Peligro... el éxtasis de la vida.(priv)

Caminaba por el cementerio sin problemas, había pasado ya varias veces por ahí, venia de una noche de caza, había sido una persecución atareada de un licano que al final se les había escapado.
Suspiro, de camino a “casa” habia tomado un baño en la laguna con su hermano para refrescarse. El plan era regresar al burdel y encargarse del negocio el resto de la noche, quien sabe tal vez no estuviese la velada completamente perdida y apareciese algún cliente al cual sacarle información de utilidad.

Desgraciadamente su hermano se había quedado entretenido con una gitana por el camino. Ella había preferido pasar de la “diversion” la chica que se habian encontrado parecia estar demasiado “alegre” para su gusto, hablaba muy fuerte y... en fin simplemente no se le había antojado quedarse.

Enredo los dedos en su cabello sacudiéndolos, salpicando el agua que los empapaba aun, estaba tan distraída en la acción que no se dio cuenta de que caminaba directo hasta otro sujeto, y hubiese chocado con el pero el instinto de cazadora le hizo dar un paso atrás antes de chocar aun cuando habia tenido los ojos cerrados.

Frente a ella se encontró con la imagen de un hombre alto...bastante alto... le gustaban los hombres altos. Lo observo en silencio unos segundos y penso que era justamente el tipo de hombre que le agradaba... altos, con una presencia fuerte, le gustaba sentirce amenazada y pequeña junto a ellos... no era que quisiese irce a la cama con cualquiera con esas caracteririticas, simplemente era el tipo de hombre que le gustaba tener cerca, asi fuese simplemente parado a su lado. Un pequeño fetiche que ni su hermano conocia.

- caballero un hombre como usted deberia hacer algo mas de ruido, matara de un susto a alguien con esa apariencia que tiene - solto sin mas, una sonrisa se dibujo en su rostro angelical y sus ojos mostraron la chipa y la pasion que simpre le quedaba despues de un dia de caza...

Lo que habia dicho no habia sido lo mas educado teniendo en cuenta que se trataba de un desconocido... pero ese hombre decia peligro por todos lados y ella no podia evitar buscar todo lo que fuese peligro.

Esa noche le cubria un sensillo vestido verde, estaba roto por los lados, como si fuese viejo, no creia que aquel hombre puddiese imaginar que simplemente así podía moverse mejor al salir de caza? Sus pies llevaban sandalias de piso, con cuerdas entrelazadas en sus finos pies blancos, jamas los perderia no importaba donde se moviese. la daga escondida en su pierna, disimulada por la tela suelta y el cabello suelto... simplemente por que le gustaba usarlo asi... Souhard se había quedado con el resto de las armas, solo traía la daga. Dejando de lado sus habilidades en el cuerpo a cuerpo estaba casi indefensa. Eso hizo que las mejillas se sonrojaran de emoción.

Vestia como una campesina cualquiera, con la belleza y la gracia de una aristócrata, sus movimientos sutiles y finos, sus gestos burlones y recatados, y su rostro bello escondiendo el peligro.

Le tendió mano como lo hacia regular mente al presentarse, esperando el beso de cortesia en ella...la sensación que le recorría el cuerpo la distrajo lo suficiente como para que el acto saliesen aun cuando vestía de aquella manera.

-Antiette - se presento, nunca decía sus apellidos y es que no necesitaba que todo paris se enterara de el titulo que portaba, era una cazadora y como tal se mantenía oculta, cuando llegase el tiempo podría retirarse y disfrutar de su titulo y de una vida cómoda y sin preocupaciones, perspectiva que sinceramente no le emocionaba en lo mas mínimo- y no creo que usted de una apariencia de blanco fácil no importa lo que haga- comento con una sonrisa, de repente la idea de su mano pequeña en las grandes de aquel sujeto le pareció divertido... sus manos eran delicadas, de dedos largos y delgados, blancas y de apariencia suave, poco hombres notaban la piel endurecida en la palma y la punta de los dedos a causa del uso constante de armas.

Normalmente no era distinguible por el uso de los guantes, en dias como ese, no habia nada que disimulara el estado de sus manos pero no era necesario, con la apariencia que traia pasaba por una campesina mas, con manos acostumbradas al trabajo, acostumbradas a buscar como ganarce la vida.

- y yo... - rio un poco- que que hace una joven como yo por aquí?- se acomodo un poco el pelo en un gesto in pretensiones- mireme, que podría hacer una chica como yo por aqui? Visitaba las tumbas, lo que es mas curioso, que hace un hombre como usted por aquí? No me diga... visitando una tumba?- con cierta diversión en su voz, ella no estaba ahi para visitar una tumba y le daba la impresión que fuera cierto o no el daría la misma respuesta.

Antiette rió, ese hombre le estaba mintiendo, como si un hombre que caza zorros pudiese tener manos como aquellas... y los rasguños se los había hecho como? Buscando rosas? De cualquier forma no le interesaba demasiado que le dijese la verdad. Ella no lo hacia asi que era justo que el se mantuviese distante.

-aristócrata?- parpadeo varias veces y soltó su mano despacio, dejando una caricia...realmente le gustaban sus manos... el tacto osco y duro contra su piel era embriagante...-que atrevimiento el mio al tomarme tantas confianzas-con falsa vergüenza- le ruego me disculpe caballero y descuide-sonrio despacio- no tengo mas pendiente es ta noche que el que mi gusto me adjudique- sonrió y se alejo un paso dándole por un momento la espalda.

Ese sujeto había demostrado hasta ahora ser todo un caballero pero el simple hecho de darle la espalda le erizo la piel haciendo que un escalofrió le recorriera la columna... ese hombre no daba el mas mínimo indicio ni tenia razones para atacarla... pero las costumbres ganaban y dejar su espalda tan descubierta le lleno de una sensación de desvalidez que le fascino.

Ella no era bajita, de hecho media 170, con tacones era una mujer no solo hermosa si no hasta alta...sin embargo junto a aquel sujeto se sentía pequeña... ella era fuerte, se habai entrenado desde pequeña y no había aristócrata al que no pudiese noquear sin problemas, mas sin embargo aquel hombre desprendía un aura fuerte y sus manos despertaban cierto deseo en ella...

Jamas lo diría en voz alta... pero sentirse dominada por alguien mas le exitaba sobremanera...por eso la caza era tan divertida... ningún licano era un debilucho y ningún vampiro quedaría noqueado con alguno de sus golpes... Cazar le gustaba y el placer seria mayor cuando lograsen cazar al causante de la muerte de su madre... entonces su padre podría descansar en paz y ellos habrían cumplido su promesa.

Ese dia se quitaría un peso del alma... aunque la perspectiva de volver a “casa” y ser publicamente Condesa no le atraía en lo mas mínimo. Rodeada de gente de cristal...aquello seria un verdadero suplicio... bueno. Al menos su hermano estaria ahi... con suerte algun hombre parecido al que estaba en esos instantes con ella.

- Asi que colecciona arte? Tiene algún sitio a donde ir? Si no es así por que no me ilustra un poco?- tenia curiosidad. Que le diría esta vez?realmente coleccionaba arte? si era asi... de que clase podia gustarle?

Sus dedos soltaron despacio la tela entre sus dedos y sonrió levemente bajando la mano por su pecho.

-asi que me deja campo libre?- pregunto con un deje de coquetería su mirada se centro el el pecho del otro, estaba casi descalza con aquellas sandalias y el sujeto era alto...era muy raro que parada a esa distancia pudiese ver el torso de su acompañante con tanta libertad... sus dedos se pasearon traviesamentre por la tela de la camisa...tanteando... sus músculos se alcanzaban a sentir fuerte y volvió a levantar la vista. Esta vez tomo el cuello de la camisa ajena y lo jalo hacia ella levantándose un poco para alcanzar sus labios... La sensación que le invadió le impacto... le gustaba bastante sentirse así... no era una doncella virgen, lo admitía, había tenido uno que otro encuentro pero no recordaba haber tenido que levantarse asi nunca para alcanzar los labios de su acompañante.

Roso sus labios...los acaricio con los propios y no profundizo el beso...simplemente se deeito con el rose de sus labios y la cercanía de su cuerpo... Sonrió un poco y se separo de el. Ese hombre era definitivamente su tipo y le despertaba todos los nervios del cuerpo, pero estaba acostumbrada a ser seducida... no a buscar la atension de ningún hombre y no iba a comenzar ahora...

-gracias por el dulce...- susurro contra sus labios antes de separarse y acomodarse el cabello, buscando que su cuerpo se enfriara poco a poco.

Era tiempo de despedirse, de marcharse y recuperar ,la compostura... pero tampoco quería perder la oportunidad de volverse a encontrar... el silencio se apodero de sus labios mientras su mente arrebolada intentaba encontrar una forma de saber como ubicarlo.

Retrocedió por mera inercia al verle acercarse, sintió el árbol chocar con su espalda y levanto los ojos al sujeto que la arrinconaba cual cazador a su presa. Sus ojos brillaron de exitacion... le encendía bastante la forma en que el cuerpo ajeno cubria el suyo, escucho sus palabras y ahogo un suspiro al sentirle en su cuello... Ese hombre la ponía sensible...solo un roce le hacia temblar de anticipacion y anhelo...

Lo vio acercarse, noto sus intenciones y sus ojos se entrecerraron mientras sus labios se entreabrían- me parece justo- susurro recibiendo sin objeciones los labios ajenos ajenos sobre los suyos, sus brazos se movieron sin su permiso y atrevidos rodearon el cuello ajeno logrando sentir el torso fuerte contra sus senos... su piel entera estaba tibia... estaba excitada y de tener algo mas de sentido común se habría sentido avergonzada con ellos sin embargo... sin embargo tampoco estaba pensando demasiado. De hecho... de momento solo estaba sintiendo...

Aquel hombre no era un vampiro...no...su piel era ardiente como la suya. No asomando ni de lejos la fría y muerta de los hijos de la noche... tampoco era un licano... no, su temperatura era la de un hombre normal y la luna en el cielo no parecía afectarle... podria haber ido un hechicero... pero por ella... podia ser el mismo satanas y no le habria importado cuando podia elevar su libido de formas que no habia imaginado antes...

Ademas...aun sentia la daga en su pierna... si intentase cualquier cosa aun podría regresarle la moneda... cierto...la daga... mmm no era gran cosa, una chica podía tener muchas razones para cargar una si es que el otro llegaba a descubrirla... el diseño... siempre habia gente que ni siquiera sabia lo que tenia, no había nada de raro en que llevase consigo una daga de plata con inscripciones a todo lo largo... Aunque sinceramente no es que la lógica de su cerebro estuviese funcionando muy bien cuando lo único que procesaba era lo bien que se sentía el cuerpo ajeno pegado al suyo.

Sintió como se separaba de ella y le observo... su respiración estaba agitada y solo por un segundo se vio un atisbo de “dolor” en sus ojos, se había sentido rechazada, pero se repuso enseguida... el sujeto tenia la respiración agitada...

Sus ojos se clavaron en los ajenos y sonrió suavemente- descuida- susurro bajando sus brazos despacio... acariciando su torso descuidadamente... sus dedos rozaron hasta llegar al borde de sus pantalones y metio los pulgares en ellos como apoyándose de el- te eh asustado?- sonrió con una burla muy ligera- lo lamento- se disculpo con “pesar”- y descuida no me siento ofendida- ladeo el rostro mostrando aquella expresión angelical que tan ensayada tenia y solto una risita pasita- y tampoco me sentirse ofendida si te alejas ahora- como si comprendiera- si las mujeres no son de tu agrado yo comprendo.

Ese sujeto se habia estado comortando como todo un caballero, un comentario como ese podía molestar a cualquiera... pero si molesto se descolocaba un poco estaría satisfecha... ese hombre despertaba en ella ganas de provocarlo... de encenderlo. Aquellos ojos eran seguros, disididos... como se verían molestos? Excitados? Seguramente su expresión seria incluso amenazante... sonrió para sus adentros... como le gustaría verlo...

Se encogió de hombros como restandole importancia y dejo que la tela del vestido resbalara dejando la piel un poco expuesta... no estaba acostumbrada a tener que provocar el deseo de nadie asi que si era probable que estuviese siendo muy obvia.

Soltó un suspiro esta vez audible y sonrió al sentir su cometido logrado y la adrenalina que le recorrió el cuerpo el deseo y la excitación que sintió con aquel simple y brusco movimiento valían la pena... El sujeto la había levantado y ella volvió a rodearlo con uno de sus brazos y busco su rostro.

-aprovechate de mi caballero...- le susurro completamente poseída por las ansias de sentirlo- hazlo que no recuerdo haber sentido tal fuego recorrer mi cuerpo antes...- la mano que tenia libre viajo hasta su pierna y saco la daga que tenia escondida y en un movimiento la clavo al lado de su propio rostro y sonrió un poco- no la necesito de momento...- rodeándolo con ambos brazos, enredando sus dedos en su cabello.

- nunca me eh tomado a bien los rechazos- susurro contra los labios ajenos- no me hagas enojar caballero- se estuviese en sus cinco sentidos se abria dado cuenta de lo que ese sujeto podía llegar a hacer con su mente. Ella no perseguía la perseguían y desde luego ella rechazaba cuando quería, no amenazaba para tener la pasión de nadie!

Desgraciadamente estaba muy lejos de estar en sus cinco sentidos y muy, si muy cerca de tomar la daga que había clavado en el arbol e incrustarla en la carne ajena solo por volver a ver aquella expresión embravecida nuevamente. Era increíble como en el descontrol, era mas ella misma que nunca, decidida, apasionada y sin demasiados prejuicios morales...