Bitter as coffee [anastasya]

por **Melinda Chavànnell** Dom Mayo 08, 2011 9:25 am

París, parís la ciudad de los croissants, las boutiques y sus deliciosos cafés en as terrazas. Aquella mezcla de colores y sabores que la hacían exquisita y extremadamente apetecible para todos los paladores, desde los más esquisitos a los menos acostumbrados. Respiré de nuevo, dejándome embriagar por aquella sensación que me proporcionaba caminar por las calles parisinas, mis calles predilectas por las que te podías perder y descubrir infinitos mundos con solo cruzar una acera.

Adoraba haber regresado, aunque, por desgracia, conocía a poca gente allí, se podría decir que era una neófita de la sociedad, y a excepción del hombre del lago, el jardinero y mis hermanos, no conocía a nadie más aunque... todo podía cambiar no? Sonreí al notar como algún joven se giraba para mirarme y me adentré por una de las callejuelas extravagantes y lujosas de París para a continuación entrar en uno de sus ruidosos cafés.

Nada más entrar, de nuevo ese olor a bollería casera, mezclado con el aroma de los caros perfumes de las mujeres y los gritos de los niños tratando de hacerse con algunos de los dulces. Me senté en una de las mesas, en una esquina del café que no estaba muy concurrida y, tras pedirle al mesero un amargo café y un par de croissants de mantequilla saqué un pequeño librito y me dispuse a leer las aventuras y desventuras amorosas de dos personajes clásicos de la literatura universal: Romeo y Julieta

por **Anastasya Shayk** Dom Mayo 08, 2011 9:48 am

Con uno de mis mejores vestidos y un precioso tocado me dispuse a salir de mi mansion a tomar algo... Llegué a un cafe extravagante, concurrido y con muy buen ambiente. Antes de entrar en aquel café me atuse un poco el vestido y alcé la cabeza orgullosa para entrar con prepotencia y soberbia a aquel cafe parisino.

Cuando fui a abrir la puerta un joven que deseaba salir se me quedo mirando, yo simplemente le aguante la mirada y con una leve inclinacion de cabeza entre alli, algunas que otras miradas se posaron en mi, siempre se agradece en esos sitios que aparezca alguna dama bonita.

Cuando me disponia a sentarme en una mesa de las que estaban disponibles pase al lado de una joven humana que estaba leyendo un librito. Mi aguda vista leyo rapidamente el titulo, Romeo y Julieta... que historia mas preciosa... tanto sufrimiento, tanto dolor, la muerte ... el unico fallo que le veia era esa estupida historia de amor... a quien se le ocurre...

Me sente tranqulamente y rapidamente me vinieron a atender.
- Bonjour madame. ¿Que desea? - pregunto el camarero.
- Madmoiselle por favor... - le corregi. - Un té early gray por favor... Y pongale otro a esa dama de ahi . - dije señalando a la humana que leia Romeo y Julieta.

por **Melinda Chavànnell** Dom Mayo 08, 2011 9:57 am

Mi lectura se vio interrumpida por la entrada de una joven, aparentaba mayor edad que yo, rubia, y alta a la que todos los hombres se quedaban mirando. Sin duda tenía un porte altivo y orgulloso algo corriente en la gente de nuestra clase... Pero había algo en ella que... no era igual... tenía algo casi inapreciable que la hacía diferente al resto de chicas que estábamos allí aunque no sabría decir bien de qué se trataba aquello.

Sus ojos se posaron brevemente en mi libro y sonrei ligeramente, sin duda había escogido el libro adecuado, una mezcla de amor, odio, vida y muerte con los tintes del romanticismo victoriano tan típico de los ingleses, escuché como ordenó también un té para mi e incliné la cabeza a modo de agradecimiento

Una historia increible no cree? Tiene la mezcla perfecta de todo lo que necesita un libro para ser una obra maestra aunque... en mi opinión tiene demasiado dramatismo romántico Soreí ligeramente dejando el libro a un extremo de la mesa para a continuación presentarme Melinda Chavànnell mucho gusto mademoiselle

por **Anastasya Shayk** Dom Mayo 08, 2011 2:48 pm

Pronto la chica se dio por aludida por mi invitacion y me miraba como intentando descubrir algo oculto... obviamente mi propia naturaleza le resultaba en cierto modo atrayente... como un iman. Era lo bueno de ser una depredadora nata, que las presas incluso se acerccaban por las buenas a ti.

Le correspondí su inclinacion de cabeza para aceptar su agradecimiento y tambien le dedique una leve sonrisa sin dejar que mis colmillos se vieran, de lo contrario se destaparia toda la verdad... y de momento no queria eso, bajo ningun concepto. Comence a revolver con delicadeza mi taza de té para disolver el azucar, lentamente se fue mezclando con la infusión.

- Un buen libro sin duda. Coincido parcialmente con usted. Tiene la cantidad justa de dramatismo... pero para mi posee demasiado romanticismo...- argumenté. - Encantada madmoiselle Chavánnell. Yo soy Anastasya Shayk.

Dejo el libro a un lado de la mesa y con un gesto con mi mano, la invite a ocupar un asiento a mi lado. Mientras esperaba si ella correspondía mi invitación de nuevo di un pequeño sorbo al té, aun demasiado caliente para cualquier humano... indiferente para mi. Mi agudo oido capto una conversacion del camarero con uno de los clientes que alardeaban de porte apoyados en la barra sobre nosotras dos... nos estaban mirando y alagando galantemente desde la distancia. Miré hacia alli, y les dedique a ambos una sonrisa dulce de buena dama.... cuan distitnta era la realidad

por **Melinda Chavànnell** Dom Mayo 08, 2011 3:07 pm

Me senté a su lado, había algo que me atraía a obedecer sus órdenes, aunque bueno más que órdenes eran... cómo llamarlo, ¿sugerencias? me acerqué la taza a mis labios, aunque rápidamente tuve que apartarla, demasiado caliente para mí, incluso me atrevería a decir que demasiado caliente para cualquiera. La deposité de nuevo sobre el platito de porcelana para limpiar cuidadosamente mis rosados labios con una servilleta, observando como la chica rubia, no hacía ningún gesto que mostrara que la taza estaba muy caliente o muy fría, ¿mera coincidencia?

Es probable... pero si se pone a pensar todas las grandes novelas, bueno miento, todas las novelas que han sido reconocidas como grandes, poseen algo de romanticismo, parece que es algo indispensable en nuestra vida no cree?

Sonreí ligeramente exhalando sutilmente algo de aire sobre mi taza para que ésta pudiera ser, al menos bebible éste es uno de los mejores cafés de la ciudad pero sin duda... no conocen el término medio, o te sirven las cosas recién salidas del fuego, o como un auténtico hielo no cree? Me percaté de que la joven miraba hacia algún lado lejos de nuestra conversación en la barra de la cafetería había dos de los mozos hablando animadamente pero no conseguí adivinar de que hablaban, era imposible escucharlo, por lo que no entendí el interes que mostraba mi acompañante en su conversación

Le parece atractivo el camarero Mademoiselle Shayk? Es curioso lo galantes que pueden parecer algunas de las personas de la clase obrera pero... siendo sinceros no está bien visto que una dama de nuestra posición se interese por ellos... no nos convienen no cree? Di un pequeño sorbito a mi taza de té, por lo menos y ano notaba que mis labios abrasaban al llevarmela a ellos

por **Anastasya Shayk** Lun Mayo 09, 2011 8:41 am

Escuche cuidadosamente las observaciones que hacia Melinda, me parecia interesante su punto de vista pero aun asi... no podria entenderla del todo... al fin y al cabo sera por no tener sentimientos de ese tipo.

- Supongo que si, que es necesario madmoiselle Chavánnell . - dije asintiendo levemente . - Pero quien puede asegurarlo.. segun el dicho, para gustos se hicieron colores.

Vi como ella soplaba levemente su taza y la imite con cautela... llevaba mucho tiempo sin sociabilizarme con humanos, supongo que ya habia perdido las costumbres de ese tipo. Aquellos dos hombres seguian hablando y parecia que mi mirada dulce pero con un cierto motivo de aviso no habian causado ninguna sensacion en ellos.

Los que rondaban esos lugares no solian ser caballeros precisamente, sino que bajo su aparente caballerosidad de niños ricos buscaban el descontrol y la... " juerga (?)" si es que se podia decir alli.

- O no, no me malinterprete madmoiselle... no es que me parezca atractivo... - dije riendome para mis adentros para que no me viese. - De hecho madmoiselle... jamas... estaria con un hombre inferior a mi sin mas objetivo que utilizarlo para mi proiopio beneficio...

por **Melinda Chavànnell** Lun Mayo 09, 2011 1:02 pm

rei ante aquel curioso, sarcástico pero acertado comentario por su parte. Una personalidad enigmática sin duda, muñeca frágil de porcelana por fuera y por dentro más venenosa que una víbora Africana dispuesta a clavarte los colmillos en cuanto estuvieras de espaldas a ella... ¿hasta que punto estaría yo en lo cierto? Ni yo misma podía imaginarme cuán acertada era mi comparación

Como dirían en la civilizada y aburrida Gran Bretaña Mademoiselle "that is such a wicked comment" rei jovialmente mientras mis labios se aproximaban de nuevo a la taza, para en esta ocasión, dar un sorbito algo más grande al anterior Aunque la verdad admiro a las mujeres con caracter como usted... Creo que yo jamás sería capaz de jugar con los sentimientos de un hombre, es más, creo que serían ellos los que tendrían una inconmesurable facilidad para jugar con los míos. He de reconocer que a pesar de creer en el progreso y en lo racional... no puedo ahogar mi parte románttica

Aparte el cabello que caía sedosamente sobre mi hombro izquierdo dejando así mis hombros y mi cuello al descubierto. Volví a observar a los dos camareros de los que apenas había acabado de nombrar y comprobé la forma en que nos miraban. Revolee los ojos y solté un pequeño suspiro, odiaba que los hombres nos miraran como si fueramos un vulgar bistec, ¿cuándo se darían cuenta de que las mujeres eramos algo más que objetos?

por **Anastasya Shayk** Dom Mayo 15, 2011 3:40 am

No pude evitar esbozar una leve sonrisa cuando dijo que alagaba mi caracter... una agradecia de vez en cuando que le dijesen esos detalles. Creo que esa chica podria tener suerte... tener una vampiresa de conocida... era una ventaja muy grande y me empezaba a caer agradable la chica... Raro en mi... me estaba ablandando y eso no podia ser. Endurecí de nuevo el rostro y bebí un poco.

- Eso es un fallo por su parte Melinda. ¿Me permite llamarla por su nombre de pila? -pregunte recordando la cortesia.- .Debería aprender a jugar con ellos, como ellos hacen en ocasiones con nosotras... no se merecen ser mas, aunque esta sociedad este asi estipulada- dije pensando que eso deberia cambiar... no era justo para las feminas tener que estar sometidas por los varones.

Comence a jugar con uno de mis anillo, haciendolo girar en torno a mi dedo... tenia demasiadas cosas en la cabeza ultimamente y me distraia con facilidad... cuando digo que me estaba ablandando me estaba ablandando de verdad ... que.... mala suerte.

- Perdone por la pregunta Melinda pero... usted tiene pinta de... como decirlo... dama que se compromete rapidamente pero por lo que me dice... aun no lo esta. ¿Me equivoco?

por **Melinda Chavànnell** Lun Mayo 16, 2011 12:31 pm

Bebí otro pequeño sorbo, acabando así aquella deliciosa y cálida taza de te que me había hecho interesarme más aún por nuestra conversación. Su personalidad era inquietante, inusual en las chicas de aquella época y más inusual aún en las chicas de la alta sociedad francesa. Escuché a sus palabras, casi hipnotizada por el tono de su voz y al fin pude contestar torpemente

Por supuesto que la permito Anastasya, se me olvidó preguntarle si me permitía usted, que descortés por mi parte... y sí es probable que eso sea una buena e innovadora fuente de diversión pero... no sabría como jugar con ellos Mademoiselle... hace apenas pocos días que recibí un primer beso en mis vírgenes labios y para colmo no fue intencionado... así que... ¿cómo sería yo capaz de seducir a un hombre y jugar con él?

Gran pregunta desde luego, y más aún considerando que ni siquiera sabía la respuesta, a mi juicio, era demasiado joven y no muy bella para poder seducir a un hombre y poder así jugar con él... y en el caso de que algún hombre se dejara seducir... probablemente sería yo la que acabaría entre sus redes y no al contrario. Un pequeño suspiro se escapó de entre mis labios, deseando tan sólo por un momento tener ese aspecto seguro de sí mismo y tan atractivo de la señorita Shayk.

De nuevo escuché sonidos, sonidos provenientes de sus labios a los que tarde un cierto tiempo en contestar pues mi abstracción hizo que tuviera que repetir en mi mente las palabras de Anastasya... ¿prometida? No, o eso que yo supiera... No Mademoiselle, está usted en lo cierto aunque... mi hermano está empeñado en encontrarme marido antes del final del año y por ahora sólo he tenido dos postulantes un chiquillo de 7 años que asegura estar locamente enamorado de mi y un hombre de avanzada edad únicamente interesado en mi dote y futuro patrimonio

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