A piece of haven.. [Santhiago Morel]

por **Antonella Morel** Jue Sep 27, 2012 10:37 pm

¨Lo que ha de ser...sera.¨

Virgilio.

-A Piazza San Pedro per favore - le dijo la mujer al conchero con un dejo de nostalgia en su voz, y era así como realmente se sentía. Nostálgica.

Atravez de las ventanas del carruaje podía observar aquellas calles que había transitado durante años, desde que llego a Venecia con los Morel. En estos momentos por ella transitaban personas con hermosos disfraces y mas caras, y no era para menos, era el tercer día del carnaval veneciano la fiesta mas grande del país y sus alrededores. A pesar de haber crecido en Alemania manejaba a la perfección el acento italiano. Nadie hubiera creído que era de un lugar tan lejano. No podía imaginar que en pocos días dejaría ese lugar tan maravilloso al que sus padres le habían traído para superar aquella crisis que casi le lleva al abismo, pues estaba devastada y se odiaba tanto por su condición que Si no hubiera si do por esa familia, probablemente estaría muerta .Les tenía respeto y mucho cariño, pues además de adoptarle, Augusto y Alexandrei le acogieron como su verdadera hija, le dieron el cariño que le fue arrebatado con la muerte de sus padres biológicos y le habían enseñado las técnicas necesarias para controlarse en los momento de su transformación.

Observaba el horizonte, en esos momentos el sol se ponía tras el Adriático, un espectáculo digno de ver...de hecho ella lo observaba todos los días. Seria difícil acostumbrarse a no verle, pero ordenes son ordenes y las de su familia se acataban si o si. No se les podría negar jamás. La carta era muy explicita, ¨Tu primo Santiago ira por ti y viajaran esa misma semana a parís por tiempo indefinido…¨ No sabia quien era santhiago , nunca le había visto, o por lo menos no lo recordaba. Solo le conocía por las referencias… y no eran muy satisfactorias… De hecho, no conocía a muchos familiares, solo a sus tíos y a su prima xaziel, quien le visito repetidas veces cuando sus padres aun Vivian con ella en Venecia, y siempre venia escoltada la bella italiana… al parecer el tipo era un paranoico. -Que fastidio...- pensó. ¨Le ayudaras a tu prima con el clan y vivirás con ellos si así prefieres…¨. Lo último no era difícil, le gustaba mucho el asunto; además xaziel era muy agradable, se llevaban muy bien. Era quizás lo más cercano que había tenido a una amiga durante toda su vida.

El carruaje se detuvo había llegado a su destino, Piazza san Pedro. El cochero abrió la puerta y extendió la mano para ayudarle a bajar, esta la tomo y salió del carruaje. En el exterior todo era como debía esperarse. en la plaza se aglomeraban gran cantidad de personas . Era un espectáculo, los disfraces, la música, el ambiente…sonrió para si y volvió la mirada al cochero, quien la observaba atónito como si no creyese lo que veía, y es que ella era demasiado bella para ser real…

-Grazzie Signore... - le extendió unas monedas y se coloco un sencillo antifaz dorado, que en su parte izquierda llevaba una elegante pluma dl mismo color que resaltaba sus orbes color miel , se puso la capucha de la capa negra que le cubría y se abrió paso entre la multitud hasta llegar a uno de los edificios mas grandes, ingresando por la puerta principal donde dos hombres daban la bienvenida a los invitados pocos minutos después llego al vestíbulo del salo principal, pudo observar la pista con las parejas danzando desde lo alto de las escaleras de mármol blanco. Todos estaban tan elegantes, danzando al ritmo de un vals - puros burgueses y realeza…quiero salir corriendo…-pensó, ya que en realidad se relacionaba muy poco con es agente, en realidad no le gustaba asistir a aquellas fiestas, no se sentía cómoda. Pero sus padres siempre asistían y ya que ellos no estaban este año, era su obligación asistir, además nadie le conocía, se sentía completamente ajena a ese mundo.

A un lado de la sala se encontraba un joven recibiendo los abrigos…ella se acerco a el, soltó la cinta de su capa y la seda negra callo delicadamente, como si apenas le tocara. Así como también callo el largo cabello color chocolate llegando hasta la cintura. El vestido no podía haber sido el mas apropiado, era ceñido, resaltando las líneas de su cuerpo, Mas no apretado, el escote corazón resaltaba su busto si parecer vulgar , las mangas eran una delicada malla tranparente que parecía su propia piel, además de que tenían un toque de brillo, y la falda caía como una cascada, era simplemente precioso, y ella parecía una aparición bajando lentamente por las blancas escaleras, abriéndose paso nuevamente ante las miradas, mas no miraba a nadie, pues no estaba cómoda con tanta atención, prefería pasar desapercibida. Iría por algo de tomar, estaría dos horas y después saldría a divertirse de verdad... ese era el plan… pero la vida te da sorpresas, pues nunca sabes que encontraras tras las mascaras… y la noche apenas comenzaba...¨lo que ha de ser...sera.[/justify]

por **Santhiago Morel** Jue Oct 11, 2012 8:02 pm

UNA SEMANA ANTES DEL CARNAVAL DE VENECIA

Una noche cualquiera en la mansión Morel corría hasta que uno de los mensajeros que trabajan para la familia llegó con una misiva al parecer de Venecia…la mirada de Santhiago fue más seria cuando su hermana entró a su estudio con dicha misiva al parecer solo una carta de aquel lugar le ponía en jaque incluso el aroma del sobre era familiar.

-Est notre mère Xaziel- ella asintió y dejó el sobre en el escritorio saliendo de ahí con una sonrisa… Santhiago permaneció unos minutos mirando por el ventanal la luna estaba llena y alumbraba todo el jardín del ala oeste, se acercó a su escritorio y tomó la nota.

Saludos, querido hijo mio, hace tiempo que no se de ti…tu hermana Xaziel me ha enviado unas cartas contándome sobre el clan Morel “señores de la sombra” me parece una idea perfecta hijo que tomes enserio eso de unir los clanes antiguos de los tremere y los colmillos de plata en uno solo, pero aun así hijo no olvides que eres un Tremere si.

Bueno esta carta es para informarte que tu prima Antonella, no se si la recuerdes esta aquí en Venecia con nosotros, queremos que te hagas cargo de ella, tu prima ya sabe y esta dispuesta a aceptarla en la parte de lobos del clan, si hijo mio es una lycana, debes cuidar de ella tal cual cuidas de Xaziel e Isis, se su protector hijo, sé que es mucho pedirte pero eres el mayor y la cabeza de la Familia Morel, no hay más a quien se le pueda dar ese cargo.

Tu madre que te ama con locura como solo una madre puede hacerlo

Pdt: dice tu padre que no olvides lo que te ha mandado por las otras cartas.

Alexxandrei R. Morel

Creado por Faeledhelpara
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Dejó aquel papel sobre su escritorio y salió de inmediato a su habitación, realizando así sus maletas para el viaje, su hermana subió y le miro asumiendo lo que pasaba…

-Xaziel te encargaras de todo a mi ausencia, confió en ti- dejó un beso en la frente de su hermana y a su otra hermana le dejó un beso en la mano –Portate bien Isis en mi ausencia, espero no tener que regresar y saber cuantos cadáveres hubieron en la casa- se alejó y partió en tren a su nuevo encargo de su familia mientras ensayaba su discurso cuando viera a sus padres en Venecia.

LLEGADA A VENECIA TERCER DÍA DE CARNAVAL

Durante su estadía en Venecia, Santhiago había hecho varios convenios y tratos de negocio de suma importancia, de peso para su clan y su negocios ocultos, tanto así que aquella noche le habían invitado a una fiesta de máscaras, así que con su traje tan lustró asistió a la hora de inicio 7 pm, su reloj de bolsillo y su mascara en su rostro haciendo más notorio el color de su piel.

Mientras las horas pasan se encontraba en la parte alta de las escaleras con una copa de “vino tinto” (sangre oculta como vino) riendo con hombres de alto poder como él, de aquellos que disfrutan el dolor y a la vez ser los causantes de el, siendo seguidores de la tradición de cada clan, si aquellos hombres eran del clan Tremere (vampiros y humano) hablando con él sobre el nuevo clan Morel, y sobre la influencia de Tremere en Santhiago, recordando viejas andanzas, hasta que sus ojos divisaron a una joven nueva su aroma era de aquellos lycanos, hasta que uno de sus compañero adjudicó el conocerla

-Si conoces a una Lycana sabes que prometida te mataría- susurró Santhiago mientras tomaba aquel contenido obviamente las curvas de la mujer le llamaron la atención sus amigos le hacían chachara a que fuera el que se acercara, con una sonrisa macabra se acomodó la corbata terminando de beber su copa y luego bajando por las escaleras para tropezar con la joven de manera incauta pero planeada

-Oh excuse mua Mademoiselle, Bonne nuit- una reverencia militar ante todo y un desplanto pues su mirada fue a otra doncella que pasó a su diestra y le sonrío ignorando a la lycana

Un juego macabro se iniciaba ahora, por parte de ambos que no se conocían y que planeaban conocerse, pero el juego de Santhiago era un juego macabro y poco conocido un juego donde el interés se marca por el desinterés .

por **Antonella Morel** Lun Nov 19, 2012 9:59 pm

¨El destino es el que baraja las cartas, pero nosotros somos los que jugamos.¨

William Shakespeare

El destino...El cruel, incierto y miserable destino...la había llevado a situaciones,dolorosas e inesperadas, pero también a algunas gloriosas y triunfante....ella no era de creer en el azar, sabia que toda acción traía una consecuencia o una recompensa, todo depende de como de como juegues las cartas que el destino coloca en tu mano, y aunque la partida para ella empezó joven, había sido muy beneficiosa, pues las perdidas y ganancias de esta le habían fortalecieron su carácter,agudizaron mas sus sentidos (dejando por fuera de esta aclaración, su condición sobrenatural claro.) su astucia y su aumentaron su fuerza, la convirtieron en la mujer que era, y de no ser por eso quizás la familia Morel no la hubiera adoptado, por que aun cuando estaba en su peor momento, anímica y físicamente, mostró valor y fortaleza. Y por eso ella estaba allí,negocios... Nada era al azar. El lugar estaba lleno de los hombres mas poderoso de Europa, quienes todos los años venían a disfrutar del carnaval y asistían a esta gala pues les incomodaba compartir con la gente común...Muchos hijos de...-pensó y respiro profundo fingiendo una sonrisa viejo verde y gordo que la miraba de manera tan indecorosa,tropezando si querer con algo o mas bien con alguien...

-Oh, Mi scusi!...-Subió su mirada para encontrarse con unos penetrantes ojos detrás de un oscuro antifaz y una sonrisa conquistadora.Era de gran porte no lo podía negar, era muy apuesto, pero lo mas interesante era su mirada, tan sombría,tan hipnotizante, tan...- Ardiente...? pero que...?-Reacciono de inmediato, Antonella no era una mujer que se impresionara por el físico a simple vista,pues sabia que a la larga un hombre apuesto se comportaba como un idiota, y no dudo en comprobarlo, apenas el hombre se disculpo volteo su mirada a una joven que le paso por el lado. ella sonrió a medias... siempre tenia razón, aveces lo odiaba, pero eso pasa cuando obtienes tanta experiencia en tan pocos años,solo habían dos opciones para ese comportamiento, o el hombre de verdad era un idiota -que era lo mas seguro- o quería llamar su atención con esa vieja táctica. Ella se inclinaba mas por la primera opción. rió para si misma por aquello y después tomo una posición mas seria al este voltear nuevamente el rostro en dirección a ella.

-Si prestara mas atención en el camino, y no en morbosear a las damas que pasan por su lado evitaría estos... accidentes... Signore.- dijo sarcásticamente arqueando la ceja, quizás la palabra sonaría mal, pero asi era ella, poco o nada le importaba el concepto de un extraño.

-Buonanotte...- hizo una leve inclinación como era lo propio y continuo su camino, al llegar la final de las escaleras dio una ultima mirada por encima de su hombro al hombre y negó con la cabeza, continuo caminando abriéndose paso entre los demás invitados hacia la mesa donde estaban las bebidas, tomo una copa de champaña y la llevo a sus labios tomando un sorbo - Que lastima...

por **Santhiago Morel** Jue Nov 29, 2012 6:40 pm

Sonrió la mujer había caído como tantas otras en aquel truco tan antiguo, sonrío o mejor dicho fingió la sonrisa mientras llevaba su copa a sus amigos viéndola marchar…se había llevado a cabo lo cometido y comentado por todos los socios en un solo minuto ya había hecho de las suyas hizo una reverencia y antes que se retire la joven llegó a susurrar –diva de mujeres, no hay mejor como las más inteligentes…como la que llamo mi atención antes que la vuestra- susurró, él sabía que aquella mujer era una licántropo su aroma se lo dio a notar así que sabía a ciencia cierta que podría escuchar sus palabras

–Que niña más prepotente, lastima que no sea más que ello, una niña más, es una verdadera lástima ya que tiene presencia a Mujer pero no pasa de ser una niña, Bonne nuit Madame- sonrió e ignoró el saludo de despedida de la Loba negando con su cabeza y luego tomar de su copa mientras se dirige a la mujer que le hizo mirar no sin antes dar la ultima mirada a la otra joven, pues el juego continuaba y la noche era joven –Oh Madame permítame presentarme…espero que su hermano este por este lugar me ha sido difícil encontrarlos pero no es complicado hacero, aunque debo decir que valió la pena la cacería al menos ahora podremos hablar sobre su unión con…- miró a todos a su alrededor mientras tomaba su mano para dejar un beso en el dorso de ella –Excuseme Cherrie debo atender otros asuntos- una despedida de porte militar directo al hombre que acababa de llegar su nuevo socio…

-Ya has llegado, tu hermana es muy hermosa y no dudo que más de uno querrá se su acompañante pero espero que la petición siga en pie verdad?- cuestiona mientras miró a la joven loba de nuevo con otras personas y sonrió cuando uno de ellos lo llamó por su segundo nombre Louis, el solo se limitó a dar la espalda rumbo a su acompañante femenina la cual se dirigió al balcón del este para conversar con Santhiago sobre una unión pactada entre familias de ella y de él sobre otra persona, aunque los rumores decían que Madame De León sería esposa de aquel que solo conocían su segundo nombre “Louis R.”

Entre sonrisas ambos habían llegado de acuerdo, que la unión de uno de sus “familiares” (uno de los agentes de su clan) para unir la familia de España con la Ítalo-francesa familia de los Morel Rousseau. La joven asintió presumiendo que se había llevado una sorpresa por verlo ahí con lo que el contesto para que escuchen los que les interesaban –aunque muchos se subestimen y traten de subestimarme, pocos tienen mi atención y menos llamar para decir que han despertado mi interés, eso es un mal de sociedad que más se va hundiendo en su propia atención de prepotencia…como las damas- miró a su acompañante no sin antes lanzar una mirada fulminante a la loba –Y tu mi dama eres así o no- cuestiona y sonríe mientras ella niega con su cabeza y toma de su mano para ser aquella noche su acompañante.

Aun así no esperaba que los que le habían llamado uno de ellos se acercara a pedir audiencia con él, aun así el ignoraba a todos, pues era parte de su juego ignorar, observar y analizar, como un juego de ajedrez.

por **Antonella Morel** Sáb Ene 19, 2013 10:33 am

¨Lo único capaz de consolar a un hombre por las estupideces que hace, es el orgullo que le proporciona hacerlas.¨

Oscar Wilde

-Mucho imbécil- dijo al escuchar lo que aquel hombre decía. Claramente aquellas palabras eran para ella, se rio ante la ridícula situación. Apenas llegaba y ya tenía un lio con un invitado. No era de extrañarse, los vampiros siempre han sido seres con complejo de superioridad, pero solo bastaba un rayito de sol para hacer llorar al más fuerte de ellos como niñita y que explotaran como piñatas reduciéndose a cenizas. Y este… por dios, era un Casanova, se notaba en sus ojos, en su sonrisa, en su mirada lasciva y su forma de expresarse (palabras, gestos, etc.) ella bebió un poco de su copa de vino y observo a todos en el salón, algunos hombres le sonreían con intensión de acercarse. -claro, una mujer hermosa, sensual y sobre todo : Sola - ¨era un blanco fácil¨ seguro pensarían. Pero lo que no sabía esa ¨simple¨ y sola mujer les arrancaría sus apreciadas partes si siquiera intentaran algo con ella – Aunque mirándolos bien, esta aceptable para un acostón- pensó sin evitar sonreír divertida por su chiste privado. Al ellos notar que ella les observaba, levanto la ceja y les dio una sarcástica sonrisa para después darles la espalada, encontrándose de frente con quien menos quería.

-Signorina Antonia!- dijo el anciano acercándose a ella tomando su mano y depositando un beso en su dorso- Es un placer verle – Era el dueño de la fiesta y socio en algunos negocios de su padre.

-El gusto es mío signore- Dijo asintiendo haciendo una leve inclinación, el viejo no era que le cayera mal, si no que ahora seria mas difícil largarse del lugar-Le decían ¨Antonia¨ pues era el nombre que había adoptado al llegar a Venecia. En cada ciudad a la que se mudaban tenían que cambiar sus nombre para disimular el hecho de no envejecer.

-Como están sus padres ?- pregunto el anciano- No es común verle a usted en estos actos, pero es una sorpresa muy agradable –sonrio mostrando sus dientes un poco descalcificados por la edad.

-Ellos están bien, gracias. Se encuentran de algún tiempo de viaje ,y tardaran algún tiempo en volver-por no decir que volver cuando ya el este hecho polvo en su tumba- Y bueno, estoy tomando su lugar en este importante acto- joder, como odiaba fingir. Siempre era ella misma por eso odiaba esas fiesta y a esa gente snobs que aparentaba hasta la forma de respirar. Pero a lo hecho pecho.

-Permítame le presento a mi nieto Paolo- De repente un hombre alto, de muy buen porte y unos ojazos azules y penetrantes estaba frente a ella tomando su mano y depositando un beso e su dorso, al igual que lo hizo el viejo. Ella hizo su inclinación sin evitar morderse el labio inferior sonriendo.

-Srta Antonia para mi es un placer conocerle por fin…-sonrió ladino- Le confieso que la he observado desde que llego y permítame decirle, que las descripciones sobre su belleza se quedaron cortas. Es usted… una aparición celestial- las palabras del hombre le hicieron sonrojar un poco. Al parecer encontraría con quien divertirse y dejaría al vampirito con su juego tonto de lado.-Me permite un baile?- sin decir más se dirigió a la pista con él.

-Niña la que tiene al lado. Yo soy una verdadera mujer, y lo puedo demostrar de mil formas, pero usted ?… Es tan poco hombre que dudo sepa complacer a una mujer, si acaso a la niña que tiene al lado- dijo en un tono muy bajo, sin abstención sabiendo solo él le escucharía, al parecer el juego de la noche seria la hostilidad...

por **Santhiago Morel** Mar Feb 05, 2013 12:17 pm

Entre joviales alardeos como la serena calma es oportuna
En cuanto al canturreo fresco de la juventud se ve inconveniente.

En el suave mecer de las hojas por aquel viento invernal podría decirse que Santhiago la estaba pasando de maravilla entre sus juegos y lo que todavía faltaba develar por la noche, con los susurros de la gente debido a que Monsieur M. R y Madame P. L estaban en el ligero balcón del ala este, conversando muy amenamente de hecho demasiado para la mirada inquisitiva de hombres y mujeres que no dejaban a ratos de verlos, tocando los brazos jugando con los cabellos de ellos, sonriendo y hasta el sonrojo de la Madame cuando Santhiago le susurraba algo, aún así los sentidos de Morel estaban a la vista de todos y más de aquella loba a la mientras susurraba al oído de su “compañera” le dedicó una sonrisa pues estaba con uno de los primos de la jovencita.

-Hermano espero que mi hermana no te este aburriendo con viejos cuentos- Llegó Ernest con una jovencita que era nada más ni nada menos que su prometida, Santhiago saludo a la dama con una reverencia militar antigua mientrabas miraba a su amigo –Dejate de tonterías que lo que tu pequeña hermana dice de esa boca no es más que excitación- la joven Juliana sonreía mientras se apegaba al torso del vampiro pero este permaneció parado justo cuando el otro joven le entrega a Morel un bastón –El mejor de todos, mi padre lo ha conseguido viene de las tierras de las que tu vienes Louis, directo deAlejandría, así que te hará más a tu perfil Antiguo de Soldado- los cuatro se rieron mientras Santhiago tomaba su nuevo bastón y lo admiraba no sin olvidar las palabras de la joven…

Admiro su nuevo adquisición mientras empuñaba la cabeza de león y abría el florete mostrando una hoja de plata pura pulida con un doble filo y unos grabados antiguos en el centro de la hoja que profesaba “El león de la noche”, con una sonrisa hizo una reverencia aceptando el regalo –Sabes que este presente nos tendrá más en cuenta para el trato verdad- sonrió y tomo la mano de su acompañante –Por supuesto, como podría decir que no a mi futuro cuñado, no es verdad- Juliana se ruborizo mientras el hermano de ella y su prometida los dejaba a solas.

-Vaya no se cuento tiempo más aguantar esto Santi…- el puso un dedo sobre los labios de ella y sonrió gustosamente –Querida para ser mujer te falta mucho y sobre todo para ver lo que hay más allá de los juegos, aun sigues siendo al niña mimada y caprichosa de las sociedades, ¿acaso no te he ensañado como es la vida real? Ya veo creo que quieres seguir siendo como las del montón…iguales de muñequitas de porcelana que se rinde a sus pensamientos encerrados y toman algo de valor para enfrentar aquello que sienten, no engañas a nadie te engañas a ti misma pretendiendo ser aquello que no eres o que ocultas…pobre mi niña, ¿me he equivocado acaso contigo?...no me digas que tendré que llevarte por el camino oscuro de la desolación y el dolor…no quisiera hacerlo, pero ya que dices lo de hombre, quizás tu boca ávida solo haya visto piltrafas de hombres y uno de verdad, quizás por eso osas decir esas palabras…¡lástima, me das lástima el que quieras ser mujer sin siquiera realmente ser!.-

Sonrío y acarició el rostro de la joven que estaba perpleja y confundida, el había dejada aquellas frases para las dos damas sin sonar solo para una, pues la mayoría estaba para su querida Juliana a la que estrechó en sus brazos y tiernamente susurro contra su cuello –toma las palabras que son para ti según lo que sabes de mí…y no digas mi primer nombre sabes lo que pasaría si todos se enteran- le beso tiernamente el cuello justo cuando miró a la loba y le sonríe cínicamente.

La noche estaba tomando un colorido rumbo con la música y las platicas amenas que todos tenían, pero Santhiago ya estaba sintiendo el calor de otro juego más peligroso… -Decepción pequeña, quizás debas hacer algo para revertirla- sonrió cuando la joven humana sonrió y asintió al parecer volvió aquella mujer fuerte y decidida que cerró las puertas del balcón dejándolos solos a los, justo como el quería ella le besó y le mostró de entre su escote una carta que la guardo entre los bolsillos internos de su chaqueta disimulado todo esto por un beso…solo unas palabras le profirió a su oído –no te creas, puedo ser más mujer que todas las de aquí y quizás pronto de lo demuestre, después de nuestra “boda”- Se rieron los dos juntos mientras se abrazaban…pero por dentro una de las doncellas murmuraba descaradamente –Madame de León se ha hecho del mejor partido de Monsieur M. Rousseau, nadie sabe que le vio aquel hombre a esa, si tiene el cuerpo más delgado y sobre todo es muy atrevida y rebelde, de hecho ya ni virgen es, entonces que le ve…- dejó esa interrogante al aire mientras los dos Socios “amantes” se abrazaban y contemplaban su acuerdo intimo.

por **Antonella Morel** Mar Abr 30, 2013 10:31 pm

¨Existe el destino, la fatalidad y el azar; lo imprevisible y, por otro lado, lo que ya está determinado. Entonces como hay azar y como hay destino, filosofemos.¨

Séneca

No pudo evitar reír cínicamente ella, muy divertida por las absurdas y desacertadas palabras del vampiro, claro esta quizás no todas serian para ella claramente unas estaban dirigidas ya que la pequeña e imperceptible riña causada por una lucha de egos que se había desatado de un momento a otro entre aquellos orgullosos seres. Sinceramente toda aquella situación la loba lo que le causaba era risa. Le parecía ridículo seguir su juego. Vampiro infantil…cuanto llevaría en esta tierra y a pesar de todo se seguía portando como un niño?. Ella solo rio, se concentro en su compañero al frente, un adonis completo, ese cabello oscuro esos ojos castaños, esa sonrisa brillante, alto de cuerpo fornido y con unos modales exquisitos –hasta ahora-Sin duda había conocido al hombre perfecto, cosa que ya le parecía surreal pues la perfección en la imperfección se encuentra. Y aquello era demasiado bueno para ser cierto, no era que fuera una mujer pesimista pero sabía muy bien que aquello debía llevar a algo, y no era precisamente bueno…

Ya había bailado, había cenado junto a él y algunos de los invitados más importantes. Muchos se acercaron a ella, con galanterías y demás cosas propias de la clase social que le rodeaba, no prestó demasiada atención, para ella solo eran borregos..Mas sin embargo tenía que sonreír, y aparentar, odiaba eso, en realidad se estaba poniendo de mal carácter por tanta pomposidad y falsas sonrisas, pues debido a sus sentidos aumentados escuchaba cada critica de aquellos que, aparentaban ser mejores amigos, los más fieles y por la espalda estaba planeando la caída de del otro. Era simplemente asqueroso, si alguien no te gusta y lo odias demuéstralo en su cara no hay que ser tan hipócritas, y aunque el dicho fuera mantén a tus amigos cerca pero duerme con el enemigo para ella aquello era peor que cortarte con plata.

-No gracias, estoy muy bien –Respondió al hombre que le ofrecía otra bebida, no sabía en si cuantas ya había tomado que provenían de la mano del ¨buen¨ hombre pero ya le estaban empezando afectar. Su tolerancia con el alcohol no era la mejor, pero tampoco llegaba al extremo da sentirse tan mareada- Creo que me tendrán que permitir un momento…- Dijo con suavidad, haciendo un esfuerzo por levantarse de la mesa, sin que notaran como se estaba sintiendo, dedico una educada sonrisa y luchando para mantener su equilibrio, se dirigió hacia una de las ventanas, abrió la puerta de esta que conducía a un gran balcón, el aire fresco y el olor a sal del mar invadieron sus fosas nasales, daba gracias a que este estaba desierto el lugar, no podía dar un espectáculo, dirían que era una borracha y pondría en vergüenza su apellido, su reputación no era la que le importaba si no el buen nombre de sus padres.

-Dio mio, sta sucedendo a me?.- se froto los ojos sentía que el mundo empezaba a darle vueltas pero paulatinamente. Se recargo en la baranda e hizo algunas terapias respiratorias, que le habían enseñado cuando empezó su entrenamiento para tratar de controlarse en la transformación.

-Bella, te sientes bien? – se acerco lentamente Paolo con voz calmada, - te veo un poco… mal. –le tomo en sus brazos- Estas lago pálida…- Antonella abrió sus ojos encontrándose con una mirada indescifrable.

-Estoy bien - dijo en el mejor francés posible- es solo que creo que el vino me ha hecho algo de efecto, pero un rato mas aquí y estaré bien –Suspiro nuevamente queriendo aparentar estar mejor y fingió una sonrisa, el hombre se acerco mas y la aprisiono en sus brazos, aquel contacto no le hizo sentir muy cómoda –que haces?- pregunto lago confusa queriendo zafarse, pero en realidad estaba algo débil, y el, a pesar de ser humano, era impresionantemente fuerte.

-Solo protejo mi inversión…una muy bella y tentadora...-sus manos empezaron a vagar por el cuerpo de la licantropa, que se estremecía de la incomodidad y la impotencia por tratar de zafase y sentirse tan débil.

-Tu inversion?-pregunto confunida, de que se trataba todo aquello? Que juego o sucia trampa era esta? serian de la inquisición? Oh por Dios la sola idea hacia que se le erizara la piel del terror que aquello le causaba. No podía ser, no de nuevo.se movió con más fuerza, mas de la que en aquellos momento podía tener.- Suéltame maldito desgraciado!- Dijo en voz alta, pero adentro la música estaba muy fuerte, nadie le escucharía, y él le tapo la boca.

-Mi inversión… y la de mi familia..mi fierecilla- La miro a los ojos, con aquel gesto perturbador- Tu serás nuestro boleto de salida a la ruina…Que era aquello? Un secuestro? – Cobraremos muy buen dinero a tu familia por ti, y ni se darán cuenta de que fuimos nosotros…-ella con fuerza de donde no tenia dio un fuerte golpe en la entrepierna mientras este hablaba, obligando a soltara, ella como pudo se dio a ala fuga pero debido al mareo se tropezó con el vestido qué demonios le había dado?.

-Ayuda!!- Grito tratando de levantarse.

-Maldita zorra…-sonríe el con expresión ladina, levantándose y acercándose a ella, que estaba a punto de perder el conocimiento-No escaparas… te llevare a donde nadie te encuentre aun.. y solo por estar tan buena – dijo le dando una palmada a su trasero-Te violare una y otra y otra vez, hasta que me canse de ti.- Propicio un fuerte golpe, solo recuerda el ardor en su mejilla. Después de esto…oscuridad.

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