Álvaro Santillana.

ombre del personaje-

Álvaro Santillana

-Edad-

Edad vampiro: 190 años
Edad que aparenta: 21 años.

-Especie-

Vampiro

-Tipo y Nivel Social-
Clase Alta.

-Sexualidad-
Heterosexual.

-Lugar de Origen-
España

-Fecha de Muerte-
9 de Octubre de 1610

-Habilidad/Poder-

- Volar (planear, levitar)
- Clarividencia
- Control de emociones

-Descripción física-

Su cabello rizado moreno pero domable es un rasgo muy característico, no lo lleva demasiado largo, lo suficiente y justo, acompañándole de unas cortas patillas, ojos color miel, muy cautivadores, es bastante expresivo con ellos y un gran factor de su apariencia física, no necesita ningún poder para cautivar con ellos.
Rasgos faciales marcados y varoniles, su barba de un par de días hacen de su atractivo mucho más pronunciado, es muy atractivo y le gusta cuidarse, su complexión es atlética y bien proporcionada, le gusta cuidarse y estar en forma.
Casi siempre viste de colores oscuros y elegante, pero en casa le gusta más los colores pálidos, todo un contraste que lo hace encantador.
Tiene algo que hipnotiza, no por el simple hecho de ser un vampiro... siendo humano y de nivel social medio, era un gran cautivador, se relacionaba con gente (más bien señoras de toda índole) de todas las clases sociales, su físico le hizo ser lo que es ahora.
No olvidemos su voz ronca y suave...

-Descripción psicológica-

Álvaro siempre ha sabido lo que quiere, no le da vueltas cuando algo le atrae o le gusta, simplemente hace todo posible por conseguirlo, siempre tiene algo que decir y a veces no le hace falta, con una de sus sonrisas lo dice todo, sin saber qué saber responderle.
Es sincero y franco, no le importará si hace daño con su sinceridad... a todos nos gusta saber lo que piensa la otra persona. Pero se cuida mucho con quién se relaciona, sabe cuales son los límites y no los supera, si la otra persona lo hace... desaparecerá, sin explicaciones... antes de que sea tarde es mejor cortar por lo sano, miente tan bien que puede llegar a confundirte totalmente... le gusta jugar con ello, él no sale dañado pero si consigue lo que desea no le importará en absoluto que la otra persona sufra, al fin y al cabo él sabe que recorrerá el camino solo.
Con las mujeres ya es evidente que sabe tratarlas al pie de la letra, considerado, provocador, sensual y todo un caballero, solo con el fin de saciar su apetito sexual, no le interesa de momento nada más... claro que no ha encontrado nunca esa chispa que le haga pensar diferente, ¿podría un demonio enamorarse? Siempre buscando la perfección en toda mujer que pasa por sus sabanas pero ninguna ha calado bien hondo.
Como le decían muchas veces “un vividor”, descarado, y no se corta un pelo.

-Historia-

Sur de España, año 1610.

Álvaro siempre se crió en un monasterio, nadie sabe nada de su familia y tampoco es que haya preguntado nunca por ella, las monjas y los monjes donde se crió con más niños fue su hogar y tuvo una infancia feliz, hasta que fue mayor de edad y emprendió su nueva vida de forma independiente.
No tenía mucho dinero, pero siempre se buscaba la vida y nunca le faltaba nada, mucho menos algo que llevarse a la boca, la mayoría de las veces incluso comía como un rey siendo el amante de alguna señora ricachona, él la complacía y ella simplemente le daba de comer, una cosa por otra.

Llegó a Inglaterra, con 21 años recién cumplidos, extasiado por la bohemia de la ciudad... encontró una de sus vocaciones: ser actor. Representó varias obras, algunas tuvieron más éxitos que otras y su vida cambió a una más cómoda cuando le ofrecieron uno de los papeles mas importantes...

Se podía decir que sí, un vividor desvergonzado... pero un gran actor, podía llegar a emocionar hasta el ser más frío, era impecable y eso era muy llamativo, tanto que un vampiro se fijó en él...le llegó en aquel muerto corazón, sabía que si era un igual podía llegar bien alto y tenerlo al lado, ya que fue obsesión a primera vista.

Tras una obra fue abordado, no tuvo opción, embriagado por los encantos de aquella hermosa mujer, aquella vampiresa le engañó de tal manera que no tardó en caer en sus garras... adoraba aquella piel fría, aquella belleza... y aquellos sueños que llenaban su cabeza, sin ser consciente de que nunca más podría tener la vida que había tenido.

La transformación solo dio muchas más mejoras como era de esperarse y Álvaro se sentía poderoso, sabía que podía llegar lejos pero... sin tener que estar al lado de aquella mujer, la que sin más abandonó debiéndole todo, eso ella decía... sigue acechándole, pero siempre sabe en cómo y dónde esconderse, puesto que aquella vampiresa le acecharía hasta el final de su no vida.