Neru Le Course

Psicología

A pesar de su apariencia Neru puede llegar a ser una chica bastante sencilla, le gusta divertirse con aquellos a los que considere sus amigos, a pesar de que esto no sea siempre bien visto. Le gusta salir a pasear pero le desagradan las fiestas que muchas veces organiza su nueva familia adoptiva, a pesar de ello asiste por el hecho de sentirse agradecida con ellos. Marie le enseña a usar los modales adecuadas pero aun comete ciertos errores. Al contrario de muchas de las jóvenes que conoce ella se siente atraída por lo sobrenatural, en parte porque ella misma es una bruja pero en realidad poco a poco se fue interesando en todo lo que los demás ignoraban o pretendían no ver, como los gitanos o los seres de los cuales solo ha oído hablar en historias fantásticas hasta ahora.

Se le ve siempre con una expresión serena y de hecho ella se preocupa mucho por mantener esa actitud calmada; sin embargo, también existen ocasiones en las que puede perder aquella calma por completo. Esto sucede mayormente en situaciones en las que están en peligro algunas de las personas a las que considere importantes ya que suele recordar en esos momentos la pérdida de su padre adoptivo. Cuando está en confianza y no hay nada de que preocuparse es más ella misma, distraída y revoltosa, valora mucho a sus amigos y demuestra su cariño de muchas maneras. Infantil y algo caprichosa además de muy curiosa. Esa es una de sus más grandes características y también un gran defecto ya que se mete en muchos problemas y muy a menudo gracias a su curiosidad por todo lo que llame su atención.

Por otra parte, a pesar de que se esfuerza por ser una buena persona muy en el fondo disfruta con lastimar a los demás pero a limitado esto a aquellos que considere enemigos y aprendiendo solo una de esas técnicas consideradas como magia negra, el titiritero para el que tuvo facilidad aun siendo pequeña.

Historia

Neru nació en un orfanato de Paris, su madre murió poco después de ponerle a su hija un nombre así que nunca supo nada acerca de su familia y en realidad nunca se preocupó por ello. En el orfanato le dieron lo necesario para vivir pero solo eso, nunca se vio rodeada de lujos, ni siquiera de amor por lo que aprendió a vivir por sí misma en poco tiempo. Ya desde entonces se manifestaban sus poderes como bruja aunque ella no lo supiese, solía saber cómo se sentían las personas a su alrededor pero creía que era algo natural por lo que nunca se preocupó ni se lo dijo a otras personas. Cuando cumplió los 7 años llego al orfanato un hombre llamado Adam Curie, pertenecía a la clase media de Paris y deseaba adoptar a un niño o niña ya que había decidido nunca casarse luego de la muerte de su prometida. Pero aparte de todo ello, Adam era también un brujo, al ver a Neru se sintió intrigado por ella, pero al descubrir que la chica no sabía ni de sus propios poderes luego de unas cuantas palabras decidió adoptarla y enseñarle él mismo.

De esta manera Neru se ganó un apellido y un nuevo hogar. Su padre le enseño (o al menos intentó enseñarle) a controlar la empatía y a desarrollar la premonición, aunque esta última nunca la llego a dominar por completo por lo que en cualquier momento podría ponerse a dibujar escenas del futuro pues esta es la manera en que la manifiesta. Pero un día en que Adam llegaba tarde encontró a Neru hablando con una lámpara y vio como esta se movía por sí sola, fue la única vez que Neru vio a su padre adoptivo tan asustado. Adam, que sabía que eso era magia negra se preguntaba de donde la habría aprendido la chica pero ella se limitaba a decir que la lámpara había empezado a moverse por sí sola. Neru no sabía realmente lo que aquello significaba, mucho menos se había percatado de que era por su propio poder, y Adam no iba a dejar que lo descubriese por lo que le prohibió utilizar aquel poder desde ese momento. Pero la curiosidad pudo más y la niña aprendió por su cuenta.  Dejando de lado aquel incidente, tanto el padre como la hija eran felices juntos, aunque nada duraba para siempre. Cuando Neru ya tenía 17 años de edad, Adam falleció, dejando sola a su preciada hija adoptiva, o no tan sola.

Tiempo atrás Adam había sido conocido por la clase alta de París y aún mantenía algunas amistades, cuando murió, una de esas amistades, una mujer de clase alta llamada Marie Le Course, fue a recoger a la joven bruja. Marie había decidido hacerse responsable de Neru y ella al no tener a donde ir decidió quedarse con aquella amiga de su padre a la cual nunca había visto; sin embargo, optó por conservar el apellido Curie. Dos años desde entonces, Neru ya conoce un poco más sobre el mundo sobrenatural a la par que su vida entre los humanos fue mejorando. Educada ahora como parte de la clase alta, a pesar de que no le gusta mucho aquel estilo de vida, y tuvo que cambiar recientemente su apellido pues Marie planeaba hacerla su heredera. Abandonó París un tiempo al hacer un viaje con Marie a Italia, pero una vez más está de vuelta en el lugar donde creció.

Datos Extra

* Toca el piano
*No le gustan los lugares demasiado luminosos
*Es débil con el alcohol