- Noam Howe -

DATOS BÁSICOS

DESCRIPCIÓN PSICOLÓGICA

No soy precisamente un vampiro centenario que se deja llevar por su sed de sangre. Tengo un enorme autocontrol sobre mis instintos y mi sed de sangre. Puedo beber de un ser humano sin matarle, ¿por qué hacerlo entonces? Sigo siendo un caballero y debo hacer honor a la educación recibida de mi familia. Soy un sibarita, disfruto del arte y me comporto como un caballero en público. También soy ambicioso y me gusta ver cómo mi dinero y mi esfuerzo son invertidos con productividad en actividades empresariales.

He visto mundo, he conocido distintas culturas y he aprendido a respetarlas. Lo mismo me ocurre con otros seres sobrenaturales, sé que los vampiros no sómos las únicas abominaciones de la naturaleza que vagan por este mundo, ¿por qué habríamos de enemistarnos? Personalmente carezco de prejuicios raciales, me da igual si un ser es humano, licántropo o lo que sea, son sus actos los que le caracterizan, no lo que es.

Por otra parte por mis venas sigue corriendo sangre de la aristocracia inglesa, siempre puedo recurrir a la fina ironía o al sarcasmo más mordaz, eso sí, todo con una sonrisa falsa e hipócrita.

HISTORIA

Me llamo Noam Howe y soy un vampiro. Sí, habéis leído bien, soy una criatura de la noche que necesita alimentarse de sangre humana para vivir. Uno no asimila esto fácilmente, a mi también me costó pero uno termina acostumbrándose a todo. Para contaros cómo fue todo el proceso debo remitirme unos 70 años atrás, cuando sólo era un joven inglés noble y entusiasta que acababa de heredar de un familiar lejano una finca y sus tierras. Era la prueba de fuego para demostrar a su familia que podía hacerse cargo de la fortuna familiar.

Cultivos, reuniones sociales, batidas de caza, una excelente biblioteca y criados que atendían todas mis necesidades. Una de las campesinas que trabajaba en los campos y vivía en la aldea cercana captó mi atención, era una mujer hermosa y astuta y logró encandilarme. Un matrimonio con alguien de origen humilde hubiera sido un escándalo en mi familia, no hubo boda ni compromiso pero me aseguré de que no le faltara de nada de una manera discreta. Al cabo de los meses ella quedó embarazada, no estaba previsto pero le prometí que reconocería al hijo como mío.

El niño nació nueve meses después pero apenas lo tuve en mis brazos unas horas. Al día siguiente ocurrió lo impensable: el bebé desapareció sin dejar rastro. En esos momentos pensé que lo habían secuestrado de modo que organicé una partida de búsqueda por toda la región y mandé mensajeros para propagar la noticia. Tres días después volvía a mi hogar con las manos vacías y mi espíritu completamente quebrado. Despedí a la doncella de mi servicio pero le di una recomendación y una generosa suma de dinero para que pudiera establecerse donde ella gustase, sencillamente su visión me era demasiado dolorosa. En ese momento no le di importancia pero me daba la sensación de que ella parecía querer aferrarse a su nuevo nivel de vida y no parecía especialmente dolida por la pérdida del niño o por tener que separarse de mi lado.

Durante un año, sumido en la depresión, estuve entregándome a la mala vida. Prostitución, tanto femenina como masculina, alcohol, psicotrópicos y demás. Había puesto demasiada ilusión en aquel retoño y me fue arrebatado delante de mis narices. Iba a ser un bastardo, sí, pero era de mi sangre y esos tiernos e inocentes ojos verdes se quedaron grabados en mi memoria, atormentándome por las noches.

Una noche, estando completamente ebrio, observé como dos hombres parecían pelearse en un bar y uno de ellos parecía llevar ventaja. No sé por qué lo hice pero básicamente fue el detonante de todo. Al parecer, según descubrí más tarde, el hombre al que abatí era un cazador y el acosado era un vampiro en peligro mortal.

El hombre al que rescaté no era inglés, tenía rasgos exóticos y su nombre era Keneu pero dada mi borrachera actual eso poco importaba. Hubo conversación y más alcohol de por medio en otras tabernas y finalmente me preguntó si deseaba ser su "compañero". No recuerdo lo que respondí, tan sólo me vienen a la memoria escenas sexuales bastante intensas, sangre de por medio y que estuve a punto de morir aunque técnicamente fue eso lo que ocurrió. Al parecer mi respuesta fue "sí". Fue entonces cuando desperté como vampiro.

Keneu me enseño cómo sobrevivir, cómo beber sin necesidad de matar y demás habilidades que proporcionaba la sangre vampírica. Durante un tiempo estuve horrorizado pero poco a poco fui asimilándolo y tratar de ver mi nueva naturaleza como un regalo. Incluso hoy en día, si pudiera volver atrás, seguramente preferiría no ser convertido pero no es algo realista.

Dada mi naturaleza cambié mis hábitos de vida en la finca, no me costó demasiado gracias a mis nuevas habilidades convencer a los criados que se adaptaran y que no se fueran de la lengua. Durante diez largos años estuve recibiendo visitas frecuentes de Keneu, a veces íbamos a cazar al bosque y alimentarnos de algún animal o simplemente retozar y tener sexo entre los árboles. Por primera vez tras el incidente con mi hijo volvía a sentirme vivo. Pero en ocasiones Keneu tenía una actitud desagradable, era celoso, posesivo y parecía creer que yo le pertenecía. Al principio no le di importancia pero aquella forma de comportarse llegó hasta el acoso y tampoco ayudaba el hecho de que empezaba a sentirme emocionalmente atraído por él más allá del físico y la lujuria.

Finalmente tomé la decisión de dejar la propiedad de mi finca a un primo cercano y comencé un viaje por Europa y parte de Asia. No me quedama demasiado tiempo en ningún lugar, aprendía sobre culturas diversas y distintas lenguas, conocí a nuevos vampiros e incluso otras criaturas como licántropos, brujas o cambiaformas, algunos más amistosos que otros. Tras casi 30 años de vagar por el mundo, de haber sobrevivido a algunos encuentros con cazavampiros y otras criaturas sobrenaturales, decidí establecerme en una gran ciudad, allí iba a pasar más desapercibido y pasó por mi cabeza la posibilidad de echar raíces. Mi habilidad con la gestión y mi don de lenguas me abría las puertas a un posible negocio de importaciones y exportaciones, era un proyecto a medio plazo que tenía en mente cuando llegué a la ciudad y poco a poco va tomando forma.

Y aquí estoy, escribiendo un diario sobre mi vida como criatura de la noche. Podría decirse que he tenido suerte, Keneu podía ser muy posesivo pero no era una bestia sanguinaria como otros vampiros y tenía cierto respeto por las vidas humanas.  De momento he sabido mantener la cordura, tan sólo he de tener cuidado y tener las cosas claras.

DATOS EXTRA

- Pese a no necesitarlo camina con un bastón con empuñadura de plata que puede usar para pelear.

- Siempre lleva un reloj de bolsillo con él. En su cubierta está grabado su escudo familiar.

- Muy rara vez menciona su nombre de pila. Se presenta simplemente como Howe, generalmente precedido de "señor", "mister", "monsieur" o "herr", según el lugar o el país.

- Domina multitud de idiomas gracias a sus viajes.

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