La primera de muchas noches (PRIVADO, Reika) +18

por **Alexei Van Alcrof** Jue Abr 19, 2012 1:58 pm

Acababa de dejar a Megan dormida en su dormitorio y salí buscando un lugar del que me habían hablado nada mas llegar a Paris. Antes de salir tomé un abrigo negro que pudiera ocultar quien era y si cambiaba me protegiera del frío. Paso a paso fui recorriendo las calles de Paris, a cada metro que recorria notaba como había un gran ambiente en las calles, mujeres semidesnudas se me tiraban encima ofreciendome sus servicios.

Los servicios de una dama en especial era lo que iba buscando, una tal Reika me habían dicho que se llamaba y que el Burdel era el lugar donde ella residía. No es que fuera muy estricto con respecto con quien estaba pero las chicas que ahora estaban en la calle… estaban bastante sucias y temía que me pudieran pasar cualquier enfermedad, cosa que prefería evitar riesgos.

Seguí caminando hasta que di con el lugar al que tenía que ir. Era un edificio de mármol blanco y los coches de cabalo se arremolinaban en la puerta. Esto si que parecía un local adecuado y en el que al menos podía asegurarme que no salieran corriendo ni que me pegaran enfermedades o trataran de atracarme.

Entré en la puerta sin ningun problema pues dado mi buen vestir no me lo impideron y directamente fui a hablar con el camarero de la barra.-Buenas noches, quisiera saber donde puedo encontrar a Reika.

por **Reika Roux** Vie Abr 20, 2012 3:03 pm

Eso, otro más, dame otro más...- susurraba a su oído sin dejar de mover mis dedos dentro de ella, de esa chica que se me había acercado con tal calentura que apenas tuvo tiempo de abrazarme y decirme lo que le sucedía, y que necesitaba mi ayuda, claro. Un cliente la había dejado a mitad del trabajo por no estar satisfecho con su servicio y la había dejado ahí, húmeda y caliente; y sin nada de dinero. Dicho y hecho, la puse contra una pared en uno de los pasillos que sólo los "productos" frecuentábamos e hice lo que se debía hacer con ella: hacerla olvidar aquel mal rato divirtiéndonos. Al rato de tener su espalda pegada a mi pecho pensé, ¿cómo aquel retrasado la había dejado escapar? ¡Era un manjar!

La chica no paraba de gemir, aunque conteniéndose de liberar sus gritos que seguro serían oídos por medio burdel (aunque eso no fuera tan malo en realidad), y tras unas cuantas lamidas estratégicas mis dedos fueron humedecidos una vez más con su esencia, causándome un estremecimiento generalizado de placer, pero que no había alcanzado a ser un orgasmo. Salí de ella y recibí un candente beso de agradecimiento, que se hubiera traducido a más de no ser porque uno de los camareros me llamaba. Me despedí de la chica y me saboreé los dedos, arreglándome a la rápida para estar presentable. Aparecí y el camarero me presentó a quien al parecer requería de mi persona. Y vaya que era atractivo...Le guiñé un ojo al camarero agradecida por la ayuda y fijé mi mirada en aquel apuesto caballero que no dejaba de mirarme - Reika Roux, para servirle, Monsieur. ¿Qué puedo hacer por usted? - dije lenta y sensualmente, colocando uno de mis brazos en jarra en mi cintura, dejando el otro caer con gracia tal y como una pluma.

El hombre parecía muy adinerado, mas no de la realeza. Aún así, no iba a dejarle escapar.

por **Alexei Van Alcrof** Vie Mayo 04, 2012 10:04 am

Estaba esperando a la tal Reika mientras me tomaba ya mi segundo vaso de vodka. Estaba un poco impaciente y mi pantalón no dejaba oculta la enorme erección. Muchas chicas y algun que otro chico se me acercaban preguntando si quería mis servicios, algunos solo hablaban y otros a la vez que lo hacian llevaban sus manos a mi miembro haciendo que aumentara mi excitación.

El tiempo estaba pasando y no sabía ya que hacer. El hombre de la barra me había dicho que la chica estaba en el lugar pero que no sabía si iba a tardar mucho. Esperaba que el tiempo de espera mereciera la pena pues ya mis deseos no paraban de dominarme y dudaba de si seguía pasando mas tiempo de espera podría controlarme…

Por fin mi mirada se levantó cuando vi como el camarero hablaba con una chica y me señalaba. Era hermosa y no podía negar que me hacía sentir atraído por ella. Coloqué una gran sonrisa y miré a la chica a los ojos mientras se iba acercando a mi. Su voz era dulce pero con un tono sensual, haciendo que mi miembro se endureciera aun mas, tanto que hasta dolía.-Buenas noches señorita Roux, me han dicho que usted realiza todo tipo de… servicios y me gustaría contratarla para una noche… será algo peculiar eso se lo aseguro.

Sonreí ante mis palabras mientras miraba el cuerpo de la chica esperando que esta aceptara y así poder calmar mis instintos que no paraban de decir que la tomara.

por **Reika Roux** Lun Mayo 07, 2012 6:22 pm

Sí, yo me estaba haciendo más conocida aún en el burdel por aceptar peticiones un tanto fuera de lo común, y el hecho de que aquel varón me haya pedido personalmente producía una sensación de profundo "orgullo" (dentro de lo que se podía estar orgulloso en relación a este trabajo, pero me daba igual) y satisfacción de que aquella locura que había comenzado como una simple idea al aire se transformara en algo que me diera tantos beneficios monetarios, aunque arriesgara un poco mi cuerpo, algo que a Laisha no le gustaba para nada.

El hombre miraba mi cuerpo casi desnudándolo con la mirada, podía notarlo en cómo sus ojos bajaban descaradamente por su cuerpo y por cómo estaba aquel miembro destacándose bajo el pantalón; daba lo mismo si estaba desnudo o no, la erección se notaba considerable y eso hizo que me mordiera el labio un tanto impaciente.- No dudo en que será algo muy peculiar, monsieur~ -dije coqueta acercándome hasta él para pegar sutilmente su cuerpo al mío: quería provocarlo más aún, hacer que esa virilidad que ahora cogía una de mis manos rompiera el pantalón por las ansias de poseerme - Estoy a su completa disposición...pero debo decir...-respondí mientras acariciaba suavemente de arriba a abajo con mi mano abierta aquella entrepierna- que al estar en riesgo mi integridad física...el precio se eleva bastante...-sonreí ladina sin dejar de mirarlo a los ojos- espero que eso no sea un problema para su bolsillo...-me relamí y dejé de acariciarlo, volteándome con elegancia para que viera mi parte posterior- Si está de acuerdo con eso, puede seguirme...-le guiñé un ojo y me dirigí hacia mi habitación, contorneando las caderas a propósito con el fin de desearme más, de hacerme desear más...sí, podía sentir su excitación a leguas, y estaba muy ansiosa de saber de qué forma "peculiar" me tocaría satisfacerlo.

por **Alexei Van Alcrof** Mar Mayo 15, 2012 4:54 pm

Mi respiración se hizo un poco entrecortada cuando sentí como la chica se pegaba a mi cuerpo haciendo que mi miembro se irguiera aun mas duro y erecto contra el pantalón. Las caricias eran una tortura ahora mismo, notaba como el hombre de la barra y los demas presentes nos miraban curiosos y eso solo hacia que mi animal interior rugiera por querer salir y dominar a la chica sin importarle si miraban.

Cuando escuché lo del precio eso no me preocupó, en estos años habia acumulado una gran fortuna y no me importaba tener que usar una parte de ella en esto. Mi cuerpo necesitaba saciarse y ella parecía la chica indicada por lo que llevé una mano a un saco de monedas que tenia colgado del cinturón y lo hice sonar.-¿Es suficiente?-sonreí de manera un poco arrogante y comencé a seguirla.

No dejé que entre nosotros hubiera una gran distancia y menos aun mas cuando un hombre borracho la agarró de la cintura y casi la obliga a besarla.”Ah no, ella por esta noche será mia” pensé mientras se la arrebataba de los brazos y gruñía al hombre amenazandolo mientras caminaba por donde me indicaba.

No tardamos mucho en llegar a la habitación y tal como entramos le indiqué que cerrara la puerta con llave.-Es por la seguridad de los de afuera y los que puedan entrar… Se que debes estar preocupada por el motivo de esto pero si me permites creo que puedo mostrarte a lo que me refiero con…. Peculiar… -me coloqué en medio de la habitación y tras dejar mi ropa en un sillon, quedando solo con los calzones cerré los ojos y cambié a leon blanco, la piel en la que mas cómodo me sentía.

por **Reika Roux** Sáb Mayo 19, 2012 9:05 pm

Sonreí gustosa con el tintineo de als monedas revolviéndose dentro del saco y simplemente hice que me siguiera, pensando en lo que me tocaría hacer. Repentinamente un hombre visiblemente fuera de su normalidad me cogió de la cintura y trató de besarme. Yo ya había puesto mis manos delante para defenderme y alejarlo, pero no fue gracias a eso que fui liberada del agarre, sino que por la acción de mi cliente el cual gruñió intimidando al ebrio, quien se alejó se alejó con pasos distraídos hasta ser interceptado por un par de guardias. Con un gesto de alivio y unas cuantas apreciaciones en mi mente continuamos y pronto nos encerramos en la habitación, ya dispuestos ambos a dar y recibir el "servicio". Le escuché y vi desnudarse con atención, sin escatimar en sutilezas al mirar su cuerpo bien trabajado y, por supuesto, lo que se trataba de esconder inútilmente bajo su calzoncillo. Luego lo vi cambiar, a lo que mi boca se abrió suavemente en señal de sorpresa, variando a una sonrisa que reflejaba que me esperaba algo así. Sexo con "animales", ¿eh?

- Sí, sin duda es algo peculiar~...-dije hablándole al hermoso felino, acercándome a él para ponerme en cuclillas y acariciar la melena blanquecina que estaba ante mí. Ya había estado un par de veces con pedidos así, y en verdad no era algo que me aproblemaba. Al menos no era del grupito de sádicos...- Bien, pues comencemos con esto - anuncié y tras incorporarme retrocedí un par de pasos para desvestirme ante él, aunque fuera raro hacerlo para un león. Una vez desnuda me recosté en la cama con las piernas abiertas, mirándole con una sonrisa. Alcé las cejas y lo llamé con una seña de mi mano, ansiosa aunque sinceramente prefiriera al hombre rubio encima mío. Pero bueno, trabajo es trabajo.

por **Alexei Van Alcrof** Miér Mayo 30, 2012 6:45 pm

Suspiré un poco mas calmado cuando la chica no se asustó al verme en mi forma felina y no pude evitar cerrar los ojos y ronronear ante las suaves caricias que me dio. Sí, tengo que reconocerlo, seré un león blanco, el rey de la selva, bla bla bla, pero no puedo negar que soy muy mimoso y que adoro que me acaricien. Debo reconocer que el placer de las caricias lo había aprendido con el tiempo y aunque algunas no eran de tipo sexuales me hacian relajarme y olvidar de mis problemas.

Suficientes problemas que ahora mismo llenaban mi mente, mi mayor problema tenia nombre y apellido y vivía en mi casa pero no por ello seguía adorandola.

Mi miembro comenzó a endurecerse aun más al ver el cuerpo de la chica al desnuda y cuando observé como se ponía negué. No soy de los que les gusta ir al grano por lo que la miré y luego llevé mi mirada a la mullida alfombra que había en la habitación. Quería que se tumbara en ella para comenzar a lamer su cuerpo y a la vez recibir caricias.

por **Reika Roux** Lun Jun 04, 2012 2:11 pm

El león negó con la cabeza y yo arqueé una ceja un tanto desconcertada. ¿Que no era eso lo que querían todos los animales en celo? Los otros a los que me había tocado "servir" eran mucho más directos, pero supongo que no todo va a ser como uno lo cree. En fin, no me hice problema por ello y seguí su mirada a la alfombra. Algo fundamental en ese tipo de "encuentros" era estar pendiente de cada gesto, de cada gruñido o movimiento de cola...si no hacías eso, ¿cómo lo ibas a satisfacer?; y más importante, ¿cómo ibas a agregar esa bolsa de francos a tu ganancia diaria?

Me incorporé en un rápido impulso y acaricié a la pasada los cabellos blancos antes de tumbarme por segunda vez, pero esta vez en el lugar donde él quería. Volví a abrirme de piernas y a mirarlo, haciendo un gesto con el dedo para que viniera...por segunda vez. Le sonreí y le dije, sabiendo que no iba a poder responderme con más que un gruñido o un ronroneo - Adelante~

por **Alexei Van Alcrof** Vie Jun 22, 2012 5:21 pm

Asentí al ver como la chica se tumbaba en la alfombra aunque no estaba muy convencido de verla aun con las piernas abiertas, tan dispuesta. Ya lo dije, no soy de los que les gusta ir directamente a meterse dentro de la chica y punto, me gusta que ellas disfruten por lo que me acerqué lentamente y comencé a olfatear su piel mientras mi melena le hacía cosquillas en la piel.

El aroma de cada mujer es distinto y en mi forma animal podía distinguir perfectamente su perfume de su excitación y aunque me sentía tentado de ir a su entrepierna y oler allí quería ir poco a poco, lentamente.

Abrí mi hocico y con la lengua comencé a lamerle la piel de los hombros hasta los pechos y pezones que debido a la rasposidad de mi lengua observé satisfecho como se erguían. Mis ojos no se perdían de los de la chica y mi cola, despues de mucho tiempo de practica, comenzaba a acariciar los tobillos de la mujer para hacerle mas caricias y aumentar su excitación.

por **Reika Roux** Jue Jul 05, 2012 8:22 pm

A pesar de haber tenido ya algunas experiencias con animales (o más bien cambiaformas), me fascinaba el roce de la lengua ajena, en este caso áspera y larga como la cola que tocaba sutilmente mis tobillos. Era un cosquilleo que me estremecía frecuentemente, y eso se lo "pagué" con las caricias más efectivas para un felino por muy grande que éste fuese: rascarle tras las orejas con sutileza.

Me miraba a los ojos desde que había comenzado su accionar y lo vi entrecerrarlos con mis caricias. Luego, un "prr." ¡Ronroneaba! Mi risa cantarina se hubiera oído mejor de no ser por el gemido qe dejé escapar tras la enésima lamida. - Es...un león muy hermoso...pero supongo que ya se lo han dicho~ - susurré acercando un poco mis piernas una a la otra, encontrándome con el pelaje blanco que me lo impedía. En eso, tuve una idea.- Una cortesana...debe dar placer...además de recibirlo...-le susurré con esfuerzo y estiré una mano como pude hasta su hombría animal, la cual sólo pude rozar en su punta. - Acércate...Rey de la Selva...-pedí entre jadeos de deseo impaciente. Quería complacerlo a toda costa.

por **Alexei Van Alcrof** Lun Jul 09, 2012 9:55 am

Continué lamiendo los pezones y acariciando los tobillos con la cola mientras al sentir la caricia tras las orejas cerré por un momento los ojos y comencé a ronronear sonoramente.

Sonreí interiormente al escuchar como se reía aunque si hubiera estado como humano ahora mismo un rubor cubriría mis mejillas pero eso no evitó que continuara lamiendo y ronroneando al sentir las caricias. Una de mis patas comenzó a acariciar con delicadeza el vientre de la chica, prestando el maximo cuidado en evitar que sus garras se desplegaran y acabara todo esto en un baño de sangre.

No quería dañarla, quería estar con la chica y al escuchar lo que dijo de dar placer me quede un poco parado pero al sentir como su mano rozaba mi hombria un nuevo ronroneo (que sonaba mas a un gemido de placer) salió de mi hocico y aparté la pata de su vientre a la vez que me tumbaba de lado en la alfombra para darle acceso a mi miembro.

Quería sentir su mano allí, su boca, su interior… pero tenía que ir poco a poco ya que si no lograba controlarme podría hacerle mucho daño y eso es lo que ahora menos quería.

por **Reika Roux** Lun Jul 23, 2012 7:11 pm

No soy una persona miedosa (al contrario, soy más bien alguien temeraria), pero debo reconocer que cuando el león puso su pata sobre mí sentí un cosquilleo en todo mi cuerpo y un aumento (mayor aún) de mi respiración por la adrenalina que se hizo presente. Miré de reojo aquella extremidad y cuidé el no moverme demasiado: un movimiento en falso y me quedaría quizás sin piel recubriendo esa zona. Tragué saliva y busqué tranquilizarme y distraerme con lo que hacía hasta que di un suspiro interno de alivio cuando se movió para cambiar de posición, y de protagonismo.

Me acerqué a él gateando, acariciando sus patas e cuanto tuve la punta de su miembro a disposición. El hecho de que su enorme cabeza melenuda pudiera alcanzar la parte baja de mi espalda era sin duda excitante, pero tenía que enfocarme en lo que ambos deseábamos más. Lamí la punta y noté la particular textura de inmediato, tomando las precauciones necesarias con mi boca al iniciar la succión, usando una de mis manos para acariciar su base.

Los ronroneos no se hicieron esperar, y eso me encantaba. Era la prueba de que estaba haciendo bien mi trabajo.

por **Alexei Van Alcrof** Miér Ago 01, 2012 11:00 am

Mi cuerpo se estremeció y tembló de placer al sentir la primera lamida, un gran ronroneo de placer sonó por toda la habitación y saqué mi lengua para comenzar a lamer también el sexo de la chica y aventurandome un poco mas lamiendo su ano. Muchas mujeres no dejaban tomarse por allí y lo entendía, mi miembro animal ya era lo suficientemente grande y molesto (con esas puas que arañan al salir de las vaginas) como para dejarme entrar allí, pero esa era una de mis fantasías y esperaba que mi compañera me dejara.

Notaba como el orgasmo estaba cerca y mientras con una de mis patas seguía acariciando el trasero de la mujer, me tensé y levanté indicandole que parara, no iba a durar mucho mas y si me dejaba quería derramarme en su interior. Como animal tenía ese instinto, el de la reproducción… todos los animales tenemos sexo por una cosa, la reproducción, aunque ahora en mi mente solo existía el placer y el anhelo del cuerpo femenino bajo mi melena.

Me moví hasta sentarme sobre mis patas traseras siendo consciente de que mi miembro ahora estaba bastante erecto y era fácilmente reconocible. Hice los gestos con mi cadera indicandole lo que quería y esperando su respuesta para ver como ibamos a continuar…

por **Reika Roux** Dom Ago 05, 2012 11:22 pm

No tardé mucho tiempo en empezar a emitir aquellos gemidos ahogados por la “animalidad” que estaba tratando con lengua y mano delicadamente a causa de las propiedades específicas que tenía. Sabía de esas púas y del dolor que causaban…por suerte yo ya no era una primeriza y podía soportarlo, aparte de que había soportado cosas peores con otros clientes más brutos que un león blanco, y que eran mucho más descontrolados que éste.

Pude percibir la tensión de su cuerpo y me separé jadeando un poco por lo juntos que habíamos estado, lo que nos había producido un calor bastante grande, al menos a mí, aparte de la excitación propia de lo que estuvimos haciendo hasta hace segundos atrás. Le vi sentarse y supuse por intuición lo que quería, así que me volteé apoyando rodillas y palmas en el piso, dejándole todo a disposición. Le sonreí alzando las cejas y ensayé un ronroneo que me resultó ridículo, pero no sabía si había dado resultado. Me daba lo mismo, porque ese felino se iba a venir dentro de mí sí o sí.

por **Alexei Van Alcrof** Jue Ago 23, 2012 12:18 pm

Miré a la mujer esperando que entendiera mis gestos, me sentía muy al limite y si no recibia una respuesta pronto acabaría en una combustión espontánea o en un nuevo casos de “bolas azules”. Ese ronroneo aunque fuera imitado fue todo lo que necesite para caminar lentamente moviendo mi melena hasta quedar tras ella, con una lamida en el sexo disfruté antes de su sabor y tras confirmar de que estuviera lo suficientemente lubricada me levante y apoyé las patas en su cadera.

La mujer se notaba tan pequeña y delicada debajo de mí que tenía miedo a dañarla pero el deseo ahora mismo podía con mis modales y con un movimiento de cadera noté como mi miembro se acercaba a su humedad, sabía que tenia que ir lento, despacio, pero cuando la punta entró di un fuerte movimiento con las caderas hasta penetrarla por completo. Ahora empezaba lo difícil para mi y lo doloroso para ella, tenía que controlarme no quería desgarrarla pero mi cuerpo luchaba por moverse mientras mi parte racional esperaba un gesto por parte de ella para que comenzara a mover mis caderas para comenzar el movimiento de vaivén.

por **Reika Roux** Vie Ago 24, 2012 9:10 pm

Como era obvio y supuesto, mi patético intento de ronroneo no fue impedimento para que aquella bestia con mente humana se acomodara detrás de mí, incrementando el temblor adrenalínico inconsciente que ya sentía al estar compartiendo tan cerca de él. Después de todo, seguía siendo un animal salvaje, no era un perro ni un gato doméstico, y cualquier pizca de descontrol podía resultar letal, aunque yo no pensase tanto en que fuera a suceder algo así. Sus patas sobre mis caderas me hicieron sentirme propiamente suya, un impulso de posesividad que se incrementó un tanto y se mezcló con el dolor punzante de sentir la punta de su miembro en mi interior. - …! – ahogué un grito de dolor cuando le sentí completo de una sola vez. ¿Ven a lo que me refería con las pizcas de descontrol? Cerré los ojos fuertemente y aguanté estoica hasta que el dolor se hizo un poco más llevadero, mirando de reojo al animal hacia atrás y asintiéndole para que pudiera comenzar. Sabía que se estaba conteniendo, y realmente agradecía el gesto.

Los primeros vaivenes fueron más dolorosos que placenteros, debido a las espinitas que el miembro felino poseía por defecto para aferrarse a las hembras de su especie. Por eso sufrían tanto y hasta golpeaban a los machos cuando salían con la tarea ya hecha. Yo no podía golpearle, y tampoco quería hacerlo, mejor dicho; tampoco quise tras un rato, cuando el dolor provocó mi lado masoquista y le empecé a pedir más a partir del movimiento de mis caderas. Con eso, aseguraba un pago decente para el médico que tuviera que atenderme después.

por **Alexei Van Alcrof** Jue Dic 20, 2012 2:29 pm

Mantuve las patas en las caderas, guardando las garras par ano dañar a Reika pero en mi interior el lado salvaje deseaba salir pero ya sabia que demasiado daño le estaría haciendo a la mujer como para no ir con cuidado.

Me estaba costando muchisimo no dejarme ir y un velo de culpabilidad se colocó sobre mi cuerpo al escuchar su quejido y su tensión, pero mi leon solo quería seguir y cuando Reika dio el visto bueno no lo pude evitar y comencé el vaivén de caderas, “Ya te preocuparas luego de mimarla” me decía mi parte animal para hacer que no pudiera pensar en otra cosa.

No duré mucho tiempo embistiendola ya que al reprimirme tanto tiempo solo faltaron unos minutos para comenzar a derramarme en su interior, mis patas la aferraron mas contra mi para evitar que se moviera, el semen la quemaba, lo sabía pero ya no era yo, si no ese extraño animal dueño de mis deseos y de mis instintos…

por **Reika Roux** Miér Dic 26, 2012 9:55 am

Dolía, y mucho. Podría tener la mayor experiencia en el tema si quisiera, pero ni eso evitaría que mi cuerpo sufriera tanto por unos francos que bien nos venían a Laisha y a mí. Por eso aguantaba lo más estoica posible cada embestida, disfrazando mis quejidos en gemidos que salían moldeados como unos de placer extremo combinados con adrenalina pura por estar dejando que un león blanco me montase. A ratos apretaba las manos y pensaba en pedir que se detuviera (con el riesgo de que eso le excitase más, como sucedía con casi todos los clientes), pero un rostro que parecía iluminado se me aparecía metafóricamente por la cabeza y me daba ánimos; después de todo, por sus embestidas repentinamente más rápidas supuse que le iba quedando cada vez menos para acabar…

¡Y vaya cómo acabó! Su esencia fluía en mí como un río de lava, y eso mezclado con mi sangre y mi propio orgasmo hizo que mi cuerpo casi doblado por la mitad se terminase derrumbando en el piso, habiendo interpuesto las manos de milagro para no golpearme la cara. Me quedé allí un buen rato, moviéndome bruscamente en busca de aire, y mi mente en busca de un poco de cordura...y un médico.

por **Alexei Van Alcrof** Lun Feb 04, 2013 11:56 am

No duró mucho mi momento de "locura" y rapidamente al notar como se derrumbó luché contra mi mismo para cambiar a humano, estaba aterrado cuando salí de ella y ví la sangre manchando nuestros cuerpos: era una bestia.

-Perdóname Reika por favor-estaba asustado, no quería ser un asesino y si ello conllevaba dejar de tener sexo así iba a hacerlo, tomé a la chica en brazos y la deposité con cuidado en la cama, ahora era el momento de mimarla y cuidarla.-Déjame cuidarte, te pagaré el triple de lo que te prometí-

Intentaba hablar y que sonaracalmado aunque en el fondo estaba muy aterrado, agarré un paño humedecido y comencé a limpiarle el sexo mientras mis ojos buscaban los suyos esperando algun indicio de aprobación o de algo...

por **Reika Roux** Lun Feb 25, 2013 5:51 pm

Sentía un dolor agudísimo que me hacía mantener los ojos muy apretados, tanto o más como me hubiera gustado tener mis manos agarradas a las sábanas, las que no tenía a mi alcance por desgracia por el lugar en que habíamos decidido concertar de manera más “precisa” nuestro encuentro. Cuando salió de mí emití un quejido moderado de dolor que me privó incluso de respirar por unos instantes, y me dejé mover como una hoja al viento hacia la cama, aunque el dolor seguía creciendo por cada movimiento que hacía. Hubiera estado bien que me desmayara o me dieran una droga, o que me cortasen una pierna incluso. Todo eso estaba mejor que las enormes molestias que estaba sintiendo.

Le escuchaba pedir disculpas como desesperado y ofreciéndome más pago del que pudiera imaginar. Yo apenas podia pensar en eso, ¿Cómo quería que le diera una respuesta si apenas podía mantenerme concentrada en tratar de olvidar aquella molestia? Me mordí el labio y negué con la cabeza cuando me empezó a limpiar, no porque no quisiera que lo hiciera….o quizás sí, era porque no quería que lo hiciera. El dolor parecía crecer a pesar de los esfuerzos de él, como si la unión tuviera una segunda ronda.

- N-no….p-pida perdón, monsieur….- Susurré con el mayor esfuerzo que pude, manteniendo todavía los ojos cerrados que quizás no podría abrir en un buen tiempo – No se…preocupe…

Sin embargo, no pude no hacerle preocupar. El dolor terminó superando incluso a mi consciencia. Simplemente cerré los ojos, y todo se fue a negro.

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