AÑO 1842
Nos encontramos en París, Francia, exactamente en la pomposa época victoriana. Las mujeres pasean por las calles luciendo grandes y elaborados peinados, mientras abanican sus rostros y modelan elegantes vestidos que hacen énfasis los importantes rangos sociales que ostentan; los hombres enfundados en trajes las escoltan, los sombreros de copa les ciñen la cabeza.
Todo parece transcurrir de manera normal a los ojos de los humanos; la sociedad está claramente dividida en clases sociales: la alta, la media y la baja. Los prejuicios existen; la época es conservadora a más no poder; las personas con riqueza dominan el país. Pero nadie imagina los seres que se esconden entre las sombras: vampiros, licántropos, cambiaformas, brujos, gitanos. Todos son cazados por la Inquisición liderada por el Papa. Algunos aún creen que sólo son rumores y fantasías; otros, que han tenido la mala fortuna de encontrarse cara a cara con uno de estos seres, han vivido para contar su terrorífica historia y están convencidos de su existencia, del peligro que representa convivir con ellos, rondando por ahí, camuflando su naturaleza, haciéndose pasar por simples mortales, atacando cuando menos uno lo espera.
Espacios libres: 11/40
Afiliaciones élite: ABIERTAS
Última limpieza: 1/04/24
En Victorian Vampires valoramos la creatividad, es por eso que pedimos respeto por el trabajo ajeno. Todas las imágenes, códigos y textos que pueden apreciarse en el foro han sido exclusivamente editados y creados para utilizarse únicamente en el mismo. Si se llegase a sorprender a una persona, foro, o sitio web, haciendo uso del contenido total o parcial, y sobre todo, sin el permiso de la administración de este foro, nos veremos obligados a reportarlo a las autoridades correspondientes, entre ellas Foro Activo, para que tome cartas en el asunto e impedir el robo de ideas originales, ya que creemos que es una falta de respeto el hacer uso de material ajeno sin haber tenido una previa autorización para ello. Por favor, no plagies, no robes diseños o códigos originales, respeta a los demás.
Así mismo, también exigimos respeto por las creaciones de todos nuestros usuarios, ya sean gráficos, códigos o textos. No robes ideas que les pertenecen a otros, se original. En este foro castigamos el plagio con el baneo definitivo.
Todas las imágenes utilizadas pertenecen a sus respectivos autores y han sido utilizadas y editadas sin fines de lucro. Agradecimientos especiales a: rainris, sambriggs, laesmeralda, viona, evenderthlies, eveferther, sweedies, silent order, lady morgana, iberian Black arts, dezzan, black dante, valentinakallias, admiralj, joelht74, dg2001, saraqrel, gin7ginb, anettfrozen, zemotion, lithiumpicnic, iscarlet, hellwoman, wagner, mjranum-stock, liam-stock, stardust Paramount Pictures, y muy especialmente a Source Code por sus códigos facilitados.
Victorian Vampires by Nigel Quartermane is licensed under a
Creative Commons Reconocimiento-NoComercial-SinObraDerivada 3.0 Unported License.
Creado a partir de la obra en https://victorianvampires.foroes.org
Últimos temas
When the Smoke is Going Down ~~ Kurt
2 participantes
Página 2 de 2.
Página 2 de 2. • 1, 2
When the Smoke is Going Down ~~ Kurt
Recuerdo del primer mensaje :
No había gran cosa que hacer para Esteve, salvo ir deambulando por las callejuelas por un poco de inspiración. Hacía semanas que no escribía una sola nota, y para ser honestos ya era preocupante. Generalmente lo hacía fumándose un cigarrillo, pero el último ya se había terminado hacía un rato y no le quedaba plata para comprarse otro. Así que con la guitarra en mano, iba sacando algunas notas indescifrables a su guitarra, mientras veía a la gente ir y venir, sumida en sus propios asuntos.
Aquel día había escogido el atuendo más extraño que había podido encontrar. Sombrero negro, abrigo sin mangas de color oscuro, y sobre éste, una camisa bastante peculiar con colores muy vivaces. Un pantalón oscuro de cuero demasiado abultado, unas botas negras que hacían ruido al caminar, sumamente grandes y brillantes. Y por último, el cabello revuelto, asomando por los laterales. Para ojos castos era la personificación del pecado andante, para otros- los "estudiosos de la moda" - una pobre alba perturbada que no podía encontrar un estilo definido, y para la gran mayoría: Era un ser vulgar, corriente y prosaico.
Claro estaba que no le importaba lo que los demás pusieran decir de él. El era feliz, siendo y haciendo lo que deseaba en el momento que así lo decidiera. No había venido al mundo a hacer amigos, sino simplemente a escribir algunas melodías salidas desde lo más profundo de su perturbada alma, y por último, a dibujar todo aquello que considerara digno se ser plasmado en un lienzo o en algún cuadernillo. Una vida sencilla sin demasiadas complicaciones. Lo único que parecía distraerlo de sus profundos pensamientos, eran aquellos pastelillos, que se burlaban de su persona, detrás de un aparador. Pastelillos de fresa cubiertos con crema batida encima. Todo un manjar a sus ojos, pero al igual que muchas cosas, negados para su bolsillo.
Ya encontraría la manera de sacar algunas moneadas y la oportunidad se presentaba justamente a escasos metros de distancia. Un hombre de color, tocaba una moelodía con su trompeta, e inmediatamente se prendó. Aquel tema podía considerarse como el segundo himno nacional de Francia, después de la Marsellesa. Se acercó tímidamente hasta él, y comenzó a acompañarlo con su guitarra. El tipo sonrió y le saludó con una leve inclinación de su cabeza. Esteve, ya más confiado, comenzó a cantar un poco, para que el "todo" fuera armonioso.
Bastaba decir que la gente comenzó a acercarse para observarlos tocar. Algunos dejaban monedas de varias denominaciones dentro del estuche de la trompeta del anciano y el francés rabió por ser tan distraído. Ahora mismo ya pudiera estar ganando algunos centavos para ir tras esos manjares, de media cuadra atrás. Suspiró y negó con la cabeza, sin dejar de cantar, ya tendría la oportunidad. Se paseó de un lado hacia otro, cantando, y al ritmo que le marcaba el hombre aquel. Más tarde recargó su espalda sobre la pared, dejando una pierna encima de ésta. No había duda. Podía estar muriéndose de hambre, pero la música era el alimento perfecto por el momento.
No había gran cosa que hacer para Esteve, salvo ir deambulando por las callejuelas por un poco de inspiración. Hacía semanas que no escribía una sola nota, y para ser honestos ya era preocupante. Generalmente lo hacía fumándose un cigarrillo, pero el último ya se había terminado hacía un rato y no le quedaba plata para comprarse otro. Así que con la guitarra en mano, iba sacando algunas notas indescifrables a su guitarra, mientras veía a la gente ir y venir, sumida en sus propios asuntos.
Aquel día había escogido el atuendo más extraño que había podido encontrar. Sombrero negro, abrigo sin mangas de color oscuro, y sobre éste, una camisa bastante peculiar con colores muy vivaces. Un pantalón oscuro de cuero demasiado abultado, unas botas negras que hacían ruido al caminar, sumamente grandes y brillantes. Y por último, el cabello revuelto, asomando por los laterales. Para ojos castos era la personificación del pecado andante, para otros- los "estudiosos de la moda" - una pobre alba perturbada que no podía encontrar un estilo definido, y para la gran mayoría: Era un ser vulgar, corriente y prosaico.
Claro estaba que no le importaba lo que los demás pusieran decir de él. El era feliz, siendo y haciendo lo que deseaba en el momento que así lo decidiera. No había venido al mundo a hacer amigos, sino simplemente a escribir algunas melodías salidas desde lo más profundo de su perturbada alma, y por último, a dibujar todo aquello que considerara digno se ser plasmado en un lienzo o en algún cuadernillo. Una vida sencilla sin demasiadas complicaciones. Lo único que parecía distraerlo de sus profundos pensamientos, eran aquellos pastelillos, que se burlaban de su persona, detrás de un aparador. Pastelillos de fresa cubiertos con crema batida encima. Todo un manjar a sus ojos, pero al igual que muchas cosas, negados para su bolsillo.
Ya encontraría la manera de sacar algunas moneadas y la oportunidad se presentaba justamente a escasos metros de distancia. Un hombre de color, tocaba una moelodía con su trompeta, e inmediatamente se prendó. Aquel tema podía considerarse como el segundo himno nacional de Francia, después de la Marsellesa. Se acercó tímidamente hasta él, y comenzó a acompañarlo con su guitarra. El tipo sonrió y le saludó con una leve inclinación de su cabeza. Esteve, ya más confiado, comenzó a cantar un poco, para que el "todo" fuera armonioso.
Bastaba decir que la gente comenzó a acercarse para observarlos tocar. Algunos dejaban monedas de varias denominaciones dentro del estuche de la trompeta del anciano y el francés rabió por ser tan distraído. Ahora mismo ya pudiera estar ganando algunos centavos para ir tras esos manjares, de media cuadra atrás. Suspiró y negó con la cabeza, sin dejar de cantar, ya tendría la oportunidad. Se paseó de un lado hacia otro, cantando, y al ritmo que le marcaba el hombre aquel. Más tarde recargó su espalda sobre la pared, dejando una pierna encima de ésta. No había duda. Podía estar muriéndose de hambre, pero la música era el alimento perfecto por el momento.
Des nuits d'amour a ne plus en finir
un grand bonheur qui prend sa place
des enuis des chagrins, des phases
heureux, heureux a en mourir.
Quand il me prend dans ses bras
il me parle tout bas...
un grand bonheur qui prend sa place
des enuis des chagrins, des phases
heureux, heureux a en mourir.
Quand il me prend dans ses bras
il me parle tout bas...
Esteve Sa-Michelle- Humano Clase Media
- Mensajes : 66
Fecha de inscripción : 10/12/2013
Re: When the Smoke is Going Down ~~ Kurt
Me deshice del abrigo, quedándome únicamente con la camisa, misma que arremangue. Abrí un pequeño baúl que descansaba sobre una esquina y de ahí saqué un par de frascos con pintura vegetal y los pinceles los deposité sobre una mesita, y de inmediato me di a la tarea de ir por algún lienzo en blanco que estaba guardando para una ocasión especial; éste momento parecía ser el indicado. Entonces no me remordería la conciencia utilizarlo, ya que estaba seguro que iba obtener un buen trabajo.
Kurt por lo tanto, curioseaba por la ventana, y ahí me di cuenta de que su perfil izquierdo era el mejor y centrarme en esa parte- mientras observaba por la ventana desvencijada- seria mas que suficiente mientras hubiera luz del sol entrando por ella.
-¿Podrías quitarte la parte superior de tu ropa? !Se me ha ocurrido una grandiosa idea!.
Esperaba no lo tomara a mal, puesto que no tenia otro tipo de interes por el monento, más que captar su escencia completamente.
Kurt por lo tanto, curioseaba por la ventana, y ahí me di cuenta de que su perfil izquierdo era el mejor y centrarme en esa parte- mientras observaba por la ventana desvencijada- seria mas que suficiente mientras hubiera luz del sol entrando por ella.
-¿Podrías quitarte la parte superior de tu ropa? !Se me ha ocurrido una grandiosa idea!.
Esperaba no lo tomara a mal, puesto que no tenia otro tipo de interes por el monento, más que captar su escencia completamente.
Esteve Sa-Michelle- Humano Clase Media
- Mensajes : 66
Fecha de inscripción : 10/12/2013
Re: When the Smoke is Going Down ~~ Kurt
Esteve comenzó con su trabajo, era bastante meticuloso a la hora de colocar sus elementos de trabajo. Se remango la camisa, coloco los pinceles y las pinturas en orden, el lienzo blanco y perfecto quedó apoyado perfectamente sobre su caballete. Volví a mirar por la ventana para no molestarle con mi mirada indiscreta, pero cuando me pidió que me quitase la ropa volví la vista sorprendido hacia él.
Cierto es que no me pidió que me desvistiese por completo, solo que me quitase la camisa, que era lo único que llevaba puesta en la parte superior, aún así en un primer momento me chocó. Sin embargo lo hice.
-Esta bien…- Me quite la camisa despacio, algo incomodo y avergonzado, creo que incluso me puse rojo. Su tono de emoción al decirme que había tenido una idea me dio a entender que no tenía otro tipo de intenciones que las de pintar, a veces los artistas tienen otra forma de ver el mundo, quizá el que me quedase así solo era parte de la imagen que se había generado en su cabeza y que deseaba retratar. De todas formas me había ofrecido voluntario y el estaba pintando aquel cuadro para mi sin pedirme un penique a cambio así que no hubiese sido muy educado por mi parte negarme a los deseos del artista.
Respire un par de veces, un ejercicio que siempre hacia antes de salir al escenario, conseguía calmarme.
-Como… ¿cómo quieres que me coloque?-me rasque la cabeza instintivamente, siempre lo hacía cuando me sentía perdido.
Cierto es que no me pidió que me desvistiese por completo, solo que me quitase la camisa, que era lo único que llevaba puesta en la parte superior, aún así en un primer momento me chocó. Sin embargo lo hice.
-Esta bien…- Me quite la camisa despacio, algo incomodo y avergonzado, creo que incluso me puse rojo. Su tono de emoción al decirme que había tenido una idea me dio a entender que no tenía otro tipo de intenciones que las de pintar, a veces los artistas tienen otra forma de ver el mundo, quizá el que me quedase así solo era parte de la imagen que se había generado en su cabeza y que deseaba retratar. De todas formas me había ofrecido voluntario y el estaba pintando aquel cuadro para mi sin pedirme un penique a cambio así que no hubiese sido muy educado por mi parte negarme a los deseos del artista.
Respire un par de veces, un ejercicio que siempre hacia antes de salir al escenario, conseguía calmarme.
-Como… ¿cómo quieres que me coloque?-me rasque la cabeza instintivamente, siempre lo hacía cuando me sentía perdido.
Kurt Callahan- Humano Clase Baja
- Mensajes : 194
Fecha de inscripción : 11/10/2013
Localización : París
DATOS DEL PERSONAJE
Poderes/Habilidades:
Datos de interés:
Re: When the Smoke is Going Down ~~ Kurt
Pude notar que el color se le subió a las mejillas y en la parte superior de sus orejas. Sonreí, más no le di importancia, porque de haberlo hecho le habría predispuesto a sentirse más incómodo de lo que yo percibía en él. Tenía razón, porque quitarse parte de la ropa frente a alguien que apenas acabas de conocer, no es algo muy bien visto, y no es algo usual. Pero Kurt era un artista a su modo, al igual que yo. Entre artistas podríamos comprendernos sin siquiera decir palabras, sin embargo, me sorprendí un poco el notar su vergüenza. A mi modo de ver no tendría ni porque enrojecerse; mi reciente amigo poseía fuertes brazos, una buena espalda y un abdomen marcado. Se notaba que cuidaba su apariencia por obviedad. Ser un actor itinerante y dar la cara hacia el público, conllevaba a hacer grandes sacrificios, como... El posar desnudo completamente por ejemplo. Sólo que no le había platicado el resto de la idea, que ya se había dibujado en mi mente. Le llevaría poco a poco hasta sentirse completamente a gusto con la situación.
-Bien ahora... Ve hacia la ventana, corre las cortinas, ábrela de par en par y permanece ahí unos instantes, enciende un cigarrillo y dale algunas bocanadas . Yo me encargo del resto.
Mientras Kurt seguía mis indicaciones, yo comencé a derrochar toda mi imaginación y pasión en aquellos primeros trazos. Mi vista corría de él hacia el lienzo y viceversa. Comencé a machar mi ropa de pintura, al igual que mis mamos y mis labios, pues tenía la mala costumbre de sostener los pinceles con ellos.
-Actúa natural, si gustas puedes pasearte por el sofá, la cama... Eres libre. Sé tu mismo, como si estuvieras en casa, vamos.
Volví a sonreír, guiñando un ojo.
-Bien ahora... Ve hacia la ventana, corre las cortinas, ábrela de par en par y permanece ahí unos instantes, enciende un cigarrillo y dale algunas bocanadas . Yo me encargo del resto.
Mientras Kurt seguía mis indicaciones, yo comencé a derrochar toda mi imaginación y pasión en aquellos primeros trazos. Mi vista corría de él hacia el lienzo y viceversa. Comencé a machar mi ropa de pintura, al igual que mis mamos y mis labios, pues tenía la mala costumbre de sostener los pinceles con ellos.
-Actúa natural, si gustas puedes pasearte por el sofá, la cama... Eres libre. Sé tu mismo, como si estuvieras en casa, vamos.
Volví a sonreír, guiñando un ojo.
Esteve Sa-Michelle- Humano Clase Media
- Mensajes : 66
Fecha de inscripción : 10/12/2013
Re: When the Smoke is Going Down ~~ Kurt
Se me puso la piel de gallina al quitarme la camisa, me dijo que me acercase nuevamente a la ventana, que me fumase un cigarrillo…esa no era una mala ideal, me ayudaría a relajarme- Cogí mi paquete de tabaco recién comprado y me asome a la ventana nuevamente, saque un trozo de papel de arroz, lo llene con tabaco y le hice una forma perfectamente cilíndrica. Rasgue una cerilla en la pared y me encendí el cigarrillo, sin duda ese pequeño momento me ayudo a sentirme más cómodo.
Miré de reojo a Esteve, tenía el ceño ligeramente fruncido y sus manos preparaban hábilmente unas mezclas de colores. Podía oír cada vez que Estive rasgaba el lienzo con pintura. El cigarrillo no me duró mucho, cuando lo terminé tiré la colilla por la ventana y la cerré. Me puse una mano sobre el pecho y fruncí el ceño ligeramente, había sentido un pinchazo en el pezón izquierdo, los tenía duros y me dolían por el frío.
Me aleje de la ventana a ver si encontraba calidez cerca del sofá. Él me sugirió la cama pero no estaba seguro de si eso fuese buena idea…una cama es un lugar muy intimo. Así que me dirigí al sofá que estaba más cerca de él. Me quede de pie unos segundos observándole, no me había dado cuenta en todo ese rato de como trabajaba. Me miraba concentrado y volvía al lienzo, su camisa se había manchado con la mezcla de colores, al igual que su rostro y sus labios, inclusive sus cabellos claros tenían notas de pintura.
Fue extraño, pero verle así me hacía sentir y pensar en muchas cosas. Admiración, respeto, envidia (sana), y la más extraña de todas…deseo. Ya había dicho que Esteve era mi tipo, pero que no creía que acabase habiendo algo entre los dos, no lo pensaba ni lo deseaba hasta ese momento. No sabía muy bien a qué se debía, quizá a la forma en la que me miraba y en cómo me hacía sentir. No era una mirada normal, era como si me atravesase y descubriese lo que había debajo de la superficie.
Me acaricie el estomago apartando un poco la mirada y me abrí un par de botones del pantalón, me recosté en el sofá, apoyando la espalda ligeramente en el respaldo, en una postura lo más cómoda posible, le miré unos segundos y después desvié la mirada hacia el resto de la habitación. No tenía muchas cosas, lo único que abundaba eran los tarros de pigmentos, las telas blancas para hacer lienzos y prendas de ropa, en su mayoría manchadas de pintura.
-¿Cuándo empezaste a pintar?
Miré de reojo a Esteve, tenía el ceño ligeramente fruncido y sus manos preparaban hábilmente unas mezclas de colores. Podía oír cada vez que Estive rasgaba el lienzo con pintura. El cigarrillo no me duró mucho, cuando lo terminé tiré la colilla por la ventana y la cerré. Me puse una mano sobre el pecho y fruncí el ceño ligeramente, había sentido un pinchazo en el pezón izquierdo, los tenía duros y me dolían por el frío.
Me aleje de la ventana a ver si encontraba calidez cerca del sofá. Él me sugirió la cama pero no estaba seguro de si eso fuese buena idea…una cama es un lugar muy intimo. Así que me dirigí al sofá que estaba más cerca de él. Me quede de pie unos segundos observándole, no me había dado cuenta en todo ese rato de como trabajaba. Me miraba concentrado y volvía al lienzo, su camisa se había manchado con la mezcla de colores, al igual que su rostro y sus labios, inclusive sus cabellos claros tenían notas de pintura.
Fue extraño, pero verle así me hacía sentir y pensar en muchas cosas. Admiración, respeto, envidia (sana), y la más extraña de todas…deseo. Ya había dicho que Esteve era mi tipo, pero que no creía que acabase habiendo algo entre los dos, no lo pensaba ni lo deseaba hasta ese momento. No sabía muy bien a qué se debía, quizá a la forma en la que me miraba y en cómo me hacía sentir. No era una mirada normal, era como si me atravesase y descubriese lo que había debajo de la superficie.
Me acaricie el estomago apartando un poco la mirada y me abrí un par de botones del pantalón, me recosté en el sofá, apoyando la espalda ligeramente en el respaldo, en una postura lo más cómoda posible, le miré unos segundos y después desvié la mirada hacia el resto de la habitación. No tenía muchas cosas, lo único que abundaba eran los tarros de pigmentos, las telas blancas para hacer lienzos y prendas de ropa, en su mayoría manchadas de pintura.
-¿Cuándo empezaste a pintar?
Kurt Callahan- Humano Clase Baja
- Mensajes : 194
Fecha de inscripción : 11/10/2013
Localización : París
DATOS DEL PERSONAJE
Poderes/Habilidades:
Datos de interés:
Re: When the Smoke is Going Down ~~ Kurt
Kurt fue haciendo muy bien su parte. Todo lo que le había indicado que hiciera, lo realizaba con tal naturalidad, que no me costaba nada de trabajo garabatear por aquí por allá, algún trazo que me resultara de lo más indicado. Estaba inspirado, tanto, que si me proponía hacer un par de cuadros más, lo realizaría sin dificultades. Además esa manera de caminar, de moverse, incluso de fumar, era muy excitante para mi lívido. La verdad sea dicha de paso, es que sentía que la garganta se me cerraba ¿o hacia mucho calor?
El acabose fue cuando se abrió ese par de botones y tomó asiento en el diván. Entonces dejé de dibujar y eché rienda a mi imaginación. Todo aquello que se iba formando en mi imaginación, no tenía pies ni cabeza ¿pero qué más daba? Dejé a un lado el lienzo y me coloqué delante de él, observandolo fijamente. Sin mayor preámbulo, alcé mi mano y enredé mis dedos en su cabello, mismos que estaban cubiertos de pintura de varias texturas y tonalidades.
Si cabello era suave. Esperaba no se fuera a molestar por tomarme aquel atrevimiento, pero es que ¡necesitaba tocarlo! Desde hacia largo rato, en el restaurante, le había echado "el ojo" pues se me hacía un tipo bastante interesante. Tocar, era vital en mi trabajo, pero tocar a aquel que yacía en mi sofá, era otra cosa. En el ambiente flotaba una especie de magnetismo, que no podía descifrar. ¿Sería acaso que me encontraba excitado?
- Rubio, demasiado rubio... Suave y delicado. - dije casi sin despegar los labios. Era como si me lo estuviera diciendo a mi mismo, y Kurt fuera un muñeco sin vida, inerte. - Cabello de ángel, delgado...- soplé sobre un mechón que había estado maniobrando, observando su consistencia.
El acabose fue cuando se abrió ese par de botones y tomó asiento en el diván. Entonces dejé de dibujar y eché rienda a mi imaginación. Todo aquello que se iba formando en mi imaginación, no tenía pies ni cabeza ¿pero qué más daba? Dejé a un lado el lienzo y me coloqué delante de él, observandolo fijamente. Sin mayor preámbulo, alcé mi mano y enredé mis dedos en su cabello, mismos que estaban cubiertos de pintura de varias texturas y tonalidades.
Si cabello era suave. Esperaba no se fuera a molestar por tomarme aquel atrevimiento, pero es que ¡necesitaba tocarlo! Desde hacia largo rato, en el restaurante, le había echado "el ojo" pues se me hacía un tipo bastante interesante. Tocar, era vital en mi trabajo, pero tocar a aquel que yacía en mi sofá, era otra cosa. En el ambiente flotaba una especie de magnetismo, que no podía descifrar. ¿Sería acaso que me encontraba excitado?
- Rubio, demasiado rubio... Suave y delicado. - dije casi sin despegar los labios. Era como si me lo estuviera diciendo a mi mismo, y Kurt fuera un muñeco sin vida, inerte. - Cabello de ángel, delgado...- soplé sobre un mechón que había estado maniobrando, observando su consistencia.
Esteve Sa-Michelle- Humano Clase Media
- Mensajes : 66
Fecha de inscripción : 10/12/2013
Re: When the Smoke is Going Down ~~ Kurt
No obtuve respuesta a mi pregunta, pero tampoco me importó mucho, Esteve estaba bastante concentrado y quizá no me hubiese oído del todo. En un momento dado dejo los pinceles y se puso en pie, eso me extraño un poco, quizá quería que cambiase de postura o algo así que me senté en el sofá –quieres que…-no terminé la frase, el se acerco hasta mi y empezó a mirarme y a acariciar mi cabello, en un primer momento sentí un impulso de apartarme pero sus dedos surcaban mis cabellos con suavidad y eso me daba cierto placer. Me gustaba mucho que me tocasen el cabello.
Empezó a murmurar algunas frases que no fui capaz de entender del todo, parecía ido, como en su propio mundo, me miraba pero no sentía que me estuviese prestando verdadera atención, era como si me mirase en otro “plano” puede sonar un poco raro pero no era descabellado pensar que Esteve se encontrase en una especie de trance, era muy común entre los pintores…
Sin embargo, cuando hablo de la suavidad de mi cabello empecé a sentir algo distinto en sus caricias…por alguna razón mi piel se erizo y noté que me deseaba como yo a él, que empezaba a verme de la misma forma en la que yo le había estado observando minutos antes.
Deje una de mis piernas sobre el soba, doblada, y la otra en el suelo elevándome hasta llegar a su altura, teníamos casi la misma altura. Puede que ese momento fuese en el que tuvimos más conexión que en toda la noche. Nos miramos a los ojos y yo quise hablar su mismo idioma. Pase mis manos por sus cabellos, los tenía algo pegados por la pintura en algunas zonas, sobre todo las de delante, por la zona de su nuca estaba suaves –Castaño…y suave-sonreí –aunque bueno…en realidad no es solo castaño-empecé a tocar más-está verde, azul…amarillo-devolví la mirada a sus ojos y después observe su cuerpo, baje las manos por su torso siguiendo el recorrido con la mirada-fuerte –me detuve en su cinturón , hasta aquel momento no me había apartado, no sabía si a él le gustaban los hombres pero si no me había echado era porque no le molestaba…
Con todo aquello me invadieron unas ganas de besarle prácticamente incontenibles, mire sus labios, eran finos y tenían un ligero color rojizo, se veían realmente apetecibles. Mis manos volvieron a su cabello, lo estruje suavemente y le bese sin poder resistir las ganas. Era una sensación extraña de química y deseo.
Empezó a murmurar algunas frases que no fui capaz de entender del todo, parecía ido, como en su propio mundo, me miraba pero no sentía que me estuviese prestando verdadera atención, era como si me mirase en otro “plano” puede sonar un poco raro pero no era descabellado pensar que Esteve se encontrase en una especie de trance, era muy común entre los pintores…
Sin embargo, cuando hablo de la suavidad de mi cabello empecé a sentir algo distinto en sus caricias…por alguna razón mi piel se erizo y noté que me deseaba como yo a él, que empezaba a verme de la misma forma en la que yo le había estado observando minutos antes.
Deje una de mis piernas sobre el soba, doblada, y la otra en el suelo elevándome hasta llegar a su altura, teníamos casi la misma altura. Puede que ese momento fuese en el que tuvimos más conexión que en toda la noche. Nos miramos a los ojos y yo quise hablar su mismo idioma. Pase mis manos por sus cabellos, los tenía algo pegados por la pintura en algunas zonas, sobre todo las de delante, por la zona de su nuca estaba suaves –Castaño…y suave-sonreí –aunque bueno…en realidad no es solo castaño-empecé a tocar más-está verde, azul…amarillo-devolví la mirada a sus ojos y después observe su cuerpo, baje las manos por su torso siguiendo el recorrido con la mirada-fuerte –me detuve en su cinturón , hasta aquel momento no me había apartado, no sabía si a él le gustaban los hombres pero si no me había echado era porque no le molestaba…
Con todo aquello me invadieron unas ganas de besarle prácticamente incontenibles, mire sus labios, eran finos y tenían un ligero color rojizo, se veían realmente apetecibles. Mis manos volvieron a su cabello, lo estruje suavemente y le bese sin poder resistir las ganas. Era una sensación extraña de química y deseo.
Kurt Callahan- Humano Clase Baja
- Mensajes : 194
Fecha de inscripción : 11/10/2013
Localización : París
DATOS DEL PERSONAJE
Poderes/Habilidades:
Datos de interés:
Re: When the Smoke is Going Down ~~ Kurt
El me correspondió. Ese fue el principio de una noche muy larga entre las sabanas de su cama hasta quedar agotados.
Cuando me desperté por la mañana el cuadro estaba terminado con una nota dedicatoria, había un poco de café en la mesa, el cual agradecí. Me vestí, cogí el cuadro y baje por las escaleras hacia la tienda de muñecas. El estaba detrás del mostrador, me miro y sonrió. Espere a que el cliente que atendía se marchase y después nos despedimos.
No fue una despedida muy larga, solo unos besos y la promesa de volver a vernos aunque yo aun sentía cosas por Joshua…de todas formas nunca volví a verle. Se desvaneció como un sueño demasiado real para pertenecer a otra realidad pero lo bastante efímero como para dudar de su existencia.
Semanas después, antes de mi viaje a Italia pasé para despedirme de él y pedirme que cuidase de mi cuadro hasta mi retorno pero ya no estaba. Ni él ni la tienda de muñecas. Pregunté a Essi por él pero tampoco le había visto ¿en qué otro lugar podía encontrarle? Al fin y al cabo no sabía nada de él. Lo único que hacia real aquella noche era ese retrato mío, medio recostado en un diván, con un libro en la mano a punto de escurrirse y la mirada fija hacia quien me retrataba capturando todos esos sentimientos que ambos sentimos aquella noche.
Cuando me desperté por la mañana el cuadro estaba terminado con una nota dedicatoria, había un poco de café en la mesa, el cual agradecí. Me vestí, cogí el cuadro y baje por las escaleras hacia la tienda de muñecas. El estaba detrás del mostrador, me miro y sonrió. Espere a que el cliente que atendía se marchase y después nos despedimos.
No fue una despedida muy larga, solo unos besos y la promesa de volver a vernos aunque yo aun sentía cosas por Joshua…de todas formas nunca volví a verle. Se desvaneció como un sueño demasiado real para pertenecer a otra realidad pero lo bastante efímero como para dudar de su existencia.
Semanas después, antes de mi viaje a Italia pasé para despedirme de él y pedirme que cuidase de mi cuadro hasta mi retorno pero ya no estaba. Ni él ni la tienda de muñecas. Pregunté a Essi por él pero tampoco le había visto ¿en qué otro lugar podía encontrarle? Al fin y al cabo no sabía nada de él. Lo único que hacia real aquella noche era ese retrato mío, medio recostado en un diván, con un libro en la mano a punto de escurrirse y la mirada fija hacia quien me retrataba capturando todos esos sentimientos que ambos sentimos aquella noche.
Kurt Callahan- Humano Clase Baja
- Mensajes : 194
Fecha de inscripción : 11/10/2013
Localización : París
DATOS DEL PERSONAJE
Poderes/Habilidades:
Datos de interés:
Página 2 de 2. • 1, 2
Temas similares
» Smoke and Mirrors · Libre ·
» Smoke city [Libre]
» Crimson smoke · Libre ·
» Black Smoke [Privado]
» Nicotine eye´s Tobacco lip´s and a Smoke soul... // Relaciones
» Smoke city [Libre]
» Crimson smoke · Libre ·
» Black Smoke [Privado]
» Nicotine eye´s Tobacco lip´s and a Smoke soul... // Relaciones
Página 2 de 2.
Permisos de este foro:
No puedes responder a temas en este foro.
Miér Sep 18, 2024 9:16 am por Afiliaciones
» REACTIVACIÓN DE PERSONAJES
Mar Jul 30, 2024 4:58 am por Frederick Truffaut
» AVISO #49: SITUACIÓN ACTUAL DE VICTORIAN VAMPIRES
Miér Jul 24, 2024 2:54 pm por Nigel Quartermane
» Ah, mi vieja amiga la autodestrucción [Búsqueda activa]
Jue Jul 18, 2024 4:42 am por León Salazar
» Vampirto ¿estás ahí? // Sokolović Rosenthal (priv)
Miér Jul 10, 2024 1:09 pm por Jagger B. De Boer
» l'enlèvement de perséphone ─ n.
Sáb Jul 06, 2024 11:12 pm por Vivianne Delacour
» orphée et eurydice ― j.
Jue Jul 04, 2024 10:55 pm por Vivianne Delacour
» Le Château des Rêves Noirs [Privado]
Jue Jul 04, 2024 10:42 pm por Willem Fokke
» labyrinth ─ chronologies.
Sáb Jun 22, 2024 10:04 pm por Vivianne Delacour