Como si fuese un poema hecho realidad[Anuar]

El agua comienza a caer con cierta lentitud, formando pequeños charcos por el camino, tuve que detenerme en algún sitio para evitar mojarme. Llovia ahora con fuerza y hacia frío, todo paso tan de repente, no lo vi venir, mis ropas estaban aún más frías que mi propia piel, lo note al tocar mis brazos, aunque temblaba no me importaba mucho, la mayoria de las personas de aquel café, decidian tomar algo caliente.
Yo estaba en una mesa cercana a la ventana, donde podia observar los truenos y a la gente corriendo de un lado a otro, alguno de los jóvenes que atendia clavo su mirada en mi, aunque no lo vi directamente pude darme cuenta, la mirada tiene cierta fuerza, entonces decidio acercarse y preguntar si deseaba alguna cosa, aún estaba temblando pero mi rostro no se notaba preocupante, quiso ofrecerme algo para cubrirme más no acepte y agradeci la buena atensión que estaba brindando, ya cuando se iba, note en su rostro alguna especie de desepción, asi que decidi pedir un café y le sonrei.
No comprendere por que lo hice, simplemente me nacio hacerlo aunque la idea de tomar algo no era mi prioridad ahora, solo estaba esperando que escampara y asi poder seguir mi camino.
En otras circunstancias caminaria sin problemas debajo de la lluvia, pero ya habia pasado por eso y al siguiente día sentia que algo andaba mal conmigo, tuve que preparar algunas hiervas medicinales y tomarla, su sabor era grotesco pero funcionaba, al menos mi madre me habia enseñado bien.
Voltee a la puerta del lugar viendo como las personas entraban, alguien estaba en la de pie en la puerta viendo caer el agua y a la gente pasar, me pregunte si esperaba a alguien o quizás maldecia en silencio al tiempo.
Pasaban los minutos y aún seguia alli, la taza sobre la mesa estaba aún intacta, solo habia tomado un sorbo cuando la trajeron, ahora ya debia estar fría, volvi la vista a las calles notando que ya solo quedaba un pequeña llovizna, me levante dejando sobre la mesa el dinero del café y una propina, camine a la salida y aquel que estaba alli parado desde que entre me tomo por el brazo y se me quedo mirando fijamente, pude persibir sus intensiones, me llevo a la parte de atrás del café, lo empuje ya en ese lugar, y comence a jugar con su mente, ahora todo estaba negro, rodeado de criaturas, arañas, pájaros asesinos, todos se volvian contra él, comenzaban a picarlo, él solo gritaba y yo observaba sin reaccionar, sin sonreir, entonces cuando uno de aquellos pájaros negros clavaba su pico en su ojo, se escucho el último suspiro de aquel mugriento hombre, cuyas intensiones para conmigo no eran las mejores, entonces aquella ilusión desaparecio, ahora lo veia en el suelo, angustiado quizás, le habia dado un ataque al corazón y dos personas nos vieron, no la pesadilla sino la realidad, gritaron: -Bruja!!!- llamaron a todos los que estuvieran cerca y comenzaron a correr hacia mi, por inercia corri sin mirar atrás, comenzaron a caer lágrimas de mi rostro y tropece con alguien...pero ya habia perdido de vista a aquellos humanos que no dudarian en acabar con mi vida.
-Disculpe usted- dije al levantarme

Habia decidido a caminar después de regresar del largo viaje que le habia dejado tantas dudas y tantas otras respuestas que rondaban por su cabeza como un vorágine de sentimientos, pensamientos e ilusiones encontradas empujándolo a un abismo que se habia abstenido de caer su vida entera pues sabia que después de la caída algunas cosas se rompían y era imposible pegarlas nuevamente en su lugar su ser algo parchado, deforme y agrietado terminaría con una laceración que le dejaría a la mitad ¿y si se perdia? Quedaría entonces siempre con aquella falta.

Suspiro taciturnamente andando sobre el empedrado escuchando aquel clap-clap bajo sus pies producto de sus zapatos porque no importaba cuales fueran siempre escuchaba aquel sonido que le recordaba tantos a los ausentes aplausos de la vida.

Comenzó entonces a llover alzo el rostro al cielo sintiendo las gotas de agua golpearle con suavidad, la lluvia no tardo en cerniéndose sobre su cuerpo pegándole el cabello al cráneo y la ropa al cuerpo aquel delgado y casi famélico mas también delineado, no por el esfuerzo sino por simple fisonomía.

Siguio andando mojando el dobladillo de sus pantalones con los charcos que se habían formado en el suelo, humedeciendo también los zapatos y las calcetas dejando que las gotas que caian del suelo golpearan su cuerpo porque a diferencia de las demás personas el se quedo andando como si nada ocurriese, el resto corria entorno a el y el mundo pareció entonces alentarse, la gente iba con una lentitud sorprendente y el podia verlos con claridad, el hombre que estornudaba por las alegrías, la mujer que se cuidaba el maquillaje.

Una mata de rubios cabellos golpeando su cuerpo de frente, retrocedió un paso observando a la causante de aquel golpe, observo la desesperación en su rostro y miro por encima de su hombro por si algun hombre le seguía aunque no logro percibir nada –no te disculpes- le pidió con tranquilidad quitándose el flequillo de la frente.
-¿ocurre algo?- le cuestiono entonces no comprendiendo la actitud de psicosis y esquizofrenia de la mujer que el azar habia hecho estamparse con el no sabia si verlo como un bien o un perjurio.

Me incorpore entonces mientras miraba sus ojos y sus palabras llegaban a mis oidos- no esta de más hacerlo- asegure, a pesar de mi vida tan miserable al principio, mi educación estaba muy por encima de cualquier cosa, suspire pues habia corrido demasiado, no esperaba tener que enfrentarme con aquellos que ya me habian tachado de bruja cuando ni levante un dedo contra aquel sujeto, ahora solo se escuchaban mis carcajadas, como si hubiese jugado algo divertido.
-No, no ocurre nada- me lo pense si decia la verdad quizás ni me creeria, quizás si, de igual manera no me afecta en absoluto- bueno...mmm...un hombre intento propasarse conmigo pero de repente le dio un ataque al corazón, estaba pálido, como si no pudiera respirar, algunas personas me vieron a su lado y comenzaron a gritarme como si fuese culpable de ello- puse cara seria- no lo se, me llamaron bruja, creo que fue lo único agradable que escuche de ellos, deberian comprender que el destino mismo se encargo de apagar la vida de alguien tan repugnante como ese, deberian agradecer su inexistencia, yo simplemente di el primer paso, que él no sea capaz de enfrentar sus miedos no me hace culpable- baje la cabeza y revise mis ropas, estaban aún frías y un poco sucias cuando aquel se atrevio a tocarlas.
-Disculpe si hablo demasiado o uso un vocabulario poco agradable para usted, suelo expresar lo que digo sin tabúes, no puedo evitar ser sincera ante ciertos aspectos, soy mala mentirosa además

Una de sus cejas comenzó a arquearse conforme el relato transcurría intentaba comprender lo que decía pero no tenia sentido, no lo tenia contarle todo aquello a un desconocido asi como tampoco lo tenia quedarse a escuchar peor venia siendo comenzaba a darse cuenta y ya en antaño lo hacia que las cosas sin sentido eran los bienes mas preciados, si, cierto era.

-¿el primer paso?- cuestiono entonces con tranquilidad al parecer ella habia hecho algo para propiciar aquel ataque y quizá muerte porque habia veces en que las personas se salvaban por mera casualidad, que la vida parecía otorgarles una segunda oportunidad que poco sabían aprovechar se imaginaba ya al hombre pasando cada noche en el burdel porque la vida le habia dado la oportunidad de disfrutar, sonrio de medio lado ironizado por sus pensamientos.

-ni una ni otra son motivos de pedir disculpas aunque me sorprende que le cuente todo eso a un extraño- le indico asintiendo comenzando a andar con tranquilidad mirando por encima de su hombro para observarla -¿viene? Quizás quiera alejarse de este sitio- asevero sonriente porque seguramente no pretendía quedarse a ver cuando lograban alcanzarla, que ilógico seria aquello.

Sus cabellos húmedos y su ropa adherida al cuerpo le impedían no sentir frio, con la fresca brisa que incitaba al invierno a entrar ya comenzaba a retardarse la temporada comenzaban ya a esperar la víspera de los días festivos, suspiro porque años atrás habia observado solo como las demás personas se reunian con sus seres queridos a cenar y compartir el, negó alejando tales y cuales pensamientos -¿Cómo se llama por cierto? Creo que después de decirme tanto su nombre nos era mayor inconveniente-