De vuelta...y sin saberlo...(Kenner)

por **Cynthia Dalma** Sáb Jul 27, 2013 11:44 am

Confusa, así era cómo me sentía en aquel momento. Confusa, aturdida a más no poder y sin saber dónde estaba. Tampoco sabía lo que era...dónde estaba, lo que había sido, o el motivo por el cual estaba en aquel lugar oscuro, flotando, girando sobre mí misma cómo si alguien me hubiera soltado y fuese una especie de tornado que acaba de entrar en un lugar desconocido. La oscuridad de aquel pasillo...¿era eso lo que era? se iluminó con el blanco de las luces celestiales que se supone que una ve al final del túnel. Ese blanco, que era todo lo que podía ver en aquel momento, una luz blanca que había irrumpido de repente, se convirtió en un color azul claro, cómo el hielo, espectral, que fue tomando forma poco a poco hasta convertirse en una marea de color marino rodeaba.

En medio de esa marea se fue tomando poco a poco la forma de una persona...la mía. Mi menuda persona tomó forma en aquel lugar, dando vueltas sin descanso, sin adaptarse del todo a aquel lugar. No tengo la menor idea de cuánto tiempo pasó hasta que finalmente algo más cambiara...hasta que las vueltas fueron yendo cada vez con más lentitud, cómo una carrousel que se iba deteniendo cada vez más y más...hasta que se detuvo del todo y estuve flotando a un metro por encima del suelo, con los ojos aún cerrados, mareada, sin sentir nada aparte de aquel frío que iba tomando lugar en aquel ambiente gélido, cuyas paredes estaban comenzando a congelarse, al menos en parte, puesto que pequeñas estalactitas de hielo se iban pegando a las paredes.

Fue entonces cuando abrí los ojos y me encontré con una oscuridad sólo rota por aquella luz azulada que manaba de mi persona. ¿Dónde me encontraba?¿Qué había ocurrido?¿Dónde estaba?¿Quién era yo?¿Qué era?¿Qué me había ocurrido? Pero sobre todo...¿POR QUÉ? Al fin y al cabo...tenía que haber alguna razón en concreto para que hubiera ido a parar a aquel lugar...acababa de llegar desde un lugar que no recordaba para nada. Acababa de escapar de un lugar del que no guardaba el más mínimo recuerdo. Aunque en aquellos momentos no guardaba ningún recuerdo de nada...absolutamente nada. Estaba totalmente confusa y perdida. Y no tenía la menor idea de cómo salir de aquella situación.

Para empezar...¿por qué no posar los pies en el suelo? Sí, era lo más sensato...intenté descender hasta el suelo. Posé uno de mis pies en el suelo con elegancia, pero, aunque vi claramente este movimiento, no lo noté. Mi chamuscado pie rozaba el suelo...pero no lo sentía. Probé hacer lo mismo con el otro y ocurría exactamente lo mismo. Frustada, dejé escapar una exclamación y volví a flotar hacia dónde estaba antes, mirando a mi alrededor, colocando una mano espectral sobre la pared...fría y delicada, pero transparente. ¿Qué estaba pasando...?Quizás si me pudiera ver el rostro...recordara quién era. Porque yo era algo, alguien, una cosa que acababa de tomar forma sobre la Tierra, una criatura más...¿viva? No, no podía estar viva. Las cosas vivas tenían forma corpórea...eran sólidas...y yo no lo era.

Giré sobre mí misma una vez más y comencé a desplazarme por aquel pasillo...y ésto me hizo bien, porque cuando comencé a moverme sentí cómo la mente se me aclaraba...acababa de recordar quién era. Me llamaba Cynthia Dalma, sí, y era un fantasma, de ahí a que pudiera flotar y hacer esas cosas, y también por eso emanaba esa hermosa luz azulada y podía congelas las paredes con ese hielo que parecía estar hecho de diamante. Ahora quedaba por aclarar más dudas...¿por qué había ido a parar a aquel lugar? Parece un castillo, pensé. Y eso me trajo algo más a la cabeza...¿había vivido en un castillo?¿Acaso me evocaba algún recuerdo? Era evidente que sí...por eso había ido a parar allí...Me detuve dónde estaba y comencé a cantar...no sonaba cómo palabras...o al menos no entendí lo que estaba diciendo...pero esa voz que salía de mi boca era dulce, hermosa...espectral...

por **Kenner Clapton** Dom Jul 28, 2013 1:36 pm

Una noche mas se cernía sobre parís, una noche fría y cruel donde difícilmente seres des privilegiados de calor sobrevivirían a menos que estos fueran seres sin vida como era mi caso, observando desde una de las murallas de mi castillo podía ver las pocas luces que quedaban en la ciudad, alejado de todo suspire dejando mis ojos destellar esta noche permanecería en mi castillo haciéndome un banquete hacia poco había acabado con un grupo de forasteros de los cuales había drenado su carmesí y los iría a saborear esta noche con ganas y tranquilidad, pena que no tenia otro ser inmortal para compartir mi manjar pero eso no seria problema, mis colmillos de a poco fueron surgiendo a los lados de mi boca y en un segundo ya no estaba en los exteriores del castillo, sino en la sala de ceremonias del mismo donde me proponía prepara todo.

No demore mucho en servirme el banquete que tampoco era mas que unas copas llenas de sangre humana sentándome en la punta comencé a beber despreocupado por todo saciando mis mas sucios instintos vampiricos, la de alimentarme como un depredador mis ojos se volvieron negros en vez de rojos como de costumbre y mi rostro se arrugo como la de un demonio, mientras me alimentaba saciando hasta el mas profundo de mi ser. Sentía que la sala se volvía mas fría que de costumbre solo un fenómeno era capaz de hacerlo y lo conocía muy bien un fantasma acababa de nacer en este castillo, rechiste un poco quizás había vivido en el durante el tiempo que lo deje abandonado. la esencia espectral se acercaba por el corredor.

Termine de lamerme los labios y regresar a mi bello rostro a la normalidad igual que mis ojos para esperar sentado cómodamente como aquel ser se presentaría, un fantasma no se veía todos los días realmente era un ser raro de verse y mas a un que se formara aquí en este lugar, presenciarlo o estar cerca de uno cuando acaba de regresar es extremadamente extraño, en mi vida ya había visto algunos pero pocos a decir verdad. A ver que planes tenia esta apoye la mano con la copa sobre la mesa mientras la otra iba a mis labios para asegurarme de a ver sacado todo rastro de sangre, aunque el olor se sentía en toda la sala y aun había copas llenas de sangre en la mesa.

por **Cynthia Dalma** Lun Jul 29, 2013 10:34 am

Había alguien. No estaba sola en aquel castillo. Una presencia familiar vino a mi memoria, pero no porque le hubiera conocido de antes, sino porque era de la misma raza de algo que echaba de menos...lo sentí, pero no conseguí recordarlo...seguía cantando mientras me deslizaba por la sala, recordando solamente mi propio nombre, pensando en dónde estaría. Había otra presencia, pero tampoco estaba viva. Y olor a sangre. Ésto me traía buenos recuerdos...buenas sensaciones...¿Había sido acaso un vampiro cuando estaba...?No, no podía ser. Los vampiros no pueden convertirse en fantasmas.

Los vampiros, cuando mueren, se murieron. Si sus almas van a alguna parte, si eso es siquiera posible, van a cualquier otro plano menos al mortal. Lo más probable es que vayan al infierno, si es que existe. ¿Acaso yo venía de él? Volví a mirar mis pies chamuscados mientras me desplazaba buscando aquella presencia. Tenía que estar por alguna parte, y tenía que encontrarla cuanto antes. No podía evitar pensar que quizás esa presencia me ayudara a situarme en el mundo de nuevo, si es que no me había situado antes en él. No sabía dónde había ido a parar, el motivo por el cuál había ido a parar allí...mi canción espectral hablaba sobre ello, en un idioma de mi infancia que no recordaba, pero que tenía que terminar recordando tarde o temprano, sí o sí...aunque luego me arrepintiera de haberlo recordado. El olor a sangre se hizo más fuerte. Era evidente que era algo que no necesitaba, no pertenecía a la raza que bebía esa sangre. Pero me gustaba. Su olor me atraía por alguna razón...por eso la buscaba. Era también lo que no tenía.

Entonces...llegué. La luz azulada que emanaba mi persona iluminó la sala y congeló parte de las paredes, haciendo que cayeran del techo algunas estalactitas de hielo. Había un vampiro bebiendo sangre, con una copa en la mano...nunca le había visto antes, pero su raza la conocía...¿o acaso le había conocido de antes? Floté ante él, mirándole con una curiosidad extrema...tenía que preguntarle quién era. Intenté hacerme más visible, dejar que la luz azulada me rodeara y desapareciera en parte para darle más forma a mi persona. Floté hasta el suelo e intenté hacer algo...pero no pude. No podía tomar forma corpórea...no recordaba cómo se hacía...por lo que me quedé allí mirándole, cómo si estuviera a punto de sentarme. Andé por la sala con aire confuso, aunque los pasos no resonaban. No podían resonar, nada hacía ruido...resistí la tentación de volver a elevarme.

-Qué agradable sorpresa... es un placer conoceros...-hablaba en un idioma que no recordaba...pero esperaba que lo entendiera. La voz era espectral, dulce, pero intentaba con todas mis fuerzas que sonara más humana. Ésto era demasiado difícil-Ha de disculparme, pero ando un poco perdida. Si pudiera decirme dónde me hallo, se lo agradecería mucho. ¿Ésta es su...humilde morada?¿O acaso he ido a parar al palacio de un duque de otro tiempo?¿He retrocedido atrás?No sé en qué año estoy...por qué he venido aquí. Acabo de llegar de un viaje muy largo. ¿He sido acaso una de sus víctimas?-ésto lo dudaba. No había muerto hacía poco. Esa sangre que bebía no era la mía. De todos modos lo preguntaba por si acaso...era mejor prevenir que curar.-¿O me ha invocado?

Me eché a reír ante ésto. Los vampiros no invocaban a los fantasmas. No podíamos responder a sus invocaciones, si alguno de ellos lo hacía. Quizás una bruja...un rostro vino a mi memoria. ¿Una bruja? Había alguien que había invocado, que había hecho algo..¡Qué frustración no recordar nada más que tu propio nombre! Lo mejor era ir actuando con cuidado, así quizás todo vuelva a la memoria. Hice amago de pasar una mano por el respaldo de una silla. Cogí una de las copas de sangre y la miré fijamente. Si tuviera forma corpórea, podría beberla...pero no podía hacerlo.-Le estaría muy agradecida si me iluminara en éstos temas...-me puse a flotar con la copa en la mano y haciendo una reverencia para presentarme.-Mi nombre es Cynthia...es un placer conocerle, tanto si os conozco de antes cómo si no.-volví a posarme en el suelo, dejando caer la copa, que cayó al suelo y derramó la sangre. No podía sostener nada sólido durante demasiado tiempo...aún.

por **Kenner Clapton** Mar Jul 30, 2013 11:51 am

Estaba recostado en mi asiento esperando que la anomalía se hiciera presente, pude sentir su presencia allí, el frió se hizo notorio y las pocas luces que estaban en la sala como las velas sobre la mesa se apagaron quedando a oscuras, iluminados solo por la luz de la luna, una leve mueca de sastifaccion rodeo mis labios de forma tranquila que luego al poder ver los destellos azules, los cuales no me despertaron ninguna impresión simplemente observe lo que se formaría, escuche la voz femenina de una mujer, tomo otra de las copas que allí estaban observando a la joven que se presento como si aquello hubiera sido una sorpresa para ella, estaba en mi castillo ella era la invitada con una voz serena y suave

-Bienvenida, a mi hogar joven cita.

Escucho lo que ella dice sobre su perdida interesante una fantasma que esta perdida en su mundo que no sabe que esta haciendo, tomo un sorbo de sangre manchando levemente mis labios mientras escucho todas sus preguntas, parece por sus pocos ropajes que se le puede ver que se trata de una niña que lleva algo muerta, sera que vivió en mi castillo durante mi estadía en el exterior suspire levemente y sonreí girando la silla y levantándome y caminando, pasando hacia la chimenea que esta apagada dándole la espalda a tan espectral criatura. La cual no hacia silencio sino que seguía hablando sobre sus dudas, invocarla luego de decir eso escuche como se rió bastante, era cierto vampiros no invoca vamos pero yo tenia quienes lo podrían hacer, pero por mala suerte no puedo hacerlo. Eso quiere decir que ella me reconoció, escuche el ruido de la copa cayendo y su pedido para que la ayudara a entender este mundo. Suspire levemente si ella estaba aquí era por que algo le había quedado inconcluso una venganza proteger a alguien en vida, algo que no había logrado concluir y la ataba a este mundo.

Luego de unos minutos de silencio eleve la vista y comencé a hablar bebiendo yo la copa mis ojos destellaron en un rojo incadecente debido a la sangre que estaba en el suelo cerca de la criatura espectral suspire y comencé a hablar despacio

-Te encuentras en mis territorios Cynthia.. ubicados en las lejanías de parís, en el año 1800

Mencione volteandome a mirarla a los ojos destallando levemente mis ojos rojizos y mis colmillos se notaron levemente al observarla de nuevo y sonríe de lado frente a su pregunta si había sido mi victima

-No recuerdo que nos hayamos cruzado en mi vida, madam así que lo dudo que fuera posible

Menciono con total calma y indiferencia a la joven observándola a los ojos notando como hacia poco que se había vuelto una fantasma ya que no podía controlar sus poderes a la perfección, y podría serme útil en algo esta joven pero claro estaba todo dependía de por que ella estaba en esta dimensión aun atada a la vida en muerte

-No recordáis nada de lo que habéis vivido en vida madam?

por **Cynthia Dalma** Mar Jul 30, 2013 2:15 pm

Año 1800, París. Algunos cabos ya estaban siendo atados. Había estado en París más de una vez. En realidad, había rondado por éstos lares incluso en aquellos tiempos en los que había estado viva, aunque en aquellos momentos no pudiese dilucidar cuanto...la última vez en la que había respirado, el día final de su vida o acaso el principio, o los primeros momentos de la muerte, que tanto rememoraban aquella divina oscuridad. La oscuridad...¿cómo no pensar en ella? Esa enemiga tan conocida. ¿Acaso no había estado antes sumida en ella? Sí, lo había estado, que ella recordara...había venido de algún lugar cercano a ella. Algún rincón remoto, quizás en la capital de esa oscuridad...lo cuál sugiere un lugar aún más alejado de la vida misma.

-¿París?¿Año 1800?No parece que haya pasado mucho tiempo desde la última vez que me fui. Es más, creo que he estado en París éste mismo año. No vivía en éste siglo, tampoco morí en éste lugar, ni siquiera nací y me crié en éste lugar cuándo me contaba entre los vivos. No recuerdo dónde, pero sé que no fue aquí. No siento pulsión alguna que me ate a éste lugar. No hay nada, absolutamente nada que me ate a ninguna parte, pero sin embargo tampoco hay nada que me expulse de éste mundo o una luz que haya visto. Al contrario, acabo de salir de un mundo de oscuridad...-la sonrisa que esbocé ahora rozaba lo macabro.

Lo cierto es que estaba comenzando a rememorar el mundo en el que había estado antes. Había habido algo más que oscuridad. Sí, sin duda alguna ahora lo recordaba. Nada de mi vida, nada de lo que me atara a éste mundo, pero estaban regresando los recuerdos del lugar del que había venido. Y no eran recuerdos agradables. ¿Acaso no tienen los mortales sueños de pesadilla cuando son pequeños? Temen esos lugares plagados de monstruos, o el mismísimo infierno, que es dónde van los mayores temores de la humanidad. Estuve atrapada en un sitio parecido. Es demasiado difícil de explicar de una forma que el resto de los mortales lo entienda, es una de esas cosas que no se pueden explicar con palabras...al menos no del todo. A veces, simplemente, se siente.

No recuerdo nada. Y es una suerte que vos no hayáis sido mi asesino. Entonces...no tendría más remedio que tomar venganza sobre vuestra persona...y estoy total y completamente segura de que éso no os habría hecho la más mínima gracia. Aunque, de todos modos, tampoco es muy fácil matar a uno de los vuestros...al igual que es imposible matarme a mí. Es imposible matar algo que ya está muerto, a no ser que sepáis lo que hay que hacer para exorcizar a un fantasma...-poco a poco todo regresaba. Era cómo si me fuera recuperando con lentitud a medida que me fuera moviendo o hablando.

Ésto era buena señal. Significaba que tarde o temprano me recuperaría y lo recordaría todo. O a lo mejor él me ayudaría. No parecía haber sido el responsable de nada malo que me hubiera sucedido...mis pies chamuscados eran una muestra de ello. Él podría ayudarme de alguna forma. Al fin y al cabo había habido una razón por la cuál había ido a parar a aquel lugar. Debería intentar averigüar todo lo que pudiera sobre él...y eso fue lo que decidí mientras seguía luchando por recuperar mi forma corpórea...

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