La soledad puede afectar también a los vampiros? [LIBRE]

por **Ayline Grigory** Miér Jun 20, 2012 9:26 pm

No sabia porque había llegado a parar a la residencial, podía estar en otro lugar mucho mejor que aquello, crucé el marco de la puerta de entrada, sin articular palabra alguna deje una pequeña bolsa de seda sobre el mesón de recepción, repleta de dinero, el cual podría pagar todo una año en ese lugar, pero ese no era el plan, solo deseaba descansar, me sentía ahogada y agobiada por todo, me había alimentado innecesariamente, "matanza por placer" , aquello nunca me había atraído...no se me que me estaba pasando... mis pensamientos fueron interrumpidos por los movimientos de la joven que me recibió, se quedo viéndome detalladamente, con sus ojos color miel, logro captar por una milésima de segundo que yo representaba un peligro para ella, me entrego una llave rápidamente, con cuidado de no tocarme y se alejó, la recibí con mi mano derecha acercándola a mi rostro para ver el numero..."19"...

Al subir me fui deleitando de las maravillosas pinturas que se dejaban apreciar a lo largo de la decolorada pared, paisajes, animales, rostros bastante hermosos por lo demás... me encontré en un pasillo repleto de habitaciones por ambos lados, caminé con cierta cautela por el, viendo cada numero pintado en las puertas, buscando el mío, me pare frente a la puerta que daba a mi habitación, por lo menos por ese día, entre dejando la puerta ligeramente abierta, el espacio era algo limitado para mi gusto, explore cada detalle, el piso bastante limpio, nada que decir respecto a eso, el verdaderamente atrayente ventanal que se encontraba junto a la cama,... la cama se veía realmente acogedora, me acerque a los vidrios cerrando las cortinas por completo, encendiendo la luz del velador que se encontraba a mi lado, me senté a los pies del lugar de descanso y apoye mi cabeza sobre mis rodillas encogidas, había comenzado a recordar el pasado, mi pasado que la verdad el recuerdo era cada vez mas sutil, lo estaba olvidando, y no podía permitir eso, el echo de llegar a París... quizás no había sido la mejor decisión.

Comencé a sentirme sola, y también deseaba recodar a mi creador, sentía que nunca pude agradecer el maravilloso regalo que me había propinado, de pronto mi mente me jugó una mala pasada, recordé el rostro de aquellas que trataron de acabar conmigo, la ira que sentí me levantó lanzando todo a mi paso llegando así a la ventana, abrí nuevamente las cortinas de par en par, que pasaría si veía el amanecer... ver el sol después de tantos años, estaba aclarando... y faltaban pocos minutos para que comenzara a iluminarlo todo.... - Odio todo esto - pensé, dejando caer mi cuerpo, quedando arrodillada frente a los vidrios...[i]

por **Kristina Luxemburg** Lun Jun 25, 2012 8:41 pm

El que no disfrutaba la vida era un completo estúpido. ¿Para que lamentar de las cosas que podrían llegar a pasar o por las que pasaron hace tanto tiempo? Era más útil quedarse en el presente, viviendo el día a día como si no hubiera otro, aunque siendo vampiro los días sobrarían por el resto de los siglos. Cada matanza para ella era como el punto crítico en donde puedes emborracharte con el robo de la juventud y vida de un ser vivo, lo disfrutaba a tal punto que podría sentir como un orgasmo de puro y exquisito placer inundaba su cuerpo apenas la sangre tocaba la punta de su lengua. Cada día buscaba algo diferente que hacer y no lo volvía a hacer hasta después de un largo tiempo, era una forma de dejar que eso se volviera especial.

En ese momento estaba tan cansada, había ido de fiesta en fiesta, no le quedaba ya mucho tiempo para poder comenzar su sueño diurno, aquello le excitaba, el peligro de sentir que el día estaba por acercarse y que debía buscar protección le llenaba de adrenalina, pero aun así no mostraba ningún sentimiento extremo, solamente una sonreía mientras con la llave en su dedo se aproximaba a la habitación que había alquilado para aquel día, después cuando la noche volviera podría simplemente volver a sus andares y tranquilamente seguir con su vida.

Su habitación era el numero 30, pero se detuvo apenas cuando iban terminando las habitaciones del “10 al 20” se detuvo exactamente en el 19, la puerta estaba abierta, podía sentir el calor de la mañana acercándose, pero no sabía qué era lo que causaba aquella sensación de desear entrar, por puro impulso abrió la puerta y encontró a una chica muy cerca de la ventana, las nubes comenzaba a teñirse de aquellos colores que anunciaban la llegada del sol, sus ojos fueron lastimados, gimió de dolor mientras se cubría con uno de sus manos, miro a aquella chica, era una de ellas, podía sentirlo en su presencia, ¿estaba tratando de hacer una loquera?. Kristina lo sentía, pero ella estaba en ese lugar y no dejaría que se destruyera, al menos no por aquella noche, cerró la puerta de golpe utilizando sus poderes para cerrarla mientras ella corría con gran agilidad hacia la ventana y cerraba las cortinas antes de que ella pudiera ver la luz del sol saliente.

-Estás loca?- pregunto pesadamente jadeando por aquella sensación de sueño que su cuerpo presentaba, aquella extraña también debía estar sintiéndolo. Cayo al piso mientras buscaba mantener sus ojos abierto –ahh… - se arrastro hasta donde estaba la chica abrazándola fuertemente mientras buscaba llevarla a la cama-Debemos…- suspiro nuevamente – Descansar… mañana podrás insultarme si deseas- dijo levantándose en un arrebato de voluntad, con la chica sujetada por la cintura la abalanzo a la cama que estaba en ese lugar, sin decir ni una sola palabra abrió las sabanas cubriéndola hasta la cabeza, ella también entro con aquel vestido de corpiño que tenia.

Se cubrieron por completo, quedando una oscuridad deliciosa, Kristina miro aquellos hermosos ojos para sonreír dulcemente tratando de mantenerse despierta –Debes odiarme ¿no es así?- entrecerró sus ojos –duerme dulce niña… mañana será una nueva noche…-

por **Ayline Grigory** Lun Jun 25, 2012 11:53 pm

La proximidad de la luz solar estaba haciéndole perder el conocimiento, tenia los ojos cerrados y su rostro pegado al cristal, de pronto escucho como la puerta se cerraba de golpe, aunque no fue capaz de voltearse a mirar, en menos de un segundo las cortinas estuvieron nuevamente cerradas y su cuerpo cayo al suelo, solo sintió como unos brazos la cargaron bruscamente - Estás loca? - aquellas palabras fueron las únicas que logro distinguir de parte de la mujer que acababa de ayudarla, ... o de arruinarle sus planes, en ese momento no fue capaz de decidir que frase era la mas acertada, esta la recostó en la cama cubriéndola del todo, la cama estaba fría, todo un alivio para su piel, inhalo hondamente sintiendo el dulce aroma de las ropas que la acobijaban y así estando ya en aquella dulce obscuridad abrió sus ojos lentamente, para ver los de su "heroína" ... era una de los suyos, esto la tranquilizo de cierta forma, y abrió su boca para articular unas temblorosas palabras antes de desvanecerse por completo - Gracias ...por aparecer - ...

A la noche siguiente Ayline despertó unos minutos antes que su acompañante, la verdad el verla a su lado aún, confirmaba el echo de que todo había sido real, se sentía como una completa idiota por lo que había echo, se destapo, y comenzó a pasearse de un lado a otro por la habitación, tenia sed, estaba mas inquieta que de costumbre, y algo mareada, bueno aquello no era tan extraño considerando el echo de que casi se calcina con el amanecer anterior....

Caminó con determinación hacia la ventana y abrió nuevamente las cortinas, esta vez la vista era muy diferente, un hermoso cielo negro, y una luna llena imponente que asomaba tras obscuros nubarrones, era un espectáculo magnifico, al verlo, se sintió totalmente arrepentida de sus actos, de haber sido completados jamas volvería a admirar tanta belleza...
Se volteó aguardando que la chica que aún descansaba en la placida cama se despertara, y con los ojos aún puestos en ella, fue hacía una esquina de la habitación, encontró unas hermosas velas negras, las cuales, fue prendiendo una por una, mientras estas daban un brillo muy tenue a lugar, su mirada volvió nuevamente a la mujer, deseaba conocer su nombre...

por **Kristina Luxemburg** Dom Jul 01, 2012 9:22 am

Había abierto los ojos cuando la noche toco la puerta de sus parpados, lentamente y con pesadez los abrió, aun sentía el malestar de haber estado tan cerca de la luz del sol, pero solamente quedaba de aquello un pequeño aturdimiento, parecia que todo hacia sido un sueño, pero la verdad es que no lo era, tenía su vestido azul pálido arrugado por haber dormido con él, su cuerpo cubierto por aquellas sabanas que le proporcionaban tranquilidad y paz tanteo a su lado para ver si aquella joven que había salvado estaba cerca de ella, pero no encontró nada. ¿Acaso fue una visión? Se levanto sin saber exactamente donde estaba, por uno segundos tuvo que quedarse sentada en el borde de la cama mientras sentía como aquel deseo de sangre y diversión crecía en su garganta y en todo su cuerpo, se relamió sus labios pálidos, para luego una sombra captar su atención, gruño levemente mientras su mirada se iba hacia ese lugar.

-Oh… eres tú... pensé que ya te habías ido a cazar- dijo con mucha naturalidad mientras se levantaba del borde de la cama. Se quedo al frente de la chica que parecía interesada en ella. Kristina la miro de reojo, parecía que nada le había pasado, suspiro aliviada mientras miraba las luces opacas de la ciudad, parecían que el cielo rosado anunciaba una tormenta que venía hacia parís-¿Por qué…?- se quedo en silencio, mientras escuchaba los truenos anunciándose-creo que eso no es de mi incumbencia- dedujo para comenzar a caminar hacia la puerta, pero algo la detuvo, antes de poder irse por completo quedo parada en aquel lugar por unos segundos.

-Mi nombre es Kristina… si deseas puedes encontrarme entre los callejones alimentándome de algún borracho- dijo sin voltear -¿quieres reclamarme? Adelante hazlo- dijo para comenzar a seguir caminando. Llego a los pasillos, parecían más iluminados de lo normal, una anciana que parecía que se encargaba de la limpieza le miro un poco extrañada, Kristina apenas sonrió para seguir caminando por aquellos largos pasillos.

por **Ayline Grigory** Mar Jul 03, 2012 11:00 pm

La chica se levanto rápidamente, dirigiéndose hacia la salida - Detente... Kristina - le dijo aceleradamente mientras se acercaba a ella - yo quiero... agradecerte, fue un error lo que trate de hacer, no estaba ... pensando - las palabras le sonaban como si ella fuera una niña pequeña dándole explicaciones a su madre - y sabes... me gustaría acompañarte ahora, la verdad necesito alimentarme, y bueno en los callejones si que hay bastardos, y bueno mientras mas malos, mas deliciosos - agrego sonriendo, dejando al descubierto sus colmillos - Por cierto... mi nombre es Ayline - diciendo esto se le acerco para dedicarle un sutil abrazo, sin previo aviso, y sin esperar una aprobación por parte de Kristina - Espérame -

Busco entre sus cosas, buscando un vestido nuevo, el que llevaba estaba bastante arrugado e impresentable, se decidió por uno color rojo colonial, arreglo un poco sus cabellos, y volvio junto a la mujer - Estoy lista, nos vamos? - le preguntó mientras le indicaba las escaleras al final del pasillo...

por **Kristina Luxemburg** Jue Jul 05, 2012 7:24 pm

Escucho la voz del vampiro diciéndole que se detuviera, ya estaba comenzando a llegar a las escaleras, por alguna razón se alegro de que se hubiera detenido en ese mismo momento que su cerebro reacciono, ya había pasado mucho tiempo desde que había estado con una persona de su misma “especie”. Giro su cuerpo para tenerla al frente de ella, sonrió de medio lado al ver que no había hecho algo que a la joven le había disgustado, al menor por ese lado podría estar tranquila.-No hay problema- susurro con dulzura para recibir el abrazo de la joven. Se sorprendió un poco, pero dejo salir una risilla emocionada.

Espero que la chica se cambiara y llegara con un vestido con un color muy lindo; el rojo siempre le había atraído, no solamente porque significaba en ese momento vida para ella, también sensualidad. Asintió mientras comenzaba a bajar las escaleras, su vestido marrón parecía bailar entre sus movimientos. Llegaron a la recepción en menos de dos segundos-volveremos antes del amanecer…- indico al recepcionista con una sonrisa mientras invitaba a su compañera a seguirla de cerca.

La noche estaba comenzando a ser fría, parecía que deseaba llover, eso iba a ser un leve problema, aun así comenzaron a caminar hasta llegar a los callejones. En realidad a kristina no le importaba de donde provenía la sangre, pero su compañera parecía interesada en los malhechores… así que le concedería aquella petición. Luego de caminar unos minutos dentro de aquel ambiente húmedo y lleno de muerte aparecieron dos ladrones que al parecer había terminado de violar a una mujer en un callejón.

Los sollozos de la mujer irritaron a Kristina, pronto se volvió disgustada, no por los ladrones, más bien por la mujer que parecía estar en un estado de shock totalmente devastador. Los ladrones miraron a las mujeres con una mirada lasciva, apenas comprendió lo que en sus mentes pasaban sin necesidad de indagar en ella comenzó a reír –le dejo el honor de servirse primero- dijo inclinándose como toda una dama mientras le daba paso a su compañera.

por **Ayline Grigory** Jue Jul 05, 2012 8:22 pm

Se sentía muy a gusto en compañía de la vampiresa, quizás de vez en cuando era bueno compartir con los de su especie, y esta noche era perfecta para eso, camino muy cerca de su compañera, hasta que a sus odios llegaron los lamentos de la mujer tirada en el frió suelo del callejón semi-desnuda, y miro con desaprobación a los hombres que se acercaban de manera desafiante hacia ellas, no pudo evitar soltar una suave risa, mientras asentía a la invitación de Kristina...

Claro que intentaría que aquello fuera mas divertido, espero a que los idiotas estuvieran a una distancia prudente para escucharla y les dijo - ¿Me pueden explicar que están haciendo par de imbéciles? - les preguntó en tono sereno y directo, las caras de ambos mostraban la sorpresa por aquellas palabras, - Vaya, vaya nos salio un jovencita rebelde - ambos hombres corrieron hacia Ayline tomándola por sus brazos, mientras uno apuntaba su garganta con el filo de una navaja, - Suéltenme... - les exigió con voz algo irritada, el echo de sentir sus asquerosas manos sobre ella le disgustaba bastante - ¿Y que pasa si no lo hacemos dulzura? - le pregunto uno de ellos acercando su rostro al de ella, y pensando que ya era tiempo de enseñarles a como tratar a las damas, les sonrió dejando a la vista sus colmillos, y uso su fuerza para lanzarlos a ambos a las paredes del callejón, escuchando como algunos de sus huesos se rompían sonoramente, ahora eran ellos quienes propinaban alaridos de dolor.

Se volteo hacia su acompañante lentamente - ¿Cual crees que es mas apetecible? - le pregunto a Kristina, mientras comenzaba a acercarse rápidamente a uno de ellos, estaba casi inconsciente y la espesa sangre salia en cantidades considerables por su cabeza, lo tomo por los cabellos acercando su cuello a su boca, clavando sus caninos en la fina piel, el hombre solo pudo emitir un leve gemido, no bebió demasiado, ya que deseaba probar también al otro sujeto, en un veloz movimiento estuvo de rodillas al lado del segundo varón, el ya se encontraba totalmente inconsciente y los latidos de su corazón eran irregulares, no le quedaba mucho tiempo de vida, eso era seguro, ya sea por una o por otra razón, no se salvaría esa noche, tomo su muñeca y presiono con su uña sobre las venas hasta perforarlas, tomo las primeras gotas de sangre con su dedo indice, llevándoselo luego a su lengua para saborearlo - Aquel es mas dulce - le confirmo a su compañera apuntando al primer desafortunado...

por **Kristina Luxemburg** Jue Jul 12, 2012 7:24 am

Miraba a la chica atentamente, se había alejando unos pasos para darle más libertad de movimiento, apenas observaba con su brazo cruzados por debajo de sus senos mientras contemplaba como aquella compañera se desenvolvía en el arte de cazar, siempre le había interesado ver a otros de los suyos en el momento de cazar. Todos tenían una forma de hacerlo, unos más bruscos, brutos y sin pizca de gracia, más otros, eran dulce, temerosos, divertidos.

Se acerco a uno de ellos cuando la joven expreso su opinión, le miro, ya estaba muerto, con un punta pie lo llevo hasta el otro extremo del callejón-puedes quedarte con el- dijo sonriendo con dulzura mientras sus caninos nacían al mismo tiempo que veía atentamente a la mujer horrorizada que estaba buscando arrastrarse para huir de una muerte segura –yo me quedare con ella- aclaro sujetando a la mujer de un hombro para alzarla y sujetarla dulcemente.

La había acercado a su cuerpo, la mujer temerosa busco hacerse una bolita mientras gimoteaba, Kristina le acaricio el cabello, para luego besarla en los labios. Con aquella expresión de cariño la mujer destrozada por antes los hombres muertos se había tranquilizado. Cerro sus ojos entregándose a la muerte que le proporcionaba los brazos de Kristina.

por **Ayline Grigory** Dom Jul 29, 2012 11:58 pm

Ayline se quedo totalmente en silencio mientras bebía rápidamente del joven, antes de que su sangre se volviera del todo fría, aunque sus ojos no fueron capaces de despegarse de la mujer que yacía en los brazos de la vampiresa, era conmovedor como la muchacha se entregaba pasivamente a la muerte, quizás morir así no era del todo malo para ella...puede que hasta la muerte mas dulce que pudiera encontrar en los macabros callejones

Dejo todos aquellos pensamientos de lado, y se incorporo nuevamente, limpio suavemente con sus manos el polvo de su vestido, he intento arreglar también su cabello, extrañamente aún se sentía insatisfecha.

Su cuerpo comenzaba a sentir las consecuencias de lo que había provocado su mente, al hacerla exponerse tanto, y no solamente a ella, si no, tambien a Kristina, y estaba apenada por eso... - Kristina, aún me siento en deuda contigo, es extraño, no que hubiera pasado de no ser porque tu apareciste... siempre andas savando a vampiros desquiciados? - en sus labios se dibujo una calida sonrisa, y sus ojos se elevaron a lo mas alto del cielo, hacia los negro nubarrones que se posaban sobre sus cabezas, sintiendo en estas las suaves gotas que se dejaban caer...

off: lamento la demora

por **Kristina Luxemburg** Vie Ago 10, 2012 2:17 pm

El sabor de la sangre era indescriptible, no podía decir lo verdaderamente deliciosa que podría sentirse. Relamió sus labios luego de sentir el último gemido de la joven que había bebido, sonrió dejando el cuerpo frio de aquella tirado en el mohoso piso para levantarse y quedarse viendo por unos segundos a la joven que estaba al frente de ella. Rio suavemente mientras sus mejillas eran llenadas de un matiz más humano, menos pálido pero aun así tenía un aspecto muy espectro.-No…-Susurro mirando a los cadáveres. -podría dejarte morir fácilmente- confeso sonriendo –pero no se… algo me impulso a alejarse del sol y dejar que vivieras un poco mas- dio un salto hasta llegar a un muro en donde pudo sentarse tranquilamente para luego cruzar sus esbeltas piernas.

Era una mujer hermosa, su cabello se movía entre los vientos, la noche realzaba su belleza y la luz de la luna parecía desear iluminar todo aquellos bellos rasgos, ladeo su rostro mientras movía suavemente sus piernas. Era una persona que había sufrido mucho. La muerte de un hijo no era algo que muchos pudieran sentir, era la muerte de una parte importante, pero pocas personas podrían disfrutar aquel dolor, aquella pena. Miro hacia la luna suspirando lentamente, no entendía muy bien lo que hacía en ese lugar, no sabía el porqué estaba viva, el motivo que la movía en esos momentos.

-me gustaría saber la razón de porque necesitaste morir- dijo siendo sincera. No dejaba de ver el cielo que amenazaba por llover, las nubes que estaban eran rosadas, eran lindas, pero ninguna se atrevía a acercarse a la luna. Hermosa reina que nadie se opondría. Sonrió aceptando algo, tenia curiosidad de saber cuál había sido el punto crítico para aquella mujer, el punto que la había hecho llegar al abismo. ¿Kristina había sido el ángel negro que muchos esperaban solo para ser salvados? ¿Todos esperaban una alma caritativa que los hiciera retractarse de sus actos? Si ella no hubiera sentido aquel impulso de abrazarla y llevarla entre las sabanas la joven estuviera muerta… ¿Qué estuviera haciendo ella? Bebiendo la sangre de una cortesana era lo más probable.

Visualizo una joven que pasaba cerca del callejón, sonrió abalanzándose a ella. Prácticamente fue una sombra que la arrastro hasta la oscuridad, podía ver en los ojos de su compañera un poco de intriga, la mujer era joven, apenas un adolecente, su sangre debía ser fresca, pensaba Kristina, pero no sabía qué tipo de persona era aquella joven, sujeto a la joven que luchaba por su vida de las caderas atrayéndola a su rostro mientras con un de sus manos sujetaba sus dos muñecas y las alzaba al aire -¿te has arrepentido de tomar tantas vidas?- pregunto curiosa mientras volteaba a la jovencita para que ella viera los ojos llorosos y llenos de temor que tenia aquella víctima. El rostro malvado de Kristina se asomaba por su cuello mientras con un estúpido y débil susurro la joven le suplicaba a la contraria ayuda.-¿me dirás porque te deseabas suicidar?-

por **Ayline Grigory** Lun Sep 03, 2012 9:51 pm

El rostro de agonía de la mujer entre los brazos de Kristina era realmente indescriptible, lentamente Ayline se acerco a ambas, bajo su mirada diciendo en voz baja - Es mejor aceptar el destino que le toca a cada uno, este es el tuyo - esta fue la respuesta que le entrego a la victima de su compañera, mientras se encogía ligeramente de hombros, su vista se levanto hasta los ojos de la vampiresa, y sonrió ampliamente al escuchar su pregunta, realmente ni ella conocía la respuesta a aquello, claramente el morir, desaparecer, no estaba en sus planes - El echo de tomar vidas - comenzó diciendo - no me molesta, aunque el tomar vidas inocentes no me agrada, mayormente niños, a ellos no los toco - su mente comenzó a divagar lejos de ahí, recordando antiguas vivencias que la atormentaban ocasionalmente...

El cielo estaba cada vez mas obscuro, "Selene" se veía cada vez mas imponente y brillante, aunque los nubarrones se veían cargados, pero aún así no se dejaba caer una sola gota... - Siendote sincera Kristina, no planeo morir, no era un suicidio, mejor digamos que fue una "crisis" , creo que la soledad afecta tarde o temprano - se detuvo mientras levanto su mano para acomodar unos mechones de cabello que tapaban el rostro de la victima que acaba de sentir el poder de la joven - tu me entiendes, yo se que si, ciertamente no es necesario tener a alguien sobre nosotras todo el tiempo, el tener una pareja estable tampoco es muy probable, hay casos si, pero contados con los dedos de una mano, yo no se que opinas al respecto, pero se que en el fondo no somos tan diferentes Kristina, tu disfrutas al máximo, eso se nota, y te apoyo totalmente... y de la manera mas humilde te digo, que me gustaria volver a verte despues de esta noche, te ofrezco mi amistad ...

por **Kristina Luxemburg** Vie Sep 14, 2012 9:18 pm

Kristina no tenía reglas, pocas veces obedecía su propias limitaciones, la verdad veía a la raza humana como alimento, solamente aquella humana en el reino unido pudo llegar a su corazón, de resto, eran simples presas que ella cazaba para vivir. La Vampira sonrió ampliamente asintiendo levemente mientras escuchaba lo que tenía que decir su compañera, la verdad lo que hiciera con su vida le parecía problema de ella, Kristina había sido simplemente un pequeño juego del destino, pero por decirlo de algún modo sus frecuencias no eran las mismas que las de ella se veía un poco más tranquila, ella misma lo había admitido y humildemente le ofrecía su amistad, ella no tenía mucho que decir, en realidad nada, simplemente sonrió levemente para luego mirar hacia el cielo que amenazaba por llover, pero aun no cumplía con sus amenazas.

-Puedo darte mi amistad- le dijo sin mirarla –aunque no creo en ella… simplemente pienso que estamos en una órbita igual, pero como dices somos distintas, como lo has dicho- la jovencita estaba prácticamente en shock, no sabía lo que podría hacer para evitar la muerte. Los humanos siempre eran iguales, lloraban, improbaran por dejarle vivir.

Kristina estaba harta de sus llantos y andes de volver a hablar le dio un beso a la mujer para luego lentamente llegar a su cuerpo y adsorberle a vida mientras sensualmente le sujetaba de las caderas. Luego de apenas un gemido de lamentación, que prácticamente fue el último de la joven, su cadáver se deslizo entre los brazos de la inmortal quedándose en aquel lugar junto con sus otros alimentos. –Ahh…- se relamió los labios mientras meditaba sobre aquella situación –las cosas distintas se pueden llevar bien… pero si me aburres… no te respondo- le advirtió mirando el cuerpo de su víctima que aun caliente estaba, pero poco a poco aquel calor se desprendía de este, ya que la sangre para calentarla no estaba

por **Ayline Grigory** Mar Sep 18, 2012 9:48 pm

Esa ruda-amabilidad de Kristina la hacia sonreír de manera muy entusiasta, sabia que entre los de su especie, la amistad era mas bien una "alianza" , y aquello le parecía suficiente, aunque también estaba consiente de que esto podía romperse tan rápido como inicio, pero por el contrario, si se mantenía era algo realmente fuerte...

Se levantó del lado de la mujer y comenzó a girar graciosamente en círculos, liberando totalmente su larga cabellera la cual danzaba junto a la suave brisa que se deja sentir sutilmente en el siniestro callejón...
Mientras realizaba esto finalmente se dejaron caer las primeras gotas de lluvia, su rostro se ilumino, amaba la lluvia, se detuvo y volvió a mirar a su compañera, sus ojos brillaban a causa del vital liquido consumido recientemente - Siempre eres así? o el echo de que me hayas salvado te hace ser mas irritante - le dedico una sonrisa traviesa dejando al descubierto sus colmillos, demostrando así que sus palabras no eran con mala intención - Nos queda tiempo aún ... - le dijo mirando el amplio cielo obscuro que las cubría, faltaban un par de horas para el amanecer...

Caminó hacia los cuerpos sin vida que habían dejado botados, y tomando por el cuello el cadáver de la mujer, la levanto bruscamente y la arrojo con fuerza al otro lado del callejón, mientras le hacia un gesto de despedida, repitiendo esto con los otros dos, al terminar de despejar el camino sus ojos se posaron nuevamente sobre la vampiresa, - Que te parece si vamos a divertimos con algunos asustadizos humanos? - le preguntó mientras le hacia un gesto de aliento con su mano derecha - Me gustaría ver tus habilidades... -

por **Kristina Luxemburg** Dom Oct 28, 2012 9:31 pm

Cuestiones son las que no puedes entender a simple vista, esa eran cosas que Kristina se preguntaba de vez en cuando, no sabía si era seria una de aquellas veces que se quedaba un poco ¿aturdida? Por las preguntas que venían a su cabeza. ¡oh! Siempre era lo mismo, cuando llegaba algo nuevo, algo interesante que llenaba su vida… lo hacían con una facilidad e inmensidad que comenzaba a sentir que vivía de nuevo… pero como llegaban se iban, tal vez estaba utilizando muchos puntos suspensivos, era algo que no sabía, por alguna razón le gustaba quedar como con puntos suspensivos, tal vez así era su vida, por esa razón se llevaba bien con la eternidad, porque había quedado como puntos suspensivos… en ese lugar, esperando que una palabra fuera escrita o simplemente el párrafo siguiera en otra línea, pero nunca daba a un final.

¿Por qué aquella dulce joven que parecía amable junto a ella deseaba ponerle un punto y final a su vida? No lo entendía y no deseaba llegar a entenderla porque eso le hacía más interesante, ya que si no hubiera sido interesante, desde hace una media hora ya aquella creatura chupa sangre que la mujer tenía al frente, de cabellos rubios y ojos avivados, se hubiera ido por algo mucho más interesante. ¿Qué sentimientos provocaba ella como ser en aquel otro ser? ¿Qué sentimientos provocaba ese ser en este ser? Eran tantas preguntas que no sabía responder, pero solamente pudo sentir como una sonrisa aparecía en su rostro, era simplemente gratificante ver a otra de sus “especia” danzando de forma incoherente entre los cadáveres que alguna vez fueron su cena pero en este momento lo único que sirve es para estorbar y ser comida de los gusanos, le dieron unas ganas de danzar con ella, pero se las aguanto ya que las primeras gotas de lluvia tocaron su cabellera, una toco su nariz haciendo que se moviera de un lado a otro por ser simplemente… molesto.

-Molesto…- susurro mirando hacia un lado. No se refería a la chica, simplemente a aquella sensación humana que era algo que aun no podía evitar. ¿Humano? ¿Qué significado tendría esa palabra para ellos? ¡Comida! Era lo único que exactamente podría significar. Dejo salir una leve risa al notar la sonrisa de la chica y sus colmillos-¿horas?- dejo salir una leve risa –aun nos queda toda la eternidad- le dijo dejando salir otra risa un poco más animada mientras se levantaba de aquella pared mientras sentía como los cadáveres pasaban por un lado de ella.

-Oye hablas mi idioma- le dijo verdaderamente animada mientras se acercaba a ella. –Si me dices que te gusta los burdeles y joder hasta una escoba, siento que seremos buenas amigas- le comento en un tono bromista mientras dejaba que su risa animada invadiera el callejón por unos segundos antes de desaparecer. Los humanos corrían del agua como si fuera algún tipo de veneno, solamente era agua, no quedarían derretidos, ellos no eran de azúcar, eso ellas ya lo habían comprobado muchas veces. La lluvia no le importaba mucho, la verdad era simple, le gustaba sentir como su cuerpo se mojaba al tacto de la lluvia y si veía la necesidad de un cuerpo cálido, pero no deseaba tomar de su sangre podría buscar alguna cortesana o cortesano que le ayudara a eso, la verdad es que sexo no importaba mucho, si lo hacía bien y por francos se movía, por ella estaba más que bien-entonces… ¿A dónde iremos?- pregunto mientras miraba hacia los lados sin ver a alguna persona para ¿asustar? Todas se habían ido a refugiar de la lluvia –oh… corren más rápido que ratones cuando huelen un gato- comento riendo.

por **Ayline Grigory** Mar Oct 30, 2012 10:39 pm

Las palabras de Kristina la hacian reir... reir en serio con ganas, se sentia a gusto con ella, y sentia que podian llegar a ser mas que simplemente conocidas, y pasar a ser mas bien compañeras de travesuras, y en su mente tenia miles y miles de ellas - Eres increible le dijo, y pues si tienes razon los humanos huyen de la lluvia, creen que van a derretirse, no se que pasara por sus pequeños cerebros jajaja - diciendo esto miro hacia los costados del callejon, estaban totalmente vacios, no habia nadie a quien ¿asustar? o comer mas bien dicho, aunque se sentia satisfecha, comeria de vicio, beber nunca esta de mas...

Se acerco a la vampiresa tomandola de su brazo izquierdo - ven si nos quedamos aqui jamas encontraremos a nadie, esto ya esta muerto - le dijo con tono burlesco mirando los cuerpos que quedaron abandonados en la parte mas obscura y siniestra del callejon.
Caminaron un par de metros hasta que una silueta que se ocultaba bajo un peuqeño techo de una residencial intentando entrar llamo la atencion de Ayline, rapidamente solto el brazo de su compañera y camino hacia la silueta, era un joven que no pasaba los 25 años de edad, bastante alto y fornido, se acerco sigilosamente, para luego poner su mano sobre la espalda de este, mientras el muchacho daba un salto de sorpresa ante el toque - ¿Que desea señorita? - le pregunto mirando detenidamente a la vampiresa, ella no perdio el tiempo, y clavando su mirada en la de el, comenzo a jugar con su mente, hasta manejarla a su antojo - ¿cual es tu nombre? - le pregunto detenidamente - Armando... - le respondio este ya totalmente embobado - Besame Armando - le ordeno con voz cantarina pero segura, a lo cual el joven reacciono inmediatamente tomandola entre sus brazos con tanta fuerza que la hubiera lastimado, claro de estar... viva, Ayline respondio el beso con la misma intensidad fundiendose en el, lo abrazo y con la mano en su espalda, levanto su dedo indice haciendo un gesto a Kristina para que se acercara a ellos...

Sin parar de besarlo se las ingenio para realizar un corte en la lengua de el, para disfrutar doblemente de aquello, sabia delicioso y tenia un leve sabor a vino lo cual lo hacia aun mejor, se alejo de sus labios bajando hasta su cuello, y levanto la vista para mirar a Kristina la cual por ahora solo observaba, lo mordio suavemente a lo cual el emitio un suave gemido, claramente no deseaba matarlo aun, sabia que podian obtener mas de el...

por **Kristina Luxemburg** Dom Nov 25, 2012 1:05 pm

Sintió el tacto de la mano fría de la joven con la suya, aquello la hizo estremecer levemente, no se había dado cuenta cuanto tiempo alguien la había tocado, pero su expresión cambio rápidamente, su mente salió de un lado a otro descubriendo nuevas cosas que sus ojos captaban rápidamente sin dejarle tiempo de pensar, por eso movió levemente su cabeza andando al mismo paso que la joven.

Pronto como un león que encuentra una presa en la sabana Ayline había encontrado con quien divertirse, Kristina dejo salir un leve suspiro mientras veía como aquella joven se movía hasta encontrar a un hombre joven, muy bien portado, además de bien notado, un espécimen de aquellos que a Kristina siempre le habían atraído. Ella no se movió de donde estaba, utilizo sus poderes para poder ocultarse entre las sombras mientras detenidamente observaba los pasos, los movimientos de aquella vampiresa que se había encontrado aquella noche.

-Que niña tan traviesa – aseguro Kristina mientras se escuchaba una risilla al mismo tiempo que como el mismo demonio aparecía de las oscuras sombras que estaban ocultando su cuerpo. Cada movimiento de aquella joven le parecía exquisito, tan perfecto que parecía apenas una danza previamente ordenada –querida pecas…- comento Kristina al mismo tiempo se acercaba por detrás del joven para deslizar sus manos por las caderas del hombre mientras Ayline mantenía su cabeza hundida al cuello del hombre que parecía estar disfrutando aquello, el rostro de ella estaba siendo ocultado por sus cabellos que por culpa de la gravedad la ocultaban, se tomo el atrevimiento de quitar algunos mechones de su rostro para ver como su rostro cambiaba ante los matices que la sangre provocaba en ella. –Qué hermoso es este proceso…- susurro para luego darle un beso en la mejilla a la vampiresa al mismo tiempo que quedaba embobada con el olor que desprendía el hombre.

Sus mejillas sintieron los cabellos del hombre mientras su nariz exploraba cada uno de los tonos que tenia aquellas hormonas que el hombre comenzaba a emitir. Lujuria, que hombre más lujurioso, estaba comenzando a ser desangrado y su cuerpo reaccionaba de forma tan común, claro debían darle crédito al transe que en esos momento estaba, si no, estuviera peleando -¿Qué le has puesto en su pequeña mente?- pregunto Kristina al mismo momento que le daba al hombre un beso por el cogote deseando poder seguir ese interesante juego, pero no como practicante, si no como observadora.

por **Ayline Grigory** Sáb Dic 01, 2012 8:10 pm

Estaba tan concentrada en mis movimientos con el joven que no vi la mano de la vampiresa acercarse a mi rostro para quitarme unos mechones de pelo, que le impedían ver el proceso de alimentación, levanté mis ojos a ella para dedicarle una mirada llena de satisfacción, mientras la veía acercarse para besar mi mejilla...

Al oír sus palabras volví a prestar mi atención a ella, mientras subía a los labios del joven para darle algunos besos mientras le respondía a Kristina - Nada del otro mundo... solo algo de persuación, eso es todo...- mis manos acariciaban el rostro del hombre que ya estaba totalmente entregado - Los humanos cada vez son mas fáciles de manipular - le dije mientras bajaba mi mano a la entrepierna del el, escuchando sus gemidos conforme le acariciaba.

Mis ojos encontraron los de ella nuevamente y ahora fui yo quien lleve mi mano a su rostro para acariciar su mejilla con suavidad, el tacto entre los de nuestro linaje se sentía distinto, podría decir que hasta casi cálido - Ven ... - le invité mientras corría la cabeza del joven hacia un lado para dejar al descubierto su cuello - Un hombre así de excitado sabe mil veces mejor - le dije sonriendo ampliamente mientras me preocupaba con mi otra mano de solo darle placer, que mas daba, lo mejor era que disfrutara sabiendo que no le quedaba mucho tiempo de vida.

La verdad, ya no recordaba hace cuanto tiempo me había divertido así como lo estaba haciendo esta noche, el poder compartir un momento así con alguien, y en especial alguien como la compañera que tenía a mi lado... era realmente muy agradable, por lo que me dedique a observarle, deseaba saber si disfrutaba tanto como yo.

por **Kristina Luxemburg** Jue Dic 13, 2012 4:00 pm

Dejo salir una leve risa al escuchar la respuesta de la mujer, asintió dándole la razón, claramente los humanos se había vuelto unas presas fáciles, pero aun habían algunas buenas presas que daban unas excelentes peleas, llenas de tragedia y de una gran satisfacían al poder terminar con sus vidas. Alzo una de las cejas sin que una mueca dibujada en su rostro desapareciera en su totalidad, solamente se hizo más suave, más tranquila, pero eso no quería decir que no estuviera disfrutando cada uno de los movimientos que la mujer hacia.

Los músculos de Kristina se tensaron, por unos segundos se mordió sin saberlo sus labios al notar que algo en su pecho se hacía cada vez más caliente y comenzaba a molestarle, aquello comenzaba a recorrer todo su cuerpo hasta llegar a su garganta, en donde esta comenzó a arder dolorosamente, estaba comenzando a tener sed y sus entrañas le pedían a gritos un poco de aquella sangre que la mujer de su especie tenía en sus labios, frunció levemente el ceño mientras daba unos pasos hacia atrás sin quitarle los ojos de encima a los dos, notando como los gemidos del hombre se acumulaban en sus oídos haciendo mas tortuoso ser solamente observadora.

Sus pensamientos fueron rápidamente cortados, por unas milésimas de segundos se asusto al sentir aquel tacto en su mejilla, abrió los ojos bruscamente entrando en sí y notando que estaba viendo fijamente a su compañera, dejo salir un leve suspiro sonriendo levemente, solamente era ella -…- se relamió los labios sin decir nada. Miro el cuello del hombre que se veía hermoso, esperando por su beso mortal, podía ver aquella capa fina de sudor que llegaba a su cuello cubriéndolo por un olor de excitación que estaba amenazando en drogar el olfato de Kristina y así ella fue acercándose por detrás del hombre sujetándolo de su cintura desnuda, solamente lo suficiente como para que su compañera la suficiente libertad para avivar el sexo del hombre para así ellas poder disfrutar los condimentos que en la sangre de el había, con mucho mas placer.

Sus dientes aparecieron apenas algunos de sus cabellos rozo con el hombro del hombre, abrió lentamente sus labios sonriendo ampliamente para luego posarlo sin ninguna consideración rasgando la piel hasta llegar a aquella vena verde que palpitaba temerosa entre sus labios, peor que lamentablemente ya estaba condenada a detenerse como con reloj cuando ya poca vida le queda y su “Tic-Tac” comienza a desaparecer lenta y dolorosamente. Sus ojos entrecerrados, su mente solamente se estaba concentrando en una cosa: disfrutar aquella sangre llena de lujuria que pasaba por su garganta y la animaba cada vez más a seguir bebiendo hasta dejar salir la última gota de aquel cuerpo, deseaba dejarlo marchito, sin vida alguna, como ella dos estaban.

Pero había sido un mal juego, las imágenes comenzaron a abordar en su mente, la vida del hombre, mezclada con sus recuerdos, abrió rápidamente sus ojos para en un intento dejar de ver aquellas imágenes pero lo único que encontró fue el rostro de su hijo aun más nítido, por unos momentos se desoriento, sintiendo que el cuerpo que tenía cerca era más pequeño, más tierno, una flor marchitaba sin abrirse completamente, sus ojos comenzaron a llenarse de lagrimas mezcladas con sangre y un gimoteo salió de su garganta muriendo rápidamente en sus labios. –Ah Maldito seas…- susurro con ira mientras soltaba la garganta de aquel hombre y lo empujaba hacia adelante alejándolo de ella. Rápidamente se dio media vuelta ocultando su rostro con sus manos y sus cabellos que dulcemente parecían buscar consolarla ante su desgracia, había sido solamente una visión provocada por aquel maldito desgraciado con sus últimos esfuerzos, mezclando sus recuerdos con los de él. Bruscamente seco sus lagrimas con el dorso de la mano, tranquilizando su respiración, giro llena aun de frustración e ira quedándose mirando al miserable que la había hecho sentir más mal de lo que siempre se sentía –Matalo…- susurro al escuchar que aun su corazón latía como caballo salvaje escapando de los domadores -¡Mátalo, antes de que lo estampe contra la pared para que como un coco sus sesos salgas de su cráneo!- exclamo con fuerza mientras se giraba frunciendo el ceño sintiendo como aquella imagen azotaba su mente. No, ella lo recordaba muy bien, ella no había sido la que había matado a su hijo, había sido aquella puta celosa… ella había sido, no Kristina.

por **Ayline Grigory** Vie Ene 04, 2013 9:56 am

Era magnifico y gratificante poder disfrutar de algo así, mas a un si era compartido, el saber que tu compañero lo disfruta a la par con uno mismo, ciertamente al hombre le quedan pocos minutos de vida, y en manos de Kristina encontraría finalmente la perdición, mientras que mi mano solo continuaba con las caricias sobre el, esperaba que ella terminara lo que yo había comenzado, dándole así el gran desenlace a la situación usando su toque personal.

Pero para mi sorpresa las cosas cambiaron drásticamente, y pude notar como el cuerpo de la vampiresa se tensaba por completo, mientras bruscamente se separaba del joven, y me pedía que acabara con el de manera, me quede en silencio sosteniendo al desafortunado pero cuando volvió a moverse, decidí hacer lo que aunque no parecía era lo mejor para el, por lo que lo tome del cuello mientras lo quebraba hacia un costado, solo se escullo un leve estallido y el cuerpo cayo al suelo, ciertamente lo mejor era hacerlo desaparecer, por lo que use mi pie para lanzarlo lejos de nosotras.

Terminado esto volví rápidamente al lado de Kristina tomándola suavemente por los hombros, intentado que relajara su postura – Tranquila…soy yo – le dije en un susurro, mientras comenzaba a ubicarme frente a ella observando como en su rostro se dibujaba la rabia y la tristeza al mismo tiempo, todo un dilema para los de nuestra especie, aunque no lo pensé dos veces y la abrase mientras acariciaba su cabello con mi mano – No voy a presionarte a contarme lo que te sucede, solo quiero que te calmes… - le afirme de manera calida, intentado hacerla bajar la guardia mostrándole que ya estábamos completamente solas nuevamente.

Me quede en silencio sosteniéndola suavemente, no iba a molestarla mas si lo deseaba, pero realmente su reacción me había dejado atónita, y al no ser capaz de leer su mente era mucho peor, aunque por otra parte era mejor así, inmiscuirse en problemas no era bueno, menos cuando sus protagonistas no están consiente de ello – Lamento lo que paso – le dije soltando un suspiro, realmente deseaba ayudarla, saber que la atormentaba de esa forma, quizás había algo que pudiera hacer, pero eso solo lo sabría si ella se decidía a confiar en mi.

por **Kristina Luxemburg** Vie Ene 11, 2013 9:47 pm

El oír aquel cuello rompiéndose en manos de Alyne era lo más gratificante que había escuchado en mucho tiempo, dejo salir un suspiro mientras miraba de reojo asegurándose que aquel imbécil que la había hecho enojar estuviera realmente muerto como ella lo estaba deseando, ya no estaba cerca de la vista, algo mucho mejor para ella en su estado. Kristina se relajo al sentir las manos de la joven acercarse a ella para tranquilizarla, por unos momentos se sobresalto por el tacto, pero el susurro volvió a tranquilizarla.

¿Qué era esto? Se pregunto al sentir el cuerpo de la chica cubriendo el suyo. Era una sensación de calor entre aquellos dos cuerpos muertos que le hacía entrecerrar los ojos y tranquilizarse de inmediato –No.. no te preocupes por mi- susurre sin atreverme a quitarme de su cuerpo. –Aquel imbécil… me mostro un poco de un pasado que quisiera olvidar, pero simplemente no puedo- explico mientras de forma tranquila se salía que aquel abrazo, excusándose de que ya estaba bien, pero claro aquello nunca seria verdad.

Para poder estar bien debía olvidar de donde provenía y todo su pasado, prácticamente volver a sumergirse en una conciencia diferente de donde los recuerdos que ella poseía no existieran o solamente fuera una pesadilla creada por su subconsciente, pero nunca estaría completamente bien. Dejo salir un suspiro, tranquilizando los hombros tensos mientras miraba de reojo a su compañera que parecía estar más preocupada por ella de lo que debería estar. Dejo salir de sus labios una dulce sonrisa, no había tenido a nadie que tuviera aquella preocupación en su rostro por ella, aquello le parecía algo muy especial y se lo agradecía de sobremanera la expresión que ella había realizado con ella.

Dejo salir un suspiro mientras tranquilamente se acercaba a ella luego de girar completamente su cuerpo y quedar al frente de ella –Antes de ser un vampiro tuve un hijo y era prácticamente mi mayor tesoro en todo el mundo- indico con un deje se tristeza en su voz –Pero lo mataron… para vengarse de mi- susurro suavemente mientras su mirada se fijo en el suelo mientras realizaba una mueca para luego de forma sutil levantar la mirada y dedicarle una mirada algo lastimosa a su compañera –No te quería aguar la fiesta, pero debo agradecer tu amabilidad y tacto… me sorprendió mucho tu reacción- confeso dejando salir una risilla más tranquila y relajada

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