Fuego (Libre)

por Invitado Jue Ago 26, 2010 3:36 pm

Teo daba pasos abstraído por las calles de París. Dedicando una mirada a cada persona, indagando en su supuesta personalidad y sonriendo cada vez que veía una señora de edad con un vestido gracioso. El licántropo se caracterizaba por ser observador, ya que siempre iba por ahí mirando cada detalle de la arquitectura de París. Adoraba el Arte como nada en este mundo, así tambien a la sociedad. La razón de su titulación como sociólogo. Se sentía muy interesado por el comportamiento social, y desde niño desarrolló inclinación hacia dicha área.

Su cabeza se encontraba llena de detalles, rostros, noches y días trotados por él a sus cortos 25 años, fue por eso que no notó donde se dirigían sus piernas y al notarlo se encontró en un fatídico callejón. Su entorno se mostró obscuro. - Mierda, qué estúpido puedo llegar a ser. - Sonrió ante su tontería. Sin embargo, su sonrisa no era de miedo ni mucho menos de nerviosismo. Había aprendido varias cosas lejos de su hogar, y una de esas, era no temer jamás sino las cosas pueden llegar a complicarse lo suficientemente como para no volver a respirar.

Continuó su camino, sacándo de su bolsillo un cigarro armado por el mismo, ya que no confiaba en la higienización de los vendedores. Se plantó el vicio en sus labios, loco por fumar. Había olvidado la manía de hacerlo, no obstante, siempre se acompañaba de un poco de tabaco. Volvió a meter la mano a su bolsillo para obtener el fuego, pero no lo encontró. - Rayos - susurró, buscando a su rededor en busca de una llama...

por **Sophia D'Luca** Jue Ago 26, 2010 4:05 pm

La oscura noche se había hecho presente por las calles de París y a estas horas el peligro era un grito a voces, si en cada esquina uno encontraba o a un... vampiro sediento o a un brujo negro o a un Lycan. Un cambia forma era difícil de encontrar ya que por su condición no se mostraban de igual forma que todos los demás, podíamos transformarnos a cualquier hora, pero solo por un lapso de tiempo, el dia era lo mejor y las noches el cuidado y los instintos estaban mejor que nunca.

Las calles desoladas hacían que quisiese llegar lo antes posible a mi refugio, pero uno nunca sabia lo que tenia el destino preparado, mientras caminaba un gato negro, de pies a cabeza se cruzo frente mio, demonios pensé y que mejor que actuar como uno sabia lo que le gustaban a los gatos, lo llame y como fue de esperarse se acerco a mi con curiosidad se dio el tiempo de olerme y acerco su cara a mis manos, el me entendía al igual que yo a el - Tan solito que estas minino - dije suavemente mientras acariciaba su lomo pero algo lo había advertido a ambos sentimos un ruido en el callejón, ambos eramos igual de curiosos, el gato salio corriendo perdiéndose en lo negro del callejón...

Con demasiada cautela camine paso a paso lentamente, mis ojos estaban acostumbrados a la oscuridad , era un gran don tener ojos de gatos... al menos me servia por si tendría que escapar. Escuche una voz y todo en mi cuerpo se erizo... veía a un hombre su olor a lobo penetro en mi nariz hice un gesto de desagrado y sigue caminando precavidamente - Disculpe Monseur... le pasa algo - dije suavemente hasta casi arrepintiéndome de haber hablado.

por Invitado Jue Ago 26, 2010 4:12 pm

Off: Estaba escribiendo y cuando pongo enviar me sale que Sophia ya posteó xD asi que si no les importa, modifiqué un poco lo escrito para que estemos los 3 =D! xD
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Un día cualquiera, una noche cualquiera, daría lo mismo si era El o Ella quien se posaba en el cielo ahora. Era todo lo mismo, tratando comercios, exportaciones e importaciones, lo mismo, de siempre. Era siempre necesario intentar sacarme de la rutina, pero poco fácil era hacer eso para alguien como yo. Normalmente no había mucho nuevo bajo el sol para mi, son unos cuantos siglos de vida después de todo.
Como siempre decidía caminar solo para pasar el tiempo después de hacer todo tipo de trámites o cosas por el estilo, buscaba matar el tiempo, como siempre, pero el Otoño no lo permitía como uno esperaba, una época relajada, donde las hojas se secan y caían, donde el tiempo pasaba lento y tranquilo. Estas últimas fechas no estaban a mi favor, claramente no.

Movía mi bastón de un lado a otro mientras caminaba, jugando, mirando a todos lados, viendo la gente pasar, sus hipócritas caras y sonrisas saludándome, no por que me conocieran, sino por vestir de prendas de alta alcurnia, típico de eso, después de todo esperarían un favor luego solo por que me saludan y son cordiales conmigo en la calle. Aah, si, el humano, su actitud tan farsante, pero aun así, una mentalidad tan interesante de estudiar y comprender, y efectivamente, solo por el gusto de ser lo que ellos no son y tergiversar todas sus ideas, aún que también cabe decir que estudiar a los inmortales también lo era, después de todo todos son seres distintos y graciosos a mi manera. Reí un poco por mi pensamiento.

Me detuve unos segundos al sentir el olor rondar de uno de mis "hermanos" algo poco común, no solía encontrar a los de mi tipo rondando, era más común verse con los Familiares, o bien Vampiros. Me dispuse a seguir el aroma, siendo guiado hasta un callejón que al parecer ni si quiera él estaba determinado a llegar. No lo seguí muy a fondo, era mejor mantener distancia, pero al menos estaba calmado. Lo vi encender un cigarrillo. Ahi comencé a caminar hacia él. -Eso te acorta la vida ¿sabes? - - Comencé diciendo tranquilamente y con gracia. -No es que vayas a vivir poco, claro, pero es mejor prevenir ¿no? ehehehehe- - Comenté con una sonrisa y me detuve a una distancia pertinente del joven, fue ahí cuando me percaté de la presencia de otra persona, no un Lycan, no un Vampiro, y no un Humano. Sonreí, otro cambiaformas se cruzaba en mi destino, una mujer esta vez. Me apoyé en mi bastón con una mano y le hice un saludo con mi sombrero. -Hola, que tal, ehehehe-.

por Invitado Jue Ago 26, 2010 4:35 pm

offf: No hay problema
me Parece perfecto xd

Encontró la chispa que necesitaba. Prendió su cigarrillo y aspiró lento, como si jamás lo hubiese hecho, claro, evitanto el carraspeo producido por su garganta. Terminó de expulsar el humo de su interior, su mente ya había a comenzado a indagar en recuerdos extraños cuando, del profundo color negro del callejón, distinguió dos aromas totalmente diferentes: Uno le parecía conocido, se trataba de otro Licántropo. El otro era especial, casi delicado y agresivo a la vez.

Su expresión no cambio en absoluto al sentir la voz de una mujer acercarse. La miró por un momento y sonrió con amabilidad, como habituaba hacer con las mujeres. - No se preocupe, señorita. Sólo perdí el sentido de percepción y no me dijé donde caminaba. - Sus palabras fueron lentas, tranquilas, casi dormidas. Se olvidó completamente del otro aroma, sin embargo, de inmediato lo sintió una vez más, como si le plantaran un genero con alcohol en la naríz.
Sintió una segunda voz, escuchó la afirmación de su igual y sonrió de lado. - Losé. Y es precisamente lo que quiero disminuir. - sonrió con la misma gracia que el último usó en su tono de voz - No estoy dispuesto a vivir tanto tiempo en un mismo mundo, ¿Y tu? - sonrió una vez más, llevandose el cigarrillo a la boca, dándole una larga aspiración. Se volvió a la muchacha y luego licántropo. - ¿No creen que es un poco peligroso caminar por aquí a estas horas? - No sabía la hora y tampoco quiso saberla, no obstante, la imaginó por la obscuridad de la Noche.

por **Sophia D'Luca** Jue Ago 26, 2010 5:07 pm

Off: a mi me parece genial, seguiremos un orden cierto???

El olor a tabaco, o mejor dicho a un cigarrillo penetro en mi nariz dejándome casi un poco sofocada, era algo toxico pero lo aceptaba, o al menos eso creía el olor a ese tipo de especie ya lo tenia casi grabado en mi memoria, di gracias de que no hubiera luna, por que de lo contrario ninguno estaría en ese lugar, y lo mas probable yo seria una presa fácil, aunque el mejor secreto es el que no se cuenta...

Para mi sorpresa o desgracia como fuera mejor, había otro de su misma especie, parecía tener clase, cuando lo mire note de inmediato que era de la alta sociedad sus ropas decían eso mas su palabras también, pero la gran pregunta era como habíamos llegado a este callejón donde quien sabe que cosas podrían ocurrir, oí el maullido lejano del gatito que anteriormente había acariciado, pero no apunte en lo que me advertía, yo lo tenia mas que claro. - Pensé que le había ocurrido algo - dije suspirando mientras me ponía entre aquellos dos caballeros escuchando las palabras de cada uno - Creo que cada uno sabe cuanto tiempo desea vivir - musite suavemente mientras mi vista pasaba de uno a otro.

- Este callejón como cualquier otro es peligroso, pero henos aquí, los tres, como si nos hubiésemos puesto de acuerdo - dije había una escasa luz en el lugar pero la suficiente para observar los rasgos faciales de cada uno, mi curiosidad era grande y cualquiera que conociera mi condición lo sabría, pero tenia que mantenerme al margen al menos por el momento, mi imaginación me traicionaba y en ese mismo momento lo único que mis instintos decían era que corriese y siguiera el consejo del gato negro. Pero era terca y no me iría a menos que se presentara algún peligro claro cosa que veia poco, muy poco probable.

por Invitado Jue Ago 26, 2010 7:44 pm

Off: pos si, se sigue el patrón con el que se comenzó, o sea Teo, Sophia, Sleid.
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Cuando vi a la cambia-formas, una joven bastante atractiva y de bellos rasgos faciales y un aroma bastante peculiar, fuera del aroma claro del de los Cambia-formas, el cual amerita que no la haya notado llegar anteriormente, el olor de esa especie aún no era muy conocida para mi, en mis dos siglos de vida, han sido pocos los que se han cruzado en mi camino. Pero claro, no tomaría acción vulgar frente a ella, incluso siendo de clase media, lo que normalmente un humano de clase alta despreciaría, pero esas actitudes no eran de mi normalidad.

Me volví al joven licántropo para escuchar su respuesta, la que en realidad me causó bastante gracia. No estar dispuesto a vivir tanto en el mismo mundo, bueno, era claro que el es joven. -¿Yo? Ehehehe, ya he vivido mucho como para poder responder esa pregunta...- Dije tranquilamente, dejando solo la idea al aire, pero sin afirmar tampoco cuantos años he vivido. Luego volví mi sonriente rostro hacia la joven cambia-formas escuchando su voz brotar continuando el tema. -Hay quienes tienen esa suerte, ehehehe, otros simplemente no pueden terminar la vida como desean...- Respondí a su afirmación, después de todo, muchos no podían vivir su vida como querían o terminarla como esperaban. Algo triste, pero real y recordándolo, yo habría terminado con unas vidas inconclusas.

Al menos yo me sentía bastante tranquilo, y podía ver que el amigo del cigarro también lo estaba, simplemente la joven cambia-formas, causaba algo de impresión en mi. La sentía algo preocupada, como si debiera correr, pero claro, a cualquiera le pasaría si estuviera entre dos lobos a solas en un callejón. -Peligroso, puede ser, pero dudo que para gente como nosotros eso incumba ¿no? Después de todo, al menos humanos no harán mucho, ehehehe- Contesté a la pregunta del Licántropo riéndome un poco, y claro, era cierto, el peligro ya era relativo para los seres sobre naturales, era solo cosa de encontrarse con lo menos esperado para decir que habría peligro. -Ahora claro, si esta noche se decide unir alguno que otro ser... uhm... Como decir, peligroso, ahi si podriamos decir que el lugar se vuelve... peor... ¿no? ehehe- Agregué finalmente, pero que importaba el peligro, así al menos mi aburrimiento cesaría de una vez por todas, pero la charla no estaba mal, hasta ahora se volvía relativamente agradable. - Ignorando todo eso... ¿Sus nombres son...?- Pregunté con curiosidad, ya que estabamos ahi, mal no estaría conocer a los reunidos.

por Invitado Jue Ago 26, 2010 9:07 pm

Su cigarrillo cada vez se consumía dentro de la obscuridad y sólo unas cuantas ventanas y faroles los abastecían con luz, aventurándolos a los tres en la más penetrante noche. Le pareció divertido y distinto a todas las noches como licántropo, tropezar con un ser igual a él, con su misma condición y sus mismos poderes. Por otro lado, el olor de la muchacha le resultaba atraíble y diferente a los demás, pero como muchas otras cosas, Teo lo dejó pasar. Se limitó a pensar en la idea de lo increíble que se notaba aquella escena, sin duda, cualquier humano que se topara con ellos pensaría que se trataba de una secta o algo parecido. Sonrió maliciosamente ante aquel ocurrimiento.

Teo advirtió la formalidad de aquel hombre. Seguramente se trataba de alguien de la clase alta, hombre distinguido y con educación. Bajó la mirada y notó que él sólo llevaba un traje común, un abrigo negro y zapatos normales. Recordó a su madre hablándole sobre lo importante que era la presentación y así lo había notado en Paris, puesto que en ésta ciudad llena de secretos, la gente de la clase alta vestía con elegancia y se preocupaba de cada detalle de su vestuario. Sin embargo, a Teo jamás le importó mucho como vestía. Sí, estaba de acuerdo en que la presentación valía al pena al momento de entrar en sociedad, pero no le parecía una necesidad de vida o muerte.

Notó a la chica, entre los licántropos y admiró su valentía. Nadie con dos dedos de frente lo habría hecho, ya que en aquellos tiempos, la idea de saber qué día habría luna llena, era una ocurrencia remota. Aunque a un licántropo el instinto se lo haría saber. - Si. Creo que la vida sería muy fácil si comenzaramos a ponernos de acuerdo con qué sufrir o con qué llorar. Y la vida Fácil, aburre. - sonrió ante sus acompañantes. Se detuvo en lo que decía el hombre, y se preguntó cuantos años tendría. Sin duda el sabía mucho más acerca de la vida de un hombre lobo, eso lo interesó por completo.

Continuó escuchando con atencióny luego de hacerlo lanzó el cigarillo la acabado al suelo y lo apagó con el zapato. - Oh si. Soy Teo, Teo Huston. Un placer es conocerlos a ambos. - Se presentó. - Y agregando algo a su comentario, señor. Creo que esta noche será tranquila - Le sonrió. - No creo que algún otro ser se aparesca, sabiendo que existen dos hombre lobos a su rededor. - Dejó de hablar, sin omitir comentarios ante la muchacha. Sabía que ella no era normal.

por **Sophia D'Luca** Jue Ago 26, 2010 11:17 pm

Ciertamente Ambos tenían razón en lo que hablaban, pero de algo estaba segura, el destino por así decirlo era un laberinto donde el mas apto y el mas fuerte saldría vivo, mis años en esta situación eran demasiado pero debía de agradecer al envejecimiento tardío que tenia, era bastante favorable al menos para una mujer que por ser mujer siempre nos preocupábamos por andar bellas y elegantes, mas siendo una gatita consentida, era bien meticulosa que todo se viera casi perfecto en mi desde mis cortos rizos hasta la punta de mi zapato, era sabido que las apariencias no lo eran todo, pero en esta sociedad tan pre-juiciosa había que tenerle cierto respeto. No era de clase alta, pero tampoco de baja me encontraba en el centro de esta sociedad donde ser mujer era mas difícil de lo que uno se podía imaginar. Mire a ambos caballeros con los que me encontraba reunida y ¿que hacíamos ahí? ¿como es que alguien con clase esta en este lugar? ¿que me había inducido a entrar en ese callejón?.

- El tiempo de vivir es ahora, de no haber sido así, ninguno estaría en este callejón - estaba mas tranquila, no había por que alarmarse, siempre habían opciones y ya había tomado una decisión quedarme en ese lugar que mejor compañía de dos caballeros, mas que una buena compañía podría decirse una buena protección, Vampiros rondaban por aquellas calles y siempre les había tenido cierto recelo hacia ellos. Pero no quería preocuparme en eso, la leve luz que desprendía de un farol se veía casi extinta ante nuestra presencia, cualquiera que nos viera pensaría que algo tramamos, que pensamientos los míos, divague - LA vida para un simple humano es demasiado monótona y al menos yo no podría soportar hacer día a día lo mismo - aclare, de cierta forma dejando en claro que no era un humano mas en esta ciudad, claro que no lo era... las apariencias engañas, pensé

El viento de otoño era mas suave que el de invierno y desordenaba levemente mis cortos rizos sonreí ante la presentación del joven que estaba a mi izquierda lindo nombre Teo, pensé para mi - Bueno yo soy Sophia D`Luca, también es un gusto conoceros - dije esbozando una amplia sonrisa, ya que Teo había aclarado lo que venia presintiendo, ambos eran licantropos, no hice reparo ante eso solo un gusto a satisfacción de que mis instintos seguían al cien por ciento - La noche sera como tenga que ser - dirigi mi mirada al otro licantropo - Y usted Monseur es...- si la curiosidad no se me quitaba por mas que lo intentara.

Otra duda apareció en mi curiosamente, ambos sabían que no era humana, mas alguno sabría lo que en realidad era?, esperaba de cierta forma que si, ya que a pesar de vivir casi en secreto, muy pocos sabían que los de mi especie existíamos, eramos algo así como muy meticulosos en darnos a conocer, claro estaba que las excepciones siempre había.

por Invitado Vie Ago 27, 2010 7:26 pm

Off: Teo, me siento ofendido, olvidaste mi sombrero y bastón! ò.o! xDDD
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Ya todos se veían mas tranquilos en esa noche, mas ahora que los nombres de cada uno era conocido, bueno, a excepción del mio. Hablaban con tranquilidad y esperaban un grato momento y por suerte lo estaba siendo, así que no había queja alguna. Pero fue ahi cuando la joven Sophía se adelantó a mis preferencias consultando mi nombre. Pensé durante unos segundos si darlo o no, sería divertido no hacerlo y dejarlos con la duda, después de todo ya la había plantado al insinuar mi antigua edad.

Tomé aire con tranquilidad y simplemente sonreí, que bah, para que ocultar el nombre, después de todo, era solo dar una pizca de confianza al momento. -Mi nombre es Sleid Solen, señorita.- Dije con amabilidad y calma, pero luego agregué -Y no es necesario que me llame por esos terminos, después de todo, los tres somos herederos de la sangre británica ¿me equivoco? ehehehe, no es necesario el formalismo francés... ehehehehe- Nunca me agradó usar los formalismos de este país, de hecho siempre trataba a la gente por Señor o Señorita, o bien Señora en su debido caso, pero Monseaur y todo lo demás, no era de mi gusto, tenía un poco de orgullo a mi tierra británica.

Di un par de vueltas a mi bastón hasta subirlo y tomarlo por la punta para apoyarlo por mi hombro y dar leves golpesitos con este. Sonreí con gracia y reí un poco para mi. -Y la noche, efectivamente, solo lleva su curso normal, curioso que nos reuniera acá, pero hasta ahora ah sido... Divertido, ehehehe- Comenté con calma y gracia. -¿No teme usted por su seguridad frente a dos lobos, señorita Sophia? Después de todo... Solemos ser un tanto impredecibles.- Consulté sonriendo tranquilamente. Quizás con una pizca de intención de asustarla, pero mas que nada era curiosidad. Volví la mirada a Teo, para ver como se tomaba la pregunta hecha a la acompañante. -Para su fortuna no hay Luna Llena hasta unas cuantas semanas más...- Dije mirando fijamente a Teo. Ya por su forma de vivir y actitud, además de su olor, podía notar que era aún un lobesno, joven y aun con falta de experiencia como lobo, aún incontrolable ante la tentación de la Luna. -Aaaah...- Suspiré profundamente y me estiré un poco. -Es una noche agradable... Una de las pocas cosas que me agrada del otoño..- Dije tranquilamente, como tomando ignorancia a las cosas dichas recientemente, como si hubiera sido nada más que un juego. Reí para mi y le ofrecí una sonrisa a ambos.

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