Alessandra Di Stephano

×Lugar de Origen: Nació en Florencia, Italia; pero se crio en España×

×Fecha de Muerte: 18 de marzo de 1332×

×Habilidad/Poder: Persuasión, Sanación acelerada , y Manipulación de la memoria×

×Cabello ondulado, castaño y algunas veces lacio, todo depende en qué forma Alessandra lo quiera llevar. Sus ojos son amedrantados y de color gris. Su piel es de un color bronceado, pero fina y suave al tacto, además de ser fría. Es de estatura mediana, no pasa de los 5’5, además de ser delgada, con una cintura fina. Sus pies son pequeños, aptos para el baile, lo que le hace más fácil su tarea. Sus dedos de sus manos son largos, lo que hace que sea una excelente pianista.

¿Cómo prefieres que comience mi descripción? Para mi seria sencillo hacerlo con mis actos, pero creo que de esa forma podría asustarte…

Maliciosa, frívola y sin ninguna lealtad a nadie, salvo a ella misma. Podrían ser unas muy buenas formas de describir a Alessandra. Prepotente y arrogante, no sólo es así por su condición da vampira, ya siendo humana mostraba esas mismas características. Ama el baile, lo único que ama, ya que nadie más osa de esa dicha. Sensual y apasionada cuando realmente le interesa, prefiere la soledad, aunque cuando está rodeada de personas, desea ser el centro de atención. Es muy buena con el piano, desde pequeña ha tenido muy buenas tácticas con este, igual que con el baile.

Jamás interrumpas mi baile, o te ira mal, muy maldice. Cada una de sus palabras llenas de malicia y sensualidad.

Sarcástica hasta más no poder. Siempre debes creerle a sus amenazas. Es mejor salirse de su camino, ya que no es de las chicas que aguante mucho. Le encanta la manipulación y el coqueteo, algo en lo que es experta. Nunca la veras triste, y aunque se sienta de esa forma, jamás lo demostrara. Su orgullo es demasiado grande como para sentirse débil ante otra persona, preferiría la muerte a ello. Y en cuanto amores…

¿Amores yo? ¡Qué patético! se mofa, con su tono burlón, tan característico en ella.
Esa sería su respuesta. El amor es algo que no está en su mundo, al menos el amor hacia otra persona. Prefiere la pasión de una noche, y luego, “si te vi, ni me acuerdo”. Le encanta jugar con sus presas, hacerlas caer en la tentación, rodearlas con su frescura y orgullo, para luego acabar matándolas de formas verdaderamente asqueantes. Sus únicos verdaderos amores son la sangre humana y el baile, su amado baile.

Desde joven a estado involucrada en ese arte, y lo hace con mucho esplendor. Otro amor que no puede dejar a un lado es su gusto por la moda. Desde joven, fue una de las jóvenes cortesanas más elegantes de España, era la doncella mas cotizada en aquellas épocas. Pero al ser siempre, incluyendo cuando era humana, una chica demasiado acelerada para su edad, perdió esa cotizada doncellería siendo una joven adolecente, pero nunca le parecio algo malo, al contrario fue algo que disfruto en todo su esplendor, ser la amante de un rico conde trae sus beneficios, y de eso ella es testigo.

¿Cómo odiar algo que te ha dado tanto? se pregunta a sí misma.
Se refiere a ser vampira. Muchos odian serlo, pero ella jamás lo odio. ¿Por qué odiar ser un vampiro? Inmortal, bella y joven por siempre. Muy en el fondo, a pesar de que se dice a sí misma que ama su forma de ser, Alessandra siente cierto asco hacia lo que se transformó. Al menos cuando era humana tenía un corazón palpitante en su pecho. Ahora ni siquiera tiene eso...

Nacida el 13 de febrero de 1307. Alessandra nació en una familia apoderada de la ciudad de Florencia. Para ese entonces, el símbolo de poder recaía en las familias mercantes o banqueras, siendo su familia de esta última. Su padre deseaba un hijo varón, que fuera su sucesor en el reinado, pero lamentablemente nació una hija, la que llamo Alessandra, en nombre de una tía abuela por parte de su padre. Tiempo después, cuando la chica tenía cerca de 2 años, su madre sufrió un accidente, lo que no permitió que ella volviera a embarazarse.

Su padre mantuvo muchísimas amantes, dándole hijos varones, pero ninguno podría acceder a la fortuna, debido a que ninguno era un hijo legitimo. Alessandra, luchaba por conseguir un trato especial por parte de su padre, pero este jamás mostró ningún interés en ella, y como es de suponer, la chica al crecer dejo de estar mendigando el cariño de su padre. Siendo muy pequeña, sus padres se mudaron a España, donde la familia de su madre residía.

Joven, inteligente y astuta, además de ser muy hermosa, la joven comenzó a conquistar y a llamar la atención entre los jóvenes de la época, pero ninguno le atraía, ya que según ella, eran hombres sin ninguna aventura, y eso no le atraía para nada.

Su primera relación, fue con un joven soldado, aquel “amorío” por llamarlo de algún modo, le causaba gracia e incluso felicidad, pero aquel joven fue asesinado en batalla. Lo lloro, cierto, él era el único hombre que había podido conquistar su corazón, pero a diferencia de las demás doncellas de esas épocas, ella no le mostró tanto luto como era de esperarse, todo lo contrario, al par de meses se revolcaba con uno de los condes de España, acto que hizo que su padre le pegara en más de una ocasión.

Como es de esperarse, a Alessandra se le obligó a contraer nupcias con el conde y a pesar de que no deseaba, accedió. Se volvió condesa a eso de los veintidós años. No tuvo hijos con su marido, ya que no le interesaban los niños. Siempre solían decirle que ella atraía la muerte, por que después de todo, ¿cómo era posible que su antiguo amante hubiera muerto y luego, su marido también? Ella jamas hizo caso de los comentarios. Realmente no le interesaba los chismes.
Pero bien, lleguemos al lugar que estáis esperando, ¿Cómo fue que se convirtió?

Sencillo, una noche, específicamente el 18 de marzo de 1332, Alessandra participaba en una fiesta de mascaras, en el palacio del conde de Verona. La doncella asistió junto a algunas criadas, casi compañeras, y quedo perdidamente encantada de un joven que bailaba muy bien. Jamás le vio su rostro, pero a la luz de la luna, si pudo visualizar que aquel joven no era del todo un joven normal. En el jardín del palacio, el chico la mordió, y luego la obligó a beber de su sangre. La chica horrorizada, salió del castillo, y corrió a refugiarse entre las plantas de un bosque, pero la mordida había sido tan fuerte, que le provoco una hemorragia. En aquel bosque, la joven procedió de ser una chica normal, a volverse una vampiresa.

Sin conocer a su creador, la joven aprendió todo lo que sabe sola, algo que hizo que su odio hacia todo lo que la rodeaba incrementara. Pero para su sorpresa, ella no se odiaba a ella misma, no, ella se veía como la victima de un lugar malo, lleno de inmundicia, llamados humanos, porque siempre le echan la culpa a los monstruo, sin darse cuenta de que ellos pueden llegar a ser unos también.
Actualmente vive en París.



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×En sus cualidades se podrían destacar que es muy buena escuchando, y aunque parezca burlona, es muy difícil que ella olvide algún acto que hayas hecho hacia ella, sea malo o bueno.
Familia
×Luciano Di Stephano- Padre. Su relación con el siempre fue una bastante fina y corrompida. Su padre deseaba tener un hijo varón, y en cambio nació Alessandra. En su niñez, Alessandra trato muchísimas veces en buscar el amor de su padre, y el orgullo de él, pero al llegar a su adolescencia y ver que su padre realmente no le interesaba su única hija, dejo de buscar su amor, y en cambio, lo ignoraba y desobedecía cualquier orden de él, hecho que le llevo a tener varias golpizas por parte de este, ganando el odio de su hija.
×Adele Di Stephano -> Madre. Una mujer de agallas, y a la que Alessandra veneraba. Gran parte de su personalidad es herencia de su madre, que le inculco la seducción como algo para alcanzar todo lo que quisiera. Adele era muy buena bailando y en el piano. En general, Adele era la persona quemas se ocupaba de Alessandra, y gran parte de su personalidad, por no decir completamente, es a causa de ella.

×Estado Civil: Viuda

×Pareja Actual: ---
×Orientación Sexual:
Heteroflexible