Bailarina enloquecida Libre

"Rojas son nuestras caras y plomo es el cielo, de par en par las puertas del infierno, y sus vientos furiosos están sueltos; sube el polvo a la faz del firmamento y bajan las nubes,sudario ardiendo peso al subir y duras al posarse. El alma humana pierde su alimento, lejos de la pequeñez y el esfuerzo, dolido el corazón, enfermo el cuerpo,como polvo de un sudario se echa al vuelo el alma, que se aparta de su carne, como el cuerno del cólera, en su estruendo."

¡Oh tú, que danzarina se llama, sabe hoy que no aprendío a danzar! Se encontraba juguetona y pequeña, danzando en el olvido y persiguiendo a su sombra. Giraba como una abeja, y sus pies y sus cabellos, color de camino, se empolvaban con el polen de un polvo rubio.Se veia venir de la soledad cautiva, meciendo el ánfora en su cadera, mientras, al compás de sus pasos, sobre su túnica saltaba la pasion en redondas lágrimas, en serpientes de plata, en menudos cohetes rizados que ascendían, helados,hasta su mejilla. Ella caminaba lenta, seria, mas llamo la danza a sus pasos. No miraban su rostro, seguían el movimiento de sus rodillas, el balanceo de su talle, en la arena leían la forma de sus talones
desnudos, la huella de sus dedos abiertos, que comparabas con la de cinco perlas desiguales.

Beatrix soñaba en aquel pasado hermoso, donde todo era color de rosa, donde al fin podia sentir de nuevo el amor a lo que un dia encontro y sentia que era inmensamente feliz.,
recordaba cuando cojia flores, perseguia las mariposas. Llamaban danza a su carrera y cada reverencia de su cuerpo inclinaba sobre los claveles purpúreos, y el ademán, repetido en cada flor, de echar atrás, por encima de su hombro, un chal resbaladizo.

En su casa, sola entre sú tristeza y la alta llama de una lámpara, pedian que Danzaran y ella no danzo. Pero desnuda en sus brazos, sujetaba a su lecho por la cinta de fuego del placer, se llamo, sin embargo, danzarina, al ver agitarse bajo su piel, desde su pecho ofrecido a sus pies crispados, la inevitable voluptuosidad. Fatigada, anudo sus cabellos, y los contemplaba, dóciles, arrollados a su frente como serpientes hechizadas por la flauta. Por esa razon, odiaba recordarlo, le volvia a doler como antes, aprecia un tormento mientras recordaba cada palabra, movimiento hasta esos olores que le ofrecia el mundo. Rio y apresurando su paso, parecia bailar y no le importaba solo queria deshaparecer entre el
silencio y la noche.

"Te vas, siempre pequeña y maquillada por el sol poniente, hasta no ser, en lo alto de la colina, más esbelta en su túnica negra que una llama vertical, que danza imperceptiblemente..."

Salir queriendo danzar hasta lo mas lejos. Saludar a la luz, que le hizo hermosa y se vio amada con una danza involuntaria, cada día más lenta.Una última danza trágica se enfrentará con la muerte, mas sólo luchara para sucumbir con elegancia. Que los dioses se concedan una caída armoniosa, juntos los brazos en su frente, doblada una pierna y extendida la otra, como presta a franquear, de un salto ingrávido, el negro umbral del reino de las sombras...Se llamaba danzarina, y, sin embargo, no sabia bailar...

Sueños, solo sueños escondia la hermosa dama,pero perdida en su mundo, girando con los brazos extendidos al aire, reia con goce y astucia por saber que aun vive y que jamas
volvera a sufrir, solo gozar, enamorar mas no enamorarse, jugar jugar que es lo unico que desea y alimenta....