Victorian Vampires
Bailando con la muerte [Privado] 2WJvCGs


Unirse al foro, es rápido y fácil

Victorian Vampires
Bailando con la muerte [Privado] 2WJvCGs
PARÍS, FRANCIA
AÑO 1842

Nos encontramos en París, Francia, exactamente en la pomposa época victoriana. Las mujeres pasean por las calles luciendo grandes y elaborados peinados, mientras abanican sus rostros y modelan elegantes vestidos que hacen énfasis los importantes rangos sociales que ostentan; los hombres enfundados en trajes las escoltan, los sombreros de copa les ciñen la cabeza.

Todo parece transcurrir de manera normal a los ojos de los humanos; la sociedad está claramente dividida en clases sociales: la alta, la media y la baja. Los prejuicios existen; la época es conservadora a más no poder; las personas con riqueza dominan el país. Pero nadie imagina los seres que se esconden entre las sombras: vampiros, licántropos, cambiaformas, brujos, gitanos. Todos son cazados por la Inquisición liderada por el Papa. Algunos aún creen que sólo son rumores y fantasías; otros, que han tenido la mala fortuna de encontrarse cara a cara con uno de estos seres, han vivido para contar su terrorífica historia y están convencidos de su existencia, del peligro que representa convivir con ellos, rondando por ahí, camuflando su naturaleza, haciéndose pasar por simples mortales, atacando cuando menos uno lo espera.

¿Estás dispuesto a regresar más doscientos años atrás?



NIGEL QUARTERMANE

ADMINISTRADOR

ENVIAR MP
NICOLÁS D' LENFENT

ADMINISTRADOR

ENVIAR MP
ESTACIÓN


Espacios libres: 11/40
Afiliaciones élite: ABIERTAS
Última limpieza: 1/04/24


COPYRIGHT/CRÉDITOS

En Victorian Vampires valoramos la creatividad, es por eso que pedimos respeto por el trabajo ajeno. Todas las imágenes, códigos y textos que pueden apreciarse en el foro han sido exclusivamente editados y creados para utilizarse únicamente en el mismo. Si se llegase a sorprender a una persona, foro, o sitio web, haciendo uso del contenido total o parcial, y sobre todo, sin el permiso de la administración de este foro, nos veremos obligados a reportarlo a las autoridades correspondientes, entre ellas Foro Activo, para que tome cartas en el asunto e impedir el robo de ideas originales, ya que creemos que es una falta de respeto el hacer uso de material ajeno sin haber tenido una previa autorización para ello. Por favor, no plagies, no robes diseños o códigos originales, respeta a los demás.

Así mismo, también exigimos respeto por las creaciones de todos nuestros usuarios, ya sean gráficos, códigos o textos. No robes ideas que les pertenecen a otros, se original. En este foro castigamos el plagio con el baneo definitivo.

Todas las imágenes utilizadas pertenecen a sus respectivos autores y han sido utilizadas y editadas sin fines de lucro. Agradecimientos especiales a: rainris, sambriggs, laesmeralda, viona, evenderthlies, eveferther, sweedies, silent order, lady morgana, iberian Black arts, dezzan, black dante, valentinakallias, admiralj, joelht74, dg2001, saraqrel, gin7ginb, anettfrozen, zemotion, lithiumpicnic, iscarlet, hellwoman, wagner, mjranum-stock, liam-stock, stardust Paramount Pictures, y muy especialmente a Source Code por sus códigos facilitados.

Licencia de Creative Commons
Victorian Vampires by Nigel Quartermane is licensed under a
Creative Commons Reconocimiento-NoComercial-SinObraDerivada 3.0 Unported License.
Creado a partir de la obra en https://victorianvampires.foroes.org


Últimos temas
» Savage Garden RPG [Afiliación Élite]
Bailando con la muerte [Privado] NXLYMMiér Sep 18, 2024 9:16 am por Afiliaciones

» REACTIVACIÓN DE PERSONAJES
Bailando con la muerte [Privado] NXLYMMar Jul 30, 2024 4:58 am por Frederick Truffaut

» AVISO #49: SITUACIÓN ACTUAL DE VICTORIAN VAMPIRES
Bailando con la muerte [Privado] NXLYMMiér Jul 24, 2024 2:54 pm por Nigel Quartermane

» Ah, mi vieja amiga la autodestrucción [Búsqueda activa]
Bailando con la muerte [Privado] NXLYMJue Jul 18, 2024 4:42 am por León Salazar

» Vampirto ¿estás ahí? // Sokolović Rosenthal (priv)
Bailando con la muerte [Privado] NXLYMMiér Jul 10, 2024 1:09 pm por Jagger B. De Boer

» l'enlèvement de perséphone ─ n.
Bailando con la muerte [Privado] NXLYMSáb Jul 06, 2024 11:12 pm por Vivianne Delacour

» orphée et eurydice ― j.
Bailando con la muerte [Privado] NXLYMJue Jul 04, 2024 10:55 pm por Vivianne Delacour

» Le Château des Rêves Noirs [Privado]
Bailando con la muerte [Privado] NXLYMJue Jul 04, 2024 10:42 pm por Willem Fokke

» labyrinth ─ chronologies.
Bailando con la muerte [Privado] NXLYMSáb Jun 22, 2024 10:04 pm por Vivianne Delacour


<

Bailando con la muerte [Privado]

2 participantes

Ir abajo

Bailando con la muerte [Privado] Empty Bailando con la muerte [Privado]

Mensaje por Aidara Dupont Mar Jun 21, 2016 3:33 pm

Y en medio aquella viva oscuridad un rayo me atravesó
Y volé tan alto, tan alto… que por unos segundos
Llegue a alcanzar a tocar las estrellas
de aquel manto oscuro sobre nosotros
y me sentí viva, tan viva… como nunca antes lo había sido
Y como nunca jamás lo sería.



En las últimas horas en la mente de la princesa solo existía una pregunta; ¿Qué hacia allí? Todo cuanto la rodeaba, el lujo del salón, las luces alumbrando todo aquel vaivén de vestidos, las damas y sus parejas danzando a su alrededor se sentía ahora extraño, lejano… incorrecto. En otra ocasión se habría sentido dichosa y asombrada de la variedad de personajes distinguidos que allí se encontraban ocultos bajo oscuras máscaras, no solamente cierta parte de la realeza había acudido aquella noche al baile, sino que tanto actores, bailarinas reconocidas y la más alta nobleza se encontraban allí. La más selecta compañía parisina y por el rostro de la princesa ni media sonrisa lograba aparecer. Desde uno de los balcones yacía allí escondida, esperando que nadie reparase en ella, aún menos que la reconocieran. No se sentía con fuerzas de mostrar una sonrisa amable y cordial cuando lo único que deseaba era llorar lágrimas de sangre por todo aquello perdido. Aidara se sentía como si aquella no fuese ya su vida y seguramente ya no lo era, seguramente jamás habría tenido que entrar en aquella vida, adentrarse tan profundamente como lo había hecho pero en estos momentos, aceptar la invitación al primer baile de Primavera Parisiense le había parecido una buena idea, algo que debía de hacer… al menos eso pensaba, hasta ahora.

Hacía semanas que había decidido abandonar por propio pie los Países Bajos, alejándose definitivamente de todo cuanto una vez pensó amar. En todo el camino que había hecho de noche, se había encontrado pensando que deseaba para ella, como empezar de nuevo.  Aún eran tantas las dudas de su mente que por lo esencial primero había pensado donde dirigir sus pasos,  y una vez tomada la decisión de alojarse en París, y allí escondida permanecía hasta hoy, en que la invitación sin saber cómo había llegado al orfanato a su nombre; o a la que una vez fue princesa de los Países Bajos.

El fresco aire acarició su rostro, jugueteando con su peinado, al tiempo que ella alzaba la mirada hacia la luna que alumbraba la oscura noche y seguramente por primera vez sonrío.

No todas las fiestas alegran los corazones…— susurró, y aquel soplo de frio aliento se perdió en la oscura noche que contemplaba en silencio. Todo cuanto había perdido y el corazón le dolía, pero no como la anterior vez que lo había perdido todo, sino que esta vez era algo más hondo, algo más oscuro, de tal forma que pensando cuan dolor existía en su corazón, si este existía en su condición de inmortal, se olvidó de todo, hasta de su propia seguridad, cuando una voz irrumpió a su espalda.

Y si, por unos instantes pensó en su príncipe.

Quizás él había regresado a aquel lugar, buscándola, llamándola.

No obstante, antes de que esta se volteara, su aroma le indicó que no se trataba de él.

Ya nunca se trataría de él.
Aidara Dupont
Aidara Dupont
Vampiro Clase Alta
Vampiro Clase Alta

Mensajes : 117
Fecha de inscripción : 30/12/2013
Edad : 32

Volver arriba Ir abajo

Bailando con la muerte [Privado] Empty Re: Bailando con la muerte [Privado]

Mensaje por Naxel Eblan Sáb Jul 09, 2016 1:16 pm

Uno no alcanza la iluminación fantaseando sobre la luz,
sino haciendo consciente la oscuridad,
Lo que no se hace consciente se manifiesta
en nuestras vidas como destino





Aún trataba de discernir por qué había decidido ir a aquel baile de máscaras que se celebraba en el palacio, no era algo típico de mí pero estaba convencido de que quizás algún ser sobrenatural se acercara al baile, camuflándose entre los humanos, intentando parecerse a estos lográndolo a ojos de las demás personas… pero yo no iba a resultar convencido como ellos. Los licántropos eran algo más difíciles de saber que lo eran, aunque llevar plata encima era un remedio bastante eficaz, ya que no lo soportaban… pero los vampiros, desprendían ese aire inmortal, una belleza casi etérea que los delataba al instante. Estaba acostumbrado a ver a vampiros por lo que, si había alguno en la fiesta, lo cazaría.

Solía cazar todo tipo de seres sobrenaturales pero lo que más me interesaba, y a lo que más ansiaba cazar, era a cierta pareja de licántropos que llevaba persiguiendo desde hacía tiempo. La última vez me había metido de lleno, junto a otra cazadora, en la boca del lobo… y nunca mejor dicho. Habíamos caído en una trampa de la cual nos había costado salir airosos y me había dado cuenta, mientras escapábamos, de que tenían a un humano entre ellos, que colaboraba con aquellos asquerosos lobos y que les estaba pasando información.

Tenía ganas de pillar al hijo de puta y darle su merecido, me había estado vigilando sin yo siquiera saberlo y el hecho de pensarlo no hacia otra cosa que hervirme la sangre. Lo pensaba y notaba que el cuerpo se revolucionaba, que me daban ganas de arrancarle la piel a tiras y disfrutar mientras lo torturaba lentamente. Porque era lo que iba a hacer cuando descubriera quién era, y pobre de él, porque no tendría compasión alguna por ello.

Antes de salir hacia la fiesta que se organizaba en palacio cogí de todo un poco para tener una variedad de armas; llevaba las dagas ocultas en mis muslos de plata por si me encontraba con algún licántropo, esta vez la ballesta tendría que dejarla en casa porque sería demasiado sospechoso, y también había cogido un par de estacas de madera por si me cruzaba con algún vampiro, poder arrebatarle su vida de no muerto.

Con aquel pensamiento me dirigí hacia el palacio, no iba vestido para la ocasión porque no llevaba ningún traje, pero parecía más bien que era como un guarda que velaba por la seguridad de todos. Colarme no fue algo muy difícil, y una vez dentro, la gente me miraba pero seguramente pensarían que era un guardia que velaba en la fiesta, porque enseguida seguían a lo suyo… algunos, incluso, no repararon en mí presencia y siguieron con la fiesta.

Me apoyé en una de las columnas y pasé mí vista por toda la pista de baile que se extendía ante mis ojos, viendo como las parejas se afanaban en ir al centro de la estancia y bailar al compás de la música que tocaban al fondo. Reparé en cada rostro intentando ver algún indicio o atisbo de que algún ser sobrenatural pudiera estar en la fiesta… pero no había ninguno. Al menos la sensación que tenía cuando había un licántropo cerca no la sentía, ni la había sentido, desde que estaba allí. Pero sabía que aquella noche no me iría con las manos vacías, que se escondía algún ser entre ellos… y pensaba dar con él. O ella.

El calor que comenzaba a hacer dentro del lugar estaba comenzando a cansarme, suspiré mirando de nuevo hacia la pista de baile y decidí por unos momentos alejarme de allí y tomar un poco el aire. Había visto un balcón donde podría tomar unos minutos el aire fresco de la noche antes de volver dentro y seguir con lo que estaba haciendo. No me lo pensé mucho, me quité de donde estaba apoyado en la columna y bordeé la pista de baile no queriendo meterme entre el medio de las parejas que bailaban… no quería llamar demasiado la atención y, hacerlo de aquella forma, quizás la llamaría demasiado.

Apenas me quedaban un par de pasos para llegar al balcón y, antes de llegar, volví a dar otro vistazo comprobando que todo estaba en su lugar. La gente bailando y al fondo de esta donde charlaban animadamente, mientras la música se oía de fondo. Pensé que no habría nadie en el balcón y cuando fui a salir a él vi la figura de una mujer joven apoyada contra la barandilla. Pensé en quedarme justo en el linde entre el balcón y el salón para ni importunarla, porque tampoco quería entablar conversación con ninguno de los que había allí presentes. Sabía que eran de la alta sociedad, príncipes, princesas… que habían acudido al baile inaugural de la primavera. Y no tenía intención alguna de codearme con ninguno de ellos.

Pero algo en ella me hizo fijarme con más detenimiento, era algo que no se podía ver a simple vista, pero que cuando llevabas cazando tanto tiempo podías notar de forma algo más leve. Su aura, parecía brillar de una forma diferente como si estuviera cubierta por un halo de luz… y supe lo que era. Sonreí de lado, divertido, sin poder evitarlo porque sin siquiera planearlo había encontrado con quizás el único ser sobrenatural que había en aquella fiesta. Una vampira, nada más y nada menos, sola, en un balcón alejada de todo el mundo y de la vista de todos… ¿podía haber algo más fácil? Seguramente no.

Me acerqué de forma despacio sin prisa alguna no queriendo que me escuchara aunque sabía que podía oírme sin ningún tipo de problema, mí respiración y el latir de mí corazón la habrían alertado de que había alguien detrás de ella y sabía que no estaba sola. Oí sus palabras y, no pude evitarlo, estando ya justo detrás de ella que todavía no se había girado. Me reí, me reí de forma sardónica mientras llevaba una de mis manos donde había guardado una de las dagas. Sabía que con aquello no la mataría, pero mí plan inicial no era matarla… era jugar un poco con ella hasta asestarle el golpe de gracia, y clavar la estaca en ese corazón muerto que tenía.



-Mucho menos cuando es un corazón que ya está muerto –me abalancé sobre ella sin darle tiempo a mucho más, la aprisioné contra la barandilla pegando mí cuerpo a su espalda reduciendo sus movimientos, la mano libre cogió su pelo rubio cual rayo de sol y lo tiré hacia atrás, haciendo que su cuello quedara tenso y su cabeza y su boca lejos de mí alcance para que pudiera morderme. La otra mano, con la daga de plata, la dejé en su cuello e hice un pequeño corte para que la sangre comenzara a brotar. No sería mortal, pero sí perdería sangre por ello y era lo que quería y buscaba- Hola, vampirilla. Puedes saludar al diablo que te llevará al Infierno del que procedes –porque era, precisamente, lo que pensaba hacer. En cuanto jugara con ella.
avatar
Naxel Eblan
Cazador Clase Media
Cazador Clase Media

Mensajes : 235
Fecha de inscripción : 28/02/2016

Volver arriba Ir abajo

Bailando con la muerte [Privado] Empty Re: Bailando con la muerte [Privado]

Mensaje por Aidara Dupont Jue Jul 21, 2016 3:43 pm

Es como un aleteo que se filtra en la mente
te agujerea el oído
y pronto llega al corazón,
removiendolo todo.



Pum, Pum, Pum

Pum, Pum, Pum, Pum, Pum, Pum

Cada vez él se encontraba más cerca, más rápido iba su corazón. Aquel pum pum rítmico que anteriormente y a otros muchos inmortales les habría sacado a relucir la sed, por tan liquido vitalicio como lo era la sangre para sus cuerpos muertos, para la que alguna fue alguna vez princesa, le hizo sonsacar media sonrisa al recordarse no hace tanto tiempo a ella como humana, en aquel mismo lugar y en aquel maldito baile. Los recuerdos como mortal era algo que atesoraba más que a nada en su existencia, pues era lo único que quedaba de ella y que al pasar el tiempo mientras ella recordase, no se desvanecería en las lagunas del paso de los años y del tiempo. Y ella en su mente aún podía sentir incluso su propio latido al son del que oía de forma lejana pero que tan cerca de ella estaba; a sus espaldas.

Demasiado absorta en la voz masculina y pensando en aquel príncipe que quedó en los Países Bajos, de donde jamás debería de haber salido, apenas fue consciente de la risa sardónica del cazador y de sus movimientos, no hasta ser tarde y tenerlo entre su cuerpo y la barandilla del balcón. Allí en ese momento se maldijo a si misma interiormente por su falta de cuidado y de aviso ante el peligro. Como siempre se confiaba demasiado o por al contrario se exponía deliberadamente y aunque esta vez ganaba más la segunda opción que la primera para justificar su falta, la frase usada por el cazador también podría haber usado por Violante y eso lo trastocó todo. ¿Cuántas veces él le había hablado de su inerte corazón? ¿Cuántas veces le había mostrado sus inquietudes respecto a aquella vida eterna en la que la había adentrado solo desposarse? Muchísimas veces, infinidades de veces y siempre había terminado siendo ella la que en cierta forma buscara la rendición de ambos, perjurando que si creía y sabía que tenían corazones. Sin embargo, ahora que el sol de su vida se había apagado, ya no perjuraba ni conocía nada. Solo sabía que en lo más hondo de ella deseaba despedirse de este mundo, quizás así su príncipe pudiese volver a ser el que fue con su partida definitiva.

Un grito amortiguado en su garganta fue lo único que profirió cuando sintió las manos del cazador arrinconándola y acto seguido el frio acero del cuchillo cortar su garganta. Hacía tiempo no sentía el dolor de las heridas y pese a ser inmortal, sintió terriblemente la herida. Sus ojos azules se perlaron húmedos y con los labios entreabiertos buscando aire que llevarse a los pulmones, sin importarle que los colmillos pudiesen quedar al descubierto ante aquel hombre que la mantenía sujeta del cabello fuertemente, en silencio clavó sus mirada en la de él. Su mirada destilaba odio y placer, parecía encontrarlo divertido y siseando de dolor cuando el cuchillo rasgó ligeramente más el corte de su garganta y la sangre empezó a empapar su vestido, su sentido de supervivencia afloró y antes de darse por vencida, llevó las manos a las de él que la sujetaban contra su cuerpo y del cabello, y apretando; hincando las uñas en las manos masculinas en cuanto logró que se suavizara el agarre, buscó salirse de la posición en que la mantenía.

¿Quién sois para saber de qué infierno puedo yo proceder? — Preguntó con la voz ronca a causa de la adrenalina que corría bajo su piel. —Lo cazadores siempre os creí que lo sabéis todo, pero no sabéis nada. —Tras aquellas palabras aprovechó y hundiendo sus uñas en una de las manos con fiereza, logró salir del agarre y encarársele.

El gélido aliento de la princesa chocó contra el del cazador y sin perder de vista ni un segundo sus ojos; aquella oscura mirada llena de destellos de odio y diversión. Su espalda chocó contra la barandilla y su pecho quedó atrapado en el duro ajeno, mientras una de sus manos la dirigió a su cuello intentando impedir que la sangre abandonara rápidamente su cuerpo a la espera de que la sanación acelerada la ayudase a sanar el corte antes de que fuera demasiado tarde, lo que por el vestido que ahora lucía rojo indicaba que había hecho tarde y gran cantidad de aquel liquido carmesí ya la había abandonado.

Maldición, —Profirió viendo de reojo la mano libre del cazador. La otra seguía sujeta por la de ella y en aquella era donde lucía el arma con la que la había herido. — ¿Por qué no lo hacéis rápido y me matáis? Quizás me habrías hecho un favor en acabar con esta existencia.

¿Por qué desearía vivir cuando había perdido todo?
Aidara Dupont
Aidara Dupont
Vampiro Clase Alta
Vampiro Clase Alta

Mensajes : 117
Fecha de inscripción : 30/12/2013
Edad : 32

Volver arriba Ir abajo

Bailando con la muerte [Privado] Empty Re: Bailando con la muerte [Privado]

Mensaje por Naxel Eblan Jue Jul 28, 2016 2:28 pm

La trampa del demonio no te hará caer, a menos que ya estés mordiendo el anzuelo del diablo.





En cuanto mí cuerpo se había abalanzado sobre aquel más menudo pude sentir su tensión en el momento mientras la acorralaba y aprisionaba contra la barandilla, cogiendo con una de mis manos su pelo rubio, dorado, aferrándolo en un puño y tirándolo hacia atrás para tensar su cuello y tener su boca a la vista, atento a esos colmillos que poseía y que tenía y de los que debía de llevar cuidado. La otra mano, con la daga de plata en ella, la llevé a su cuello y le hice una pequeña herida queriendo que su sangre comenzara a brotar.

Sabía que aquel corte no sería suficiente para matarla, las habilidades que poseían todos mayormente en común les proporcionaban, para desgracia nuestra, una sanación bastante acelerada que podía complicar las cosas. Por eso, hice un poco más grande la herida notando la sangre bañar mí mano, una sangre más negra de lo normal… parecía como si estuviese coagulada, pero nada más lejos de la realidad, no podía entender como podían seguir con vida aquellos seres, pero pensaba acabar con todo aquel que se cruzara en mí camino.

Había sido un acierto total el haber decidido acudir a aquel baile, pese a que parecía que era un guardia que velaba por la seguridad de los invitados, no era algo nada más lejos de la realidad. No estaba allí por su bienestar aunque la gente pudiera pensar que era precisamente eso lo que hacía al cazar y matar vampiros; no… yo lo hacía por algo mucho más diferente. Eran mí pasamiento, mí diversión… algo que había descubierto a una edad muy temprana y que me había cambiado la vida por completo. Ahora jugaba a cazarlos y me divertía mientras los interrogaba, jugaba con ellos y les infligía dolor solamente por mí placer… porque podía, quería y nadie iba a impedírmelo.

Como le iba a pasar a ella, en cuanto aquella noche terminara –o incluso que de madrugada- acabaría muerta tras horas y horas de haber jugado con ella. Como buen cazador que era me gustaba acechar a mis presas, observarlas, y darles la muerte en el momento oportuno. Estaba claro que, si quería, podía acabar con la vida de ella si así lo deseaba dejando un cadáver de recuerdo para los invitados a tal distinguido baile, pero, ¿era lo que quería? Por supuesto que no. ¿Dónde quedaba entonces la diversión a todo ello? ¿Ver sus caras de dolor mientras yo me divertía? No… no había llegado su hora, aunque aquella noche su sentencia de muerte estaba más que firmada.

Sus ojos se encontraron con los míos, sus ojos azules miraron a mis ojos oscuros como la noche, oscuros como todo lo que yo era y representaba… y aún así no sentí nada cuando nuestras miradas se cruzaron. No era humana, por mucho que su apariencia así lo indicaba realmente estaba muerta en vida. Entonces, ¿por qué no concederle realmente la muerte? Debería de estar muerta, quizás hace mucho tiempo, y no podía permitir que siguiera bajando por el mundo… no sería de buen cazador. La contemplé durante unos segundos sonriendo de lado, tenía una cara angelical que te hacía pensar que no era para nada lo que escondía bajo la máscara, unos labios carnosos y una mirada penetrante… chasqueé la lengua, una verdadera lástima que fuera vampira.

La vampira comenzó a revolverse entre mí agarre haciendo que me riera entre dientes y finalmente comenzó a clavarme las uñas, cada vez con más fuerza, mientras yo aguantaba la presión que estaba ejerciendo sin querer soltar el agarre que estaba haciendo sobre ella. ¿Qué qué iba a saber yo? No me hacía falta saber nada, solamente con saber que era un vampiro era motivo suficiente para querer devolverla de donde había procedido, de donde nunca debió de haber regresado; la muerte.



-Me da exactamente igual de qué infierno procedas, todos venís del mismo infierno, todos habéis escapado de la muerte, ocultándoos tras una máscara mortal cuando deberíais de estar muertos hace mucho tiempo. Me da igual de dónde procedas, de la familia que tengas si es que la tienes, de lo que quieras, incluso de lo que huyas… para vosotros solo hay un camino, y es volver a la muerte de la que habéis conseguido huir. Lo demás no importa y deja de tener relevancia alguna –reí entre dientes- Y vosotros os creéis que podéis ir dejando un rastro de cadáveres tras vuestro paso y que humanos inocentes que no tienen la culpa de nada deben de morir, solamente para alargar vuestra asquerosa existencia durante un día más cuando no deberíais ni de respirar, ni de pasear entre nosotros –la presión que hizo con sus uñas fue mayor e hizo que siseara levemente, pero aún así, no iba a soltarla. Ella aprovechó aquello para soltar la mano con la que sujetaba su pelo y girarse para encararme.

Su espalda chocó contra la barandilla y su pecho se pegó al mío, incluso a través de la ropa pude sentir el helor que desprendía su piel. Sus ojos se clavaron de nuevo en los míos y su gélido aliento se entremezcló con el mío; la muerte en sí misma contra quien profería la muerte. Su mano fue hasta su cuello como intentara parar la hemorragia mientras que la otra seguía con la daga en su cuello, sin apartarla, se había librado del agarre de una pero no se libraría de la otra. La mano libre la llevé a su muñeca, la que cubría con la mano la herida del cuello, y la aparté haciendo que quedara en su espalda, agarrándola con fuerza. Me reí entre dientes cuando me dijo que lo hiciera, que no esperara más. No, no era el momento.



-¿Tan rápido quieres morir, vampirilla? ¿Y dónde queda mí diversión si lo hago ahora, exactamente?
–Sonreí ladino- No, no no… aún nos queda mucha noche por delante, el sol todavía va a tardar muchas horas para que salga por el horizonte y la noche no ha hecho más que empezar. Soy un cazador, un depredador en potencia que le gusta jugar con sus presas, y por desgracia, tú has sido la de esta noche. Matarte sería tan aburrido que no merece la pena siquiera el pensarlo –reí de forma sarcástica, observándola- ¿Por qué concederte ya la muerte, cuando puedo divertirme contigo? Ahora que sé que quieres morir esta tardará todavía en llegarte, no –me pegué más a ella, dejando su espacio de movilidad mucho más reducida, aprisionada completamente contra la barandilla y mí cuerpo- El diablo no tiene por costumbre conceder tanta compasión, y yo soy un diablo muy malo –prueba de ello solté la muñeca que tenía presa, saqué otra de las dagas que tenía en la funda guardada y con fuerza puse su muñeca en la barandilla y… clavé la daga justo en el centro de la palma, para luego coger su pelo de nuevo y tirarlo hacia atrás. Quería asegurarme de que sus colmillos quedaban lejos de mí cuello, si me cogía, podía matarme con relativa facilidad y no era lo que quería- Bien, qué empiece el baile –sonreí ladino, divertido con la situación, aunque sabía que allí no podía hacer nada. Debía de pensar algo, y rápido, para llevármela de allí y… puede que tuviera una idea. Sonreí, iba a ser un completo hijo de puta con aquello.
avatar
Naxel Eblan
Cazador Clase Media
Cazador Clase Media

Mensajes : 235
Fecha de inscripción : 28/02/2016

Volver arriba Ir abajo

Bailando con la muerte [Privado] Empty Re: Bailando con la muerte [Privado]

Mensaje por Contenido patrocinado


Contenido patrocinado


Volver arriba Ir abajo

Volver arriba

- Temas similares

 
Permisos de este foro:
No puedes responder a temas en este foro.