Soun ::ID:: Verdades Ocultas

Historia: Un 1% de la población puede decirse que es sicópata, en algunas podría llegar a un 6%. Pero ¿Qué es lo que sucede en la mente de aquellos hombres y también mujeres que buscan el hacer daño a una persona? Tiene que ver mucho con las vivencias del sujeto… así que… lector, lea para que pueda entenderlo:

Soun era un joven muy normal y de cierta forma muy equilibrado. Su historia nos lleva a corea en donde se ve entrelazado entre varias historias y momentos familiares. En general su familia tenía una muy buena posición, proveniente de unas pequeñas islas cerca de Rusia pero habitadas por japoneses, su familia luego de muchas décadas se había quedado en Corea, dejando que sus raíces se extendieran en ese lugar.

Su madre era una hermosa mujer, tenia ojos grandes y negros, su cabello era totalmente hermoso y envidiable, tenía tanta hermosura que podría decirse que tenía miedo de poder enamorarse de ella. Mientras estuvo con ella fue un pequeño feliz. Su felicidad duro hasta que a los siete años su madre murió violentamente en una discusión con su padre. Fue muy difícil para él, así que viendo al culpable todos los días se volvió ciertamente un poco más distante.

Su adolescencia fue tranquila, no era un chico rebelde ni nada, pero distante desde que su madre murió, ninguna de sus nanas podría cambiar aquello, después de todos era su madre. Luego de cumplir 18 años ya le había dicho quien sería su prometida, en ocasiones parecía que nunca funcionaba aquellos matrimonios, pero Soun sentía cierta atracción por la chica que le habían dicho que sería su esposa, en vez de sentirse enojado o disgustado acepto tranquilamente.

Busco enamorarla y parecía que funcionaba, su familia eran una de las más importantes de corea, siempre se había dicho que quedaría con alguien tan importante como él, pero las expectativas era grandes y la realidad era menos que buena. Su padre siempre le había dicho que las mujeres debían llegar vírgenes al matrimonio, si no lo hacían era una deshonres…

Su historia es la parte no contada de muchos, cuando aquel hombre locamente enamorado de su prometida se da cuenta que ella ve a otro hombre que le roba lo que por ley le pertenece… él se dio cuenta mucho antes que muchos, tenía la habilidad de leer el lenguaje corporal de las personas. Su rostro era un libro abierto, se podía notar en casa poro su cruda verdad… ¿Qué..? no se casaría con ella no era pura la odiaba, no odiaba al hombre que lo hizo, la odiaba a ella por no haberse guardado para él, la odiaba por no haberle dejado tener aquel privilegio.
Nada sucedió, la boda no se consumió, pero humo un cambio en Soun, comenzaba a frecuentar burdeles en donde las mujeres desaprovechan su cuerpo virginal… convirtiéndose en objetos… odiaba cada célula de las mujeres, la única que podría recordar sin desprecio era la de su madre, pero de resto nadie se salvaba de su mala educación.

Se dio cuenta de algo interesante cuando había conquistado a una jovencita del mismo convento que su prometida, mientras estaba entre los matorrales, encontró el punto exacto en donde desvirgarla… aquello fue.. ¡Magnifico! La forma en que se resistía, la forma en que mostraba suplica, temor y un poquito de dolor al final de ser penetrada le comenzó a dar un tipo de placer que nadie le había proporcionado. Todo gracias a las expresiones que hacían erupción como volcanes en el rostro y cuerpo de las vírgenes

Ahora sabía lo que se había perdido, la joven mientras el procesaba cada parte de su experiencia comenzaba a acusarlo de violador, eso le molesto… ella se le había insinuado, ella lo había llevado a ese punto… ahora no era virgen… no merecía vivir, así que con sus propias manos le destrozo el cuello.

Decidió irse de corea a los 28 años, ya su profesión estaba clara, su padre había muerto y él había vendido todo lo que tenía en corea, con el dinero recolectado se convirtió el dueño del restaurant más importante de parís, teniendo así una excelente cuartada de cualquier problema que pudiera encontrar. Nadie se le acercaría siendo el tan importante, debía admitir que tenía mucha confianza en sí mismo de que nadie lograría encontrar en él un asesino en serie… además… en parís puede suceder tantas cosas… que sería su lugar perfecto para poder seguir con su vida