Viviendo la vida (evelyne)

por **Jean Baptiste Fontaine3** Lun Ene 10, 2011 12:09 pm

llegue al bosque pues me gustaba mucho estar aqui ya que corria riesgos y eso era lo que me gustaba hacer, a lo lejos vi un arbol el cual se me hizo interesante ya que no habia visto uno igual en toda mi vida camine hacia alla, en el transcurso del camino comenze a escuchar ruidos detras de mi y mi corazon empezo a correr a mil kilometros por hora me detuve un momento y gire mi cabeza rapidamente, no encontre nada fuera de lo comun, comenze a caminar de nuevo y comenze a escuchar los ruidos aun mas cercas de mi, pare y depronto vi.......

por **Hélèn Laughton** Lun Ene 10, 2011 1:20 pm

Quería desde hacía algunos días, dar un paseo por el bosque al atardecer. A duras penas había podido si escapar de la vista de mi madrastra, que al parecer estaba empecinada en mantenerme encerrada en el Chalet. ¡Loca!, ¡simplemente loca!. Por suerte mi fiel Freya jamás quería quedarse en el establo, y aprovechando el buen tiempo de invierno tomé la decisión de salir a cabalgar.

Cubierto mi cuerpo casi completamente por una capa con caperuza, con la cual escondía mi rostro, llegué finalmente al bosque. Como siempre, portaba a mis espaldas mi arco y flechas por cualquier tipo de situación, ya había tenido la mala suerte de encontrarme con cazadores furtivos a los cuales bien o mal, les había dado de su merecido.

Mi risa juguetona escapó de mis labios mientras desmontaba, ajusté al robusto cuerpo de mi fiel Frisón la espada que había tomado "prestada" de la colección de mi padre. Ya que aún, no conseguía una propia. ¿Quien le vendería una espada a una "dama"?. Tome las riendas del corcel, y lo lleve conmigo algo mas adentro del bosque. Donde pude oír pasos con mi agudo sentido. ¿Sería acaso un cazador?.

Me apure, y ate al caballo a un árbol. Camine agazapada como un animal al acecho mientras preparaba mi flecha para atacar. Cuando estuve suficientemente cerca, vi el contorno de un cuerpo claramente masculino. Le apunté, veía su cuerpo oscurecido por el reflejo del sol a su espalda... - Solo un poco mas... - murmuré mientras jugaba con mi rebuscada concentración, cuando el hombre se movió y ¡Oh sorpresa!...

La flecha salió disparada a cualquier lugar, y terminó clavándose en la corteza de aquel extraño árbol. ¡Dios santo!, casi mataba al Príncipe de París. Era mejor que me fuera, si acaso me descubría por mayor mal entendido o no, se me acusaría por asesinato... Vaya, mi padre seguramente ya no me perdonaría esta ultima torpeza. ¡Perdería la cabeza!. Me levante asustada, tomando de mi sencillo vestido, pero que dejaba en claro que pertenecía a una clase social alta, al igual que mi peinado.

- Por el santo Grial, que no me descubra.- Rezaba nerviosa mientras tironeaba de las ramas para sacar mi vestido.

por **Jean Baptiste Fontaine3** Lun Ene 10, 2011 1:38 pm

Permaneci parado por unos momentos y me gire para ver lo que estaba tras de mi, cuando de pronto vi una flecha que se acercaba hacia mi rapidamente paso justo entre mi cabello, por fortuna no me dio, pero quien habia sido quien me dije un poco exaltado.

Vi que detras de los arbustos habia alguien tirando de su capa para poder escapar pero eso no sucederia, corri hacia alla sin darle oportunidad de volver a tirar -- quien eres, que te sucede -- dije llegando hasta la sombra negra que estaba tras del arbusto corri mas rapido para despues estar a centimertros de la sombra

por **Hélèn Laughton** Lun Ene 10, 2011 1:51 pm

Los ojos me quedaron como platos cuando le oí los pasos correr hacia mi, cortando algunas ramas y estando cada vez mas cerca. Tironee casi frenética de mi vestido pero, no lograba zafarlo de las espinas... Yo y mi tan buena suerte. Empezaba a odiar París, y no hacia mas de una semana que había llegado.

Y eso no terminaba ahí, ya lo tenía casi encima, a unos escasos diez pasos. De la desesperación y la impotencia casi podía largarme a llorar y dar una imagen bastante lastimera, pero no... Yo odiaba ese estilo de cosas. Me mordí el labio inferior, con la cabeza gacha y dejando de tironear mi vestido que ya había empezado ajarse. No tenía mas salida, y no tenía mas opción que hacerme responsable de los cargos... Para la próxima vez, mejor que mataran a un pobre venado.

Bajé la caperuza de mi capa, mostrando mi rostro. Mis cabellos castaños cayendo ondulados sobre mis hombros, y los aros de perla, obsequios de mi madre. - Lo siento su majestad. - Dije bajando la mirada y haciendo una reverencia de las mas honrosas que jamás había hecho por nadie, jamás en la vida, hasta ahora.
El vestido me tironeó a la hora de extender por este mis manos para hacer la reverencia, y en un espontáneo ataque de ira por todo lo sucedido le mande el jalón de su vida zafándose así de las espinas del arbusto. ¡Perfecto!, como no se desprendía antes el condenado.

Respiré profundo y suspiré, devolviendo la mirada de forma penosa al Príncipe, y sin dejar mi postura reclinada. - ¿Os serviría de algo confesadle que lo he confundido con un cazador?. - Levanté un poco mis cejas tras las palabras ya dichas, mientras una sonrisa penosa se abría paso por mi rostro. Pero, era la verdad mi Señor, casi le arranco la cabeza por pensar que quería asesinar a un animal...

por **Jean Baptiste Fontaine3** Lun Ene 10, 2011 2:05 pm

mientras corria hacia la sombra vi que era una hermosa mujer preciosa diria yo, despues de ver su hermoso rostro baje la velocidad para quedar a unos pasos de ella vi la reverencia que hizo y lo que dijo me dio una explicacion clara de lo que habia sucedido -- pero que haces aqui -- dije un poco exaltado y molesto

por **Hélèn Laughton** Lun Ene 10, 2011 2:16 pm

Sin poder disimularlo alcé por de mas una de mis cejas. ¿Ahora era mi padre también?. - He venido de paseo. ¿Acaso no se puede?. - Largue una ligera risa, yo y mi gran bocota. Mas bien, era mi bocota la que me metía en problemas. - Tal vez no es el lugar mas recomendable para una dama, pero... - Mire el arco y la flecha, y a lo lejos a mi corcel. Me enderecé y saqué las hojas secas de mi vestido, cuando se me ocurrió la respuesta justa.

- Tampoco creo que sea el lugar mas seguro y recomendable para un Príncipe. - Sonreí para luego parpadear un par de veces con recalcada travesura brillando en mis ojos. - Prometedme que no dirá nada. - Dije casi rogando y juntando las manos mientras mis mirada suplicaba por aquella piedad. - Mi padre se decepcionará, jamás he sido ni seré la hija que el esperaba tener. Pero... - Mi rostro se puso serio de repente, pensar nada mas en ser la muñeca de porcelana con la que soñaba era horrible. - ... Jamás podría ser una muñeca de porcelana encerrada en una burbuja como todas las demás. - Ahora que lo veía de esa forma, comenzaba a creer que mi padre se merecía una hija mejor.

- Es mas, ya me marcho, os dejo. - nuevamente estaba nerviosa, me agarraban ciertos temblores mientras me agachaba a tomar mi arco y mis flechas. - Apenas he llegado hace una semana su Majestad, provengo de Inglaterra. No conozco París. - Le digo abrazada a mis artefactos. - Y ya es la segunda vez que me meto en problemas. - ¿dramática?, si siquiera supiera la persecución que me dieron esos cazadores la anterior noche...

por **Jean Baptiste Fontaine3** Lun Ene 10, 2011 2:20 pm

sonrei un poco con lo que dijo -- no te preocupes te comprendo algunas veces tenemos que tener aventuras y nunca estar encerrados es orrible -- rei mientras decia lo de su padre -- pues si quieres te puedo mostrar paris -- dije con una sonrisa traviesa de verdad queria conocerla mas era hermosa no podia dejarla ir a si por nomas

por **Hélèn Laughton** Lun Ene 10, 2011 2:47 pm

Mi bocota a veces hacia cosas buenas, solo a veces.... Muy de vez en cuando. Me sonreí casi incrédula por lo que decía y colgando las flechas a mi espalda dejé apoyado el arco en un árbol. - La verdad estaría encantada. - Sonreí entonces con cierta timidez pero, dejando ver un poco mis dientes. - Sucede que la noche anterior un par de maleantes... - ya estaba hablando de mas, entrecerré un poco mis ojos y largue una risa nerviosa.

- Olvide lo que acabo de decir. - dije observando como Freya, mi Frisón tiraba de sus riendas para desatarse del árbol. Hasta conseguirlo y acercarse al lugar para pastar cercanamente. - Ouh, alguien quiere que lo presenten. - Dije mirando al caballo y caminando hacia él para acariciarlo.

- Freya, te presento al Príncipe de Paris. - Me sonrio, y le susurro al caballo al oído. - No vayas a decir que casi lo flecho. - me separé y observé al hombre con una sonrisa, sabiendo que podría haberme escuchado claramente. - Su majestad, el es Freya. Mi Frisón y fiel compañero de aventuras. - como esta, por ejemplo. Tome por los estribos al robusto corcel y lo volví atar en otro árbol, esta vez mas cerca.

- ¿Y que fue lo que lo trajo aqui?, es decir teniendo en cuenta que es un príncipe, y que en el bosque hay tantos mal vivientes....- entonces me dije: Cierra la boca Evelyne, si fuera por eso, tu tampoco deberías estar aqui.

por **Jean Baptiste Fontaine3** Lun Ene 10, 2011 2:54 pm

sonrei era increible lo que una niña podia hacer en tan poco tiempo -- eres un poco arriesgada no -- pregunte riendo y dirijiendome hacia ella cuando caminaba hacia su caballo, escuche lo que le dijo al caballo y se me hizo un poco inmadura, hablarle a un caballo valla que chica rei para mis adentros, rei -- veo que lo consideras humano no -- dije riendo

por **Jean Baptiste Fontaine3** Lun Ene 10, 2011 2:54 pm

sonrei era increible lo que una niña podia hacer en tan poco tiempo -- eres un poco arriesgada no -- pregunte riendo y dirijiendome hacia ella cuando caminaba hacia su caballo, escuche lo que le dijo al caballo y se me hizo un poco inmadura, hablarle a un caballo valla que chica rei para mis adentros, rei -- veo que lo consideras humano no -- dije riendo

por **Hélèn Laughton** Lun Ene 10, 2011 3:07 pm

- O tal vez soy mas salvaje de lo que aparento. - Dije con unas piscas de misterio, aunque no podía decir mas que eso, ya que ciertamente, no podía revelar mi secreto. Cambiaba mi forma a la de tres felinos diferentes, pero aquel "don", se convertiría en mi condena si acaso alguien lograba descubrirlo, ya que los que como yo podían hacerlo, son considerados bestias del demonio o en su defecto, el demonio... Embrujados. Vallase a saber que mas.

- Lo siento si lo incomodé, pero... Me paso mucho tiempo hablando con los animales. Mi madre falleció y... Bueno, soy única hija. - Sonreí tenuemente no quería poner mas drama a lo ya sucedido.

- Me gustan las aventuras... Pero, cuando largue el flechazo del cazador. Créame, lo ultimo que quería era ser descubierta. - Dije con una sonrisa no muy convencedora. - Eché a la fuga, y me metí en los barrios bajos de Paris... Novata. - chisté riendo de aquellos recuerdos. - En fin, como verá mi padre solo quería una mujer que deseara darle nietos. No jaquecas. - ajusté la espada a la montada del caballo, algo pensativa y cabizbaja.

- De todas formas aún no esta enterado. - Le observé de reojo y añadiendo una sonrisa le pregunté: - ¿Cabalga?. -

por **Jean Baptiste Fontaine3** Mar Ene 11, 2011 10:58 pm

baje mi cabeza para ver el suelo y a la misma vez negar con la cabeza y reir un poco, subi mi cabeza para mirar esos hermosos ojos -- no se preocupe su padre no sabra nada de donde se encuentra ahora -- dije riendo -- le dire algo no le hare nada porque es una hermosa mujer y no me gustaria afectar eso -- dije riendo un poco la ultima pregunta que me hizo me hizo recordar ese dia donde asuste a mi hermana en el palacio eso fue divertido -- que si cabalgo -- dije sarcastico -- es uno de mis hobbies amo a los caballos y veo que su yegua es hermosa -- dije acercandome a acariciar su lomo

por **Hélèn Laughton** Miér Ene 12, 2011 12:59 pm

Junto con algunos de sus halagos, vino la afirmación de que teníamos al menos un gusto en común. Aunque mi rostro cambio un poco cuando le oí decir que Freya era una yegua. Si el pudiese entender lo que estaba diciendo el Príncipe, seguramente ya hubiese tirado una buena patada.

-Ehee.- Quice interrumpirle mientras se acercaba acariciar a mi corcel. Mordí mis labios, puesto que no sabía como explicarle tal equivocación. - En realidad... - comencé a tirar la liana para hacer la corrección de la forma mas sutil posible. - Es potro. - le susurré a manera de sonar menos ofensiva.

- Y le agradesco su majestad que me perdone la vida por tal error. - Dije despegando mi mirada de el, nada mas recordar que le estaba apuntando con ansias de matarle... Y pensar que es tan guapo. Pensé para mi misma. Pero, una muchacha como yo, no tendría ni la mas mera oportunidad de estar con alguien de la realeza, es decir... Ellos buscaban mujeres sofisticadas, finas, bien educadas. No que anduvieran en las tardes atacando con flechas a gente desconocida, ni hablandole a los caballos como si fueran locas.

Me reí un poco por mis propios comentarios mientras acariciaba al caballo. - ¿Desea dar una vuelta?. Solo he de advertirle que aún es algo recio, no lo es conmigo... Pero, lo he notado asi con mi padre. - Le expliqué mientras le extendía las riendas.

por **Jean Baptiste Fontaine3** Jue Ene 13, 2011 10:11 pm

sonreia alegremente acariciandolo ya que me encantaba estar con los animales pero en cambio yo casi no hablaba con ellos rei para mis adentros, cuando me dijo que el caballo era potro me moria de la verguenza y mi sonrisa disminiyo un poco, queria salir de ahy ya que se podia ver a leguas que era potro, que era lo que me pasaba porque estaba tan distraido me dije a mi mismo sera que.... no no creo o siii.... me cuestione por dentro.

escuche que me ofrecio montar su caballo y por tal de alejarme un poco y que pasara la pena que tenia asenti -- por supuesto que me encantaria -- dije tomando las riendas del caballo y asi montarme en el -- espero que no sea un loco como un potro que trato de entrenar en el palacio -- dije riendo un poco y acomodandome para cabalgar

por **Hélèn Laughton** Vie Ene 14, 2011 11:42 pm

Noté su incomodidad después de haber dicho que no era yegua, que era potro, pero me decidí por no tocar mas el tema, ya que el tampoco había hecho mas cuestión sobre ello. A cambio aceptó cabalgar a Freya, lo cual me alegro bastante, ya que la mayoría despreciaban al caballo, o mas bien le temían por su gran altura, su cuerpo robusto y hasta a veces por su comportamiento temperamental.

Aunque debía de advertirlo, no sucedería nada si no lo hacia, ya que si comenzaba a ocasionar problemas yo estaba allí para serenar sus tempestades, como siempre lo hacia. Y no era porque realmente tuviera una conexión fraternal con el animal, mas yo creo que es por razón a que yo misma en gran parte también lo soy, y quiero y respeto la libertad de él tal cual.

- Bueno, mi recomendaciones son; no le patee las costillas para que eche a andar, ni le tironee muy fuerte de las riendas. Con eso creo que conservara el buen humor. - Afirme, volviendo mis labios casi un hilo tras pensar que mas podría ser de ayuda. - Si quiere que trote, golpee con suavidad las riendas a su costado, y si quiere que marque paso... Pues, - alli estaba mas complicado para explicar, ya que yo comenzaba a hacer sonidos similares a los de un besos. - Bueno,debe hacer sus labios asi... - dije frunciendo un poco los labios, e imitando el movimiento y el sonido. - Es simple, como largar un beso al aire. - El caballo se movió, empezando a marcar el paso, como cual caballo de la realeza... Sublime y seguro.

- Bueno... Creo que su paseo ya empezó - Digo riendo mientras veo al caballo avanzar. - Estaré cerca por si quiere ponerse recio. - Comencé a caminar a un costado, dejando mis pertenencias y observándolo cabalgar.

por **Jean Baptiste Fontaine3** Sáb Ene 15, 2011 10:19 pm

despues de que subi al caballo senti inmediatamente el poder del animal era algo que no habia sentido antes con ningun caballo antes pero me gusto me encantaban las emociones fuertes en especial ponerme en peligro ya que me encantaba hacer los deportes extremos, vi como tenia que hacer para poder marcar el paso y rei un poco para despues jugar -- que me estas dando besos -- dije riendo mientras sentia el poder de la pisada del caballo

por **Hélèn Laughton** Dom Ene 16, 2011 2:35 am

Su comentario me llenó de pena, al punto de llegar a sentirme avergonzada y sonrojada. Le sonreí intimidada y continué caminando algo alejada del caballo sin observarle demasiado, mas colocando mi vista en el camino. - Bien podría darle un azote al caballo. - Le dije sin mirarlo, casi como si pensara en voz alta. Pero, para nada, lo decía claramente para incomodarlo.

Reí traviesa para luego acercarme un poco mas. - ¿Molestaría si le pregunto cuantos años tiene?. - me daba curiosidad, puesto que mis mentores habían mencionado su nombre, y hasta mostrado alguno de los frescos en los que el aparecía y por eso había podido reconocerlo, pero jamás me habían mencionado su edad.

por **Jean Baptiste Fontaine3** Dom Ene 16, 2011 6:49 pm

mientras el caballo seuia caminando y le dije que si lo que si me lanzaba besos vi que se sonrojo y agacho la cabeza vergonzosamente pero no quise tocar mas el tema ya que si no se moriria de la verguenza -- quieres que me caiga de tu potro verdad -- dije riendo cuando me dijo lo del azote.

escuche que me pregunto mi edad y pense me vere tan viejo o tan joven que no puede adivinar mi edad me pregunte a mi mismo -- tu cuantos piensas que tengo -- dije esperando que adivinara mi edad

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