El primer requisito de la inmortalidad es la muerte (Xander)

Sonreí extendiendo una mano en forma de saludo mientras abandonaba el Burdel. Cualquiera que me hubiera visto salir de ese sitio luciendo aquel pantalon ajustado y la blusa al cuerpo hubiera pensado que encajaba a la perfección, pero lo cierto era que tenia buenos amigos en el sitio, y las cortesanas siempre me brindaban información sobre posibles objetivos.. nuevas bestias que cazar, y sin dudar de mis predilectas.. los vampiros.
Que mi madre hubiera muerto en manos de uno, y mi hermano me hubiera sido arrebatado por los mismos era una buena justificación para odiarles.
Siempre habia detestado que mi cuerpo no fuera tan fuerte como el de mi hermano o mi padre, el rol de mujer sumisa no se me daba bien, y para ejercer el oficio que traia desde la cuna precisaba mas físico que intelecto.. pero todo es subjetivo y habia encontrado la forma de transformar mi «defecto» en una virtud.
Sonrei con coquetería cuando unos profundos ojos pardos se toparon con los mios, su andar era gracil y elegante, parecia ser joven apenas unos años mayor que yo.. en apariencia.
Pero para mi era demasiado sencillo distinguir lo que el era, simplemente mi cuerpo reaccionaba de manera instintiva como un depredador furtívo a la espera de su presa.. era irónico pensar que quizas el caballero que se acercaba hacia mi estaba pensando lo mismo.
Quite mi cabello rojizo hacia el costado dejando mi hombro descubierto mientras me acercaba a el sin quitar la sonrisa que el me correspondía con entusiasmo.
A los vampiros solian gustarles las chicas de burdel, eran presas faciles ademas claro esta que luego del sexo a los hombres les aumenta el apetito.. rei en mi mente ante aquella retorcida idea, el tipo me quería cenar.. en todos los sentidos posibles.
-Bonsoir Mademoiselle - hizo una reverencia. Su voz era profunda y gruesa, y no podia negar que el desgraciado era condenadamente guapo, pero no por ello menos peligroso.
-Bonne nuit- correspondi el saludo mirando aquel hombre de perlados insisivos.. -Para comerte mejor- pensé..aquello me divertia..
-Es algo tarde para que una dama como usted diambule sola por estos lares- su vista paso de mi rostro.. al burdel.. para luego terminar en el escote de mi blusa.. Bien, ya estaba segura de cuales serian sus conjeturas y le sacaria provecho a las mismas.
-Se podria decir que es mi noche de suerte por haberme cruzado con vos- le mire subiendo una ceja, acercandome un poco mas y dejando que mi mano se deslizara por su brazo.
-Delo por hecho, hasta la fecha ninguna dama se ha quejado- el tono de su voz seguia siendo galante aunque el hecho de que ninguna se hubiera quejado parecia obvio.. cuando un par de colmillos estan perforando tu cuello no vienes con animos de levantar una queja.
Mordí mi labio mientras el observaba aquel movimiento con lacivia y yo deseaba patear su trasero muerto con fuerza...
Jale levemente de el para avanzar, debia alejarme de la puerta del burdel si deseaba acabarlo. Aquel acto impulsivo por mi parte parecio divertirle y avanzó en la dirección que le indicaba sin chistar.
Apenas doblamos la esquina cuando empujo mi cuerpo hacia atra dejandome contra la pared.. la mayoria de las veces que habia intentado aquel truco parecian mas exitados que hambrientos pero el definitivamente solo venia por la cena y me habia tomado por sorpresa sin darme tiempo a quitar la estaca de mi cinturon.
Sus colmillos rasgaron levemente la piel de mi cuello y gemi furiosa.. -Hijo de puta- mis manos seguian buscando la estaca que cada vez parecia mas lejana...
-Con esa boca besas a tu madre- rio en mi cuello y su aliento putrefacto me revolvio el estomago..
Al fin la habia alcanzado! -No, pero con esto te jodo a ti- clave la estaca con fuerza en la parte izquierda de su espalda.. aunque no habia sido suficiente para matarlo me habia librado de su ataque..
Dio dos pasos hacia atras y patee su estomago con decisión... quizas habia bebido demasiado aquella noche en el burdel y para mi desgracia mis sentidos me estaban fallando, pero por mi madre que este desgraciado no se me escaparia.