Pocos barcos a la vista [Emma Wayne]

por **Romilda Hetfield** Lun Dic 12, 2011 9:08 pm

Era de tarde oscura, ya poco a poco anocheciendo, apenas quedaba un sol que iba apagándose y ocultándose a lo lejos, como despidiendose de todos aquellos que iban a verlo en su apagón. Romilda decidió darse un paseo por el puerto, para pensar o simplemente para sentarse a esperar a sus hermanos, a lo mejor llegarían algún día y no podía permitirse no estar allí. No se divisaban muchos barcos anclados, ni llegando al puerto ni yéndose. Eso era muy extraño, pocas veces había escasas embarcaciones, ya sea por mercadería o transporte. Solo había dos barcos de poco tamaño, pero parecían solos y vacíos por dentro. Todo daba un aspecto solitario.

La chica se acercó hasta las tablas de madera, sentándose allí, descalsando sus pies, quería tocar el agua aunque estuviera fría, quería sentir algo más que solo su piel. Levantó su vestido celeste claro hasta sus rodillas, metiendo despacio sus pies el el agua, que le llegaba hasta más arriba de los tobillos. Hizo leves gestos de disgusto al sentir el agua, pero rápidamente sintió un escalofrío que le recorría el cuerpo. El frío le afectaba mucho, sin embargo, siempre le gustaba tomar desiciones que la hicieran vivir un poco más.

por **Emma Wayne** Lun Dic 12, 2011 10:06 pm

Era casi de noche, en un cálido día de primavera aunque, había una espesa niebla en el muelle. que o dejaba ver casi nada.
Yo vestía una una pollera negra de tiro alto una blusa blanca con la parte superior floreada, y un chaleco de una tela fina que no era nada acalorante, lo que la hacía perfecta, combinado con una sandalias chatitas beige.
Me gustaba mucho ver el agua, el gran océano, el mar... cualquier cosa.
Ese día aún o había decidido cambiar de forma. Extrañamente, me sentía bien, sin necesidad e hacerlo. Ademas, como cambiaformas felina, en su forma animal no le agradaría mucho estar allí.

Vi a una chica, joven, sentada en la orilla del muelle con sus pies en la helada agua. Se veía tranquila, relajada, como lo estaba yo. Me acerqué a ella, con una sonrisa pegada en mi rostro, y una mirada tranquila y amigable.
-Hola... puedo sentarme?- le pregunte a la chica, pidiendole permiso de acompañarla.

por **Romilda Hetfield** Lun Dic 12, 2011 10:16 pm

Con la vista fija en sus ya helados pies, comenzó a oír unos pasos seguros y despacios que caminaban por las tablas, acercándose a su lugar. Antes de alzar la mirada, sólo pensó que se trataba de algún marinero o alguien dueño de algún barco, que nada tendría que decirle a ella. Sin embargo, una voz sonó a su lado, sin necesidad de ver, Romilda pudo darse cuenta de que se trataba de una mujer, era muy obvio debido a su voz. Sonó cordial y amable. Eso la desconcertó un poco y ya no esperó más para levantar la mirada.

Se trataba de una joven bien vestida, notable clase alta. Se había detenido a su lado, preguntándole si podía sentarse con ella. Fue algo extraño. Principalmente por pedirle permiso y segundo, por querer hacerlo. Sí, era extraño que la muchacha se encontrara con gente así. Regularmente las personas a su alrededor la ignoraban.

Sin hacerla esperar más, dió su respuesta.

- Por supuesto, Señorita... - no podía nombrar su apellido, lo desconocía, nunca había visto a aquella chica.

por **Emma Wayne** Miér Dic 14, 2011 11:02 pm

La chica me respondió, y yo le devolví otra sonrisa amable.
Me senté junto a ella en el borde del muelle, y le miré el rostro. Tenía unos bellos ojos azules celestinos parecidos a los míos. Me encantaron en un segundo.
-como te llamas?- le pregunte sin temor ni duda ni nada. Mire hacia el agua, fría y de un bellísimo azul que se movía con cada pequeña brisa del viento, en cada pequeña ola.
Me acomode un poco mi peinado moviéndome los mechones largos hacia atrás, enganchándolos en mis orejas, y corriéndome el flequillo de la frente, que apenas me dejaba ver mi horizonte.
Eché una pequeña mirada hacia el cielo, junto con una especie de bufido lento debido al frío que tenía con la niebla, el agua, y el clima de la estación, sobre todo en un muelle; y me acaricié un poco los brazos cruzándolos entre sí para generar un poco de calor entre ellos y así calentarme algo.

por **Romilda Hetfield** Jue Dic 15, 2011 12:43 am

- Romilda Hetfield - contestó al instante, mirándola ahora más de cerca. La luz comenzaba a faltar, puesto que aún teniéndo a la muchacha a su lado no podía observar claramente todos sus rasgos. La mitad de su rostro quedaba oculto bajo su propia sombra. Pero, hasta donde pudo observar (y para no ser una maleducada que no le quitaba los ojos de encima), podía destacar sus finos rasgos, su piel blanca y sus grandes ojos claros. Una muy bonita chica.

También pudo notar que la muchacha tenía frío. Sí... ya había refrescado bastante y sus pies estaban lo bastante "vivos" como para seguir torturándolos de aquel modo. Si enfermaba, la mujer de Sirius se enojaría mucho con ella. Entonces Romilda retiró los pies del agua y se los cubrió con una manta que traía.

- ¿Y su nombre? - preguntó mientras secaba sus pies.

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