Trabajos cruzados (privado)

Respire profundamente y cuando el aire salio de mis pulmones puede ver la fina niebla blanca que apenas duro unos segundos.
Eran por lo menos las tres de la noche. Una noche de invierno, fría y oscura, y la luna era tapada por una grueso manto de nubes negras que avisaban de tormenta. Yo esperaba en lo alto de un tejado alado del puerto casi desértico. No había más que un par de borrachos que se tambaleaban sin un lugar donde caerse muertos.
Uno de los altos miembros de la policía de París había contactado conmigo para un pequeño trabajo. Se había enterado de que alguien del cuerpo estaba vendiendo información sobre la policía a un traficante de opio. Ese traidor sabia demasiado y arrestarlo podría significar que soltase todos los trapos sucios al no tener nada más que perder.
De repente veo dos figuras acercándose, a diferencia del resto estas no tambaleaban. Dos individuos completamente tapados que empezaron a caminar para colocarse en un callejón oscuro entre dos almacenes de pesca. Su conversación me afirma que son los que estaba buscando, y aun de mis piernas levemente entumecidas por el frió me preparo para cumplir con mi trabajo.

Salí del burdel después de haberme alimentado de una de las fulanas del lugar, tampoco la llegue a matar, ya que es mejor no llamar la atención. Tenia las pilas cargadas y estaba realmente excitado por la emoción de un nuevo trabajo en esta nueva ciudad, al parecer una persona bastante importante de los barrios bajos, tenia un informante infiltrado en la policía, y curiosamente le habían descubierto, por lo que me contrataron para borrarlo del mapa, debía de ser eliminado antes de que la policía lo arrestase e intentase sacar información sobre dicho hombre. Corrí por los tejados de la ciudad, hasta el puerto de la ciudad, era mi forma mas rápida de llegar a los sitios sin ser visto o detectado, me comentaron que mi objetivo se encontraría allí, pasada la media noche en la parte de los almacenes donde guardan las capturas de la pesca.

Llegue al puerto, me situé en el tejado de uno de los astilleros donde guardan los barcos, el olor a pescado y al salitre del mar se incrustaba en mi nariz de forma bruta y pestilente por lo que tuve que olvidarme de utilizar el olfato, aquel tejado metálico estaba húmedo y resbaladizo por lo que tenia que tener algo de cuidado al caminar por el, era una noche cerrada, fría, y especialmente buena para salir de caza, era mi primer trabajo en la ciudad de París, y no quería que nada saliese mal, me agazape en el tejado, respire profunda y tranquilamente y elimine mi presencia del lugar, expandí mi mente lo mas que pude para entrar en contacto con las diferentes mentes que había alrededor, y hacer así un recuento de civiles, ya fuesen inocentes, enemigos y aliados, había un par de borrachos, un pensamiento que me inquieto enormemente, ya que no sabia muy bien que quería hacer, y por si las moscas memorice un poco aquella mente, y por ultimo, dos hombres en la zona del almacén, que al parecer uno de ellos era el objetivo.

Me infiltre en la mente del informante para averiguar si sabia algo de lo que se le avecinaba - siempre es mejor asegurarse de que no haya sorpresas - pensé, al parecer si sabia algo, y lo que me estraño fue que no encontré mas mentes que estuvieran por los alrededores para protegerle, era como si estuviera preparado para morir, algo que realmente me mosqueo e hizo que tomara mas precaución en el asunto, entonces fue cuando me vino a la cabeza aquella mente extraña, ¿sera un cazador contratado? - volví a pensar nuevamente, intente captar aquella mente de nuevo, pero salio de mi rango de acción, por lo que no pude saber nada mas.

Permanecí inmóvil y con mis sentidos alertas durante un buen rato. El frió congelaba mis articulaciones, pues como abrigo solo llevaba una fina capa negra que era mas útil como medio de camuflaje que como protección. Lo único que podía hacer para intentan bombear mi sabre era mover mis dedos, abriendo cerrando mi mano una y otra vez. En ese momento me pareció escuchar algo. No pude identificarlo pues apenas fue un segundo y muy bajo, no le di mucha importancia, puede que solo un borracho.

Las dos personas no hablaron más de cinco minutos entre murmullos. Una vez acabado su conversación, uno de ellos le paso un maletín al otro, se despidió y se marcho entre las sombras. Mi objetivo permaneció inmóvil unos instantes, luego se acerco a unas cajas y comprobó el interior del maletín. Había suficiente dinero para desaparecer de la ciudad para siempre.

-"Es mi hora"- pensé mientras desabrochaba el broche que sujetaba mi capa y esta se deslizaba por mis hombros hasta reposar en el techo. No quería ningún inconveniente a la hora de hacer el trabajo. Cogió mi cuchilla que reposaba atada en uno de mis muslos, me puse en guardia. Cuando el individuo quiso marcharse, en un segundo salte sobre el, con la cuchilla por delante en dirección su cuello

Agazapado en el tejado de aquel astillero podía divisar cualquier cosa que entrase en mi campo de visión, el vaho que salia de mi boca al respirar me divertía de una manera peculiar, esboce una sonrisa picarona mientras veía la escena entre aquellos hombres, al parecer el informador quería salir de la ciudad y desaparecer del mundo, lo que no sabia es que un vampiro experto en dar caza a cualquiera le seguiría haya donde quisiera, le atormentaría, engañaría u cualquier otro método imaginable usaría para poder realizar su trabajo.

Un ruido de pasos en movimiento me alerto y me puse en guardia atento a cualquier movimiento, vi un pequeño destello casi imperceptible para el ojo humano del acero de una cuchilla, al parecer alguien mas quería quitarme a la presa, algo que me mas divertido de lo normal -con competencia es mas divertido - comente en voz alta y acto seguido reí con suavidad dejando escapar una gran bocanada de vaho.

Entre en la mente del informador - yo que tu correría, alguien quiere matarte, sal de hay con dirección hacia el astillero allí estarás a salvo - le comente mentalmente mientras sin querer sonreía sádica-mente, mis ojos se tornaron inexpresivos, signo de que estaba totalmente concentrado y había eliminado cualquier síntoma de compasión, amabilidad u alguno que pudiera hacer que mi presa escapase con vida, fui dirigiendo al informador mental-mente evitando los golpes certeros y mortales del cazador - tiene habilidad - pensé - pero yo soy una maquina precisamente engranada para realizar este tipo de trabajos.

Cuando se fueron acercando al astillero donde me encontraba, me coloque en posición, baje del tejando, me escondí dentro del astillero dentro de un barco el cual estaban reparando, miles de cajas, madera, y herramientas de reparación ocupaban el oscuro lugar desprovisto de visión, con mi mano izquierda cogí el mango de mi negra y siniestra guadaña, me la acerque a la cara y mientras sonreía, fui estirando el mango retráctil poco a poco hasta dejar al descubierto el largo mango del arma, comencé a escuchar las pisadas brutas, torpes y locas del informador, y otras mas ligeras y precisas, que con un cierto toque de confusión me imagine que seria el cazador, me agazape en mi lugar y espere.

Mis ojos ámbar abiertos, mis músculos tensos y y mi cuchilla afilada dirigiéndose a su yugular. Seria un trabajo más, una victima más pagada con sucias monedas como estaba acostumbrada, si no fuera por que apenas unos segundos antes de caer sobre mi objetivo este huyo como un gato asustado con el rabo entre las piernas. Caí de cuchillas sobre el frió suelo casi sin hacer ruido, pero mi presencia había sido detectada. Mi victima me miro un segundo con ojos aterrados y corrió hacia un almacén aun con el maletin bien aferrad a él.

-"Mierda"- pensé solo por la molestia de tener que perseguir a un ser tan inferior y molesto. Corrí detrás de él con mi cuchilla preparada y me introduje en el astillero.
Estaba muy oscuro, la única luz que había era la de la noche que entraba por las ventanas superiores, algunas rotas y que dejaban entrar el aire frió. Había un enorme olor a pescado y una humedad que me molestaba enormemente. Pero había algo más, una presencia, un temor, un sentido que me avisaba que no estaba sola. Respire hondo y puse en marcha mi cabeza, puede que no fuese un simple trabajo. Cerré la puerta y apoye mi espalda contra unas cajas de madera ocultándome de la vista de cualquiera. Sujete el cuchillo con la boca mientras mis manos sacaban un arma. Miré la recamara y tenia cuatro balas de plata. Debía de haberme preparado para todo. Guarde mi cuchillo y sujete fuertemente el arma poniéndola delante de mi para cualquier improvisto.

Oía levemente como mi victima intentaba escapar. Oía su respiración entrecortada, como tropezaba con varios objetos del suelo y intentaba abrir puertas debidamente cerradas. Yo me deslizaba entre los pasillos de mercancías con gran sigilo y notando que la temperatura bajaba poco a poco. Sin duda había alguien mas allí.

Entonces vi mi objetivo intentando huir por una puerta que estaba cerrada por una cadena. El hombre intentaba romperla con herramientas de los pescadores, pero ni había dudado ni un segundo en abandonar el maletín con el dinero, pues aun lo tenia fuertemente agarrado con su mano izquierda. Entre dos montones de cajas, me acerque y a una distancia de diez metros mi puse en posición. Puse una de mis rodillas en el suelo y apunte con mi arma sigilosamente. El uno ruido que hice fue el de un clavo que hice que rodara cuando me arrodille
- Ya eres mio- dije en voz baja junto antes de apretar el gatillo y oír el enorme estruendo que resonó en todo el astillero.

Escuche a las dos personas entrar en el almacén, yo seguía acurrucado en el barco, expandí mi mente para captar las dos mentes y ver que estaban pensando, al aterrorizado informador le indique donde había una herramienta que podía utilizar para romper la cadena y poder escapar de las garras del enemigo. La mente de aquel cazador, me había detectado y se había escondido no se muy bien donde, al parecer me había detectado incluso habiendo eliminado mi presencia casi por completo - es bueno, realmente bueno - pensé para mis adentros mientras la emoción aumentaba por momentos.

Mientras tanto, aquel pobre hombrecillo intentaba desesperada-mente romper la cadena, me levante despacio y sin hacer ruido, y justo cuando el informador rompió la cadena, lance mi guadaña con precisión, la dirección que llevaba era hacia su cuello, y justo cuando consiguió romper la cadena y abrir de golpe la puerta.... , un estruendoso sonido surgió desde la oscuridad, la guadaña le segó la cabeza limpiamente, y pasando de largo haciendo que la guadaña se clavase en el suelo, al parecer, aquel brutal sonido que retumbo en la oscuridad del húmedo lugar era de un disparo.

Salí de mi escondite mientras esbozaba una sonrisa siniestra, lo único que se oía en el lugar, eran los eslabones de la cadena que unía mi arma, al brazal compuesto del mismo material situado en mi brazo, me acerque hacia el hombre degollado y observe el agujero de bala - un disparo muy certero señor cazador - comente en voz alta - al parecer nos han asignado el mismo objetivo.... pero como decidimos quien es el que lo a cazado? - le pregunte con cierto tono humorístico y tontorrón, se acerca a el maletín y se lo arroja con una patada - esto es por ahorrarme el trabajo de correr detrás de el y acercármelo, aparte, no creo que le de mucho uso a ese dinero - cogí mi guadaña, y con un salto acrobático me subí a la zona mas alta del lugar, me puse de cuclillas, deje reposar mi arma en mi hombro mientras la sujetaba y espere a que el cazador saliese a la luz.

Mis pupilas se dilatan enormemente al ver a mi presa cayendo al suelo sin la cabeza seguida de un enorme chorro de sangre. Mi disparo ha sido certero pero puede que no mortal. Vi como una arma a gran velocidad cortaba el cuello del chivato junto a la vez que retumbaba el sonido de mi revolver en el almacén.

Tensa espero en mi posición observando mi alrededor. Veo una sombra acercase al cadáver sangriento en el suelo. No es más que una sombra, pero su presencia intimida. Apunto a su cabeza en señal de precaución.

-"un disparo muy certero señor cazado"r - comentó en voz alta - "al parecer nos han asignado el mismo objetivo.... ¿pero como decidimos quien es el que lo a cazado?"

Y de seguido me tiro el maletin del dinero cerca de mi posición, ofreciendo me lo por mi "buen trabajo". Una leve ira crece en mi. ¿Me ha tomado por idiota?. Puede que solo por un simple peón para hacer su objetivo más rápido. Sin perder los nervio permanezco en el frio silencio. La criatura de un salto se pone en el lugar más alto para que pueda contemplarla. Todo mi ser durante un segundo se estremece.

Un ser alto y imponente, bien vestido y portador de una gran guadaña. Siento el frio más intenso sobre mi piel desnuda. No habria nada que me lo confirmase totalmente, pero simplemente mi instinto me indicaba que lo más seguro es que era un vampiro.

-"Relájate"- pienso para dentro y intento destensar mis músculos y noto como mis manos dejan de apretar con tanta fuerza mi arma que aun mantenia el gatillo apretado. En mis tiempos de cazadora pocas han sido las veces que he luchado contra vampiros, la mayoria acabados de convertir, abandonados y desorientados, pero esta no era una situacion de la que debia huir. Me levanto con mi arma cargada y me acerco a la luz, dejando mostrarme- ¿El mismo objetivo?- digo en un tono normal, se que aunque susurroase seguramente me oiría igual- ¿ Acaso eres un vampiro que trabaja para otros en vez de seguir vuestro asqueroso insitnto y matar por placer?- aquello era muy arriesgado pero era lo que sentia en el fondo.

Uno en lo alto, yo el lo bajo. No podria ni imaginar como acabaria aquella peligrosa situación.

Desde mi altura pude ver como poco a poco, aquella figura oculta en la sombra, se fue acercando hacia la luz hasta hacerse ver, la sorpresa que me lleve, fue cuando, en vez de la figura robusta y fuerte como la de un hombre, vi algo totalmente diferente,vi las preciosas curvas, la flexibilidad y agilidad de una mujer - que grata sorpresa, los que me imaginaba ser un cazador, en realidad es una cazadora, que pena avernos conocido en estas condiciones - reí suavemente al escuchar su comentario - yo no soy un vampiro cualquiera, yo solo me alimento cuando tengo hambre, y como cazador que se precie es mejor no llamar la atención, y en cuanto a quien me a contratado...., no necesito nombres, solo cierta información, y mi objetivo - mientras me apuntaba con su arma, continué mirando a aquella hermosa mujer, observando cada detalle de su cuerpo, cada ápice de piel que dejaba al descubierto para que fuese observado la luz que se reflejaba en su cuerpo le daba un aspecto elegante, bello, a la par que interesante - tampoco eres estúpida ni nada por el estilo, solo que a veces no hay que recurrir a la fuerza bruta si no a la estrategia - puse un tono de voz misterioso - como dijo Shu Tsu: el arte de la guerra se basa en el engaño - volví a reír- solo e utilizado lo de mi alrededor en beneficio propio, un consejo, de cazador a cazador, haz que tu enemigo luche contra tu enemigo - me rasque la cabeza con la mano que me quedaba libre y le dedique mi mejor sonrisa - y bueno que hacemos, como quiere solucionar esto, quiere probar suerte conmigo, o prefiere dejarme la cabeza para llevársela a mi cliente, usted decide - la verdad no me importaba pelear un rato mas...., pero el alboroto seguro que traería mala gente, y no quería transformar esto en una sangría.

Mis ojos volvieron a coger su brillo natural una vez acabado con mi objetivo, le dedique una sonrisa amable y me dispuse a abandonar el lugar, continué con mi arma apoyada en mi hombro, con mis dedos tamborileaba en el mango retráctil de la guadaña, la oscuridad y algún que otro reflejo, le daban el aspecto de un arma recién salida de los fuegos del infierno sedienta de sangre, me levante y espere a haber que le ofrecía mi bella e interesante contrincante.

Que extraña criatura era la que tenia delante. No era solo que supiese cultura China, si no que ademas parecía adoptarla algo en su filosofía. ¿Como tratar a un ser así? Puede que solo fuese un simple intuición mía, pero... ¿acaso también me leyó la mente?. Por supuesto he leído libros y comentado con compañeros las habilidades de aquellos seres, y podía tener esa habilidad. Entonces las peleas eran más complicadas pero satisfactorias.

Permanecí en silencio mientras que él comentaba que hacer con el cadáver. ¿Que seria mejor? Dejar que el se llevase al muerto y yo perder mi recompensa, y no solo eso, y ademas la leve confianza del hombre que me contrato. O pedir el cuerpo y involucrarme en una pelea con una de aquellas bestias. Mientras pensaba sigilosamente vi sus intenciones, puede que quisieses irse del lugar cuanto antes, pero aquello no quedaría así.

En el almacén resonó un segundo disparo. Por supuesto no iba dirigida a su cabeza si no que únicamente debía de rozarle como advertencia.

-Me encantaría darle la cabeza para que te divirtieras con ella- dije mientras prepara de nuevo el arma y mostraba una leve sonrisa- pero mi trabajo es claro, "Que parezca un accidente". Has de entender que una cabeza degollada, y lo que es peor, solo el cuerpo es un poquito complicado hacerlo pasar por una simple desgracia- empece a caminar lentamente en la dirección del cuerpo mutilado- Mi bala en la cabeza podría darse por un arreglo de cuentas, cuando quise cortar le el cuello podría hacerlo pasar por un robo. Pero en el lamentable estado en el que esta habría que echarle mucha imaginación- llego junto a la cabeza y le doy una leve patada para que girase y poder ver tanto el cuello perfectamente cortado y el agujero negro en su frente- Y no solo esta el tema del cuerpo sino...- apunte a su cabeza con intención de disparar- lo peor para un cazador es que le quiten su presa- me preparo para lo que puede que sea mi ultimo combate mientras vuelvo apretar el gatillo.

Aquel disparo paso muy cerca de mi cabeza, sabia que lo aria, no hacia falta leerle la mente para estar seguro de eso, acto seguido mi sonrisa se apago, mis ojos volvieron a tener un tono oscuro, sin brillo, y siniestro, y deje de hablar, si iba a ser una carnicería, que fuese lo mas rápido posible, que pena que alguien tan bello y joven tuviese que perder la vida tan pronto.

Lance mi guadaña contra ella, la cazadora la esquivo elegantemente mientras disparaba con su pistola, haciéndose clavar la guadaña contra una caja, lamentablemente ya había leído su movimiento y salte desde mi posición alta en dirección hacia ella poniéndome delante de ella, la mire sin sentimiento alguno, agarre mi cadena y tire de ella fuertemente haciendo que mi guadaña volviese a su dueño y trayendo con sigo una caja, volvió a esquivar el golpe saltando hacia arriba y haciendo una cabriola en el aire a la vez que disparo un par de veces mas su revolver, mientras estaba en el aire salte hacia ella cubriendo mis puntos vitales, esquive una bala y la segunda impacto en mi brazo, pero cuando llegue a mi presa que estaba en el aire la golpee con todas mi fuerzas haciéndola atravesar la pared de madera del astillero, mientras daba tumbos por el suelo por el golpe, y sin esperar a que se detuviese, me moví a una velocidad sobre humana cogiéndola del cuello y estampando su cabeza contra el suelo, intentando aturdirla - por muy guapa que seas..., te repito que no soy cualquier vampiro - coloque una rodilla sobre la mano donde tenia el revolver, con el otro pie, pise su otra mano colocándome encima de ella y coloque la punta de mi guadaña en su cuello - ¿estas segura de querer seguir con esto? - comencé a escuchar muchas pisadas que se acercaban al lugar del altercado, seguro que un unos 10 minutos estarían por aquí cerca - tu decides, me quedo con la caza, a cambio tu te quedas con el maletín, tienes unos segundos, si no..., ni lo uno ni lo otro - mi cara seguía siendo inexpresiva, y tenebrosa a causa de la oscuridad, la verdad no me importaba tener otro cuerpo aquí tirado y sin cabeza, ademas seria otro cazador que dejaría de vivir, y e intentar dar caza a mis hermanos de raza.

La pelea que había seguido tras mi tercer disparo fue de las más duras de mi vida. Un ser que parecía no acostarle evitar mis balas y leer mis pensamientos. Fui capaz de esquivar levemente su primer ataque con su guadaña, y esquive el segundo gracias a las enseñanzas de mi abuelo en el arte de la lucha. Mientras aun estaba en el aire pude ver una fina capa de sangre saliendo le de una herida provocada por mi bala en su brazo, lo que me levanto levemente la moral, pero no duraría mucho. En apenas un segundo y aprovechando que aun me encontraba en el aire me golpeo con violencia. Pude notar mi cuerpo cayendo a una gran velocidad y chocando contra la pared de madera, que menos mal que estaba medio podrida, pues así la atravesé. Rodé unos metros por el frió suelo hasta detenerme con cientos de cicatrices sangrantes en mis brazos. Algo aturdida intente levantarme pero fue inútil pues mi agresor me agarro del cuello y me estampo de nuevo contra el frió suelo. Note que por un segundo me quedaba sin aliento, que se me olvidaba todo a mi alrededor mientras el vampiro me inutilizaba las mano. Casi sin respirar apenas podía oír su voz.

-"Tu decides, me quedo con la caza, a cambio tu te quedas con el maletín, tienes unos segundos, si no..., ni lo uno ni lo otro"- dijo serio. Mis ojos buscaban a mi alrededor una salida, no pensaba llegar a un trato después de aquella humillación. Por fin vi mi oportunidad.

-...- hiperventilando y sangrando por la boca y nariz mostré una sonrisa a mi agresor- Ni lo uno, ni lo otro.- pongo mis pies entre su cuerpo y el mio y los estiro de golpe y con fuerza provocando que tenga que apartarse. Coloco mis manos en posición para levantarme y apartarme con una voltereta hacia atrás y quedarme lo más cerca posible del agua. Ahora lo observaba a muy poca distancia de mi. Detrás de él el almacén con el cadáver degollado, detrás mía el fría agua. Perfecto. Levante mi arma y le apunte con mi ultima bala- Vete al infierno- fue mi ultima palabra antes de presionar el gatillo tambaleante.

La bala voló a una gran velocidad, y dio en su objetivo, que no era nada más y nada menos que los bidones de material altamente inflamable colocados alado del astillero. La explosión que siguió fue tal que apenas me había dado tiempo a lanzarme al agua helada. Protegida por la capa de agua podía ver la enorme bola de luz de la explosión. Apenas fue unos segundos lo que permanecí hundida, hasta que al salir a la superficie pude ver el gran almacén ardiendo y despidiendo una gran humareda negra. Empece a reaccionar al notar mis extremidades empezar a congelarse y cuando quise empezar a nadar un increíble dolor se acentuó en mi brazo izquierdo. Cuando mire estaba levemente quemado pero debía llegar cuanto antes a una orilla segura.
Puede que no me diesen el trabajo como completado, pero al otro individuo tampoco. No sabia su nombre, si ahora seguía vivo o si lo volvería a ver.

Tenia bien sujeta a mi presa, solo tenia que contestar, pero cual fue mi sorpresa cuando respondió - ni lo uno ni lo otro - con gran flexibilidad interpuso sus piernas entre mi cuerpo y el suyo, y me lanzo volando hacia atrás, al parecer tenia bastante fuerza, había subestimado a aquella cazadora, mientras me encontraba en el aire, escuche es sonido de la pistola, y con rapidez cubrí mis puntos vitales, pero al parecer no era a mi a quien apuntaba, sino a unos barriles que contenían material inflamable. La explosión me mando contra un almacén de al lado haciéndome empotrar contra su pared, al caer al suelo gire sobre mi mismo para eliminar los restos de fuego adheridos a mi ropa, aquel movimiento que hizo mi contrincante me quemo los alguno tejidos de la piel, me levante mientras apagaba con una mano el ultimo rastro inflamable de mi brazo derecho, tire de la cadena de mi arma para que volviese a mi, la cogí por el mango, y me dirigí al almacén que se encontraba en llamas, mi piel se fue curando sus heridas gracias a mi curación acelerada, comencé a escuchar mas alto el ruido de pisadas a gran velocidad y gritos por doquier, entre en el almacén y divise el cuerpo degollado y la cabeza ardiendo junto al almacén, me acerque, recogí la cabeza medio quemada y que todavía seguía ardiendo, conseguí apagarla lo malo era que tampoco se notaba mucho si era o no la persona que debía eliminar, aunque tampoco le importaba, salio del almacén ardiente y se escondió entre las sombras consiguiendo escapar de la multitud que se acercaba.

Escale el edificio mas alto hasta llegar a su tejado, la cabeza la llevaba colgando de la cintura en una bolsa, mi arma estaba guardada en la funda de mi espalda, me situé en la cornisa del edificio de cuclillas y otee la ardiente escena que se producía en la noche fría y oscura, busque a mi cazadora, y la divise saliendo del helada agua, bastante apartada del lugar, imagine que no quería llamar la atención.

Con mi manos trace un circulo dejándola en medio de este, chasquee varias veces la lengua, sonreí alegremente - creo que esta ciudad va a ser mas divertida de lo me imaginaba - pensé, cogí yo y mi cabeza degollada y me fui a visitar a mi cliente para decirle que ya había terminado mi trabajo