Dolce +18[Libre]

por **Asagi Dunkelheit** Vie Abr 15, 2011 10:35 pm

“Escóndete, acércate, eso es acércate cada vez más y más, enséñame y zumba tu dulce pie, hago que mi lengua se deslice para recorrer aquellos lugares que deseo, deje que perfore y apuñale ese cuerpo hermoso que deseo con la mirada, ¡Así! Hazme disfrutar de ello con tus experimentadas manos, dánzame hasta hacerme morir, vamos… ¡Deja salir tu profunda voz!... y vuélveme loco, abre, aprieta, cierra y jala con fuerzas tus manos en torno a mí, hazme ir de prisa, hasta que el cuerpo me tiemble, hazme vibrar y deja que el cansancio me tire”

De pronto al verle no me puedo negar, le llevo tiempo mirando, ahí de pie, solo provocándome, no revela su rostro, la verdad es que no me importa porque… solo quiero disfrutar.

“deja salir ese lado sucio tuyo, solo hazlo, Como desees hacerlo revélame tu rostro, llora, grita, gime, agítate a este mi ritmo, pon toda tu fuerza en las yemas de tus dedos, ¡Más!, ¡Toma más de mí!... Hasta el mismo fin, dánzame hasta llevarme a la locura.”

No sé cómo actuar, qué debo hacer, quizá acercarme ahora es demasiado arriesgado, seguro lo sabe, le deseo con una sola mirada, seguro lo sabe…

“deseo controlar tus nervios, deseo hacer que tu corazón palpite hasta que no pueda más, deseo hundirme en tus células, y marcarte de mi propiedad, que seas solo de mí, déjame mezclarme con tus sentidos, deseo ser uno solo contigo, deseo bañarme con tu sangre, deseo ahogarme en ese cuerpo”

por **Kei Koizumi** Sáb Abr 16, 2011 2:04 am

Se había quedado allí sin moverse, solo observando y aquella mirada sobre él le hizo sentir algo extraño. No estaba del todo consciente al estarle observando. En primer lugar se
había quedado allí solo porque le notó de repente y sin querer se había
quedado observándole.

Aquellos pensamientos le llegaron de pronto y un escalofrío le recorrió la piel. Pensó que lo mejor que podía hacer era ignorarlos, pero era un poco imposible a estas alturas.

No supo la razón, pero se acercó lentamente a él, a pesar de que su mente le decía que debía marcharse.
Vete, no deberías estar aquí... se decía mentalmente a sí mismo. Pero era realmente demasiado tarde. Aquellos ojos no le permitían hacer tal cosa, era como si le hubiesen atrapado, como si no le permitiesen escapar.

Nada malo puede pasar... ¿no es cierto? y sin darse cuenta, sus pensamientos ya le habían traicionado... ya había caído en sus redes.
Así que solo tenía una opción.... y era dejarse llevar...

por **Asagi Dunkelheit** Lun Abr 18, 2011 12:15 am

“tócame, acércate, sedúceme, tómame y bésame, que yo no hare nada, quiero que me agarres, quiero que me tengas a tu mereced, yo solo me deleitare con la mirada quiero susurrar palabras fuertes a tus oídos, quiero que te estremezcas sobre mí, quiero agarrare y matarte de placer.

- Vaya personas que trae el viento, todo tan lleno de sorpresas,… me sorprende.

El verle tan atraído por mi mirada, si bien ya le conocía, pero mis deseos no me dejaban moverme a él, quería esta vez que todo fuera distinto, solo así podría continuar.

“te miro anonadado atraído, soy un imán para tu cuerpo y despierto esos deseos, déjame lamer, déjame meterme en tus pensamientos, deja que salga ese lado cruel ese lado sensual que posees, cae a mis redes, pero no te liberes, provócame y sedúceme como yo a ti con la mirada.

- ¿Qué buscas aparte de mi mirada?

No puedo resistir el jugar, quiero retarlo porque mis pensamientos son contradictorios a los impulsos que podría tener. Vamos respóndeme, quiero que los deseos de esta noche se hagan realidad.

por **Kei Koizumi** Lun Abr 18, 2011 2:43 pm

-Si, es cierto... vaya sorpresa encontrarte de nuevo...
Sus palabras habrían sonado algo irónicas de no ser porque no estaba del todo concentrado en lo que decía. No, sus pensamientos habían empezado a vagar sin rumbo en su mente.

-¿Aparte de tu mirada? ¿qué te hace pensar que busco más?
Claro estaba que eso no era en serio. Ya se había acercado tanto que ni cuenta se había dado. Ahora le tenía a poca distancia de su rostro y el tono de su voz le delataba, por si fuese poco.

-Será que ...
No terminó la frase porque sus labios habían tocado ligeramente los suyos. Había cerrado los ojos al hacerlo, pero luego sonrío apartándose un poco.

-Asagi Dunkelheit...
Le dedicó una mirada dulce mientras pasaba las manos por su cabello.

-Tienes algo de lo que no puedo huir...
Le dio un beso suave en los labios. No había prisa... No aún...

por **Asagi Dunkelheit** Lun Abr 18, 2011 9:43 pm

Así, de ese modo me gusta, que tu cuerpo se estremezca ante mi voz, ante mi mirada, deseo ya morder esos sensuales labios que pronuncian mi nombre, quiero tocar ya el calor de tu pie, vamos déjame ver, pon mis manos sobre tu sexo, para que las deslice, tocando de arriba abajo, mientras suspiro con un eco de excitación fingida, te canto en gemidos de placer. Quiero lamerte todo ya.

Hubiera respondido a su beso, pero dejaría que mis pensamientos se hicieran realidad, deseaba arrancarle el labio y pero me detuve y con una mirada que paso como una caricia real sobre su rostro, pidiéndole… una sola cosa “Sedúceme”

- Entonces no huyas y déjate atrapar, vamos continua intentando entrar… mira que te has vuelto algo engreído, vamos castígame por atraparte y hacer enloquecer tus pensamientos… esta noche soy todo tuyo.

Mátame de pasión, mis deseos más profundos te lo imploran, bésame, arráncame la ropa, aviéntame, castígame, bebe de mi sangre, déjame morderte, déjame tocarte, juega con mis deseos más profundos, resístete, accede, ve tan rápido como puedas, pero ve tan lento y profundo mientras estoy en tu interior.

- ¿Qué esperas?… Kei… Koizumi

Susurre con un tono de voz muy sugerente… como para volverlo loco…

por **Kei Koizumi** Jue Abr 21, 2011 9:51 pm

Pasó sus brazos alrededor de su cuello y acercó su cuerpo al suyo tanto como pudo. Le habló a una distancia que sentía le hacía perder la conciencia. Aún así, le observó a los ojos y sonrío como siempre lo hacía.
-¿Engreído dices? No me he vuelto, me temo que ya lo era, solo que tal vez no lo habías notado...

Y sus ojos observaron sus labios con una fijeza que le descubría. Le mordió el labio inferior ligeramente, le besó de nuevo, saboreandole, sabiendo que era él único que podía hacerle actuar de aquel modo.

-¿Sólo esta noche, Asagi?
Había sido un murmullo. No había podido evitar decirlo debido a que sus palabras habían provocado esa respuesta automática en su mente.
¿Cuándo había empezado a pensar de manera egoísta? ¿Desde qué momento había pensado que quería ser el único en su mente, o tal vez en su corazón?

No podía creer que hubiese llegado a eso... No podía creer que tuviese razón en ello. Le había atrapado y sus pensamientos se volvían un torbellino estando a su lado.

En realidad, ¿Quién le pertenecía a quién? Porque le daba la impresión de que, sin darse cuenta, ya le había entregado a él lo que tenía, lo que era... Aunque tal vez eso aún no era suficiente. Tendría que esforzarse más. Lo cual no le importaba en lo más mínimo, dado que se había convertido en su deseo.

¿Qué espero? En realidad es que soy torpe, no es que esté esperando algo para actuar pensó divertido. No es como si fuese a decirle algo así.

Profundizó un poco aquel beso. La verdad es que se había puesto nervioso, pero no iba admitirlo.
-Asagi...
Le gustaba pronunciar su nombre. Sintió su propio aliento sobre la piel ajena, se había recargado en su hombro. Empezaba sentir cierto descontrol en su interior. Alzó la mirada, viendo aquellos ojos que le gustaban tanto. Sus manos acariciaron su pecho mientras le besaba la barbilla y movía su cuerpo buscando un poco más de cercanía, si es que eso era posible.

por **Asagi Dunkelheit** Mar Abr 26, 2011 6:06 pm

Mueve tus caderas sobre mi sexo, vamos restriégate como felino sobre mis testículos, desgárrame la ropa, como si fueras un animal sediento de sangre, susúrrame con eco en tus gemidos, mientras paso mis manos sobre tus glúteos, apareándolos, acariciándolos, muérdeme con sensualidad el cuello, arráncame los labios, susurra mi nombre, incítame con tu cuerpo, hazme bailar, acércame, aléjame mientras te desprendes de aquellas vendas, hazme creer que lo tengo todo, arrebátamelo y juega con mis emociones.

- Sé que lo eres, vamos demuéstralo, si eres de ese modo entonces, déjame verte…

Susurre con libido y morbo en las palabras, con deseo perverso en mis manos que se deslizan sobre sus hombros, solo quería que el tomara un poco de mi, esta noche, quería dejarme seducir, así como un ramo de rosas pasando sobre mi pálida y desnuda piel, desojándolas sobre mi desnudes, hasta hacerme caer de placer.

- Demuéstrame que puedes dejarme con las ganas de más noches…

Le chupe uno de sus hombros mientras susurre aquello, hasta el tiempo y la noción del lugar se habían perdido en los pensamientos, solo sabía que estábamos los dos ahí, no imputando donde la pasión hace de las suyas.

Escuche mi nombre ahogado, así, eso es, más, dilo más de una vez, con esa locura y ese libido tan encendido en ti, quiero llevarte a un orgasmo sin fin, desliza tu lengua sobre mi piel, como si de un pétalo se tratara, saborea cada rincón delicioso que poseo y hazme recitarte ecos sonoros de un ahogado… Provócame, veras mis gestos de infinito placer, cuando tú mismo hagas que me adentre a tu cuerpo, vamos toma mi cuerpo y hazme sentir una locura afrodisiaca.

Su personalidad era increíble de reconocer ahora, tan rendido a mí, tan celoso, tan posesivo, así quería que siguiera, al menos no por esa noche.

por **Kei Koizumi** Mar Mayo 03, 2011 11:33 pm

Su mirada le hacía sentir diferente. El sonido de su voz en ese justo momento se volvía alguna especie de afrodisíaco para su cuerpo inmortal... Despertaba ese deseo en su interior, esas ansías de sentirle...

Se daba cuenta de que aquello había sobrepasado los límites de su mente, había sentido algo extraño, porque se había dado cuenta de que se entregaba a él sin mayor resistencia.

Di mi nombre... dejó escapar ese pensamiento. Sí, eso, quería escucharle decirlo, sabiendo que una vez que sucediese no habría escapatoria para él.

Aquello que empezaba a albergar en su interior, quería hacérselo llegar... quería que en algún punto sintiese lo mismo... que le quisiera, deseara... que ¿le amara?

Había detenido sus movimientos de golpe por el desconcierto que le ocasionaban sus propios pensamientos. Un instante, pero sería notorio para su acompañante, sobre todo cuando le estaba observando con aquella expresión en su rostro que le delataría.

Sintió la sangre subir a su rostro, aunque pensó que dado que no se había alimentado recientemente probablemente no sería notorio y por un simple segundo quiso huir. Y si no lo hizo fue porque eso carecía de sentido. No era ningún chiquillo humano, aunque el hecho de haberse dado cuenta de que estaba enamorándose perdidamente de él, le hacía sentir como uno.

No tenía sentido pensar demasiado. Acarició ligeramente su rostro, ignorando aquel casi imperceptible temblor en sus manos antes de reclamar sus labios de forma demandante.

Y al contrario de lo que creyó, se encontró a sí mismo pronunciando su nombre nuevamente, en un susurro cargado de aquel anhelo que crecía en su interior.

por **Asagi Dunkelheit** Vie Mayo 06, 2011 2:42 am

Mueve tu dulce trasero sobre mi pene, vamos súbete más, si, así, mas siente mi erección, esta tan dura, solo tú la provocas, es tuya, vamos, bésame quiero explorar la humedad de tu boca, así, hazme bajar hasta tu pecho, no, no te quites la camisa, quiero morderte los pezones por encima de aquella tela, para que me desees, mientras te tomo de las caderas y te meneo sobre mi pene, ¡vamos empieza a gemir!, quiero escuchar cómo te quejas, como me deseas dentro de ti, quiero arrancarte placer del cuerpo…

- Kei… Koizumi

Susurre mientras él seguía sobre de mi, haciéndome temblar, con ese beso, ¿Qué estábamos haciendo?, me preguntaba una y otra vez, esta sensación de tenerle, de que él fuera a quien yo deseara, ¿Qué me estaba pasando? Seguir todo de esta manera, mientras él estaba de ese modo, diciéndome que no podía escapar de mí, todo aquello, su mirada, sus acciones, ¿Por qué conmigo?... esto era… será que.. ¿Es esto?... Amor…

- Kei… Te… Amo.

No tuve la oportunidad de poder de formularme la pregunta, eso había salido de lo más natural, fue como algo que jamás había sentido, de pronto todo se volvió tan estúpido, decir eso tan a la ligera no iba conmigo. Todo se debía tratar de una estúpida confusión, si solo eso, y nada más, pero algo más que placer y deseo era lo que me movía para estar con el de aquella forma.

- ¿Por qué has venido?, solo por sexo… ¿o el te amo?

Susurre sensual a su oído… sin saber que mis palabras quizá fueran tomadas a mal y “grotescas” de cierta manera.

por **Kei Koizumi** Vie Mayo 06, 2011 4:03 am

Escuchó su voz y sus palabras. Pero había algo que no podía negar, el hecho de que aquellas palabras que acababa de dirigirle eran justamente las que en su interior rogaba por escuchar.

Su nombre pronunciado con aquel tono, con aquella sensualidad que le hacía desearle y además esa otra frase… esa fue la que le hizo dejar de dudar… Porque al escucharle, su corazón se aceleró con demencia torrencial…

Así que simplemente dijo lo que se había estado guardando hasta ese instante. Lo que había intentado ignorar.

-Ambos... porque lo quiero todo de ti...

Se humedeció los labios, pasando su lengua por ellos antes de rozarlos con los de él al hablar. Lo que había ocupado sus pensamientos los últimos días estaba ahora frente a él, no podía simplemente ignorar por más tiempo ese sentimiento que tomaba fuerza, que le había invadido sin previo aviso y sin ninguna advertencia.

Dejó escapar un ligero gemido mientras movía su cuerpo sobre aquella erección que sentía incluso a través de la ropa. Le desabotonó la camisa mientras seguía moviéndose insinuantemente sobre él. Besó y lamió su pecho, bajando de a poco... Sintiendo cada toque y cada caricia encendiendo el fuego en su interior.

por **Asagi Dunkelheit** Vie Mayo 06, 2011 4:38 am

Aquel calor que parecía encender las llamas de toda pasión en mi interior, se detuvieron al ver aquel lugar donde estaban pronto se podría empezar a llenar de gente, por primer vez de tuve con furia aquel deseo en mi interior, tome su mano, si, aun con la camisa abierta, detuve sus besos, apenas y me di por aludido que estábamos caminando muy deprisa, tomamos algunos atajos, que con el paso de los años me había aprendido, le miraba de vez en cuando para transmitirle la desesperación, ambos como dos vagos, sin botones en las camisas, le detuve entre unos de los callejones, para tomar un poco de aire, y besarle con pasión. Para después seguir, me dirigí rápido, sin pensarlo, cruzando la calle con el mi mano, para poder llegar del otro lado, soltarlo en medio de aquella recepción lujosa y pedir la más esplendorosa habitación, claro ahí por más que quisiera debía comportarme, le indique que subiera conmigo, con prisa por aquellos bellos escalones bañados en un dorado como el oro.

Al abrir la habitación rápido le arrastre a aquella amplia cama, olía tan bien, le eche sobre los cojines de terciopelo esmeralda y rijo escarlata, hundiéndolo ahí, me despoje de la camisa, lo que quedaba de ella. Mientras le besaba y sus manos recorrían mi rostro.

- Quiero chuparte enterito, que sepas los deseos sexuales que tengo por ti, déjame lamer tus labios, tu ano, tus pezones, tus hombros, tu miembro, déjame ver que mueres por mí, que soy yo el único que te haga sentir, posa tus manos sobre mi erección, eres dueña de ella, mete las manos y saca mi pene, siente el calor, siente la pasión, juega conmigo, mientras me como a besos tu cuello, mientras bajo a tu torso, suéltame,. Déjame bajar, así, un poco más, arranco aquella ropa que no me deja ver tu erección, quiero masturbarte sin piedad, siente la pasión… te amo, te amo, amo tu cuerpo, te amo a ti Kei… Koizumi, el único que enciende llamas en mi.

por **Kei Koizumi** Dom Mayo 15, 2011 8:34 pm

Antes de hacer cualquier cosa había pensado en que los callejones no eran el mejor lugar, aún así, cuando le detuvo de improviso y le arrastró con él por las calles no pudo más que sorprenderse. Caminó tras él sin decir nada, no dejo de verlo en ningún instante mientras se dirigían a aquel lugar.

Mientras esperaban no pudo evitar sentirse un poco inquieto y una de sus manos jugaba con los bordes de la camisa mientras veía atentamente los detalles de las columnas y los bordes dorados . Le escuchó hablar y le siguió a la habitación cuando se lo indicó.

No tuvo tiempo de apreciar nada, sintió la suavidad de los almohadones debajo de su cuerpo. Recorrió su rostro y luego le besó mientras sus manos se metían entre sus pantalones, llegando a su miembro, mientras su lengua se enredaba con la suya, su mano empezó a estimularle.

Su propia respiración se había alterado... Le quería, le amaba y eso despertaba una pasión que nadie había visto en él...Su cuerpo se movía sin que él lo pensase, se frotaba contra él, queriendo sentir la cercanía de aquel cuerpo también inmortal...

Amáme... Déjame tocarte y calmar este deseo que crece en mi interior... Déjame sentirte...

La mano que había dejado libre se había aferrado a sus cabellos y sus besos se volvían más candentes, más desesperados... Fue dejando besos por su rostro y su cuello, quería marcarle, saber que sentía lo mismo que él... Deseaba tenerlo...

por **Asagi Dunkelheit** Lun Mayo 16, 2011 12:16 am

¿Amar?...

No, esa palabra no podía estar en mi vocabulario, estaba loco, estaba siendo traicionado, ¿Qué haría?... jugar con él, después de todo a eso me dedicaba, hacerle creer, ¿Qué era amor y no deseo carnal? Supongo que aun me podría controlar, pero al verme atreves de esa mirada tan sincera, aquel rojo que era como la sangre… no, no podía, ya esta amándolo desde antes sin darme, cuenta… ¿Asagi Dunkelheit amando?... No me hagas reír, sí eso fue lo que me dije al ver el espejo reflejado de mis acciones pasadas, mi verdadero ser, se mofaba de mi, pero… esto era diferente, el no era humano, era como yo.

De alguna manera me hacía sentir vivo, si, vivo, será, ¿el se sentía igual?, todas y cada una de esas preguntas me vinieron como tormentos de poder estar haciendo lo correcto…

- Deja que tu boca me lleve a aquel sol, donde mi piel ardera con todo el fuego de esta pasión, deja que tus manos me recorran para que puedas maniobrar con los gruñidos de mi interior, vamos oblígame para que te haga mío, así es desnúdame, provócame, bésame, ven si, aquí, encima de mí, menea tus caderas sobre mi miembro, ¡Ah!... si, de esa forma, vamos vete quitando la ropa, bésame, ponme las manos sobre tu cuerpo, si hazme desearte pero al mismo tiempo no me des nada.

Mis deseos, mis palabras salían ya de mis pensamientos sin ser controlados, si, ya lo amaba, debía rendirme entonces, debía estar haciendo algo en mi, estaba cayendo sobre el dulce hechizo que puso en mi.

- Te amo…

por **Kei Koizumi** Lun Mayo 30, 2011 11:26 am

No pudo soportarlo demasiado tiempo antes de que sus manos se movieran, buscando deshacerse de aquellas prendas que le impedían admirar aquel cuerpo. Lo hizo despacio, tratando de calmar el palpitar de su corazón.

Le deseaba, le quería con tal intensidad, que no le importaba lo que tuviese que dar a cambio de ello. Todo lo que era estaba dispuesto a entregárselo.

Su cuerpo se movía buscando sentirle. Se detuvo de pronto al escucharle decir aquellas palabras, escucharlas era algo que no se esperaba en ese instante. Le sonrió con dulzura, tomando su rostro entre sus manos y dejando aquel beso sobre sus labios.

-Te amo, Asagi... con tanta intensidad, que siento que no puedo soportar estar lejos de ti...
Nunca habría creído poder decir aquellas palabras con sinceridad alguna vez, pero aquí estaba haciéndolo. Dejó besos por su rostro y su cuello. Sus manos le acariciaron, escabullendose por donde podían. sentía alquel calor en su interior. Estaba dejándose llevar por una pasión que solo podía nacer con él.

Había cerrado los ojos. Las sensaciones empezaban a abrumarle la mente. Se sentía como perdido.

Lo único de lo que no podía dudar era de sus propios sentimientos. Si, aquello que sentía por él era amor, y por ello, era capaz de hacer cosas que había evitado hasta entonces. Como entregarse completamente a alguien, aún con la incertidumbre de no saber lo que sucedería después. Pero eso era lo que quería hacer justo ahora, sin preocuparse por las consecuencias, quería amarle, entregar todo de sí y estar a su lado...

Besó su pecho bajando hasta su vientre, desabotonando el pantalón y llegando hasta aquella parte de su cuerpo. Le recorrió usando su lengua, succionando y deteniéndose por momentos. Sus manos se movían solas, buscando proporcionarle cierto placer, aún cuando no fuera realmente un experto haciendo esas cosas...

Le dirigió una miradaun segundo después, aunque sentía sus mejillas arder. En alguien como él se preguntaba si aquel rubor sería notorio...

por **Asagi Dunkelheit** Vie Jun 03, 2011 3:36 am

- Alto… ¡Alto!...

Tome su rostro obligándolo a quitarse de ahí, de alguna manera, estaba siendo rápidamente dominado, era la primera vez, que sentía algo así, era yo quien siempre terminaba ese trabajo, pero ahora era un poco raro, que él lo hiciera… lo lleve a mis labios, mi lengua intentaba abrir el paso en ella, para explorar aquella calidad, inundándolo de pasión, mis manos recorrían su anatomía, mientras trataba de moverme para intercambiar papeles, no debía dejar que el me tomara a mí, nunca nadie lo había hecho y no deseaba que nadie lo hiciera, ¡Aquí el que manda soy yo!...

- ¿Quieres complacerme, o complacerte?

No pude evitar decirlo cuando de la nada le volqué ahora colocándolo debajo de mi, vaya que me había dejado a medias con esos deseos, le mordí el cuello de una manera tan enloquecedora, mi nariz rosaba con él, con su rostro, solo aspirando su aroma…

- Me has dejado casi desnudo, ¿no quieres ayudarme a quitarme lo demás?

Puse sus manos sobre mi cuerpo mientras me ponía de rodillas a sus costados…. Mirándole con perversión. Esta sensación rebasaba mis limites, era más que amor, era una ilusión plena, el tenerle ahora ahí, en un lugar que ni siquiera era mi hogar, pero no importaba, ahora solo lo quería a él, dormir a su lado, abrazar su piel desnuda, después del culminante acto de amor, quedarnos el tiempo que fuera necesario, solo para poder admirarle más. Era algo que no tenía precio alguno.

- Te amo… Te amo…

Spoiler:

por **Kei Koizumi** Vie Jun 03, 2011 2:57 pm

Le había apartado y él tardó en responder a aquel beso, abriéndole paso a su boca al sentir las caricias sobre su piel. Un gemido se ahogó en su garganta. El cambio en la posición le tomó apenas por sorpresa. Le sonrió viéndole a los ojos. Esa sonrisa aunada con su mirada eran más bien una forma de decir que estaba consciente de lo que pasaba y que de algún modo, le divertía escuchar aquella pregunta.

-¿No es obvio? -dijo acercándose y susurrándole a su oído -... Buscaba ambas cosas...

Y es que aquellas caricias que le estaba dedicando le estaban provocando una reacción en cadena. Había cerrado los ojos en un acto reflejo.
¿Ayudarle a quitarse lo demás? Apenas y se había dado cuenta de lo que le había quitado o no... No opuso ninguna resistencia cuando sus manos fueron guiadas hasta su cuerpo, de cualquier forma habrían terminado allí... Entre todo había cosas que no había podido evitar captar, como el sentir su respiración contra la piel ajena...

-Asagi... -susurró al momento de lamerle el lóbulo de la oreja antes de morderle ligeramente, sus movimientos eran lentos a propósito, estaba disfrutando el sentir su piel y ver cualquier reacción que su propia persona pudiese provocar en él, incluso las caricias que sus manos le estaban proporcionando estaban siendo diferentes... como si no tuviese prisa, aún cuando cierta ambición crecía en su interior. Y el escucharle decir 'Te amo' le estaba dispersando los pensamientos que tenía en ese instante...

por **Asagi Dunkelheit** Sáb Jun 04, 2011 3:41 am

- Completamente desnudo, a tu merced, vamos acaríciame, susúrrame, dime que deseas que te coja, que te penetre de golpe que tu dolor sea intenso pero placentero, dime qué quieres ser dueño de estas erecciones, de este erotismo cargado de palabras fuertes, vamos muévete a mi compas, sedúceme con una sola palabra, atrápame con las yemas de tus dedos y déjame violar tu interior déjame marcarte como perro en celo, como un animal salvaje, vamos resístete, cae a mi merced, confúndeme juega con mis labios, con mi lengua, déjame explorar rincones que no conocías, pon de nuevo tu boca sobre mi miembro y succiona toda la miel que de él emana, vamos dime que es deliciosa que te encanta y que soy un veneno, que me necesitas para sentirte lleno de placer y deseado, que soy el único que puede llegar a profanar aquel inmaculado ser que llevas dentro, vamos usa un lenguaje más fuerte a mi oído y provócame, pero recuerda una sola cosa… Aquí mando yo.

Su piel y la mía en contrate con la luz, en contraste del uno con el otro, un roce tan simple, tan pequeño y fugaz encendía cada parte de mi interior, como si estallara aquello, el grado de mi voz y palabras era algo que jamás me imagine usar pero mis gemidos y el moverme de manera subjetiva debajo de ese manto de ese cuerpo que se decía mío, era único, lo senté sobre mi miembro y lo abrace pero entre beso y beso, mis manos movían ambos cuerpos como en una danza con los gemidos de arriba abajo, restregándonos como dos gotas de agua sobre el cristal.

- Te amo… no lo olvides… me has vuelto loco me has hecho desearte cada vez más… aunque hombres seamos la pasión al igual que el amor nos ha tocado… Kei… Koizumi… Te amo… ¿Qué me has hecho para desearte tanto?

por **Kei Koizumi** Miér Jun 15, 2011 12:06 am

Esas palabras ¿olvidarlas? No, no creía poder hacerlo. Le hubiese gustado decir algo en contestación en cuanto le había escuchado, pero su respiración entrecortada por los gemidos que no había podido evitar dejar salir de sus labios no le habían permitido hacerlo.

Cada movimiento, cada roce encendían su cuerpo, que se movía con aquel ritmo, con aquella cadencia que despertaba sus más bajos deseos. Sus instintos que rara vez le dominaban, este era el momento en el que podía dejarlos salir sin preocupaciones, sin frenarse... eran parte de el...

-Tómame... Siénteme... Penétrame... Déjame sentirte... Hazme gemir sin reparo... enloquéceme...

Desconocía su propia voz hablando con ese tono sensual, afectada por el deseo y aquellos sonidos le parecían ajenos, pero sabía que provenían de él. Se movió sobre él, sobre su miembro en un compás marcado por aquella pasión proveniente de su interior, la misma que le estaba haciendo perder la razón...

-Te amo... Asagi...
Besó su cuello, dando leves mordiscos a su paso, mientras sus manos le tocaban con apetito, con ambición...

por **Asagi Dunkelheit** Jue Jun 16, 2011 12:52 am

- Eres un ángel, quiero ver aquella piel pálida exponiéndose a mí, quiero sentir la suavidad de tu cuerpo, quiero que sientas que aquí te domino, que soy el único que puede llegar a tocarte, el único que puede mirarte en todo tu esplendor, solo el único que pude tenerte a su merced, el único dueño de ese cuerpo que posees, quiero que lleves marcado sobre tu piel, cuerpo, alma y mente que eres mío y de nadie más.

Mis manos se deslizan suaves por tu cuello, las yemas resbalan como dos gotas heladas, sobre tus pezones. Poniéndolos duros, mientras recorren tu torso, acarician con tranquilidad con erotismo, con hambre, con dedicación cada parte, cada milímetro, pasan sobre tu anatomía, sobre lo perfecto que eres, se vuelven despacio a tus hombros, mis labios, son llevados a los tuyos, arrancando mordidas, deseo y lujuria, son los pétalos de una rosa, si aquellos que están en aquel florero, los que acarician tus labios ahora, mientras los míos se ocupan de besar y lamer tus hombros tu cuello, aquella codiciosa flor, acaricia lentamente tu rostro, mientras paro con delicadeza, ambas manos se encuentran en aquel centro, deslizando aquellas prendas por su cuerpo, eran estorbosas realmente lo eran más ahora. Bese sus piernas, mientras sentía como caía la ropa, con suavidad, podía notar el rubor de su rostro.

- Te marcare, esta noche no tienes escapatoria, quiero que sepas, que eres mío, solo mío y de nadie más, no quiero que ni el viento rose tu cuerpo.

por **Kei Koizumi** Lun Jul 04, 2011 10:17 pm

Acarició su rostro después de escucharle hablar. Cada lugar que sus manos tocaban parecía arder, empezaba a parecerle insoportable… El deseo se reflejaba en sus ojos de una forma diferente, le anhelaba de tal manera, con tal avidez que aquella pregunta que le había hecho bien podía regresársela. ¿Qué era lo que le había hecho para hacer que su cuerpo reaccionara de aquella manera? ¿Qué era lo que poseía que acallaba su conciencia, que le hacía perderse con sus roces, con sus caricias y le encendían de aquella manera?

¿Marcarle? No sabía cómo planeaba hacerlo, pero lo que decía era algo que le hizo dirigirle una sonrisa sincera y que reflejaba cierta calidez. ¿Por qué querría escapar ahora? Sinceramente, eso estaba lejos de ser lo que pretendía. Que su propio cuerpo se moviera de aquella manera insinuante, tratando de provocarle, tratando de sentirle… ¿no era eso la más fehaciente prueba de lo que ocasionaba en él? Tal vez él no podía ser capaz de verlo… pero él que lo sentía, sin duda alguna se daba cuenta…

Se acercó a sus labios reclamándolos en un beso, alimentado con una pasión sin límites… sus manos le rodearon al momento en el que acercaba su cuerpo que se encendía al compás de aquel sentimiento…

Le estaba reclamando para él, moviendo sus caderas a un ritmo guiado por el erotismo… Sus manos recorrieron su espalda lentamente y apretaron sus glúteos, mientras sus labios dejaban besos por su cuello, sus colmillos rozaban su piel fugazmente.

-Hazlo… -y aquello fue apenas un sonido inconsciente, ni siquiera pensó en contestar –Llévame al cielo o al infierno… Haz que mi cuerpo no reconozca a nadie más que a ti… devórame … hazme tuyo… no me dejes escapar…

Porque yo no pienso dejarte escapar…. No mientras estuviese en sus manos y pudiese evitarlo...

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