Charlotte Pandora Brash

Nombre del Personaje: Charlotte Pandora Brash

Edad: 21

Especie: Cambiaformas

Tipo y Nivel Social: Clase Media

Lugar de Origen: Escocia.

Poderes: Gran agilidad y habilidad de camuflaje. Pero poca fuerza y resistencia en una lucha cuerpo a cuerpo

Descripcion Fisica:

Humana:

Gata Negra:

Pantera:

Descripcion Psicologica: En alguna parte de su vida fue una niña y después joven feliz, que amaba la vida que llevaba y sabía desenvolverse entre la sociedad que su familia y títulos le brindaban. Extrovertida, alegre y muy jovial, Charlotte era el orgullo de sus padres. Una jovencita completamente educada y para su edad bastante madura aunque eso a veces fuese más un dolor de cabeza que una bendición. De carácter firme y llevada por sus propias ideas, solía tener fuertes discusiones con su padre sobre los problemas sociales y de época de los que generalmente salía victoriosa. Soñaba despierta con que algún día su Príncipe Azul llegaría en el caballo blanco, justo como en las historias de amor que tantas veces había leído. Creía en el amor, en la libertad y en la bondad de las personas hasta un día en que todos y cada uno de esos sueños y pensamientos se hicieron trizas, dando paso a una mujer totalmente diferente. Fría, cínica, llena de amargura y odio que cerró su corazón a todo sentimiento y persona que quisiera acercarse. Alguien que disfrutaba haciendo daño, manipulando y engañando, alguien que no se detenía ante nada y nadie por conseguir su objetivo.

Historia: Se dice que las mujeres eran arrastradas a la mala vida por muchas razones, pobreza sobre todo y la falta de una dote que les daba la oportunidad de un esposo con alguna posición social y algo de reconocimiento. Pero esta vez no fue así, siempre cada regla tiene su excepción.

Charlotte nació en el seno de una familia de clase alta, su padre el Conde Brash, era un hombre ampliamente conocido que por encima de todas las cosas amaba a su hija y ella a él, hasta un día.

Educada en las mejores costumbres, como una verdadera dama, a los 17 años Charlotte fue presentada en la corte y a la sociedad. El objetivo era simple, conseguirle un buen esposo, de mucho dinero, título, era el futuro perfecto que cada padre deseaba para su hija y ella en particular tenía muchas opciones para escoger. Era un joven hermosa, apenas floreciendo a la vida, inocente y cándida que creía en el amor verdadero y que aún no imaginaba nada de la crueldad de ese mundo, una presa demasiado fácil.

Así fue como conoció a Henry, un jovencito de su edad que servía como paje en la corte del Rey y del cual Charlotte se enamoró, hasta el punto en que amenazó a sus padres con huir cuando le prohibieron verlo porque no era adecuado para ella y estos decidieron poner punto final al asunto. Una semana después Charlotte era vendida literalmente en compromiso a un Conde, pariente cercano del Rey quien era el excelente partido para que el Conde Brash pudiese acceder a más poder y dinero del que ya tenía.

Entonces Charlotte comprendió que el amor de sus padres también tenía un límite, cuando de dinero y poder se trataba. La vendieron como una pieza más y fue entregada a un hombre que la superaba al menos tres veces en edad y que era conocido por su carácter y brutalidad. Ese matrimonio selló el destino de Charlotte quien sufrió no solamente los maltratos de su esposo, sino también la crueldad de este cuando de exigirle herederos se trataba.

Muchas veces pensó en terminar con su propia vida pero no, su manera de pensar y su carácter no se lo permitieron y fuera de eso creció como mujer, desafiante y rebelde, aprendiendo a enfrentar la crueldad de su esposo y a rendirlo a su antojo hasta que un día decidió que ya no más. Y en una de las tantas noches en que llegó ebrio, aprovechó para seducirlo y de paso envenenarlo. Nadie dudaría de su palabra y efecto, su actuación a la mañana siguiente fue tan convincente que no dudaron de que su dolor por la pérdida era auténtico. No obstante, en ese momento sintió que algo había cambiado en ella, una especie de instinto animal se había apoderado de su autocontrol, sus movimientos habían sido mucho más audaces. No pudo evitar compararse con el instinto depredador de sus gatos, elegante y mortal para después darse cuenta de lo que le pasaba. Era conocedora de todos los rumores que circundaban por los alrededores, monstruos chupasangres, humanos que se convertían en lobos a la luna llena y una última raza, humanos que se convertían en animales a voluntad propia. Después del homicidio de su marido, ya en sus aposentos, sentía como ese instinto animal seguía a flor de piel, notaba como si quisiera podía transformarse en algo más, algo poderoso... y así se vio de repente despojada de sus ropas, viendo en el reflejo delante de ella a una hermosa y elegante pantera negra.

Así quedó sola, joven, viuda, con un título y gran fortuna por lo que anunció que comenzaría un viaje por todo el mundo queriendo descubrirse a sí misma hasta que llegó a París. No quería llamar la atención de su paradero por lo que a pesar de su fortuna quiso vivir una vida humilde, siendo una muchacha más de Clase Media, disfrutando de su vida y su juventud como hasta ahora no había podido, manejando a los hombres a su antojo a sabiendas de su efecto y poder sobre ellos sin remordimiento alguno puesto que era ahora cuando empezaba su verdadera vida desde cero.

Datos Extras: Le apasionan los gatos, tiene varios en su hogar.