Si me dejaras, cantaría solo por ti -[Kenner Clapton]

por **Enma D'Anvers** Mar Abr 24, 2018 7:06 pm

Se mi lasci, canterò solo per te

Aun no podía creer que todo el sufrimiento había quedado atrás, Que aquellos años de infierno habían desaparecido y que sus cadenas, - aquellas que la habían atado a un ser tan despreciable como el inmortal que la sometiera a una esclavitud forzada - habían sido rotas por el único ser que para ella era mas importante que su propia vida.

A pesar que sus tormentos, fueron causados por enemigos de su libertador, y que en cierta forma él era responsable de todo el infierno que soportara, para ella, Kenner, siempre sería su único amo. Por él, por su bienestar, había guardado silencio, bajado la cabeza y aceptado los castigos, las torturas, pues no podía existir en su cabeza, peor tormento, peor infierno, que vivir en un mundo en el que su amado amo ya no existiera.

Pensando en todo aquello, en la hermosa residencia que su querido vampiro le había obsequiado, en las interminables horas de alegría, que podría disfrutar, cada vez que él decidiera tomar de su sangre, para luego alimentarla, pasó la mañana, recorriendo los jardines, de París, realizando algunas compras, para terminar a las puertas de la Opera. Un recuerdo llegó a su memoria, la noche en que le conoció, en otra Opera, mas antigua, mas sublime, pero tan mágica como ésta. Allí, en el escenario de la Scala de Milán, ella cantaba la pieza mas sublime de la obra, el canto de un amor trágico, que entregaba su vida, en pos de un hombre al que amaba. Recordó, los ojos del vampiro clavados en su rostro, la gran atención que le dedicó, como si en aquella sala, solo estuvieran ellos dos, y que el juramento de amor y lealtad eterna, fueran hechos por ella, para Kenner. - Tal vez fue así - caviló, - pues él, es al único ser que canté y por quien deseo seguir cantando - susurró, Levantando su vista para contemplar la magnificencia de la construcción.

Pensando en el deseo de volver a cantar, en retornar a los escenarios, se encaminó hasta la casilla donde vendían los Boletos. Compró dos, y sonrió pensando en el momento en que le preguntaría a su amo, si le permitiría volver a cantar para él. Apretó el boleto con su mano en el pecho, - Hoy, solo entraré a disfrutar de la música... mañana... he de preguntarle - su voz sonó algo insegura, pus había pasado muchos años siendo torturada, y temía a casi todo, e especial a que su amo le reprendiera. Su mirada buscó el horizonte, en el que el sol ya se escondía, - Caro mio, mi manchi tanto, ¿verrai da me, stasera?- dijo contemplando el firmamento, deseaba verle, hacía días que no pasaban tiempo juntos y el extrañaba, tanto que su cuerpo dolía.

BY ORIANI~

SAVAGE-THEMES & THE CLOSETTO

por **Kenner Clapton** Mar Abr 24, 2018 8:26 pm

El vampiro en ese momento se encontraba sobre el tejado de la opera observando tranquilamente a su esclava de sangre la cual había libertado de las garras de otro vampiro que se atrevía a poner sus garras sobre es hermosa y delicada piel que le mismo había convertido en para si el día en que la esclavizo a su voluntad. Pero aunque lo hiciera era divertido verla vivir como si nada de aquello realmente la afectara, este había estado algo algo alejado de la joven durante un tiempo, lo que había generado en ella seguramente abstinencia y la necesidad de verlo. El inmortal era conocedor de los tiempos que podía mantenerla alejada de su sangre sin empezar a que ella comenzara a sentir los síntomas mas graves de la necesidad de consumir su sangre, por lo tanto ya estaba llegando ese momento debía acudir a ella para saciar su necesidad de su sangre.

Minutos después el se dejo caer del tejado cuando nadie andaba mirando asegurándose de eso justamente, solamente un niño le vio que quedo sorprendido y a la vez curioso, este se acomodo sus elegantes ropas y con el bastón marco un ritmo al llegar al lado de la joven.

-Volesti vedermi ??

Menciono extendiendo su brazo derecho para que ella se tomara de este y ambos emprendieran la caminata hacia la entrada de la opera, era conocido para ambos el gusto de la música de la joven y como Kenner se dejaba querer por ese tipo de gustos tantos musicales como artísticos siempre había tenido un gusto especial por estos, Ken al pasar por el costado del joven que lo había visto hizo destellar sus ojos haciendo que le niño se meara al ver sus colmillos también y el regreso como si nada a prestarle atención a la joven que le acompañaba luego de a ver cruzado el marco del edificio, para poder observarlo tranquilamente.

por **Enma D'Anvers** Mar Jun 05, 2018 5:36 pm

La voz del Vampiro, seductora, aterciopelada, llegó a sus oídos, como una caricia interminablemente añorada. Aun mantenía su cabeza levemente inclinada al cielo, cerró sus ojos, temiendo que todo fuese producto de su imaginación, de la necesidad de estar a su lado, de beber su sangre, de ser una con él. Inspiró profundamente, - Ho certamente bisogno di te fino alla follia ... ¿ne dubiti?- dijo, afirmando que casi había perdido la razón, preguntando si aún lo podía dudar. Sonrió mientras se giraba, buscándole con desespero. Sus ojos se clavaron en los purpureos ojos del inmortal - Mio amato ... il mio eterno demone ... la mia condiscendenza dolce e insopportabile - Pensó, mientras se acercaba para apoyar su mano en el brazo de aquel hombre. Su mirada, recorrió el cuerpo del inmortal, con la lentitud de una caricia provocativa. - Mi amo... cuan agradable, es poder volver a verte... que me concedas un poco de tu tiempo... ¿comenzabas a extrañarme? - dijo, sabiendo en el fondo, que solo ella, le necesitaba imperiosamente, ya que él, siempre había sido un ser independiente, despojado de cualquier sentimiento romántico, - So che non mi ami, ma darei la mia vita, la mia morte, perché è così ... anche se mi amavi, solo per una notte - caviló, mientras recorrían el trayecto que los separaba de la puerta principal. Sonrió, al hacerse una promesa, disfrutaría esa noche, como si en realidad fueran una pareja de amantes que se adoraban, no importaba que él no lo hiciera, ella le amaría, hasta que su corazón dejara de latir, o hasta que decidiera dejarlo, pues estaba segura que si alguna vez tan solo, intentaba hacerlo, él la mataría, bien sabía que Kenner era un hombre posesivo.

Pensando en todo aquello, no prestó atención a lo que estaba pasando a su lado, hasta que llevó su mirada al rostro de su amo, y la mirada de éste se encontraba clavada en un pobre crío que devolvía la mirada, con el terror pintado en el rostro, - amore, por ésta noche, permiteme que solo sea mi ser, quien llame tu atención - dijo con un dejo de celos, - Guardami, stringimi, prendimi ...- pensó, al dejar caer aquellas palabras en la que le rogaba que fuese solo de ella, por lo menos esa noche.

por **Kenner Clapton** Miér Jun 06, 2018 7:53 am

El inmortal escucho lo que la joven menciono, estaba al parecer motivada para hablar en su lengua natal, esa lengua en la que se conocieron hace tiempo atrás, cuando Ken aun permanecía haciendo viajes por Europa simplemente por que se encontraba aburrido o algunos negocios que tenia pendiente por el continente e incluso fuera del mismo le llevaron a realizar viajes mas largos, el observando a su esclava sonrio levemente con su ultimo pedido mientras la llevaba del brazo al interior del local.

-Una piccola domanda di controllo, niente di più caro per me

Dijo tranquilamente deteniéndose en la taquillera solicitando dos asientos, mas bien viniendo a buscar dos asientos que el ya había comprado, en una de las cabinas que eran mas caras del lugar para poder ver la obra sin ningún problema y desde lugares cómodos para disfrutar de la vista tranquilamente, luego de que el hombre entregara los tickets para que ambos pudieran entrar, pasando de la guardia del local para luego subir las escaleras correspondientes recorriendo aquellos pasillos hasta su cabina este abrio la puerta dejando a la joven entrar primero, al costado de los asientos una botellas de vino solicitadas por el vampiro para el disfrute de ambos.

-così ti ricordi il giorno in cui ci siamo incontrati

Menciono mientras le señalaba el nombre de la obra, era la misma que ella hacia años hubiera interpretado y de un balcón como este el vampiro había decidido que ella seria suya y le pertenecería a partir de ese momento, este tuvo que hacer unas artimañas pero finalmente logro encantarla, retiro de los hombros de la joven su abrigo dejándolo colgado mientras ella tomaba asiento, este se movió rápidamente hacia detrás de la joven acariciando sus hombros suavemente mientras veían, como todo se oscurecía para dejar inicio a la obra que muchas personas habían venido a ver nuevamente, ya que era un gran éxito antiguo que cada cierto tiempo distintos actores y maestros de obra adaptaban.

por **Enma D'Anvers** Jue Jul 05, 2018 9:15 pm

Donna, amaba que él le respondiera en su lengua, ya que era algo poco usual en Ken, y por ende lógico, si uno comprendía que se trataba de un ser milenario, que había vivido lo que cien personas no podrían vivir. Por eso la italiana, se sintió sumamente complacida, dejando que una enorme sonrisa surcara su rostro, que no dejaba de mostrarse seductor y endiabladamente bello.

Su mirada se detuvo en el rostro de aquel ser que lograba dominar a los humanos con un gesto, una palabra, o con dolor, porque como se podía mostrar, tan civilizado, correcto y galante. Cuando el demonio se despertaba en el interior de aquel ser, nada podría salvar al incauto que se pusiera en su camino. La mirada de la italiana, se hizo as aguda, mientras intentaba recodar alguna vez en que le hubiera visto perder los estribos, la compostura, pero jamás lo había descubierto. Aunque por supuesto, que se había enterado de la desaparición, muerte o mutilación, de mas de un incauto que había intentado embaucar al milenario.

Era peligroso, pero Donna, también amaba eso, pues en aquella característica residía el poder y la fuerza de su amo. En los años que se había mantenido alejada del inmortal, había cavilado a menudo en dicho peligro, mas nada lograba perturbarla lo suficiente como para alejarla de él. Ademas, ¿que esclava lograría soportar los momentos en que ya no pudiera resistir la falta de su droga? Ademas, la presencia del vampiro, le entregaba no solo una felicidad indescriptible, sino que podía sentir el manto de protección con que él la cuidaba.

Tras comprar los boletos, se dirigieron al palco, y allí, tras sentarse, esperaron a que las luces se apagaran y el espectáculo comenzara. Él le preguntó si recordaba que la pieza elegida para disfrutar aquella noche, era la misma que interpretara - Donna - No hacía muchos años atrás, la noche en que se habían conocido. La Italiana sonrió complacida - Amore mio - dijo, llevando sus delicados y largos dedos finos, enfundados en guantes de seda blanca que cubrían sus brazos hasta por arriba del codo , a su cuello y acariciando la fría mano del vampiro. - Claro que recuerdo, ¿como podría olvidar la noche en que el destino te trajo a mi vida? -.

por **Kenner Clapton** Vie Jul 06, 2018 5:46 pm

El inmortal se mantuvo inalterable todo el momento llevaba en su mano derecha el bastón como siempre el cual dejo a un lado cuando tomo asiento, sintiendo las manos de la joven que si bien estaban protegidas con una fina tela, no molestaban al vampiro que era muy capaz de recordar el tacto de la piel de la mortal, que no era mas que una de sus codiciadas esclavas de sangre, una bella italiana que se había ganado la atención del inmortal por su facilidad para interpretar que habían dejado encantado al vampiro que decidió hacerla suya en mas de un aspecto, como cuerpo alma y mente ya que la adicción le hacia desearlo y querer estar para el, pero no solo eso sino ademas el se había apropiado del alma y corazón de la joven haciendo que estuviera siempre dispuesta a lo que fuera, disfruto de las caricia de ella mientras la obra comenzaba, observando de reojo a la mujer escuchando sus palabras.

Aquella noche en Italia era Kenner uno de los invitados mas importantes para ver la obra, llamado por el mismo dueño de la compaña queriendo que fuera uno de los privilegiados en disfrutar de la pieza desde las posiciones mas cómodas y elegantes, esa noche misma el pondría sus inmortales ojos en una joven muchacha, que estaría dando su mejor esfuerzo para impresionar a los invitados de sus jefes, el en cambio elevo la ceja y miro de forma tranquila aquel espetaculo donde ambos se reunirían para conocerse y desde ahí la vida cambiaría para la simple mortal, disfruto de aquello de forma tranquilamente y le encanto verla actuar se lo hizo saber durante la reunión luego de la obra.

-Señorita usted tuvo una excelente performance.

Tomo su mano para besarla de forma elegante, con una leve sonrisa conquistadora.

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