La Presa Favorita ( Talena)

por **Alexandrai Ivanovik** Jue Mayo 24, 2012 9:15 am

Llego al Circo mirando al su alrededor. Un mundo de tragafuegos, mujeres barbudas, musicos desafinados. Un mundo sucio, de una cultura novedosa y ladina. El mundo de la fantasia y la falsedad. Pera a Alexandrai solo un motivo lo habia llevado alli: Talena. Saco el trozo de capa que la gitana dejo enredada en una rama en el cementerio. Se habia obsesionado con su larga cabellera color sangre, con su caracter, respiraba vida. No la queria para alimentarse solamente, la queria a ella y que fuera tan escurridiza, le retaba, le excitaba, ella era perfecta, para al menos los ojos de Alexandrai, que estaba impresionado. Vestido de estricto negro, con un abrigo de botones hacia arriba, unas botas cañas altas, el cabello recogido, para que ella viera perfectamente quien era, guantes de cuero, un latigo ceñido en su cintura. Infundia pavor, parecia perfectamente lo que era: un cazador. Absorbió nuevamente todo el aroma de Talena, el cual conocia perfectamente y que lo llevo alli. Siguio caminando ante la mirada de todos, como si no existieran. Solo la queria a ella. A la distancia el aroma se hizo mas fuerte, y le sugirio a Alexandrai que su presa favorita estaba cerca. No la veia, pero sentia como el viento se cortaba con cada movimiento suyo. Podria moldearla como una dama de sociedad, era lo de menos, pero primero tenia que dominarla, los metodos era lo menos importante, era el resultado lo que le interesaba finalmente. Si tuviese corazon hubiera latido con fuerza en ese momento, cuando el olor lo llevo a una carpa destartalada. Queria ver el rostro de la gitana al verlo alli. Despues de lo del cementerio tenia la certeza que no lo habia olvidado...

por **Talena Valjean** Vie Mayo 25, 2012 2:43 am

Parecía mentira que aquella carpa raída y destartalada pudiese aguantar el trote que estaban sufriendo sus entrañas. En su interior, las risas estaban aseguradas por culpa de Melalo, el monito de la anciana que compartía su carpa con Talena. Gitana y animal se estaban bañando en la misma pila de agua con ayuda de otras dos niñas gitanas, que se las apañaban para sostener al mono mientras Talena le frotaba la cabeza y el pelaje hasta asegurarse de que quedaba bien limpio. El primate chillaba, se retorcía y lanzaba manotazos tan cómicos como inútiles en pos de escaparse de su cruel destino de aseo y cuidado. Talena se había resignado a salir hecha una pena, y por eso había terminado desnudándose y metiéndose en la pila con el animal.

-Venga, enano -se mofaba continuamente al refregarle una esponja que más bien parecía un estropajo-. Si te portas bien, mamá te regalará una chuchería.

Las niñas rieron y el mono enseñó los dientes con un mohín bastante cómico. Por fin acabaron de bañarlo. Terminada la odisea, ambas niñas salieron para que se secara al sol mientras Talena recogía el estropicio. Estaba empapada de pies a cabeza y ni siquiera recordaba dónde había dejado su ropa. Pasaron varios minutos antes de encontrarla perdida bajo el montón de lienzos que servían de toallas, y riendo aún por la batalla librada se vistió con la misma. Unos pantalones ceñidos sobre los cuales se cerraron una botas mosqueteras, una camisa de lino blanca y un corsé negro. Abrochándose éste último se econtraba cuando un escalofrío recorrió su espina dorsal de un extremo a otro. Una sensación familiar y temida que agitó su pecho y la obligó a respirar hondo para mantener la calma.

Problemas.

por **Alexandrai Ivanovik** Vie Mayo 25, 2012 8:30 am

Se habia escabullido en el circo cuando el atradecer ya apagaba su llama y la penumbra entraba con todo su esplendor. Ya sin rayos de sol, y escondido en una carpa desagradable, encontro a su presa. La hermosa Talena con sus cabellos de fuego, limpiando un primate enano y feo. Otras pequeñas le acompañaban, las olfateo desde la distancia donde se habia agazapado, pero a Alexandrai no le interesaba la sangre de las virgenes y sobre todo tan pequeñas, pero tambien pudo sentir que pronto las flores despuntarian sus salvaes bellezas. Seguramente otras bestias de Paris se encargaria de ellas. Cuando las niñas se fueron con el mono en los brazos con la esperanza de encontrar un pequeño rayo de sol para que se secara, Alexandrai pudo mirar a todo esplendor a Talena, su cuerpo blanco y endurecido seguramente por los trabajos arduos, y aun asi esplendorosos, tenia rasgos de una reina. Para Alexandrai, no solo de una reina, de una dama oscura y tenebrosa y mortal. La fuerza de su sangre recorria todo su cuerpo, viajaba por sus venas y arterias, recorriendo cada rincon. Con la mirada guardo cada detalle para su memoria. Talena era viuda y conocia el mundo, y su sangre para el vampiro era terriblemente atractiva. Dio unos pasos mas, mientras la gitana se vestia sin percibirlo, iluminada por la triste luz de unos candelabros, escasos pero justos y necesarios. Alexandrai sintio la noche caer, y sonrio de lado pues el peligro de los rayos del sol tambien. Cuando se estaba poniendo su corse, Vio que su espalda se tensiono, gesto peculiar de Talena que Alexandrai habia notado desde el cementerio. Asi que con su voz grave decidio hablar.

- Me parece que en el cementerio no pude contemplar realmente su belleza.. ¿ penso esconderse de mi? ¿ o simplemente espero que regresara?...Estoy seguro que aun me recuerda...

por **Talena Valjean** Sáb Mayo 26, 2012 9:40 pm

Lo reconoció en cuanto habló. Si era sincera, no creía poder olvidar esa voz grave y aterciopelada en toda su vida, ese timbre que tantas emociones contradictorias le provocaba. Por una parte el hipnotismo de la bestia la instaba a dejarse llevar y ser seducida. Por otro, su mente racional se habría paso haciéndola mantener la guardia. Nunca des la espalda a tu enemigo, eso le habría dicho Olaria, su fiel amiga y compañera de aventuras, si hubiera estado presente en aquella carpa. Pero el cuerpo de Talena estaba paralizado por el temor y tardó en reaccionar al ser consciente de la presencia de Alexandrai tras ella.

-Es de buena educación llamar antes de entrar -ironizó jugando peligrosamente con su suerte.

Se giró lentamente mientras terminaba de abrocharse el corsé y sus ojos negros se clavaron endurecidos sobre los del vampiro. Le sorprendió comprobar que era capaz de retarle con la mirada con bastante más facilidad y soltura que cuando lo conoció en el cementerio. Tal vez, solo tal vez, todos los acontecimientos recientes le hubieran inducido la fuerza y confianza suficientes para enfrentar al inmortal muy a pesar de ser consciente de que podría matarla en cualquier momento si así lo quisiera. Claro que si no lo había hecho ya, era porque por alguna razón le interesaba mantenerla con aliento en sus pulmones.

-¿A qué debo la visita? -inquirió tajante.

por **Alexandrai Ivanovik** Lun Mayo 28, 2012 8:41 am

Alexandrai se quedo fijo en su puesto mientras notaba que Talena aun seguia de espaldas a el. Olio su miedo lo que lo contrario ¿ lo decepcionaria?, precisamente era la capacidad de lucha de la gitana lo que hacia para Alexandrai interesante la persecucion. La cabellera borgoña se derramaba como lenguas de fuego a traves de su espalda. De Pronto su voz firme, se pronuncio. ¿ Educado? no lo era, no le interesaba serlo con ella. Se giro para demostrar que no se intimidaba ante el, situacion que le parecia algo graciosa en su sordido sentido del humor, pero que le alegraba encontrar en sus presas. Alexandrai corrigio ese termino respecto a Talena, no era una presa, era una preciosa gema que el queria obtener completamente. Recreaba con lujuria las imagenes que acababa de ver, pero volvio a contenerse sin saber hasta cuando. Se paseo sin quitarle la mirada a la temeraria Gitana...

- No creo que pueda finjir mas educacion, si usted ya sabe lo que soy... ¿ No cree?, no es un lugar tan propicio para visitarla yo de preferencia escogeria otro, solo que el olor de una mujer con sus... cualidades no se olvida, Talena- Extendio el trozo de capa que se le habia enredado en el cementerio, y se acerco a ella pausadamente, hasta quedar, separados por un pequeño espacio, donde podia sentir el aliento de esa mujer, que no se daba cuenta el potencial que tenia para los ojos de Alexandrai.

por **Talena Valjean** Jue Mayo 31, 2012 2:51 am

Parecía divertido por algo que la propia Talena era incapaz de comprender. El vampiro comenzó a andar a su alrededor y ella hizo un tanto de lo mismo. Parecían dos leones midiendo sus fuerzas mientras caminaban en círculos por aquella carpa como si en cualquier momento uno de ellos pudiese saltar sobre el otro. Percibió el movimiento de la mano del inmortal y bajó la mirada, que no la cabeza, hacia lo que le mostraba. Reconoció la tela negra que encajaba perfectamente con el rasgón de su capa y se estremeció de pensar que aquella criatura pudiese encontrarla cada vez que le diese la gana con tan solo olfatear la prenda. La idea le revolvió el estómago.

-Creía que los vampiros teníais cosas más importantes que hacer que dedicaros a olfatear personas como perros de caza -proclamó alargando su propia mano para arrebatarle el trozo de tela, a menos que él se lo impidiera.

Mientras más hablaba Alexandrai, más emociones contradictorias la embargaban aturdiéndola. Por un lado era hija y amiga de científicos, y como tal su curiosidad la llevaba a querer investigar y saber más acerca de esa raza de novivos que poblaba secretamente el planeta. Por otro, el recelo por Alexandrai aumentaba con cada palabra de éste hasta el punto de llegar a sentir el mismo rechazo que cualquier mujer sentiría por un hombre, sin importar su raza, que ya de por sí resultase un acosador.

por **Alexandrai Ivanovik** Jue Mayo 31, 2012 8:56 am

Las reglas morales para Alexandrai habian quedado desplazadas de su comportamiento desde el mismo momento que se convirtio en vampiro, era un acosador, un animal salvaje jugando con su presa. Miro la contradiccion en el comportamiento de Talena, pero tambien percibio la molestia... cosa que en vez de desanimarlo aumentaba su expectacion. Una humana temeraria sin ningun otro poder que el de su propio caracter. Si la hubiese conocido cuando era un mortal mas, no habria tenido atractivo para el, pero siendo un vampiro, con los sentidos agudizados, podia ver, sentir, oler, percibir con una diferencia exponencial. Podia sentir la ira que levantaba los pelos de la nuca de la pelirroja, y como su rostro se inyectaba de sangre y no era un sonrojo, apretaba las manos como dispuesta a pelear, y tensaba el dorso y la espaldo como signo de que Alexandrai no la intimidaba. Cosas juntas que no habia visto en ningun humano, al menos no todas juntas. Su resistencia a lo que el consideraba inevitable, solo le divertia pero que pasaria si Alexandrai se aburriera de la situacion, de la persecucion...La mataria sin dudarlo, pero seria para el un gran desperdicio... la queria sea como amante, como esclava de sangre o como presa... la haria suya, porque era un obsesivo demente, desde antes, mucho antes de ser siquiera vampiro... ese era su caracter.

- Pues al menos este vampiro no tiene nada que hacer, nada mas que perseguir a una hermosa mujer... tal vez en algun reflejo humano, soy como Apolo, que flechado con una flecha de oro de Eros, solo pudo ser despreciado... pero no te lo recomiendo Talena, en algo me paresco a Apolo, soy un dios, pero no tengo tanta paciencia...

por **Talena Valjean** Dom Jun 03, 2012 4:56 pm

La gitana percibió el tono de peligro en la voz de Alexandrai, pero no por ello varió un ápice su postura y determinación. Era buena estratega, de las mejores quizá, y con cada palabra que Alexandrai pronunciaba sabía algo más de él, mientras que el vampiro apenas podía ver de Talena una tercera parte de la complejidad de su persona. Dejó de caminar en círculos sin importarle que pudiera acercarse a ella y rió con una carcajada sarcástica cuando Alexandrai proclamó que no le convenía acabar con su paciencia.

-Entonces nos parecemos más de lo que había supuesto en un principio -observó alzando las cejas-. Parezco tener paciencia de santa, pero también guarda un límite.

Y con cada sílaba que pronunciaba por sí misma se daba cuenta de algo tan o más soprendente: no le tenía miedo. Puede que tan solo fuera su juguete, algo con lo que divertirse, pero pensó que si el vampiro no la había utilizado y matado ya, a esas alturas, era porque no estaba en su mente hacerlo realmente. Cogió la torera negra que le servía de abrigo y la vistió mientras se acercaba a la salida.

-¿Viene o se queda? -preguntó apartando la lona. Después lo miró y sonrió de medio lado-. Imagino que lo primero.

Evidentemente no esperó respuesta. Hiciera lo que hiciese, Alexandrai la alcanzaría en cuestión de segundos. Salió de la carpa abrazándose a sí misma para protegerse del frío que la golpeaba de forma tan violenta ahora que llevaba el cabello húmedo. No dijo nada, pero sí esperó hasta ver si Alexandrai accedía a acompañarla.

por **Alexandrai Ivanovik** Lun Jun 04, 2012 8:11 am

Alexandrai intuia pero no tenia certeza, de que la humana estaba dispuesta a vencerle,y que podia hacerlo, y sintio que habia pasado algo por alto: No sabia que era, no podia leer su mente pero si influrla, cosa que no suele hacer, pero que no era imposible. No salio enseguida, y miro a su alrededor una completa pocilga, y recogio el trozo de capa que descuidadamente la gitana habia dejado en el suelo. Alexandrai fue en pos de ella pausadamente, sin prisas, no las tenia. Algo desventajoso para la humanidad es que para estar vivo es necesario que el tiempo transcurra, naces creces, te reproduces,mueres... para el, el tiempo era un termino relativo. Mientras para Talena, era necesario correr, el podia tomarse su tiempo, y descubrir a demas de esa pose de autosuficiencia algo mas... habia sido amable hasta ese momento, solo habia mostrado una parte de su verdadero ser. Guardo el trozo de tela como un recuerdo. y tal vez en espacio de segundos, la hermosa gitana lo habia subestimado, sin tener en cuenta que a los que les late el corazon tienen mas que perder, no la conocia era cierto, pero ella tampoco. Salio de la carpa.

por **Talena Valjean** Jue Jun 14, 2012 2:39 am

Fuera el frío arreciaba. Talena se abrazó a sí misma para darse calor mientras caminaba por la sucesión de carpas que iba dejando atrás. Algunos gitanos la saludaban amablemente y ella les respondía de igual forma, pero por lo general se preocupó de esquivar acometidas o preguntas referentes al por qué de lo repentino de su actitud huraña y meditante. Las primeras fogatas comenzaba a encenderse y en ellas las gitanas más ancianas o veteranas hacían los guisos que aquella noche calentarían los estómagos de los afortunados que tuviesen tiempo y oportunidad de hacerse con uno de los pocos cuencos que poseían. El pueblo gitano pasaba hambre con frecuencia, pero no era momento de preocuparse por ello. Tenía el estómago tan revuelto, que ciertamente no se creía capaz de probar bocado por el momento.

Cuando la distancia que la separaba de las carpas, los carros y sus dueños era lo bastante prudencial como para que no hubiese accidentes, detuvo sus pasos y se paró en seco con el mentón alzado en una expresión de soberbia y firmeza. Aguzó el oído tratando de oír pasos a sus espaldas, pero no percibió nada. Sin embargo comenzaba a conocer a Alexandrai lo suficiente como para saber que no se iría tan fácilmente y que era perfectamente capaz de acecharla sin hacerse ver siquiera. Ya lo había demostrado en la carpa mientras se vestía creyendo estar sola.

-¿Qué quiere de mí exactamente?

No alzó la voz ni se giró. El oído de Alexandrai era lo suficientemente agudo como para oír hasta el más mínimo susurro que se escapase de su boca en un descuido, y así lo sabía. Dejó caer un par de minutos más que se hicieron realmente largos y tediosos antes de girarse y volver a encarar al vampiro. No había nada que poseyese y que fuera de interés de una criatura como esa, salvo su sangre, y eso no estaba tan dispuesta a darla con facilidad.

por **Alexandrai Ivanovik** Vie Jun 15, 2012 10:25 am

Se escabullo en un camino paralelo al de Talena sin perderla de vista, en la distancia veia la actitud huraña de la gitana. Al llegar al claro, supuso que Talena esperaba verlo detras de ella pero no queria ser siempre tan obvio. Como una sombra, lejos de los carros, el bullicio y las fogatas, la luna que ya habia salido, iluminaba el claro y a Talena, buscandola desconfiada. Su cabello granada se hacia mistico ante la luz de la luna, su piel parecia de terciopelo... Alexandrai esperaria, no vale la pena anticiparse y echarlo a perder todo. Miro cada movimiento de elegante soberbia de la gitana, de soberania... una reina sin reino. Pero Alexandrai podia hacerle uno, para que fuera la reina de la oscuridad, de la muerte, de la sangre. Salio de las sombras y encaro a Talena...

- Tiene toda la razon Talena he sido muy descortes con usted, vera, en el cementerio, usted era una simple y exotica presa, pero a medida que nos adentramos en esta historia - su voz era melosa, pausada enigmatica- mis planes han cambiado ligeramente... por que mi intencion no es solo beber de usted como sabra...- siguio caminando hasta tenerla cerca de nuevo, sus ojos de zafiro brillaron misteriosamente, hace mucho que no utilizaba la "influencia"- quiero que sea parte de mi vida... pero la vida mortal es tan corta... asi que deseo compartir el don de la eternidad con usted, que sea mi compañera... usted no pertenece a este mundo, no seria justo que semejante potencial se marchitara- seguia mirando los ojos de la gitana fijamente, y se acerco hasta tomar su talle- quiero que sea como yo... lo he decidido..- se apreto contra ella y la beso.

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