I have not one name but thousands. But you may call me...

DATOS BÁSICOS

DESCRIPCIÓN FÍSICA

Spoiler:

Bernardine sin lugar a dudas no es alguien que pase desapercibida, incluso al vestir con prendas que no permiten que su atractiva figura resalte; tiene una presencia fuerte, llamativa que es más que suficiente para capturar las miradas de otras personas que se encuentran frente a ella. Así como en su personalidad, en su apariencia también puede verse la mezcla de la delicadeza femenina con un fuerte y decidido caracter; la sensualidad tiende a acompañarla cuando se trata de situaciones más íntimas. Con dos hermosos ojos cual zafiros y una cabellera dorada que alcanza la altura de sus hombros, aunque al ser ondulada en realidad llega un poco más abajo que ahí; dos labios carnosos y ligeramente rozados componen su sonrisa y dejan ver por debajo las dos hileras de perlados dientes. Mentón afilado que acompaña sus delicados rasgos y le da una apariencia aún más fina a su rostro. No le gusta el maquillaje, deja que sus rasgos resalten tal y como son.

Poseedora de una figura delgada y bien formada gracias a sus largas caminatas; es de complexión más bien frágil, no tiene una gran fuerza física y su cuerpo puede no resultar el más atrayente ante ojos ajenos ni el más envidiable entre las mujeres. Está bien formada pero no tiene proporciones exuberantes sino más bien medianas. Su tez es clara y suave al tacto; ni cicatrices ni lunares destacables.

Su vestimenta tiende a demostrar su posición entre la clase media-alta; le gusta el buen vestir aunque no posee el dinero suficiente como para darse el lujo de tener un guardarropas lleno de vestidos y otras prendas o accesorios suntuosos. Tiene mayores prioridades. De hecho en su ropero se encuentra una gama de vestimentas muy variante, yendo desde la simpleza de la clase baja hasta lo ostentoso y exuberante de la clase alta.

DESCRIPCIÓN PSICOLÓGICA

En la actualidad se le puede ver como una mujer de porte delicado y femenino; a pesar de su posición social tiene la capacidad de desenvolverse perfectamente en cualquier ambiente y ante cualquier persona. Capaz de adoptar la formalidad y distinción adecuadas para tratar con la nobleza o de moverse entre lo más bajo, la escoria de la sociedad. Se puede ver en su manera de hablar y en sus ademanes un comportamiento exquisito, apuntando preferentemente hacia la alta sociedad y, ante ojos ajenos, incluso a raíces nobles cuando en su sangre no se haya ni una sola pizca de dicha procedencia. Ambiciosa y egoísta, siempre en la búsqueda de un beneficio aún mayor; sabe hacer uso de sus encantos femeninos y acompañarlos adecuadamente de la hechicería para escalar posiciones. Fue así como salió de la pobreza y consiguió colocarse poco a poco entre la sociedad acomodada pero su sed no ha sido apaciguada y no descansará hasta tener toda Francia en su puño o, al menos, hasta tener aquello que más desea. Si tan sólo tuviera más claros sus intereses y metas, no necesitaría buscar tan alto la respuesta. Si hay algo que aprendió, aunque de mala manera, es a ser discreta con sus demostraciones de poder; es cuidadosa en lo que se refiere al uso de habilidades y si bien prefiere no depender de ellas no escatima en su uso cuando se trata de cumplir algún interés o conseguir un beneficio.

Durante su infancia no tuvo la posibilidad de aprender tantas cosas como le habría gustado; de la misma mano que le enseñó sobre hechicería fue educada para comportarse en sociedad. Aprendió a leer hasta ya entrada la pubertad y desde ese momento se ha visto realmente encantada por la literatura pero especialmente por el lenguaje mismo. Autodidacta, estudió por su cuenta el español, idioma que ahora puede hablar con soltura aunque ocasionales dificultades, también tiene cierto interés en el inglés y en los últimos dos años ha puesto sus manos a la obra en este aspecto; ahora con una mejor posición económica y social se las apaña para conseguir la ayuda de conocedores de la lengua.

Bastante orgullosa aunque no deja que se le suba a la cabeza; algo que no puede evitar es que el gusanito de la venganza invada sus pensamientos cada que alguien consigue entrar en su lista de “rivales”. Gracias a la hechicería, y por si le surgen las ganas de saciar sus ocasionales arranques de sadismo, aquel que la agreda en un mal día debería tener cuidado pues si la rubia no lo considera “necesario” podría enfrentarse a algún desafortunado accidente. Tiene un humor ácido y sarcástico, eso solo consigue que las pequeñas desgracias puedan llegar a parecerle graciosas. Y la motiva a provocar unas cuantas más. No es ni buena ni piadosa, ya ha demostrado en el pasado que puede llegar a ser bastante cruel con aquel que la incite a serlo y una vez que se decida por eliminar a alguien no habrá nada que la detenga aunque muchas veces con eliminarlo no se refiere exactamente a darle fin a su vida, solo volver esta en un infierno. Le tiene un gran rencor a la sociedad, alimentado por muchas historias de su pasado; su familia fue castigada cruelmente por estar relacionados a la hechicería. Ese rencor es una llama pasiva por ahora aunque amenaza con convertirse en un incendio llegado el momento; reprime este sentimiento ya que es consciente de que no lograría nada más que su muerte, ella sola no es capaz de vengarse de todos aquellos que le hicieron daño y su vida es mucho más valiosa que la de unos cuantos. Pero granito de arena por granito de arena, eventualmente conseguirá realizar un golpe de importancia.

Considera la vida como lo más valioso que puede existir pero no se priva del derecho de arrebatarla a quien pueda perjudicar su avance hacia una meta. Es esta misma percepción sobre la vida lo que la lleva a una búsqueda constante del placer, siendo que una vez que su vida se apague no habrá nada más. No cree estar asustada de la muerte pero tampoco está segura de estar preparada para afrontarla. Esto se debe a que aparte de buscar el placer de la carne no ha sido capaz de encontrar algo más, su objetivo en la vida. Un motivo. Cree que cada ser vivo tiene un destino más significativo que cumplir antes de morir y le asusta la idea de perecer antes de llegar al final de este enigmático camino. Aunque es algo que jamás dirá a alguien más, por más confianza que le pueda tener, vive en la búsqueda de este supuesto destino.

Su seriedad puede distinguirla en muchas ocasiones pero no opaca el lado carismático de su personalidad. Es alegre aunque no lo demuestre en exceso, sus expresiones son sutiles pero tienden a ser suficientes para darse cuenta del estado de ánimo en que se encuentra. Especialmente cuando se trata de algún individuo cercano a ella su actitud se vuelve mucho más relajada y convive con honestidad, no solo por cumplir con un papel delante de los demás. Es bastante amistosa con este reducido grupo de personas y llega incluso a ser cariñosa. Se sincera en muchos aspectos aunque no comparte gran parte de sus secretos. A pesar de su posición como mujer no es del tipo que se queda con la boca cerrada y se muerde la lengua; durante su matrimonio esto la metió en muchos problemas y finalmente la condujo a asesinar al hombre que intentó volverse en su dueño.

El sexo es algo común para ella, forma parte de su vida; sin embargo es una práctica que realiza sigilosamente evitando atraer más miradas de las necesarias. Si bien no le molesta involucrarse con hombres, solo cuando se trata de mujeres llega a sentirse realmente interesada y atraída por otra persona. Especialmente si se habla de amor. Se siente atraída preferentemente por mujeres de menor edad, sin prestar atención a la diferencia exacta. Sus amantes han llegado a ser tanto un par de meses menores como algunas con las que compartía una diferencia de casi diez años, englobando en su mayoría a mujeres entre los 14 y los 17 años pero sin despreciar a aquellas de su edad o un par de años mayores.

No es del tipo que se involucra seriamente con alguien, es algo que en lo personal prefiere evitar. Ha llegado a encariñarse fuertemente con sus amantes recurrentes motivo por el cual llega un punto en que deja de buscarles. Odia la sensación de sentirse dependiente de alguien pues eso la alejaría de su propio objetivo. Además de este miedo a perder su camino, los recuerdos amargos de su matrimonio le hacen sentir recelosa de formar una relación seria nuevamente –además que estos tienen mucho que ver en su poco interés por un compañero varón- y a estos se suma la opinión de la homosexualidad dentro de la sociedad. Si bien a ella es algo que no le interesa, tampoco está dispuesta a dejar que alguien dañe todo por lo que se ha esforzado en los últimos años. Podría intentar algo nuevo si le dieran las pautas para hacerlo pero en definitiva le costaría mucho si es ella quien debe dar el primer paso. Necesita que le den el empujón necesario para que se arriesgue a ello.

Si bien es diestra en la hechicería, no siempre fue así ni tiene la misma habilidad para todas las áreas que esta engloba. En años pasados se inició en la nigromancia aunque buscó más de lo que debería haber buscado, intentó avanzar demasiado rápido y esto tuvo graves consecuencias. La principal es un miedo instintivo por parte de la francesa hacia toda manifestación de este tipo de magia y ante la posibilidad de utilizarla. No se atreve a utilizar ni el más pequeño hechizo relacionado a esta. En segundo lugar se encuentra uno de los porqués le asusta tanto la nigromancia. Gracias a lo ocurrido en el pasado, cuando se encuentra cerca de “la muerte” puede escuchar las voces de espíritus errantes y almas en pena que le hablan, que le suplican. Algunos buscando ayuda, otros venganza. Esto ocurre siempre que se encuentra en sitios tales como cementerios, o donde algún violento asesinato o alguna masacre hayan tenido lugar; sin embargo también pasa con algunos seres en específico, vampiros y fantasmas, debido a la conexión que estos mismos tienen con el otro lado. Mientras más cerca se encuentre de la fuente tiene un efecto aún más fuerte y al mismo tiempo más evidente hacia otras personas, siendo que esto consigue inquietarla mucho. Este “defecto” funciona en comunión con su habilidad para percibir el aura de otros seres, ayudándole a guiarse mas no hace que sea cien por ciento precisa.

Y es en los vampiros donde nace el mayor de sus temores. Y al mismo tiempo un placer que le resulta inquietante, mismo del cual no se ha encontrado capaz de huir. La mordida, el beso de los condenados le resulta increíblemente placentero. Adictivo. Estando frente a uno de los hijos de Caín ella podría ser capaz de renunciar a todo con el fin de experimentar su mordida, aún teniendo en cuenta las correspondientes consecuencias y repercusiones que esto puede tener. Aunque sabe defenderse está consciente de que un vampiro, por joven que sea, supera sus capacidades. Le asusta la idea de morir en manos de uno de ellos y es el temor a la muerte lo único que le impide entregarse por completo a los deseos de estos; el problema es que en algún momento podría no conseguir escapar de sus garras.

HISTORIA

Bernardine originalmente tuvo una familia que le quería, desafortunadamente fue abandonada en un orfanato cuando tenía apenas un año y dos meses de edad. Solo así podría tener una posibilidad, solo así podría escapar de la cacería. El secreto de su familia fue delatado y todos los que pertenecían a ella fueron cazados; uno por uno cayeron, incluyendo sus padres. Para su corta edad aquella familia quedaría en el olvido con los años, remplazada por una infancia en aquel orfanato en el que no podría decir le encantó vivir. Fue una etapa bastante complicada en muchos sentidos aunque conserva, aunque un tanto difuminados, los recuerdos de una pequeña que siempre estuvo a su lado. Tres años menor, era realmente indefensa cuando llegó y es por eso que Bernardine siempre cuidaba de ella. Pero la francesa fue adoptada a los 8 años y su pequeña princesa se quedó atrás.

Aquella anciana le presentó un mundo completamente diferente al que ella conocía, un mundo nuevo y maravilloso. Proveniente de Italia, Rosangela educó a la pequeña Bernardine las cosas más importantes que debía saber una mujer para desenvolverse en sociedad pero al mismo tiempo la instruyó en su arte, una que también corría por la sangre de la rubia. La ancestral hechicera tomó a la niña como alumna al poder identificar su esencia como parte de aquel linaje prácticamente erradicado. Era ella la única que quedaba y, como pago por un favor que previamente había hecho aquella familia, se hizo cargo de su enseñanza.

La niña sin embargo fue creciendo con el tiempo, no solo su cuerpo cambió sino que sus ambiciones crecieron bastante y sus deseos de descubrir más del mundo. Además de la enseñanza que recibía por parte de su “madre” buscó un aprendizaje propio. Ayudada de la anciana y luego de insistir bastante, le enseñó a leer a los 14 años y a partir de ese momento no la pudo despegar de los libros. Pero su economía no era buena, no tenía los recursos para comprar libros así que en lugar de eso se encerraba durante su tiempo libre en la biblioteca. Seria ahí donde una nueva lengua llegaría a ella y a los 16 años su estudio del español se alternaría con la hechicería. Al mismo tiempo que entraba a una nueva área de la lingüística, entraba a una nueva área de la hechicería. La nigromancia.

Su deseo de poder la traería a la ruina luego de que se metiera con cosas con las que no debía involucrarse, luego de sobre exigirle a su poder y ser prácticamente controlada por un espíritu maligno que trajo a este mundo. Fue liberada de su dominio por la anciana pero al volver al más allá, dicho espíritu dejó la puerta entreabierta y ahora Bernardine tiene cierto vínculo entre ese lado y el mundo real. La muerte le habla cuando se encuentra cerca de ella.

Luego de la experiencia no volvió a acercarse ni a las áreas más básicas de la nigromancia y en su lugar optó por un nuevo camino en la magia negra. Aprendió y perfeccionó en poco tiempo la habilidad de dominar la mente de los mortales; aumentó su poder con la práctica en distintos individuos hasta conseguir un nivel bastante digno. Pero a los 20 años entró a su vida un hombre que descubrió en ella un amor genuino, intenso y apasionado. Socialmente estaba mejor acomodado que la joven bruja, aunque no fuera un noble ni algún personaje que poseyera una gran fortuna. Cuando se decidió a contraer matrimonio, la anciana que hasta ese momento le había cuidado siguió su camino y dejó que ella se hiciera cargo de su vida. De su nueva familia. En ese momento la hechicería acabó para ella, dejándole espacio para atender sus nuevas preocupaciones.

Para la sorpresa de la rubia, las cosas no fueron como ella había pensado y si bien durante el primer año todo era como el paraíso las flores poco a poco empezaron a marchitarse y las verdades afloraron. Incapaz de darle un hijo a su esposo este comenzó a desesperarse y pronto lo que era el mal humor de un hombre al que ella ni siquiera amaba se convirtió en abusos verbales. Un pequeño brinco fue lo que necesitaron las palabras para convertirse en golpes, en violaciones. Por un momento fue superada por aquel hombre, dominada por el miedo y sin el valor de defenderse. Hasta que la paciencia se le terminó y volvió a exteriorizar a la bruja que había dejado dormida, remplazada por una mujer que solo buscaba mantener la pacífica vida que siempre había deseado, aún si era al lado de un hombre al que detestaba. Antes de darse cuenta Bernardine, ya le había dado muerte al hombre que yacía en el suelo.

Liberada del yugo de su carcelero, volvió a saborear la libertad para nunca volver a someterse. En ese momento renació su ambición; no era un hombre lo que deseaba, tampoco la vida modesta de una ama de casa. Pero tenía las características y habilidades para atraer la riqueza de otros hombres, jóvenes o mayores pero de bolsillos llenos o capaces de cumplir con alguno de sus intereses; humanos que cayeran fácilmente por su encanto como en su momento había caído su difunto marido. Al mismo tiempo, también comenzó a buscar mujeres que pudieran mantener caliente su cama; esta práctica sin embargo se mantuvo oculta a las miradas ajenas ya que al descubrir una relación similar con otra mujer significaría la pérdida de lo que luchaba por construir. Había pasado toda su vida aprendiendo hechicería y no dejaría que aquellos años fueran en vano.

DATOS EXTRA

Gustos
-Leer.
-Las distintas lenguas. Habla francés, español y está aprendiendo inglés.
-El piano. Lleva un par de meses tomando lecciones en casa.
-La pintura a pesar de su poco talento.
-La noche le fascina aún con los peligros que esta esconde.
-El bosque.
-Caminar.
-El vino.
-El opio –ocasionalmente-.
-Las mujeres jóvenes y aquellas con carácter fuerte.

Disgustos
-El mar, lagos, lagunas, ríos y otras posibles acumulaciones de agua.
-Bastante quisquillosa con la suciedad.
-Los vampiros. El que le obsesionen no significa que le agraden.
-La sangre.
-Que intenten manipular sus acciones.
-Que la hagan menos por ser mujer.
-Perder el control de alguna situación importante.

Datos curiosos
-Nació el 5 de junio.
-Es zurda.
-Tiene un ligero grado de miopía.
-Es estéril. Esto es un punto demasiado importante ya que no solo desmoronó el matrimonio que contrajo en el pasado sino que además significa que con ella su línea de sangre se extinguirá. Ella no lo sabe, en realidad aún intenta conseguir aquel hijo que continúe con su linaje.
-Tiene la manía de acomodarse el cabello o frotar sus nudillos cuando se siente nerviosa por algo.
-Podría decirse que tiene un gato ya que este la visita ocasionalmente y ella tiende a alimentarlo si tiene la oportunidad.
-Actualmente tiene contratada a una sirvienta menor de 20 años. Además de las tareas del hogar, la joven se encarga de satisfacer los ocasionales caprichos y deseos sexuales de la bruja, siendo manipulada por el poder de esta.

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