Una de cal y otra de arena (libre)

por **Sky Parker** Sáb Dic 03, 2011 5:37 pm

En una ciudad llena de odio y de falsas apariencias, mi cuerpo danzaba por las oscuras calles en el espesor de la noche. No me importaba andar sola, pues al ir con la ropa sucia y mi pelo desaliñado parecía una rata de cloaca. ¿Y quien se iba a fijar en una rata? Habían miles por allí, una más, una menos. La cuestión era que no había encontrado nada de comer en todo el día, y mi estomago rugía de hambre. Necesitaba algo de alimento, pues no era el primer día de la semana que pasaba sin comer. Tenía hambre, y mi sonrisa desvanecía por momentos. Solo había comido bien aquel dia en casa del señor Owen...Me apoyé en la pared y suspiré. ¿Donde podía encontrar alimento? En aquellos callejones seguro que no, y eso era lo que me preocupaba. No podía salir de aquellos callejones tan facilmente. Ya me habían golpeado por las calles iluminadas, tratandome como escoria, como sino fuera persona, y...en mi opinión y según un filósofo, todo ser humano capaz de pensar y racionalizar es persona. Yo era capaz de hacer aquello, e incluso si quería podía leer. Escribir me era más dificil, pues mi letra era pésima y se me daba muy mal hacer letras. Sin embargo, allí estaba, sin poder hacer nada para combatir mi hambre.

por **Abigail Barascout** Dom Dic 11, 2011 5:39 am

Su carroza se detuvo en medio de la calle a petición de la princesa, justo enfrente de la entrada de un callejón el cual no parecía ningún buen lugar para entrar en él. La joven no lo habría hecho si no fuera porque su curiosidad ganaba la batalla en su mente, y el ver por segunda vez la pequeña sombra de alguien caminando por allí, la ayudó a entrar en él.
Su guardia sabía que era imposible el impedírselo, la princesa era cabezota y esa sombra no estaba a más de unos metros de distancia. Así que el hombre quedó a unos pasos de la carroza y a la entrada del callejón, mirándola fijamente y listo para atacar si lo veía necesario. La princesa negó con la cabeza mientras caminaba lentamente hasta allí, viendo más de cerca que esa sombra era de una muchacha demasiado joven para caminar sola por lugares como aquél. Quedó a unos pasos de distancia de ella, pero los justos para que pudiera ver que no quería hacerle daño ni tenía nada que temerle. - ¿Puedo ayudarla en algo? - su voz fue suave y melódica, acompañándola con una sonrisa cariñosa y dulce.

por **Sky Parker** Miér Dic 14, 2011 7:51 am

Como un cervatillo, me asusté y me fui apartando de la mujer que me había preguntado. No parecía ser peligrosa la mujer, pero bien sabía que las apariencias engañan. Me aparté arrinconandome contra la pared

-No...

Era la segunda persona con dinero que quería ayudarme. ¿Tan mal aspecto tenía? Era odioso que quisieran ayudarme. Si..tenía hambre, pero podía apañarmelas sola. En aquel momento rugieron mis tripas como nunca lo habían hecho. Me giré y empecé a caminar de nuevo con cuidado. Quien sabe, tal vez quería raptarme, pero ¿para que? Nadie lo sabe, pero tenía miedo. Aquellas personas eran como criaturas extrañas, solo había que verlos, vestían con ropas caras, comían cosas extrañas...y yo..más pobre que nunca, no tenía ni para pan, cuando ellos lo tiraban a los pájaros

por **Abigail Barascout** Sáb Ene 21, 2012 12:41 pm

La joven rubia solamente pudo suspirar al ver como la muchacha se alejaba cada vez más de ella, no podía reprochárselo ni sentirse ofendida por ello, quizás ella en su lugar estaría haciendo lo mismo. Volteó su cara suavemente, hacia el camino que había recorrido antes y en donde estaba su carroza aún parada con su guardia delante de ella, no habló porque no hacía le hacía falta para comunicarle a Gerard que no se moviese de allí, solo hizo un movimiento con su cara hacia los lados mirando a ese hombre y regresó de nuevo su atención a esa pequeña, podía imaginar que no sería nada fácil el ganarse un mínimo de su confianza pero no iba a dejarla allí sola en esa noche. - Solo quiero ayudarla, es muy tarde como para que una joven muchacha como vos esté sola en estas calles. - Caminaba a pasos aún más lentos que los anteriores, mirándola fijamente y con la dulzura que la solía caracterizar, paso a paso hasta que llegó de nuevo a quedarse a un par de ellos de distancia. Llevó sus manos a su cintura, deseaba que la joven las pudiera ver en todo momento y se diera cuenta de que no iba a hacerle nada.

por **Sky Parker** Jue Feb 16, 2012 9:20 am

Negué y me aparté nuevamente con miedo. Era una de aquellas ricachonas, iba de dulce, si, pero seguramente o me quería como esclava o vete tu a saber. Negué y empecé a andar dándole la espalda. Una rata se cruzó pasando por encima de mis pies y grité arrimandome a la pared. Miré con inseguridad a la chica y seguí caminando hacia la oscuridad

-Una cosa os diré Milady! Miles de chicas como yo andan a estas altas horas de la noche! con este mismo frío! vais a ayudarlas a todas?!

Me giré al ver que ya había una distancia considerable

-Yo creo que no, así que si no es a todas es a ninguna o a otra que se deje, no voy a traicionarlas de ese modo. ¿Porque yo si y ellas no? ¿Porque soy rubia? Oh...excusez-moi, demoiselle, con la porquería que tengo no se ve que soy rubia, ni siquiera que el color de mi piel es pálido como la leche, no voy limpia como vos...pero no necesito ayuda!

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