Entre copas siempre

por **Esther de Le Santo** Miér Jun 05, 2013 11:57 pm

Entre copas. Siempre sucedió entre copas. Los encuentros con Kaine y quien se convertiría en el padre de la única hija que tuviese. Incluso entre la bebida es que había ocurrido todo eso. Pero no había que confundir las cosas. A esther le había gustado Kaine desde la primera vez que le vio. Incluso si el joven tenía aquellas facciones más bien andróginas.

Todo sucedió entre gritos, peleas sin sentido y muchas, muchas copas. Tal vez eso era lo que tenían en común. Pero tuvo que agradecerlo cuando la pequeña Ezra nación. Ambos adoraban a la niña. Quien cuando nció, no traía consigo aquella naturaleza que ambos habían adquirido.

Como fuese. Años más tarde. Esther perdería todo... pero no sufriría por ello. Pues todos morían y ni siquiera sería capaz de saber de la muerte de su hija. Una noche en el que la luna llena estuviese en lo alto, ese día ella sería herida y lejos, en el lugar en el que la había dejado, la muchacha también perecería.

EEse era el destino que le aguardaba. Pero en esos años, mucho antes de que sucediera. Justo antes de la desaparición de quien se había convertido en su esposo, sin importar lo dudosos de las acciones de ambos. Incluso cuando se fue, ella veía ese anillo en su dedo y pensaba que se pertenecían. Claro que se enfadaba a veces, y Ezra era tan parecida a él que a veces le soltaba loq ue quería decirle a quien debiese haber estado con ella. Para su suerte la niña se daba cuenta y no necesito dar muchas explicaciones. Pero era distraída y algo torpe a veces, a pesar de ser hija de una cazarecompensas como ella. Por eso la cuidaba como a nada y tal vez la tenía un tanto sobre protegida. Pero ella era lo que la hacía feliz y por quien tomaría muchas de sus decisiones. Bien dicen que cuando te vuelves padres, tus acciones tendrán que ver con ello.

Enter copas había empezado y tiempo después entre copas se reencontrarían...