Nuevas aventuras por viejos caminos... [Nikky]

por **Abydus Locris** Jue Ago 02, 2012 1:30 pm

Comienza a caer la noche ya sobre las calles de Paris, cuando me encontraba como siempre en una posada, meditando y preguntándome que otras sorpresas podía encontrar ya a esas alturas de mi vida. No es que fuese un anciano, pero la vida de un cazador siempre estaba llena de sorpresas y nunca se sabía cuando iría a acabar. Podría ser de un momento a otro y cuando menos lo esperase. Cuando uno tiene en cuenta eso es que puede sentirse ya viejo. Era un estilo de vida reservado solo para algunos y odiado por muchos, principalmente por los depredadores...

Llevaba ya algunos días sin nada de acción, había llegado tarde a varios encuentros. Los vampiros de esa ciudad se movían más rápido que de lo común. Lo más cerca que había alcanzado a estar en la escena del crimen era cuando el culpable ya se estaba marchando, imposibilitándome cualquier oportunidad de seguirle el rastro. Aunque claro, no debía culparme de ello, no era mi ciudad natal y no conocía todos los callejones como la palma de mi mano. Distinto sería si etuviese en Luxemburgo, pero no era ese el caso.

Estaba en mi habitación, cogiendo mis armas y dejándolas prestas para el combate. Eche un último vistazo por la ventana, vigilando bien cada movimiento de los transeuntes para luego salir a la calle tras confirmar que nuevamente sería una noche de vagancia, en busqueda disimulada y a la vez desesperada por algo de acción. ´´Vagar por las calles no ha sido provechoso, tal vez por los callejones tenga algo de suerte´´ Pensé para mi mismo tras atravesar la puerta principal, dejando que la suave brisa de la noche golpease mi rostro cuan minero sale tras una jornada dura de trabajo en la completa oscuridad y sofoco.

Y así, aburrido de recorrer las calles principales, comence mi andar atravesándo los más oscures callejones de Paris. Teniendo cuidado de cruzar la mirada por mucho rato con los vagabundos que recién comenzaban a despertarse con dos destinos escritos. Uno; pasar otra noche de juerga para olvidar los malos pasares de su vida o dos; sufrir un cruel destino bajo el abrazo de los seres de la noche que merodeaban las calles.

No pude evitar soltar una sonrisa irónica ante aquel pensamiento, y cuan confiado como quien pasea por su casa, saque un trozo de pan de mi bolsillo, horneado hace poco para comenzar a comer lentamente y casi sin pensarlo. No me gustaba comer frente a los que no tenían, pero aquel había sido un acto casi instantaneo. Y quien sabe, tal vez atraíga alguna que otra sorpresa... Uno nunca puede estar cien por ciento seguro de las consecuencias de sus actos...

por **Nikky** Jue Ago 02, 2012 2:00 pm

Ultimamente parecía que todo lo que hacía era correr... correr y más correr... llevaba 4 días sin comer y eso no ayudaba mucho a mi resistencia pero que más podía hacer... me habían visto robando un trozo de pan de la pastelería y ahora me perseguían cual animal, afortunadamente era bastante pequeña y podía escabullirme entre los callejones con facilidad pero aun así los perros policías me seguía persiguiendo y sus mordidas eran muy dolorosas asi que o huia o me mordian... De pronto sin darme cuenta terminé en un callejón sin salida... miré a todos lados asustada por que los perros me había acorralado cuando miré hacia los lados y ví una escalera... salte apoyandome contra la pared y trepé con agilidad logrando escapar de aquellos tontos perros... me burle y empecé a trepar para subir por completo al techo donde empecé a saltar de un edificio a otro para esquivar a los policías que parecían rondar por el lugar... sabía que no podía volver a las calles principales así que mi única opción eran los callejones.

Iba feliz de haberme quedado con mi pan que tanto me costo robar pero al bajar vi a unos niños pobres que me quedaban viendo por el pan que apenas iba a morder y no tuve mas remedio que darselos... ellos lo necesitaban más que yo... un día más sin comer no me mataria... les sonreí y les entregué el pan... suspiré y empecé andar sin rumbo... moría de hambre pero ya no tenía más remedio... solo buscar un lugar para poder dormir un par de horas y esperar el amanecer...

Mientras deambulaba por los callejones un dulce aroma llamó mi atención... era sin duda pan... pero como era posible? nadie llevaría comida por ahi si no quería ser atacado por los vagabundos hambrientos... por instinto solo me dedique a seguir el sutil aroma del alimento cual presa cae en una trampa y a lo lejos puede distinguir a una persona pero mas allá de eso al parecer no fue la única atraida por la comida ya que poco a poco los vagabundos se paraban para ir acorralando a la persona... se que no era mi problema pero... no era alguien que dejara a las personas en problemas y más sabiendo cuales podrían ser las consecuencias así que corri lo más rapido que pude abriendome paso entre los vagabundos y en un pequeño movimiento le tome la mano a la persona y le jale para que empezara a correr conmigo... Genial... rpimero huia de policias y perros y ahora huia de vagabundos hambrientos... no se que era peor pero no me quedaría averiguarlo...

por **Abydus Locris** Jue Ago 02, 2012 4:15 pm

La banalidad de aquellos días sin duda me había jugado una mala pasada. Me había embalsamado tanto en mis pensamientos que para cuando me di cuenta ya me había metido en unos de los callejones más grande, aun comiendo aquel pan que había comprado recientemente. Desafortunadamente, no me pude percatar de aquello hasta que algo había tomado mi mano, obligándome a echar carrera hacía la salida de aquel callejón.

Para cuando pude darme cuenta de lo que había pasado, contemple que no era un algo lo que había tomado mi mano, sino que un alguien y no era un él sino una mujer. Bueno, una niña para ser más especifico. Una vez me llevó esta fuera del callejón mire hacía atrás tratando de comprender el porque de la prisa que esta llevaba. ¡Claro! Varios vagabundos, cuan zombies acechan a un humano se acercaban hacía mi y todo por la maldita gula de haber sacado ese pan recién horneado.

Suspire maldiciendo para mis adentros y esta vez siendo yo quien tomaba la mano de la niña, me guarde el pan y comencé a correr hacía otro callejón menos poblado, camuflándonos con un grupo de gente de la realeza que iban saliendo de un edificio bastante lujoso. Al parecer venían saliendo de una fiesta importante, pero aquello no me interesaba en esos momentos.

Después de unos pocos minutos ya habíamos entrado en un callejón y solté la mano de la niña, apoyándome contra una pared. Esta vez si había elegido un buen callejón, ya que a penas había un vago muy lejos que aparentemente se encontraba durmiendo placidamente en una posición que solo los vagos usarían para dormir.

Intento recuperar un poco el aliento, aunque no me había cansado nada en realidad, sino más bien fue la sorpresa del momento. Y luego dirijo la mirada hacía la niña. Hasta entonces no lo note, pero era ya muy tarde para que una jovencita como ella se encontrase sola por las calles, claro que no la iba a reprochar por eso, no era su padre ni nada por el estilo, es más sino hubiese sido por ella quizás me habría costado librarme más de aquellos vagabundos.

– Gracias, me has ahorrado un buen lío. Me pillaron volando bajo sin duda. Por cierto, mi nombre es Abydus, ¿y el tuyo es? – Le pregunté sin perderla de vista...

por **Nikky** Jue Ago 02, 2012 7:00 pm

Una vez que me serciore que no nos siguiera nadie casi caí rendia en el suelo de rodillas respirando agitadamente por que no solo había corrido con un extraño sino ya venía de una persecución de unos perros y ahora unos vagabundos que parecian zombies chupa cerebros tras un trozo de pan... -a.... a caso eres suicida?.... co... como se te ocurre comer en una zona como esta.... ahhh...- a duras penas podía respirar del cansancio pero levanté la vista y le miré -me... me llamo Nic... Nicole... Nikky...- me senté en el piso y le mire ya con mas atención... parecia alguien algo mayor que yo pero no se veía mala persona -esta zona es una de las más peligrosas... no por que puedan asaltarte pero si traes comida es como si entraras a una cueva de lobos hambrientos...-

Observé a todos lados lados intentando ver donde estabamos por que no reconocía la zona -si... me debes mucho - me mordi el labio por que aunque me muriera de hambre no me atrevería a pedirle que me diera de comer asi que solo me resigne y suspire -con saber que estas bien y no te paso nada me conformo- le dedique una sonrisa y le observe bien ya tranquila que realmente lo le hubiesen lastimado en lo absoluto.

-No eres de aqui cierto?- me levante sacudiendo mi ropaje que estaba mas sucio que saber que pero no me importaba -si buscas un lugar para pasear este no es el mejor sitio... pero no te preocupes te sacare de aqui y te dejare en la orilla de la calle principal- le di la mano para que caminara conmigo y pudiera guiarle fuera de ahi ya que a pesar que no nos seguian el pan que traia consigo aun era perseptible y podrían seguirnos de nuevo...

por **Abydus Locris** Jue Ago 02, 2012 7:32 pm

Otra cosa que se me había pasado del aspecto de la niña era su estado. Se veía que ya venía de otra correra y no solo por el hecho de haberse cansado más que yo. Empero ese no era el caso... No pude evitar soltar una pequeña carcajada al escuchar sus primeras palabras hacía mi.

¿Suicida? Vale, si era un cazador debía tener algo de suicida... ¿No conocer las calles? Tal vez si, pero no por eso iba a ir asustado por la vida, no definitivamente ese no era mi estilo y no porque una niña me dijese que debía hacerlo lo haría... Aunque si era cierto que le debía el tiempo ahorrado gracias a la carrera.

– Creeme Nikky que he estado en zonas muchas más peligrosas... Y si, soy algo suicida y te debo una. Me ahorraste tiempo, cosa que por alguna razón me ha faltado estos días – Le respondí a lo primero, pero luego me quede unos momentos callados ya que debía pensarme bien como responderle. No porque le tuviese miedo, sino que porue como ella lo había dicho, le debía una.

– Eso es cierto, no soy de aquí... Y en cuanto a lo otro, no me encontraba paseando, sino trabajando – Dije aún algo pensativo, mientras miraba al cielo como si esperase que las ideas me callesen de este. – Hum... No lo creo, esta noche me toca patrullar los callejones... Dime, ¿te gustaría ganarte unas monedas esta noche? Aparentemente tu conoces estos lugares mejor que yo – Digo nuevamente en cuanto escucho un golpe sordo contra el piso de no muy lejos.

Volví mi vista hacía el vagabundo y para mi sorpresa este se había dado de cara contra el suelo. Tras verlo me acerqué hasta el esquivando algun que otro tarro de basura y otras porquerias fuera de su lugar. Una vez junto a este lo di vuelta, confirmando lo que temí. Este ya había sido asesinado y por el color de su piel parecía ser una victima reciente. Al revisar el cuello no pude evitar patear el tarro de basura más cercano con algo de rabia.

– ¡Malditia sea! ¡Tarde de nuevo! – Dije sin darme cuenta en voz alta, y luego deje escapar un suspiro de resignación. El hombre en si ya era viejo y sus harapos lo marcaban como un vagabundo, pero aún así me molestaba profundamente el hecho de que esta vez había llegado un poco más tarde de lo usual.

Volví a acercarme a Nikky tratando de mostrarme algo más calmado... – Te puedo invitar a una cena como pago extra si quieres, pero deberá ser rápido, ya estamos algo atrasados. Tratare de explicarte más en el camino. ¿Vives en las calles no? – Le volví a decir apurado, preguntando lo último juzgando por su atuendo. Y era lógico, solo los niños de las calles conocian tan bien los callejones, lo sabía por experiencia propia.

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