Compras en el arbol de la vida

por **Ysabeau G. Clairmont** Sáb Jun 04, 2011 10:56 am

Tarareaba una alegre tonadilla en voz baja de camino al
herbolario, intentaba no concentrarse en sentir las emociones ajenas de las
escasas personas que paseaban a aquella hora tardía. Rozaba ya el límite del
horario de tarde de los negocios de la zona pero sabía que aun contaba con un
buen rato para L’abre de vie cerrara. El vestido purpura arrastraba un poco por detrás de sí, adoraba el roce de la seda con su cuerpo, aquella tarde llevaba el liso pelo suelto, así
que caía en cascada por su espalda una flor hecha de plata y oro, tesoro
familiar, adornaba su cabeza.

Se detuvo un momento contemplando el exterior de la tienda. Desde fuera ya se veía muy
prometedora, desde que reventara después de una poción fallida su ático había perdido
todo su herbolario personal y debía comprar fuera, según Anne-Marie este era el
mejor lugar para comprar hierbas y demás componentes brujeriles.

Al abrir la puerta la humedad y el olor a tierra del ambiente
la golpeo de pleno, era muy agradable sentir aquellos olores que tantos
recuerdos despertaban, la bruja echó una rápida mirada de reconocimiento al
interior de la tienda con una sonrisa hermosa, desde luego aquel sitio estaba
bien surtido y eso era de reconocer.

-¿Buenas tardes? –su tono era distraído, aun contemplaba las
plantas.

Sin duda Anne-Marie no se equivocaba, aquel lugar era
regentado por un brujo. Se adentro un
poco mas en la tienda acercándose a un arbusto con bayas. Se inclino mirando
mas de cerca, el género era de buena calidad, aquel hombre debía esforzarse
mucho por su tienda.

La bruja se quedo ensimismada contemplando aquel arbusto
tarareando su tonadilla.

por Invitado Lun Jun 06, 2011 9:03 am

-Sobre el techo de mi tienda, el atardecer siempre es agradable-me digo para mi mismo viendo como el sol comienza a despedirse de todos, con esa calidez tan pura-Parece que alguien se acerca-volteo hacia abajo y puedo ver a una hermosa joven en vestido morado, entrando a la tienda.

Camino con calma por la terraza del lugar y, asegurándome que nadie este volteando hacia arriba, me arrojo al suelo para, justo antes de tocarlo, caer lentamente sin lastimarme.

-El hechizo a mis zapatos funciona, podría haberse puesto feo si no lo hiciera-me digo sonriendo mientras me dirijo a la puerta de atrás, entre los arboles grandes que tengo en el patio.

Entro en silencio, aprovecho para acomodarme mi traje gris y asegúrame que mi corbata y camisa blanca se vean bien. A veces creo que soy muy superficial en la forma que visto, pero si gano dinero con este lugar, tengo que gastarlo.

Camino hacia la señorita y, para ser sincero, le hecho la observo de pies a cabeza y, aunque este de espaldas a mi, es muy atractiva. Sonrío ante mis propios pensamientos y trato de quitarlos de mi antes de hablarle. Aunque claro, ya me di cuenta que es humana al sentir sus emociones con mi empatía.

-Buenas tardes-le digo al observarla de espaldas y darme cuenta de su bello cabello negro suelto- ¿En que le puedo servir?

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Re: Compras en el arbol de la vida