Seducction [Privado]

por **Yohann V.Wood** Dom Mar 06, 2011 10:43 am

-Dudó que le hubiera oido de primeras, colocó las manos en la madera de aquellas puertas cansado de llamar, habia solo llamado una vez para ser sinceros pero tenia impaciencia suficiente como para empezar a caminar hacia atrás, quería una noche salvaje y ella su querida amante era la unica que podía darselo...su aspecto era de una virgen que no habria roto un plato pero cuando la tenia en sus brazos era como una especie de mujer distinta que satisfacia todos los mas bajos placeres de Yohann.

Le dejó un papel en el que escribia “ Te espero en la taberna, si vienes estaré allí, sino, espero que no aparezcas pidiendome perdon a mi casa” la gente le miraba sobre todo por las ropas que llevaba, una camisa negra con una chaqueta apegada al cuerpo, unos pantalones de seda y zapatos que la mayoria envidiaban. Los lujos, el dinero, todo era por lo que el mundo se regía por el oro, el cobre, la plata y unos papelitos que harian hasta al más callado y vulnerable matar por un poco de dinero.

Marchó a la taberna, no era un lugar al que quisiera ir pero no mostraba esa sensación de asco directamente, el habian dicho que tenía que ser más indulgente con las personas especialmente con aquellas inferiores, por fin, suspiró abriendo la puerta de la taberna para dirigirse a una de las mesas vacias, pidió una botella de ron, otra de un licor mas suave esperando por la presencia de su chica, sabia que no le iba a fallar...al menos esa era la confianza que poseía hacia ella-

por **Vanessa Siegert** Dom Mar 06, 2011 12:53 pm

Debía admitir no había tardado ni 5 minutos en ir a ver quien llamaba, sin embargo sus sentidos felinos le decían quien era desde antes pero no deseaba bajar en camisón o algo similar, ante todo era una dama, y se permitía estar siempre lo más presentable posible pasara lo que pasara. Tomo la nota sonriendo por el comentario de ‘no pedirle perdón a casa’ y de inmediato le dio órdenes a su ama de llaves de que le preparase lo que debía llevar.

Mientras caminaba hacia la taberna no podía evitar pensar en cómo había comenzado todo eso; al acabar ella abandonada por aquel hombre – que ahora había vuelto a parís- había estado algo perdida en cuanto a dirección que debía tomar, había sido así entre reunión y reunión que había conocido a Yohann, lo primero que había escuchado había sido su lengua mordaz… Y quizá eso era lo que la había hecho acercarse a él. Por esa razón muchas veces compartía esos comentarios, aunque quizá no en el mismo tono, pero ¿A caso importaba? Compartían una relación que a los dos le satisfacía, pero la ventaja quizá, era que ella sabía que él no se enamoraría de ella, aunque sabía que la quería y confiaba en ella suficiente como para que Vanessa jamás le traicionara, Y lo mismo se podía decir de ella… aunque ella se encariñara mas con Yohann sabia a qué atenerse con él y eso les daba un grado de complicidad suficiente para no tener problemas entre ellos. El extraño señor que lograba liberar en ella todo aquello que incluso desconocía…

Entro a la taberna , dando un rápido vistazo dándose cuenta que llamaba la atención al entrar, bueno, sobre todo un lugar como ese, pero ella ya lo conocía bien, tanto como duquesa que era como plebeya que a veces aparentaba como siempre. Noto de inmediato al elegante hombre y solamente sonrió inclinándose a su espalda dándole un beso suave en el cuello -Espero no haberme tardado- susurro con dulzura rozando al hablar la piel para después dar la vuelta y verlo de frente -Buenas noches, querido Yohann-

por **Yohann V.Wood** Jue Mar 17, 2011 12:17 pm

-Inicio el vaiven de sus dedos con las botellas que tenia en la mano, desgraciadamente tenia ganas de beber pero la limpieza no era una de las asignaturas aprobadas de ese sitio, no habia mas que verlo e incluso notarlo que cuando le trajeron la botella el vaso no cumplia los requisitos previos para alguien como Yohann de un nivel que estaba bien claro muchos envidiarian al verle pasar. Se alimentaba de la envidia de las otras personas no iba a negarlo que bien le estaba encantando que la gente de Paris le mirase con cierta ironia, despues de todos ellos eran unos insectos.

Alguien quiso sobrepasar el limite, era ella podia oler su aroma como tambien sentir la dulzura de su voz cuando la pregunta era ¿porque demonios se habia interesado en ella? se podia ver a todas luces que ella era alguien muy dulce, parecia una muñeca de porcelana era atractiva de eso no habia duda pero el buscaba algo mas que un cierto atractivo, gente lista e inteligente era lo que le hacia sentir pleno y no gentuza como la mayor parte del mundo, le gustaba la gente aunque no fuera atractiva de un intelecto que pudiera estar horas charlando o debatiendo, no buscaba a una cabeza hueca que le interrumpiese en cualquier hora del dia-

No. He de reconocer que no te has tardado

-Su piel casi sufre ese erizamiento inicial en aquella zona tan sensible de su cuello, lo dominó como siempre habia hecho con las emociones volviendo a mirarle a los ojos, agradecio que no se hubiera tardado porque beber solo aunque era lo que mas solia hacer no era uno de sus hobbies, asi que dejó los vasos cerca, uno para ella y otro para mi. De nuevo esa dulzura en su forma de sonreir, ese azucar innecesario le habia hecho casi suspirar cuando no podia sonreir, ella lo elegia asi, no era de esos caballeros que seguian más de cerca esos modales que sabian tratar a las mujeres como ellas deseaban...colocó su menton en la palma de su mano volviendo a beber un trago de ron-

¿Quieres que te pida otra cosa?

-Señalo, casi con gentileza-

por **Vanessa Siegert** Jue Abr 21, 2011 10:51 pm

La chica solamente admiraba cada movimiento de el, era una persona demasiado intrigante para ella y esa había sido, en primera instancia, el por que de que se hubiera acercado tanto a el como para terminar de esta manera mas 'intima' . En realidad Vanessa no le pedía nada a Yohann, por que no tenia ninguna cosa que necesitara de el mas que su amistad, compañía y esas noches que a ambos tanto les gustaban. Sonrió simplemente para sentarse mirando su aparente hastió aunque agradeciendo las molestias que el llegaba a tomarse por ella, pequeñas quizá pero para ella significaban mas que todo el oro del mundo.

Se sento frente a el simplemente mirando un pòco alrededor notando como habia muchos que de vez en cuando , medio discimulado, intentaban mirarlos quiza preguntandose que hacia una pareja como esa en esos lugares. Tomo el baso mientras que soltaba una risita complice- en realidad no necesito otra cosa, tienes los gustos mas refinados que conozco, beberia con los ojos cerrados algo que tu me dieras asi fuera veneno- menciono mitad broma , mitad verdad, el, ese hombre tan poco ortodoxo para la epoca en la que vivian se habia ganado mas que su confianza o su cuerpo.

Ademas, ella amaba las ideas de Yohann , despues de algun idilio pasional entre ambos siempre habia alguna mencion de algun tema que terminaba en discusiones cultas sobre los mismos, ella tenia su caracter debajo de toda esa dulzura y el lo conocia, conocia sus encantos y por supuesto , conocia su fiereza interna. El convertirse en una emperatriz gatuna tenia sus ventajas, movio un poco el vaso para despues estirarse y darle una suave mordida al labio inferior de el - Te ves estresado- sonrio de lado coqueta.

(( Perdon la tardanza x.x muchos problemas pero no vuelve a pasar))

por **Yohann V.Wood** Lun Abr 25, 2011 1:17 pm

No creo que bebieras el veneno, además me conoces lo suficiente como para saber cuando te daria veneno y cuando no

-Menciono mientras no prestaba atencion a las miradas de la gente, lo unico que sabian hacer era poner en ridiculo a las personas con los rumores y las habladurias aunque eso no era que le afectase demasiado teniendo en cuenta que él era uno de los que a veces se dedicaba a crear falsos rumores acerca de su persona para que nadie le invitase a ninguna fiesta, miró los ojos de aquella mujer mientras le servia un poco más en su vaso y se hechaba a si otro poco más, lamiendose los dedos al notar el sabor del ron en sus labios, pero antes de poder hacer nada ella se estiró hacia el mordiendo su labio.

Arqueó una ceja mientras acariciaba su mejilla, la verdad era que no sentia nada de amor por aquella mujer sino solamente habia servido para su locura pasional ademas ella era culta, salvaje, le gustaba hacerla enojar respecto a los temas mas sencillos de la filosofia, sonrio besando su mejilla mientras miraba fijamente los ojos muy cerca del rostro de la mujer, tan intimo que incluso los demás sentirian envidia de aquella cercania-

Te llevaré luego a cenar como es debido, este es tu castigo por la tardanza ademas tambien será tu compensación...porque he conocido a alguien

-Mencionó alejandose de ella colocando las manos en la mesa con una sonrisa de medio labio que desaparecio suavemente, mientras tomaba el vaso de improvisto y tomaba un largo trago del mismo, el alcohol bajaba por su garganta haciendole suspirar mientras se mordía los labios levemente, habia sido realmente bueno haber venido antes ahi, antes de que empezara la autentica noche-

por **Vanessa Siegert** Jue Abr 28, 2011 11:07 am

Debia admitir que habia algo misterioso esta vez en Yohann, como si hubiera encontrado un dulce preciado que no queria compartir con nadie, no era que viera al castaño como si fuera un niño, pero lo conocia lo suficiente como para saber que algo tenia... Y al parecer era bueno, o eso creia. Yohann a veces era para ella como un laberinto sin salida. Sonrio cuando le acaricio la mejilla, ese tipo de cosas de parte de el siempre venian dandole sentimientos encontrados, pero desde lo que a ella misma le habia pasado antes de conocer a Yohann estaba curada de espanto...

Los hombres en paris se dedicaban a eso , nada mas.

Y ella era la participe en primera fila.

Se retiro para beber un poco del vaso mirandolo al hablar - Oh claro que lo sabria, pero como alguna vez te dije, cualquier cosa puede causar placer siempre y cuando se sepa donde esta la delgada linea, incluso el veneno- bebio un poco cerrado los ojos para escuchar sobre la cena, eso si que la intrigo mas.

Parpadeo sonriendo de lado para despues hecharse un rizo hacia atras - Oh, conociste a alguien?- la sonrisa de el decia mucho y no pudo evitar que su instinto felino, y curioso, se despertara de inmediato aunque media muy bien hasta donde podia llegar con sus preguntas- Interesante? en cual de tud categorias entro esa persona?-pregunto divertida sin preocuparse por ser 'botada'.

Ambos sabian las reglas del juego.

por **Yohann V.Wood** Lun Mayo 23, 2011 7:00 am

-Ya sabia que el veneno era placentero, la asfixia mientras te deshacías en movimientos bruscos en el coito o cuando todo tu cuerpo se sentia en otro mundo dejando que las cosas que tocaran tu cuerpo fuese sino absoluto placer asi que ¿porque importarle el hecho de usarlo? a Yohann no le gustaba usar alicientes para encontrar el placer ya que quería ser él quien lo produjese y no un venenucho de tres al cuarto eso era como si un hombre quisiera usar viagra o cualquier afrodisiaco para poder yacer con su mujer ¿no era absurdo? eso indicaba que no tenia la potencia sexual necesaria como para satisfacer a cierta persona por eso el emplearía siempre métodos extraños pero siempre placenteros y donde él y solo él fuera el protagonista-

Entra en la categoria de insecto. Por mucho que le llame insecto viene volando hacia mí haciendo oidos sordos

-Colocó la mano en la mejilla mientras hechaba un poco más de aquel alcohol en el vaso, mirándolo con aburrimiento sin saber que pensar o que decir, no estaba bien vista la homosexualidad por esos lugares incluso ahora pensaba en decirselo sin que eso causara ningun afecto Vanessa ya sabia lo cruel que podía llegar a ser él pero tambien que cuando una persona era "importante" no podía deshacerse de ella asi como así. Era la única amante que tenía en un harem lleno de polvo porque era la única que aguantaba además de gustarle la charla que siempre tenían-

Kendal, Kendal Rose es mi pequeño insecto

-Hizo enfasis en el "mi" sin apenas darse cuenta cuando volvió sus ojos a los suyos fijamente, sonriendo pensó que si se enojaba tendria una botella para él solo ademas de una reserva en un restaurante no muy de lujo pero con los mejores cafés de Paris, no le dolería demasiado o eso era basicamente lo que pensaba mientras sin apartar la mirada de ella hacia llamar al camarero, cuando vino ipsofacto obviamente porque el dinero atraía bastante a la gente dejó las monedas que correspondían a la botella, ni una más, ni una menos-

Dicho esto, ¿es cierto que la curiosidad mató a la gata?

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