El descanso...nunca hizo mal a nadie ¿no? { Privado }

por **Lionel D'Maine** Dom Oct 10, 2010 1:28 pm

-¡Dios! Se sentía tan bien una tarde libre, no tenia muchas ocasiones de disfrutar como lo estaba haciendo ahora, habia tenido un trabajo en donde el hombre le habia pagado un poco más asi que pudo permitirse un día sin hacer nada más que gastar unas pocas monedas, ¿no era vida? Tenia una sonrisa en la cara sobre todo una sonrisa soñadora, hacia tiempo que no habia caminado por paris como ahora y cuando lo hacia tan solo era para buscar trabajos y trabajos y más trabajos...¿habría cambiado muchas cosas?

“¿quieres hacer el favor de calmarte?”

Se sentía tan emocionado que hasta interiormente se recriminaba el no haber podido hacer nada más que mover los dedos de manera nerviosa, por primera vez observaba los puestos no buscando un papel de “se busca empleado” sino simplemente mirándolos para ver lo que habia, si, tenia dinero pero desgraciadamente no le permitía comprarse demasiadas cosas, su ropa también parecía gritar que no tenia tanto dinero como para presumir de él, pero aquella sonrisa...no, aquella sonrisa no se borraba de su rostro.

Saludó a algunos comerciales que ya conocía de haber trabajado con ellos y simplemente siguió con su camino como lo habia estipulado, con las manos en los bolsillos dejando la yema de los dedos acariciar las monedas, contándolas, pensando soñadoramente en qué se lo podía gastar, no todo pero al menos en alguna oferta que le beneficiase, Lionel no era muy caprichoso pero podría decirse que tenia una mente un poco infantil, cuando tenía dinero deseaba lo que todo niño, dulces. Cualquiera habría podido reirse de él pero así sería y creía que no cambiaría por mucho que pasaran los años. De todos modos volteó el rostro ¿esa parte la conocía?.

Había andado más de la cuenta y se habia pasado por desgracia todas las panaderías, habria ido hacia atrás pero para Lionel que deseaba conocerse todo paris en un abrir y cerrar los ojos...decidió que mejor iria a caminar, para ver nuevas cosas y obviamente para mirar si habia algun puesto de trabajo que debería de reservar en su mente para cuando pasara de nuevo mañana con aquella presión de trabajar en sus hombros, así pasaron unas horas, andando y andando, observando parques, casas, hombres, mujeres...cansado caminaba ahora no para saciar su curiosidad sino para adentrarse en algun lugar donde descansar sus piernas, al parecer lo encontró, una cafetería que por ahora no parecía tener muchos clientes lo habitual para las horas que eran, así que aprovecho para adentrarse en la misma sonriendo a los camareros mientras observaba las mesas que habia libres-

por **Margarett Doiteville** Mar Oct 12, 2010 10:09 pm

Bien, bien, bien, mi amado y tan esperado tiempo libre ahh... mas que un respiro para mi un gran alivio, mas que la paga que ganba esto era lo mejor conocer mi ciudad desconocida, no dudaria que ya conocia mas desde aquel encuentro en el cementerio mi perspectiva habia cambiado mucho. Me sentia una nueva yo en varios aspectos no en todos pero me conformaba con lo que llevaba ahora de ganado contra mi. Caminando por las calles con mi amado abrigo negro de aroma a hierbas naturales que tanto me encantaba. Diferente mentalidad, mismo cuerpo un nuevo alago nuevo objetivo o almenos eso pretendia creer. En fin mi cabeza era un perfecto desastre...¿Eso era lo que me hacia especial? ¡Bla bla!. Mis pies descordinados no me ayudaban en nada con esto, tropezaba varias veces y me hacia regresar a mi caminata.

Era una bella tarde, pasaba por el mercado, solamente mi vista jugueteaba por los puestos, sabia que no compraria nada, se posaban de vez en cuando en las personas que mendigaban con gran insistencia a las que pasaban a su lado o los empujaban haciendose espacio para caminar entre el tumulto, busque entre mis ropas una moneda que pudiera hacerlos sentir mejor a los que estiraban su mano con una cara tremenda de lastima. Logre encontrar unas tres monedas en mi abrigo me acerque a donde estaban, les entregue las monedas, con una sonrisa extra para mejorar un poco su dia a esa mujer. Lo raro era que no habia visto alguien robar, eso si era extraño, pero, bueno.

Uno de los que pedian limosna comenzo a pegarse a mi era un hombre de edad, aprete mi paso, sentia sus pasos marcados y sincronizados a los mios, los podia escuchar y me atreveria a decir que los sentia. Saliendo de la gran cantidad de gente, mi paso se acelero aun mas, el de mi acompañante o cazador en este caso tambien, ya no podia confiar ni en mi propia sombra, ahora solo queria un lugar seguro o uno en donde poder perderlo, me meti a una panaderia, logro jalar mi mano, me safe, sintiendo al momento un ardor en la palma de mi mano, me enconji para empujar a las señoras que se peleaban para pagar su pedazo de pan, corri entrando en una cafeteria de una esquina cercana, recuperando el aliento choque con una espalda fornida que estaba adornada por ropas desgastadas y un largo pelo liso. Baje mi cabeza de la verguenza que estaba pasando entre los meseros y las personas del lugar diculpandome, por la escena tan incomoda.

[Lo siento por la tardanza enserio pero tuve unos problemas, y por los acentos me disculpo no conosco mi teclado]

por **Lionel D'Maine** Sáb Oct 16, 2010 11:10 am

-Estaba completamente tranquilo, metido en sus pensamientos, en todo lo que estaba sintiendo, pensando, la tranquilidad de tener un día libre dejando de lado aquellos pensamientos que le estaban obligando a por lo menos “trabajar” media jornada o un poco en la noche, era normal despues de haber estado todo los días trabajando sin descanso que el unico dia que se lo tomaba como descanso tuviera algunas dudas acerca de si debía o no empezar a buscar algo. Negó entonces de nuevo el entrar a alguna de las tiendas a preguntar sobre todo cuando llegó el camarero, deseaba algo dulce pero también algo amargo. Lo primero que hizo fue mirar la carta de los precios, aún no estaba en buenos modos de gastar demasiado dinero, afortunadamente parecía que algunas cosas eran baratas y que podía permitirselo.

Justo cuando fué a elevar la cabeza para contactar al camarero se encontró con la particular escena de una chica respirando agitada, con sus ropas rasgadas y al mismo tiempo sentándose en una mesa que estaba situada cerca de Lionel, algunos camareros negaron debido a su ropaje pero para otros era un especial cliente, muchos hombres quisieran o no fueron con sus orbes directamente a la muchacha que estaba respirando agitadamente, aún no sabian lo que le habia pasado, pero debido a como estaba respirando parecia que habia corrido no demasiado contenta al parecer, no supo porqué inconscientemente se levantó caminando hacia la mesilla de los dulces, en aquella cafeteria habia una mesilla con varios dulces que los clientes podian tomar, en cada uno de los platos habia un numero impreso asi que sabían cuando costaba solo mirando el número-

Ten, recuperate

-Le sonrió a la dama dejando el platillo en su mesa, muchas de las personas empezaban a hablar pero aqueste era el pan de cada día, las personas parecian encontrar muy divertidas las vidas de los demás en vez de preocuparse por las suyas propias, una pérdida de tiempo, pero...así era la sociedad de hoy en día. Elevó la mirada para observar en el cristal, aun no sabia de quien o de qué habia corrido pero se aseguraba de observar a todas las personas. Si en algo se caracterizaba Lionel era en su detallismo, en su metodo de observar a las personas de modo que éstas ni siquiera pudieran sentirse observadas, de todos modos, ninguna de las personas que habia visto daba ese perfil de estar buscando a alguien-

Parece que estás a salvo

-Volvió a murmurar distraidamente sin apartar la mirada del cristal, sonriendo en cierto modo protector, aun no sabia porqué ya que ni siquiera la conocía y de todos modos estaba prestándole mi ayuda como si fuera alguien que conocía de toda la vida, asi lo pensaron algunos, hasta que Lionel se acomodó en su mesa, señalando al camarero que podía venir ya que iba a pedir al menos un café grande, bien cargado y con mucho azucar, cálido, amargo, dulce...lo que necesitaba. Cuando el camarero marchó lionel se dedicó a sonreir dulcemente a la mujer, inclinando el rostro de vez en cuando manteniendo su vista distraido de nuevo hacia la carta de los precios-

por **Margarett Doiteville** Sáb Feb 05, 2011 5:39 pm

La gente miraba, hablaba, solo eso, no hacia mas que hablar para ellos, talvez preguntarse que me había pasado pero, solo esa espalda fornida, y pelo largo se dedico a ayudarme, era desilucionante ver que solo una persona podía tomarse la molestia para deshacer las molestias ajenas. Mi respiración agitada fue disminuyendo, vi el dulce que el mi trajo, sonreí levemente, no lograba recuperarme por completo, pero una sonrisa de unos instantes era permitida para aquel joven. Lo veía tenia una posición protectora, su altura y la forma de su cuerpo, me hacían sentir mas segura que sus palabras y el mismo lugar, en donde yo sabia que mi agresor, no entraría. No aquí.
Acepte el dulce dándole solo un mordisco, haciendo el plato un poco hacia delante, viendo la palma de mi mano, recordando el ardor que me había provocado al ser safada de su mano. Tenia una leve cortada, no era nada grave pero me ardía. Mi mano la deje palma arriba pensando como hacer para calmar el ardor, cada que el volteaba a sonreírme, yo le respondía también.

-Vaya, parece que hay personas que no se cortan sus uñas..-

Dije con un leve aire de humor, no sabia si mi nuevo y protector acompañante tenia ese humor, pero su destellante sonrisa, me hizo decir eso para volver a verla si es que funcionaba. Se sentó a mi lado el camarero se acerco y el pidió su café. ¿Café en la tarde? Buen comienzo eso era algo interesante, no me acostumbraba a ver a hombres con cabello tan largo como el suyo.
Parecíamos conocidos de años o el parecía conocerme a mi eso me hizo sentir cómoda, no muchos eran así, pero no iba a atreverme a decir que el era diferente a todo los hombres, no sabia ni su nombre, es mas, ¿Por qué pensaba en eso ahora?

-¿Puedo saber tu nombre, caballero? Si no es mucha molestia.. -

Le pregunte regalándole una amable sonrisa, me sentía muy cómoda con su compañía hasta el momento nada de su parte había sido de mal gusto.

-Mi nombre es Megan Doiteville-

Acerque el plato para morder el dulce de Nuevo- Y gracias.
Mi mirada se aparto de su rostro por un instante una punzada en mi pecho me hizo voltear hacia el cristal y ver al hombre que me había perseguido por el Mercado y lastimado en la panadería. Me quede pasmada, el aun no se había dado cuenta de que yo estaba en el restaurante, pero no me iba a arriesgar a que me viese, no se me ocurría uno forma de esconderme o hacerme menos visible, , vi a mi acompañante, el enseguida dirigió su mirada al cristal y lo vio…

[¿Continuamos? Embarassed

Mil disculpas]

por **Lionel D'Maine** Dom Feb 06, 2011 6:57 am

Ni las uñas ni los modales al parecer...no puedo creer aun que a una dama tan hermosa como vos le haya hecho aquello

-Las personas eran ultimamente mucho mas bruscas de lo que pensaba, el teniaen el fondo suerte de saber defenderse aun cuando la mayor parte de las ocasiones no lo hacia, acarició un poco la palma de la mano de aquella dama utilizando un cuchillo que habia en la mesa para contar un buen trozo de la tela de su camisa, de ese modo envolvio un poco la palma de la mano para que aun cuando no hiciera demasiado el corte no se infectase. Le sonrió indicandole con la mirada que podia confiar en él de igual modo le estba comentando que estaba limpio su ropaje...es decir, no sabia si le iba a molestar aquellos tratos que tenia Lionel con ella especialmente el hecho de actuar sin hablar o el hecho de hacer algo antes de que se diera cuenta que lo habia hecho.

La mayor parte de los que estaban en el cafe les miraban, curiosos aunque alejaban la mirada en cuando Lionel les tendió con dureza una sonrisa en sus labios, despues de todo ellos no habian hecho nada yaque se habian encargado solamente a mirarlo que sucedia. Se inclinó volviendo su rostro hacia el ajeno con una sonrisa en los labios recordando entonces con cierta torpeza que no se habia presentado aun lo cual hizo que se rascase torpemente la mejilla, cuando el camarero llego y le ofreció el cafe Lionel le osnrió volviendo a mirar a la joven muchacha susurrando-

Lione D'Maine Mademoiselle Megan, ese es mi nombre.

-Colocó la mano en la mejilla viendola morder el dulce, esperando que asi su humor fuera un poco mejor al mismo que esperaba que todo fuera mucho mejor...se mordio los labios entonces con una sonrisa cariñosa, morderse los labios era algo que casi siempre hacia, no habia ningun momento en el que inconscientemente no acudiera a morderse sus labios. Al final colocó las manos en la mesa acariciando esa frialdad que poseía susodicha entrecerrando entonces los ojos mientras volvia a estirar un poco su cuerpo, no sabia como actuar, sabia que la habia tomado, la estaba mirando con deseos de salvarla de protegerla, de hacerla sentir tambien importante.

Era una mujer sin dudarlo hermosa, todo iba bien pues Lionel mientras tomaba un sorbo de café disfrutando un poco el aroma del mismo, no acostumbraba a beberlo sin que lo hubiera preparado el tanto para una persona como para otras, pero le gustaba ese sentimiento de no tener que cocinar para todos los que se cruzaban en su camino. Ladeó el rostro cuando ella empezó a esconderse, temblorosa ¿que paso? al rato volvió a mirar hacia el cristal, viendo al desgraciado que le habia hecho aquello-

Tranquila, mientras yo esté aqui, nadie te tocará ni un solo pelo del cabello

-Se levantó un poco, sentándose justo al lado de Megan pero delante del cristal, acariciando el cabello de la joven con una sonrisa en los labios mientras intentaba animarla, si se adentraba al restaurante tenian el momento suficiente como para esconderla en los baños y seguir el observando lo que pasaba para mantenerla vigilada, robo un trozito de dulce para meterselo en su boca y vislumbrar al hombre, muchas mujeres lo considerarian entre atractivo y entre desagradable pero...ahora mismo si no se sabia comportar seria la primera victima del gitano-

por **Margarett Doiteville** Lun Feb 07, 2011 3:16 pm

-No ya no los tienen..-

Tuvo la molestia de tocar mi herida, no dolió tanto como yo esperaba, no hice ninguna mueca, simplemente aguante el leve ardor y como no sonreírle ante las molestias que el se estaba tomando conmigo, cortar un pedazo de su ropa y curar a esta pobre diabala. Me sentia una persona normal, no solo una simple cortesana, vendedora de placer. Me sentia como cualquier otra, alguien que podía ser tratada con cariño y delicadeza. Pero, la mirada de aquel otro hombre afuera de donde yo estaba se veía la terquedad, la insistencia por encontrar algo no se si era a mi pero su mirada era intimidándote.

Me sentia inútilmente vulnerable desde que mi musa Máxima había muerto en mi vida ya nada era seguro pero si tuve la fuerza como para matarla, yo era una estupida una tremenda estupida, no podía estar pasándome, no era lo mismo. ¿Porque tuve que matarla?.. pero lamentarme ya no tenia caso. El se había sentado frente a mi eso era predecible, pero los siguientes movimientos no fueron predecibles.

Mis ojos ya no estaban en el hombre de afuera, ahora estaban en su mano que acariciaba mi cabello rizado y rubio, metió un trozo de dulce a mi boca, sin intención alguna, la humedad de mis labios rozo su dedo, no sabia como reaccionar, lo que si pude hacer era masticar y saborear el dulce, Seguía distraída sin importarme lo demás ni la situación que estaba, me gustaba lo que el estaba haciendo conmigo, estaba cómoda en una situación no apropiada una vez mas.

–Gracias..– Termine el pedazo de dulce.– Es, demasiado amable para serle franca.– Antes de que pudiera preguntarme si me molestaba, porque era seguro que lo haría, tome yo con mi mano otro pedazo de dulce y metérselo en la boca.– Y no me molesta en lo absoluto, solo no es común.- Sonreí, ya me había olvidado del porque yo estaba ahí ahora. La puerta se abrió, mis ojos se cerraron, comencé a rogar porque no fuera aquel tipo.

No quería un enfrentamiento, no aquí y no ahora con el malo y el bueno, Lionel se veía capaz de hacerlo, se veía capaz de ganarle su cuerpo me lo decía mas que claro, no paraba de recorrerlo con la mirada antes de que se abriera esa puerta, lo mas seguro Esquer el se haya dado cuenta de mis obvias miradas.

por **Lionel D'Maine** Sáb Feb 12, 2011 7:01 am

-Asintió silenciosamente cuando a duras penas ella habia por fin optado por comerse el dulce que le habia colocado en los labios, pensaba Lionel que habria sido mucho mas dificil y no la culpaba habia pasado por un mal momento siendo todo lo que sabia que un hombre la estaba siguiendo sin ser demasiado educado que dijeramos, ahora que lo miraba, parecia tener una cuenta corriente con aquella mujer o tan solo poseía demasiado tiempo libre por el momento.

Ella tomó el dulce, sonriendo el gitano mientras la observaba hablar, sentia la humedad suave de su dedo cuando la muchacha acarició con sus labios la piel de Lionel, aquello era grato pues empezaba a haber complicidad entre ambos, acarició un poco los cabellos de la mujer con una sonrisa en los labios siempre intentando tranquilizarla aunque no fuera muy bueno...la situacion habia sido hasta traumática por lo que contemplaba mientras el gitano abria automaticamente la boca tomando el dulce-

hhm

-Tragó antes de hablar, con una sonrisa en los labios ante tal vergonzoso momento, muchas veces las personas actuaban diferentes a como actuaba Lionel segun decian aquella hermosa mujer era muy dificil encontrar a buenas personas, no negaba que eso era muy cierto ya que le habia pasado numerosas ocasiones cuando la gente se burlaba de los gitanos o los miraba despectivamente-

Hay personas como yo, solo que es dificil encontrarlas, pero las hay

-Musitó, aun cuando sabia que las palabras que estaba diciendo no estaban llegando a donde debian, pues megan habia empezado de nuevo aquella incursión de miradas, seria aquel hombre, no lo sería...Lionel de pronto tomó por la cintura a aquella mujer apegandola contra su cuerpo diciendole con la mirada que siguiera aquella pantomima que estaba a punto de hacer...colocó su frente sobre la suya, dejando su nariz cerca de la ajena mientras comenzab a caminar apegado a ella hacia el baño dando la sensación de que estaban siendo algo más que "amigos", no creia que el camarero interfiriese ni tampoco muchos de los que estaban en la cafeteria, por ello aprovecho para que ambos acabaran en un lugar tan poco casual como los lavabos haciendo sonreir con ternura al propio Lionel mientras acomodaba las manos en la puerta del mismo baño musitando divertido-

Creo que no nos ha visto

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