Andrey sale de paseo {Libre}

por **Ariadna Raibow** Miér Mayo 30, 2012 7:58 am

Había salido esa noche de la casa cuando todos estaban dormidos, cada vez resultaba más fácil hacerlo y la oscuridad de la noche cobijaba mis pasos. Capa flotaba detrás de mí y se ondulaba como la niebla que siempre se extendía a esas horas por las adoquinadas calles de Londres. El gorro ocultaba mis facciones femeninas y la peluca recogía mi pelo dándole un aspecto más corto y masculino, aunque siempre tenía problemas con algún tipo desviado que o dudaba de mi naturaleza masculina, con razón en su caso, o creyéndola masculina seguía deseando mi cuerpo. Por esto mismo había tenido que recordar las sesiones que pasé con mi madre aprendiendo habilidades pujilisticas y ampliándola, también llevaba la precaución desde entonces de llevar un arma cargada y lista y un bastón duro que me sirviera de arma en su momento adecuado.

Con el trascurrir de las noches una se acostumbraba a cambiar la forma de andar a una más masculina, a hablar más grave llegado el momento y dejar de lado mis maneras femeninas. Aún cuando la oscuridad lo envolvía todo y los faroles no alumbraban demasiado, cuando sus pasos parecían reverberar en las calles bacías creando la ilusión de que había más personas a mi alrededor. Ya ni siquiera volvía mi cabeza asustada para cerciorarme de estaba sola.

Esa noche había quedado en casa de uno de los pocos científicos que sabían de mi naturaleza femenina y prefería andar por los callejones que tomar las calles principales. Por esas anchas avenidas siempre circulaban los faetones de los señores con sus blasones tapados, por desgracia después de asistir a los burdeles para conocer a las prostitutas sabía diferenciarlos aún con su camuflaje. Me escurrí por uno de los silenciosos, estrechos y mal iluminados callejones acelerando el paso para llegar a mi destino sin demora ni tardanza... después de todo la puntualidad siempre había sido una de mis cualidades.

por **Alexia Strand** Miér Mayo 30, 2012 5:32 pm

Caminaba en silencio por los jardines, buscando no despertar a los guardias que yo misma habia contratado para evitar que nadie pasara por los jardines fuera de hora, traia solamente un corpiño de piel negra y unos pantalones de cuero negro ceñidos al cuerpo pero sobre mi escultural cuerpo traia una capa negra, una casaca de guardia real, una espada y una capa, que me daba la apariencia de un hombre una vez que tapaba mi rostro con un sombrero y dejaba al aire mis negros cabellos.

Entre con mucho cuidado a los establos donde estaba mi carruaje y escuche un sonido de una respiracion, causado por un par de poderosisimos pulmones y sonreia al distinguir la forma de mi mejor amigo en la oscuridad.

-Hola negrita... estas cansado de tirar ese carruaje todo el dia?.... No verdad que no mi bebe?

Acaricie con cariño la cabeza de mi caballo moviendola para quedar frente a frente mientras lo acariciaba con cariño y sonrei al ver que estaba tan fuerte como siempre, me acerque a un gran baul, cerrado con una llave que solo tenia yo, saque una pequeña llave de debajo de mi corpiño y abri el baul, sacando una silla, riendas y lo necesario para montar a mi negrita, la ensille rapidamete y en menos de unos segundos salia galopando rapidamente por las calles de Paris, amaba esa sensacion de emocion y aventura que me embargaban cada vez que salia a uno de esos paseos, sonrei un poco mientras doblaba por un callejon, quizas ir a visitar a las cortezanas no estaria mal siempre era divertido pasar una noche con algun hombre y ellas agradecian las propinas que les daba por dejar que me quedara ahy, de repente note una sombra en el callejon que pasaba casi por debajo de mi gigantesco caballo, sabiendo perfectamente que Negrita arrollaria incluso a un leon si este se ponia en camino tuve que tirar rapido las riendas, haciendo que este relinchara levantandose por completo y casi tirandome a mi del caballo.

-QUIETO!!!!

Le grite aunque por el susto y por mi propio autocontrol logre darle un tono grave a mi voz que no delataria mi genero finalmente logre controlar a mi caballo y mire al hombre al que hacia estado apunto de arrollar, baje del caballo furiosa, dispuesta a atravezarlo de una estocada

-MALDITO IDIOTA FIJATE POR DONDE VAS!!

Mi voz sono grave y aspera comoe staba acostumbrada a hablar cada vez que me ponia mi "traje" de paseo como lo llamaba y rapidamente desenvaine mi espada sabiendo que ese hombre estaba vestido como un caballero y que por lo tanto probablemente no pediria disculpas, solo porun tonto orgullo por el cual ya habia mandado al hospital o a la tumba a varios en mi corta estancia en Paris.

por **Ariadna Raibow** Vie Jun 01, 2012 5:56 pm

Estaba sumida en mis pensamientos sobre los campos de investigación de mi amigo, cavilando las posibles situaciones en las que podría verme envuelta según los resultados. Era muy interesante la disección de el cuerpo humano, gracias a eso se podían comprender muchas cosas aunque resultara verdaderamente macabro y ofensivo para la persona fallecida. Por desgracia este amigo había llegado a niveles poco aceptables para mí, como la disección de mujeres embarazadas y las pequeñas personas que crecían dentro de su vientre. Me había asegurado que en este caso sólo sería la disección de un hombre joven que había muerto en una pelea para examinar su corazón... resultaba verdaderamente interesante.

Perdida como estaba en las posibles implicaciones de este experimento no me di cuenta de que aparentemente de la nada había aparecido un caballo de dimensiones colosales y casi me había arrollado. Gracias a la habilidad del jinete y mi rápida retirada hacia atrás había conseguido que sus grandes cascos no acabaran sobre mi cuerpo causando seguramente un daño irreparable, había visto demasiados cuerpos aplastados por los caballos como para no saberlo. Aliviada por mi salud miré al enfadado hombre que había desenvainado su espada y parecía terriblemente dispuesto a utilizarla contar mí... esperaba no tener que utilizar el arma que llevaba escondida debajo de la capa... mi puntería era ineludible y no quería disparar a la persona que en cierta manera había salvado mi vida.

- Ruego me disculpe señor... casi consigo que tengamos un accidente por ir ensimismado en mis pensamientos - miré a mi alrededor, había utilizado el tono de voz adecuado, lo suficientemente masculino como para pasar por un hombre joven-. Creo además que caminé más de la cuenta en mis elucubraciones y me pasé la salida hacia mi destino... debería ser menos despistado...-Fruncí el ceño pensando un poco-. ¡Oh! disculpe mi rudeza... supongo que tras el pequeño susto olvidé poner en práctica mis modales... mi nombre es Andrey... Andrey Wobiar, un gusto conocerle, debo de darle mi más sincero agradecimiento por tener tan férreo control sobre su animal.

por **Alexia Strand** Vie Jun 01, 2012 7:20 pm

Para la sorpresa de Alexia el hombre no parecia estar enfadado para nada, al contrario, se habia disculpado por haber estado a punto de ser atropeyado, Alexia estaba tan acostumbrada a los hombres machistas y prepotentes que habia en los barrios bajos, incluso a los que eran perfectos caballeros en la vida publica, que esas amables palabras la dejaron medio descolocada, ya que sabia que incluso ella pestaria enfadada, pero aun asi se habia visto asustado.

Suspiro un poco, tapandose con la capa un poco ya que normalmente cuando lo hacian sus pechos se notaban incluso con la casaca y habilmente envaino la espada, suspirando un poco

-No debe disculparse caballero...

Estiro la mano y el caballo se acerco ya que estaba bastante acostumbrado a ella y obedecia con un gesto

-Este pequeño es a veces un poco impetuoso...

Noto como ella se presentaba y Alexia se quito el sombrero aunque ocultando aun su rostro lo suficiente, se inclino un poco

-Mi nombre es Alex Strand, caballero

por **Ariadna Raibow** Dom Jun 03, 2012 3:43 pm

Le vi envolverse mejor en su capa y envainar su espada, lo que en verdad me procuraba un gran alivio... no quería tener que sacar mi pistola esa noche. El caballo parecía bien entrenado ya que al más mínimo movimiento de su dueño se apresuraba a obedecer, con esa envergadura y tal entrenamiento bien podría ser un caballo de batalla, pero no era de mi incumbencia este esto así que me centré en el caballero que estaba frente a mí. Al ver que se quitaba el sombrero me coloqué la capa para que tapara un poco mi cara y diera sombra a mis facciones femeninas quitándome también y realizando una profunda reverencia.

- Mi madre me enseñó que el caballo más impetuoso suele ser también el más fiel a su dueño... estas criaturas siempre fueron de mis animales preferidos- comenté quitándole importancia al asunto-. Es un placer conocerle... debería marchar ya que un amigo iba a enseñarme un corazón y su forma de funciona... será interesante saber esas cosas... aunque puede resultar algo inquietante... Sin embargo me gustaría invitarle a tomar algo para compensar este encuentro tan desafortunado... ¿que le parece? - le mira fíjamente esperando su respuesta y esperando que fuera negativa en realidad...

por **Alexia Strand** Dom Jun 03, 2012 11:43 pm

Cada vez ese hombre la asombraba mas, cuando le dijo eso sobre su caballo, es verdad que muchos caballeros que Alexia habia conocido en su vida amaban a los caballos, pero pocos se comportaban de esa manera abiertamente con extraños.

-Su madre tenia razon

Le dijo tranquilamente pero cada vez mas intrigada por ese hombre, sonrio seductoramente, aprovechando que la sombra de su sombrero ocultaba su rostro al escuchar que este le invitaba a tomar un trago.

-Eso me encantaria, si lo desea, podemos ir en alazan donde su amigo y luego vaciar un par de botellas

Le dijo tranquilamente, alazan era el nombre que le daba a negrita cuando estaba disfrazada de hombre.

por **Ariadna Raibow** Miér Jun 06, 2012 10:42 am

- Como en casi todo lo que decía- respondí al comentario sobre mi madre.

Le escuché su ofrecimiento en montar en el animal para alcanzar el lugar y saqué mi reloj de bolsillo para cerciorarme de la hora, ciertamente me vendría bien que me acercara, el hombre que había tenido la amabilidad de invitarme era un obseso de la puntualidad y ya llegaría tarde. Lo cerré y lo dejé de nuevo en su lugar con un movimiento fluido por la costumbre.

- Por supuesto, creo que al doctor Rimond le gustará más presencias en su demostración de sabiduría... nunca he coincidido con él en su afán de reconocimiento de parte de los demás -negué con la cabeza mientras miraba al animal-.Debería montar usted primero ya que la conoce, después lo haré yo y le guiaré para que alcancemos el lugar lo antes posible-le sugerí-. A propósito, el doctor destila su propio alcohol y desde luego está delicioso si me permite sugerírselo claro -sonreí aunque no pudiera verlo.

por **Alexia Strand** Miér Jun 06, 2012 4:43 pm

-Jajajaja si supongo

Dije en un tono mas agradable, viendo como el hombre sacaba un reloj y lo miraba un momento, pero sin duda lo que dijo despues era algo realmente interesante

-Mmmm eso que dice suena bien entonces vamos, caballero

Le dije extrañada aun por la forma de ser de ese hombre, cuando me pidio montar primero y de repentetuve un pequeño problema, si me ponia tras de ella sin duda notaria que era mujer, pero no sabia como ponerlo detras asi que se puso bien atras en la silla dejandolo de frente para que se acomodara, manteniendose lo mas lejos posible de la espalda del hombre

-Bien hacia donde es ese lugar?

por **Ariadna Raibow** Mar Jun 12, 2012 9:06 am

Una vez subió a el animal me apresuré a ocupar mi lugar, agarré la pera de la montura y colocando mi pie en el estribo me impulsé para colocarme delante del hombre. No es que me molestara mi nueva posición pero me preocupaba que pudiera notar la esbeltez demasiado marcada de mi figura o mi cintura demasiado estrecha para un hombre. Quitando estos miedos de mi mente me agarré y me concentré para poder indicarle el camino.

- Por aquí hacia el frente y la primera hacia la derecha, seguidamente a la izquierda y estaremos allí mismo, yo le indicaré donde debe parar- le expliqué con voz amable y aparentemente tranquila.

Cuando el caballo comenzó a moverse apreté mis piernas y mantuve mi espalda recta en todo momento, intentando parecer seguro como debería estar un caballero, pero no conocía a el animal y el accidente que significó la muerte de mi madre siempre permanecía en mi mente.

por **Alexia Strand** Miér Jun 13, 2012 12:30 am

Intente por todos los medios alejarme lo mas posible de ese hombre, mientras este subia al caballo, no por que no hubiera espacio puesto que la silla de negrita era de guerra y habia bastante, si no poara evitar que me tocara, malditos senos talla 100, sin duda eran una bendicion en la cama pero una maldicion a la hora de fingir ser un hombre, retrocedi lo mas que podia para evitar que mi espalda tocara la de el y tan bien alargue y abri mis brazos en loq ue podia, todo para no tener contacto fisico mientras el caballo empesaba a cabalgar, pase u par de girosque ella me indico sin ningun problema.

-Bueno haber... es aqui... y ahora asi... a la izquierda verdad?

Empesaba a ponerme nerviosa ya que el piso estaba mal empedrado y a desnivel por lo que el caballo batallaba para avanzar suavemente haciendonos tambalear a ambos hasta que paso un niño corriendo rapidamente frente al caballo

-CUIDADO!

el mocoso solo siguio corriendo riendo meintras Negrita retrocedia rapidamente, pero al hacerlo impulsaba hacia atras a mi pasajero y si, definitivamente choco por completo con mi pecho, pero eso no me importo mientras intentaba evitar que cayera, lo sujete... y note algo blandito

-He... estas no son las mias... o.o

por **Ariadna Raibow** Jue Jun 14, 2012 11:24 am

- Si, es aquí mismo, ya casi estamos.

Ya casi habíamos llegado y eso me hizo tener la esperanza de que bajaría de ese animal sin que mi verdadera naturaleza quedara expuesta. Faltaban apenas unos metros y después podría saltar del lomo del caballo y seguir comportándome como un caballero, nadie sospecharía nada y podría simplemente seguir con mi doble vida sin interrupciones. Por desgracia el destino no pensaba igual que yo y u niño se atravesó ante nuestra montura, lo que hizo que esta se encabritara cuando su conductor tiró de las riendas y mi cuerpo se estampara contra el de mi acompañante.

Algo blando había tras de mí... eso no era un pecho masculino, eso eran unos grandes pechos femeninos y además de bastante volumen, de esos que hacían que las pobres chicas medio planas como yo se avergonzaran de sus pequeños atributos. Pero no quedó ahí, por el shock del repentino movimiento del caballo y el descubrimiento de que mi acompañante era una mujer disfrazada al igual que yo misma mis manos no habían agarrado la montura y caí hacia el suelo. Él... o más bien ella... pasó su brazo alrededor de mi para que no cayera y su mano acabó sobre uno de mis pechos.

- No... umm... creo que no, creo que esto es mío-respondí sonrojada mientras me volvía a colocar sobre la montura- pero... pero ¿podría soltar mi pecho por favor?- esperé hasta que me soltara para saltar del caballo- Creo... creo que me has descubierto, pero por favor no diga a nadie que Andrey es una mujer...

por **Alexia Strand** Dom Jun 24, 2012 11:56 pm

-Ha...

Alexia se le quedo viendo unos segundos, despues rapidamente bajo del caballo jalando a su acompañante pero de forma que esta quedara de pie

-De acuerdo... haber pues cuantos caballeros que hay en francia son mujeres disfrazadas he?? Y yo creyendo que era la unica!

Dijo con tono dramatico pero tan bien, un poco shokeada, de echo si creia que seria la unica mujer lo suficientemente loca como para andar como hombre en las noches en ese lugar solo buscando aventuras

-No debes preocuparte por algo asi, mi nombre es Alexia, y el tuyo?

por **Ariadna Raibow** Sáb Jun 30, 2012 12:37 pm

- Yo también creí ser la única en verdad - reí con ganas mientras me quitaba el gorro y dejaba que la luz impactara contra mi rostro, ya no había razón para que ocultara mi cara-, he de decir que gran mérito de mi disfraz lo tiene mi peluca... costó bastante dinero paro valió la pena- sonreí tranquilamente.

Miré a Alexia y alcé de nuevo mi mano hacia ella para estrecharsela.

- Mi nombre es Ariadna, si en verdad sigues queriendo tomar un trago la oferta sigue en pie- aseguré porque desde luego era muy extraño encontrar a otra dama disfrazada de caballero.

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