AÑO 1842
Nos encontramos en París, Francia, exactamente en la pomposa época victoriana. Las mujeres pasean por las calles luciendo grandes y elaborados peinados, mientras abanican sus rostros y modelan elegantes vestidos que hacen énfasis los importantes rangos sociales que ostentan; los hombres enfundados en trajes las escoltan, los sombreros de copa les ciñen la cabeza.
Todo parece transcurrir de manera normal a los ojos de los humanos; la sociedad está claramente dividida en clases sociales: la alta, la media y la baja. Los prejuicios existen; la época es conservadora a más no poder; las personas con riqueza dominan el país. Pero nadie imagina los seres que se esconden entre las sombras: vampiros, licántropos, cambiaformas, brujos, gitanos. Todos son cazados por la Inquisición liderada por el Papa. Algunos aún creen que sólo son rumores y fantasías; otros, que han tenido la mala fortuna de encontrarse cara a cara con uno de estos seres, han vivido para contar su terrorífica historia y están convencidos de su existencia, del peligro que representa convivir con ellos, rondando por ahí, camuflando su naturaleza, haciéndose pasar por simples mortales, atacando cuando menos uno lo espera.
Espacios libres: 11/40
Afiliaciones élite: ABIERTAS
Última limpieza: 1/04/24
En Victorian Vampires valoramos la creatividad, es por eso que pedimos respeto por el trabajo ajeno. Todas las imágenes, códigos y textos que pueden apreciarse en el foro han sido exclusivamente editados y creados para utilizarse únicamente en el mismo. Si se llegase a sorprender a una persona, foro, o sitio web, haciendo uso del contenido total o parcial, y sobre todo, sin el permiso de la administración de este foro, nos veremos obligados a reportarlo a las autoridades correspondientes, entre ellas Foro Activo, para que tome cartas en el asunto e impedir el robo de ideas originales, ya que creemos que es una falta de respeto el hacer uso de material ajeno sin haber tenido una previa autorización para ello. Por favor, no plagies, no robes diseños o códigos originales, respeta a los demás.
Así mismo, también exigimos respeto por las creaciones de todos nuestros usuarios, ya sean gráficos, códigos o textos. No robes ideas que les pertenecen a otros, se original. En este foro castigamos el plagio con el baneo definitivo.
Todas las imágenes utilizadas pertenecen a sus respectivos autores y han sido utilizadas y editadas sin fines de lucro. Agradecimientos especiales a: rainris, sambriggs, laesmeralda, viona, evenderthlies, eveferther, sweedies, silent order, lady morgana, iberian Black arts, dezzan, black dante, valentinakallias, admiralj, joelht74, dg2001, saraqrel, gin7ginb, anettfrozen, zemotion, lithiumpicnic, iscarlet, hellwoman, wagner, mjranum-stock, liam-stock, stardust Paramount Pictures, y muy especialmente a Source Code por sus códigos facilitados.
Victorian Vampires by Nigel Quartermane is licensed under a
Creative Commons Reconocimiento-NoComercial-SinObraDerivada 3.0 Unported License.
Creado a partir de la obra en https://victorianvampires.foroes.org
Últimos temas
La llegada del inmortal (Isobel Lincon)
2 participantes
Página 1 de 2.
Página 1 de 2. • 1, 2
La llegada del inmortal (Isobel Lincon)
Ya hacia una hora que había sido avisado nuevamente que llegaría a parís el cielo ya se encontraba totalmente cubierto por la oscuridad, me encontraba cruzado de piernas escribiendo aun en un diario, suspire de forma sádica recordando lo que esperaba encontrar a mi llegada, elegantemente pase las hojas cerrando el diario y colocando el pequeño candado para asegurarlo observe por la ventana como se veían las luces así era este demonio mecánico, como lo llamaron en sus inicios, acababa de llegar a la estación ferrocarril de París, al detenerse libero mucho vapor blanco que dejo prácticamente indistinguible el lugar, por los pasillos se escuchaban, la gente alborotada saliendo apurada o cansada por el viaje, pobres mortales cuentan con tan poco tiempo, apoye mi cabeza sobre mi mano observando por la ventana como la gente salia aun con el vapor siendo liberado por el monstruo mecánico, escuchaba comentarios de aburrimiento o de morirse dentro de este transporte, suspirando observe el cielo ya era casi media noche, quizás por eso la gente se movía rápido no quería permanecer mucho tiempo en las peligrosas calles de parís.
Sonreí al escuchar los últimos pasos, el lugar volvía a ponerse tranquilo, solo se escuchaba el paso del trabajador que revisaba los vagones, me levante tomando mi sombrero y el portafolio, mi cabina había permanecido inalterada tal cual me la había dejado, no había hecho otra cosa que mantenerme sentado en aquella silla durante todo el día de viaje.
Mis pensamientos fueron interrumpidos por el hombre al abrir y sorprenderse al verme, su olor a humano me hizo lamber me los labios de espalda a el para que no me viera y una sonrisa asesina en mi rostro se figuro por unos segundos
poniéndome el sombrero de copa y mirándolo seriamente algo que lo puso nervioso y se hizo a un lado haciendo una leve reverencia indicando que mi equipaje ya había sido descargado, le mire seriamente y proseguí a salir del transporte.
El humo del vapor ya había bajado y yo busque con la mirada a todas las personas del sexo femenino a ver si ubicaba a mi nueva guía por esta ciudad, mire levemente la ciudad había cambiado desde mi ultima visita, en la época de Juana dije sonriendo de lado.
Kenner Clapton- Vampiro Clase Alta
- Mensajes : 400
Fecha de inscripción : 09/03/2013
Re: La llegada del inmortal (Isobel Lincon)
Aquella noche no había sido diferente a cualquier otra, parte de la tarde y la noche, la mujer aquella se la había pasado en el burdel o en cualquier lugar al que le fuera posible ir con quien pidiera sus servicios. Además de que por la mañana había estado ocupada en la casa de la esperanza, pero en aquellos momentos no estaba ni en un lugar, ni en otro; si no que se encontraba en la estación de los ferrocarriles, enviada a recoger a alguien que no conocía. Pero al final de cuentas ella estaba ahí porque le habían dicho que estuviera.
Un suspiro escapo de los labios de ella, la espera no le sentaba bien y menos en un lugar aquel con tanta gente que parecía solo mirarla como si la conocieran; era probable que fuera de esa manera dado lo que se dedicaba a hacer, pero no dejaría de hacerlo…no por esos momentos.
Pensaba seriamente en irse y mandar todo al carajo cuando el sonido del tren llegó hasta sus oídos y una sonrisa ilumino su rostro a pesar de que era difícil diferenciar las cosas con la oscuridad que cubría tanto el cielo como los alrededores. Casi tan pronto como el sonido se hizo presente llegó el tren y ella se mantuvo ahí expectante de lo que fuera a venir; no le habían dado muchos detalles además de a quien debía recoger, solo le dieron un nombre… Kenner Clapton.
Lentamente las personas comenzaron a bajar del tren y a irse con algunos de los que estaban ahí, otros solos, pero paulatinamente la estación comenzó a quedar semi vacía y la cortesana permaneció inmóvil mirando a un lado y otro; la situación se tornaba de mal gusto para ella, pero aún había equipaje así que espero un poco más, quizás alguno de los que faltaran fuera su hombre.
Cruzo los brazos frente a su pecho, observando como los últimos pasajeros bajaban y con paso decidido camina, acercandose más a donde todos se encuentran.
- Kenner - dice esperando que alguien responda.
Un suspiro escapo de los labios de ella, la espera no le sentaba bien y menos en un lugar aquel con tanta gente que parecía solo mirarla como si la conocieran; era probable que fuera de esa manera dado lo que se dedicaba a hacer, pero no dejaría de hacerlo…no por esos momentos.
Pensaba seriamente en irse y mandar todo al carajo cuando el sonido del tren llegó hasta sus oídos y una sonrisa ilumino su rostro a pesar de que era difícil diferenciar las cosas con la oscuridad que cubría tanto el cielo como los alrededores. Casi tan pronto como el sonido se hizo presente llegó el tren y ella se mantuvo ahí expectante de lo que fuera a venir; no le habían dado muchos detalles además de a quien debía recoger, solo le dieron un nombre… Kenner Clapton.
Lentamente las personas comenzaron a bajar del tren y a irse con algunos de los que estaban ahí, otros solos, pero paulatinamente la estación comenzó a quedar semi vacía y la cortesana permaneció inmóvil mirando a un lado y otro; la situación se tornaba de mal gusto para ella, pero aún había equipaje así que espero un poco más, quizás alguno de los que faltaran fuera su hombre.
Cruzo los brazos frente a su pecho, observando como los últimos pasajeros bajaban y con paso decidido camina, acercandose más a donde todos se encuentran.
- Kenner - dice esperando que alguien responda.
Isobel Lincon- Mensajes : 21
Fecha de inscripción : 08/03/2013
Re: La llegada del inmortal (Isobel Lincon)
Finalmente habia, llegado a paris, a paris pocas personas en la estacion esperaban a los que terminaban de salir de los vagones mas alejados, cuando me hiba a disponer finalmente a buscarla, alguien pronuncio mi nombre levante la vista buscando el origen, de ese sonido que era dulce por cierto digno de una joven mujer cuando mis ojos hicieron rapidamente contacto, con la fuente de aquel sonido, preciosos labios carmesi levante la vista a su rostro pudiendo notar a una bella mujer, ella seria mi acompañante aun no me habia pronunciado solo la observe detenidamente, bajando mis ojos a frios y distantes a recorrer el cuerpo de ella, perfecto estaba en sus mejores dias carne fresca, sin lugar a dudas preciosas piernas y senos, deje de contemplarla para caminar en su direccion con una mirada fria y distante, un ser perfecto me detuve delante de ella
-Debes, ser mi acompañante
Dije viendo su rostro de mas de cerca y luego bajando la mirada a sus senos para contemplarlos mejor, asi que era una cortesana sin lugar a duda la vestimenta tipica de ellas, habian enviado a una prostituta a recibirme, esperaban que me alimentara o que saciara el aburrimiento de mi viaje mejor eleccion no podrian a ver hecho y no dejaria el obsequio de lado, haciendo una leve mueca en el rostro la observe empezando a caminar
-Podemos partir...
Dije sin mas mientras esperaba que ella me guiara no demoro mucho en que el reloj de la iglesia marcara las doce, la noche de los vampiros comenzaba y ya casi no se veian personas en la ciudad tanto miedo le tenian a las criaturas sobrenaturales, tome un baston de mi equipaje que ya estaban por llevarselo de forma mas directa a donde seria mi residencia momentanea, apote el fino baston de marfil en el suelo que dentro llevaba una lamina de plata oculta para empezar a caminar apoyandome en la misma acomodando mi sombrero para emprender la marcha, pero el olor a sangre de ella haria que muy cerca de aqui se volviera mi esclava por un rato.
-Debes, ser mi acompañante
Dije viendo su rostro de mas de cerca y luego bajando la mirada a sus senos para contemplarlos mejor, asi que era una cortesana sin lugar a duda la vestimenta tipica de ellas, habian enviado a una prostituta a recibirme, esperaban que me alimentara o que saciara el aburrimiento de mi viaje mejor eleccion no podrian a ver hecho y no dejaria el obsequio de lado, haciendo una leve mueca en el rostro la observe empezando a caminar
-Podemos partir...
Dije sin mas mientras esperaba que ella me guiara no demoro mucho en que el reloj de la iglesia marcara las doce, la noche de los vampiros comenzaba y ya casi no se veian personas en la ciudad tanto miedo le tenian a las criaturas sobrenaturales, tome un baston de mi equipaje que ya estaban por llevarselo de forma mas directa a donde seria mi residencia momentanea, apote el fino baston de marfil en el suelo que dentro llevaba una lamina de plata oculta para empezar a caminar apoyandome en la misma acomodando mi sombrero para emprender la marcha, pero el olor a sangre de ella haria que muy cerca de aqui se volviera mi esclava por un rato.
Kenner Clapton- Vampiro Clase Alta
- Mensajes : 400
Fecha de inscripción : 09/03/2013
Re: La llegada del inmortal (Isobel Lincon)
La mirada de la cortesana recorría los rostros de la gente esperando que alguno reaccionaria al escuchar a aquel nombre, pero ninguno de los presentes parecía dar signos de ser el denominado Kenner; un resoplido salió de sus labios, eso era el colmo, le habían mandado a recoger a un hombre que parecía no haber llegado a la estación cosa que resultaba ser una perdida de tiempo, que bien pudo haber empleado haciendo que algún hombre gimiera de placer al sentir su cuerpo.
Los ojos de la mujer se movieron por ultima vez entre la multitud, cuando noto como un hombre se acercaba hasta ella solo para detenerse justo en frente.
Sonrío al escuchar como él le hablaba y lo contemplo con satisfacción al ver que su cuerpo le distraía tanto como a otros hombres, pero él no se quedaba atrás situación que le hizo alegrarse de haber aceptado aquel trabajo.
- ¿Es usted Kenner? - le miro de manera directa a los ojos - porque de ser así esta usted en lo correcto soy su acompañante y mi nombre es Isobel… - su voz se torno seductora, de la misma manera que se volvía cada vez que estaba con un cliente - Isobel Lincon.
El hombre comenzó a caminar y ella le siguió sin negarse, después de todo era eso para lo que ella había ido hasta allá en medio de toda esa gente; noto como inmediatamente las miradas de los que aún estaban presentes se dirigían a ellos, ya habían comenzado a juzgarlos por como ambos lucían y solo para oír a las víboras soltar más veneno, la cortesana se balanceo más seductora al lado de aquel hombre.
Una sonrisa estaba presente en su rostro y miro al hombre, que en comparación a ella era muy diferente.
- ¿Qué negocios le han traído a estas calles parisinas? - mientras preguntaba se vio obligada a alzar un poco el volumen de su voz, las campanadas anunciaban las doce; la hora en la que más trabajo solía tener y sus clientes que únicamente salían de noche la visitaban, un ligero atisbo de tristeza se hizo presente en su mirada, quería ver a sus queridos clientes pero la compañía de aquel hombre también podía ser provechosa - si no es una indiscreción que le pregunte.
Los ojos de la mujer se movieron por ultima vez entre la multitud, cuando noto como un hombre se acercaba hasta ella solo para detenerse justo en frente.
Sonrío al escuchar como él le hablaba y lo contemplo con satisfacción al ver que su cuerpo le distraía tanto como a otros hombres, pero él no se quedaba atrás situación que le hizo alegrarse de haber aceptado aquel trabajo.
- ¿Es usted Kenner? - le miro de manera directa a los ojos - porque de ser así esta usted en lo correcto soy su acompañante y mi nombre es Isobel… - su voz se torno seductora, de la misma manera que se volvía cada vez que estaba con un cliente - Isobel Lincon.
El hombre comenzó a caminar y ella le siguió sin negarse, después de todo era eso para lo que ella había ido hasta allá en medio de toda esa gente; noto como inmediatamente las miradas de los que aún estaban presentes se dirigían a ellos, ya habían comenzado a juzgarlos por como ambos lucían y solo para oír a las víboras soltar más veneno, la cortesana se balanceo más seductora al lado de aquel hombre.
Una sonrisa estaba presente en su rostro y miro al hombre, que en comparación a ella era muy diferente.
- ¿Qué negocios le han traído a estas calles parisinas? - mientras preguntaba se vio obligada a alzar un poco el volumen de su voz, las campanadas anunciaban las doce; la hora en la que más trabajo solía tener y sus clientes que únicamente salían de noche la visitaban, un ligero atisbo de tristeza se hizo presente en su mirada, quería ver a sus queridos clientes pero la compañía de aquel hombre también podía ser provechosa - si no es una indiscreción que le pregunte.
Isobel Lincon- Mensajes : 21
Fecha de inscripción : 08/03/2013
Re: La llegada del inmortal (Isobel Lincon)
Continuamos andando la bella joven se acerco a mi para hacerme desearla mas eso era peligroso para ella el deseo mi nunca fue sastifecho por una sola mujer como ella, las habia visto muy bellas muy hermosas hasta demasiado lujuriosas pero ninguna lograba sola cumplir mis deseos ella lo intentaria seria mi carnada mas una vez eso parecia la gente me miraba nos miraba un hombre como yo acompañado por una mujer tan bellla y prostituta algo que todos sabian debido a su vestimenta atractiva y seductora su voz, era la de una mujer que intentaba sastifacer y atraer el deseo de un hombre si habia visto muchas veces y oido esa voz tan selecta entre las mujeres.
Cuando ella menciono que me traia a esta ciudad, un leve gesto entre sastifaccion y molestia se notaron en mi rostro ella era una buena fuente de informacion si era asi con todos sus clientes, una leve sonrisa salieron de mis labios perfectos y rojos
-Vengo a negocios lady, y usted fue ordenada a guiarme y algo mas?
Pregunte sabiendo la respuesta pero queria oirla de su boca, de esa sensual boca, mi ojos se clavaron en su cuello muy sensual y limpio mis colmillos querian estar en aquel lugar podia sentir la respiracion de ella y de a poco como la sangre pasaba por aquel lugar, estaba necesitando alimentarme despues de este maldito viaje en tren, con peligro de ser expuesto al sol durante el trayecto.
Continuamos caminando doblando por algunos callejones un lugar peculiar por donde ella me traia, y peligroso dentro de poco se volveria mi presa, la habian enviado para eso para ser mi alimento, y tuvieron cuidado de que fuera bella para que me diera gusto sacarle toda la sangre de ese hermoso cuerpo sensual.
Cuando ella menciono que me traia a esta ciudad, un leve gesto entre sastifaccion y molestia se notaron en mi rostro ella era una buena fuente de informacion si era asi con todos sus clientes, una leve sonrisa salieron de mis labios perfectos y rojos
-Vengo a negocios lady, y usted fue ordenada a guiarme y algo mas?
Pregunte sabiendo la respuesta pero queria oirla de su boca, de esa sensual boca, mi ojos se clavaron en su cuello muy sensual y limpio mis colmillos querian estar en aquel lugar podia sentir la respiracion de ella y de a poco como la sangre pasaba por aquel lugar, estaba necesitando alimentarme despues de este maldito viaje en tren, con peligro de ser expuesto al sol durante el trayecto.
Continuamos caminando doblando por algunos callejones un lugar peculiar por donde ella me traia, y peligroso dentro de poco se volveria mi presa, la habian enviado para eso para ser mi alimento, y tuvieron cuidado de que fuera bella para que me diera gusto sacarle toda la sangre de ese hermoso cuerpo sensual.
Kenner Clapton- Vampiro Clase Alta
- Mensajes : 400
Fecha de inscripción : 09/03/2013
Re: La llegada del inmortal (Isobel Lincon)
Su concentración estaba completamente en el hombre, en guiarlo y en satisfacer cualquier cosa que él pidiera… cualquiera; pero tener que hacer algo así no era una dificultad para ella, estaba acostumbrada ya a esa clase de vida, situación que antes bien pudo ser diferente pero que ahora era simplemente lo que era.
La respuesta de Kenner la hizo sonreír juguetona; estaba claro por la forma en la que sus ojos devoraban su cuerpo cada vez que dirigía su mirada hasta ella, que él sabía a la perfección para que le habían enviado pero si necesitaba un recordatorio de las cosas ella no se negaba a darlo, de hecho, se sentiría sumamente complacida de hacerlo.
Acerco su cuerpo al ajeno; mirando de reojo y manteniendo esa sonrisa tan peculiar hablo con tono seductor.
- Negocios… pues espero todo le salga bien - guardo silencio antes de continuar con la pregunta que él le había hecho - Fui ordenada para guiarle claro esta, además de que se me pidió que hiciera todo cuanto usted pidiera - se mordió el labio inferior de manera leve antes de continuar - por ejemplo, si usted me pide que me desnude en este mismo instante y aquí… lo haré - su voz mantenía el tono seductor pero se escuchaba firme y convencida de lo que decía; además que la postura de su cuerpo hacía ver que no solo de palabras si no de acciones estaba igualmente decidida.
Tanto las indicaciones de la joven como los pasos de ambos, les llevaron hasta los callejones más solos y oscuros de París.
- Adoro estas calles - habló contenta y se detuvo unos segundos observando al hombre - siempre están solos y puede pasar lo que sea - sus ojos brillaron y tan rápido como se detuvo continuo con sus pasos.
La respuesta de Kenner la hizo sonreír juguetona; estaba claro por la forma en la que sus ojos devoraban su cuerpo cada vez que dirigía su mirada hasta ella, que él sabía a la perfección para que le habían enviado pero si necesitaba un recordatorio de las cosas ella no se negaba a darlo, de hecho, se sentiría sumamente complacida de hacerlo.
Acerco su cuerpo al ajeno; mirando de reojo y manteniendo esa sonrisa tan peculiar hablo con tono seductor.
- Negocios… pues espero todo le salga bien - guardo silencio antes de continuar con la pregunta que él le había hecho - Fui ordenada para guiarle claro esta, además de que se me pidió que hiciera todo cuanto usted pidiera - se mordió el labio inferior de manera leve antes de continuar - por ejemplo, si usted me pide que me desnude en este mismo instante y aquí… lo haré - su voz mantenía el tono seductor pero se escuchaba firme y convencida de lo que decía; además que la postura de su cuerpo hacía ver que no solo de palabras si no de acciones estaba igualmente decidida.
Tanto las indicaciones de la joven como los pasos de ambos, les llevaron hasta los callejones más solos y oscuros de París.
- Adoro estas calles - habló contenta y se detuvo unos segundos observando al hombre - siempre están solos y puede pasar lo que sea - sus ojos brillaron y tan rápido como se detuvo continuo con sus pasos.
Isobel Lincon- Mensajes : 21
Fecha de inscripción : 08/03/2013
Re: La llegada del inmortal (Isobel Lincon)
caminamos por estas calles vacias mientras escuchaba como ella confirmaba mis sospechas habia sido enviada para cumplir todos mis deseos mas oscuros y carnales hacia tiempo que no sentia el cuerpo caliente de una mortal, sumado al deseo que tenia de beber sangre humana estaba dificil controlarme no era que fuera dificil para mi resistirme a mis deseos pero si tenia a una mujer paga y servida en bandeja de plata tan preciosa como la que em acompañaba en estos momentos los unicos ruidos audivles eran los de mi baston y los tacos que la bella dama llevaba a mi lado, escuche como estaba dispuesta hacer todo lo que le pidiera ella se detuvo y cuando lo hizo me volte rapidamente tomandola del cuello de forma elegante pero firme dejandola contra la pared su cuerpo reposaba en la pared y mi mirada era seria pero aun seductora, para mi era facil controlar mi instinto asesino, una sonrisa sadica figuro en mi rostro mientras mi boca se perdia en el cuello de la dama de forma elegante pero asustadora, lambi su cuello mientras mi mano se deslizaba por la cintura de ella de forma lenta sintiendo el calor de su cuerpo sobre el mio el correr de la sangre de la joven, el latido de su corazon todo lo que habia en ella lo podia sentir ese cuerpo precioso que ahora seria mi plato principal
-Entonces, haras lo que te pide, descubrete los senos
Dije a modo de prueba o seria necesario asegurarme su lealtad en este momento mientras mis labios frios se perdian en el cuello de la joven que dentro de muy poco seria perforado por uno de mis grandes colmillos y beberia su tan deliciosa sangre de ramera. mi mano se perdi en su curvas tocandole su cuerpo mismo habiendo sido tocada miles de veces representaba una forma deliciosa y deseada por cualquier mortal.
-Entonces, haras lo que te pide, descubrete los senos
Dije a modo de prueba o seria necesario asegurarme su lealtad en este momento mientras mis labios frios se perdian en el cuello de la joven que dentro de muy poco seria perforado por uno de mis grandes colmillos y beberia su tan deliciosa sangre de ramera. mi mano se perdi en su curvas tocandole su cuerpo mismo habiendo sido tocada miles de veces representaba una forma deliciosa y deseada por cualquier mortal.
Kenner Clapton- Vampiro Clase Alta
- Mensajes : 400
Fecha de inscripción : 09/03/2013
La llegada del inmortal (apartir de aqui +18)
De un instante a otro la joven se encontró sujeta por el cuello y con la espalda pegada a la pared, con la mirada depredadora de ese hombre sobre su ser. Permaneció sin hacer ningún movimiento, solo miraba directo a los ojos a aquel hombre intentando descubrir que era lo que quería que ella hiciera.
Todo aquel tiempo que pasaba trabajando le había llevado de manera lenta a poder interpretar algunas cosas de lo que los hombres deseaban de ella si bien los miraba; pero con ese hombre, no podía notar nada. Era como si sus ojos le mostraran un sin fin de cosas que pensaba hacerle y al final no le dejaba ninguna para que ella las recordara.
Un ligero gemido salió de sus labios cuando la lengua ajena recorría con lentitud pero decisión su cuello; no podía mover mucho la cabeza porque aquella mano le sujetaba de manera firme, pero podía notar a la perfección como la otra recorría con lentitud cada una de las curvas de su cuerpo.
Cerrando los ojos se mordió el labio inferior con deseo de sentir aquel tacto directamente sobre su piel, pero antes de eso llego hasta ella no un roce, si no una petición.
- Sí, haré lo que me pidas y si eso es lo que quieres, te lo concederé - abrió los ojos observando el cielo nocturno que los cubría con su manto.
Puso su mano en el pecho ajeno y le empujo levemente caminando ella con él, dando espació suficiente para llevar sus manos hasta su espalda y poder desatar el aquel vestido. Lentamente quito aquello que mantenía el vestido cubriendo su cuerpo hasta que por fin con una sonrisa ladina en el rostro lo bajo para dejar al descubierto sus senos. Sus pezones estaban erectos ya, no sabía si a causa de lo que él hacía o por la repentina desnudez.
- ¿Así esta bien? - pregunto mientras tomaba la mano que acariciaba su cintura y con lentitud la invitaba a recorrer su piel desnuda hasta llevarla hasta uno de sus senos desnudos. Aquella mano se sentía fría contra su piel y eso le hizo desear más sus roces.
Todo aquel tiempo que pasaba trabajando le había llevado de manera lenta a poder interpretar algunas cosas de lo que los hombres deseaban de ella si bien los miraba; pero con ese hombre, no podía notar nada. Era como si sus ojos le mostraran un sin fin de cosas que pensaba hacerle y al final no le dejaba ninguna para que ella las recordara.
Un ligero gemido salió de sus labios cuando la lengua ajena recorría con lentitud pero decisión su cuello; no podía mover mucho la cabeza porque aquella mano le sujetaba de manera firme, pero podía notar a la perfección como la otra recorría con lentitud cada una de las curvas de su cuerpo.
Cerrando los ojos se mordió el labio inferior con deseo de sentir aquel tacto directamente sobre su piel, pero antes de eso llego hasta ella no un roce, si no una petición.
- Sí, haré lo que me pidas y si eso es lo que quieres, te lo concederé - abrió los ojos observando el cielo nocturno que los cubría con su manto.
Puso su mano en el pecho ajeno y le empujo levemente caminando ella con él, dando espació suficiente para llevar sus manos hasta su espalda y poder desatar el aquel vestido. Lentamente quito aquello que mantenía el vestido cubriendo su cuerpo hasta que por fin con una sonrisa ladina en el rostro lo bajo para dejar al descubierto sus senos. Sus pezones estaban erectos ya, no sabía si a causa de lo que él hacía o por la repentina desnudez.
- ¿Así esta bien? - pregunto mientras tomaba la mano que acariciaba su cintura y con lentitud la invitaba a recorrer su piel desnuda hasta llevarla hasta uno de sus senos desnudos. Aquella mano se sentía fría contra su piel y eso le hizo desear más sus roces.
Isobel Lincon- Mensajes : 21
Fecha de inscripción : 08/03/2013
Re: La llegada del inmortal (Isobel Lincon)
observe como me alejo levemente y como la joven acato mi deseo sin dudarlo se desvistio dejando expuesto su par de senos que eran mas preciosos de los que aparentaban. mi mano que estaba sobre su cintura ahora reposaba sobre uno de sus senos gracias a la ayuda de la joven que guio el mismo hasta alli al ver como ella accedia a lo que le dije, me relambi los labios mirandola semi desnuda y de nuevo la deje contra la pared metiendo una de mis piernas entre las dos de ella haciend oque esta roze con su sexo mientras yo besaba su cuello como si lo fuera a deborar y mis manos tocaban los preciosos senos de la joven de forma calma pero constante hacian leves rozes en sus pezones hasta que una de las manos hasta que una se detuvo directamente a presionar el pezon ya duro para estimularla aun mas de lo que estaba.
- si me ha gustado, sois muy obediente zorra
dije mientras seguia estimulando su cuello y senos de forma que queria oirla gemir.
- si me ha gustado, sois muy obediente zorra
dije mientras seguia estimulando su cuello y senos de forma que queria oirla gemir.
Kenner Clapton- Vampiro Clase Alta
- Mensajes : 400
Fecha de inscripción : 09/03/2013
(+18)
Nuevamente se veía con la espalda puesta sobre la pared, que se sentía casi igual de fría que la mano del hombre sobre su ser. Un escalofrío recorrió su espalda y un ligero sonido de sorpresa se ahogo en su garganta cuando aquella pierna invadió su intimidad.
La ferocidad con la que aquel individuo realizaba las cosas la llenaba de deseo, y hacia que de manera lenta su intimidad se preparara para aquello a lo que estaba tan acostumbrada.
Se mordió el labio y llevo su mano hasta los cabellos de él, acariciando de manera lenta y seductora desde su cabeza y por su espalda. Su cadera se movió de manera inconsciente contra la pierna aquella y gimió de placer ante los roces que recorrían con calma y severidad sus senos.
Acerco su rostro al oído de aquel hombre y lo lamió de manera seductora, justo antes de soltar un gemido cerca de él y morderle el hombro.
"Zorra" aquella era la manera en la que muchos la llamaban. No podía decir si le gustaba o lo odiaba, quizás lo que era mejor decir es que tenía varios sentimientos por esa palabra, pero la manera en la que él la pronunciaba le hacía que quisiera que le llamara más de esa manera.
- Yo siempre soy obediente… - susurro - o quizás no tanto - soltó una pequeña risita y moviendo su cuerpo al frente, hizo que giraran para dejar al hombre esta vez contra la pared.
Su mirada estaba fija sobre él, estaba concentrada; tanto que el sonido del gato que paso veloz por aquel callejón no la distrajo de su cometido y llevando las manos hasta el pecho de él comenzó a acariciarlo de manera seductora sobre la ropa, mientras pegaba su cabeza contra su cuello dejando entre besos y lamidas; sus manos se deslizaron lentamente hasta que las llevo a la espalda de él y después las bajo hasta sus nalgas mientras sonreía en aquel cuello y se llenaba del buen olor que él desprendía y que estaba excitandola cada vez más.
La ferocidad con la que aquel individuo realizaba las cosas la llenaba de deseo, y hacia que de manera lenta su intimidad se preparara para aquello a lo que estaba tan acostumbrada.
Se mordió el labio y llevo su mano hasta los cabellos de él, acariciando de manera lenta y seductora desde su cabeza y por su espalda. Su cadera se movió de manera inconsciente contra la pierna aquella y gimió de placer ante los roces que recorrían con calma y severidad sus senos.
Acerco su rostro al oído de aquel hombre y lo lamió de manera seductora, justo antes de soltar un gemido cerca de él y morderle el hombro.
"Zorra" aquella era la manera en la que muchos la llamaban. No podía decir si le gustaba o lo odiaba, quizás lo que era mejor decir es que tenía varios sentimientos por esa palabra, pero la manera en la que él la pronunciaba le hacía que quisiera que le llamara más de esa manera.
- Yo siempre soy obediente… - susurro - o quizás no tanto - soltó una pequeña risita y moviendo su cuerpo al frente, hizo que giraran para dejar al hombre esta vez contra la pared.
Su mirada estaba fija sobre él, estaba concentrada; tanto que el sonido del gato que paso veloz por aquel callejón no la distrajo de su cometido y llevando las manos hasta el pecho de él comenzó a acariciarlo de manera seductora sobre la ropa, mientras pegaba su cabeza contra su cuello dejando entre besos y lamidas; sus manos se deslizaron lentamente hasta que las llevo a la espalda de él y después las bajo hasta sus nalgas mientras sonreía en aquel cuello y se llenaba del buen olor que él desprendía y que estaba excitandola cada vez más.
Isobel Lincon- Mensajes : 21
Fecha de inscripción : 08/03/2013
Re: La llegada del inmortal (Isobel Lincon)
Senti como ella se excito de sobremanera al sentir mi piernas entremedio de las dos de ella haciendo que rozara su sexo voluntariamente sobre mi pierna de forma consecutiva, podia sentir el roze caliente de su sexo sobre mi pierna el cual dejaba una leveme marca de calor sobre mi rodilla y pierna al sentirla tan cerca y pasando su intimidad por alli, mis manos acariciaban sus senos calidos y riguidos, el frio de mi piel la habia excitado mas, escuche lo que dijo y deje que me diera vuelta por unos minutos, sus manos calientes recorriendo mi pecho y luego mis espaldas,para terminar en mis nalgas el calor de sus manos recorriendo mi cuerpo me hacian sentir vivo mas una vez pero eso tambien aumentaba el deseo de poseer aquello que mantenia caliente su cuerpo su sangre, mis labios besaron su cuello y mis colmillos fueron visibles de momento, pero al sentir sus manos en mis nalgas ellos retrocedieron aun no era momento de matarla eso seria en breves, mis manos se deslizaron por su piel desnuda hacia abajo tocando nuevamente tela, para manosear y darle varias palmadas a sus nalgas de forma provocativa y lujuriosa, presionandolas contra mi hice que sus senos tambien se pegaran mas a mi cuerpo frio y asi sentir su cuerpo calido y lujuriosa, cuanto mas caliente y excitaba quedaba, mas vivo me permitia sentirme debido al calor que desprencia, mi mano bajo endireccion a sus piernas por el medio de sus nalgas, pasando por su orificio trasero de forma lenta, siempre aun por arriba de la ropa de momento.
Kenner Clapton- Vampiro Clase Alta
- Mensajes : 400
Fecha de inscripción : 09/03/2013
Re: La llegada del inmortal (Isobel Lincon)
Regreso sus manos lentamente por aquel cuerpo masculino hasta el pecho, lamentando enormemente dejar aquel glorioso trasero sin atención, pero había cosas que eran más importantes en aquellos momentos.
Una sonrisa ladina apareció en su rostro cuando el hombre golpeo su trasero y la pego a él; por aquel tipo de hombres era por lo que disfrutaba en gran medida de ser cortesana, pero para su desgracia existían poco como él, capaces de hacerla sentir de aquella manera con tan poco. Las caricias aquellas por su trasero hicieron que comenzara a sentir la humedad de su ser, pero las cosas no podían terminar tan pronto, no con alguien especial.
Alejó un poco su cuerpo con movimientos lentos y provocativos para que sus manos comenzaran a desabotonar la camisa del hombre frente a ella; la mujer quería el contacto de piel con piel. Acerco su rostro y beso con pasión los labios ajenos, introduciendo su lengua para ponerse juguetona mientras terminaba con los últimos botones de aquella camisa.
Termino el beso pero mantuvo sus labios pegados a los otros.
- ¿Será conveniente que vean a un señor respetable como usted en una situación como esta? porque vera, por mi no hay problema… ningún problema - dijo mientras abría la camisa y pegaba su desnudez al torso de Kenner, sintiendo la misma fría temperatura que antes cosa que hizo que dejara escapar otro ligero gemido que se quedo a medias cuando mordió su labio.
El deseo nublaba su cabeza, tuvo la suficiente decencia como para haber pronunciado palabras antes que para su suerte salieron firmes y entendibles pero ahora no sabía lo que pasaría con ella después de que se perdiera en el mar de gloriosas sensaciones que dos cuerpos juntos podían lograr.
Su mano bajo por un costado del cuerpo ajeno hasta que la movió para llegar a su pantalón intentando quitar todo aquello que estorbara y le impidiera sentir la hombría de aquel a quien le pertenecería esa noche.
Una sonrisa ladina apareció en su rostro cuando el hombre golpeo su trasero y la pego a él; por aquel tipo de hombres era por lo que disfrutaba en gran medida de ser cortesana, pero para su desgracia existían poco como él, capaces de hacerla sentir de aquella manera con tan poco. Las caricias aquellas por su trasero hicieron que comenzara a sentir la humedad de su ser, pero las cosas no podían terminar tan pronto, no con alguien especial.
Alejó un poco su cuerpo con movimientos lentos y provocativos para que sus manos comenzaran a desabotonar la camisa del hombre frente a ella; la mujer quería el contacto de piel con piel. Acerco su rostro y beso con pasión los labios ajenos, introduciendo su lengua para ponerse juguetona mientras terminaba con los últimos botones de aquella camisa.
Termino el beso pero mantuvo sus labios pegados a los otros.
- ¿Será conveniente que vean a un señor respetable como usted en una situación como esta? porque vera, por mi no hay problema… ningún problema - dijo mientras abría la camisa y pegaba su desnudez al torso de Kenner, sintiendo la misma fría temperatura que antes cosa que hizo que dejara escapar otro ligero gemido que se quedo a medias cuando mordió su labio.
El deseo nublaba su cabeza, tuvo la suficiente decencia como para haber pronunciado palabras antes que para su suerte salieron firmes y entendibles pero ahora no sabía lo que pasaría con ella después de que se perdiera en el mar de gloriosas sensaciones que dos cuerpos juntos podían lograr.
Su mano bajo por un costado del cuerpo ajeno hasta que la movió para llegar a su pantalón intentando quitar todo aquello que estorbara y le impidiera sentir la hombría de aquel a quien le pertenecería esa noche.
Isobel Lincon- Mensajes : 21
Fecha de inscripción : 08/03/2013
Re: La llegada del inmortal (Isobel Lincon)
senti como ella gemia y se encontraba tan excitada por el leve movimiento, con el leve movimiento que hice en su traser, ella se separo de mi de forma provocativa, me privo de momentos de su cuerpo caliente, per ocuanto mas se calentara ella mas vivo me haria sentir, deje como la joven sacaba mi camisa de forma elegante, como senti sus labios calidos y llenos de sangre besando los mios, mi lengua busco la de ella para jugar mientras sentia como el cuerpo de ella se pegaba al mio, sus dos senos calidos principalmente sus pezones se sintieron en mi piel fria como dos rocas que buscaban sentirse mas a gusto, mi mano se deslizo de nuevo sobre su trasero pero esta vez le hagarre los gluteos con fuera apretandole para que se excitara mas, mientras escuchaba lo que ella decia y respondi de forma picara
-Correre, el riesgo por cenarme algo tan delicioso
Dije a su oido mientras tomaba su cuello para lamberlo, aquello seria fuente de mi alimento, mi mano libre se dirigio a su sexo pero por arriba lo manose de forma lenta y haciendola sentir mas placer , pero repentinamente meti mis dedos dentro de su sexo o eso intente con ropa y todo sin lastimarla claro esta de momento mientras le susurre
-os gusta la violencia y el placer duro
refiriendo a las nalgadas que tanto la excitaron hace algunos minutos nada mas, senti como ella intentaba acariciar mi sexo para estimularlo sobre la ropa
-Correre, el riesgo por cenarme algo tan delicioso
Dije a su oido mientras tomaba su cuello para lamberlo, aquello seria fuente de mi alimento, mi mano libre se dirigio a su sexo pero por arriba lo manose de forma lenta y haciendola sentir mas placer , pero repentinamente meti mis dedos dentro de su sexo o eso intente con ropa y todo sin lastimarla claro esta de momento mientras le susurre
-os gusta la violencia y el placer duro
refiriendo a las nalgadas que tanto la excitaron hace algunos minutos nada mas, senti como ella intentaba acariciar mi sexo para estimularlo sobre la ropa
Kenner Clapton- Vampiro Clase Alta
- Mensajes : 400
Fecha de inscripción : 09/03/2013
(+18)
Correr riesgos era algo para lo que la mujer frente a él estaba hecha, o al menos era de esa manera desde que se convirtió en cortesana.
Las manos masculinas y fuertes apretaron su trasero, y una risita juguetona escapo de sus labios.
- ¿Qué si me gusta? - preguntó en un susurro mientras ladeaba el cuello para que la lengua extraña recorriera de mejor manera su cuello. Las caricias sobre su ropa le hicieron desear más, querer que aquel hombre la tomara de manera firme y la hiciera gemir y gritar su nombre - No me gusta… me fascina… - aseguro finalmente mientras levantaba una pierna para darle a él más espacio para maniobrar en su interior. Que la tocara sobre la ropa no se comparaba en nada a un contacto directo pero incluso de esa manera le gustaba.
Un gemido salió de sus labios cuando algunos dedos entraron en ella con todo y ropa, por lo que tuvo que levantar una mano y dejar unos instantes su cometido para tomarle del hombre y aferrarse a él.
Una vez que se siento de nuevo más relajada bajo las manos para lograra finalmente deshacer de lo que le impedía tocar aquel miembro.
Miro a los ojos del hombre y le sonrío.
- Parece que ya encontré lo que estaba buscando - deslizo una de sus manos y comenzó a tocarle de manera directa sin dejar de verlo, porque quería ser capaz de observar cada una de las reacciones de aquel individuo.
Las manos masculinas y fuertes apretaron su trasero, y una risita juguetona escapo de sus labios.
- ¿Qué si me gusta? - preguntó en un susurro mientras ladeaba el cuello para que la lengua extraña recorriera de mejor manera su cuello. Las caricias sobre su ropa le hicieron desear más, querer que aquel hombre la tomara de manera firme y la hiciera gemir y gritar su nombre - No me gusta… me fascina… - aseguro finalmente mientras levantaba una pierna para darle a él más espacio para maniobrar en su interior. Que la tocara sobre la ropa no se comparaba en nada a un contacto directo pero incluso de esa manera le gustaba.
Un gemido salió de sus labios cuando algunos dedos entraron en ella con todo y ropa, por lo que tuvo que levantar una mano y dejar unos instantes su cometido para tomarle del hombre y aferrarse a él.
Una vez que se siento de nuevo más relajada bajo las manos para lograra finalmente deshacer de lo que le impedía tocar aquel miembro.
Miro a los ojos del hombre y le sonrío.
- Parece que ya encontré lo que estaba buscando - deslizo una de sus manos y comenzó a tocarle de manera directa sin dejar de verlo, porque quería ser capaz de observar cada una de las reacciones de aquel individuo.
Isobel Lincon- Mensajes : 21
Fecha de inscripción : 08/03/2013
Re: La llegada del inmortal (Isobel Lincon)
observa como ella reacciona al placer que el le causo con aquel movimientos bruto y como respondia que le gustaba eso, lo duro y violento la tome del cuello separandola un poco de mi mientras mis dedos empiezan a penetrarla sin piedad con ropa y todo de forma constante pero lenta, parecia que fuera a rompar sus ropajes mientras mis colmillos rozaron los pezones de ella de forma provocativa parecia que le fuera a cortar el pezon con ellos, detengo todos mi movimientos volteandola a ella contra la pared haciend oque los senos de ella choquen con los ladrillos de la contruccion y sus nalgas apuntando hacia mi pege mi mimbro es sus nalgas empezando a moverlo mientras mi cabeza estaba contra la suya ambos mirando la pared
-para merecertelo deberas ser una zorra sumisa
Dije mientras comenzaba a mover mi miembro entre ambas nalgas de ella como si la estuviera cogiendo para que su orificio sintiera el placer que le rosaban los mismos mientras la tenia pegada contra la pared con una mano y la otra le azotaba una nalga
-para merecertelo deberas ser una zorra sumisa
Dije mientras comenzaba a mover mi miembro entre ambas nalgas de ella como si la estuviera cogiendo para que su orificio sintiera el placer que le rosaban los mismos mientras la tenia pegada contra la pared con una mano y la otra le azotaba una nalga
Kenner Clapton- Vampiro Clase Alta
- Mensajes : 400
Fecha de inscripción : 09/03/2013
Re: La llegada del inmortal (Isobel Lincon)
Su cuerpo fue obligado a curvearse hacia atrás haciendo que soltara un leve grito de sorpresa y se aferrara a los hombros del hombre; un temblor ligero le inundo el cuerpo al creer que si la soltaba caería pero esas preocupaciones se disiparon de su mente cuando el comenzó a rozarle los pechos lo que hizo que ella sonriera complacida ante las sensaciones y gimiendo de placer ante la intromisión lenta de aquellos dedos en su sexo.
- Esto me gusta - dice antes de que con un movimiento veloz termine de frente a la pared poniendo sus manos en aquella pared.
- Seré lo que quieras que sea - asegura mientras el miembro que tanto estaba esperando en su interior se muere contra su trasero. Gira su rostro para mirarlo cerca de ella - dame lo que deseo - dice con voz seductora, mientras lleva una mano hasta su sexo para acariciarse a si misma - mira como me tienes, deseando tanto que estés dentro de mi - se muerde el labio levemente, respirando de manera agitada moviendo su trasero para poder ser capaz de sentir más el miembro sobre su cuerpo - dime que quieres que haga y haré lo que me pidas.
- Esto me gusta - dice antes de que con un movimiento veloz termine de frente a la pared poniendo sus manos en aquella pared.
- Seré lo que quieras que sea - asegura mientras el miembro que tanto estaba esperando en su interior se muere contra su trasero. Gira su rostro para mirarlo cerca de ella - dame lo que deseo - dice con voz seductora, mientras lleva una mano hasta su sexo para acariciarse a si misma - mira como me tienes, deseando tanto que estés dentro de mi - se muerde el labio levemente, respirando de manera agitada moviendo su trasero para poder ser capaz de sentir más el miembro sobre su cuerpo - dime que quieres que haga y haré lo que me pidas.
Isobel Lincon- Mensajes : 21
Fecha de inscripción : 08/03/2013
Re: La llegada del inmortal (Isobel Lincon)
al escuchar lo que ella dice y los roses de su trasero contra mi miembro sigor rosandolo acercando mi boca a su cuello y clavando mis colmillos en su cuello empiez a hacer sangrar a la cortesana sintiendo el calor de la joven desprendia de su sangre, senti como su sangre era deliciosa, no queria matarla la usaria de fuente de alimento segui bebiendo aquella sangre clavandole mas mi colmillo para que mas sangrara, mientras que casi sin notarlo le penetre el orificio trasero debido a al placer que me dio su sangre y empeze a penetrarla por detras sin detenerme un segundo su sangre segui brotando mientras una de mis manos le daba nalgadas, mi lengua se perdia en su color carmesi que brotaba desde aquellos dos agujeros me detuve unos segundos pero aun dandole placer
-tocate mas que esta sangre tuya, llena de lujuria sabe mas deliciosa
Dije volviendo a chupar y lamber sus sangre por todo su cuello, hilos de sangre avanzaron por delane manchando la pared y escurriendo por sus senos en direccion al suelo por espaldas y los lados tambien se empezaba a ensangrentar y yo estaba casi entrando en estado de frenesi debido al placer que recibia del coito y de alimentarme de su sangre durante el momento.
-tocate mas que esta sangre tuya, llena de lujuria sabe mas deliciosa
Dije volviendo a chupar y lamber sus sangre por todo su cuello, hilos de sangre avanzaron por delane manchando la pared y escurriendo por sus senos en direccion al suelo por espaldas y los lados tambien se empezaba a ensangrentar y yo estaba casi entrando en estado de frenesi debido al placer que recibia del coito y de alimentarme de su sangre durante el momento.
Kenner Clapton- Vampiro Clase Alta
- Mensajes : 400
Fecha de inscripción : 09/03/2013
(+18)
De un momento a otro sintió un ligero dolor en el cuello, y aquello la puso más deseosa. Sonrío ante la visión mental que debía dar ser aquella clase de mujer pero tal era la sensación de placer y dolor mezclados que sentía las piernas le fallarían en cualquier momento haciendola caer, así que se mantuvo de pie utilizando toda la fuerza de voluntad de la que era capaz.
No se percato del momento en que él maniobraba hasta que sintió el miembro invadiendo su cuerpo. Se curveo hacía atrás produciendo un gemido mientras recargaba su cabeza en el hombro de él teniendo la cabeza ajena contra su cuello. El calor que producía momentáneamente su sangre correr por su cuerpo no le importo, después de todo ella ya había servido a seres nocturnos como él antes pero poco le generaban tal satisfacción.
Escucho la orden que él le daba y obedeció.
Su mano había permanecido tocando su sexo pero al sentirlo a él había detenido sus movimientos, que se reanudaron mientras movía las caderas en contra de él.
Lo quería todo dentro, que le partiera desde dentro con tal placer y que no se detuviera jamás.
La velocidad de movimiento se vio aumentada; con voz entrecortada y respiración dificultosa se dirigió a él - Más… Kenner… - volvió a ver a la pared intentando aferrarse a ella con la mano que tenía libre, mordiendo su labio para no dejar escapar tantos gemidos de sus labios solo uno que otro que se fugaba para mostrar lo mucho que ella estaba disfrutando el momento.
No se percato del momento en que él maniobraba hasta que sintió el miembro invadiendo su cuerpo. Se curveo hacía atrás produciendo un gemido mientras recargaba su cabeza en el hombro de él teniendo la cabeza ajena contra su cuello. El calor que producía momentáneamente su sangre correr por su cuerpo no le importo, después de todo ella ya había servido a seres nocturnos como él antes pero poco le generaban tal satisfacción.
Escucho la orden que él le daba y obedeció.
Su mano había permanecido tocando su sexo pero al sentirlo a él había detenido sus movimientos, que se reanudaron mientras movía las caderas en contra de él.
Lo quería todo dentro, que le partiera desde dentro con tal placer y que no se detuviera jamás.
La velocidad de movimiento se vio aumentada; con voz entrecortada y respiración dificultosa se dirigió a él - Más… Kenner… - volvió a ver a la pared intentando aferrarse a ella con la mano que tenía libre, mordiendo su labio para no dejar escapar tantos gemidos de sus labios solo uno que otro que se fugaba para mostrar lo mucho que ella estaba disfrutando el momento.
Isobel Lincon- Mensajes : 21
Fecha de inscripción : 08/03/2013
Re: La llegada del inmortal (Isobel Lincon)
Escuche como la joven, gemia y pronunciaba mi nombre se atrevia a llamarme de forma, comun como si me conociera esta cortesana, eso hizo que mis ojos destellaran y le clavara mi miembro hasta el dundo de su parte trasera y lo dejara hay presionado, la fuerza que use fue un poco sobre humana podia a verla lastimado pero eso no me importaba ahora mis manos se diriguieron a sus senos los cuales comenze a masajear y a ensuciar con su sangre, masajeando como si su sangre se tratara de una crema para su sesxo y cuerpo mis manos, ensagrentadas acariciaban su cuerpo inmundo y comenzaron a bajar hacia su sexo el cual acaricie llenandolo de manchas de sangre, el cuerpo de ella parecia la mayor abominacion del mundo bañada en sangre como si eso se tratara de algo comun una escena muy diabolica, pero a mi me encantaba retire mis colmillos de su cuerpo aun viendo como la sangre salia por aquel agujero y comense a lamber su cuello y algunos hilos de sangre que se perdian en sus espaldas, para luego volver a mover mi cadera con movimientos secos, lo retiraba lentamente y se lo insertaba de forma rapida y fuerte buscando que gimiera de placer mientras mis manos frías combinadas con su sangre la ensuciaban dejaban su cuerpo manchado de sangre, por todos lados y mi lengua lambio su nuca la cual se habia manchado de sangre, mis dedos penetraron su sexo manchan dolo también
Kenner Clapton- Vampiro Clase Alta
- Mensajes : 400
Fecha de inscripción : 09/03/2013
Re: La llegada del inmortal (Isobel Lincon)
Gritó al momento que le sintió tan dentro de su ser, aquel movimiento del vampiro había hecho que incluso moviera sus manos y arañara la pared en un intento desesperado por detener el dolor que sintió. Debía estar enferma, porque no solo dolor era lo que le provocaba de nuevo todo aquello, si no que en ocasiones le era difícil captar cuales eran sensaciones dolorosas y cuales placenteras.
Agacho la mirada al frente, dejando caer su cabeza sin despegar las manos de la pared. Observo como las manos frías recorrían cada centímetro de su piel que eran capaces de alcanzar y vio la sangre que manchaba su cuerpo, una imagen grotesca para cualquier otro humano que viera eso; pero a ella eso la excito aun más, era como una obra de arte creada por un pintor exclusivo y no comprendido por nadie, más que por ella.
Su cuerpo estaba adquiriendo la fuerza que antes le faltaba y apenas estaba siendo capaz de creer que no caería al suelo cuando los movimientos fueron retomados por le hombre, haciendo su ser gemir con el primer nuevo movimiento y que se aferrara de nueva cuenta a la pared para resistir todo aquello.
Las manos ajenas no se detenían de explorar cada parte de su anatomía y cuando llegaron a su sexo deslizo una mano para ponerla sobre la de Kenner al tiempo que cerraba los ojos y movía las caderas para que llegara tan profundo como en aquel momento que antes la hizo gritar.
Emitía jadeos con cada nueva embestida, esa forma de ser tomada era sin dudas la mejor que había experimentado hasta el momento.
Agacho la mirada al frente, dejando caer su cabeza sin despegar las manos de la pared. Observo como las manos frías recorrían cada centímetro de su piel que eran capaces de alcanzar y vio la sangre que manchaba su cuerpo, una imagen grotesca para cualquier otro humano que viera eso; pero a ella eso la excito aun más, era como una obra de arte creada por un pintor exclusivo y no comprendido por nadie, más que por ella.
Su cuerpo estaba adquiriendo la fuerza que antes le faltaba y apenas estaba siendo capaz de creer que no caería al suelo cuando los movimientos fueron retomados por le hombre, haciendo su ser gemir con el primer nuevo movimiento y que se aferrara de nueva cuenta a la pared para resistir todo aquello.
Las manos ajenas no se detenían de explorar cada parte de su anatomía y cuando llegaron a su sexo deslizo una mano para ponerla sobre la de Kenner al tiempo que cerraba los ojos y movía las caderas para que llegara tan profundo como en aquel momento que antes la hizo gritar.
Emitía jadeos con cada nueva embestida, esa forma de ser tomada era sin dudas la mejor que había experimentado hasta el momento.
Isobel Lincon- Mensajes : 21
Fecha de inscripción : 08/03/2013
Página 1 de 2. • 1, 2
Temas similares
» A good company [Isobel Lincon]
» Isobel Ness ID
» La vida y su tic-tac ( Isobel )
» Isobel Twist
» Isobel Gowdie ID
» Isobel Ness ID
» La vida y su tic-tac ( Isobel )
» Isobel Twist
» Isobel Gowdie ID
Página 1 de 2.
Permisos de este foro:
No puedes responder a temas en este foro.
Miér Sep 18, 2024 9:16 am por Afiliaciones
» REACTIVACIÓN DE PERSONAJES
Mar Jul 30, 2024 4:58 am por Frederick Truffaut
» AVISO #49: SITUACIÓN ACTUAL DE VICTORIAN VAMPIRES
Miér Jul 24, 2024 2:54 pm por Nigel Quartermane
» Ah, mi vieja amiga la autodestrucción [Búsqueda activa]
Jue Jul 18, 2024 4:42 am por León Salazar
» Vampirto ¿estás ahí? // Sokolović Rosenthal (priv)
Miér Jul 10, 2024 1:09 pm por Jagger B. De Boer
» l'enlèvement de perséphone ─ n.
Sáb Jul 06, 2024 11:12 pm por Vivianne Delacour
» orphée et eurydice ― j.
Jue Jul 04, 2024 10:55 pm por Vivianne Delacour
» Le Château des Rêves Noirs [Privado]
Jue Jul 04, 2024 10:42 pm por Willem Fokke
» labyrinth ─ chronologies.
Sáb Jun 22, 2024 10:04 pm por Vivianne Delacour