Fuiste capaz de cazar mi alma y mi corazón con solo un disparo de tu mirada...[Soun]

por **Zelo** Dom Ago 26, 2012 9:46 am

Me habría librado de una buena.

Estaba escondido detrás de una gran roca, me perseguía un gran oso al volver de casa de Halima. No supe para donde había ido el oso feroz, ya supe que ricitos de oro tendría que haber pasado por aquí, y el oso me tenía que haber confundido. Seguro. De todas maneras me oculte bien, con cuidado me puse a andar, procurando no hacer ningún movimiento tosco hasta que encontré una pequeña casa que parecía habitada desde unos días o así, nunca la había visto ahí. Me acerque un poco para después mirar si había alguien. No vi a nadie, supuse que quien hubiera estado ahí, se habría ido a por más comodidad.

Encogí los hombros, me daba miedo entrar de todas maneras, pero no iba a esperar a que el oso me pillara y fuera su cena, no. Suspire profundamente, llegando a la puerta de la casa, el lugar estaba en calma, no había sonido alguno más que el viento que soplaba entre las copas de los arboles, haciéndolos bailar lentamente al son de la melodía de la tranquilidad.

Me mantuve quieto delante de la puerta. No supe que era esa inquietud en mi cuerpo, pero me atreví a tocar varios golpes en la puerta por si me abría alguien. Solo que nadie acudió a los golpes de la puerta-Oh...-Me sorprendí de algo que encontré en el suelo, parecía una bola de estambre-¡Dios mío!-Tire la bolsa de mi hombro y me puse a jugar con la bola de estambre- Jou Joy Joy Joy....Que divertido...-Me estaba divirtiendo poniendo mis deditos dentro de la bola de estambre-Gerr...-Bufe cuando la acerque a mi pecho y entonces rodé una vez con la bola, después tumbado boca abajo jugaba aun con la bola de estambre.

Pronto, sin más remedio solté la bola al asustarme al ver una sombra detrás de mí. De una persona alta como un gigante de barro, parecía tener un pico que le sobresalía del hombro hasta que vi, al darme la vuelta que me había asustado por un joven más o menos de mi edad, quizás mayor, no lo sé, pero parecía muy bien vestido y con una escopeta de caza. La bola de estambre se escapo de mis manos y en realidad nada paso en el silencio en el que miraba al joven. Trague saliva, me acurruque en una bola en el suelo, temiendo que fuera presa de ese joven.

por **Soun** Sáb Sep 15, 2012 12:44 am

Se había alejado del bullicio de parís para habitar una pequeña choza que estaba situada en las afueras de parís, parecía prácticamente desolada si no fuera porque él la estaba habitando hace unos días atrás. Solamente tenía lo necesario para sobrevivir, algunas mudas de ropas y granos, ya que la carne la traía a la mesa. Aquella situación le gustaba mucho, lo relajaba y distraía de todas las obligaciones que tenia tanto como jefe del restaurante y como asesino en serie. En ocasiones era mejor que su rastro se perdiera y dejar un momento de inactividad solamente para poder confundir un poco a los investigadores que podrían estar a tras rastro.

Había salido a cazar, los animales estaban escasos, parecía que los conejos no deseaban morir aquel día, aquello le dio un aire aburrido al día, prácticamente no estaba haciendo nada, así que se fue caminando como si nada hasta encontrarse con un niño de comadrejas que rápidamente dio muerte al menos a dos con su ágil escopeta que tenía como compañera. Le gustaba mucho las armas de fuego, eran sus amigas y compañeras, siempre haciendo un trabajo eficaz -hoy comeré bien…- dijo sonriendo levemente para sujetar a los dos cuerpos con una cuerda y ponerlos en su hombro para dirigirse ya a su casa temporal

La puesta estaba abierta.
¿Qué demonios pasaba aquí? Pensó enfurecido Soun mientras se acercaba, podía oír una risita salir de este, pero busco llegar hasta la puerta para realmente sulfurarse. Pero lo que vio no era para enojarse, si no para reírse. Se quedo sin habla, apenas plantado en la puerta con su escopeta en mano y sus presas en el otro hombro, sin saber si reír ante el ridículo de aquel joven de rasgos asiáticos que había interrumpido en su hogar temporal.

Cuando el joven se dio cuenta de la presencia de Soun pareció tenerle más miedo que preocuparse, el joven le miro y simplemente camino para dejar su escopeta y sus presas en la mesa. –Estorbas tipo ridículo- le dijo al ver que le obstruía el paso para ir hacia el otro lugar de la casa para quitarse la camisa, paso sobre él mientras se quitaba la camisa dejándola en la cama individual que había y dejando al descubierto su buen cuerpo, uno perfectamente tonificado por los duros trabajos y el entrenamiento al que tuvo que ser forzado por sus padres. No le dijo mas nada, la verdad no sabía que decirle… tal vez si comenzaba por… -¿Quién demonios eres?- dijo volteando luego de estar mas cómodo y de haber llegado completamente a casa

por **Zelo** Miér Oct 17, 2012 3:23 pm

Me quede mirándolo lentamente y sin saber qué hacer. Su mirada penetrante se clavaba en mi corazón congelándolo y sin poder ir a cualquier lado. Trague saliva, mi entrepierna, no sé porque lo noté, pero le dio un respingo, así que caído en el suelo me moví hacia otro lado, pero choque contra algo que golpeo mi cabeza, haciéndome daño y haciendo una queja saliendo de mis labios.

Al parecer había sido el palo de una fregona que estaba puesta de pie y sin cuidado había caído encima de mí. Bien ahora pensaba que todos estábamos, los dos estábamos siendo desconocidos. Aun seguía sin responder nada de mis labios hacia el joven que me miraba, pero su cuerpo hizo que mis labios se humedecieran y me lamiera los labios con cierto disimulo-Estas desnudo...te resfriaras...-Dijo lentamente mientras le miraba a los ojos haciendo el puede de que no cayeran sobre su pecho desnudo. Vi varias cicatrices sobre su torso-...Eres...deberías taparte-me tape los ojos para no ver más, pero el frio hizo que temblara de frio o de miedo por la presencia que tenía delante de mí.

Algo que nunca pensé que pasara, es que pudiera olvidarme de Louis de inmediato. Fue instantáneo el poder sentirme libre aunque quedasen semillas aun por quitar de en medio-Soy nadie para ti....-dije pensando mientras más o menos me iba por el camino correcto y sin entorpecer mi camino sin otra fregona u otro objeto disparatado, pero de repente, escuche como las nubes se arremolinaban entre sí, formando un gran vendaval en el que después note unas chispas de agua sobre mi rostro. Oh...

-¡ODIO LA LLUVIA!-Salí corriendo disparatadamente hasta que no sabía por dónde iba. Había comenzado a llover muy deprisa, me tapaba con la mochila que llevaba conmigo y pero aun así no me tapaba de la lluvia-AAgh!! AAGHAGH!!!!-Gritaba de dolor y hecho en una bola en el sitio, agachado en el suelo suplicando que parase enseguida. No me gustaba la lluvia, ¡la odiaba!

por **Soun** Mar Oct 30, 2012 8:38 pm

Aquel joven era extraño, debía haberse caído de algún lugar y golpeadose fuertemente, eso era lo que pensaba Soun, le miro sin importarle lo que le decía, la verdad le vendría madre lo que este pensara de el, aquello le dio mas bien risa y lo expreso con una sonrisa para luego salir un bufido-acaso no puedes ver un hombre desnudo?- pregunto mientras se acercaba a el, pero antes de seguir molestándolo salió hacia afuera, bueno un problemas menos pensó.

Comenzó a arreglar la caza, para estirarse tranquilamente, pero antes de poder respirar aliviado escucho los gritos del chillo por la lluvia ¿acaso era de azúcar? Busco disimular, ignorar, pero algo no le permitia hacerlo, asi que busco una cobija y salió hacia afuera, estaba lloviendo, bueno no se había dado cuenta y las gotas de lluvia comenzaron a caerle en el pecho, pero por suerte no era de azúcar como parecía ser aquel joven, le puso la cobija para luego arrastrarlo y llevarlo dentro de la casa.

-Odias el agua?- pregunto mientras lo dejaba en el suelo con la cobija-te quedaras hasta cuando termine de llover luego te vas- dijo para seguir con las dos presas que había conseguido -¿quieres comer?- pregunto sin voltear a verlo, comenzaba a sujetar a uno de los animales para quitarle la piel –case mucho hoy… puedo hacer un estofado para dos- susurro tranquilo mientras seguía en lo suyo.

Cocinaba bien, por algo se había hecho dueño de un restaurante, porque le gustaba la cocina, aunque no era un Chef profesional se defendía muy bien en la cocina, pero extrañamente era un hombre solitario, así que la única persona que en realidad disfrutaba su comida era él, así que tener otra persona consigo para poder comer y que esta disfrutara su comida de alguna manera se hacía… gratificante, aunque sentía que se arrepentiría de lo que estaba haciendo, no sabía exactamente por que, pero su conciencia le decía que era mejor echar aquel niño llorón de su vida lo mas ante posible, pero ¿Quién le hace caso a la conciencia? Solamente una persona en su sano juicio y el definitivamente no lo estaba

por **Zelo** Jue Feb 21, 2013 5:36 am

Miraba al hombre desde el sitio en el que me mantuve quieto. Lo miraba con cuidado procurando no hacer ninguna estupidez. Estaba mojado y solamente me sente en el suelo, en un rincon en el que pudiera estar olvidado hasta que pasara la lluvia. Ya me buscaria donde comer o que hacer con mi vida. Estaba solo. Habia oido de que una tal Keiko, se habia ido. Keiko aun resonaba en mi cabeza. Eran cosas curiosas las que me pasaban. No habia escuchado la voz del extraño, pero lo mire con la mirada perdida y cansada. Negue, no tenia hambre ahora, abrace mis rodillas con mis brazos para poder tener un soporte, queria esconderme y solamente queria desaparecer. ya me habia enterado que Louis y Halima eran parientes y que Louis compartia lecho con alguien...a quien estaba bastante unido. Eso me rompia el corazón cada vez que lo pensaba.

Parecia que la noche tardaria en llegar....Delante de mi vi una daga del tamaño de una mano grande. Era enorme la daga y podria decir que la veia muy bonita. Pero estaba mirando la daga y mas me tentaba a cogerla y a pasarla por mi cuello y asi quitarme la vida. Ciegamente, pense en que debería de hacer. Me acerque en un momento distraido que tuvo aquel joven que hablaba de un estofado para dos y tome la pequeña pero grande daga entre mis manos. La veia, le acariciaba el mango para despues pasar el dedo con suavidad por la hoja- Ah!..- me salio una gota de sangre y que cuando me la lami, esta estaba asquerosa, metalizada o algo parecido. Pero se veia hermoso el carmesi sobre mi palida piel.

De repente, la daga la tenia en la otra mano, solo había que ser rapido y de un corte podria terminar con todo. Solamente un momento, solamente un segundo y esta vida sin rumbo terminaria para siempre.

por **Soun** Vie Mar 22, 2013 6:57 am

No le debía importar lo que sucediera con aquel chico, no era de su incumbencia, el tenia mayores problemas en ese momento, como para ponerle cuidado a un niño que parecía estar más mimado de lo normal o eso le parecía a simple vista por su forma de actuar y sus rasgos tan delicados que podrían decirse que parecían al de una mujer, pero sabía bien lo que era, un hombre y por esa parte estaba seguro. Siguió con lo suyo mostrando el mínimo interés en lo que el otro hacia, el estaba más ocupado organizando todo para realizar una deliciosa comida solamente para él.

El cocinar le encantaba y mucho más si había silencio, el silencio le encantaba, la noche era una de sus horas favoritas pues todo estaba en total tranquilidad. También le gustaba los gritos de sus víctimas desgarrar aquella tranquilidad que parecía simplemente impenetrable, pero él lo lograba con tanta facilidad con los llantos y las suplicas de las desafortunadas que caían entre sus brazos. Escucho un leve quejido, pero no le intereso mucho y siguió con lo suyo.

Giro su cuerpo y encontró a aquel joven a punto de cortarse, de terminar con su vida, chasqueo la lengua para con un movimiento rápido retirarle la daga de sus manos y volver a ponerla en un lugar seguro, no podía creer que aquel joven era tan irresponsable. ¡Iba a ensuciar su casa de sangre! –Si deseas suicidarte hazlo en otra parte- indico él, si mirarlo. Duro unos segundos sin decir nada, estaba terminando de arreglar cuando se giro y le quedo mirando detenidamente. Dio los pasos que los distanciaba para levantarlo de ese lugar y tirarlo a la cama y el quedarse cerca.

Sonrió de forma maliciosa al verlo en ese lugar, pero luego se giro para sentarse en la orilla de la cama para acomodar los cabellos que se habían podido alborotar de su cabeza –No creo que algo valga tanto la pena…- susurro analizando sus palabras. El noto de sus palabras le extrañaba, parecía estar siendo comprensible y hasta tolerante, eso era extraño para él, no supo que mas decir, así que se quedo en silencio, esperando que el otro reaccionara como debería hacerlo, aunque no sabía cuál sería exactamente aquella forma de reaccionar.

por **Zelo** Dom Mar 24, 2013 10:21 am

Me levanto del suelo y lentamente o rápidamente me encontraba con el encima de mí, mirándome de cerca y rápidamente mi respiración se acelero. Se había alejado. Qué extraño era...Ya ni me acuerdo de cómo llegue a lo que parecía esta casa o su casa y finalmente escuche sus palabras y baje mi cabeza sintiéndome una mierda de persona y un despechado. Pero el primer amor siempre sigue ahí con nosotros hasta que nos muramos. Eso siempre se queda con nosotros, nadie podrá quitarnos esa espinilla del cuerpo.

Solamente le mire-...¿Me haces el amor? –Dije mirando a mis rodillas que después las junte contra mi pecho, para acurrucarme en la cama hecho una bola de carne con rizos en el cabello. Me quite los zapatos, los calcetines y me metí bajo la cama, escondiéndome de toda luz posible. Se me había ido la cabeza completamente, me estaba hartando de ser algo que nadie veía que era. ¿Por qué a los que son tímidos y buenos tienen que maltratarlos el destino? ¿Por qué? ¿Hice algo? No quería estar más con esa persona que me maltrataba y a la que llamaba Amo. Estaba solo. No tenía a nadie ahora mismo.

Al parecer seguía debajo del somier de la cama. Seguía y bueno ¿Y qué? Seguía, estaba bien ahí, hasta que algo me picaba en la espalda. Me rasque como pude pero finalmente seguí y me sacudí el cuerpo para poder quitarme de en medio una pequeña araña, tome mi zapato y la mate restregándola contra el suelo-...Fea araña...-Me le quedo mirando fijamente, al hombre que me había tirado sobre la cama.

por **Soun** Dom Abr 21, 2013 3:41 pm

No quería saber nada de aquel joven, cuando llegara el sol, le daría una patada y lo mandaría para afuera, para que se muriera fuera de su casa, no quería sangre, no deseaba que su casa estuviera manchada de sangre innecesaria, ya era suficiente con la que el derramaba todos los días. -¿Hacerte el amor?- pregunto el cómo repitiendo lo que el joven había dicho. Se echo a reír, le parecía gracioso, cómico que el joven pidiera que lo amara, al parecer no sabía lo grande que era aquella palabra. Soun le miro de reojo, iba a voltearse, pero noto que el joven se había quitado los zapatos, estos hicieron un ruido en el piso de madera de la cabaña, cubrió todo su cuerpo.

-Crees que hacer el amor con alguien es fácil… ¿Crees que si te toco, te desnudo, te penetro… seria hacer el amor?- pregunto Soun con una media sonrisilla en sus labios, noto como el joven había aplastado una araña que había por allí, el no se había percatado de ella, aunque este le paso por un lado, levanto su ceja un poco escuchando el estruendo del zapato y aplastando a la pobre araña que no tenía nada de malo, solamente su apariencia que para muchos de las personas era escalofriante. Se acerco a él, quitando la sabana que lo cubría como un muro, un fuerte para que nadie pasara, se puso encima de el, solamente quería joderlo un poco, molestarlo, echarle sal a aquella herida que tenia.

-Nadie puede hacerte el amor- le indique yo -¿Qué eres tú?- pregunte recordando que no había escuchado las pequeñas paticas de la araña y el parecía haberlo hecho con mucha claridad y sin dificultad. Sacudió su cabeza. ¿Por qué no le parecía humano? Tal vez por su mirada felina, su forma de comportante tan extraña y animal… era un desquiciado retrasado, eso pensaba Soun, pero su ingenuidad se veía reflejada en aquellos grandes, pero rasgados ojos. Dejo salir un leve gruñido –Nadie puede hacerte el amor- repitió con amargura, recordando su pasado, sus motivos y su tristeza –porque si nadie de ama, solamente te estará follando- dijo para luego reír por aquella palabra. Nadie le daría cariño mientras el proceso de las caricias se daba, solamente habría deseo, lujuria ansiedad, pero amor, el amor escasearía, tal vez habría un tipo de amor, aquel que te dice que te ama, pero solamente es amor por el cuerpo que está a punto de poseer.

-Si quieres le puedo hacer el amor a tu cuerpo- dijo el recorriendo con la mirada un poco de lo que podía ver mientras estaba encima de el, era un buen cuerpo, seguramente le haría disfrutar mucho –No, No te puedo hacer el amor, a tu alma no, porque no te amo, pero puedo amar fácilmente a su cuerpo- se acerco a su cuello, olía bien, era como una especie de fragancia a hierbas silvestres y a humedad, también a gato mojado, rozo su nariz con su piel pálida y luego deposito varios besos castos en aquel lugar, para que luego su lengua recorriera todo lo que era la clavícula y levantar la mirada –Le puedo hacer el amor a tu boca, pero a tu alma solamente le puedo dar sexo-

por **Zelo** Lun Abr 22, 2013 7:38 pm

Podía notar muchos escalofríos por mi cuerpo pero se parecían a aquellos que me daba o me dio Louis....Parpadee un poco y solamente me quedaba quieto en el sitio, mirando a todos lados en busca de una salida, pero ¿Por qué una salida? No lo sé, simplemente estaba inquieto y me hacia cosquillas algunas veces y otras no, pero gemí sin poder evitarlo y una cosa llevo a la otra. Las caricias de su lengua sobre mi clavícula eran mayores, no podría aguantar o ¿sí?

No lo sé. Tan solo sé que no podía estar mas así, tenía que hacer algo al respecto para poder no ponerme más nervioso de lo que pensaba que ya estaba de por sí, no, si, no, si....no sabía si estaba ya delirando-...¿sexo? Creo que es lo mismo...-Me quede mirándolo-....-No dije nada aunque lo que dijo de que le haría sexo a mi alma me dejo algo extrañado.

Puse las manos sobre sus mejillas y entonces algo que se movió a sus espaldas me sobresalto apartando la mirada de él. Me quede mirándolo después de que ya no vi nada más, pero después me volví a asustar al ver que “eso” volvía a aparecer detrás o por delante de la casa. Me estaba comenzando a asustar de algún modo, no quería que raro pasara.

Solamente me aferre al cuerpo desnudo al que después comencé a lamer la clavícula poco a poco, a besarlo y a dejarme llevar por el olor que desprendía este poco a poco, mientras le iba rodeando el cuello con ambos brazos atrayéndolo hacia mí y finalmente besándolo, probando el cáliz de sus labios a ver si sabia como creía que sabía.

Le besaba sin querer parar de hacerlo. Estaba sintiendo como el roce de mi lengua con la ajena estaba siendo aumentando, pero me separe y me quede mirándolo con cara de querer mas de el-...Quiero mas...-solamente puse las manos en sus hombros, respirando con agitación en el pecho, como si hiperventilara y ahora solamente me quede mirándolo fijamente. Y de nuevo ese ruido en el exterior, en el bosque o quizás entre los arbustos. Ya no me agarra a ningún sitio, sino me acurruque en aquel que tenia delante.

por **Soun** Miér Mayo 08, 2013 10:54 pm

Tenía tiempo que no tenía relaciones con alguien, tampoco le interesaba tenerlas en estos momentos, pero tono que sus caricias habían despertado el libido de los dos, sin quererlo, pues solamente había actuado como si fuera un juego, aunque quedaría como un juego, sentía la presión en su entrepierna que le decía que ese joven estaba logrando despertar en él un interés diferente, tal vez lo convertiría en su mascota personal, su esclavo sexual para cuando necesitara desahogarse como su cuerpo le pedía en estos momentos. Aunque él no quisiera admitirlo, su cuerpo era más honesto que el.

El joven también parecía también estar necesitado de desahogarse, con un desconocido que por alguna razón había elegido entre tantos hombres. ¿Por qué a él? Sintió sus caricias y los cortos besos, hasta ella forma extraña de poner su nariz en su cuello, como si estuviera percibiendo el aroma de su piel. Pudo luego besar aquellos deliciosos labios que se mostraban tan amables y lujuriosos al mismo tiempo, no pudo evitar sentir que había sido una mala idea, pues estaba seguro que no podría para luego que sus lenguas se juntaran, ya sentía las manos del chico en su cuello, mientras las de él, se escabullían para tocar su piel, clavando sus uñas en aquella piel pálida y tersa, presionando sin tener tregua, una de ellas se deslizo hacia la cintura, abriéndole las piernas para el poderse meter entre ellas y luego sujetar su pierna mientras sus labios aun seguían adorándose unos a otros.

-Me es estúpido preguntar…- confeso él. Algo más había llamado su atención, que coño era, no deseaba saber, maldijo por debajo mientras miraba al joven que tenia debajo de el, pidiéndole que siguiera con aquellos ojos de niño indefenso –Dime tu nombre…- le ordeno jadeando un poco. Su cabello negro caía por culpa de la gravedad, entrecerró sus ojos mientras escuchaba como los arbustos crujían y los pasos de aquello se hacían más evidentes, tal vez era un ojo que había llegado por el olor de su estofado, lo único que sabía es que no le interesaba. Oculto su rostro entre el cuello del chico, aspirando su olor, notando que le gustaba como olía y ya no le molestaba aquel aroma de gato mojado que tenia.

-No me has dicho que eres tú- le susurro a su oído mientras aun estaba encima de el, parecía que no quería dejarlo ir, quería mantenerlo allí, debajo, aunque aquello significara que estaba en peligro por no saber lo que acechaba afuera, aquello no le importaba, solamente parecía importarle el dolor irritante que sentía entre sus piernas –Tengo tiempo que no lo hago con alguien…- dijo algo avergonzado por su estúpida confesión. ¿Qué le interesaba a el aquello? –Tendrás que prepararse ti quieres seguir- le indico besándole castamente en los labios, para luego levantar la mirada y tragar un poco de saliva -¿quieres seguir?- se olvidarían de todo o eso esperaba el… no importaba que estuviera afuera, solamente importaba lo que había dentro.

por **Zelo** Sáb Mayo 11, 2013 6:20 pm

Every day....
Every time...
Every day...
Nunca jamás había sentido así de nervioso con alguien que parecía atender a mis pedidos o a quien se iba a molestar a dármelos ¿Me daría el un nuevo mañana? ¿Todos los días? ¿Todo el tiempo? ¿A cada rato? - Zelo...-Respondí-...pero...personas dicen que me llamaban de otro modo....pero yo no puedo recordar...-Me quedo mirándolo lentamente, mientras me tranquilizo pues era algún animal que olio el estofado, miré a los alrededores y mis manos se colocaban en sus mejillas-tiéndeme una mano, tiéndeme un hogar y yo te puedo dar un espacio vacío para ti solo...-Y ahora me pregunto porque esa confesión-...Yo tampoco tengo...o tuve el placer de hacerlo con alguien...-solo lo miro, yo le ganaba en el rubor de las mejillas, lo mío era nuevo, mas yo era el inexperto, pero algo que era evidente, era que yo quería seguir, si, todo el tiempo, todos los días, sin huir. Mi corazón obra inquieto de saber qué es eso que se dice, sexo o tener el amor al alma, o al cuerpo...¿Porque me sentía nervioso?

Quizas era porque para ambos era algo distinto, pero entonces una melodia comenzo a sonar en mi cabeza, una dulce melodia que entonces unas imagenes difusas pero que estaban algo nitidas vinieron a mi mente. Personas, una mujer, un hombre y una niña que estaba con ropas andrajosas. Se llamaba esta keiko, mis padres me llamaban y me presentaban a la niña. Dijeron que era mi hermana.... Y a mi me llamaron- . . .Kaito...-susurré sin venir a cuento, miré a quien tenia sobre mi-...Kaito...osaka...-Me quedo mirandolo fijamente a los ojos, algo confuso-...Gracias...¿como te llamas tu? -Algun motivo tenia que haber para que estuviera con quien estaba ahora. Le miré y sonreí-...Gracias!-me tiré sobre sus brazos, rodando por la cama, quedando sobre él. ¡HABIA CONSEGUIDO RECORDAR ALGO IMPORTANTE! ¡TENIA FAMILIA!

¡Keiko osaka! ¡Keiko osaka! Por eso me repetia la cabeza ese nombre, porque era de mi familia ¿lo era? Ahora me quede mirando fijamente a quien tenia debajo y seguramente el destino me trajo a él, por algun motivo ahora me quedaria con él. Esperaba que no le importase en que me quedara con él, me había hecho recordar algo que pense que habia perdido, pero...ahora que lo pensaba...¿Seguro que era mi hermana o mis padres? Me quede pensando en si era cierto...ahora me estaba desesperando, puse mis manos en mi cabeza, intentando pensar correctamente las cosas, intentando no pensar en nada que en algo que queria aclarar.

por **Soun** Sáb Mayo 18, 2013 3:00 pm

No entendía al joven, sentía que nunca lo iba a poder hacer. ¿Quería quedarse con él? Cielos, si debía estar bien solo como para pedirle a el que estuviera pendiente de él. Pero lo único que pudo fue sonreír, sonreír por la ternura que el otro trasmitía y que le era imposible hacerse el indiferente. –Nunca he sido bueno para tener mascotas- confeso mientras carraspeaba en aceptar aquella propuesta. Se había quedado por unos momentos sin que decir, pero luego este joven le dijo otro nombre, si sabía bien era japonés y sin darse cuenta habían rodado y estaban ahora en otra posición. Vaya… que fuerte era y lo más extraño era que no lo parecía, aquello lo sorprendió, dejo salir una risa y le miro mientras este parecía realmente emocionado. -¿Por qué me das las gracias?- le pregunto sin llegar a entender muy bien lo que pasaba.

Lo dejo pasar, suspiro mientras entrecerraba sus ojos –Me llamo Soun- dijo tranquilamente mientras lo veía encima de él –¿Aun quieres estar conmigo aun después de hayas recordado algo así?- le pregunto ladeando la cabeza un poco. Sus manos se volvieron a sus caderas para acomodarlo mejor, pero estas, traviesas, como él, se deslizo por su piel hasta encontrarse con aquellos dos botones y acariciarlos un poco.

-¿Aun quieres…?- sonrió de forma maliciosa mientras solamente se concentraba en sus tetillas, las cuales poco a poco se podían sentir como se endurecían al tacto y todo el cuerpo se estremecía mientras este tocaba lo que él quisiera. Tener a alguien cerca era bueno, pero en realidad no tenía un trabajo para el… ¿acompañante tal vez?.

por **Zelo** Mar Jun 11, 2013 6:59 pm

Era incluso mas atrevido que Louis...y él era pasado ¿Que pasaría si diera el paso hacia delante con Soun. Me gustaba su nombre -Me gusta tu nombre...aahg...-temblé sin poder evitarlo al ver, al notar mas bien de que me estaba gustando que me hiciera eso- ...aagh.-temblaba y dije algo como un murmuro, pero me gustaba lo que hacia, a sus preguntas no respondí dado que no tenia cabida hacer o responder con tonterías...pero tenia que decir algo, sentía como que tenia que hablar.-...aaagh...si...si...-murmure lentamente, suspirando sin poder evitarlo y mis manos se deslizaron torpes a su pecho desnudo, pinche, agarre y pellizque sus pezones con fuerza-..te gusta? -pregunte inocente, no se si le estaba haciendo daño o le gustaba, le mire fijamente a los ojos, me iba a cercando a él, bote dos veces sobre sus caderas -¡Hey! Te gusta? -pregunte de nuevo, ladeando la cabeza, mirándole y entonces me acerque a él, me acercaba cual gato peligroso se acerca a su presa con una sonrisa, pero lo siguiente es ponerme en guardia. Miré a los lados, y vi por la ventana, un hombre, vestido de cazador y en ropas negras que vi que tenia una pistola.

¿Que iba a hacer?

Seguía mirando hacia la ventana, y en cuestión de segundos, estaba estremeciéndome de dolor, mi brazo exactamente había sufrido un balazo, alguien me había disparado - ¡VAMOS! ¡ES EL CHICO! -¿Que chico? ¿Acaso? ¿Alguien me buscaba? No, no mas el amo, negué como pude, cayendo de las caderas de Soun, rodando y cayendo al suelo brutalmente, cayendo de lado en el suelo de madera "No me llenes de sangre el piso, hazlo afuera" La voz de Soun recordé, me moví para que la sangre no manchara el piso -No puedo manchar el piso...no puedo manchar el suelo...no...no quiero ir con el amo, con el amo no...no Soun...por favor...no quiero ir con el amo!! -Grite enterrado en el dolor de mi brazo, lo miré de reojo y lentamente fui apretándomelo con la mano, tenia que parar la sangre, comencé a llorar, escocia demasiado.

-¡SSOUN!! No Dejes que me lleven de nuevo con el amo, por favor...!!!-Dije suplicándole desde el suelo donde me retorcía aun de dolor, me sujete de la tela de su pantalón, no quería soltarme, comencé a llorar en sus pies, suplicándole entre sollozos de que no quería volver al pasado, no quería, quería tener una nueva vida, quería ser esa persona que hace poco recordé. Quería ser Kaito Osaka si ese era mi nombre verdadero...pero al lado de Soun. Quería ser Kaito Osaka junto con Soun.

por **Soun** Jue Jun 20, 2013 1:56 pm

Siempre le había parecido maravilloso como el cuerpo del contrario reaccionaba a sus traviesas caricias, que comenzaban a ser cada vez más versátiles, buscando cada vez más el encontrar los puntos diferentes que pudieran llegar a ser una delicia para los dos. Reía ampliamente al ver que el contrario trataba de igualarlo. Sus ojos se mantenían siempre en el y su cuerpo y como su propio reaccionaba con lo que este buscaba hacer, pero antes de darse cuenta, el chico con sus mismos rasgos orientales, estaba temblando espantosamente, parecía temeroso, pronto rodo hasta caer al piso, este se levanto, sentándose en la cama para verlo ciertamente desconcertado -¿Qué te sucede?- le pregunto. Se golpeo la cabeza, era cierto, el estaba lastimado, bueno, el chico tampoco le había recordado, temía que lo hubiera lastimado, pero ahora comenzaba a decir cosas algo incoherentes que comenzaban a tener sentido.

Se sentó mirándole, para ver como lloraba desconsoladamente, suspiro levemente mientras de sus hombros lo sujetaba alzándolo hasta poder tener la herida del hombro a su vista. –Comienza otra vez a sangrar por estar moviéndote mucho- le quito la camisa, tratando de no lastimarle mucho el brazo. Con la misma camisa hizo una presión en el brazo buscando limpiar la sangre para ver bien la herida, vio la pequeña fisura que le provocaba el dolor, sabía muy bien de que se trataba, adentro su dedo en la herida, no le importo las quejas del contrario –No volverás a donde tu antiguo amo…- le dijo mientras estaba concentrado en buscar aquel metal que podría infectarlo y matarlo aun mas rápido.

Pudo sentir el metal y con su dedo lo enrollo para sacarlo, sin delicadeza, pero con eficiencia –Deja de llorar, ahora estás conmigo- le dijo para tirar la bala a un lado, noto como la sangre comenzaba a detenerse, miro curioso, parecía que la carne se buscaba mucho más rápido que lo normal, lamio la sangre que aun seguía saliendo pero muy poco. –Que interesante…- susurro mientras se comenzaba a concentrar en la herida olvidándose de que alguien podría estar rondando el lugar, rasgo la camisa del chico para ponerla en la herida, lo empujo en la cama para luego levantarse y buscar el cuchillo que antes había utilizado para preparar su almuerzo –En un momento vuelvo- le dijo para salir a ver cual animal estaba molestando los alrededores. No acostumbraba a eliminar personas que no fueran mujeres, pero siempre tenía aquella satisfacción de matar algo diferente a lo que estaba acostumbrado, sería un nuevo reto, algo diferente con que divertirse un rato. –No te muevas de donde estas…- le dijo en un tono autoritario, pues pensaba que iba a hacer un estorbo más que una ayuda

por **Zelo** Miér Jun 26, 2013 12:40 pm

-¡IAHGH!!! DUELE! DUELE!!-Seguí llorando desconsoladamente, pudiendo no más que quejarme de cuando me metía el dedo dentro de la herida, de aquel disparo de bala. Cuando me dejo tumbado sobre la cama, él se había ido -¡No, Soun! ¡No vayas! –Dije intentando pararlo, no podía seguir estando aquí quieto, esas personas eran capaces de todo, podrían herir a Soun sin que él se diera cuenta, tenía que ir en su busca. Salí como pude, pensé en sujetarme pero las piernas me funcionaban perfectamente, aleje mi brazo de mi cuerpo, mi mano se limpiaba en mis pantalones, caminaba con rostro serio y enfadado hacia fuera del lugar, omití las palabras de advertencia que Soun me obligo a pactar pero hice lo que me dio la gana, me quede en el umbral de la puerta, intentando recuperar el aire de lo cansado que andaba, me gire a la cabaña y vi que uno venia por la espalda de Soun, no, ¡estaba en peligro!

Y sin más preámbulo del interior de mi corazón salió la fuerza del león blanco del cual yo ya era consciente de las formas en las que me transformaba, me acerque un poco más, me quite la ropa con furia y lentamente mi cuerpo fino y suave se fue trasformando en la multitud de un montón de vello blanco que cubrió mi cuerpo por completo, dándome elegancia, pureza y el aspecto de un león blanco enfurecido, corrí entonces hacia donde estaba Soun, salte sobre el agresor y lo tumbe teniéndolo bajo mis grandes zarpas.

-¡GGRRRR!!!!-Rugió el lobo feroz contra el agresor de quien en aquella forma era ahora su prometido, el león proporciono al acosador un zarpazo en el rostro, lo mordió en el cuello manchando su blanco pelaje, lo llevo hasta la muerte, para después separarse de él lentamente y tener que gruñir hasta la parca que esperaba que se llevara el alma de aquel malhechor que oso casi herir a Soun. El león entonces miro a Soun, se fue acercando a él y le esquivo tan solo para gruñir con fuerza a los demás, haciendo que estos temblaran de miedo, se cayeran de espaldas, El león se puso por delante de Soun, protegiéndolo de los demás, bromeo un intento de que iba a morder a los malhechores, estos asustados salieron por peteneras, corrieron en busca de la huida y ya no había más…gente a la que alejar.

El león se cansó. Inmediatamente se quedó tumbado en el suelo, temblando, y comenzando a jadear lentamente. El brazo lo tenía herido, quizás por alguna extraña arma al principio de tanto alboroto. La mirada del león fue dirigida hacia Soun, lo miraba con la esperanza de que no lo cortara en trozos de carne para la cena pues era aquel a quien habían herido.

por **Soun** Mar Ago 06, 2013 12:23 pm

Chasqueo la lengua, odiaba que lo desobedecieran, miro de manera desafiante al cambiante que estaba en el umbral de la puerta. Frunció el ceño, gruñendo de forma malhumorada, tenía la cierta convicción de sentirse el dominante y a toda costa debía serlo. Tal vez era algo un poco antiguo, pero así lo habían criado, como un cazador que defiende al herido a toda costa. Pero sus instintos fueron apagados, gracia a la distracción que tenía en su cabaña, no sintió aquel hormigueo que tal vez le hubiera obligado a voltear para defenderse. Estaba a unos segundos de hablar, de regañarle, reprocharle lo que había hecho sin su consentimiento.

-Te dije que…- un viento helado recorrió su espalda, no pudo contemplar lo que deseaba decir, estuvo a punto de girarse, su cuerpo instintivamente, estaba reaccionando para defenderse, llevando sus manos hacia el cuerpo del atacante, pero apenas tenía una borrosa figura de ella. ¿Tendría alguna arma? No lo sabía ¿Qué lo atacaba? Su cerebro trataba de trabajar lo más rápido posible para identificar su enemigo, pero ya era muy tarde, el peso de su cuerpo lo obligo a caer hacia el piso, en donde luego otra sombra apareció arriba de el, saltando hacia el enemigo inminente –ahg… eso estuvo cerca…- jadeo sintiendo como la adrenalina recorría su torrente sanguíneo, se levanto como pudo, un poco tambaleante, mientras veía con la ayuda de las luces acuosas de la cabaña, encontrando un gran león, quien mantenía abajo un lobo, quien mostraba los dientes grandes y blancos que tenia.

Trago saliva, salto para terminar de ponerse de pie y retroceder bien, su cuerpo se puso en guardia, para no sentirse tan desprevenido, pero recordó que no tenía a la vista al joven que lo acompañaba, cuando giro su cabeza y vio sus ropas destrozadas, cayó en cuenta de algo importante. Pudo encontrar fascinante la reacción asesina del contrario. Miraba a los otros, con cierta inferioridad, tal vez por el simple hecho de saber que el león lo protegía a él. Como cobardes salieron corriendo. Con miedo de que este terminara con ellos, pero ya el cuerpo del león estaba suficiente manchado de sangre como para seguir en aquello.

Un poco de polvo se levanto cuando el gran cuerpo del animal cayó al suelo, jadeante y cansado, se podía ver como la respiración se le hacía dificultosa, la pata comenzaba a sangrar. No era sangre del lobo, que ya comenzaba a secarse en sus fauces, se veía más viva y reciente. Soun, sin mostrar mucho miedo o entusiasmo se arrodillo para acariciar su melena blanca –Lo has hecho bien…- le susurro para tal vez tranquilizarlo –Debo agradecerte por salvarme- acerco su cabeza para unir la frente de los dos y medio sonreír –pero nunca salves una vida a costa de la tuya… no valgo tanto para ese sacrificio- concluyo al momento que se alejaba un poco para ver la herida, tenía que volver a curarla y tal vez tardaría un poco más en recuperarse… pero… ¿se quedaría así? Seria más difícil curarlo. Aunque había leído mucho sobre ese tipo de creaturas, nunca había estado tan cerca de una como para saber exactamente, como era que funcionaban.

por **Zelo** Dom Ago 18, 2013 2:59 pm

No era más evidente que sus fuerzas fueron debilitándose, el mismo sentía que no podría seguir en esa forma, lentamente fue de cierto modo, volviendo a su forma humana, mostrando la desnudez de su verdadera forma, la de Zelo, mostrándose ante Soun. No hacía nada por cubrirse, estaba bastante cansado para hacer nada, sentía que iba a morir ahí mismo-…Morir en lugar de alguien que se quiere…es una buena forma de morir…-dijo sin esperanzas de que seguiría vivo. Su nombre ahora que cayo no era Zelo, si no Kaito Osaka. ¿Cómo que recordó ahora? Seguramente su hermana estaba viva o muerta, dios sabe cómo.

Ahora estaba frente a Soun, ahora pareció que recupero las fuerzas, se cubrió pero volvió a desistir…-No tengo fuerzas….al menos ahora, podrás hacerme algo rico de comer…-le miró fijamente, haciendo un leve puchero que solamente alzo como pudo una mano-…¿Sabes? No sabía qué hacer, pero me lance, me enfurecí, temí que te hicieran daño…Debo protegerte…-Lo miraba como si no hubiera mañana, como si ahora todo dependiera del cambia formas, solamente se quedo un momento mas mirándolo hasta que cayo al suelo, mirando hacia arriba, sus manos taparon su intimidad y el comenzó a rodar en dirección opuesta tan solo porque quería que no viera su intimidad, no tenia ropa, pero cuando quedo de espaldas a él, no se acordó de la cicatriz que llevaba de hombro a nalga, en diagonal, tan grande y hermosa que también daba miedo seguir mirándola.

Lamento la mierda de post u.u

por **Soun** Sáb Sep 14, 2013 12:16 am

Pudo apreciar mejor su trasformación, con más tranquilidad y así poder apreciar cada fragmento de u metamorfosis, encontró ciertamente fascinante aquella sensación de sentir que estaba viendo algo que muy pocas personas llegarían a apreciar. El cambio del animal al humano, parecía algo doloroso, pero necesario, veía con interés como las extremidades comenzaban a cambiar a mas humanoides, su pelaje se desvanecía completamente, dejando una piel pálida y completamente desnuda, pues sus ropa la había dejado atrás cuando se había convertido en el gran felino, que desaparecía poco a poco, haciendo crujir los huesos, que se acomodaban a cada parte del cuerpo humano y masculino que se presentaba ante sus ojos.

Suspiro lentamente mientras escuchaba lo que debía aquel joven, parecía que ya había terminado el proceso de trasformación –No puedes morir tan fácil…- dijo que chasqueando su lengua, se aseguraba de ver la herida, por mala suerte estaba peor, a lo mejor había sido una herida de plata, para que estuviera tan mal. No tenía nada con que cubrirlo, debía llevarlo hacia la cabaña. Como pudo lo monto en la espalda para cargarlo, mientras aun parecía estar hablando tonterías… -Esta bien… te daré un poco de mi estofado- dijo bufando, mientras sentía todo su peso en su cuerpo. Por suerte Soun era fuerte, el cargar con cuerpos no era muy difícil para él, los cadáveres pesaban más que los cuerpos aun con vida, así que de cierta forma se lo hacía ver fácil.

-¿Protegerme?- rio suavemente, mientras comenzaba a llegar al umbral de la puerta, jadeo un poco, el chico era un poco pesado –No me gusta que me cuiden… se cuidarme solo, te lo aseguro- lo tiro con suavidad en la cama, giro su cuerpo para verle y acariciarle la cabeza –Es mejor que te quedes conmigo hasta que te cures… luego si quieres puedes irte, no te retendré- termino alborotándole los cabellos, para luego irse a servir un poco de su estofado, retiro el caldero del fuego, utilizando algunos trapos viejos para no quemarse. Aun estaban calientes, así que dejo el plato servido reposando, mientras buscaba un poco de pan, que había guardado, también cortó pedazos de queso y los puso en una bandeja. Dejo todo servido en la pequeña mesa, había dos platos de sopa, buenos pedazo de sopa y trozos de quedo duro.

Esperaba que todo se enfriara, mientras tanto, comenzó a vendar al joven, con viejas vendas que tenia por alguna emergencia, pues el cazar podría ser peligroso, le ofreció unos pantalones para que no se sintiera tan incomodo. Se sentía bien cuidar de una persona, que fuera dependiente de el. Suspiro suavemente –Ya pronto la comida estará lista, de prohíbo transformarte hasta que la herida este sana, fue una bala de plata… por eso estas tan débil- conocía un poco sobre el tema de los sobrenaturales, el había sido cazador, pero no de ese tipo de cazadores, aun así, siempre había estado preparado para todo.

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Fuiste capaz de cazar mi alma y mi corazón con solo un disparo de tu mirada...[Soun]

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