Escapar [Daze]

por **Neysa Igneel** Vie Sep 16, 2011 2:11 pm

Volví a dibujar mi falsa sonrisa en mis labios y continué caminando al lado de aquella chica de mi edad que decia llamarse "mi nueva mejor amiga" al rededor del lago, perdiendo mi mirada en la superficie de este. Me daba ganas de empujar a aquella chica al agua y perderme de allí lo bastante rápido para no ser encontrada si me llegaba a buscar, pero como bien sabia, eso no seria propio de una "dama" como mis hermanas-aparte de mi madre e institutrices-decían que yo era.
¡Quien podía ser una dama con una alimaña como compañía!
Suspire y fruncí el ceño, acelerando un poco mi caminar. Quería quitármela de encima, y si no podía tirarla al agua y divertirme un rato a su costa, la perdería de vista a la primera que tuviera.

Acelere un poco mas el paso y justo cuando ella se detuvo para saludar a unos pomposos-y estirados palos de escobas con esmoquin-jóvenes que al parecer la conocían salí corriendo hacía algún lugar lejos de ella, de su forma de ser tan estirada y de su voz chillona-gritona seria una mejor definición-que me sacaba de quicio.

-Prefiero escuchar el chillido de un murciélago que la voz de esa....-murmuraba la joven, desapareciendo de la vista de su "amiga" y buscando un nombre apropiado para llamarla-tipeja, a falta de un calificativo mejor, creo que le queda bien.-finalizo. Giro un poco el cuello para asegurarse de que no era seguida y sonrió. Tal y como suponía, aquella actividad que era correr era demasiado para aquella chica.

"Pobre del que se case con ella"-me dije mentalmente mientras me detenía y sentaba en la fresca hierva a descansar.Aquellos zapatos, aquel pomposo e incomodo vestido y aquel peinado no eran adecuados para correr, menos todo lo rapido que yo había logrado correr aun vestida así

-Estoy muerta-comento, dejándose caer de espaldas sobre la hierva mojada y mirando al cielo azul con fijeza.Le gustaba estar en libertad, sin personas que solo se juntaban con ella por su dinero.-Quizás debería renunciar a todo y empezar una nueva vida como....Bueno, seguro que se me ocurriría algo-se decia en voz alta mientras sus manos quitaban las pequeñas horquillas de su pelo y lo deja caer libre por todo el suelo, como una mancha brillante de hermoso color castaño chocolate.Sus ojos, se cerraban mientras que concentraba sus sentidos en la tranquilidad del lugar.

por Invitado Vie Sep 23, 2011 1:05 pm

Aquel día se había levantado feliz. Se había despertado al lado de la persona a la que más amaba en el mundo entero y no sólo eso, sino que por fin parecía que la buena suerte le sonreía un poquito. Nada más abrir los ojos se había dado la vuelta despacio para acunar en sus brazos a aquel inmortal que de alguna forma lo anclaba a la vida a la par que le robaba el aliento. Y lo había llenado de besos, sí, sin perder el tiempo. Y se había deleitado con su tacto y se había embelesado con su sabor y con su aroma.
Pero el día había llegado y a Daze sus piernas le pedían moverse para recuperar fuerzas… tras tantos días sólo tumbadas y haciendo fuerza.

Nada más cerrar la puerta de la calle dejando a su amor dentro se encaminó hacia un lugar al que siempre acudía cuando se sentía de alguna forma extraña que no podía explicar, o cuando no podía encontrar la raíz de algún problema. Paseó por toda la ciudad admirando su belleza, una belleza que ahora le parecía mucho mayor gracias a su alto estado de ánimo y su felicidad interior. Caminó y caminó hasta que poco a poco fue dejando atrás la urbe y se adentró en los campos que separaban la civilización del campo y de la vida rural.

Sus pasos lo llevaron hasta la orilla de la laguna, adornada por un brillo reflejado sobre la superficie de sus aguas, tranquilas. Vio a varias personas, pero no prestó atención a ninguna en concreto debido a que cuando iba caminando pisó algo que lo hizo detenerse y mirar hacia abajo, agachándose. No vio nada. Volvió a levantarse, algo confuso, y al dar otro paso notó algo bajo el pie. Entonces parpadeó y lo levantó, viendo incrustada en la suela una… ¿horquilla? ¿Qué hacía una horquilla en el suelo de una laguna?

Rascó su suela para quitársela y la miró un momento. Parecía una horquilla normal, de modo que… Con la intriga en su pecho comenzó a mirar a su alrededor ahora sí fijándose en la gente y… avistó a una muchacha tumbada en el suelo, con el cabello esparcido por éste. Era una chica muy mona y jovencita, quizá fuera suya. No perdía nada por probar… Con la horquilla entre sus largos y finos dedos dio unos cuantos pasos hasta que los detuvo al lado de la cabeza de la chica. Sonrió y con voz dulce le preguntó -Disculpa… ¿Por casualidad es tuya?

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