Encuentro con una mujer encubierta[Adda Vinográdova]

por **Bernard Boneau** Dom Jul 31, 2011 10:17 am

Bonita y serena noche, perfecta para un paseo, un paseo para variar, cambiar el ambiente de luchas y riñas me había llevado hasta ahora, el plan era muy bueno, pero, ¿dónde ir?, allí estaba el dilema, la ciudad de París como era hoy en día me desagradaba a sobre manera, vamos, antes el comercio estaba controlado, las luces estaban bien distribuidas, ahora................................., la noche ah perdido su magia, solo escuchas voces que interrumpen la tranquilidad, luces por doquier que te nublan la visión sobre todo en mi estado en que todo se veía más claro y preciso. La luna y las estrellas ya no se podían observar a complejidad como antes, algunas casonas e edificios altos impedían apreciarlas, todo había cambiado mucho desde mi exilio y cambiado para mal desde mi punto de vista, por suerte lo único que me alegraba era mi fiel corsel el cual siempre estaba allí cuando yo lo necesitaba, luego de la desaparición de quien una vez fue mi mujer, solo me quedaba el ".

Salí al sur de París, era raro, había algo nuevo por allí, algo que no había visto antes, un lugar, un hermoso y colorido lugar, un jardín de plantas, con todo tipo de aromas maravillosos que deleitaban a la lejanía mi olfato, sin dudarlo allí pasaría unas horas esta noche.

-Avancé lentamente entre la gente-, siempre había algún maleducado que se la daba de apurado y le gustaba chocar contra uno, lo malo era que sus hombros sentían una pared al toparse contra mi, -continué entre los fastidios-, estaba muy rodeado de gente la verdad, -hasta que por fin pude entrar suspirando del fastidio que sentía- cada vez era más incomoda la ciudad, al menos para mi. -me abrí paso entre la gente que yacía dentro observando las plantas y sus diferentes tonalidades de color, todas muy hermosas pensé, me acerque a unos girasoles los cuales estaban obviamente cerrados por la falta de luz solar, era una pena, recordaba mientras las miraba lo hermosos que eran abiertas, no pretendía abrirlas a la fuerza las dañaría-

!Qué pena¡, -exclame apartando las manos de ellas, pero de pronto note una presencia muy extraña-, extraña no, más bien, era especial,, -me fui acercando lentamente hasta que me tope con una mujer- rubia un cuerpo espectacular, piernas largas y bonito rostro, esta estaba sentada frente a unos arbustos observándolos, me causo curiosidad un poco así que decidí acercarme.

-Buenas noches Mademosielle, -sonreí ampliamente para ella- disculpe si le incomodo o mi presencia, pero algo en usted es especial, -me acerque solo un poco y note algo que fastidiaba mi tranquilidad-, algo en ella emanaba un rechazo hacia mi, -levante la vista y observe un prendedor entre sus cabellos que me denotaba cierta repulsión- Vaya, disculpe pero, eh notado que ya conoce a otros vampiros, ya que el que le ah brindado ese prendedor ah sido uno, para alejarla de otros, repito, disculpe si me meto mucho en su espacio y su vida o sus relaciones, pero es lo que eh notado, si me disculpa y me permite, -me senté a su lado sobre pasto y levante la vista- Este lugar, es realmente hermoso, opina igual, ¿verdad?, no lo conocía, es muy hermoso, creo que pasare varias noches aquí de ahora en adelante-me detuve un poco y mire sus ropas su rostro-, no parecía ser solo una mujer de clase alta, algo más tenia esta mujer, parecía quera importante o de algún rango político, realeza quizá, mi concepto sobre la realeza no era muy bueno, pero no debía juzgar antes de conocer.-Cierto, disculpe la descortecia y la falta de respeto, mi nombre es Bernard Boneau, es un placer, -levante su mano derecha aún estando ella sentada y bese el torso de esta mientras hacia una suave reverencia sin volverme a sentar-

por Invitado Lun Ago 01, 2011 5:15 am

Buenas noches Mademoiselle – aquel saludo fue suficiente para hacerla saltar, había estado concentrada bastante tiempo de su día en aquel árbol, pero mas que haber estado concentrada observando un árbol o pensando en sus derivados, tipos de ramas o lo que sea que pensara la gente que hacia, estaba deliberando… por alguna razón necesitaba mucho salir de aquel pensamiento que nublaba su vista, por alguna razón necesitaba que su mente pensara en algo que no fuera Yudea o Kazu y lo estaba consiguiendo, hasta que aquel vampiro abrió sus labios para interrumpir los pensamientos que pudiera tener sobre un árbol así que su mirada inicial no fue muy agradable ni muy simpatizante… algo le había llamado la atención y es que… aquel vampiro no reparaba mucho en ocultar que lo fuera – puedo preguntarle por que actúa así? –Hace una pausa antes de continuar-usted sabe que si yo fuera cazadora y usted apareciera de esa forma… no se yo creo que debería ser mas precavido… tampoco que tema a los cazadores, solo disimular mas su condición ¿no le parece?-le mira mientras de puro instinto se toma el prendedor para luego verle sentarse a su lado.

“quien era aquel vampiro? –mátalo- no… -no podía hacer eso por que ni siquiera le conocía, aparte no podía hacer uno sin lo otro, no podía matarlo sin morir, no tenia ese tipo de fuerza aunque ya estaba logrando bastante canalizar mi poder hacia algo positivo pero ese vampiro parecía interesado en saber de mi ¿vida? ¿Por qué?
Alce una ceja al verlo hablar, quizás necesitaba alguien a quien poder decirle mis cosas pero es que no podía tener una clase de confianza con aquel desconocido… por que era un desconocido, seguí sus miradas su rostro observar cada detalle de mi y sentí temor a la misma vez, no miedo, miedo no era, solo era temor”

Y si… es muy hermoso en verdad –Adda no se movía, por alguna razón sintió curiosidad ¿curiosidad? De aquel vampiro y su particular forma de primero, acercarse sin anunciar su aproximación, segundo no presentarse de la correcta forma, atacándola y llenándola en preguntas y tercero… no presentándose, cosa que estaba corrigiendo cuando dijo su nombre y Adda repitió cual niña le dieran una tarea para repetir –Bernard Boneau… -dibujo una sonrisa al ver sus labios besar el dorso de su pequeña, tibia y delicada mano inclinando levemente su rostro en respuesta – Adda… Vinográdova.

Desvía su mirada nuevamente hacia aquel árbol mientras siente su pesada mirada como si le pidieran a gritos que respondiera cada una de sus preguntas - ¿dijo que algo en mi era especial? Y si, conozco a muchos vampiros, y acerco en cuanto a lo del prendedor, aquel vampiro si quiere alejarme de otros para que solo el pueda tenerme, no es un trato muy bonito que digamos… y menos si otro vampiro me dio la formula de protección para que solo ceda cuando quiera… con el… -sonríe- el afán de los hombres de pensar que una les pertenece… ¿no lo cree? –sonríe de lado pero niega- lo lamento, supongo que me dejo llevar por el mal habito de hablar y no dar espacio a respuestas –se levanta lentamente para limpiar su vestido mientras lo observaba tratando de revisar si es que tiene alguna mancha o suciedad con el pasto en el que se encontraba sentada y sonríe al pensar en la elección de este cuando su mucama se lo ofreció ella no podía creerlo –este? – había dicho con cierta duda por que lo que veía en su reflejo era un vestido de realeza, una mezcla entre sensualidad y prohibición, con listones que no solo se abrochaban y desabrochaban con extrema dificultad pero resaltaban su figura y con ese vestido tan elegante había decidido salir a dar una vuelta en aquel jardín botánico.

Spoiler:

por **Bernard Boneau** Vie Ago 05, 2011 10:21 pm

-esboza una sonrisa de lado a lado al escuchar todas sus palabras y se dispone a responder-

Usted hable lo que quiera majestad, -ríe suave-, realmente no me gusta llamar así a la gente así que dejare de hacerlo, te llamare por tu nombre ya que me has contado algo tan serio que admiro la confianza que hay, Adda -le toma la mano y camina de su lado- vamos a dar un paseo, ¿te parece?, pero por favor, llámame Bernard.

¿Cree que debo presentarme como humano?, yo me presento como lo que soy, una criatura de la noche o como dicen: "vampiro". Además dudo mucho que una señorita de la realeza sea una cazadora, sus ropas, sus formas y su estilo la delatan así como su aura y sus pensamientos con otros dentro de su cabeza le dejan a vista de cualquier entendido con la mente que usted es una... -guardo silencio y le respondió a su otro comentario-

Es hermoso el árbol pero no como su compañía señorita Adda. ¿cual es su rango en "las alturas"? -sonríe de lado- usted es bruja. Pero tranquila que no lo diré dos veces y en voz alta menos, ¿el problema de sus poderes no? los oculto para ser "Realeza", que mal hizo la verdad, es como renunciar a mi fuerza sobrehumana por llevar corona. Los tratos como todo se pueden romper, en estos casos algunas veces el contratista debe desaparecer y así el contratado queda libre -sonríe mirándola a los ojos- aunque claro eso es algo que usted debe decidir, eso creo yo, ¿verdad?.

Los tratos como todo se pueden romper, en estos casos algunas veces el contratista debe desaparecer y así el contratado queda libre -sonríe mirándola a los ojos- aunque claro eso es algo que usted debe decidir, eso creo yo, pero le puedo aconsejar lo siguiente, no se que edad tenga su vampiro, mejor dicho el que la retiene, pero los jóvenes suelen ser caprichosos con los humanos, los usan de objeto sexual, los torturan, los ¿aman?, si es que eso es amor para ellos, los desean, los poseen como objetos en fin de más y casi siempre terminan todos de una forma, muertos y si tienen "suerte" transformados en vampiros. pero por lo que veo, prefieres aún sentir calor y degustar de un buen plato de tu chef real, así que quizá no te sea de agrado morir o ser un cadáver ambulante, aunque la ventaja es que no nos podrimos -ríe bajo- a los hombres les encanta poseer a las mujeres como suyas o solo para ellas, realmente yo no estoy con ellos, yo amaba a mi, la deseaba con pasión y la respetaba, no era mía, no era un objeto, era una humana muy cálida, hermosa y afectuosa, ella me deba las ganas de seguir adelante y luchar día tras día, dicen eso "Amor" quizá no lo conoce aún o ya lo conoció, pero con un vampiro posesivo no lo lograra encontrar, a menos que usted lo ame y como dicen "esclavo y dueño se enamoran" quizá el termine igual o quizá, no, es algo tan difícil de descifrar, tendrá que hacerlo por su cuenta o decirle que no quiere nada con el si ese es el caso, aunque dudo que la deje ir con tranquilidad, de cualquier forma, usted puede contar con otro vampiro para defenderse, es muy válido ya que es solo una humana indefensa.

-Me detuve con ella frente a unos rosales y me quede observándolos mientras esperaba su respuesta para susurra bajo- Confía en mi Adda, puedo ayudarte, pocas veces me cae tan bien una mujer y si es de la realeza es más raro aún, pero veo que eres una muy buena persona con mala suerte en las relaciones "en todo ámbito" -voltea para mirarle-

por Invitado Jue Ago 11, 2011 5:44 am

Adda aparto su mano levemente al mirarle cerrar sus ojos –lo siento, es que… pensé que había sentido el efecto de tocarme… -le mira – le dolió? No puede negármelo monsieur, no es algo que pueda mantener en secreto, todos lo notan y efectivamente dejan de juntarse conmigo por ese gran “le pertenece a…” grabado en mi frente – camina intentando despejarse un momento, aquello le había alterado no solo porque le había revelado que de alguna forma le pertenecía en cuerpo y alma a dos vampiros si no por que el mismo que estaba a su lado y hablando con ella la trataba de humana e indefensa, haciendo de aquellas palabras casi un insulto para Adda que se consideraba fuerte y nada humana.

“que se cree el vampiro? Se creen fuertes? Será por esa razón que los odiabas y no por que uno en potencia robo lo mas preciado que tenias? Tu inocencia? La inocencia que decías tener pero que no demostraste cuando me dejaste matar a la mujer que se hacia llamar tu madre?
Fue ahí cuando no pude dejar de escuchar mi mente que me golpeaba con imágenes y recuerdos, con un golpe de esos tan bajos sentí mi cuerpo desvanecerse, tal ves si era débil, tal vez si era una humana indefensa que no tenia nada mas de protección que aquella yo malvada que no me gustaba sacar por miedo a perderme y aquel broche que solo servia con vampiros que quisieran hacer algo mas que tocarme, y que el responsable de haber robado lo mas lindo que creía tener aquel mismo me lo había dado, Celos? Sentido de la posesión? Rabia de no haber sido amado aquella noche como quería? Rabia de saber que nunca podría querer a nadie como a kazu al cual ponía en mi mente para olvidar un poco que en ese momento estaba siendo ultrajada por Yudea.
Eran muchas cosas me sentía desfallecer pero sin embargo me mantuve en pie.”

-usted no debe de permitir que una dama como yo le infrinja daño alguno – camina a su lado pensando su pregunta mientras se dedica a observar una de las rosas que estaba en la mira de sus ojos, al frente… a la derecha. La observo bien, dejándose llevar por el color de esta, era un botón ciertamente pero el botón de rosa mas bello que pudiera haber visto alguna vez, de un color carmesí mas rojo que la sangre, bastante atractivo y sumamente delicado- es difícil confiar en un vampiro Bernard…- susurra delicadamente mientras con la yema de sus dedos toca las pequeñas hojas de aquel botón que había robado sus sentidos, aquella pequeña rosa en plan de crecimiento la había tranquilizado, no se sentía desfallecer si no mas bien se sentía fuerte. No necesitaba protector, si no un amigo ¿encontraría en el algo así? ¿un protector-amigo? ¿alguien que no estuviera potencialmente interesado en beber de su sangre o en su cuerpo o en nada que ella pudiera ofrecer mas que la compañía o lo que pudiera dar?
-no necesito protector, tuve o creí que había tenido uno cuando hizo algo que nunca me olvidare… dejarme. –susurra en su afán de seguirse engañando ante sus palabras- aunque lo que si necesito es un amigo, si usted tiene a alguien con las ganas de ser amigo de esta dama lo agradecería, no es muy difícil no pido nada mas que una buena charla, sinceridad, honestidad, amistad sincera sin esperar nada a cambio… algo puro, diferente… algo perfecto ¿puede darme eso?

Adda observa al vampiro mientras con la yema de sus dedos al pasarla junto a una de las pequeñas espinas de la rosa pinchan su dedo dejando caer un pequeño hilo de sangre, de la sola impresión busco en su vestido un pañuelo que solía llevar por si acaso, y se lo envolvió en el dedo mirándole-lo siento, este… lo lamento, suelo olvidar que hay flores que tienen espinas… -cubrió su dedo intentando apretar en la parte afectada mientras buscaba la mirada de Bernard intentando encontrar paz en su andar, sonrío de lado al notar que no solo era un caballero si no que era ¿atractivo?

“siempre engañándote con eso Adda siempre, haciéndote daño creyendo de verdad que los vampiros no son todos iguales… convéncete, todos tienen una sola misión… sangre.
Me había detenido demasiado tiempo en sus ojos, en su mirada, pero ladee el rostro, no quería que alguien como yo le incomodara de esa forma, Bernard era atractivo, agradable pero quien no decía que quizás era mejor que se buscara a alguien mas para proteger?”

por **Bernard Boneau** Dom Ago 14, 2011 2:35 am

-Sintió que ella le soltaba y por dentro el alivio apareció- -Un hombre no demuestra el dolor o ell daño, menos ante una hermosa mujer, ya que eso le preocuparía, además que te ahorro ese sentimiento de “Culpa”, -le siguió lentamente- -Por suerte para mi tengo mucha resistencia sobre todo, “La voluntad” siempre puede ser el mejor arma para mantener el objetivo y conseguirlo, así como la confusión que usted tiene –dijo mientras se colaba en su mente, captando todo tipo de deseos y pensamientos retorcidos los cuales era incapaz de en tender en tan poco tiempo- -solo puede ser resuelta de una forma, encontrando la verdad, experimentando y resolviendo las dudas mediante el procedimiento de comprobación.

-Observe a Adda admirar el botón de rosa mientras me hablaba- -Un protector no abandona, el que abandona es solo un niño que se aburrió del juguete, las personas no son juguetes.. –frunce el ceño levemente pero esto cambio al escuchar sus clemencias muriendo por dentro, realmente se sentía identificado, se sentía descrito por ella en esos momentos- -La perfección es algo casi inalcanzable, “casi” –repitió y la miro- , -por cierto, podrías ver si estoy a la altura, pero empieza por decirme Bernard, no vampiro Bernard, no necesito que me recuerdes mi condena cada vez que me hablas –observo como ella se hizo daño con la espina sin inmutarse al ver la sangre- Las flores más hermosas tienen espinas, así como el mejor licor te daña aún el hígado, además usted no puede mentirme, es la viva imagen de que las flores realmente hermosas tienen espinas, sobre lo que usted me ah dicho pues, le ofrezco mi amistad…protección o lo que usted desee, pero, “la perfección” y el resto de cosas que pide, solo usted puede descubrir si lo que yo le doy es lo que desea o lo que espera, debo confesar en parte que sus expectativas me ponen “nervioso”, pero daré todo de mi para cumplir a cabalidad sus deseos, en parte, yo también deseo cumplirlos, por alguna extraña razón, más no se cual, solo puedo decir que es así, -se agacha a su lado y corta una rosa ya madura que se encontraba al lado del botón, para luego colocársela entre los cabellos- -Lamento que no fuera el botón, pero tal hermoso ser vivo merece el derecho de vivir… -tomo su mano y la apretó suavemente sonriendo- -Espero realmente, no defraudarla ya no podría fallar a más gente la verdad, luego de fallarme a mí mismo, lo último que deseo es fallarle a los demás, no mentiré, realmente me hace daño tocarle, pero como dije antes, mi voluntad es y será siempre más fuerte que ese inservible artilugio el cual no me va a poder detener en cumplir lo que yo le acabo de prometer y lo haré nuevamente, yo Bernard Boneau, le juro protegerla, brindarle mi amistad, mis más sinceros deseos y pensamientos, siempre con la verdad, esa que me caracteriza –suspira levemente por el fastidio- -Pronto me acostumbrare del todo y no sentiré nada –ríe levemente- ¿Desea ir a algún otro lado? o ¿aún quiere estar rodeada de vida?. Y bueno, por uno no tan vivo…..

-Espero que el muy humilde obsequio sea suficiente para ti, como dicen por allí, la magia se encuentra en cada detalle y en la forma de cómo utilizar esas oportunidades que te da la vida, esas que solo se ven, “una en un millón” y esas que si rechazas pues eres el tonto del siglo, por suerte para mí, los siglos se me van rápido…. –Suspiro para luego mirarle con los ojos firmes en ella- -Hoy forme un nuevo lazo, una nueva amistad, ahora tengo una compañera, un motivo por el cual superarme y ser mejor cada día, ya que llevo bastante tiempo la verdad, sin luchar por nada que valga la pena, yo ya no valgo la pena, quizá antes si, algunas veces yo me siento obsoleto, permíteme serte útil de alguna forma, prometo de todo “corazón”, el que tuve alguna vez..de lograr lo que pides y si no lo logro… -hizo una pausa- -Olvídalo, no, ni lo pensare, yo voy a cumplir mi cometido, me gustaría verle sonreír la verdad, al menos sacarle una pequeña sonrisa la cual me alegre la noche, llevo muchas sin alegrarme por algo…

-Sonrío de nuevo con algo de melancolía observándole para luego avanzar caminando sin soltarle la mano y sin detener el fastidio constante que sentía por tocarle- “Ese precio a pagar” por sentirse bien de alguna forma al sentir su contacto”.

por Invitado Sáb Ago 20, 2011 10:58 pm

Solo sintió a un extraño queriendo colarse en sus pensamientos, por alguna razón se había dispuesto demasiado tiempo mantener su mente en esa muralla y nadie pudiera traspasarle, observo de una manera tajante a aquel joven mirándole a los ojos sin emitir mas sonido que el que se escuchaba exteriormente – Monsieur Boneau… - sabia que este le había pedido que le tuteara pero simplemente esa no era su esencia ni la forma de hacerle ver que realmente le molestaba que alguien intentara penetrar sus pensamientos- rogaria que no lo intentara, no puede pretender que no me moleste que usted quiera ver en totalidad lo que siento, pienso, nadie a traspasado esa barrera, ni la persona que yo mas e amado en este mundo tan mortal… y estoy muy segura que para el no fui un juguete, aunque este dolida usted no a estado ahí, cuando fui herida, cuando me abandono por salvar mi vida.. por… no desear que nadie volviera a forzarme a hacer nada… y por eso no debería odiarlo como mi interior y todo mi cuerpo lo hace, por que mas que mal se entrego por mi…- y esperemos que de verdad pueda cumplir su promesa, me agrada tener compañía siempre y cuando nos respetemos, y preferiría que mantuviéramos distancia, usted no sabe cuando me duele causarle daño con solo tocarle…

camina mientras observa hacia los árboles entre que le escucha – y con respecto a pedir y usted no lograrlo, no se preocupe no soy mucho de pedir cosas ya que no me corresponde y no me gusta, por lo bien espero no serle de tan desagrado diciéndole las cosas como son, no quiero engañarle, no soy una santa paloma pero tampoco soy mala solo e pasado cosas malas y e sabido superarme –sonríe de lado mientras camina hacia uno de los asientos de estadía y se sienta delicadamente mirando hacia la luna – mis lunas también han pasado noches enteras esperando algo de tranquilidad, para mi también es usted un causante de mi alegre noche.

Usted cree que alguna vez habrá o tendremos algún día normal? – se ríe observando hacia algún punto en las estrellas disfrutando de la noche, que pese a ser bastante húmeda no permitía que sintiera frío, la fuerza de la costumbre quizás, estaba demasiado acostumbrada a sentirse con frió ya que solía pasear mas de noche que de un mismo día –cuénteme algo de usted, me gustaría conocerlo, como es que usted conoció Paris? Por que causa llego? – le dedica una mirada, y con esa mirada solo vuelve a recordar que no debía tratarlo de “usted” si no de “tu”-lo lamento por eso, pero creo habérselo mencionado anteriormente, no estoy acostumbrada simplemente a tratar a alguien de tu, yo y mi poca costumbre… - se ríe y con sus pies colgando en el asiento los mueve para no congelarse, tomo la rosa que Bernard poso en sus cabellos y sintió su olor –se a puesto a pensar el por que de las rosas tienen aquel olor tan particular? Usted que es especial en ese sentido, siente los olores y fragancias de cada uno, me diferenciare en algo? ¿en que? - con algo de curiosidad jugo con la rosa entre sus dedos sin cortarse por que esta vez lo hacia delicada y especialmente para no jugar con el destino, confiaba en aquel vampiro pero no había que abusar, y cortándose como con el botón de rosa de un inicio seria jugar con el destino…

“suenas a cómoda… - quizás – no deberías- quizás…
Interiormente ya sentía mi voz interior y sus gritos dejarme en paz aunque fuera solo un momento, pero ese momento era el mejor… y lo agradecí, silencio, eso era todo lo que necesitaba, aunque sonara extraño, cualquiera diría, es la voz de tu conciencia, en realidad para mi solo era una molestia mas, algo de lo que debía desprenderme y para conseguir un poco de tranquilidad”

-Disculpe si sonó como algo que no debiera preguntar si no quiere responder lo entenderé- sonríe aunque su curiosidad siguiera ahí latente.

por **Bernard Boneau** Miér Ago 24, 2011 4:19 pm

-Frunció el ceño levemente y mostró melancolía de la misma forma por incomodar a la mujer y por el tuteo, pero luego cambio el rostro lentamente a su estado original- -¿Sabes algo?, no importa el daño, ya lo dije antes, lo más importante es que has dicho algo que me encanta en una persona, "no merezco nada", odio sobre manera a la gente que nace y cree que todo lo merece y yo me pregunto, ¿qué han echo para merecer ser felices?, ¿han contribuido a alguien?, ¿han echo algo histórico?, ¿han mejorado o velado por la felicidad de otro?, ¿se han superado? o deben ser felices porque sino solo lloriquearan y se lamentaran de la triste y cruel vida, es patético realmente. -Levanto ambas cejas- -¿Molestarme por decirme las cosas de frente?, por favor, se lo imploro, dígalo siempre así, eso me encanta, siempre duele más una mentira descubierta que una verdad directa y por mi parte, detesto a los seres que mienten y ocultan, por suerte siempre los descubro debido a mis dones. -sonríe de lado-. Era curioso como Bernard odiaba tanto "las mentiras" pero su otro yo, ese que representaba tras una mascara era todo lo que el odiaba, de todas formas esa parte de el, debería permanecer oculta siempre y más de las personas que estimaba o esto podría causarles problemas a estas y a el mismo.

-Parece que coincidimos demasiado en la forma de pensar y en lo que nos ah ocurrido, yo también eh sufrido demasiado, también eh disfrutado, pero más eh sufrido no puedo negarlo. -la miro a los ojos con suavidad y tranquilidad- -Sin duda alguna podría llegar, o.. -hizo un pausa-, una noche en tranquilidad en tres mil años -se lo piensa y sonríe-, -creo que hoy la estoy teniendo, con usted y por eso debería darle las gracias a pesar de todo me la paso de maravilla como pocas veces antes. -ladea la cabeza-, -No hay problema, cuando puedas tutearme hazlo, no exigiré tampoco nada, nunca lo hago, ¿sabes?, si, si puedo contarte de mi, pocas veces les comento a otros lo que soy o quien considero que so ya que siento que no se merecen saberlo, pero en este caso es distinto, me has superado con creces o eso creo yo, puedes preguntarme lo que quieras -dijo dudando , aunque luego se tranquilizo ya que sería imposible que alguien le preguntase por "eso"- -Llevo en este lugar demasiados años, antes de que siquiera la ciudad se mostrara como lo es ahora yo ya estaba aquí, París antes era muy hermosa, más que ahora, ahora el bullicio, los gritos y cierta "calaña" de seres la están destruyendo poco a poco, pero no se puede hacer mucho, es a lo que se le llama desde hace poco "globalización".

-Se quito el saco y se lo coloco a la mujer cubriendo también sus piernas con este-. -Ya lo note, no dejare que te enfríes -sonrío-. -Las rosas, las flores, las comidas, los perfumes -aspiro un poco el aroma de ella-, -Son todos mágicos y extravagantes con esta nariz, ¿diferencia entre tu persona y una rosa?, creo que el aroma es tan solo una de las mil diferencias que podría encontrar, luego podría resaltar la hermosura, pero vamos, eh visto demasiadas mujeres hermosas en este tiempo, para mi el significado de la belleza dejo de ser solo físico hace muchos muchos siglos, por eso me animo a decir, que en belleza y hermosura ni la rosa más hermosa podría compararse a quien tengo delante de mi ahora, aunque creo que eh dicho muy poco de mi, ¿no?, realmente no recuerdo mucho de mi pasado o simplemente no deseo recordarlo, por algún motivo sera.. -hizo un silencio- -Pero mi presente no es nada del otro mundo, trabajo o eso podría decirse, ya que no muevo ni un dedo en mi relojería, por lo demás paso los días libres buscando paz y tranquilidad en el silencio de la noche, lo lamentable es que casi siempre alguien interrumpe mi soledad para mal, pero en esta ocasión estoy bastante alegre de no haber pasado la noche solo, hubiera sido solo una más, pero gracias la has echo diferente, digamos que esta noche esta siendo especial de alguna forma -se movió un poco y dejo a relucir la espada con el mango de dragón- -Se me escapo mi compañera- -río un poco- -Me hubiera gustado dar hoy un paseo a caballo, pero me eh dejado a mi compañero en el establo, que lastima -la miro sonriendo-

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