Ô La Sainte Dame. (Terminada)

por **Léonne Scarte DeCahaix** Sáb Nov 08, 2014 12:41 pm

Ô La Sainte Dame
~.†.~
DATOS BÁSICOS

Léonne Scarte DeCahaix

22 años en apariencia/ 2347 años (3 letargos)

Greco-Francesa (Madre Gala y padre Griego)

Bisexual

Vampira

Clase Alta

▲HABILIDADES/PODERES▲

→ Habilidades: Sigilo, sentidos aumentados, buenos reflejos, agilidad, flexibilidad, velocidad y fuerza sobrehumana.

→ Atributos: Colmillos afilados, uñas afiladas (en algunos casos), piel y cuerpo resistentes (aunque suave al tacto y a la vista), e inmortalidad.

Poderes innatos:

→ Sanación acelerada: Habilidad para sanar rápidamente heridas y contusiones no tan graves (esto no aplica al desmembramiento, si les arrancan un brazo, el brazo no volverá a crecer). El tiempo de recuperación varía según el personaje y la gravedad de la herida o lesión. Cuando se trata de balas de plata o fuego pueden morir si las heridas son muy graves.

→ Percepción del aura: Habilidad para ver las auras de otros seres, cuyos colores indican su humor, identidad y nivel de hostilidad, de este modo saben si están bajo amenaza. Este poder también les permite reconocer a otros vampiros e identificar a los licántropos gracias a su aura colorada y su característico olor.

Poderes elegidos:

→ Seducción: Esta habilidad hace que cualquier persona se sienta atraída ya sea físicamente o emocionalmente a la persona poseedora del poder. El vampiro seduce a los demás hasta lograr controlar las emociones de su adversario a su antojo. Funciona en cualquiera de los dos sexos. Este poder funciona únicamente como atracción.

→ Telepatía: Habilidad para sondear los pensamientos superficiales de cualquier sujeto cercano y escucharlos como escucharía hablar a esa persona. Con el tiempo suficiente, puede enterarse casi de cualquier cosa sobre el sujeto.

→ Ilusión: Capacidad para alterar la relativamente la realidad por medio de alguna ilusión, algo no real para confundir a las personas.

DESCRIPCIÓN PSICOLÓGICA

Ya hace varios años que no la he visto... Pero recuerdo aún su rostro, su morfología y su... manera de ver el mundo. Perdonadme, me cuesta un poco hablar de mi hija... Como lo he dicho antes, ha desaparecido hace varios años. No me atrevo a contarlos, ni en pensar en ello. Recuerdo perfectamente su cabello semi rizado que llegaba hasta su espalda. Nunca ha querido cortárselo, dice que le da suerte ; allá ella. Tenía una cara un poco fina con unas mejillas un poco rellenitas. Su piel era blanca como nieve pero con un ligero tono rosado, recuerdo que al tocarla, tenía la sensación de acariciar una nube. Sus ojos... una mezcla de azur y de verde jade, dejaban una impresión de serenidad aunque su mirada expresaba a veces indiferencia. Pero cuando la veo sonreír era como si toda la dulzura de este mundo se había reencarnado en ella.

Su cuerpo era igual que el de Afrodita, curvas finas, bien proporcionada y un pecho que hacía girar a cualquier hombre para contemplarla; su estatura superaba la media romana(un metro setenta y ocho). Era claro que tenía un físico de seductora pero ese tipo de actividad no le interesaba realmente.

Tal como la conozco, está muy atenta a su entorno, observa cada detalle, cada reacción o movimiento de una persona que está (o no) en su campo de visita; nada le escapa. Su intelecto es tan superior que se adapta a cualquier situación, resolviendo problemas, encontrando ideas y otras cosas. Desde pequeña siempre le intereso la búsqueda del saber, su padre quería que su hija fuera la mujer más culta de toda Atenas, y lo consiguió. Lo más importante de su personalidad es su inmensa determinación, cuando quiere conseguir algo lo consigue, por supuesto, eso no llega al rango de capricho. Léonne odia las cosas que no interesan, cuando habláis con ella tenéis que tener un buen tema de conversación sino será la primera en irse de la mesa.

Es una apasionada de las artes, su instrumento preferido es el arpa, este objeto no tiene ningún secreto para ella; es probablemente la mejor arpista de Atenas. Mi hija posee también un carácter muy único, a primera vista podemos ver a alguien que se queda indiferente ante todo pero después podemos vemos un ser muy sensible. Sí... es sensible, aunque no lo parezca. Léonne posee mucha empatía , tiene la costumbre de consolar a cualquier persona que sufre, encontrando las palabras adecuadas para cada momento. Pero en algunos momentos se mostrará indiferente. Esa mujer es la maestra del doble sentido, a veces os volverá locos/as pero una vez acostumbrados a esa faceta de su personalidad, os parecerá encantadora. Está educada para la diplomacia, usando de la cortesía para abrir (o cerrar) puertas.

A lo mejor... Toda su mentalidad ha cambiado ahora.

Más:

HISTORIA

On m'a appelé?

Naciste en el año -352 a. C en la época clásica, en Atenas. Era de oro de la Grecia, en la que el poder de las polis griegas y las manifestaciones culturales que se desarrollaron en ellas alcanzaron su apogeo. Tu querida madre era una gala que viajo hasta esas tierras y tu padre era griego. Eras hija única, el tesoro de la familia, el diamante de la dinastía. Tus padres se rompían el alma para que fueras una persona excepcional y muy culta. Tu padre te llenaba la cabeza de conocimientos que casi nadie conocía y tu madre te contaba secretos del mundo que encontró durante sus viajes. Todos te amaban, todos te protegían pero algunos te envidiaban. A veces, algunos cobardes te acosaban pero la diosa de la victoria siempre te acompañaba. Te formaron a escondidas al arte de la lucha, un secreto que tenías que guardar porque las mujeres Atenienses no tenían el derecho de practicar el combate.
Las primaveras transcurrían y cada vez ganabas más en experiencia, el arpa se convirtió en tu artefacto de expresión, luego la escritura, después el dibujo. Las musas te seguían por todas las partes y cada nota, cada letra o color te encantaba el espíritu. Admirabas los escultores y los artistas... Cada noche, encerrada en tu cuarto, dibujabas una estatua. Perfeccionando gradualmente tus técnicas de dibujo. Si te das cuenta, todo te atraía, ¡todo!

Llegaste a tu vigésima primavera, ya querían que te casaras con otro Ateniense. Te negaste, porque casarte implicaba el fin de tu búsqueda de saber y no podías vivir en esas condiciones. No querías ser una ama de casa y nunca lo serás. Una noche te escapaste de casa, no querías dormir, necesitabas salir. Respirar el aire fresco nocturno y correr en los bosques. No te importaba si podías morir alli, sólo querías escapar de ese callejón mental; ya estabas harta de todo. Solo pedías la libertad, como un animal encarcelado. La Luna iluminaba el bosque, marcando las sombras de los árboles en el suelo y tú estabas corriendo a toda velocidad. Pensabas en una sola palabra "ESCAPA", no querías darte la vuelta porque implicaría un pensamiento de duda y en un momento como ese no podías dudar!
Llegaste a una pradera con arbustos por ahí y por allá y te paraste. Desde que saliste de tu casa sentías como una presencia cerca de ti, muy cerca. Alzaste la mirada hacía el cielo nocturno y dejaste escapar esas palabras.

-Sal de ahí...

El viento golpeó ligeramente tu espalda y sentiste el peso de una cabeza sobre tu clavícula y pelo sobre la mejilla. Te quedaste quieta, mirando aún el cielo y preguntaste amablemente.

-¿Quién eres?

-silencio-

-¿Por qué quieres saberlo?

-Porque te lo pregunto.

Era un hombre, su voz era suave y un poco grave. Tu corazón empezó a latir más fuerte y más rápido mientras esperabas su respuesta.

-Heleso. -risa-

-Léonne.

Durante toda la noche, hablasteis de vosotros para conoceros. Ese Heleso era simpático y quería verte la siguiente noche. Aceptaste la invitación, así sabrías donde ir la próxima vez y antes de irte dijiste "El mismo lugar y a la misma hora". Te sonrió y se fue también. Regresaste antes del amanecer y dormiste enseguida. Lo mejor era que soñaste de él, te contaba cosas un poco extrañas, ¿por qué será?

Promenons nous dans les bois pendant que le loup n'y ait pas

Me desperté con el pie izquierdo, mala señal. Ya sabes que odio los malos días, ¿qué me pasara esta vez ? Baje por las escaleras y oí voces alborotadas. Eran las sirvientas y mi madre, mi padre estaba sentado tranquilamente y silencioso ; mirando por la ventana. Mis pasos se hicieron más lentos, tenía un mal presentimiento. El pie izquierdo nunca miente... Una domestica aviso mi madre de mi presencia y esta última me llamo. Me dijo que... me iba a casar dentro de dos meses, mi cuerpo entero se paralizó por culpa de mi ira. ¡No podía creerlo, era demasiado pronto! Soló tuve que mover el dedillo para explotar de furia, gritando mis cuatro verdades a mi madre y por la misma ocasión a mi padre. Ese último se levantó lentamente y me dió una bofetada. Aún más furiosa salí de mi casa corriendo, a la misma velocidad que anoche y volviendo al mismo lugar. Quería verlo, quería quitarme todas esas ideas del cráneo, ya no podía aguantar más. Soló quiero ser libre, libre de pensar lo que quiero sin ningún compromiso. Me di cuenta que mis padres eran crueles.

Y sabes que me duele...

Le estaba esperando, varias horas habían transcurrido. Sentada sobre una gran roca, miré el cielo que estaba anocheciendo, podía ver las primeras estrellas. Mi padre me contó que cuando vemos la primera estrella que aparece en el cielo, podemos pedir un deseo. Reconozco que soy supersticiosa pero lo siguiente me colgaba al último hilo de esperanza, cerré los ojos y pedí mi deseo. Un nuevo viento golpeo mi espalda, era él, he podido reconocer su presencia. Tan peculiar de las otras, tan extraña.

-¿Te pasa algo?

Guardé el silencio y se sentó a mi lado.

-Es un buen sitio para ver las estrellas, ¿no ?

-Cierto.. -baje la mirada, mirando el césped.-

- Si pudieras obtener una libertad total a cambio de todo lo que tienes

Le interrumpí -Pero- pero me interrumpo justo después.

-Y que pudieras recuperar una gran parte de lo que tenías, ¿lo harías?

No le respondí durante varios minutos, su pregunta me dejaba muy confusa. El hecho de perder mis padres y mi hogar me aterrorizaba pero... aunque sea una bendición disfrazada. Estaba claro que mis padres podían arreglar mi matrimonio con un hombre que no conocía sin mi consentimiento. Entonces... Inconscientemente miré su rostro, un rostro dotado de una belleza sobrenatural. Unos ojos verdes que brillaban como luciérnagas, el cabello negro y largo, y una boca con labios un poco carnosos.

-Sí...

-¿Segura?

-Te respondí, ahora dime porque me preguntaste eso.

-Se callo y respondió.- -Se me ocurrió así. -Hemos desviado la mirada hacia el cielo nocturno-

-Mis padres quieren casarme -añadí riéndome-

-Déjame adivinar, y no quieres casarte -se río-

-Exacto...

-Cuando un dios te cierra una puerta, otro te abre una ventana.

Durante toda la noche hemos hablado de todo y nada, me hablaba de él y yo de mí. Su personalidad me parecía interesante, no, diría que me fascinaba literalmente ! Aunque sea la segunda vez que hablo con él, le conté mi situación en detalles, mis gustos, mis miedos. Todo lo que un amigo tenía que saber pero curiosamente, no era un amigo para mí. En fin... Quería volver para verlo otra y otra vez. De momento tenía que regresar a casa, seguramente mis padres estarán muertos de inquietud y muy furiosos. Cuando llegué a casa me encontré con mi madre (estaba sonriendo) y un hombre desconocido que tenía un ramo de flores junto a él. Avanzo hacía mi y se presento amablemente, se llamaba Theode. Tenía un físico muy atractivo pero soló faltaba conocer su intelecto. Mi madre andó hacía mi y dijo con todo el simplismo del mundo.

-Léonne, estás prometida a Theode.

No... Otra vez no... No quería enfadarme de nuevo, Theode me dio el ramo de flores pero lo negué amablemente. Suspiré y baje la mirada, no quería enfrentarme a los ojos de mi madre, no me gustaba verla disgustada.

-Gracias... Discúlpenme pero necesito dormir.

Me retire sin hacer el mismo escandalo que el de esta mañana y entre en mi habitación casi llorando en silencio. Después de lo que ocurrió, salia todas las noches con mil y una escusas para volver a ver a Heleso. Su presencia me relajaba, me protegía y me agradaba. Noche tras noche nos veíamos, siempre alegres, siempre serenos y nuestra complicidad aumentaba progresivamente ; era alguien de confianza y ni una sola vez lo he dudado.

Maintenant ?

Las noches pasaban y cada vez notabas algo diferente en él, te parecía demasiado perfecto para ser humano. Estabas atenta a cada uno de sus movimientos, cada palabra de que salía de su dulce boca. Admirando su apariencia y su inteligencia, te contaba secretos del mundo como lo hacía tu madre antes. No podías quitarte ese hombre de tus pensamientos, noche tras noche soñabas con él y cada vez tus sospechas se hacían más amplias.

Estabas enamorada de Heleso.

Una semana antes de que la boda empiece te escapaste otra vez de casa, montando el drama ; rompiendo las ventanas y estallando jarrones. Esta vez eras incontrolable, hasta golpeaste tu prometido y pudiste defenderte contra tu padre. Era un acto de traición hacía tu familia... Aunque no querías llegar a esos extremos. Volviste como siempre a esa pradera, tu cara estaba cubierta de lágrimas y veías Heleso al lado de un árbol, y te estaba esperando. Corriste hasta el gritando su nombre, te chocaste tan fuerte contra el cuando te cogió con sus brazos que habéis caído sobre el césped. Sentías su mano sobre tu cabello, su piel era fría pero tan suave. Te susurraba pequenitas frases para consolarte, poco a poco tu pena se esfumaba. Te beso. Te beso la frente, luego el cuello y al fin tus labios. Lo amabas, lo amabas demasiado. Te has vuelto adicta a él, adicta a su voz, a su olor, a su presencia...

-¿Recuerdas mi pregunta ?

-Sí..

-¿Quieres ser libre, aunque tengas que hacer sacrificios ?

-Si puedo vivir a tu lado... Sí.

No sabias a que te ariesgabas.

-Léonne, cierra los ojos por favor.

Obedeciste, estabas boca arriba y sentías su peso sobre tu cuerpo. Continúo besándote esta vez el cuello, lo lamió dulcemente y te susurró « Te amo », y sin darte cuenta sentiste dos caninas penetrar tu carne. No sentiste dolor pero una mezcla de éxtasis y de confusión. Sentías tu vitalidad evaporarse como el humo, tu visión se nublaba y tu respiración se hacía más lenta. Te agarraste al él, no sabías lo que estaba pasando. De repente se retiró pero tu campo de vista te impidiióo ver lo que estaba haciendo, sentiste justo después un liquido acariciar tus labios. Una gota te tocó la lengua y pediste más, ese licor te quemaba del interior pero te procuraba demasiado placer. La operación se repitió tres veces, cuando creías que todo lo ocurrido tocaba a su fin sentiste un dolor insoportable en todo tu cuerpo. Comenzabas a gritar, Heleso te tapó la boca y te besaba la frente para tranquilizarte pero sentías tu cuerpo morir. Te preguntaste una última vez lo que te había hecho.

Te desmallaste justo después.

Te despertaste acostada en una habitación, estaba decorada de estatuas de marfil. Algo cambio, tu visión. Tu vista era más precisa y más afilada. Podías ver cada detalle que era invisible al ojo humano, cada finalidad y acabados. Te delectabas de estas obras de arte, un mortal no podía ser el autor de estas estatuas. Era algo divino.
Saliste de la cama con rapidez, notaste el cambio, ¿no ? Había un espejo delante de ti, te acercaste a él lentamente. Contemplabas tu nueva apariencia, aunque preservabas un poco tu antigua apariencia podías notar los cambios. Habías crecido, tu cuerpo era más fino, tus ojos y tus uñas parecían ser de cristal. Tus sentidos también fueron afectados, los cinco habían aumentado en potencia... Tu cerebro estaba aún bajo el choque, no podías creer lo que te estaba pasando. De repente sentiste una presencia, la de Heleso. Te abrazó dulcemente, mirabas por la ventana con melancolía, recordando lo que pasó. Una sola pregunta se manifestó en tu mente, ¿quién soy ahora ? Te cogió de la mano sonriendo.

-Ven, ya es hora.

Asentiste y salisteis corriendo por la ventana. Estaba nevando, algo poco común en Gracia y corrías de techo en techo. Riendo y gritando. Admirando ese nuevo mundo que tus ojos podían ver, contemplabas ese hombre que te libero. Su belleza resplandecía, el vínculo entre vosotros se intensó demasiado, ya no era amor pero adoración mutua. Volvisteis a la misma pradera, andando cogidos de la mano. La nieve nocturna embellecía el decorum, te explicó tranquilamente tu nueva condición ; « Vampiro ». Un ser sobrenatural que se alimentaba de sangre humana, una vida eterna y maravillosa junto a él. La sangre humana, eso era el precio de esta libertad. Aunque parecía horrible, Heleso lo decía de una manera tan bella que caiste en la trampa cándida. En el fondo sabías que irías perdiendo poco a poco tu humanidad pero lucharías por mantenerla para la eternidad. El silencio se instaló y oíste unos pasos. Te diste la vuelta y viste a Theode corriendo hacía ti. Estaba gritando porque te veía con otro hombre. Soltaste la mano de Heleso y anduviste hasta Theode, querías probarla, probar su sangre ; su vitalidad. Cuando llego delante de ti, le cogiste del cuello suavemente y clavaste tus colmillos en su traquea. Otra vez ese divino sabor...

I

Noventa y un años habían transcurrido después de esta noche, mi naturaleza cambio y mi manera de ver el mundo también. Ya no podía salir de día y abandone mi familia y mi hogar. Heleso era mi única familia, mi único amante. Durante este siglo aprendí cosas nuevas sobre nuestro mundo, antes de todo que la Tierra era redonda. Algo que nadie podía creer pero era cierto. Quise aprender más cosas sobre nuestra raza hablando con otros vampiros, me dieron consejos y una o dos hitorietas sobre nuestro origen, pero necesito más y tendré toda la eternidad para ello.

...

« Una vida eterna y maravillosa junto a él » dijo, y se fue. Prometiendo que volvería a verme, que necesitaba de un poco de soledad y yo también. Para mí era como una prueba de supervivencia, aunque ya sabía cazar y usar mis poderes. Las primeras semanas sin él fueron atroces, lo necesitaba emocionalmente, lloraba cada noche ; suplicando su vuelta... La noche en la que llegué a mi límite fue mi primer letargo, dormí bajo tierra durante... más de seis siglos. Curiosamente, mi mente absorbía los conocimientos de esta nueva era.

II

Me desperté en la era del imperio de Constantino I, el imperio fue dividido en dos. El imperio romano y bizantino, una historieta entre dos hijos y un padre. Quede en Constantinopla durante dos siglos antes de ir a Galia, mientras tanto, volví a ser la mejor arpista del imperio ; escondiendo cuidadosamente mi naturaleza. Aprendí el nuevo idioma y las nuevas artes de las dos partes del imperio, tantos cambios y tanta belleza... Me faltaba Heleso, seguía esperándole con impaciencia,¿por qué tarda tanto ? Ya estaba harta de esa soledad, perdí mis padres... y no quería perder a Heleso. En el año 402 (tenía 949 años) fuí a Galia, tierras donde mi madre era originaria, que estaban bajo el control del imperio romano del occidente. Recordaba aun el nombre de su pueblo, "Cartunes" pero cuando llegué se había convertido en una ciudad celta, tuve que aprender otras lenguas como el galo. De toda la ciudad había un soló vampiro hembra, se llamaba Alba. Antes nos evitábamos pero ahora dormimos juntas en el mismo ataúd, amándonos mutuamente. Cada noche me deleitaba de sus besos, de su saber, de sus viajes y descubrimientos. A demás su belleza era igual que la de Heleso, esta vez tenía el cabello dorado, una piel muy pálida y unos ojos azulados como el mar. Su estatura superaba un poco la mía y su mirada expresaba tanta dulzura ante mí.

Viví con ella durante dos siglos hasta que la mataron... Otro vampiro se enfrentó a ella y casi salio victoriosa pero su maldito enemigo la derroto como un cobarde. Maté el individuo de mis propias manos, lentamente y dolorosamente. Saboreando su dolor hasta el último momento, el efecto de mi edad actuaba drásticamente sobre mis capacidades. Cualquier criatura que se enfrentaba a mi iba de visita al señor « fin ». La muerte de mi querida amante me daño como el abandono de Heleso y volví a yacer bajo tierra (en el años 603 y tenía 1150 años) esperando el momento en el que tendré suficientemente fuerza para enfrentarme de nuevo a la soledad de la eternidad.

III

Me desperté en el Renacimiento, precisamente en el era del Quattrocento, donde la pintura ganó una posición superior a la de los otros géneros artísticos. Durante un tiempo, hice como una evaluación de los últimos siglos, me faltaba algo, primero pensé en el conocimiento pero no. Era Heleso, me faltaba otra vez, no sabía si estaba aún vivo o muerto pero lo necesitaba. Durante los tres siguientes siglos viví como una artista anónima y una arpista popular en Europa. Hacía cargos para reyes con la mayor discreción posible, hasta matar a los que cotilleaban demasiado. A veces, iba a tocar en los palacios para relajar los reyes con mis arpas encantadas.
Luego fui a Italia en 1425, tuve que aprender otra vez nuevos idiomas para comunicar con mi entorno. Continuaba mi trabajo de pintora y arpista; y a veces cantante. Pero una noche, el destino me condenó a una carrera sin fin contra la Inquisición, tuve que cambiar de domicilios varias veces ; lo mismo con mi nombre (Adriana, Isabel, Maria, Lucrezia...). Conseguí que el Papa pueda olvidarme para los próximos siglos a pesar de todos los inquisidores que maté. Pero cuando pense que mi vida volvería a ser tranquila, el destino me ofreció otra venida pero esta era totalmente sorprendida. Volví a ver a Heleso. Pasaron 1881 años desde su despedida, por fin volvió... Fue un choque muy... no hay palabras para describirlo, sentía una mezcla de ira y de amor apasionado. Mi cara se cubrió una tercera vez de lágrimas, estaba viviendo un alivio muy doloroso. Tenía tantas preguntas y tantos acontecimientos que contarle...

Encontré lo que me faltaba.

El 22 de diciembre en 1702 me marcó de por vida. No sé si mi vida se esfumó o si se quedó como si no existiera, pero navegué en el vacío durante mucho tiempo. Estaba lloviendo, estaba de rodillas delante de él. Llorando, como siempre. Esta vez eran lágrimas de sangre. Grité como nunca lo había hecho ante lo que veían mis ojos, el césped estaba coloreado de un color rojizo que desprendía dos aromas, uno divino y el otro maldito. La sangre de Heleso y la muerte. Ví... su cabeza yacer sobre sus rodillas... Su rostro quedaba boquiabrierto con su belleza eterna y recubierta de sangre. Estuve paralizasa, demasiados pensamientos atravesaban mi mente.
¿Por qué ? ¿¡ Quién !? ¿Cómo? ¿QUE HAGO ?
Mi único amor verdadero desapareció en las cenizas de un cuerpo inmortal, dejando con él una carta. Temía el contenido de la carta, mi mano se dirigió temblando hacía ella. El papel estaba mojado por la lluvia y la sangre, cerré los ojos abriendo la carta y la leí.
« No les persigas. »
Esa frase me reventó en llantos porque justo despuès había otra frase pero con una caligrafía diferente que decía.
« Te esperamos con impaciencia »
Por primera vez me provocarón seriamente. No podía soportar esa marca de insolencia, era otra vez esos malditos inquisidores. Tenía ganas de ir al Vaticano, de matarlos a todos y quemar el palacio pero respete la última voluntad de mi amante. Pero juró que cualquier inquisidor que venga a mí morirá enseguida. Aunque que perdí mi ultima familia... no me sentía incompleta. Podía sentir su presencia cerca de mí, a lo mejor es un fantasma ahora. Dormí por última vez bajo tierra durante cuarenta y cinco años.

IV

Me despertó un monje enviado por la inquisición, estaba armado de un puñal y una biblia. Esta vez, utilice mi facultad de crear ilusiones para torturarlo y vengar una pequeña parte la muerte de Heleso. Le robé toda su vitalidad en un soló mordiscó. Quité el ataúd con una gran sonrisa.

« Et de un .»

Decidí mudarme a París (en 1787) una bella ciudad recomendada por todos, había varios rumores sobre unos grupos de seres sobrenaturales como vampiros y otros. Por mi parte, París era un lugar perfecto para empezar una nueva vida con 2347 años.

DATOS EXTRA

* Tiene un gato y una lechuza.
*Puede ser ninfómana.
*Lleva un collar de la Diosa Selene y una cruz.
*Le encanta el agua.
*Le encantan los bosques.
*Es una profesional de la rapidez.

©Facilis Descensos Averni RPG

por **Nigel Quartermane** Sáb Nov 08, 2014 5:22 pm

FICHA EN PROCESO

incompleta

TU FICHA ESTÁ INCOMPLETA. CUANDO HAYAS TERMINADO, POR FAVOR POSTEA A CONTINUACIÓN EN ESTE MISMO TEMA PARA QUE UN MIEMBRO DEL STAFF PASE A REVISARLA Y TE DE COLOR Y RANGO SI TODO ESTÁ EN ORDEN.

NO OLVIDES QUE PARA PODER ACEPTARLA ES NECESARIO QUE PRIMERO HAYAS REALIZADO LOS REGISTROS OBLIGATORIOS EN ESTE APARTADO Y QUE CUMPLAS CON LO QUE PEDIMOS EN EL ESQUELETO DE LA FICHA, INFORMACIÓN QUE PUEDES VER AQUÍ.

GRACIAS.

CODE BY NIGEL QUARTERMANE

por **Léonne Scarte DeCahaix** Jue Nov 13, 2014 4:18 pm

¡Ficha completa!

por **Doreen Jussieu** Jue Nov 13, 2014 8:00 pm

FICHA APROBADA

bienvenido/a a victorian vampires

¡ENHORABUENA! YA ERES PARTE DE VICTORIAN VAMPIRES Y TE DAMOS LA MÁS CORDIAL BIENVENIDA.

ANTES DE HACER CUALQUIER OTRA COSA, TE INVITO A LEER LAS NORMAS QUE TENEMOS EN EL FORO PARA QUE ESTÉS BIEN ENTERADO/A DE CÓMO MANEJAMOS TODO EN ESTE SITIO Y ASÍ EVITARTE FUTUROS MALOS ENTENDIDOS. A CONTINUACIÓN TE DEJO LOS LINKS MÁS IMPORTANTES PARA QUE PUEDAS CONOCER LA INFORMACIÓN, Y SI DESPUÉS DE LEER SIGUES TENIENDO ALGUNA DUDA, PUEDES CONTACTARME A MÍ O A OTRO DE LOS ADMINISTRADORES; ESTAMOS PARA SERVIRTE.

¡QUE TE DIVIERTAS!

REGLAMENTO AMBIENTACIÓN F.A.Q. REGISTROS AUSENCIAS

CODE BY NIGEL QUARTERMANE

por Contenido patrocinado

Ô La Sainte Dame. (Terminada)

Ô La Sainte Dame. (Terminada)

Re: Ô La Sainte Dame. (Terminada)

Re: Ô La Sainte Dame. (Terminada)

Re: Ô La Sainte Dame. (Terminada)

Re: Ô La Sainte Dame. (Terminada)