AÑO 1842
Nos encontramos en París, Francia, exactamente en la pomposa época victoriana. Las mujeres pasean por las calles luciendo grandes y elaborados peinados, mientras abanican sus rostros y modelan elegantes vestidos que hacen énfasis los importantes rangos sociales que ostentan; los hombres enfundados en trajes las escoltan, los sombreros de copa les ciñen la cabeza.
Todo parece transcurrir de manera normal a los ojos de los humanos; la sociedad está claramente dividida en clases sociales: la alta, la media y la baja. Los prejuicios existen; la época es conservadora a más no poder; las personas con riqueza dominan el país. Pero nadie imagina los seres que se esconden entre las sombras: vampiros, licántropos, cambiaformas, brujos, gitanos. Todos son cazados por la Inquisición liderada por el Papa. Algunos aún creen que sólo son rumores y fantasías; otros, que han tenido la mala fortuna de encontrarse cara a cara con uno de estos seres, han vivido para contar su terrorífica historia y están convencidos de su existencia, del peligro que representa convivir con ellos, rondando por ahí, camuflando su naturaleza, haciéndose pasar por simples mortales, atacando cuando menos uno lo espera.
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Una visita inesperada [ Giselle]
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Una visita inesperada [ Giselle]
Sábado, - Madeimoselle, Lesseps - dice Darla tocando la puerta de mi habitación y pasa no encontrándome en ella. De un momento a otro pasa por la puerta que da a un costado del closet llegando así a mi laboratorio donde yo me encontraba mezclando esencias Jazmín con Frambuesas. - Darla... - dije dejando su nombre al aire - espérame me falta una gota y esto quedara perfecto - dije casi sin respirar ya que la medida tenía que ser exacta. Vertí la Gota de Frambuesa al frasco donde tenía el jazmín con bálsamo y éter para darle la durabilidad necesaria, deje el frasco tapado y me di vueltas para ver a mi nodriza. Alta, morena, de cabellos negros con una trenza hacia atrás y con su sonrisa impecable y amplia, - Dime ¿que te aqueja? - le dije mientras volvía a mi habitación, aun andaba en pijamas y ya eran algo así como medio día, - Mi lady, tiene visita - me dijo con su tono natural - ¡Visita! - exclame algo exaltada por cómo me encontraba vestida, quizás pensarían que era una floja... - Ayúdame a vestirme - le dije mientras me pasaba un vestido color gris con detalles en rojo, me senté para arreglarme mientras ella apretaba el corcel... me hice un peinado rápido y rocié sobre mi cuello perfume -¿quien ha venido a visitarme? - pregunte mientras me observaba en el espejo que todo estuviera en su lugar.
- Es una señorita de la familia Laroche, Giselle - me dijo el apellido lo reconocía, claro que lo reconocía eran unos clientes fieles de mi padre, Giselle hice memoria, era la hija menor de aquella familia, tan solo la había visto cuando éramos ambas chicas aunque yo le llevaba casi por 5 años o quizás mas. Termine de arreglarme y baje las escaleras junto con Darla.
- Esta en la Sala de estar Viola - me dijo con su sonrisa impecable - Gracias, - le dije y me fui a la sala, y ahí estaba ella sentada, y vaya q estaba grande, me acerque a ella casi sin hacer mucho ruido y esboce - Madeimoselle Laroche - dije ladeando mi en señal de un saludo formal, hacía mucho tiempo que no sabía nada de aquella familia. Más bien del funeral de mi padre.
- Es una señorita de la familia Laroche, Giselle - me dijo el apellido lo reconocía, claro que lo reconocía eran unos clientes fieles de mi padre, Giselle hice memoria, era la hija menor de aquella familia, tan solo la había visto cuando éramos ambas chicas aunque yo le llevaba casi por 5 años o quizás mas. Termine de arreglarme y baje las escaleras junto con Darla.
- Esta en la Sala de estar Viola - me dijo con su sonrisa impecable - Gracias, - le dije y me fui a la sala, y ahí estaba ella sentada, y vaya q estaba grande, me acerque a ella casi sin hacer mucho ruido y esboce - Madeimoselle Laroche - dije ladeando mi en señal de un saludo formal, hacía mucho tiempo que no sabía nada de aquella familia. Más bien del funeral de mi padre.
Viola de Lesseps- Humano Clase Alta
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Fecha de inscripción : 17/06/2010
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Re: Una visita inesperada [ Giselle]
Me encontraba de pie ante la mansión Lesseps esperando a que alguien acudiese a mi llamado ante la gran puerta del portón de la entrada. Observé rápidamente la mansión antes de voltear a ver a mi compañía. -Bueno, nana, en cuanto abrán puedes marcharte. No tiene caso que te quedes a esperarme ya que podría tomarme un buen rato.- En realidad mis palabras eran expresaban un deseo bastante optimista. Había pasado el verano en Londres con algunas amistades y mi estadía allí me había hecho reflexionar un poco acerca de mi círculo de amistades en Paris. Hecho que se vio acrecentado al regresar a casa y atravezar algunas experiencias en los últimos días que me habían hecho reflexionar todavía más al respecto.
Fue entonces que el día anterior me encontraba reunida con mi madre y un par de señoras de avanzada edad que habían venido a visitarnos. El apellido Lesseps fue pronunciado de pasada asociado con algún encargo que alguna de ellas había hecho para regalar una fragancia a una de sus nietas. El tema me llamó la atención, de manera que me distraje un poco de la conversación recordando lo poco que sabía acerca de esa familia. Había conocido a Viola de Lesseps hace ya muchos años cuando aún vivía su padre. Sabía que ella había heredado la perfumería y aparentemente no le iba tan mal. Me pregunté como sería ser así de independiente y tener un negocio familiar que recaía totalmente en tus manos... en cierta forma me parecía una tarea envidiable.
Esta mañana volví a acordarme del tema al ver uno de mis perfumes de mi tocador. Inmediatamente tomé la decisión. Por qué no visitar a mademoiselle Lesseps? Es cierto que no eramos amigas pero nuestras familias se habían frecuentado lo suficiente como para atreverme a ir a verla sin que pareciese inapropiado. Rápidamente cambíé el vestido que la doncella me había dejado en mi cama por uno más adecuado para salir.
Ahora volvía a escuchar los consejos de mi nana. "Se prudente. Portáte con propiedad. Seguramente madame de Lesseps se sentirá encantada de verte. Inmediatamente al tratarte se dará cuenta de que puede estar orgullosa de entablar amistad con un miembro de apellido Laroche..." No pude evitar sonreir ante las palabras de mi nana. Para ella yo no tenía defectos. Lo cual no podía estar más lejos de la realidad, pero cada vez que trataba de recordárselo, ella me lo impedía. La abracé despidiéndome temporalmente antes de que abriesen el portón y alguien me guiase a la sala.
Había transcurrido poco tiempo cuando ví como mademoiselle Lesseps entraba en la estancia. De inmediato me puse de pie y contesté a su saludo. -Mademoiselle Lesseps, espero no importunarla con mi visita. Debí al menos de haber enviado una nota para solicitar su tiempo pero a veces temo, peco de poco previsora y muy tarde me doy cuenta de que mis horarios no necesariamente coinciden con los de los demás...-
ooc: perdón por el post un poco largo...
Fue entonces que el día anterior me encontraba reunida con mi madre y un par de señoras de avanzada edad que habían venido a visitarnos. El apellido Lesseps fue pronunciado de pasada asociado con algún encargo que alguna de ellas había hecho para regalar una fragancia a una de sus nietas. El tema me llamó la atención, de manera que me distraje un poco de la conversación recordando lo poco que sabía acerca de esa familia. Había conocido a Viola de Lesseps hace ya muchos años cuando aún vivía su padre. Sabía que ella había heredado la perfumería y aparentemente no le iba tan mal. Me pregunté como sería ser así de independiente y tener un negocio familiar que recaía totalmente en tus manos... en cierta forma me parecía una tarea envidiable.
Esta mañana volví a acordarme del tema al ver uno de mis perfumes de mi tocador. Inmediatamente tomé la decisión. Por qué no visitar a mademoiselle Lesseps? Es cierto que no eramos amigas pero nuestras familias se habían frecuentado lo suficiente como para atreverme a ir a verla sin que pareciese inapropiado. Rápidamente cambíé el vestido que la doncella me había dejado en mi cama por uno más adecuado para salir.
Ahora volvía a escuchar los consejos de mi nana. "Se prudente. Portáte con propiedad. Seguramente madame de Lesseps se sentirá encantada de verte. Inmediatamente al tratarte se dará cuenta de que puede estar orgullosa de entablar amistad con un miembro de apellido Laroche..." No pude evitar sonreir ante las palabras de mi nana. Para ella yo no tenía defectos. Lo cual no podía estar más lejos de la realidad, pero cada vez que trataba de recordárselo, ella me lo impedía. La abracé despidiéndome temporalmente antes de que abriesen el portón y alguien me guiase a la sala.
Había transcurrido poco tiempo cuando ví como mademoiselle Lesseps entraba en la estancia. De inmediato me puse de pie y contesté a su saludo. -Mademoiselle Lesseps, espero no importunarla con mi visita. Debí al menos de haber enviado una nota para solicitar su tiempo pero a veces temo, peco de poco previsora y muy tarde me doy cuenta de que mis horarios no necesariamente coinciden con los de los demás...-
ooc: perdón por el post un poco largo...
Giselle Laroche- Mensajes : 533
Fecha de inscripción : 10/06/2010
Re: Una visita inesperada [ Giselle]
La señorita Laroche, era toda una dama distinguida haciéndolo honor a su apellido, conocía su familia muy bien, su madre una dama muy distinguida con una clase inigualable, su padre un distinguido caballero, que se llevaba muy bien con el mío. Con ella habíamos pasados buenos momentos, aunque poco los recordaba, ella siempre fue media rebelde y eso me gustaba de ella la hacía diferente a todas, aunque yo también lo era. Cosas que pienso, todos somos diferentes, y eso nos hacia únicos.
- No se preocupe, Madeimoselle Laroche, en mi casa usted siempre será bienvenida - dije mientras tomaba asiento y le señalaba que me acompañara, a pesar de ser sábado había decidido no ir a la perfumería, quería descasar darme un momento para mí. desde que había llegado a Paris que me había dedicado al cien por ciento al a perfumería quería que fuera la más reconocida de todo el país y eso llevaba esfuerzo y dedicación, no me dejaría vencer así como así, era una persona que siempre había perseverado para obtener todo, y así me había dejado el legado mi padre.
- Insisto no se preocupe, justo me encontró en la casa así no hubiera venido en vano - sonreí ampliamente - y espero se quede para almorzar - añadí mientras en la sala hacia presencia Darla trayéndonos algo para tomar. Le sonreí agradecida y se retiro de la sala. - Cuénteme Madeimoselle Laroche cuanto lleva en Paris? - pregunte curiosa ya que no había visto a su madre visitar mi perfumería aun.
- No se preocupe, Madeimoselle Laroche, en mi casa usted siempre será bienvenida - dije mientras tomaba asiento y le señalaba que me acompañara, a pesar de ser sábado había decidido no ir a la perfumería, quería descasar darme un momento para mí. desde que había llegado a Paris que me había dedicado al cien por ciento al a perfumería quería que fuera la más reconocida de todo el país y eso llevaba esfuerzo y dedicación, no me dejaría vencer así como así, era una persona que siempre había perseverado para obtener todo, y así me había dejado el legado mi padre.
- Insisto no se preocupe, justo me encontró en la casa así no hubiera venido en vano - sonreí ampliamente - y espero se quede para almorzar - añadí mientras en la sala hacia presencia Darla trayéndonos algo para tomar. Le sonreí agradecida y se retiro de la sala. - Cuénteme Madeimoselle Laroche cuanto lleva en Paris? - pregunte curiosa ya que no había visto a su madre visitar mi perfumería aun.
Off: no te preocupes me gusta leer y escribir asi que siempre es grao ver los post largo
Viola de Lesseps- Humano Clase Alta
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Fecha de inscripción : 17/06/2010
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Re: Una visita inesperada [ Giselle]
Sonreí agradecida al escuchar sus amables palabras. De repente me había sentido un poco inquieta al pensar que podría estarla importunando pero mis temores se esfumaron al escucharla. -No sabe el peso que me quita de encima.- le dije sonriente antes de que nos trajesen un par de bebidas, lo cual me pareció sumamente oportuno pues el día se había tornado ligeramente caluroso.
-Regresé hace un par de días.- comenté, antes de volver a tomar asiento donde ella me indicaba. Recordé de repente lo mucho que me agradaba ella cuando eramos pequeñas aunque por supuesto yo lo era más que ella pero siempre me gustó su carácter, algo diferente del de la mayoría de las jovenes que frecuentaba.
-Estaba en Londres.- recordé con agrado. -Si viera lo agradable que me resultó la ciudad... aunque algunos la tildan de triste y brumosa a mi me pareció sumamente encantadora, de buena gana me hubiese quedado allá otra temporada...- añadí, añorando un poco esa ciudad que en realidad tenía un ritmo bastante diferente al de Paris, allá todo parecía transcurrir más lentamente, pero me encantaba. -Si no me equivoco es su ciudad natal?- le pregunté pues creí recordar que no era parisiense aunque sus modales y su porte me hacían creer lo contrario. A la mejor me equivocaba...
-Regresé hace un par de días.- comenté, antes de volver a tomar asiento donde ella me indicaba. Recordé de repente lo mucho que me agradaba ella cuando eramos pequeñas aunque por supuesto yo lo era más que ella pero siempre me gustó su carácter, algo diferente del de la mayoría de las jovenes que frecuentaba.
-Estaba en Londres.- recordé con agrado. -Si viera lo agradable que me resultó la ciudad... aunque algunos la tildan de triste y brumosa a mi me pareció sumamente encantadora, de buena gana me hubiese quedado allá otra temporada...- añadí, añorando un poco esa ciudad que en realidad tenía un ritmo bastante diferente al de Paris, allá todo parecía transcurrir más lentamente, pero me encantaba. -Si no me equivoco es su ciudad natal?- le pregunté pues creí recordar que no era parisiense aunque sus modales y su porte me hacían creer lo contrario. A la mejor me equivocaba...
Giselle Laroche- Mensajes : 533
Fecha de inscripción : 10/06/2010
Re: Una visita inesperada [ Giselle]
El calor estaba siendo un poco agobiante y las bebidas que nos había traído mi querida Darla parecían ser lo justo para este momento - madamoiselle, siempre es bueno tener una visita, y más si es alguien a quien aprecio desde muy niña - dije con una amplia sonrisa en mi rostro, me gustaba tratar muy bien a mis visitas.
-Londres, mi querida tierra y si mi ciudad natal - dije con un suspiro, extrañaba mi tierra y mas la vida en ese lugar, aunque creo que extrañaba mas la compañía de mi padre, sus concejos y sus palabras de ánimo.- Si yo hace algunos meses que no visito Londres y no se imagina como le extraño, pero creo que pronto viajare por esos lugares, iré a visitar el cementerio iré a ver a mi padre y buscar algunas cosas que aun me hacen falta para tener mi perfumería al cien por ciento. - dije sonriendo, mientras Darla volvía aparecer con unas galletas de chocolate, ella siempre tan preocupada para que todo quien sea de mi agrado se sintiera como en casa.
Si no fuera por Darla mi nodriza y August mi chofer, yo estaría devastada pero ellos eran mi familia, y agradecía cada día de que siempre me ayudaran en todo, lo que necesitara.
-Londres, mi querida tierra y si mi ciudad natal - dije con un suspiro, extrañaba mi tierra y mas la vida en ese lugar, aunque creo que extrañaba mas la compañía de mi padre, sus concejos y sus palabras de ánimo.- Si yo hace algunos meses que no visito Londres y no se imagina como le extraño, pero creo que pronto viajare por esos lugares, iré a visitar el cementerio iré a ver a mi padre y buscar algunas cosas que aun me hacen falta para tener mi perfumería al cien por ciento. - dije sonriendo, mientras Darla volvía aparecer con unas galletas de chocolate, ella siempre tan preocupada para que todo quien sea de mi agrado se sintiera como en casa.
Si no fuera por Darla mi nodriza y August mi chofer, yo estaría devastada pero ellos eran mi familia, y agradecía cada día de que siempre me ayudaran en todo, lo que necesitara.
Viola de Lesseps- Humano Clase Alta
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Fecha de inscripción : 17/06/2010
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Re: Una visita inesperada [ Giselle]
Me agradó escuchar las palabras tranquilizadoras de mademoiselle de Lesseps al referirse un poco a nuestra pasada relación de niñas. -Lamento no haber venido a visitarla antes...- me excusé, aunque con los acontecimientos del último año me había resultado imposible mantenerme en pleno contacto con mis amistades. Era extraño pero ahora cuando me encontraba entre ellos no podía evitar sentir ese alejamiento, al encontrarme en sus reuniones y tratar de interesarme en los temas de discusión me encontraba con la mente muy lejos de ellos, meditando en asuntos totalmente diferentes, que estoy segura, les hubiese alarmado sobremanera conocer. No, no podía sincerarme con ellos, ni tampoco era completamente yo al tratar de compenetrarme con ellos. Por más que quisiese volver a ser la antigua Giselle, eso era imposible...
-Pero en honor al afecto que siempre existió entre nuestras familias me atreviré a pedirle un favor. Llámeme Giselle.- le solicité, pensando que si recordaba bien su disposición, ella no tomaría a mal mi solicitud, ya que, era cierto que había venido con el propósito de entablar amistad con ella.
-Su padre estaría orgulloso de que tan bien se ha desenvuelto usted con la perfumería- le dije honesta, al tiempo que le agradecía a la doncella por aparecer con unas galletas de apariencia exquisita. -La verdad no sé como hace usted para hacerse cargo de todo...- añadí, mirando la estancia a nuestro alrededor. El orden y la prolijidad del lugar eran notorias. Si, mademoiselle de Lesseps era, definitivamente, una de aquellas encomiables personas que tomaban las riendas de su vida con determinación para hacer honor (muy notoriamente) a su legado.
-Pero en honor al afecto que siempre existió entre nuestras familias me atreviré a pedirle un favor. Llámeme Giselle.- le solicité, pensando que si recordaba bien su disposición, ella no tomaría a mal mi solicitud, ya que, era cierto que había venido con el propósito de entablar amistad con ella.
-Su padre estaría orgulloso de que tan bien se ha desenvuelto usted con la perfumería- le dije honesta, al tiempo que le agradecía a la doncella por aparecer con unas galletas de apariencia exquisita. -La verdad no sé como hace usted para hacerse cargo de todo...- añadí, mirando la estancia a nuestro alrededor. El orden y la prolijidad del lugar eran notorias. Si, mademoiselle de Lesseps era, definitivamente, una de aquellas encomiables personas que tomaban las riendas de su vida con determinación para hacer honor (muy notoriamente) a su legado.
Giselle Laroche- Mensajes : 533
Fecha de inscripción : 10/06/2010
Re: Una visita inesperada [ Giselle]
Cuando llegue a Paris o más bien cuando decidí cambiarme de país fue para abrir nuevos horizontes, pero como todo tenia un riesgo y el mío había sido dejar a todas mis amistades y venirme a un país donde no conocía a nadie ni a nada, solo con la compañía de August y Darla, aunque con ellos me bastaba, siempre fui de tener amigas y varias, quizás no las mejores pero siempre era visitada en mi hogar allá, en Londres. Pero aquí, no había tenido el agrado de ser visitada y saber que ella había acudido a mi hogar, me hizo verdaderamente feliz - Espero que no sea la última vez que me visite - sonreí ampliamente.
Su propuesta para llamarla por su nombre me pareció grandioso, a fin de cuentas nos conocíamos de hace tiempo - Lo mismo digo Giselle, llámame Viola - sonreí mientras daba un mordisco a la galleta crujiente que nos había traído Darla.
- MI padre, el siempre tuvo fe que sabría tomar buenas decisiones, a él le debo todo lo que se - añadí sonriendo así lo creía y sus últimos días de vida me lo había hecho saber - Sabes los primeros meses, creí que fracasaría...pero soy perseverante no me quedaría de brazos cruzados tenia la perfumería de mi padre que sacar adelante su honor... el mío - musite - llegar a Paris ha sido maravilloso, aquí prácticamente empecé de cero y si no fuera por August mi chofer y Darla mi nodriza creo que esto no estaría como esta, ellos me han aconsejado y ayudado hacemos una...- pensé mis palabras antes de hablar - somos como una familia - termine diciendo.
Su propuesta para llamarla por su nombre me pareció grandioso, a fin de cuentas nos conocíamos de hace tiempo - Lo mismo digo Giselle, llámame Viola - sonreí mientras daba un mordisco a la galleta crujiente que nos había traído Darla.
- MI padre, el siempre tuvo fe que sabría tomar buenas decisiones, a él le debo todo lo que se - añadí sonriendo así lo creía y sus últimos días de vida me lo había hecho saber - Sabes los primeros meses, creí que fracasaría...pero soy perseverante no me quedaría de brazos cruzados tenia la perfumería de mi padre que sacar adelante su honor... el mío - musite - llegar a Paris ha sido maravilloso, aquí prácticamente empecé de cero y si no fuera por August mi chofer y Darla mi nodriza creo que esto no estaría como esta, ellos me han aconsejado y ayudado hacemos una...- pensé mis palabras antes de hablar - somos como una familia - termine diciendo.
Viola de Lesseps- Humano Clase Alta
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Re: Una visita inesperada [ Giselle]
Sonreí al escucharla. -Claro, si no te molesta volveré a visitarte pronto, pero también me gustaría invitarte a nuestra mansión. La encontrarás muy cambiada, hemos hecho numerosas ampliaciones con el transcurrir de los años...- y otras más discretas en el último año, por debajo de los cimientos, a un lado de la inmensa propiedad, estilo catacumbas con algunas argollas en las paredes... pero eso ni siquiera mi madre lo sabía y para qué me acordaba de eso ahorita?
Me sacudí esos pensamientos de encima y escuché lo que Viola me contaba. Tomé una de las suculentas galletas que nos habían dejado y me maravillé de lo exquisitas que sabían al dar el primer mordisco. Mon Dieu! Quién era su cocinera?
-Me parece increíble lo que haces. Dedicarte a algo que te gusta. Porque.. te gusta lo que haces no?- le pregunté inquisitiva. Había escuchado que ella misma trabajaba en las fragancias pero con tantos rumores uno nunca sabía muy bien que creer... -Entiendo lo que me dices acerca de tu chofer y tu nodriza, personalmente adoro a mi nana, aunque sé que la saco de quicio en muchas ocasiones, y tiene paciencia de santa... no sé que haría sin ella...- la miré con expresión traviesa y un poquito avergonzada a la vez. -Viola, por favor, quién hizo las galletas? ´Tengo que ir a hablar con el cocinero y rogarle que me pase la receta...-
Me sacudí esos pensamientos de encima y escuché lo que Viola me contaba. Tomé una de las suculentas galletas que nos habían dejado y me maravillé de lo exquisitas que sabían al dar el primer mordisco. Mon Dieu! Quién era su cocinera?
-Me parece increíble lo que haces. Dedicarte a algo que te gusta. Porque.. te gusta lo que haces no?- le pregunté inquisitiva. Había escuchado que ella misma trabajaba en las fragancias pero con tantos rumores uno nunca sabía muy bien que creer... -Entiendo lo que me dices acerca de tu chofer y tu nodriza, personalmente adoro a mi nana, aunque sé que la saco de quicio en muchas ocasiones, y tiene paciencia de santa... no sé que haría sin ella...- la miré con expresión traviesa y un poquito avergonzada a la vez. -Viola, por favor, quién hizo las galletas? ´Tengo que ir a hablar con el cocinero y rogarle que me pase la receta...-
Giselle Laroche- Mensajes : 533
Fecha de inscripción : 10/06/2010
Re: Una visita inesperada [ Giselle]
- para mi seria de mucho agrado volver a visitar su mansión, siempre me gusto cuando era tan solo una niña- dije esbozando una amplia sonrisa, me gustaba salir de mi hogar que a veces parecía muy grande para tan solo tres personas y unos cuantos empleados que se encargaban que todo estuviera en orden y con una limpieza impecable.
Tome una de las galletas que nos había traído Darla y le di un mordisco, el sabor a miel hacia que mis glándulas me emocionaran eran mis favoritas, tenían un toque especial de canela que lo podía distinguir, un manjar para mi paladar.
- ¿Que si me gusta?, me encanta Giselle, mi vida gira en torno a la perfumería, es mi pasión hace que me levante cada día con un pensamiento nuevo y con ideas claras para, crear un perfume, o fragancia nuevas - dije sonriendo - ahora estoy experimentando para crear perfumes de baño - añadí mientras escuchaba lo que me decía de su nana, y la comprendía perfectamente, yo no era una santa pero tampoco una loca.
- Las galletas, las prepara mi Darla mi nodriza, ella es especialista en postres y todo lo que tenga que ver con repostería - añadí sonriendo - a ella tienes que preguntarle la receta, de estas exquisiteces - termine por decir
Tome una de las galletas que nos había traído Darla y le di un mordisco, el sabor a miel hacia que mis glándulas me emocionaran eran mis favoritas, tenían un toque especial de canela que lo podía distinguir, un manjar para mi paladar.
- ¿Que si me gusta?, me encanta Giselle, mi vida gira en torno a la perfumería, es mi pasión hace que me levante cada día con un pensamiento nuevo y con ideas claras para, crear un perfume, o fragancia nuevas - dije sonriendo - ahora estoy experimentando para crear perfumes de baño - añadí mientras escuchaba lo que me decía de su nana, y la comprendía perfectamente, yo no era una santa pero tampoco una loca.
- Las galletas, las prepara mi Darla mi nodriza, ella es especialista en postres y todo lo que tenga que ver con repostería - añadí sonriendo - a ella tienes que preguntarle la receta, de estas exquisiteces - termine por decir
Viola de Lesseps- Humano Clase Alta
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Re: Una visita inesperada [ Giselle]
Sonreí un poco al escuchar su respuesta, por sus palabras se notaba que en realidad sentía pasión por su trabajo, algo que me hacía envidiarla pues parecía haber logrado mucho a tan corta edad. Cierto que era mayor que yo pero aún muy joven por lo que también la admiraba, ya que tenía un objetivo claro al cual se dedicaba totalmente, lo que me hacía notar que yo palidecía en comparación.
-Me gustaría mucho visitar la perfumería, creo que necesito algo nuevo para mi y los perfumes que me he encontrado últimamente no terminan de ser completamente de mi agrado.- mencioné un poco pensativa, recordando que áun me encontraba en búsqueda de alguna fragancia nueva. Seguramente en la perfumería de Viola encontraría más de una opción que me dejaría satisfecha.
-Creo que ya empiezo a admirar a esa notable nodriza.- le dije sonriente, mientras apreciaba el sabor de la galleta al terminar de deshacerse en mi boca. -Tendré que expresarle más de un elogio y espero poder lograr que me revele al menos uno de sus secretos culinarios, ya que he de admitir que ocasionalmente me gusta experimentar por mi misma en la cocina, aunque no lo hago demasiado a menudo.- confesé. -A menos que quiera sorprender a alguien con algun dulce pero creo que no siempre mis resultados son tan encomiables como los de una experta nodriza.-
Reflexioné un poco antes de hacer la siguiente pregunta, pues ahora que me encontraba frente a Viola no podía evitar hacerlo, aunque tal vez pecase de ser demasiado inquisitiva, pero mi único afán era el de lograr encontrar respuesta a una de las interrogantes que daban vuelta dentro de mi día tras día. Al ver todo lo que ella había logrado hasta ahora y reconociendo su carácter, tenía que hacerlo, tenía que preguntarle. -Eres feliz?-
-Me gustaría mucho visitar la perfumería, creo que necesito algo nuevo para mi y los perfumes que me he encontrado últimamente no terminan de ser completamente de mi agrado.- mencioné un poco pensativa, recordando que áun me encontraba en búsqueda de alguna fragancia nueva. Seguramente en la perfumería de Viola encontraría más de una opción que me dejaría satisfecha.
-Creo que ya empiezo a admirar a esa notable nodriza.- le dije sonriente, mientras apreciaba el sabor de la galleta al terminar de deshacerse en mi boca. -Tendré que expresarle más de un elogio y espero poder lograr que me revele al menos uno de sus secretos culinarios, ya que he de admitir que ocasionalmente me gusta experimentar por mi misma en la cocina, aunque no lo hago demasiado a menudo.- confesé. -A menos que quiera sorprender a alguien con algun dulce pero creo que no siempre mis resultados son tan encomiables como los de una experta nodriza.-
Reflexioné un poco antes de hacer la siguiente pregunta, pues ahora que me encontraba frente a Viola no podía evitar hacerlo, aunque tal vez pecase de ser demasiado inquisitiva, pero mi único afán era el de lograr encontrar respuesta a una de las interrogantes que daban vuelta dentro de mi día tras día. Al ver todo lo que ella había logrado hasta ahora y reconociendo su carácter, tenía que hacerlo, tenía que preguntarle. -Eres feliz?-
Giselle Laroche- Mensajes : 533
Fecha de inscripción : 10/06/2010
Re: Una visita inesperada [ Giselle]
Acomode mi, vestido para sentarme bien y mucho mas comoda mientras bebia del jugo que habia traido Darla, escuche atenta a cada palabra que pronunciaba y en realidad era una joven muy entusiasta y eso me agradaba aunque a veces me sentia mayor, era lo de menos... al menos por ahora.
- Las puertas estan abiertas de la perfumeria, de seguro si no encuentras una fragancia que te agrade podre crearte una perfecta para ti - sonrei, la mayoria de mis clientes siempre encontraban lo que buscaban, pero siempre habia ecepciones a los que me dedicaba y craba alguna fragancia nueva.
- Creo que Darla estaria encantada de darte algunos de sus secretos para cocinar, es una excelente cocinera y una gran persona - musite mientras saboreaba otra de las galletas, su sabor combinado hacian que uno no dejara de apreciarlas y menos de comerlas, en realidad creo que mi nodriza era unica, ya que no solo era una empleada de la casa era mi mejor amiga.
El minuto de solencio me quede observando a Giselle, una joven que tenia una gran familia que la queria, era hermosa y ademas simpatica pero como todos en Paris, que pienso como todos en el mundo tenia sus secretos... su pregunta me soprendio... no era la primera persona que me preguntaba eso y de verdad la respuesta quizas no era la mas adecuada para el momento - Feliz... en realidad - dije dando un sorbo de jugo - Soy felz unicamente cuando estoy en mi laboratorio, o cuando atiendo en la perfumeria... pero la mayor parte del tiempo existe un vacio en mi interior... y ese vacio provoca que sea de alguna manera infeliz... - di un suspiro y volvi mi mirada a ella - Y tu Giselle, ¿eres feliz?
- Las puertas estan abiertas de la perfumeria, de seguro si no encuentras una fragancia que te agrade podre crearte una perfecta para ti - sonrei, la mayoria de mis clientes siempre encontraban lo que buscaban, pero siempre habia ecepciones a los que me dedicaba y craba alguna fragancia nueva.
- Creo que Darla estaria encantada de darte algunos de sus secretos para cocinar, es una excelente cocinera y una gran persona - musite mientras saboreaba otra de las galletas, su sabor combinado hacian que uno no dejara de apreciarlas y menos de comerlas, en realidad creo que mi nodriza era unica, ya que no solo era una empleada de la casa era mi mejor amiga.
El minuto de solencio me quede observando a Giselle, una joven que tenia una gran familia que la queria, era hermosa y ademas simpatica pero como todos en Paris, que pienso como todos en el mundo tenia sus secretos... su pregunta me soprendio... no era la primera persona que me preguntaba eso y de verdad la respuesta quizas no era la mas adecuada para el momento - Feliz... en realidad - dije dando un sorbo de jugo - Soy felz unicamente cuando estoy en mi laboratorio, o cuando atiendo en la perfumeria... pero la mayor parte del tiempo existe un vacio en mi interior... y ese vacio provoca que sea de alguna manera infeliz... - di un suspiro y volvi mi mirada a ella - Y tu Giselle, ¿eres feliz?
Viola de Lesseps- Humano Clase Alta
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Fecha de inscripción : 17/06/2010
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Re: Una visita inesperada [ Giselle]
-Entonces qué te parece si no pierdo el tiempo y te hago otra visita mañana en tu perfumería?- Sonreí al escuchar su invitación y también su amabilidad al decirme que si no encontraba nada que fuese de mi agrado ella crearía una para mi. Otra vez me maravillé al pensar que Viola pudiera hacer eso. En realidad cada una de las personas que visitaba su negocio se llevaba algo de ella consigo. Su mente, su ingenio, esa parte de su alma que vertía en cada una de sus creaciones, pensar que la gente usaría sus fragancias para sentirse más bellas, más distinguidas, o acaso con la esperanza de sorprender a alguien más...
-Hecho.- confirmé, me llevaría la receta de este refrigerio cuando terminase mi visita... Probé un poco del jugo que nos habían servido y escuché lo que más me interesaba, la respuesta a mi última pregunta.
Me sorprendió la sinceridad de Viola. En realidad mi pregunta podría haberle resultado violenta a alguna que otra persona, bueno, es cierto, a la mayoría, pero ella me la respondía con franqueza. Lamenté escuchar que no fuese completamente feliz. Era joven, de buena posición, inteligente, bonita, emprendedora. Por qué no bastaba? Será que las imágenes de felicidad que proyectaban algunas personas no eran más que una fachada que escondían la única verdad. Que nadie era completamente feliz...?
-He sido feliz en algunos momentos de mi vida...- sonreí ligeramente, sí, había tenido la dicha de conocer esos instantes en los que me había sentido plena y completamente dichosa. Llevaba esos recuerdos conmigo y los atesoraba como a nada... pero... no podría jamás ser completamente feliz siendo lo que era, ni mucho menos si esto podía afectar gravemente a quienes más quería... -Pero... no. No puedo serlo como quisiera. No completamente.- Miré a Viola un momento antes de proseguir. -A lo largo de mi vida he tenido algunos encuentros... que me han marcado de manera tal que han venido a echar al traste algunos de mis más anhelados sueños...- hice una pausa, pensando si le resultaría demasiado extraño escucharme decir estas cosas.
-Sabes que en esta ciudad hay más de lo que se ve a simple vista y no todos son quienes parecen ser...- La miré a la expectativa, preguntándome si ella estaría al tanto de que todos esos rumores que circulaban por allí acerca de criaturas de la noche que atacaban a los ciudadanos desafortunados no eran puras habladurías...
-Hecho.- confirmé, me llevaría la receta de este refrigerio cuando terminase mi visita... Probé un poco del jugo que nos habían servido y escuché lo que más me interesaba, la respuesta a mi última pregunta.
Me sorprendió la sinceridad de Viola. En realidad mi pregunta podría haberle resultado violenta a alguna que otra persona, bueno, es cierto, a la mayoría, pero ella me la respondía con franqueza. Lamenté escuchar que no fuese completamente feliz. Era joven, de buena posición, inteligente, bonita, emprendedora. Por qué no bastaba? Será que las imágenes de felicidad que proyectaban algunas personas no eran más que una fachada que escondían la única verdad. Que nadie era completamente feliz...?
-He sido feliz en algunos momentos de mi vida...- sonreí ligeramente, sí, había tenido la dicha de conocer esos instantes en los que me había sentido plena y completamente dichosa. Llevaba esos recuerdos conmigo y los atesoraba como a nada... pero... no podría jamás ser completamente feliz siendo lo que era, ni mucho menos si esto podía afectar gravemente a quienes más quería... -Pero... no. No puedo serlo como quisiera. No completamente.- Miré a Viola un momento antes de proseguir. -A lo largo de mi vida he tenido algunos encuentros... que me han marcado de manera tal que han venido a echar al traste algunos de mis más anhelados sueños...- hice una pausa, pensando si le resultaría demasiado extraño escucharme decir estas cosas.
-Sabes que en esta ciudad hay más de lo que se ve a simple vista y no todos son quienes parecen ser...- La miré a la expectativa, preguntándome si ella estaría al tanto de que todos esos rumores que circulaban por allí acerca de criaturas de la noche que atacaban a los ciudadanos desafortunados no eran puras habladurías...
Giselle Laroche- Mensajes : 533
Fecha de inscripción : 10/06/2010
Re: Una visita inesperada [ Giselle]
Me puse verdaderamente feliz cuando dijo que me haría otra visita, Era de pocas amigas y sinceramente quería que ella fuera mi amiga - Por mi encantada Giselle, de verdad - sonreí ampliamente, para mañana tendría alguna nueva fragancia lista, y ya mi mente se ponía a trabajar. Era algo sumamente inconsciente siempre que conocía a alguien se me daban esas ganas de crear algo nuevo y con ella claramente no era la excepción. Tenía algunos perfumes que a ella le agradarían o al menos eso pensaba, siempre que conocía a alguien, podía definir que fragancias le gustarían, eso lo había heredado de mi padre.
Darla estaba en la puerta, solía quedarse a observarme para ver si necesitaba algo, le hice una seña para que se me acercara, - Darla podrías escribir la receta de las galletas, para dársela a Giselle - le dije pareció sorprendida y le dedico una suave sonrisa a ella, de ahí se retiro de la sala. A darla le había enseñado a escribir y a leer, en mis tiempos libres y había aprendido rápido así que no me preocupe por la receta.
Algún día seria completamente feliz por ahora solo me quedaba disfrutar de mi trabajo y de las cosas buenas que tenia a mi alrededor, si lo tenía casi todo en cuanto a aspectos materiales, pero eso era al menos para mí lo de menos, escuche lo que tenia ella que decir y prácticamente estábamos en el mismo parámetro, pero ella era tan joven, aun mas que yo y ya parecía a ver vivido más de lo que normalmente aparentaba - Los sueños, si uno se dispone creo que se pueden hacer realidad - di un suspiro y lo que dijo a continuación me sorprendió aun mas.
Era un grito a voces lo que sucedía en Paris y en el resto del mundo, esta ciudad albergaba más que solo humanos y si lo tenía claro... -Esta ciudad es un laberinto de misterios y creo que es lo que le hace tan enigmática - acomode uno de mis risos, si así era, Paris era un imán para todo lo sobrenatural, lo tenía más que claro.
Darla estaba en la puerta, solía quedarse a observarme para ver si necesitaba algo, le hice una seña para que se me acercara, - Darla podrías escribir la receta de las galletas, para dársela a Giselle - le dije pareció sorprendida y le dedico una suave sonrisa a ella, de ahí se retiro de la sala. A darla le había enseñado a escribir y a leer, en mis tiempos libres y había aprendido rápido así que no me preocupe por la receta.
Algún día seria completamente feliz por ahora solo me quedaba disfrutar de mi trabajo y de las cosas buenas que tenia a mi alrededor, si lo tenía casi todo en cuanto a aspectos materiales, pero eso era al menos para mí lo de menos, escuche lo que tenia ella que decir y prácticamente estábamos en el mismo parámetro, pero ella era tan joven, aun mas que yo y ya parecía a ver vivido más de lo que normalmente aparentaba - Los sueños, si uno se dispone creo que se pueden hacer realidad - di un suspiro y lo que dijo a continuación me sorprendió aun mas.
Era un grito a voces lo que sucedía en Paris y en el resto del mundo, esta ciudad albergaba más que solo humanos y si lo tenía claro... -Esta ciudad es un laberinto de misterios y creo que es lo que le hace tan enigmática - acomode uno de mis risos, si así era, Paris era un imán para todo lo sobrenatural, lo tenía más que claro.
Viola de Lesseps- Humano Clase Alta
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Fecha de inscripción : 17/06/2010
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Re: Una visita inesperada [ Giselle]
Me alegró sinceramente la cordialidad de Viola y esta me animó a querer compartir más con ella. No era a menudo que podía socializar con alguien que me agradase de veras y cuyo trato no fuese más bien otra cosa que una imposición debido a algún trato inevitable entre familias.
Sonreí ampliamemente al ver como le solicitaba la receta a Darla a quien me apresuré a agradecer de antemano por la generosidad de compartir sus secretos con la receta aparte de felicitarla ampliamente por semejantes galletas y rogarle que se acordase de mi el día de mi cumpleaños, aunque lo último fuese un poquito descarado de mi parte, pero quien en su sano juicio se resistía a semejante diosa de la cocina?
Escuché con detenimiento lo que me decía de los sueños y lo dijo con una expresión que me llevó a creer que tal vez fuese así. Todo lo que yo quería creer en esta etapa de mi vida era que mi más anhelado sueño pudiese hacerse realidad, Iba a añadir algo al respecto pero Viola ya contestaba mi última pregunta. Ella sabía! O al menos tenía noción de lo que sucedía.
-Has sido testigo de eso?- le pregunté, animándome un poco al darme cuenta de que tal vez ella hubiese tenido algún encuentro cercano por el que hablase así. -Es decir... alguna vez has visto algún ser sobrenatural, como esos de los que se rumorea a menudo en la calle...-
-Con alguno que en apariencia sea como cualquier otra persona aunque en realidad si lo analizas únicamente te lo encuentres a ciertas horas de la noche o quizás... más bien alguien cuya apariencia cambie del todo en las noches de luna llena dejando su mortalidad atrás...- Añadí esto último observándola detenidamente mientras aguardaba su respuesta. Estaba Viola al tanto de la existencia de los licántropos?
Sonreí ampliamemente al ver como le solicitaba la receta a Darla a quien me apresuré a agradecer de antemano por la generosidad de compartir sus secretos con la receta aparte de felicitarla ampliamente por semejantes galletas y rogarle que se acordase de mi el día de mi cumpleaños, aunque lo último fuese un poquito descarado de mi parte, pero quien en su sano juicio se resistía a semejante diosa de la cocina?
Escuché con detenimiento lo que me decía de los sueños y lo dijo con una expresión que me llevó a creer que tal vez fuese así. Todo lo que yo quería creer en esta etapa de mi vida era que mi más anhelado sueño pudiese hacerse realidad, Iba a añadir algo al respecto pero Viola ya contestaba mi última pregunta. Ella sabía! O al menos tenía noción de lo que sucedía.
-Has sido testigo de eso?- le pregunté, animándome un poco al darme cuenta de que tal vez ella hubiese tenido algún encuentro cercano por el que hablase así. -Es decir... alguna vez has visto algún ser sobrenatural, como esos de los que se rumorea a menudo en la calle...-
-Con alguno que en apariencia sea como cualquier otra persona aunque en realidad si lo analizas únicamente te lo encuentres a ciertas horas de la noche o quizás... más bien alguien cuya apariencia cambie del todo en las noches de luna llena dejando su mortalidad atrás...- Añadí esto último observándola detenidamente mientras aguardaba su respuesta. Estaba Viola al tanto de la existencia de los licántropos?
Giselle Laroche- Mensajes : 533
Fecha de inscripción : 10/06/2010
Re: Una visita inesperada [ Giselle]
Me sorprendió bastante cuando, empezó hablar de los seres sobrenaturales; a caso ella sabia o conocía a alguno al igual que yo, quizás había tenido algún encuentro con alguno, o ¿y si era era algo si? saque todo pensamiento sobre mi cabeza, en realidad era algo que me perturbaba mucho y no quería recordar esa situación, no era necesario hablar de mas. Diciendo lo justo y necesario era la mejor opción, no seria ni la primera ni la ultima persona que ocultaría algo como eso. La mire atenta mientras hablaba, la luna llena, seres oscuros, algo de magia...
-¿Quiere que le diga la verdad? - dije mientras me acercaba a ella, no quería que Darla escuchara, ella era muy supersticiosa, y la conocía lo suficiente como para saber que le molestaria que yo supiera o creyera ciertas cosas - me he topado - dije tragando un poco de saliva - con un vam... vampiro - dije sintiendo como un escalofríos recorría mi cuerpo ante aquella palabra, ante aquel recuerdo, moví mi cabeza sacando todo ese pensamiento y volví a mirar a Giselle - también, he visto a un brujo practicar brujerías... crear cosas que son casi imposibles de imaginar - tome un baso de jugo y tome un gran sorbo de este, recordar aquellas cosas me ponen de cierta forma nerviosa.
- Por lo demás he oído, sobre hombres lobo, que se transforma cuando la luna llena esta en los cielos - dije algo apresurada, en realidad no sabia mas de ellos y gracias a Dios no me había topado con uno. ¿Quien sabe como serian? ¿serian tan malvados como los pintaban en los cuentos e historias de ficción?. Pero la interrogante que mas clavada tenia en la cabeza era ¿que tanto sabia Giselle? - ¿Y tu Giselle has visto a algún ser sobrenatural?- la quede mirando esperando alguna respuesta... algún indicio... algo.
-¿Quiere que le diga la verdad? - dije mientras me acercaba a ella, no quería que Darla escuchara, ella era muy supersticiosa, y la conocía lo suficiente como para saber que le molestaria que yo supiera o creyera ciertas cosas - me he topado - dije tragando un poco de saliva - con un vam... vampiro - dije sintiendo como un escalofríos recorría mi cuerpo ante aquella palabra, ante aquel recuerdo, moví mi cabeza sacando todo ese pensamiento y volví a mirar a Giselle - también, he visto a un brujo practicar brujerías... crear cosas que son casi imposibles de imaginar - tome un baso de jugo y tome un gran sorbo de este, recordar aquellas cosas me ponen de cierta forma nerviosa.
- Por lo demás he oído, sobre hombres lobo, que se transforma cuando la luna llena esta en los cielos - dije algo apresurada, en realidad no sabia mas de ellos y gracias a Dios no me había topado con uno. ¿Quien sabe como serian? ¿serian tan malvados como los pintaban en los cuentos e historias de ficción?. Pero la interrogante que mas clavada tenia en la cabeza era ¿que tanto sabia Giselle? - ¿Y tu Giselle has visto a algún ser sobrenatural?- la quede mirando esperando alguna respuesta... algún indicio... algo.
Viola de Lesseps- Humano Clase Alta
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Fecha de inscripción : 17/06/2010
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