Algo de café (privado)

por Invitado Sáb Mar 19, 2011 9:32 pm

Un nuevo inicio en un lugar te deja sin escapatorias y aunque esta vez Callie no estaba sola en una ciudad desconocida, en los días se sentia sola, por alguna extraña razón su hermana se negaba a salir pasando la mitad de la semana encerrada en los días soleados cuidando de ella que excusaba tener algo de alergia contra el sol, algo que no entendía era eso, la dichosa alergia. Empezaba a pensar que Persefone tenia algo que esconder, algo que ella debía hacer, pero ese dia no se preocuparía, escapo de el castillo donde se hallaba y se vistio normal, sin ningun lujo, hoy iria sin compañía ni proteccion, conocería más París por su propia cuenta. El lindo caballo que tomó "prestado" la llevo hasta un lujoso café, muchos quedaron algo anonadados e impresionados de mala manera puesto no era bien visto que una señorita de una buena clase estuviera cabalgando y no en un carruaje como debiera, pero eso le daba igual, asi sin màs entro al cafe pidiendo uno más su pastelillo favorito, sus ojos brillaban de un encanto unico, el lugar le apetecia quedarse por más tiempo del que podía y un suspiro salió de sus labios.

por **Roldán La Fère** Sáb Mar 19, 2011 10:02 pm

El clima era lo suficientemente agradable como para beber un café, aunque no era precisamente mi bebida predilecta, pero a cambio ofrecía ventajas tales como una maravillosa vista panorámica para observar hermosas damas dentro y fuera del establecimiento. Según tenía costumbre, la vida no me decepcionó, y no llevaba ni cinco minutos cuando ya había visto pasar a cinco o seis damas dignas de admiración. Reflexionaba acerca de si debía o no seguir a una de ellas, cuando de improviso mis cavilaciones fueron interrumpidas por el sonido, tan familiar para mí, que producían los cascos de un caballo sobre el pavimento. No era el único al que le llamó la atención ni era extraño que lo hiciera, pues lejos de apearse un hombre, se apeó una señorita con todo el desenfado encantador que poseen las mujeres que hacen lo que les place sin preocuparse por las consecuencias. Sonreí con simpatía al notar como ella ignoraba airosamente todas las murmuraciones que su indecoroso modo de llegar había provocado entre respetables transeúntes.

La observé tomar asiento y solicitar un pastel, pero eso quedó en plano secundario cuando tuve la oportunidad de apreciar más de cerca su rostro. No era tan blanco como estaba acostumbrado a apreciar en otras damas, pero sus rasgos mediterráneos borraban cualquier aprehensión sobre el correcto cuidado de su piel que pudiera surgir. Aún así, eso no bastaba para atenuar el hecho de que acababa de infringir una de tantas aburridas normas de etiqueta y buen comportamiento, y aunque parecía ajena a ellos, los comentarios y susurros no tardarían en incomodarla. Me levanté de mi asiento para dirigirme hacia el que estaba en frente de ella. Le guiñé el ojo de manera poco adecuada antes de sentarme con total seguridad. Os estaba esperando... comenté en un tono lo suficientemente audible para que las murmuraciones cambiaran de rumbo. Lo que había dicho era una completa mentira, pero esperaba que la joven alcanzara a interpretar el divertido brillo en mi mirada y me siguiera la corriente o estropearía por completo mi intención de ayudarla.

por Invitado Sáb Mar 19, 2011 10:43 pm

El liquido caliente recorria cada parte de la garganta de la chica, el suae sabor inundaba los sentidos de ella, era un sabor unico pero lo que no compensaba nada era el chocolate del panecillo, era algo que amaba más que a nada, el chocolate. Con la cuchara apartó un pedazo y comenzó a comerlo cerrando los ojos disfrutando del sabor que hacia dias no tenia en sus labios, relamio estos antes de oir lo que el joven que se atrevió a sentar enfrente de ella, la mirada se fijó en el y después en el ambiente, sin duda su llegada habia sido algo inesperada, se murmuraría mucho sobre esa joven que se atrevio a darse a conocer.
Sonrió amable e hizo una revencia con la cabeza al joven puesto una cosa era que le gustara cabalgar y otra muy distinta perder las tradiciones que tenia. Le devolvió el guiño y sonrió llamando al mesero pidiendo otros panecillos y más café.-Ya estoy aqui, perdón la tardanza.-Dijo en tono al igual que el, los murmullos decendieron pero las miradas se hacian presentes más fijas que antes, esperaba no fastidiarse pronto de eso.

por **Roldán La Fère** Dom Mar 20, 2011 9:43 pm

[justify]Tomé uno de los pastelillos que trajo el mesero, más para disimular mi sonrisa que por desear comerlo. Entretanto, la llegada de nuevos clientes distrajo la atención general, centrada hasta el momento en la mesa que ocupábamos. Esta feliz circunstancia nos permitió una poca de privacidad, y noté con satisfacción que hablando en un tono de voz moderado, nadie escucharía nuestro intercambio de palabras.

Lo primero a hacer era disculparme, y sin más preámbulo lo hice. Temo que mi repentino modo de actuar le haya causado una mala impresión mademoiselle, pero tenga por seguro que obré con la mejor intención. Su rostro era definitivamente más atractivo de cerca, con esa belleza mediterránea de la que tanto había escuchado elogios y que ahora constataba por mí mismo. Además estaba el particular acento de la joven. Su francés era correcto pero no conseguía disfrazar del todo el acento.

Sonreí una vez más, y adoptando toda la naturalidad de la que era capaz, tomé su mano para besarla haciendo como que acababa de dirigirle algún galante cumplido, pero en realidad con la intención de presentarme correctamente. Roldán La Fère a sus plantas, mademoiselle... susurré mientras clavaba mi mirada en la suya.[/color]

por Invitado Lun Mar 28, 2011 8:51 pm

Callie estaba comoda, después de la pequeña "llegada" el chico habia tomado una iniciativa que le agradó, le ayudó a que los demás dejaran a un lado los murmullos además que gracias a eso se olvidaría, si alguien estaba con un hombre solo importarian dos cosas. "¿Quien? ¿Porqué?, y aunque no conocieran nada de la chica, la clase alta era de interes, muchas de las señoritas de la misma clase que ella se pasaban la hora del café hablando de quién se casaría primero y demás, cosas que a Callie sinceramente ahora no le importaban, tomó otro pastelillo y sonrió cortes al chico antes de responder.-Ninguna mala impresión, si no todo lo contrario. Gracias Monsieur Roldán.-Comentó sonriente, una vez dicho eso metió un panecillo a su boca y dio una mordida gustosa del sabor, algo que sin duda le encantaba era eso, lo dulce.
Cuando tomó su mano Callie sonrió, le gustaba conocer gente nueva y el chico era un reto para ella, "conocerlo bien", tal vez podrían ser amigos, si, era lo que le faltaba a Call.-Mucho gusto Monsieur, soy Calliope Loud, pero ya que somos "conocidos".-Rie un poco al hacer las comillas con sus dedos dado que mucho no se conocen, solo por el pequeño incidente que ella misma ocasionó.-Dime Callie, ¿Le gustarón?.-Pregunta respecto a los panecillos, sonriendo dulce, tan de ella.

por Contenido patrocinado

Algo de café (privado)

Algo de café (privado)

Re: Algo de café (privado)

Re: Algo de café (privado)

Re: Algo de café (privado)

Re: Algo de café (privado)

Re: Algo de café (privado)