compter dernière (Jezabel Felivene)

Los tres últimos días habían pasado lentos desde su encuentro con el gallardo mosquetero en el cementerio y por si fuera poco su mente no había dejado de traérselo sin tregua alguna por lo menos dos veces al dia. Desde luego su actitud cambio considerablemente ya que las palabras cruzadas con Tyler tuvieron efecto, de manera casi inconsciente estuvo alerta ante todo lo que su tío decía o hacia y aunque se mantuviese atenta a la expectativa de cualquier acto sospechoso, no logro encontrar algo que le pareciere motivo de desconfianza, aunque la noche anterior le dio la impresión que su tío tenía un semblante agitado tras la visita de Lord Wilmer, quizás no hubiera generado su desconcierto si la hora no fuera tan impropia para una audiencia, que era tan urgente que no podía esperar para el día siguiente a primera hora. Debía empezar a dudar por ello? La verdad no podia, quería confiar en su ahora familia eso era lo correcto después de lo que Edward había hecho por ella y su madre.

Miro por última vez su reflejo, sus ojos denotaban aquellas tenues ojeras debido a la dificultad que tenia la rubia para conciliar el sueño tras varias noches de desvelo. Las yemas de sus dedos pasearon por el contorno bajo de su ojo haciendo un poco de presión y entonces se dio cuenta, estaba preocupada por su apariencia; eso era absurdo ella jamás se interesaba por ello, las circunstancias en las que había quedado para esa reunión no eran para conocerse y simpatizar, el único objetivo de eso era que le fuese entregado algo que su padre le encargó así que no debia sentir más que gratitud por el gesto honorable del Mosquetero al llevar acabó la voluntad de su padre...cierto?.

-Querida, luces radiante mi sol...piensas salir?-

sonrió ante el cumplido de su Tío que a diferencia de ella el subía las escaleras, de manera nerviosa la rubia apretó el barandal la verdad es que no podía decirle a Edward que saldría al encuentro de un viejo conocido suyo pues se lo prometió al mosquetero así que tendría que medio mentir.

- Si, hace días con las prisas me olvidé de llevarle las flores a mi padre, solo limpie su lápida que tenía un poco de Polvo y ya sabeis que los encargados no están tan al pendiente y...por eso ire de nuevo- se calló antes que se le saliera una imprudencia pues no le gustaba mentir aunque si lo pensaba bien no estaba mintiendo...solo le ocultaba con quién se encontraría en el cementerio.

-Bien pero esta vez irás en carruaje, Nimue...encargaros que le preparen el carruaje a la señorita más bella de esta casa y que Antuan le lleve- Dijo su Tío a la mujer que era su mano derecha, ni siquiera se había percatado de la presencia femenina que aguardaba en la entrada, su mirada regreso rápida a la de su tío.

-Pero Tío...no veo...-
-Iras en carruaje querida.Ahora sí me permites, voy con tu madre...-

No tuvo oportunidad de oponerse, solo sintió el beso en su frente y después vio como su tío se perdía en las escaleras, termino de bajar encontrándose con Nimue quien con una reverencia se despidió para ir por el carruaje y por Antuan, ninguno de ellos le agradaba apesar que sirvieran a su Tío había algo en esos dos que le provocaba escalofríos, sin contar que con Antuan la relación no era precisamente la mejor. Suspiro cuando la figura femenina entro al recibidor donde ella se encontraba, como era de esperar le indico que el carruaje estaba listo y le llevo hasta el ayudándole a subir.

No tardaron en llegar, por fortuna la rubia se había adelantado así que Antuan no se daría cuenta de nada, o al menos eso deseaba. Con ayuda del protegido de su Tio bajo del carruaje.

-Tardare un tiempo considerable, podéis venir por mí en dos horas aprovecharos el tiempo que le brindo para sus diligencias-

La mirada del joven fue un tanto dura, como si no estuviese dispuesto a retirarse, pero Jezabel era de carácter y nunca solía dejarse.

-Mi Tio, su patrón, solo le indico que me trajese no que fungiera de vuestra nana. En dos horas, Antuan.- fue firme y fría con el joven pues a pesar que ambos tenían la misma edad y el contaba con la protección de su tio, para jezabel no resultaba difícil dejarle las cosas en claro cuando esté pretendía ser su sombra o extralimitarse en los encargos de su Tio para con ella.

Tomo las flores en sus manos y con paso apresurado se encaminó al mausoleo para dejarle las rosas blancas a su padre, se sentía tan ansiosa conforme se acercaba la hora de encontrarse con Tyler, la verdad aquella tensión le había generado desazón y no entendía el por qué está necesidad de aclararlo todo. Quizás por que el tenia que ver con su padre y eso le hacía sentir que podía conocer más del su progenitor.

-Padre...ayudaros a comprender y actuar con sabiduría aquello que se me presente...- murmuro al despedirse de su padre pues ya era hora y por fin se encontraría con el mosquetero. Sus nervios afloraron con cada paso que daba a lo lejos vio el carruaje, no tardó en distinguir la figura del hombre que no lleva uniforme, bien no se esperaba esa imagen. Pero en que estaba pensando, el único motivo de su encuentro era su padre y nada más. No podía entablar amistad o simpatía con quién dudaba de su familia; se lo recordó nuevamente.

-No tiene nada que agradeceros...por fortuna la hora coincide para tomaros un té-no pudo evitar sonreír al encontrarle y ver como éste le saludaba, ella respondió con una leve inclinación mientras entrelazaba su brazo a Tyler quién le encaminaba al carruaje, lo único que lamento es no acompañar a su madre pues le tocaría estar sola con su abuela y sabía que aquello a su progenitora le resultaba casi castigador.

Dejando atrás ese pensamiento le albergo un verdadero alivio al ver que Antuan no esperaba en la entrada hubiera estado en verdaderos aprietos si le mirase subir al carruaje de otra persona sin duda correría a decírselo a su Tío para ganarselo aún más. Una vez adentro del carruaje se topó con aquellos ojos, que podía decir, se sentía extraña como si aquello no estuviera aconteciendo.

- La última vez que le mire...mis pasiones me gobernaron, no pretendía ser brusca, espero lo contemple.- murmuro perdiendo la mirada en el paisaje atravez de la ventana pues ella no era de disculpas aunque estuviese errada.

-Vuestro día de descanso Monsieur ?-pregunto la rubia haciendo referencia a su vestimenta y denotando cierto interés en la caja que llevaba el mosquetero.








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Su rostro delato el alivio que le causaron las palabras del mosquetero, era bueno saber que entendía el por que de su actitud un tanto hostil, le miro aun fijo poniendo demasiada atención a lo que este le respondía, y no debía negar que le extraño el hecho de que el hombre no tuviese familia, es decir, no le calculaba mas de 35 años, era normal que le imaginase casado y con hijos siendo que su aspecto era de un hombre apuesto, caballeroso... Desvió la mirada de esos ojos azules pues era difícil no embelesarse con la profunda calma que le regalaba, el escuchar que su padre habia sido para el lo mas cercano a un familiar le hizo entender que después de todo si era merecedor de su confianza. 

Por fortuna el trayecto no era largo, eso le daría un poco mas de margen para llegar al cementerio antes que el arrogante Antuan; así que podía estar tranquila al menos por ese aspecto. Con ayuda de Tyler bajo del carruaje y tomada de su brazo entro al lugar que el había escogido para poder platicar de manera mas amena, pudo reconocer el restaurante pues con poco frecuencia le visitaban, en su mayoría por negocios familiares que su Tío concretaba, eso logro inquietarle un poco pues había la posibilidad que le reconociesen y ella prácticamente no debía estar ahí. 


-Por supuesto, era difícil no percataros de el...- dijo con una sonrisa acomodándose en el asiento de manera que su vestido no estorbara con la mesa, miro ante ella el pergamino que este le tendia, pudo reconocer el sello familiar en el, le recorrió un escalofrió cuando sus manos hicieron contacto con aquel papel enrollado. Miro al hombre que tenia a un lado y este asintio a manera de aprobación para que lo abriese. Lo desplego delante de si y pudo contemplar la fina letra de su padre, un perfecto manuscrito. Sus ojos volaron atreves de las letras imaginando la voz de su padre susurrarle aquello, que sacudida fue saber que el estaba consciente que quizás moriría pronto, pero como si según el falleció en un accidente. Miro nuevamente a Tyler, a que se refería su padre con " aquel que vuela junto a las aves que todo del cielo lo ve" que quería dar a entender con esa metáfora. Estaba confundida, de que riesgo hablaba su padre?.

-L'oiseau vole pour guider le chasseur, vous voler pour être ma vision....significa algo para usted?, Mi padre precisa en este papel que le repitiese estás palabras...los ojos verdes se clavaron en los azules buscando que le ayudara a entender por qué tanto misterio.

La rubia pestañeo varias veces, no supo que cara poner ante lo que este le acababa de decir, realmente había escuchado bien? Miro con evidente preocupación hacia los lados cerciorándose que nadie se hubiese percatado de la charla y menos sobre el hecho que aquellos ojos azules habían cambiado, quizás esa demostración fue la que le hizo caer en cuenta que no estaba alucinando. El le soltó aquello sin reparo sin siquiera titubear con una seguridad alarmante que no daba pie a la negación de su naturaleza, la sensación de estupor que le inundo podría fácilmente relacionarse con un balde de agua a la mas baja temperatura siéndole vertida en el cuerpo.

De todas las reacciones posibles la bruja solo atino a reír con evidente nerviosismo mientras bebía de la copa con agua que uno de los meseros se había encargado de llevar en lo que ordenaban, quizás si fingía que no se percato de aquella mirada podría simular que ella lo interpreto como una broma para romper la tención, pero de inmediato tuvo que descartar ese plan ya que sus ojos no abandonaron los del mosquetero. Cerro lo ojos por un momento tratando de acomodar las ideas que revoleteaban en su mente sin ningún orden; el sabia que ella era hechicera, la pregunta era como? Por que solo tres personas sabían que sus poderes apenas daban indicios de despertar, acaso el ya hablo con su madre? de ser asi ella no se lo comento. No tenia forma de negar la verdad expuesta eso era un hecho irrefutable por mas que se lo planteara.

-No estoy muy familiarizada con ese termino...Cambiante, es una clase de hechizo que le permite ser un ...Aguila?...- la delicada voz salió en un susurro débil pretendiendo mantener la privacidad, que todo lo dicho quedara entre ambos, con aquel comentario dio a entender que aceptaba el hecho de que era bruja y no pretendería ocultárselo al igual que lo que el fuese también lo tomaría como verdad después de todo si existía la magia era ilógico que pensara de forma cerrada a estas alturas.
-Me tomo por sorpresa que usted, estuviese al tanto de mi reciente...condición, por asi deciros, pero me queda claro que la confianza con mi padre iba mas haya de lo que yo pueda imaginaros y eso solo da pie a que yo también lo haga- era un juego de su imaginación o el lugar se sentia sofocado, tomo su abanico de mano y comenzó a echarse aire con evidente insistencia.

-Mi padre, el también menciono que temía el riesgo que pudiese correr , sabe que era lo que atormentaba a mi padre como para escribir esto- dijo sosteniendo con fuerza innecesaria el pergamino, le estaba resultando tan dudoso que la causa del deceso de su progenitor fuera una casualidad, ya empezaba a dudar de ese accidente.

Agradeció asintiendo cuando tomo la mano del mosquetero para ayudarle a levantarse, la verdad era que se empezaba a sentir sofocada y el aire le comenzaba a faltar, como era de esperarse el lugar encerrado no ayudaba mucho asi que la idea de salir a la terraza le pareció demasiado oportuna. Cuando estuvieron fuera pudo respirar ese aire fresco que tanto le habia hecho falta, sus pensamientos iban y venían con tanta facilidad tratando de encontrar algo lógico en todo aquello, entonces palideció por completo incluso tuvo que apoyar ambas manos en el barandal de aquella terraza. La palabra cazador se repetía una y otra vez haciendo eco en su mente.


-No...eso es imposible...debe serlo, una confusión...- murmuro sin poder formular algo coherente, se sentia mareada, acababa de decir que todos en la Familia Falivene eran cazadores. Cuando su madre en conjunto con su abuela Materna le explicaron por que tenia esas visiones y lo que ella era, le advirtieron que habia personas buscandoles no solo a ella sino a todo aquel que era especial en ese entonces creyo que se referian solo a las personas con magia pero ahora, el mosquetero le habia hecho entre ver que aparte de ellos existian otros seres y que los que les daban caza prácticamente dormían bajo el mismo techo que ella.

Su madre, era indudable que estuviera al tanto de lo que su progenitor y toda la familia de este tenían como oficio, pero lo que no acababa de entender era por que meterse a la boca del lobo y exponerlas de esa manera, por que contrajo matrimonio con su Tio.

-Que mas me han ocultado...cuantos secretos están callando - su voz salió casi en un jadeo, cuan irreal le resultaba todo esto; cambiantes, hechiceros, su familia que ahora resultaba ser cazadores, los secretos que su madre guardaba tan celosamente. Ahora entendía por que no querían que desarrollara sus dones, la insistencia en dejar que las visiones desaparecieran solas y no intentar descubrir mas.

-Yo solo...necesito un momento- menciono cerrando los ojos tratando de respirar al ver que Tyler se giraba para verla, no sabia si sentirse aterrada o enojada ante la situación. Y pensar que debía regresar a ese nido de cazadores y fingir que no pasaba nada. Su tio, el debía saber que su madre era bruja y por eso ella se caso con el, el las protegía no había otra explicación o si?.  

-Mi madre está al tanto de esto, cierto?- dijo abriendo aquellos ojos esmeraldas para posarlos sobre la figura de su acompañante, la verdad no estaba muy segura de querer oír la respuesta, era demasiado en tan poco tiempo que lidiar con todo lo que ocurría a su alrededor le resultaba difícil y más estando sola pues su madre era parte de aquellos que guardaban secretos.

Por supuesto que eso ya lo presentía, todo le gritaba que la muerte de su padre tenía demasiadas inconsistencias no se tenía que ser detective para suponerlo. Lo que si le tomo aún más entender era por que Tyler menciono la boda de su madre, le miro confundida si es que se podía estarlo más y en su rostro se instalo la preocupación al notar que este ponía sus manos sobre las de ella... eso solo podía indicar que aún había algo peor y lo que estaba apunto de decirle era igual de difícil que lo anterior, suspiro con fuerza esperando a que este hablara y lo que oyó no le gusto en lo absoluto,sus ojos verdes denotaron la molestia... no podía escuchar aquello...era absurdo, podía aceptar que estuviera rodeada de cazadores e incluso que su padre siendo uno se haya enamorado de su madre, pero el creer que su tío actuará en contra de ella y su progenitora le resultaba tan difícil. Siempre los vio tan unidos por lo mismo ella dejo de oponerse a esa relación pues les veía tan felices que no quería causar daño con la negativa a que estos se casaran. Que estaba pasando con su vida, todo se estaba yendo al traste, en lo que creía, en los que confiaba y amaba.

Sin decir ni una sola palabra deshizo la unión de sus manos con el apuesto hombre, aquello había sido demaciado, todo lo que estaba procesando le dolía, la mentira, la traición...se alejó un poco y le dio la espalda por un momento llevando sus manos hacia sus ojos. Que gran mentira tenía delante de si.

- Efectivamente...ella, se opuso cuando le pedí enseñarme...- dijo con la voz un tanto quebrada, no deseaba que alguien le viese de esa manera tan frágil por lo tanto limpio aquellas lágrimas que habían escapado de sus ojos y de nueva cuenta se giró para ver al mosquetero. Ella amaba a su Tío, el había sido lo más cercano a una figura paterna era imposible que las palabras de Tyler no le dolieran, se sentía como si un hueco de fuera abriendo en su pecho.

- Desde cuando sabes todo esto....- no se sentía bien, las náuseas le estaban atacando, trató de respirar lento pero el aire no me estaba llegando del todo, así que nuevamente se apoyó en el barandal con ambas manos fingiendo ver el paisaje pues no deseaba que el mosquetero se preocupara y no terminase de revelarle la enorme maraña de mentiras.

No se esperaba aquel contacto que sin duda buscaba de alguna manera hacerle más llevadero todo, pues los sentimientos de perdida que ella estaba pasando no fueron ignorados por el mosquetero, no le aparto de si ya que descubrió que la cercanía e incluso su contacto con aquel hombre le sentaba extrañamente bien. Tomo aire nuevamente, cuanta locura alrededor de ella, sintió pena por su madre y ella que tanto había juzgado la prontitud con la que dejó el luto por la perdida de su padre ahora venía a enterarse que aquello no fue por gusto ya que su tío le había obligado. Era difícil pensar que ese era el hombre al que admiraba y aún había más en todo ese fango por que si de algo estaba segura es que se encontraría con más cosas en su camino.

-Por supuesto que no me es fácil...el comprender tantas mentiras que creí ciegamente todo este tiempo. Aún una parte de mi se niega de manera irracional...es duro, si no fuera por mi padre no le creería nada de esto-dijo sincera sintiendo como los brazos ajenos le soltaban, agradeció el gesto que tuvo al limpiar sus lágrimas asintiendo con la cabeza regalándole una media sonrisa que no llegaba a iluminar sus ojos. Si bien su molestia y decepción le impedían pensar con claridad sabía que no debía descargar su frustración con el.


Su mirada se posó en la figura de Tyler una vez más notando que este había desviado sus ojos de los suyos dejando distancia prudente entre ellos como si en cualquier momento se pudiese retractar de su ofrecimiento, cosa que la rubia no iba a permitir.

- Comento con anterioridad que una de las cosas que se me ocultaba tenia que ver con la muerte de mi padre... que pasó realmente por que a estas alturas un accidente no me parece creíble con todo lo que me a revelado - ciertamente siempre le pareció absurdo que su padre tan buen jinete hubiese perdido el control, en el fondo nunca creyó aquello y siendo que jamás le dejaron ver el cuerpo, ya que el ataúd siempre permaneció cerrado.

Podía soportar la respuesta que esté le daría?, Solo tenía claro que era mejor saber qué pasó verdaderamente que continuar creyendo en cada falacia que salía de esa familia.

Los ojos de la rubia le siguieron hasta verle perderse por el umbral, a donde iba?, Pestañeo varias veces un tanto confundida pero sin duda aprovecho esos segundos para tratar de calmarse y recobrar la compostura, lo cierto era que no la tenía nada fácil...trataba de acomodar toda la información y apoyarse en sus recuerdos de la infancia, las charlas con su padre, los juegos con acertijos que esté le hacía a diario y los que tanto le fastidiaban a la bruja pues a esa edad solo deseaba quizás por ello intuía que en sus charlas con su padre el disfrazo la verdad, debía concentrarse para saber si el le dejo algún indicio de quién tenía que cuidarse y aquello por lo que murió siendo tan joven.

Se quedo sin siquiera moverse, tan quieta como una muñeca de porcelana perdida en sus pensamientos casi enajenada en ellos hasta que de nuevo sus ojos se clavaron en la gallarda figura que representaba el Mosquetero, le llamó mucho la atención que esté sostuviera una charola...por supuesto,por ello le había dejado sola, la verdad era que en un principio le tomo por un descortés cuando sin decir más la dejo con aquella pregunta en el aire


Cuando por fin estuvo cerca solo atino a medio sonreír apesar del malestar que le  aquejaba y la enorme duda que le carcomía, quería oír aquella respuesta con todo su ser quería saber que le sucedió a su progenitor pero sin duda antes de ello debía calmarse lo cual el té que Tyler extendía hacia ella tan amablemente ayudaría a reducir su pesar, asi que asintió a modo de agradecimiento y tomándose un tiempo le dio un pequeño sorbo al líquido caliente para después prestarle toda su atención ahora que estaba un poco más calmada. No le gusto nuevamente lo que esté le contaba pero no hizo ademán de interrumpirle, el agarre en la taza de volvió más fuerte conforme este hablaba, sus ojos delataron el mal sabor de boca que esa información le trajo...como era posible que su sangre le hiciese tanto daño a su padre, sentía que hablaban de dos Edward totalmente diferentes; el que había realizado actos tan despiadados en contra de personas inocentes y aquel hombre honorable que le crío tras la partida de su padre pero la realidad de era otra, todo fue un plan, desde el momento en que hizo contacto con ellas en el funeral de su padre.

- Nos a visto la cara todo este tiempo...el fingió y todo por un anillo?...provoco la muerte de mi padre para obtener la fortuna del Clan... como pudo...ser tan...-le invadió una tristeza tan profunda al igual que irá, impotencia, decepción...sus manos comenzaron a temblar y las macetas colocadas de adorno en aquella terraza mostraron grietas desde la base, estaban apunto de estallar pero por suerte la taza entre sus manos lo hizo primero provocando que saliera de ese trance. Demasiada energía acumulada para controlar, negó levemente con la cabeza agachando la mirada hacia su vestido ahora manchado por fortuna el líquido ya no estaba caliente.- Yo, lo siento tanto...-no hablaba solo por el incidente de la taza. El anillo era tan importante? Por que?, Que hacía su tío dirigiendo el clan si había sido desterrado por su abuelo? Más y más dudas,más verdades por descubrir, que tanto había hecho Edward para llegar a donde estaba actualmente, al frente de los Falivene y su madre, ahora era obvio por que no quería que sus poderes despertarán si ese hombre fue capaz de matar a niños inocentes y cavar la tumba de su propio hermano que le impediría hacer lo mismo con ella.

- Por que busca un anillo familiar...usted sabe donde esta?- de verdad deseo que la respuesta fuera negativa por que la idea de poner más personas en riesgo le revolvía las entrañas. Aunque sabía que no había marcha atrás después de esto y si quería desenmascarar a su Tío y salvar a su madre iba a ocupar la ayuda de ese hombre frente a ella. Sin ser consciente dio un paso y luego otro hacia Tyler olvidando por completo los pedazos de porcelana repartidos por el piso, y en silencio busco su abrigo sentía como si la persona que conocía como su Tío hubiese muerto y ahora en su lugar estuviera un hombre cuya avaricia era su único motivo de existencia. Poco le importo el protocolo ella solo busco refugio en el que parecía ser el único en quien confiar  -Que se supone que haga ahora...- dijo en un susurro sin atreverse a verle, aquel calor ajeno tuvo un efecto arrasador, por unos instantes se sintió tan segura.

Cuando el mosquetero le tomo de los brazos de manera sutil para poderle mirar supo que podía confiar en el, puesto que sus ojos reflejaban la transparencia de sus intenciones, el estaba de su lado no había duda de ello su padre en ese pergamino le hizo entender que debía depositar su fe en el mosquetero y creer en su palabra.

- Yo, no vi el cuerpo de mi padre. Mi madre se encargó de prepararlo sólo ella lo vio...no se quien más tuvo acceso a el aparte de ella..-dijo confirmando que el anillo no estaba con su padre, por que era evidente que de ser así su madre lo tendria y como el mencionaba no estarían en esa posición de ser asi. Entonces donde estaba esa joya familiar? Debían encontrarla antes que Edward, eso les daria un poco de ventaja sobre este. Le miro fijo sin deshacer el abrazo, podía sentir la respiración ajena debido a la cercanía de sus rostros, tan calida...

Ahora que lo decia, podía entender por qué siempre su tío le solicitaba firmas a la abuela, ella apesar de su avanzada edad aún estaba presente en esas "reuniones" que se llevaban mensualmente en la mansión y en toda reunión muchas veces su tío era más como un ayudante de su imponente  abuela paterna. Aunque claro ella nunca se imagino que esto era ante un consejo de cazadores, siempre lo relacionaba a negocios de la familia que su abuela prefería tratar personalmente.
No pudo evitar arrugar el entrecejo al escuchar lo que debía hacer, era difícil después de todo lo que ahora sabia, pero tenía que, no había muchas opciones, ella ya era parte del juego que entre las sombras organizo su Tio y debía actuar como la mejor de las embusteras de aquella sociedad a la que recientemente se había integrado,  si es que deseaba mantener a salvo a su madre y encontrar aquel anillo.

-Si quiero, deseo poder entender todo esto y quizás así encuentre algo que nos pueda ayudar...- el agarre que esté ejercía en ella era tan sutil y respetuoso que lejos de incomodarla le hacían sentirse apoyada por que no podía recurrí a su madre, hacerlo significaba un riesgo para todos. Solo lo tenía a él, hasta que todo saliera a la luz. Sus ojos le mantenían la mirada, ahora más calmada que en un principio -Mi padre siempre escribía entre líneas...desde pequeña me ocultaba los obsequios que traía de sus viajes y dejaba pistas para que yo los encontrase.-dijo a manera de reflexión ya que quizás en esas cartas podía existir mensajes ocultos que los llevará al paradero del anillo, aunque claro había la posibilidad que no hubiera nada en las cartas. Al ver que se acercaba uno de los empleados se separó del Mosquetero de manera sutil, el joven camarero saludo de manera educada preguntando si todo estába bien.

-De maravilla, solo el pequeño incidente con la taza, disculparos por la molestia... gracias- le dedicó una sonrisa amable al ver que el joven recogía los pedazos que quedaron de la taza con un peculiar nerviosismo. Cuando esté se marchó pregunto si no requeríamos algo más yo negué con la cabeza y voltee a ver a Tyler por si este tenía alguna petición, lo cierto era que deseaba leer aquellas cartas cuanto antes.

Al oir su pregunta su mirada se desvió de ese mar con calma que eran los ojos del mosquetero, dubitativa se planteó el echo de contarle sobre sus recientes clases de magia pues nadie sabía que ella estaba aprendiendo con la ayuda de un peculiar hechicero, lo cierto era que convivirán demaciado debido a los eventos que estaban susitando por lo tanto entre menos se ocultasen mejor, la confianza era un factor casi obligatorio entre la hechicera y el mosquetero.

- La verdad, no como yo quisiera...me está costando no es fácil, por fortuna tengo un mentor muy experto.- le dio a entender que estaba tomando "clases" por asi decirlo  aunque no le iba a decir el como coincidió con el hechicero que ahora le instruía ya que el decir que le conoció debido a una estafa no sonaba exactamente muy bien, ella a estas alturas ya se lo tomaba con gracia, pero no todos podían verle el lado cómico al asunto.-Se que puedo controlarme, hasta hoy estoy segura de no haber levantado sospechas...-dijo notando que aquel apuesto rostro parecía un tanto preocupado y no era para menos pues ella estaba rodeada de cazadores en esa casa, un descuido implicaba poner en riesgo vidas.


-Lo soy puede estar tranquilo...En un principio no utilice magia en la mansión pues tenía temor a que mi madre se enfadase y ahora después de enterarme que duermo bajo el mismo techo que el enemigo, créame que no lo haria. A menos que la situación llegase a un punto insostenible- sabía que debía pensar en el peor de los escenarios, como el que terminaran descubriendo sus dones o su Tío quisiera dañar a su madre, no habría de otra mas que luchar por su vida y la de su progenitora, pelearía de ser necesario. No podía negar que era un total alivio que Edward ignorase la aparición de Tyler en su vida y debía ser precavida para no ponerlo en riesgo.

-Se que se siente comprometido por los lazos cercanos con mi padre y si en algún punto desea dejar todo esto, créame que no le cuestionare.- murmuro dejando en claro que no quería ser ayudada por obligación o que se sintiera atado por la promesa a su padre.

Se quedo quieta como si de piedra estuviera hecha pues le invadió una extraña sensación, la cercanía con el mosquetero era tan reconfortable que solo atino a cerrar los ojos al sentir la manos varoniles recorrer su rostro acomodando un mechón de cabello, porque le provocaba ese sentimiento no era normal aquello apenas y le había tratado. No podía tomarse esa confianza con el pues que pensaría de ella, no es que le importara o si?. Sus palabras le provocaron confusión así que abrió sus ojos y los clavo en el intentando saber a qué se refería por que ella no le recordaba de pequeña.

-Me lo prometió?...-era evidente que no sabía aque se refería hasta que los labios del hombre reposaron en su frente, ese simple gesto la abatió, fue tanto que por un momento no sintió que estuviera en la terraza, si no en un campo abierto y ella lucia tan pequeña...ahí estaba Tyler también, solo que esté estaba dándole indicaciones a un lado suyo tomando las riendas de su potrillo. Una escena tras otra se fueron repitiendo, momentos que la bruja olvidó conforme su infancia pasaba y este reducía sus visitas hasta el punto de no verle más. El lucia igual, el tiempo no había pasado por el ni un poco, incluso pudo revivir atrás vez de esas visiones esporádicas la admiración que sentía por qese hombre, la manera en que la trataba...
No supo en qué momento sus manos habían terminado tomando las de Tyler en un gesto demaciado personal, con delicadeza le dejo girando su rostro para esquivar ese mar azul que era su mirada se sentía apenada, cosa que no le ocurría a menudo.

-Ya veo...- menciono un tanto desconcertada, no sabía que sentir o como hablarle, Jezabel siempre le vio como un gallardo príncipe incluso a si solía referirse a él, lo cual en ese momento la ponía en una situación un tanto embarazosa.-la verdad... recuerdo muy poco, era muy niña ya sabe que uno a esa edad ve todo muy diferente- dijo justificando algo que no se había mencionado.

-En ese caso, no pienso ofender su honorabilidad Monsieur.- menciono dando a entender que no volvería a sugerir que dejase la situación y por supuesto evadiendo sus recuerdos de la infancia, que vergonzoso le resultó aquello, solo esperaba que él ya no le viera como una niña a la cual rescatar. Su príncipe...quien diría que no era un vago recuerdo, pero que estaba pensando, había cosas más importantes que contemplar que el hecho de sentirse nerviosa por el mosquetero.-Que pasaría si mi Tío se entera que está aquí en París? Cree que le mande a vigilar?pregunto recobrando la compostura.