Jérôme Leroy

◘ Nombre del Personaje: Jérôme Leroy

◘ Edad: Aparenta 32 años pero su edad real es de 45 años.

◘ Especie: Vampiro

◘ Tipo y Nivel Social: Clase Alta

◘ Lugar de Origen: París, Francia

◘ Fecha de Muerte: Murió en el mes de Octubre de 1787 a los 32 años.

◘ Habilidad/Poder: Al ser un vampiro hace tan pocos años tiene habilidades como el Sentido del Peligro y la Sanación Acelerada. Últimamente ha logrado comenzar a desarrollar la telepatía.

◘ Descripción Física:

Spoiler:

◘ Descripción Psicológica: Es educado y sofisticado tanto al hablar como al moverse. Suele hablar con palabras bien decoradas y tiene un gran don de la palabra. No vive siendo coqueto, pero cuando alguien le interesa lo es sin dificultad, logrando ser bastante encantador y atractivo, ya que siempre tiene una bella frase.

Solía ser un hombre optimista que esperaba mucho de la vida, comenzando a caer en la rutina y retomando ese camino cuando tuvo a su hijo. Pero luego de convertirse en vampiro se volvió algo retraído, preocupado de si mismo, aunque velando por su hijo sin que esto fuera tan notorio.

Prefiere no entablar relaciones estrechas y cercanas con la gente, sea quien sea. Obtiene lo que desea, lo pide por favor, lo agradece, pero nada más que eso. No le gusta estar debiendo favores, por lo que siempre se encarga para estar a mano con la gente. Es desconfiado, con la mayoría, pero hay ciertas personas a las cuales podría depositarle su confianza solo por instinto.

Si hay algo que conserva desde siempre, es el ser temperamental, cuando se enoja desea estar solo o puede caer en un ataque de furia e ira horribles, por lo cual siempre procura vivir relajado, aunque no es algo que le salga del todo bien.

Cuando siente que ama de verdad, toda esa imagen de hombre frío, interesado y altanero desaparece, pues cuando se trata de amor real le gusta ser sincero y tratar a su objeto de adoración como lo mas valioso y delicado en este mundo.

◘ Historia: Nació dentro de una de las familias adineradas y de clase alta en París, siendo el menor de sus hermanos. Vivió una vida tranquila, llena de lujos. Aún así el apreciaba las cosas buenas de la vida y era el mas aplicado de sus hermanos, le gustaba estudiar y era alumno sobresaliente. Estudió Literatura, pero aquello no le dio muchos frutos financieros, escribía libros de vez en cuando, bajo un seudónimo, pero no lograba vivir con esto, así que detuvo esos estudios y la literatura quedó rezagada a un segundo plano, tomándole como un hobby. Así comenzó con estudios de economía, los números no eran lo suyo, pero por consejo de su padre, sería una buena opción para amansar una fortuna propia y mantener a su esposa. Claro, todo era parte del plan de su progenitor pues le comprometieron con una nieta de un Barón Inglés. No puso objeción alguna pues era la costumbre y su único amor hasta el momento habían sido cientos de novelas que llegaban a sus manos. Así que no había problema en casarse, mas con un chica que era linda y sofisticada.

Por bastante tiempo se ocupó en parte de los negocios familiares, así llevaba una buena vida al lado de su esposa, viviendo en una espléndida mansión. Llevaba una vida tranquila, normal y casi monótona, ya ni siquiera tenía tiempo para gozar de los libros, pero a los 27 años recibió su mejor regalo. Su esposa le anunció que estaba esperando un bebé, y si bien al principio fue algo que no le sorprendió del todo, cuando el pequeño nació todo su mundo cambió. Decidió que trabajaría duro por él para que tuviera una vida aún mejor que la de él, e incluso, no deseaba tener mas hijos para que así su pequeño Andrè, fuera el único heredero de su fortuna y no pasar por los problemas que él tenía al compartir herencia con sus hermanos.

Tenía 32 años de vida, donde ahora si todo parecía marchar a pedir de boca, excepto algo que él jamás imagino. En una fiesta de sociedad conoció una bella dama, como siempre él se comportó como el hombre distinguido que es, y sin quererlo la dama cayó enamorada bajo sus encantos. Poco tiempo tomó para que ella declarase su amor, obviamente él no le correspondió y esto provocó la furia de la dama quien reveló ser una vampireza, amenazó con matar a su hijo y esposa y así, Jérôme, aceptó ser su amante, lo cual sin mucha espera lo condujo a ser convertido en un vampiro.

Aquella vampireza era caprichosa, y cuando obtuvo lo que quería se aburrió y fue a buscar una nueva aventura. Dejó a Jérôme y en parte fue algo bueno para él, pero lamentablemente su vida humana no era compatible con la vida de vampiro. Consiguió un falso papel de un doctor que decía que él padecía una terrible alergia al sol, así evitaba salir de día. Todos sus negocios los llevaba en casa y decía que debía salir de noche. Consiguió comenzar a hacer negocios en las Américas, por lo que viajaba seguido.
Su mas grande dolor, era estar alejado de Andrè, y su mas grande pesar era su esposa, quien siempre le recriminaba el verse ‘tan joven’, claro, los años pasaban y Jérôme seguía teniendo el mismo rostro del momento en que fue mordido, en cambio su esposa envejecía y su hijo crecía. Fueron estas circunstancias la que lo llevaron a tomar una gran decisión. Antes de su último viaje, le regaló a su hijo un reloj de bolsillo de plata, el cual andaba pero siempre quedaba detenido en la misma hora. Sus palabras fueron “Volveré por él” y así partió. Vivió un tiempo en otra ciudad dentro de Francia y cuando supo que un barco que venía de las Américas había naufragado, se las arregló para que su nombre apareciera en los registros de los pasajeros. Ese mismo día se embarcó en otro navío y partió rumbo a América, dejando que su familia creyese que había muerto en aquel accidente en el barco.
Comenzó a hacer negocios en su nueva tierra, ganando lo suficiente para vivir él, pero algo le faltaba. Siempre se sentía solo, necesitaba una compañía, pero su vida no le ayudaba mucho para conocer a alguien, y cuando lo hacia jamás le interesaban, en su mente aún estaba presente su hijo, el cual no solo abandonó por aquel problema de que jamás envejecía, sino porque su sangre comenzó a ser muy atractiva para él y no deseaba lastimarlo. Sabía que volvería por él, cuando controlara su naturaleza y se acostumbrara a vivir como vampiro.

Cierta noche, estando de caza, se perdió en el tiempo y olvidó que estaba muy lejos para volver a su hogar antes del amanecer. Fue ahí que conoció a un sujeto y le pidió que lo alojara. No lo hizo rogando, claro que no, pero lo pidió con cortesía. Pasó el día ahí y cuando la noche llegó se fue dando las gracias. Poco fue su andar cuando escuchó un gran grito de dolor desgarrador, e instintivamente decidió a ver que era lo que sucedía. Aquel hombre que había sido hospitalario con él estaba siendo atacado por un hombre lobo. Peleó con la bestia y salvó a la victima, pero n otan a tiempo pues alcanzó a ser mordido. Lo llevó a su morada y ahí curó sus heridas, cuando éste volvió en si le explico a grandes rasgos que aquello había sido un hombre lobo y que él también lo sería y se presentó como vampiro. Al ver que el hombre sobrevivió y explicando todo se fue, sobretodo porque ya estaban a mano.

Lo que jamás imaginó es que este sujeto, Alfred, sería como esos perros callejeros que les haces cariño y te siguen hasta tu hogar. A donde él iba se topaba con Alfred, encontrando así una compañía, aunque no precisamente la que él podría desear, pero le era imposible alejar al licántropo de él.
Ahora, han pasado aproximadamente cuatro años desde su falsa muerte y desea volver a París para buscar a Andrè, seguramente tendrá que llevar a alguien mas a su lado.

◘ Datos Extras:
*Le confunde el ser tan cercano a un hombre lobo, pues aún cuando le trata mal, pasa mucho tiempo con él y es al único que podría considerar su ‘amigo’.
* A deseado volver a probar comida que solía comer cuando era humano, pero todo aquello que no sea sangre o vino le provoca repulsión.
*Le gusta peinarse hacia atrás, pero siempre tiene un mechón que cae hacia adelante y lo arregla continuamente.
* Tiene un gran sentido de la moda, por lo que suele vestir muy bien, es algo en lo que trata de no escatimar en gastos.
*Aún cuando gasta en ropa, suele ser ahorrador. Incluso, el reloj que regaló a su hijo, en su interior tiene un número de una cuenta de un banco en la cual tiene depositados ahorros exclusivamente para su hijo.
* La sangre que mas le gusta es la de las y los jóvenes vírgenes, por eso es que pensaba que la sangre de André le atraía tanto.