Una pastelera para llevar | Melinda

por **Bard Blase** Miér Ene 22, 2014 3:40 am

Se había ido, intente agarrarla pero cerro la puerta antes que la alcanzara, afuera ya no podía hacer nada , era una bruja y no debí confiarme, de alguna manera mi poder no surtió el efecto que esperaba, pudo evadirlo aunque se que no del todo, no se muy bien que paso y debería investigar mas. Miro a mi alrededor y el despacho estaba hecho un desastre, aun sentía raro mi cuerpo pero debía salir lo mas rápido posible, no era seguro permanecer mas tiempo mucho menos sabiendo que me escabullí en esta fiesta, si algún me encuentran aquí saldré a patadas de aquí, si no es que me meten en la cárcel.

Aun medio mareado salí del despacho cerrando la puerta y tratando de recuperar la compostura, no podía darme el lujo de que me atraparan. Cuando ya estaba rumbo a la salida recordé algo, la pastelera de la fiesta, aproveche para preguntarle a una de las sirvientas y luego de una corta pero agradable charla esta me dijo la dirección de donde podría encontrar la pastelera Melinda, tal vez huyo pero dejo un rastro de postres tras de si, note luego unas cuantas miradas hacia mi, era momento de emprender la huida también, aunque la mejor manera de irse es creando una distracción, uso mi poder para hacer que uno de los embaces con la bebida caiga y se rompa haciendo un buen estruendo, con esto conseguí salir sin que me descubrieran o al menos eso creo.

Después de relajarme y encontrar donde pasar la noche descanse un poco, pero todo lo sucedido se mantenía en mi mente, su voz, su cuerpo, su espíritu, y esos besos tan cálidos, acaricio mis labios recordando y al final termino cayendo rendido en mis sueños, sueños donde disfruto de la compañía de la dama los besos, las caricias, la cercanía y sus ojos, pero al final soñé que las hormigas comenzaron a caminar en mi cuerpo y me iban envolviendo, observaba en sus ojos como ella las manejaba, al final me desperté y me di cuenta que era de mañana.

Deje el día pasar con tranquilidad ya que no sabia cuando trabajaba ella, aproveche para buscar algo de información, de donde era el lugar y luego volver a casa. Al siguiente día fui, a horas de la tarde que es la hora donde me comentaron que estaría, estaba ansioso, podría verla en el día, ademas de que podría conocer un poco mas de ella y de lo que hace, cualquier cosa que supiera de ella me ayudaría. Abro la puerta y entro para luego tocar la madera -Toc Toc- le dedico una gran sonrisa a la chica -¿Es aquí donde trabaja la hermosa pastelera Melinda?- mire a la chica esperando su respuesta.

por **Melinda Stelle** Miér Ene 22, 2014 5:23 pm

El café se calentaba sobre las ascuas del fuego de la cocina impregnando la casa con su aroma, inundandola. Melinda estaba en el piso de arriba dándose los últimos retoques para salir a trabajar. Se decantó por dejar de intentar domar sus rizos y dejar que estos cayesen sobre sus hombros recogiéndose únicamente los laterales con un broche de oro."Estas guapa Melinda,baja a desayunar".Se sonrojo por el cumplido que se había hecho a si misma y devolvió una sonrisa al espejo para después precipitarse escaleras abajo.

Se sirvió una taza de casa y situándose en una silla cercana a al ventana que daba al patio trasero se entretuvo a ver a los pájaros revolotear en los árboles, el sol jugar con las flores y las nubes danzar sobre el cielo casi despejado. Era su momento de paz y le gustaba saborearlo lentamente como aquella taza de café.Se levanto al terminarla y después de abrigarse salió de la casa para dirigirse a la pastelería.

Una sonrisa acompañaba a Melinda en su rostro, hacia poco que había ocurrido el incidente en el baile pero se sentía mucho mejor.¿Por qué? Jenna estaba a su lado y la ayudaría en lo que fuese factible y Volk la protegería hasta que fuese autosuficiente, esos eran motivos para sentirse segura como nunca lo había sentido. Ya no estaba sola en este mundo e iba a tomar el camino que siendo una niña dejo atrás.

Llegó a la pastelería a la hora de siempre y se dispuso hacer las pequeñas tareas de la mañana como limpiar el suelo o los cristales del escaparate. A veces pagaba unas monedas a un niño de 10 años llamado Kevin que al menos con ese dinero podía comer aquel día, pero ese no había venido y se imagino que estaría en el mercado robando algo para sus padres."Pobre infante" se lamentó pero ella no podía cambiar las clases sociales, tenía suerte de que al menos su negoció le reportaba el dinero suficiente para vivir bien. Y sabiendo que dentro de poco emprendería un largo viaje tendría que ahorrar mas. Y aún con toda la magia posible no podría solucionar esa diferencias entre la gente."Dale fortuna al hombre y la avaricia corromperá su alma."

Hizo unos pasteles nuevos y después de disponerlos en una bandeja nueva los fue a llevar al escaparate para que los transeúntes pudiesen deleitarse. Pero en el camino la puerta sea abrió y Melinda preparó una buena sonrisa que se congelo al ver al hombre que entraba. Era el brujo de la fiesta, ¿cómo la había encontrado? La bandeja se le cayó de las manos ante la sorpresa y la palidez de su rostro se hizo mas patente aún. Su corazón dio un vuelco dividido entre el asco y la atracción de la mitad hechizada de su ser."Estas perdida" dijeron al unísono las dos Melinda aunque cada una con un significado diferente.

por **Bard Blase** Miér Ene 22, 2014 6:04 pm

Este dia decidí vestirme con algo menos casual, andar vestido siempre con ropa de caballero es molesto, ademas es mucho mas cómodo vestir algo mas común. El camino estaba algo transitado, era inicio de semana así que como siempre, comienza el ajetreo, había un poco de calor pero el sol no estaba tan exigente, de igual forma quería estar dentro de la pastelería.

Aprovecho para ver a unos cuantos de los postres que hacia mi querida bruja pastelera y todos parecían deliciosos, me provocaba comerlos pero no había venido a comer, tenia asuntos mas importantes con la chica y era el momento de hablarlos. Inmediatamente después de abrir la puerta mi mirada se cruzo con la de ella, estaba hay y pude ver como esbozaba una sonrisa para mi, pero la impresión fue mucho mas de lo que esperaba, recordé entonces que el efecto de mi poder estaba activo, pero por alguna extraña razón, no funcionaba.

Estaba seguro que era infalible, ¿me habría equivocado en algo?, no lo creo, manipule la energía correctamente pero de igual forma no funcionaba, ella debía haberse rendido a mis pies pero por el contrario huyo y no conforme con eso uso sus poderes contra mi, no solo tengo un poder que es inútil contra ella si no que ella tiene un poder que es efectivo contra mi, estoy en desventaja, esta chica es poderosa. La verdad no tiene sentido usar un poder inútil, me siento estafado con este poder, lo mejor sera no usarlo mas, al final ella usara los suyos y me dejara vulnerable, yo por el contrario si las cosas siguen igual solo conseguiré un par de besos mas que no son malos pero sigue sin valer la pena, usare otra estrategia a ver si funciona, desactivo el encandilamiento.

la chica tenia las manos ocupadas y al momento de verme perdió el control dejando caer la bandeja con lo que llevaba en las manos, intente acercarme para evitar su perdida -Cuidado!- exclame pero era tarde, estábamos algo distantes y no pude alcanzar a ayudarla, solo alcance a acercarme mas a ella -Oh no- dije entristecido viendo el resultado y luego levante mi mirada para cursarla con la de ella -Pero que torpe eres- le regale una sonrisa tratando de animarla -Vas a acabar con el negocio así- me quede observando por un momento entonces y pude ver lo hermosa que estaba, arreglada, estaba algo espolvoreada con harina pero es normal, pero no cambiaba lo linda que se veía, arreglada y mas hermosa de lo que recordaba, -Pero siendo tan excelente pastelera seguro todos querrán probar lo que tus manos pueden hacer- dije mas suave mirando directamente sus ojos y humedecí sin poder evitarlo un poco mis labios.

por **Melinda Stelle** Jue Ene 23, 2014 7:00 am

Intento pensar rápido pero cierta parte de ella se alegró de verle de nuevo."¡Maldito conjuro!" comentó para si misma. Intento ser fuerte y resistirse a la voluntad de la Melinda humana y para poder hacer frente a esa situación caminó hasta detrás del mostrador, solo era una barra separadora entre él y ella inútil en cualquier situación, fácilmente saltable, incapaz de separar los deseos que empezaba a sentir dentro de ella. movió sus manos con nerviosismo intentando hacer algo pero desistió al no poder poner orden en ellas.

De pronto todo cambió, sintió liberación, sintió paz. Algo había cambiado en el ambiente y de pronto una voz en su cabeza le dijo lo que intuía."Soy libre". había desecho el hechizo.¿A eso había venido?¿Por qué lo hacía? Alzó su mirada y extrañada sostuvo la suya relajada, ya no tenía nada que temer, ya no estaba bajo sus ordenes ya no sería una muñeca entre sus brazos."Aún así ten cuidado Melinda, quizás este planeando otra cosa".La parte bruja tenía razón, quizás ese era un paso hacia otra treta del señor.

Obvió sus palabras y miró los pasteles en el suelo, los recogería luego no quería acercarse demasiado, no se fiaba. Ojala Volk estaría allí, con su daga hubiera resuelto cualquier cosa. Él era así y por eso le había elegido como entrenador. Voluntad de hierro, fidelidad de acero. Tenía que articular palabra, no podía estar más tiempo ahí parada. Quizás si obviase todo lo que él le recordaba, quizás podría pasar todo por alto, venderle algo y que se fuese.

-"¿Desea alguna cosa, señor?- un hilo de voz salió de su boca, tímido y casi imperceptible.Él hombre que tenía delante podía ser capaz de cualquier cosa, pero ella debía demostrar cierta entereza, que supiese que también podría hacer de las suyas, ya se lo había demostrado una vez.

por **Bard Blase** Jue Ene 23, 2014 6:25 pm

Me encontraba confundido por lo sucedido, sigo sin entender como había logrado evadir mi poder, era una bruja poderosa, con mas razón debía ganarme su favor, necesito toda la ayuda que pueda necesitar, también es muy hermosa, la mejor forma de tener su confianza es obteniendo su afecto, su amor, ademas asi podre disfrutar de su compañía y ademas lograría degustar toda la intimidad que pueda, pero no ha funcionado mi poder. Tengo que hacer que ella se interese en mi, así tendré control sobre sus emociones y estará dispuesta a hacer lo que le pida, necesito la ayuda de una bruja poderosa si pienso construir el portal, ya he dejado pasar el tiempo y no he conseguido nada, ya tengo el indicio de lo que necesito pero debo asegurarme de que ella valdrá la pena, ademas, estoy seguro que sera una buena amante.

Pensando bien las cosas me doy cuenta que desde el principio pude haber usado otro de mis poderes para contrarrestar los suyos, seguramente ella logro darse cuenta que estaba bajo el hechizo porque no me dedique a esconder el aura arcana, deje pasar la oportunidad, que tonto he sido, pero no mas, debo cambiar la estrategia, ya es momento de poner las cosas serias y actuar como es debido, utilizo mi poder para hacer que ella se sienta atraída por mi, tan sutil que no podrá saber que es y por si lo sabe usare mi poder de limpieza para cubrir mis huella, ahora no podrá saber si ha sido embrujada o estuvo solo bajo efectos del alcohol o si le gusto, y hablando de alcohol, esto me ha dado una idea.

-Solo he venido a disculparme- respondí a las palabras de la chica, si quería ganarme su atención debía comenzar con algo -Lo que paso la otra noche no debió suceder- continué bajando un poco la mirada -Creo que me deje llevar por la bebida-comente moviéndome algo apenado -Aunque tal ves haya sido por culpa de unos postres que comí- postres creados por una bruja, esta información podría serme de ayuda, ella no querrá que sepan la verdad -Eran embrujadoramente deliciosos- la mire con una sonrisa -Tal vez tenían un componente especial que me hizo perder el control de mi mismo- había que decirle un poco sin dejar que ella se de cuenta -Pero eso nunca lo sabre... solo quiero ofrecer mis disculpas... si hay algo que pudiera hacer para enmendar mi comportamiento lo haría con gusto- siempre y cuando saque un beneficio de esto -Solo pidamelo y lo haré- comente para luego dar un paso atrás -solo era eso- vuelvo mirar al suelo triste -Dudo que de verdad quiera charlar con un tipo como yo- niego con la cabeza al piso -Que se deja llevar sin motivo- miro arriba y levanto la mano abriendo la boca para decir algo pero no digo nada, guardo esas palabras para ver si ella se interesa en escucharlas, titubeo un momento pero al final bajo la mano y me quedo en silencio, retrocedo un paso -Bueno, sera mejor que me valla ya- observo la torta en el suelo, -Imagino que mi presencia no es grata- me doy media vuelta y abro la puerta -ha sido grato volver a verle- sonrió tímido, -Nuevamente disculpe lo ocurrido- hago una pequeña reverencia -Adiós-.

por Contenido patrocinado

Una pastelera para llevar | Melinda

Una pastelera para llevar | Melinda

Re: Una pastelera para llevar | Melinda

Re: Una pastelera para llevar | Melinda

Re: Una pastelera para llevar | Melinda

Re: Una pastelera para llevar | Melinda

Re: Una pastelera para llevar | Melinda