Echoes (Ciara Conti) Priv

por **Orpheus Leahy** Miér Nov 22, 2017 5:52 pm

Hacía mucho, mucho, pero que mucho tiempo que el policía no estaba atento a sus quehaceres de policía. Tanto perseguir gitanos y vagabundos se le había olvidado la importancia de que otras personas también tenían que ser protegidas, como los ricachones en sus típicas fiestas de lujo en los que siempre estaban riendo y sujetando siempre una copa de champan en la mano a la vez que se pavoneaban alrededor de mesas con canapés y pistas de baile.

En esa noche, en la mansión Conti se organizó una fiesta a nombre de Isserielle Conti, un familiar que al parecer había vuelto a emergiese de lleno en el apellido Conti por lo que la anfitriona prefirió hacer una fiesta aunque fuera solamente una excusa para hacer una fiesta de muchas y evidentemente, parte del cuerpo policial había sido reclutado en los alrededores de la mansión debido a que anteriores noches ha habido saqueos, robos, asesinatos….y los Conti preferían tenerlo todo bajo control mientras pasaban una deliciosa velada a la luz de la luna.

- Oficial Leahy – Uno de los policías se acercó hasta Boyd para explicarle que llevaría un pelotón pequeño a su mando, Leahy estaba contento y tras entender las ordenes de su superior Leahy mando a vigilar puntos estratégicos en los que cualquier persona podría colarse de manera descabellada. Por ello, mientras el tiempo pasaba, Leahy paseaba de aquí para allá, veía a las muchachas vestidas de gala, a los hombres saludándole y mostrándole el respeto que se le da a un hombre de la ley, puso muecas al ver a críos corretear pero Boyd siguió su ruta de vigilancia.

Al parecer todo estaba demasiado tranquilo y eso le molestaba a Boyd en demasía.

Caminaba como horas antes hasta que pareció encontrarse a quien era la anfitriona. Se la quedó mirando en la distancia, esbelta, rubia, mirada atractiva y tajante, ojos marrones que se profundizaban en un inmenso silencio. Boyd se quedó observándola de lejos, se le escapo un suspiro y para poder disimular hizo como que estaba paseando y haciendo vigilancia por ese trozo del exterior.

- Buenas noches, Srta Conti – Dijo con una sonrisa seca pero efectiva - ¿Algún problema? – Preguntándose en si estaba en problemas, prefería que estuviera en el interior de la mansión en donde podría estar posiblemente mucho más segura que en el exterior a la sorpresa de algún disparo a la lejanía o cualquier otra cosa que pudiera hacer daño a la Srta. Conti.