AÑO 1842
Nos encontramos en París, Francia, exactamente en la pomposa época victoriana. Las mujeres pasean por las calles luciendo grandes y elaborados peinados, mientras abanican sus rostros y modelan elegantes vestidos que hacen énfasis los importantes rangos sociales que ostentan; los hombres enfundados en trajes las escoltan, los sombreros de copa les ciñen la cabeza.
Todo parece transcurrir de manera normal a los ojos de los humanos; la sociedad está claramente dividida en clases sociales: la alta, la media y la baja. Los prejuicios existen; la época es conservadora a más no poder; las personas con riqueza dominan el país. Pero nadie imagina los seres que se esconden entre las sombras: vampiros, licántropos, cambiaformas, brujos, gitanos. Todos son cazados por la Inquisición liderada por el Papa. Algunos aún creen que sólo son rumores y fantasías; otros, que han tenido la mala fortuna de encontrarse cara a cara con uno de estos seres, han vivido para contar su terrorífica historia y están convencidos de su existencia, del peligro que representa convivir con ellos, rondando por ahí, camuflando su naturaleza, haciéndose pasar por simples mortales, atacando cuando menos uno lo espera.
Espacios libres: 11/40
Afiliaciones élite: ABIERTAS
Última limpieza: 1/04/24
En Victorian Vampires valoramos la creatividad, es por eso que pedimos respeto por el trabajo ajeno. Todas las imágenes, códigos y textos que pueden apreciarse en el foro han sido exclusivamente editados y creados para utilizarse únicamente en el mismo. Si se llegase a sorprender a una persona, foro, o sitio web, haciendo uso del contenido total o parcial, y sobre todo, sin el permiso de la administración de este foro, nos veremos obligados a reportarlo a las autoridades correspondientes, entre ellas Foro Activo, para que tome cartas en el asunto e impedir el robo de ideas originales, ya que creemos que es una falta de respeto el hacer uso de material ajeno sin haber tenido una previa autorización para ello. Por favor, no plagies, no robes diseños o códigos originales, respeta a los demás.
Así mismo, también exigimos respeto por las creaciones de todos nuestros usuarios, ya sean gráficos, códigos o textos. No robes ideas que les pertenecen a otros, se original. En este foro castigamos el plagio con el baneo definitivo.
Todas las imágenes utilizadas pertenecen a sus respectivos autores y han sido utilizadas y editadas sin fines de lucro. Agradecimientos especiales a: rainris, sambriggs, laesmeralda, viona, evenderthlies, eveferther, sweedies, silent order, lady morgana, iberian Black arts, dezzan, black dante, valentinakallias, admiralj, joelht74, dg2001, saraqrel, gin7ginb, anettfrozen, zemotion, lithiumpicnic, iscarlet, hellwoman, wagner, mjranum-stock, liam-stock, stardust Paramount Pictures, y muy especialmente a Source Code por sus códigos facilitados.
Victorian Vampires by Nigel Quartermane is licensed under a
Creative Commons Reconocimiento-NoComercial-SinObraDerivada 3.0 Unported License.
Creado a partir de la obra en https://victorianvampires.foroes.org
Últimos temas
Escapando de la monotonía [Danna Dianceht]
2 participantes
Página 1 de 1.
Escapando de la monotonía [Danna Dianceht]
En realidad Darek ya no necesitaba escapar de su hogar ni esconderse de su padre que había fallecido no hace mucho.
Pero seguía sintiendo ese impulso de abandonar su hogar y adentrarse en nuevos lugares. Era un joven curioso, necesitaba salir al aire libre y divertirse. No era una persona que podía quedarse dentro de su hogar todo el tiempo. Eso le hacía sentirse encerrado y como encarcelado en una prisión.
Pronto sus pasos elegantes pero algo rápidos le llevaron hasta el mercado ambulante, abarrotado de gente.
Personas que hacían sus vidas vendiendo objetos o mercancías mientras otras se dedicaban a pasear para comprar o simplemente mirar como lo hacía en esos momentos Darek.
Alguna que otra vez, alguien se chocaba contra él pero no le daba importancia. Sus ojos recorrían el lugar con curiosidad como si nunca en la vida hubiese visto un lugar así.
Estar entre la gente, sentirse como uno más le hacía feliz.
Ese día no vestía de forma elegante, sino que llevaba una sencilla camisa blanca desprovista de corbata, cuyo cuello le llegaba casi hasta las mejillas. No vestía con chaqueta dado que le hacía sentir incómodo como si aquella vestimenta le impidiera moverse libremente, pero a parte porque también ese día hacía calor y no parecía otoño en realidad. Llevaba unos pantalones negros ceñidos pero no llevaba sombrero de copa como se solía hacer en esa época. Sus cabellos rebeldes y oscuros ondeaban libremente con el viento y sus ojos azulados en esos momentos parecían fríos como el hielo.
Frenó en seco cuando su mirada descubrió algo muy interesante. Un puesto que vendía carne. Y para él la carne era como su mayor debilidad. Su estómago rugió y se le hizo la boca agua. Pero se aguantó porque llamaría demasiado la atención si comenzaba a comprar demasiada carne. Él no quería parecer noble, simplemente quería ser de la clase media.
Por ello aguantó sus ganas y siguió caminando, aún a pesar de que sus ojos seguían fijos en ese puesto. El olor a carne cruda le llamaba, pues su fino olfato de lobo funcionaba de maravilla.
De pronto chocó contra alguien, obviamente por su culpa y por no haber estado atento, sino mirando ese puesto todo el tiempo.
Al chocar casi cae al suelo y trató de mantener el equilibrio. Por fin su mirada se apartó del puesto y lo clavó en la persona que había chocado contra él.
—Disculpe mis modales. —Su voz sonaba casi aterciopelada pero algo frío y distante. Aún no se había fijado bien en quien tenía delante.
Pero seguía sintiendo ese impulso de abandonar su hogar y adentrarse en nuevos lugares. Era un joven curioso, necesitaba salir al aire libre y divertirse. No era una persona que podía quedarse dentro de su hogar todo el tiempo. Eso le hacía sentirse encerrado y como encarcelado en una prisión.
Pronto sus pasos elegantes pero algo rápidos le llevaron hasta el mercado ambulante, abarrotado de gente.
Personas que hacían sus vidas vendiendo objetos o mercancías mientras otras se dedicaban a pasear para comprar o simplemente mirar como lo hacía en esos momentos Darek.
Alguna que otra vez, alguien se chocaba contra él pero no le daba importancia. Sus ojos recorrían el lugar con curiosidad como si nunca en la vida hubiese visto un lugar así.
Estar entre la gente, sentirse como uno más le hacía feliz.
Ese día no vestía de forma elegante, sino que llevaba una sencilla camisa blanca desprovista de corbata, cuyo cuello le llegaba casi hasta las mejillas. No vestía con chaqueta dado que le hacía sentir incómodo como si aquella vestimenta le impidiera moverse libremente, pero a parte porque también ese día hacía calor y no parecía otoño en realidad. Llevaba unos pantalones negros ceñidos pero no llevaba sombrero de copa como se solía hacer en esa época. Sus cabellos rebeldes y oscuros ondeaban libremente con el viento y sus ojos azulados en esos momentos parecían fríos como el hielo.
Frenó en seco cuando su mirada descubrió algo muy interesante. Un puesto que vendía carne. Y para él la carne era como su mayor debilidad. Su estómago rugió y se le hizo la boca agua. Pero se aguantó porque llamaría demasiado la atención si comenzaba a comprar demasiada carne. Él no quería parecer noble, simplemente quería ser de la clase media.
Por ello aguantó sus ganas y siguió caminando, aún a pesar de que sus ojos seguían fijos en ese puesto. El olor a carne cruda le llamaba, pues su fino olfato de lobo funcionaba de maravilla.
De pronto chocó contra alguien, obviamente por su culpa y por no haber estado atento, sino mirando ese puesto todo el tiempo.
Al chocar casi cae al suelo y trató de mantener el equilibrio. Por fin su mirada se apartó del puesto y lo clavó en la persona que había chocado contra él.
—Disculpe mis modales. —Su voz sonaba casi aterciopelada pero algo frío y distante. Aún no se había fijado bien en quien tenía delante.
Darek Sharkün- Licántropo Clase Alta
- Mensajes : 27
Fecha de inscripción : 18/06/2013
DATOS DEL PERSONAJE
Poderes/Habilidades:
Datos de interés:
Re: Escapando de la monotonía [Danna Dianceht]
Danna, tras el generoso almuerzo, que en el hostal donde se hospedaba temporalmente, le sirvieron – unos deliciosos cruasanes, acompañado por el más exquisito y fino café francés, con una cucharada de dulce de leche, que tanto le gustaba- salió a dar una vuelta por los alrededores. París era su ciudad predilecta, sus gentes, el ambiente y hasta sus aromas, eran para ella de incalculable valor sentimental, ya que de pequeña era esta misma ciudad, la que tanto visitaban y adoraban. Muchas veces paseando se acordaba de ellos, todavía, aun habiendo pasado 31 años desde ese fatídico día, en que su padre mató a su madre, en plena transformación, y seguidamente ella misma mató a su padre, tras transformarla en lo que ahora era, por venganza de la muerte de su madre. Suspiró tristemente al aire, habían recuerdos, sucesos que eran mejor dejar atrás, mas cuando su alma de niña, se vio tan afectada por el final trágico de su familia.
Se encaminó despreocupada, por la avenida principal, en la que a su alrededor todo se movía, rebosante de vida. Distraída como se encontraba, tuvo suerte de en el último momento evitar el choque contra una bella pareja que en arrumacos, paseaban por la calle, disfrutando del buen día y del calor del sol, que a esas horas, quemaba la tierra bajo sus pies. Disculpándose en una leve sonrisa, prosiguió su camino. A cada paso, la suave brisa otoñal, jugaba con su cabello, a su espalda, como con el claro vestido color crema, el que largo, le llegaba hasta los pies. En esta ocasión era un sencillo pero bonito vestido, el que había escogido para pasear. No quería ser reconocida como la Duquesa, si no integrarse como una más, pudiendo así, disfrutar de las conversaciones de la plebe del pueblo, quien al contrario que la realeza, mayormente hablaban de situaciones cuotidianas y sin falsedades, ni doble intenciones, ni intereses de por en medio. Con ellos no hacía falta pensar en el doble sentido, o analizar bien en lo que uno quería decir y lo que no.
Al rato, sus pasos la llevaron hacia una calle, donde la aglomeración, estaba al orden del día. Sonrío, al ver el motivo; Había llegado al mercado. En una sonrisa, se adentró en el mercado, deleitándose en los diferentes aromas del mercado, los que su desarrollado olfato diferenciaba muy fácilmente. La parada de las verduras, las de la fruta, el pescado recién cogido…y finalmente, el olor de carne, invadió sus sentidos. En una mueca asqueada, se paró en medio de la calle, controlando sus impulsos de comer carne, ya que no acostumbraba a comer carne- quizás fuera por eso, por lo que en noches de luna llena, su bestia cazara cualquier animal que se encontrara en el bosque-. Queriendo huir de allí rápidamente, antes de ceder a la bestia y comprar carne, al girar, se topó contra un fuerte pecho de un hombre, el que por el golpe, se quedó un instante cogiendo aire, confundida, hasta que finalmente levantó la mirada al joven caballero, que frio y distante, se dirigió hacia ella.
No ocurre nada, Messier…me distraje y chocamos- le sonrío esperando atraer su atención, su dulce voz reverbero entre los dos- estoy segura que no somos el único caso, esta mañana… ¿No ha visto como se encuentra el mercado? No cabe ni un alfiler mas entre nosotros- se quedó quieta, arreglándose con una mano, el vestido, quedando de nuevo presentable ante el joven caballero, mirándole con una amable sonrisa en su rostro.
Se encaminó despreocupada, por la avenida principal, en la que a su alrededor todo se movía, rebosante de vida. Distraída como se encontraba, tuvo suerte de en el último momento evitar el choque contra una bella pareja que en arrumacos, paseaban por la calle, disfrutando del buen día y del calor del sol, que a esas horas, quemaba la tierra bajo sus pies. Disculpándose en una leve sonrisa, prosiguió su camino. A cada paso, la suave brisa otoñal, jugaba con su cabello, a su espalda, como con el claro vestido color crema, el que largo, le llegaba hasta los pies. En esta ocasión era un sencillo pero bonito vestido, el que había escogido para pasear. No quería ser reconocida como la Duquesa, si no integrarse como una más, pudiendo así, disfrutar de las conversaciones de la plebe del pueblo, quien al contrario que la realeza, mayormente hablaban de situaciones cuotidianas y sin falsedades, ni doble intenciones, ni intereses de por en medio. Con ellos no hacía falta pensar en el doble sentido, o analizar bien en lo que uno quería decir y lo que no.
Al rato, sus pasos la llevaron hacia una calle, donde la aglomeración, estaba al orden del día. Sonrío, al ver el motivo; Había llegado al mercado. En una sonrisa, se adentró en el mercado, deleitándose en los diferentes aromas del mercado, los que su desarrollado olfato diferenciaba muy fácilmente. La parada de las verduras, las de la fruta, el pescado recién cogido…y finalmente, el olor de carne, invadió sus sentidos. En una mueca asqueada, se paró en medio de la calle, controlando sus impulsos de comer carne, ya que no acostumbraba a comer carne- quizás fuera por eso, por lo que en noches de luna llena, su bestia cazara cualquier animal que se encontrara en el bosque-. Queriendo huir de allí rápidamente, antes de ceder a la bestia y comprar carne, al girar, se topó contra un fuerte pecho de un hombre, el que por el golpe, se quedó un instante cogiendo aire, confundida, hasta que finalmente levantó la mirada al joven caballero, que frio y distante, se dirigió hacia ella.
No ocurre nada, Messier…me distraje y chocamos- le sonrío esperando atraer su atención, su dulce voz reverbero entre los dos- estoy segura que no somos el único caso, esta mañana… ¿No ha visto como se encuentra el mercado? No cabe ni un alfiler mas entre nosotros- se quedó quieta, arreglándose con una mano, el vestido, quedando de nuevo presentable ante el joven caballero, mirándole con una amable sonrisa en su rostro.
Danna Dianceht- Licántropo/Realeza
- Mensajes : 592
Fecha de inscripción : 27/05/2013
Edad : 32
Re: Escapando de la monotonía [Danna Dianceht]
Iba a marcharse tras aquella corta y algo fría disculpa, pero cambió de opinión cuando sus ojos azulados se clavaron en la figura de aquella joven. Era muy atractiva y poseía una belleza distinta a la que había visto con anterioridad en otras mujeres. Parecía brillar con intensidad como si de una estrella se tratara y aquellos ojos verdosos le llamaron mucho la atención. Mostraban viveza y tal vez algo de melancolía.
Pero aparte de su belleza, también le llegó un olor bastante familiar. ¿Era acaso una licántropa como él? No estaba del todo seguro pero eso le producía cierta alegría. Por eso no se podía marchar, debía de saber más sobre aquella dama.
Darek asintió con la cabeza de forma muy suave cuando ella mencionó como se encontraba el mercado, dándole así la razón.
Después observó como la dama se arreglaba el vestido y Darek se llevó una mano a la barbilla, rascándosela de forma pensativa.
—Siento ser tan atrevido, pero, ¿amáis a la luna? —Esto último lo preguntó en susurros como si quisiera que nadie los oyera hablar sobre ese tema. Era una extraña pregunta, pero tal vez si ella fuera licántropa sabría responderla. No iba obviamente a preguntarle de forma directa si era medio-lobo, pues tal vez se podía tratar de una trampa. Podía ser algún tipo de cazador camuflado tras la piel de una hermosa dama, quien habría cazado hace poco a un lobo y por ello desprendía ese olor.
Cierto, Darek solía desconfiar de la gente. Estaba en su naturaleza pues años atrás había aprendido lo peligroso que era el mundo exterior cuando se era un licántropo.
Esperó la respuesta, estando un poco en alerta por si la joven negaba con la cabeza.
En ningún momento, Darek desvió su mirada de ella, sintiendo curiosidad y al mismo tiempo tratando de vigilar sus movimientos por si hacía algo raro.
Pero aparte de su belleza, también le llegó un olor bastante familiar. ¿Era acaso una licántropa como él? No estaba del todo seguro pero eso le producía cierta alegría. Por eso no se podía marchar, debía de saber más sobre aquella dama.
Darek asintió con la cabeza de forma muy suave cuando ella mencionó como se encontraba el mercado, dándole así la razón.
Después observó como la dama se arreglaba el vestido y Darek se llevó una mano a la barbilla, rascándosela de forma pensativa.
—Siento ser tan atrevido, pero, ¿amáis a la luna? —Esto último lo preguntó en susurros como si quisiera que nadie los oyera hablar sobre ese tema. Era una extraña pregunta, pero tal vez si ella fuera licántropa sabría responderla. No iba obviamente a preguntarle de forma directa si era medio-lobo, pues tal vez se podía tratar de una trampa. Podía ser algún tipo de cazador camuflado tras la piel de una hermosa dama, quien habría cazado hace poco a un lobo y por ello desprendía ese olor.
Cierto, Darek solía desconfiar de la gente. Estaba en su naturaleza pues años atrás había aprendido lo peligroso que era el mundo exterior cuando se era un licántropo.
Esperó la respuesta, estando un poco en alerta por si la joven negaba con la cabeza.
En ningún momento, Darek desvió su mirada de ella, sintiendo curiosidad y al mismo tiempo tratando de vigilar sus movimientos por si hacía algo raro.
Darek Sharkün- Licántropo Clase Alta
- Mensajes : 27
Fecha de inscripción : 18/06/2013
DATOS DEL PERSONAJE
Poderes/Habilidades:
Datos de interés:
Re: Escapando de la monotonía [Danna Dianceht]
Lo último que había esperado oír del apuesto caballero con el que se había topado, casualmente esa mañana, fueron esas palabras, esa curiosa pregunta. Pensativa antes de contestar le observó, aún con sus ojos clavados en su mirada, pudo ver el porte del joven, como bellas facciones varoniles. Disimuladamente olfateo ligeramente el aire. Era cierto que había un olor de licántropo cerca de ella, pero con todos los distintos olores, flores, verduras y carnes de todo tipo, era difícil discriminar de donde provenía tal olor, quien sería como ella…
El joven también parecía pensativo y le observaba como cual lobo vigila los movimientos de un cordero, su próxima cena. Finalmente río ligeramente- En verdad todavía no se si la amo o la odio... supongo que va a noches, y usted Messier? ¿Amaís la luna? – Al final optó por la prudencia, no iba a rebelarse como licántropa de buenas a primeras, sin conocer las intenciones del joven, Bien podría ser un cazador, y que con esa pregunta quisiera descubrirla, no obstante el olor de los cazadores, era diferente y se habría puesto en tensión, una tensión que en ese momento en su cuerpo no recorría.
Le observó con los ojos brillantes, tiene que ser un licántropo, pensó asegurándolo, no obstante no iba a dar juicio alguno por hecho, hasta que el joven se descubriera. Siguió mirándole, había algo en el joven que hacía que no pudiera apartar la mirada. Entre ellos dos, la gente seguía pasando, el mercado enloquecía con tanta demanda, el ruido era tan atroz, y los olores la tenían tan confundida, resistiéndose todo el rato a no hacer caso a su instinto e ir a por la carne, que apenas vieron un carro que se dirigía sin control hacia ellos.
-¡Cuidado!- exclamó Danna, cogiendo al joven del brazo y echándolo a un lado, fuera de la trayectoria de ese carro. - ¡Vigile por donde va!- le gritó molesta al conductor. Suspirando se volvió al joven. Quien aún lo tenía agarrado del brazo – lo siento...- se disculpó liberando su brazo de su agarre.
No a todo el mundo le agradaba tal cercanía con una completa desconocida.
El joven también parecía pensativo y le observaba como cual lobo vigila los movimientos de un cordero, su próxima cena. Finalmente río ligeramente- En verdad todavía no se si la amo o la odio... supongo que va a noches, y usted Messier? ¿Amaís la luna? – Al final optó por la prudencia, no iba a rebelarse como licántropa de buenas a primeras, sin conocer las intenciones del joven, Bien podría ser un cazador, y que con esa pregunta quisiera descubrirla, no obstante el olor de los cazadores, era diferente y se habría puesto en tensión, una tensión que en ese momento en su cuerpo no recorría.
Le observó con los ojos brillantes, tiene que ser un licántropo, pensó asegurándolo, no obstante no iba a dar juicio alguno por hecho, hasta que el joven se descubriera. Siguió mirándole, había algo en el joven que hacía que no pudiera apartar la mirada. Entre ellos dos, la gente seguía pasando, el mercado enloquecía con tanta demanda, el ruido era tan atroz, y los olores la tenían tan confundida, resistiéndose todo el rato a no hacer caso a su instinto e ir a por la carne, que apenas vieron un carro que se dirigía sin control hacia ellos.
-¡Cuidado!- exclamó Danna, cogiendo al joven del brazo y echándolo a un lado, fuera de la trayectoria de ese carro. - ¡Vigile por donde va!- le gritó molesta al conductor. Suspirando se volvió al joven. Quien aún lo tenía agarrado del brazo – lo siento...- se disculpó liberando su brazo de su agarre.
No a todo el mundo le agradaba tal cercanía con una completa desconocida.
Danna Dianceht- Licántropo/Realeza
- Mensajes : 592
Fecha de inscripción : 27/05/2013
Edad : 32
Re: Escapando de la monotonía [Danna Dianceht]
La respuesta que aquella joven le dio fue suficiente para darle a entender que era como él. No necesitaba oír más para saber que ella sentía lo mismo que los de su misma especie.
Al oír aquella formulada pregunta igual que la suya anterior, el joven primero se encogió de hombros y luego respondió con sinceridad.
— Opino igual, pero eso era antes. Con el paso del tiempo he acabado adorándola más que odiándola. —Sí era cierto que a veces el dolor era insoportable y también la confusión cuando uno se despertaba. Pero ese sentimiento de libertad, casi salvaje y animal le hacía sentir más vivo que nunca.
Ambos desconocidos se habían estado mirando fijamente, como si uno tratara de leer la mente al otro y al mismo tiempo el otro trataba de hacer lo mismo. Era una extraña sensación la que estaba teniendo Darek, pero al mismo tiempo parecía algo muy familiar cuando recordaba al conocer a un pequeño grupo de Inglaterra, quienes llegaron a ser casi como su familia.
Los echaba mucho de menos, pero estaba seguro de que en este lugar también encontraría algo parecido.
¿Habría conseguido encontrar por fin a una compañera Lycan? Se preguntó el joven lobuno.
Pero aquellos pensamientos se desvanecieron por completo cuando de pronto oyó el grito de advertencia de aquella joven que acababa de conocer, seguido de un pequeño empujón y el ruido atronador del carro cuando pasó a su lado.
Había sido algo estúpido por parte de Darek el no haber estado atento a ello. Tal vez la belleza y curiosidad que sentía por aquella joven le había distraído por completo. Y al ser tan orgulloso en ese tema, le molestó interiormente sintiendo rabia por haberse despistado.
Pero por suerte la joven le había salvado, tal vez no la vida pero sí una buena herida.
La miró de nuevo fijamente, dibujando una pequeña sonrisa en sus labios cuando ella se disculpó y soltó su brazo.
—No tenéis por qué disculparos, madam. —Susurró suavemente, haciendo que su sonrisa se agrandase aún más cuando ella gritó de esa forma al conductor. Acabó soltando una pequeña carcajada al comprobar ese carácter que poseía la joven y le gustó bastante.
Dejó de reír después de un rato y se fijó en un puesto que vendía frutas. Las brillantes manzanas rojas le llamaron la atención. Eran uno de los frutos más deliciosos que Darek había probado en su vida.
Tomó de la mano rápidamente a la dama, con toda la confianza del mundo y la guió hasta ese puesto. Soltó su mano y señaló las manzanas.
—¿Os apetece una? —Preguntó mientras sacaba una pequeña bolsita con dinero. Le entregó dos monedas de plata al comerciante y tomó dos manzanas. Una de ellas se la metió en la boca y le pegó un buen mordisco. Después miró fijamente a la joven mientras masticaba de forma algo ruidosa. Había comprado otra más por si la dama quería. Pero si en el caso de que no le apetecía, a él no le importaba comerse otra más.
Al oír aquella formulada pregunta igual que la suya anterior, el joven primero se encogió de hombros y luego respondió con sinceridad.
— Opino igual, pero eso era antes. Con el paso del tiempo he acabado adorándola más que odiándola. —Sí era cierto que a veces el dolor era insoportable y también la confusión cuando uno se despertaba. Pero ese sentimiento de libertad, casi salvaje y animal le hacía sentir más vivo que nunca.
Ambos desconocidos se habían estado mirando fijamente, como si uno tratara de leer la mente al otro y al mismo tiempo el otro trataba de hacer lo mismo. Era una extraña sensación la que estaba teniendo Darek, pero al mismo tiempo parecía algo muy familiar cuando recordaba al conocer a un pequeño grupo de Inglaterra, quienes llegaron a ser casi como su familia.
Los echaba mucho de menos, pero estaba seguro de que en este lugar también encontraría algo parecido.
¿Habría conseguido encontrar por fin a una compañera Lycan? Se preguntó el joven lobuno.
Pero aquellos pensamientos se desvanecieron por completo cuando de pronto oyó el grito de advertencia de aquella joven que acababa de conocer, seguido de un pequeño empujón y el ruido atronador del carro cuando pasó a su lado.
Había sido algo estúpido por parte de Darek el no haber estado atento a ello. Tal vez la belleza y curiosidad que sentía por aquella joven le había distraído por completo. Y al ser tan orgulloso en ese tema, le molestó interiormente sintiendo rabia por haberse despistado.
Pero por suerte la joven le había salvado, tal vez no la vida pero sí una buena herida.
La miró de nuevo fijamente, dibujando una pequeña sonrisa en sus labios cuando ella se disculpó y soltó su brazo.
—No tenéis por qué disculparos, madam. —Susurró suavemente, haciendo que su sonrisa se agrandase aún más cuando ella gritó de esa forma al conductor. Acabó soltando una pequeña carcajada al comprobar ese carácter que poseía la joven y le gustó bastante.
Dejó de reír después de un rato y se fijó en un puesto que vendía frutas. Las brillantes manzanas rojas le llamaron la atención. Eran uno de los frutos más deliciosos que Darek había probado en su vida.
Tomó de la mano rápidamente a la dama, con toda la confianza del mundo y la guió hasta ese puesto. Soltó su mano y señaló las manzanas.
—¿Os apetece una? —Preguntó mientras sacaba una pequeña bolsita con dinero. Le entregó dos monedas de plata al comerciante y tomó dos manzanas. Una de ellas se la metió en la boca y le pegó un buen mordisco. Después miró fijamente a la joven mientras masticaba de forma algo ruidosa. Había comprado otra más por si la dama quería. Pero si en el caso de que no le apetecía, a él no le importaba comerse otra más.
Darek Sharkün- Licántropo Clase Alta
- Mensajes : 27
Fecha de inscripción : 18/06/2013
DATOS DEL PERSONAJE
Poderes/Habilidades:
Datos de interés:
Re: Escapando de la monotonía [Danna Dianceht]
La joven se río, junto con el joven caballero, el que más que asombrado, parecía encantado de ese carácter, pese a que los demás viandantes del mercado, la mirasen de reojo, y muchas de las señoritas que en ese momento pasaron, la mirasen de arriba abajo desaprobando tal actitud. Sonrío- supongo que estos gritos, no los hacen las señoritas- susurró suspirando. Como duquesa nunca podía hacerlo... es más, habían tantas cosas que no podía ni llegar a pensar, y menos hacer! Todo en su vida se trataba de formalismos, e intrigas y más formalismos. Tras tantos años, se encontraba hastiada, y estas pequeñas cosas, como gritarle al conductor temerario del carro, le resultaba una actividad excitante.
Quería añadir algo mas, cuando Darek la tomó de la mano, sorprendiéndola, con ese movimiento tan cercano, con total confianza y la llevó hacia un puesto que vendían frutas. Al llegar soltó su mano y señalo unas brillantes manzanas rojas, de aspecto delicioso e exquisito. No le haría ningún mal comer una manzana, a media mañana, por lo que en una sonrisa aceptó en cuando él se la ofreció – Tienen un aspecto delicioso, gracias Darek- la cogió sonriendo, tras ver el hambriento bocado que le había metido a la otra. Miró la manzana y poniéndosela en la boca, le dio un mordisco, ni muy grande ni muy pequeño, sintiendo los ojos ajenos puestos en los de ella.- No me equivoqué, está realmente exquisita- dijo cerrando los ojos, saboreándola, concentrándose en su fresco sabor.
Como más lenta fuera, masticándola, mejor para ella, ya que así, intentaba engañar a su estomago, quien en ese momento, desde que había olido la carne en ese puesto, se moría por probar un poco de carne, lo que tanto se le negaba. Danna, se consideraba vegetariana, y esa situación no cambio al convertirse en lycan, es más, en este caso empeoro, ya que tercamente se opuso con más fuerza. El problema se encontraba que como mas negara carne a su cuerpo, su bestia en las lunas llenas, sería más voraz.
Desviando su atención de sus pensamientos, volviendo de nuevo al joven y a la manzana, sonrío, dándole otro pequeño bocado – Pienso, que seré ahora yo la atrevida, pero ¿de donde es Messier? No tenéis aspecto de ser francés, y tenéis un envidiable ojo para coger las frutas mas deliciosas del mercado - añadió alabando su ojo certero con las manzanas. Ella también tenía buen ojo, pero en su caso, se trataba de que en Escocia, en su hogar, tenía muchos manzaneros y otras variedades de arboles frutales, y también un grande huerto, por lo que desde pequeña, había aprendido a distinguir las piezas más jugosas de las menos. Le miró fijamente a sus ojos, clavando su brillante verde mirada, mientras masticaba educadamente la manzana, esperando su contestación, la que esperaba curiosa.
Danna Dianceht- Licántropo/Realeza
- Mensajes : 592
Fecha de inscripción : 27/05/2013
Edad : 32
Re: Escapando de la monotonía [Danna Dianceht]
Se alegró en parte cuando la joven le acompañó en aquella pequeña comilona. Un aperitivo, se podría decir.
También le gustó que la joven disfrutara de esas delicias al igual que lo hacía él.
Pero tan pronto como cuando terminó de saborear su manzana, aquella dama le formuló una interesante pregunta y el joven volvió a centrar toda su atención en ella.
La mirada de Darek solía ser como en esos momentos penetrante y bastante atrevido. No sentía vergüenza alguna al mirar a las personas de forma directa aún a pesar de que se trataran de desconocidos como en ese caso.
— Cierto es, señorita, no soy de este lugar. —No respondió de forma directa a su pregunta e hizo una larga pausa como si quisiera darle algo de emoción y cierto misterio a su vida. Después esbozó una media sonrisa, un tanto travieso. —Vengo de Inglaterra. Me gustaba mucho mi hogar, pero decidí cambiar un poco mi vida y darle un toque más aventurero. —En parte era cierto. Pero también le traía malos recuerdos y dolorosos su antiguo hogar.
Después de responder, observó detenidamente como la joven masticaba la manzana. Le daba la impresión de que aquella dama era de alta cuna, pues mordía la manzana con cierto refinamiento. No obstante se podía equivocar o si era cierto, aquella dama podría ser como él y prefería ocultarse. No iba a decir en tal caso nada al respecto.
Se echó un poco a un lado, casi de forma elegante para dejar pasar mejor a la gente. Se colocó justo al lado de la joven y volvió a clavar sus fríos ojos azulados en ella.
Volvió a esbozar otra sonrisa y la miró fijamente.
— ¿Cómo os llamáis? —Preguntó de forma educada, también denotándose curiosidad en su voz. —A mí podéis llamarme Darek. —Hizo una pequeña reverencia de forma educada y su sonrisa se amplió aún más.
También le rondaba por la cabeza muchas otras preguntas que formularía poco a poco más adelante.
De momento quería saber qué hacía en ese lugar una joven tan hermosa sin ser acompañada.
—¿Os encontráis sola en estos momentos? —Preguntó por si acaso alguien la estaba esperando.
También le gustó que la joven disfrutara de esas delicias al igual que lo hacía él.
Pero tan pronto como cuando terminó de saborear su manzana, aquella dama le formuló una interesante pregunta y el joven volvió a centrar toda su atención en ella.
La mirada de Darek solía ser como en esos momentos penetrante y bastante atrevido. No sentía vergüenza alguna al mirar a las personas de forma directa aún a pesar de que se trataran de desconocidos como en ese caso.
— Cierto es, señorita, no soy de este lugar. —No respondió de forma directa a su pregunta e hizo una larga pausa como si quisiera darle algo de emoción y cierto misterio a su vida. Después esbozó una media sonrisa, un tanto travieso. —Vengo de Inglaterra. Me gustaba mucho mi hogar, pero decidí cambiar un poco mi vida y darle un toque más aventurero. —En parte era cierto. Pero también le traía malos recuerdos y dolorosos su antiguo hogar.
Después de responder, observó detenidamente como la joven masticaba la manzana. Le daba la impresión de que aquella dama era de alta cuna, pues mordía la manzana con cierto refinamiento. No obstante se podía equivocar o si era cierto, aquella dama podría ser como él y prefería ocultarse. No iba a decir en tal caso nada al respecto.
Se echó un poco a un lado, casi de forma elegante para dejar pasar mejor a la gente. Se colocó justo al lado de la joven y volvió a clavar sus fríos ojos azulados en ella.
Volvió a esbozar otra sonrisa y la miró fijamente.
— ¿Cómo os llamáis? —Preguntó de forma educada, también denotándose curiosidad en su voz. —A mí podéis llamarme Darek. —Hizo una pequeña reverencia de forma educada y su sonrisa se amplió aún más.
También le rondaba por la cabeza muchas otras preguntas que formularía poco a poco más adelante.
De momento quería saber qué hacía en ese lugar una joven tan hermosa sin ser acompañada.
—¿Os encontráis sola en estos momentos? —Preguntó por si acaso alguien la estaba esperando.
- Off:
- Siento parecer algo... ¿rudo, maniático? jeje pero mi personaje no dio su nombre anteriormente. Tal vez fue un despiste por tu parte, no pasa nada, pero en este post sí revelará su nombre
Darek Sharkün- Licántropo Clase Alta
- Mensajes : 27
Fecha de inscripción : 18/06/2013
DATOS DEL PERSONAJE
Poderes/Habilidades:
Datos de interés:
Re: Escapando de la monotonía [Danna Dianceht]
Danna asintió a sus palabras, imaginándose que no era de allí, era un joven ingles en busca de aventuras. Le miró fijamente también ella, aguantándole la mirada, con una sonrisa en sus labios- Le entiendo, yo también me fui del hogar en busca de aventuras, todo y que sigo yendo allí por temporadas- no explicó el por qué volvía, dejando la frase caerse en el misterio, el mismo que el joven había usado. Como lycan, le entendía, el hogar muchas veces representaba volver a revivir recuerdos dolorosos y poco amables de nuestras vidas. Suspiró, volviendo a dar un mordisco a la manzana, educadamente, pensando en que podría decirle de ella, cuando llegara el momento, de las preguntas. Aún no era de su agrado que aquel apuesto joven supiera de su real cuna. Todos cuando eran conocedores de tal hecho de su vida, se mostraban diferentes con ella, algunas más cautos otros más halagadores y corteses, todo para ganarse su gracia. Por lo que mantenía su condición tras un velo de misterio, el que por el momento no destaparía. Se encontraba a gusto hablando con ese joven y no quería arruinar el momento con formalidades.
La gente no dejaba de circular entre ellos. El joven, anticipándose a recibir otro golpe, por encontrarse en medio, se echó a un lado de forma elegante dejando pasar a la gente, y volvió a fijar sus azules ojos en ella de nuevo, esbozando una bella sonrisa, la que ella correspondió, dejando de lado la manzana que al fin, había terminado.
-Es todo un placer Darek- hizo una pequeña reverencia, ampliando su sonrisa- A mí, podéis llamarme Danna- le miró a sus azules ojos, los que presentaban ante ella muchos misterios. Quien seria este lycan, llamado Darek en realidad? Sería alguien que como ella, fingía, para pasar desapercibido por las gentes? Su mente no dejaba de pensar en las posibilidades y en quien podría ser el joven, hasta que tomando la iniciativa, se colgó del brazo del joven.
-Siempre me encuentro sola, nadie me espera me temo…- sonrío tristemente, encogiendose de hombros -¿Seguimos con el paseo? – mostró su sonrisa más dulce, junto unos brillantes ojos, con los que le miró, esperando no haber sido demasiado impulsiva, tomándolo del brazo- El mercado es muy grande, y apenas no vimos más que la parada de frutas..- Y la de las carnes, pensó en una mueca, deseando alejarse de allí, para no oler el exquisito aroma.
Danna Dianceht- Licántropo/Realeza
- Mensajes : 592
Fecha de inscripción : 27/05/2013
Edad : 32
Re: Escapando de la monotonía [Danna Dianceht]
¡Cuánto misterio empezaba a rodear a ambos personajes que se encontraban en ese mercado, ajenos a todo lo que pasaba a su alrededor!
Pero eso le pareció aún más interesante e intrigante a Darek, quien anhelaba algo de emoción en su vida.
—Danna… —Repitió el nombre de la joven con cortesía. Después notó la cercanía de Danna cuando se colgó de su brazo. No le desagradó para nada aquél acto y se mostró indiferente.
Aún a pesar de que la joven le hubiese dado una respuesta un tanto triste, respuesta la cual él estaba acostumbrado a vivir también pues tampoco nadie le esperaba, se sintió interiormente algo reconfortado. Quizás porque aquella joven tan viva y hermosa le empezaba a caer bien o quizás incluso gustar. Pero no se mostró por fuera alegre o contento al oír esa respuesta, obviamente para no parecer maleducado.
Se quedó observando durante largo rato aquella sonrisa que esbozaba la joven, extraña sonrisa que le hacía sentirse más vivo al contemplarla. Le devolvió la sonrisa y respondió asintiendo sólo con la cabeza.
Comenzó a caminar lentamente al lado de Danna, desviando su mirada de ella para clavarla al frente y caminar sin tropezarse con algo o alguien.
Mientras caminaba comenzó con otra conversación.
—¿Este lugar es nuevo para vos? —Preguntó con curiosidad. No podía evitar hablar en ese tono educado, pues había sido instruido con mucha educación y le costaba pasar por alto sus antiguos modales. Pero no le importó, pues le gustaba mostrarse caballeroso.
—A mí me parece fascinante como un lugar puede estar tan lleno de gente. —Se mostró por el tono de su voz que sentía admiración, interés y también que era su primera vez en un mercado como ese.
Cuando terminó de hablar hizo una pausa y sus ojos se clavaron en una oscura figura que se ocultaba tras una capa con capucha, ocultando así por completo su identidad. Se dio cuenta entonces que esa persona misteriosa les estaba observando.
No le dijo nada a su nueva compañera para no inquietarla, pero seguramente ella no tardaría en darse cuenta también de que esa persona que tan solo estaba a unos metros de ellos, no dejaba de mirarles de forma descarada.
Pero eso le pareció aún más interesante e intrigante a Darek, quien anhelaba algo de emoción en su vida.
—Danna… —Repitió el nombre de la joven con cortesía. Después notó la cercanía de Danna cuando se colgó de su brazo. No le desagradó para nada aquél acto y se mostró indiferente.
Aún a pesar de que la joven le hubiese dado una respuesta un tanto triste, respuesta la cual él estaba acostumbrado a vivir también pues tampoco nadie le esperaba, se sintió interiormente algo reconfortado. Quizás porque aquella joven tan viva y hermosa le empezaba a caer bien o quizás incluso gustar. Pero no se mostró por fuera alegre o contento al oír esa respuesta, obviamente para no parecer maleducado.
Se quedó observando durante largo rato aquella sonrisa que esbozaba la joven, extraña sonrisa que le hacía sentirse más vivo al contemplarla. Le devolvió la sonrisa y respondió asintiendo sólo con la cabeza.
Comenzó a caminar lentamente al lado de Danna, desviando su mirada de ella para clavarla al frente y caminar sin tropezarse con algo o alguien.
Mientras caminaba comenzó con otra conversación.
—¿Este lugar es nuevo para vos? —Preguntó con curiosidad. No podía evitar hablar en ese tono educado, pues había sido instruido con mucha educación y le costaba pasar por alto sus antiguos modales. Pero no le importó, pues le gustaba mostrarse caballeroso.
—A mí me parece fascinante como un lugar puede estar tan lleno de gente. —Se mostró por el tono de su voz que sentía admiración, interés y también que era su primera vez en un mercado como ese.
Cuando terminó de hablar hizo una pausa y sus ojos se clavaron en una oscura figura que se ocultaba tras una capa con capucha, ocultando así por completo su identidad. Se dio cuenta entonces que esa persona misteriosa les estaba observando.
No le dijo nada a su nueva compañera para no inquietarla, pero seguramente ella no tardaría en darse cuenta también de que esa persona que tan solo estaba a unos metros de ellos, no dejaba de mirarles de forma descarada.
Darek Sharkün- Licántropo Clase Alta
- Mensajes : 27
Fecha de inscripción : 18/06/2013
DATOS DEL PERSONAJE
Poderes/Habilidades:
Datos de interés:
Re: Escapando de la monotonía [Danna Dianceht]
Cogiéndole del brazo, esperó a su asentimiento con la cabeza, y emprendieron la marcha, caminando lentamente, intentando ni chocar ni tropezar con nada ni nadie, ya que al ser por la mañana, era cuando mas afluencia de compradores, reunía el mercado, y hoy les había tocado coincidir, cuando mas lleno se encontraba.
Muchos aromas invadieron su olfato, hasta el olor de una yerba poco conocida, la espiga dorada, que al oler la hizo toser, ya que le producía desde siempre algo de alergia. Sonrío, alejándose del puesto de las hierbas medicinales donde se encontraba la planta y sonrió al joven, asintiendo con la cabeza al terminar este de hablar.
-Si que es nuevo- dijo en una sonrisa- muchas veces he acudido a esta bella ciudad, pero hasta ahora no me había topado con el mercado, solo he visitado pequeños y grandes comercios, pero me parece que hay tanta armonía en este sitio- todo y que estaba lleno, y ya no podía andar una persona más entre todos, el paisaje, el ambiente, el coro de las voces, le gustaba, le traía recuerdos de su niñez, cuando visitaba con su madre, el mercado de Escocia- Este lugar me recuerda a mi infancia, entonces sí que acudía mucho a un grande mercado..¡Pero no tan grande ni influyente como lo parece este!- comentó aún sorprendida por la de gente que compraba en el mercado.
Tras sus palabras, escucho nuevamente al joven, hasta que una inquietud barrio sus sentidos, alertándola, alguien los estaba persiguiendo… ¿pero quién? Observó a su acompañante, al que vio un semblante serio, más de lo normal, que en este poco rato había llevado y seguí la dirección de su mirada, disimulando. Alguien protegido y oculto tras una capucha negra, nos estaba observando, directamente. ¿Un inquisidor, quizás? O cazador o vampiro…también podía ser, por el otro lado, alguien curioseando, que fuera testigo de la marcha de la Duquesa y la siguiera, para controlar sus pasos.
Clavó su mirada en el desconocido oculto, y cuando sus miradas se encontraron, el señor sonrío de forma petulante a Danna, pero a sus sentidos no podían ocultar las cosas, y quien fuera, tenía en la frente marcada la palabra maldad.
-¿Quién podrá ser?- dijo agarrándose más contra Darek - ¿Pasamos de largo y vemos si nos sigue?- preguntó inquieta. Nada le gustaba que jugaran al gato y al ratón con ella.
Muchos aromas invadieron su olfato, hasta el olor de una yerba poco conocida, la espiga dorada, que al oler la hizo toser, ya que le producía desde siempre algo de alergia. Sonrío, alejándose del puesto de las hierbas medicinales donde se encontraba la planta y sonrió al joven, asintiendo con la cabeza al terminar este de hablar.
-Si que es nuevo- dijo en una sonrisa- muchas veces he acudido a esta bella ciudad, pero hasta ahora no me había topado con el mercado, solo he visitado pequeños y grandes comercios, pero me parece que hay tanta armonía en este sitio- todo y que estaba lleno, y ya no podía andar una persona más entre todos, el paisaje, el ambiente, el coro de las voces, le gustaba, le traía recuerdos de su niñez, cuando visitaba con su madre, el mercado de Escocia- Este lugar me recuerda a mi infancia, entonces sí que acudía mucho a un grande mercado..¡Pero no tan grande ni influyente como lo parece este!- comentó aún sorprendida por la de gente que compraba en el mercado.
Tras sus palabras, escucho nuevamente al joven, hasta que una inquietud barrio sus sentidos, alertándola, alguien los estaba persiguiendo… ¿pero quién? Observó a su acompañante, al que vio un semblante serio, más de lo normal, que en este poco rato había llevado y seguí la dirección de su mirada, disimulando. Alguien protegido y oculto tras una capucha negra, nos estaba observando, directamente. ¿Un inquisidor, quizás? O cazador o vampiro…también podía ser, por el otro lado, alguien curioseando, que fuera testigo de la marcha de la Duquesa y la siguiera, para controlar sus pasos.
Clavó su mirada en el desconocido oculto, y cuando sus miradas se encontraron, el señor sonrío de forma petulante a Danna, pero a sus sentidos no podían ocultar las cosas, y quien fuera, tenía en la frente marcada la palabra maldad.
-¿Quién podrá ser?- dijo agarrándose más contra Darek - ¿Pasamos de largo y vemos si nos sigue?- preguntó inquieta. Nada le gustaba que jugaran al gato y al ratón con ella.
Danna Dianceht- Licántropo/Realeza
- Mensajes : 592
Fecha de inscripción : 27/05/2013
Edad : 32
Re: Escapando de la monotonía [Danna Dianceht]
Había estado caminando tranquilamente junto a Danna, escuchando cada una de sus palabras y atento a su historia.
Pero pronto aquél fascinante lugar que había sido admirado por Darek dejó de ser importante y el joven licántropo centró su atención en ese desconocido encapuchado.
Trató de disimular un poco para no dejar notar que se había fijado en esa oscura figura, pero se dio cuenta de que su acompañante también se había percatado de aquella extraña presencia y le pareció de pronto divertido cuando ella formuló la siguiente pregunta.
Por ello, no pudo evitar que una sonrisa casi traviesa se dibujara en su rostro.
Asintió entonces con la cabeza y no dijo nada más, sabiendo que su mirada parecida a la de un niño travieso lo diría todo: Estaba de acuerdo con ella y le parecía interesante que observaran a ese individuo.
De esta forma, pasó un brazo por detrás de la joven y colocó su mano izquierda al otro lado de la cintura de Danna. Era un gesto bastante atrevido, pero de esta forma la podía agarrar con más confianza y seguridad.
—Disculpad mi atrevimiento, madam. —Susurró suavemente al oído de Danna. De esa forma algunos podrían pensar que eran pareja o bastante íntimos. Pero a Darek le solía dar igual lo que pensaran los demás. Además, se sentía afortunado por caminar junto a tan hermosa dama.
Siguió caminando y fingiendo como si no hubiese visto anteriormente a ese hombre. Pero segundos más tarde giró un poco la cabeza para poder ver tras su hombro derecho y fijarse si lo estaban siguiendo o no.
Y sí les seguía. Con cierta prudencia y a una distancia algo lejos. Pero se notaba a la legua que no dejaba de vigilar fijamente a los dos lycan.
—Está surtiendo efecto. Alguno de los dos ha sido muy malo. —Se burló al final, sonriendo con cierta picardía. Le encantaba bromear y aún a pesar de encontrarse en una situación bastante peliaguda, él no dejaría de bromear. Quizás así quería sentirse calmado e incluso relajar a Danna. Pero fuera como fuera, Darek se sentía algo inquieto interiormente aún a pesar de mostrarse exteriormente bastante tranquilo.
¿Acaso seguía a Danna por alguna razón privada? ¿O era uno de los hombres que andaban buscando a Darek por aquella vez que él acabó peleándose en mitad de un callejón con unos hombres que abusaban de un niño adolescente?
Pero pronto aquél fascinante lugar que había sido admirado por Darek dejó de ser importante y el joven licántropo centró su atención en ese desconocido encapuchado.
Trató de disimular un poco para no dejar notar que se había fijado en esa oscura figura, pero se dio cuenta de que su acompañante también se había percatado de aquella extraña presencia y le pareció de pronto divertido cuando ella formuló la siguiente pregunta.
Por ello, no pudo evitar que una sonrisa casi traviesa se dibujara en su rostro.
Asintió entonces con la cabeza y no dijo nada más, sabiendo que su mirada parecida a la de un niño travieso lo diría todo: Estaba de acuerdo con ella y le parecía interesante que observaran a ese individuo.
De esta forma, pasó un brazo por detrás de la joven y colocó su mano izquierda al otro lado de la cintura de Danna. Era un gesto bastante atrevido, pero de esta forma la podía agarrar con más confianza y seguridad.
—Disculpad mi atrevimiento, madam. —Susurró suavemente al oído de Danna. De esa forma algunos podrían pensar que eran pareja o bastante íntimos. Pero a Darek le solía dar igual lo que pensaran los demás. Además, se sentía afortunado por caminar junto a tan hermosa dama.
Siguió caminando y fingiendo como si no hubiese visto anteriormente a ese hombre. Pero segundos más tarde giró un poco la cabeza para poder ver tras su hombro derecho y fijarse si lo estaban siguiendo o no.
Y sí les seguía. Con cierta prudencia y a una distancia algo lejos. Pero se notaba a la legua que no dejaba de vigilar fijamente a los dos lycan.
—Está surtiendo efecto. Alguno de los dos ha sido muy malo. —Se burló al final, sonriendo con cierta picardía. Le encantaba bromear y aún a pesar de encontrarse en una situación bastante peliaguda, él no dejaría de bromear. Quizás así quería sentirse calmado e incluso relajar a Danna. Pero fuera como fuera, Darek se sentía algo inquieto interiormente aún a pesar de mostrarse exteriormente bastante tranquilo.
¿Acaso seguía a Danna por alguna razón privada? ¿O era uno de los hombres que andaban buscando a Darek por aquella vez que él acabó peleándose en mitad de un callejón con unos hombres que abusaban de un niño adolescente?
Darek Sharkün- Licántropo Clase Alta
- Mensajes : 27
Fecha de inscripción : 18/06/2013
DATOS DEL PERSONAJE
Poderes/Habilidades:
Datos de interés:
Re: Escapando de la monotonía [Danna Dianceht]
Observó el semblante travieso del joven, el que por un momento se le adivinó en las facciones, pero del que no hizo mucho caso, al encontrarse siendo acosados por ese hombre, que no le daba buena espina. Esa cuestión la llevaba directa a los dolores de cabeza y a pensamientos, de cómo inquisidores y cazadores, cazan a los suyos, a seres como ellos dos. Bien podía ser, una coincidencia... y que le buscaran a él y no a ella, aún así no se fiaba ni un pelo de las intenciones de ese hombre y como mas se alejaran de él, mucho mejor para todos.
Darek a su lado, le pasó un abrazo por detrás de la joven, velando junto a su mano izquierda el lado opuesto de la cadera, en un gesto muy atrevido, ya que tan solo se conocían de hacía pocos minutos. No obstante, tenían que disimular y que mas, que disimular ser parejas, para pasar desapercibido? Sonrío al escuchar sus disculpas- No se preocupe Messier. Si su gracia quiere, aún podríamos acercarnos más...-dijo coqueta sonriéndole ampliamente
Cogiendo la iniciativa, pasó un brazo por la cintura del joven, y acercó más sus cuerpos, hasta quedar recostada en él, y resguardar su cabeza en el hueco entre el cuello y sus hombros. Cerró los ojos disfrutando del contacto, llevaba veinte-cinco años sin apenas tener contacto más cercano alguno con otras personas, solo tenía el contacto con los nobles y de la realeza en las reuniones, pero todo era formalidades. Esperaba que el joven no encontrara reparos en su cercanía, mientras merodeaban por el mercado, entre las gentes, haciéndose pasar por una enamorada pareja -por lo que muy bien podrían pasar, ante sus sonrisas e íntimo abrazo.-Parece ser que no cede y sigue buscándonos- dijo contra el cuello ajeno, aún recostada en él, dejando que fuera él, quien los condujera por el mercado.
Sonrío ante las palabras ajenas- Yo soy inocente, me temo. No será que enamoró a una joven y la despejo de todo honradez y ahora su familia os anda buscando?- preguntó divertida- ese motivo, bien podría merecer la pena el perseguir al amante de la joven hija, pero también hay muchos otros motivos.- sonrío, intentando bromear con el tema, pese a encontrarse con todos sus sentidos alerta- oh!- alzó la ceja divertida, dejando de recostar su cabeza en el hombro ajeno, mirándolo, sin separarse del abrazo de ambos cuerpos – ¿No se habrá enamorado de vos? O de mí?- hizo una mueca. El perseguidor, no podía compararse con la nobleza, el bello porte y buenas maneras, con sonrisa encandiladora, del joven, con el que se había encontrado. –Quizás solo sea un joven demasiado curioso y extraño, todo y que veo que se juntó otro perseguidor a su misma causa- susurró. Por el rabillo de ojo había visto a tiempo, como otro joven se unía al otro, y ahora los dos señores, no dejaban de observarlos y seguirlos. Manteniendo de espacio un buen trecho, a causa de las gentes que no dejaban que se acercaran más hacia sus posiciones.
Algo inquieta intentó reconocer sus aromas, pero no le eran familiares. Si no se trataban de dos jóvenes que buscaban a Darek, podrían ser dos inexpertos cazadores. Ya que si eres cazador y sigues a una presa; regla numero uno: No te hagas notar, pasa desapercibido, no alertes nunca a tu presa.
El desconocimiento de esa norma, para los dos licántropos, les aseguraba poderse salir de aquel lio, para el joven, perderles el rastro. Todo y así, era mejor ser cautos y no arriesgarse.
- Espero que no sean cazadores- dijo en un suspiro, sonriendo ligeramente al joven.
off-roll:
Darek a su lado, le pasó un abrazo por detrás de la joven, velando junto a su mano izquierda el lado opuesto de la cadera, en un gesto muy atrevido, ya que tan solo se conocían de hacía pocos minutos. No obstante, tenían que disimular y que mas, que disimular ser parejas, para pasar desapercibido? Sonrío al escuchar sus disculpas- No se preocupe Messier. Si su gracia quiere, aún podríamos acercarnos más...-dijo coqueta sonriéndole ampliamente
Cogiendo la iniciativa, pasó un brazo por la cintura del joven, y acercó más sus cuerpos, hasta quedar recostada en él, y resguardar su cabeza en el hueco entre el cuello y sus hombros. Cerró los ojos disfrutando del contacto, llevaba veinte-cinco años sin apenas tener contacto más cercano alguno con otras personas, solo tenía el contacto con los nobles y de la realeza en las reuniones, pero todo era formalidades. Esperaba que el joven no encontrara reparos en su cercanía, mientras merodeaban por el mercado, entre las gentes, haciéndose pasar por una enamorada pareja -por lo que muy bien podrían pasar, ante sus sonrisas e íntimo abrazo.-Parece ser que no cede y sigue buscándonos- dijo contra el cuello ajeno, aún recostada en él, dejando que fuera él, quien los condujera por el mercado.
Sonrío ante las palabras ajenas- Yo soy inocente, me temo. No será que enamoró a una joven y la despejo de todo honradez y ahora su familia os anda buscando?- preguntó divertida- ese motivo, bien podría merecer la pena el perseguir al amante de la joven hija, pero también hay muchos otros motivos.- sonrío, intentando bromear con el tema, pese a encontrarse con todos sus sentidos alerta- oh!- alzó la ceja divertida, dejando de recostar su cabeza en el hombro ajeno, mirándolo, sin separarse del abrazo de ambos cuerpos – ¿No se habrá enamorado de vos? O de mí?- hizo una mueca. El perseguidor, no podía compararse con la nobleza, el bello porte y buenas maneras, con sonrisa encandiladora, del joven, con el que se había encontrado. –Quizás solo sea un joven demasiado curioso y extraño, todo y que veo que se juntó otro perseguidor a su misma causa- susurró. Por el rabillo de ojo había visto a tiempo, como otro joven se unía al otro, y ahora los dos señores, no dejaban de observarlos y seguirlos. Manteniendo de espacio un buen trecho, a causa de las gentes que no dejaban que se acercaran más hacia sus posiciones.
Algo inquieta intentó reconocer sus aromas, pero no le eran familiares. Si no se trataban de dos jóvenes que buscaban a Darek, podrían ser dos inexpertos cazadores. Ya que si eres cazador y sigues a una presa; regla numero uno: No te hagas notar, pasa desapercibido, no alertes nunca a tu presa.
El desconocimiento de esa norma, para los dos licántropos, les aseguraba poderse salir de aquel lio, para el joven, perderles el rastro. Todo y así, era mejor ser cautos y no arriesgarse.
- Espero que no sean cazadores- dijo en un suspiro, sonriendo ligeramente al joven.
off-roll:
- Spoiler:
- Siento si no es como los de siempre, esta semana no he tenido mucha cabeza. Bienvenido de nuevo (:
Danna Dianceht- Licántropo/Realeza
- Mensajes : 592
Fecha de inscripción : 27/05/2013
Edad : 32
Temas similares
» Escapando [Privado]
» Escapando [Libre]
» Escapando de la realidad [Privado]
» Monotonía /Libre/
» Escapando de la lluvia (LIBRE)
» Escapando [Libre]
» Escapando de la realidad [Privado]
» Monotonía /Libre/
» Escapando de la lluvia (LIBRE)
Página 1 de 1.
Permisos de este foro:
No puedes responder a temas en este foro.
Miér Sep 18, 2024 9:16 am por Afiliaciones
» REACTIVACIÓN DE PERSONAJES
Mar Jul 30, 2024 4:58 am por Frederick Truffaut
» AVISO #49: SITUACIÓN ACTUAL DE VICTORIAN VAMPIRES
Miér Jul 24, 2024 2:54 pm por Nigel Quartermane
» Ah, mi vieja amiga la autodestrucción [Búsqueda activa]
Jue Jul 18, 2024 4:42 am por León Salazar
» Vampirto ¿estás ahí? // Sokolović Rosenthal (priv)
Miér Jul 10, 2024 1:09 pm por Jagger B. De Boer
» l'enlèvement de perséphone ─ n.
Sáb Jul 06, 2024 11:12 pm por Vivianne Delacour
» orphée et eurydice ― j.
Jue Jul 04, 2024 10:55 pm por Vivianne Delacour
» Le Château des Rêves Noirs [Privado]
Jue Jul 04, 2024 10:42 pm por Willem Fokke
» labyrinth ─ chronologies.
Sáb Jun 22, 2024 10:04 pm por Vivianne Delacour