quienes la buscan, pero hay una cosa cierta en todo: deberás serle útil en algo.

Terca. Orgullosa. Mordaz. Palabras venenosas son lo que obtendrás de ella. Siempre tiene todo a la punta de la lengua, jamás queda sin cosas que decir. Y no dudará jamás de echarte en cara todo lo que piensa de ti. Porque sí. Es una mujer inteligente que sabe jugar todas sus cartas y nunca va a perder en el juego. La clase de mujer que sabe jugar con fuego y no salir quemada en el intento. Al que todo le resbala, si no eres de su interés. Confiable, si eres de los suyos. Pero es una persona desconfiada de los demás, sin embargo, si has llegado a entrar en su cerrado círculo de amistades y aún no ha detectado ninguna clase de traición de tu parte, quizás pueda hacer una excepción y tomarte en cuenta. Ella destruye a todos quienes intentan hacerle daño o traicionarlo. Castiga a todo aquel que se atreve a enfrentársele, destruyéndolos, acabándolos como las miserables cucarachas que son. Nunca podrás saber quién es en realidad, ni cómo actuará al segundo siguiente. Porque muchas veces, tal como has oído decir, si no puedes con el enemigo, únete a él. La única salida, la única opción. Porque esta princesa del hielo no va a bajar de su trono.

HISTORIA

Amelia Anyssa nació en la isla Skye, en las Highlands, Escocia. Hija de dos miembros de la aristocracia de la época y la menor de tres hermanos. Creció siendo amada y tratada como una reina por sus padres y hermanos. Todo lo que Amelia deseaba, era otorgado a ella lo más pronto posible. Mimada, alegre y obstinada. Quería saber de todo y hacer de todo. Le gustaba bordar, pintar, arreglar la casa pero de la misma forma, era una amante platónica de aprender deportes, manejar armas, montar a caballo y ser independiente. Aventurera, aunque su padre se opusiera, ella seguía a sus hermanos de un lado a otro, aprendiendo a disparar y a luchar. Algo mal visto por todas las damas de la corte y las nobles de alta alcurnia. Sólo que a ella jamás le importó. No había mucho en lo que distaba, siempre había sido así. Respetaba a sus padres, cumplía a la perfección cada orden que le impartían y siempre estuvo al servicio del rey. Pero no había nada que ella no hiciera, ya que tenía el don particular de la brujería. Era un secreto que su abuela escondía: El gen de la hechicería corría por sus venas y había sido dotada de grandes habilidades que con el pasar de los tiempos fue perfeccionando.

A los catorce años, como toda una dama, fue enviada a la corte de la Reina para ser presentada como posible candidata a los lores. Dos años, dos largos y memorables años antes de conocer al supuesto hombre que sería el amor de su vida. Una bonita unión, se pensaba en ese entonces. Era un hombre rico, gallardo, con una increíble belleza que hacía que las demás damas suspirarán al verlo pasar y ella no se quedaba atrás.

La boda se celebró un veintitrés de Abril en la ciudad central de Escocia, Edimburgo. Todos celebraban la unión de uno de los grandes barones franceses y una joven británica. ¿Qué más podía pedir una chica a la edad de dieciséis? Se casaría, tendría un hogar, riquezas y un marido hermoso. Lo demás, no importaba. Y aquel conformismo fue lo que provocó el caos. Al principio, luego de haberse casado y trasladado a su residencia en Francia, todo iba de maravilla. Su esposo era agradable, su familia de la misma forma. Todo era un paraíso. Fueron los mejores cinco primeros años de su matrimonio y se sentía afortunada por ello.

Sin embargo, tres años después de su matrimonio, su esposo descubrió que era una bruja. Amelia no podía permitir que él la delatara puesto que sería condenada a la hoguera y ella deseaba muchas cosas más en la vida que morir. Así que no titubeó e hizo un hechizo que acabó con la vida de su marido, dejándola viuda y con las arcas llenas de dinero y joyas preciosas. Conforme a su voluntad, se prometió así misma que jamás se volvería a casar y a pesar de que comenzó a visitar a sus padres en Escocia nuevamente, se erradicó por completo en Francia.

DATOS EXTRA

• Es una experta en la pintura. Ha pintado varios cuadros y los ha regalado al Museo de Louvre.
• También es una mujer versada en las artes como la música y la literatura. Muchas personas alaban la melodiosa voz que posee y la gran inteligencia que muestra a diferencia de otras mujeres.
• No gusta de los animales, ya que es alérgica al pelo de estos.

gracias a αgusτınα• de sourcecode