José Alfonso De Castilla

DATOS BÁSICOS

DESCRIPCIÓN PSICOLÓGICA

Del hombre vigoroso, rebelde, alegre y desafiante de antaño sólo quedan los recuerdos. La vida le golpeó tan duro que la sonrisa que estaba siempre instalada en su rostro se esfumó para aparecer apenas un par de veces, y su actitud ante la misma ya no involucra el disfrute de los momentos; de hecho, es pesimista y creyente de que todo lo que le ha sucedido es por su propia actitud libertina de cuando era joven, como si fuera un castigo divino o karmático.

Se ha vuelto más egoísta, y al mismo tiempo más despreocupado por los demás. Su Pueblo ya no es importante para él, y por ello no se preocupa de las consecuencias al tomar ciertas decisiones políticas. Sin embargo, tampoco es partidario de las figuras políticas del círculo aristocrático que se interponía en sus decisiones anteriormente, y que aún son fieles a su fallecido y dictatorial padre. Aprovechando su privilegiada posición hace lo que desea, incluso pasando a llevar a otros; aunque a menudo pasa por etapas de desgana y depresión absolutas al recordar todo lo que ha vivido. Por ello, el amor ya no es una prioridad ni un interés para él. Ni siquiera la figura de su difunta futura esposa lo detiene a la hora de buscar alguna mujer con la cual yacer, ya que la sensación de despecho venció a la férrea fidelidad que conservaba desde su muerte.

Ahora en su nueva condición se ha vuelto cruel, despiadado y sanguinario, no conoce el respeto y menos diferencia entre el bien y el mal, ya no conoce nada de eso lo que lo hace un amante del peligro, todo lo toma para él, egoísta, hace su voluntad sobre los de los demás, no le importa la gente y lo que tengan que decirle a menos que sea para su beneficio en cuyo caso lo conservara pero si no, será parte de su colección de cadáveres en su castillo del terror.

HISTORIA

Nació un 16 de Noviembre, un día soleado e iluminado como sus cabellos. Y desde incluso antes de su nacimiento, su vida ya estaba completamente planificada: Era el Príncipe de España, y como futuro Gobernante fue instruido a lo largo de su infancia en un estricto horario. Tutorías, entrenamientos y reuniones que no cesaron ni siquiera con el nacimiento de su hermana Isabell, ni con el fallecimiento de su madre en aquel mismo momento. Su padre le obligó a superar aquella pérdida con la preocupación con la que se hace un simple trámite y fue por eso que mientras pasaron los años y la inteligencia de José fue moldeándose que la rebelión comenzó.

A partir de los siete años las escapadas del Príncipe eran pan de cada día, y provocaban no pocas opiniones encontradas tanto en el pueblo como en la misma Realeza. Esto terminaba casi siempre en castigos exagerados por propia mano del Rey, ya sin una mujer que pudiera limitarle en su actuar. Misma situación vivía el Príncipe, quien poco a poco encontró en su hermana Isabell el consuelo y el cariño que su madre sólo alcanzó a darle un año. Ese cariño fue fortaleciéndose de tal forma que al entrar ambos en la adolescencia las insinuaciones no se hicieron esperar.

Los conflictos continuaron entre el Rey y el Príncipe (quien se había convertido en un apuesto varón de veinte años), ahora con contenidos más serios concernientes a la forma de gobernar del primero, y a la falta de compromiso del segundo, quien había pasado prácticamente toda su adolescencia escapando de la vida que implicaba ser un noble culto y correcto. Aquellas discusiones parecían no tener un final, hasta que la naturaleza, o más bien el destino hizo que meses después una temida enfermedad de la época hiciera que la máxima autoridad española no volviera a abrir sus ojos.

Forzado por su propio linaje, José Alfonso asumió como Rey con veintiún años cumplidos, en una ceremonia llena de incertidumbre a causa del destino de España, y a causa de la personalidad con la que fue conocido el hasta entonces Príncipe. Su reinado no pasó sobresaltos hasta que llegó a París, instalándose allí con su hermana Isabell con fines diplomáticos. A partir de allí, y como si hubiera sido todo premeditado con una maldición, el destino se encargó de endosarle un golpe tras otro; comenzando primero con el reencuentro con su antiguo y más profundo amor, Tamina Borgia; pero luego de un tiempo en el que incluso planificaban su matrimonio, ella fue separada de él para siempre, falleciendo durante el parto de los mellizos que ahora son el único lazo de sangre conocido de José. Antes de eso ya tres de sus hijos habían fallecido: Antonio, Catalina, y quizás la muerte más dolorosa, Marianne, cuyo lazo desconocía hasta que ocurrió el secuestro que terminó con su vida. Lejos de terminar su sufrimiento, el caos terminó por arrebatarle a Isabell, su propia hermana, y a Felipe, su hijo que regresó de las Américas. Actualmente sigue residiendo en París, viviendo junto a una mujer que tuvo en su pasado pero que terminó abandonando como a prácticamente todas las demás. Sin embargo, ella tiene otros planes para él…

DATOS EXTRA

- Ha practicado equitación y esgrima hasta especializarse.
- Gusta del arte, sobretodo de la música y la literatura. Sabe tocar violín, piano, guitarra y flauta traversa con fluidez.
- Domina el inglés y el francés.
- Sabe que existen criaturas sobrenaturales, y siente cierto recelo hacia ellas, mas no temor.
- Siempre lleva un estoque consigo (espada ropera).
- En medio de todo el sufrimiento que ha vivido, se le descubrió una enfermedad al corazón. El estrés extremo le provoca mucho dolor.
- Sus hijos se llaman Mauricio José y María Daniela.

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