Noche Primaveral {libre}

por **Candy Al-Fahaeled** Jue Jul 12, 2012 8:09 pm

La floreciente primavera a su alrededor causaba que en las noches deseara pasear mas allá de las lúgubres y malolientes calles de los bajos fondos de París, de donde salían la gran mayoría de sus presas. Aquella noche-a diferencia de las anteriores en las cuales el alba siempre la sorprendía antes de empezar su tan ansiado paseo nocturno-no se detuvo a "cenar" como había hecho las noches anteriores, sino que sus pies la guiaron por toda la ciudad hasta que llegó a la laguna.

Suspiro y con paso calmo se acerco hasta la orilla, siguiendo su curso lentamente, escuchando solamente como el bajo del vestido borgoña que llevaba se arrastraba por el verde césped, rompiendo con aquel leve sonido el silencio sepulcral que reinaba.

Podía sentir el calor que comenzaba a hacer en la ciudad en sus brazos desnudos y cuello, al igual que en su rostro y como la brisa primaveral nocturna jugaba con sus cabellos que caían graciosamente ondulados sobre su espalda y hombros. Había cambiado un poco después de aquel corto viaje que había hecho a su ciudad natal con la única intención de visitar la tumba de su querida abuela.Había tomado una decisión.

Al principio de su nueva vida como vampira se había dedicado a buscar información sobre lo que era, para después pasar a ser una inmortal completamente solitaria, arisca y llena de malhumor.Ahora su intención era la de aprovechar al máximo el tiempo que tenía por delante y aprender todo lo posible, que era básicamente los conocimientos del mundo por completo.

Inspiro aire profundamente y se detuvo en su caminar, admirando la belleza del cielo nocturno y el brillo de las estrellas sobre la laguna brillante.

por **Maximo Daniro** Jue Jul 12, 2012 8:45 pm

¿Qué estoy haciendo yo solo en mi casa?....todo para mi es aburrido, toda la mañana me la he pasado como burro cargando cosas de mi trabajo, el señor me ha golpeado mi quijada por haberme comido una manzana en la hora de trabajo, me tuve que aguantar no pienso perder mi trabajo solo por ponerme altanero no soy así, así que no lo hare. La bestia interior en mi quiso salir pero yo no la deje, no quería matar aquel pobre hombre… ¿Pobre?...de verdad considero aquel hombre, pobre…no soy mala persona así que no la juzgare como tal. -Maximo, Maximo, Maximo… ¿Qué estas haciendo hijo mío?...-Escuche la voz de mi nana, ladeo mi rostro y la mire parada en la puerta del pequeño comedor, mi sonrisa aprecio al verla-Nada, solo pensaba-Cuando había llegado a casa ella se preocupo por mi golpe que tenia en mi quijada, le dije que yo mismo me había golpea al no fijarme y me había golpeado con un árbol ¿Patético no? Pero no quería que me digiera nada acerca de mi trabajo apenas tenia una semana, ambos lo necesitábamos, mi nana que parecía mas mi madre trabajaba de costurera y yo quería ayudar, desde que habían muerto mis padre ella velo por mi y yo hare lo mismo por ella.

-Hijo mío, ¿Vas a salir?-Su tono era preocupante, suspire y me levante de la silla donde estaba sentando-Si, sabes que suelo salir por noche, por la mañana trabajo, la tarde descanso y el único tiempo que tengo para mi es en la noche, no se preocupe no me va a pasar nada se me cuidar como tal-Le guñi el ojo y le di un beso en la frente-Ya cene, ya le ayude hacer los quehaceres de la casa, ahora es hora de estar un rato solo-La abraza fuerte a mi viejita hermosa-Te quiero lo sabes ¿verdad?-Le dio otro beso, solo ella asintió separándome de aquel cuerpo que poco a poco se estaba cansando, empecé a caminar hacia la puerta de mi pequeña casa, Salí por la puerta y me perdí por las calles de parís. No sabia donde iba a ir, mis pies solo me llevaban, mire que pasábamos por las calles de parís hasta adentrarme al bosque, el bosque que tengo tantos recuerdos, siempre suelo venir cuando me convierto en lobo por completo. Pase una de mis manos por el tronco del árbol, sintiendo su textura, su dureza, lo rasposo que era. No me había dado cuenta que había llegado a la laguna ¿Tan entrado en mis pensamientos estaba que no me di cuanta de esto?...suspire y me quede parado un olor a muerto vino a mis fosas nasales…un vampiro se encontraba aquí…no quería pelear, tampoco quería irme, no mire, solo estaba parado en la orilla del lago, mirando por todos lados no importaba si el estaba por acá…solo quería disfrutar del lugar…después ubique por fin, no era hombre si no mujer, comencé a caminar por toda la orilla acercándome un poco mas aquella vampira.

Cuando estaba ya cercas, sonríe un poco-Es hermosa la noche verdad…-Fue lo único que dije, subiendo mi rostro y mirando el cielo-Si, es hermoso-Asentí por mis palabas y mirando de reojo a la mujer.

PD:Espero que no te moleste que haya posteado :3 me intereso tu tema asi que aqui estoy Smile

por **Candy Al-Fahaeled** Vie Jul 13, 2012 8:02 am

Sus ojos se anegaban en lagrimas al recordar el estado en el cual se había quedado su casa después de la muerte de su abuela. Su hogar, el lugar en el cual se encontraban todos sus recuerdos, era en aquellos momentos una vieja mansión llena de telarañas y polvo por todas sus habitaciones y rincones.

Una perfecta mansión embrujada, como había escuchado decir a los vecinos.

-Charmed se fosse loro case.-murmuro la joven mientras se quitaba las lagrimas de sus ojos e inspiraba aire para calmar las ganas de matar que tenía.

Recordaba con precisión los comentarios hirientes que todos aquellos conocidos de su vida humana, habían hecho en referencia a su abuela el mismo día de su muerte. No había podido estar con todos los demás, pero si había estado lo suficientemente cerca como para escuchar a las otras ancianas "amigas" de su abuela, criticar sobre ella.

Quito de un manotazo sus tirabuzones de su hombro derecho y se volvió a fijar en las estrellas reflejadas en la tranquila superficie del agua.

Un aroma inusual pero igualmente conocido para ella, la hizo levantar la mirada.

-Licantropo... otra vez.-susurro, sin moverse de su sitio pero poniéndose alerta de inmediato. Recordaba aún su último encuentro con un licantropo en la catedral de Notre Dame

Estaba a punto de darse la vuelta para emprender el camino de regreso a su solitaria casa, cuando una voz masculina interrumpió sus pensamientos. Clavó sus ojos en el joven-que también era de donde provenía el aroma a licantropo-y asintió a sus palabras, volviendo a fijarse en las estrellas del cielo.

-Coincido con usted, son muy hermosas sin duda.-comento, en voz firme pero sin elevarla demasiado por temor a romper el dulce silencio que invadía todo el lugar.

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