Chanel Rosethal

Chanel es una pícara mujer que se esconde bajo su rostro de niña buena, sabe que su belleza la puede llevar a obtener todo lo que desea y saca muy buen provecho de ello. Es una persona algo callada y quieta, no es de las que se esfuerza por conseguir las cosas, ya que por lo general tiene todo lo que quiere. Es una niña caprichosa. No sabe perder aunque le gusta jugar y mucho, hace berrinches como cualquier infante pero es muy madura, centrada y objetiva. Sabe lo que quiere y no se anda con rodeos. Es mentirosa y manipuladora, algo fría e imprudente, no mide mucho sus palabras para hablar pero sí se cuida muy bien de no decir nada inapropiado delante de las personas equivocadas. Le gusta y mucho jugar bajo las sábanas, mujeres, hombres, humanos, vampiros… Eso es lo de menos, para ella sus amantes son simple juguetes, a los cuales desecha cuando ya no le parecen divertidos, aunque para esto hay una excepción, Amethyst, la misma mujer que alguna vez le convirtió en vampiro y con quien ahora convive, y en general, su trato hacía ella es diferente para con los demás, después de todo ella es una mujer especial.

Nació en una cuna de oro. Sus padres pertenecían a la más alta sociedad británica y su madre y por consiguiente ella también tenía sangre real corriendo por sus venas, aunque las posibilidades de tomar la corona eran remotas. Desde su corta infancia hasta ser una adolescente vivió en un lugar apartado, en una lujosa mansión a la que pocos tenían acceso, era un lugar cómodo, rico en materiales y allí ella era la reina. En un comienzo fue fácil llevar esa vida luego todo se le fue tornando aburrido, así que cuando cumplió los 11 años comenzó a escaparse, era bastante fácil sobornar a los empleados y el transporte no era una tarea complicada ya que sabía montar a caballo, eso sí, nunca estaba sola.

Para ese entonces las calles londinenses eran bastante agitadas e inseguras para una pequeña chico de espíritu libre y gran curiosidad, pero eso a ella no parecía importarle, eso sí, los sirvientes conocedores de la peligrosa gran ciudad, protegían a la pequeña niña, vistiéndolas con harapos y con una larga y vieja capa, cubrían su cabeza, haciendo difícil su identificación.

Estando en la ciudad Chanel aprendió de actividades no propias de una damisela como usar el arco, la lanza o bailar música de la tierra de donde provenían sus sirvientes, todo esto sin que sus padres se enterasen si quiera que salía de casa a escondidas. Pero mientras sus años avanzaban su libertad se acortaba ¿Paradójico no? Ya no erra fácil ocultar su bello rostro o hacerla pasar desapercibida entre la multitud. Por culpa de ello sus padres terminaron enterándose de sus aventuras y la confiscaron en su propia habitación, con la esperanza de salir el día que la comprometieran con un fulano más de la alta sociedad. Furiosa, frutada y bastante cabreada, la joven chica en la víspera de sus veinte años tomó su caballo favorito y completamente sola se fue a la ajetreada ciudad. Hacía más de un año que no lo hacía y el panorama que se encontró realmente le asustaba.

Las miradas le asechaban y se sentía realmente indefensa y desprotegida. Había sido una mala idea salir sin sus sirvientes. Intentó volver a casa, con tan mala fortuna que la espesa noche ya había caído, iba muy rápido a la mayor velocidad que en su vida había ido, estaba tan asustada como su caballo, era como si algo malo les siguiese. Justa antes de llegar a la mansión, se bajó del caballo para tratar de ocultarlo mientras ella entraba a escondidas a su habitación, pero para ese momento no estaba sola, una mujer de rostro familiar pero que desconocía por completo se encontraba muy cerca a ella, causándole un miedo difícil de descifrar.

Vampiros, él mismo día que se enteró de la existencia de estos se convirtió en uno. No le guarda rencor a la persona que le convirtió, al contrario, desde entonces ella le ha proporcionado una libertad que por su cuenta nunca hubiese alcanzado. Ahora vive bajo la custodia de ella, Amethyst Rosenthal, cumpliendo el papel de amante y hermana menor de esta.