Eustace Antoline Gougeon Gutierre

Nombre del Personaje: Eustace Antoline Gougeon Gutierre.

Edad: Su edad es un completo misterio, se dice que tiene tratos de sangre con algunos vampiros.

Especie: Homo sapiens sapiens Var. piratus brujitus.

Tipo, Clase Social o Cargo: Clase media.

Orientación Sexual: Heterosexual.

Lugar de Origen: Puerto de Calais, norte de Francia.

Habilidad/Poder:

• Hechicería: Habilidad para hacer que cosas sucedan, ya sean a favor o en contra de alguna persona, por medio de conjuros, hierbas y pociones. Esto incluye altos conocimientos de herbolaria que les permiten hacer también curaciones.
  
  
• Percepción del Aura: Habilidad para ver las auras de otros seres, cuyos colores indican su humor, identidad y nivel de hostilidad, de este modo saben si están bajo amenaza. Este poder también les permite reconocer a Licántropos y Cambiaformas cuando no están transformados e identificar a los vampiros gracias a su Aura pálida y característico olor.
  
  
• Atmokinesis: Habilidad para controlar ocasional y relativamente el clima y los sucesos meteorológicos (rayos, tempestades...).
  
  
• Limpieza: Permite borrar toda huella mágica, todo efecto de magia o todo lo que sea relacionado con ella, de los objetos y en ocaciones de la mente ajena y pasar desapercibido.
  
  
• Nigromancia: Habilidad que consiste en la adivinación mediante la consulta a los muertos y sus espíritus o cadáveres. Permite controlar temporalmente a alimañas y criaturas muertas para sus propósitos (No controla a vampiros).
  

Gougeon es un hombre de estatura promedio, ya que si bien es alto, jamás podría decirse que sobresalga por ello. Tampoco lo hace por su aspecto físico, no posee un cuerpo atlético, pero si lo suficiente ágil y flexible como su propia vida lo ha requerido. Su piel es pálida y a veces tiene un aspecto hasta enfermizo el cual soluciona con alguna misteriosa visita. Maneja el cabello corto ya que éste tiende a desordenarse con facilidad y dejar un caos leonil en su bien formada cabeza. Sus ojos son de color marrón oscuro, al igual que su pelambrera. Sus manos son firmes y sus dedos alargados, suele hacerlos tronar cada vez que se dispone a realizar un hechizo.
No posee tatuajes, ni nada ajeno a su propia naturaleza, mas sí esconde uno de sus más grandes complejos por debajo de los zapatos; un gran juanete en el dedo pequeño del pie izquierdo. Lamentablemente es una marca familiar.

Eustace, tal y como su nombre lo indica, es un hombre fecundo, aprovechador y oportunista. No deja pasar una sola de las chances y es capaz de todo por conseguirla. Cree firmemente que el fin justifica los medios, y aunque jamás admita que puede conceder excepciones, es algo que a veces ocurre. No es una mala persona, pero tampoco es buena, tiene un carácter caótico que avanza hacia donde le lleve el viento. Es capaz de asesinar a destajo, siempre y cuando no conozca a las personas, es más fácil comerse al cordero cuando no ha comido de tu mano.
Es ambicioso y curioso, no tanto de dinero como de poder. Teme a envejecer pero tampoco desea hacerse un inmortal, por eso hace tratos de sangre, no con uno, sino con varios vampiros, no es tan ingenuo como para depender de uno de ellos: Trabajos por sangre, es lo que pide a cambio de sus hechizos y desempeño con los muertos. Evidentemente, todo lo mantiene en absoluta reserva.
No es un hombre correctamente educado, sino más bien salvaje e inmaduro, pero sabe fingir bien cuando el protocolo lo hace necesario, y eso ocurre si acaso desea sacar algo a cambio.
Es un verdadero mercenario en su tiempo libre, y político aburrido en el que no, pero... algo que hay que sacrificar a cambio del poder.

Nació en la ciudad-puerto de Calais, hace más años de los que aparenta, pero no tantos como para considerarle un sobrenatural. Creció en una familia completamente quebrada y fue el menor de una docena de niños por lo que jamás le faltó apoyo y compañía, así como tampoco el hambre y las peleas.
Su madre se había enamorado de un hombre mayor y se había entregado a él con la esperanza de llegar a formar una linda familia, pero el hombre parecía no pensar de la misma manera y les abandonó a ella y su primogénita; desde entonces todo se vino cuesta abajo y la mujer, sin educación y una hija acuestas, tuvo que buscar cualquier manera de supervivencia, haciéndose de uno y otro hijo de padres diferentes, pero jamás les abandonó, y mientras hubiera un pan que compartir, éste siempre se partía en trece.
Dentro de los hijos había de todo; no faltaron los borrachos, ni las cortesanas, así como tampoco los “raritos” como su hermana mayor que alguna vez pudo ver convertida en una especie de cánido, obviamente era un pequeño y de seguro había sido sólo producto de su imaginación. Pero los años pasaron, la madre murió y aún siendo todos menores de edad, fueron destinados en el orfanato de la ciudad que finalmente acabó por separarles, siendo sólo dos de ellos adoptados por una misma familia, mientras que otro par de los más grandes huyeron para hacer su propio rumbo, y ese fue el fin de “La Docena Molyneux”.
Eustace, por su parte, fue adoptado por una familia de brujos que imposibilitados de tener hijos propios, decidieron adoptar antes de probar a través de las artes tenebrosas. Fue así como acabó aprendiendo pequeños trucos entre medio de las cortinas, que más tarde le serían revelados por sus propios padres adoptivos. Fueron los mismos nuevos padres y el pasar de los años, que le hicieron comprender la existencia de los cambiaformas y otros seres sobrenaturales que le provocaron fascinación, y entonces lo entendió; su propia hermana mayor era cambiaformas, pero cuando quiso buscarla, la marea desde el otro lado del océano trajo consigo la noticia de su muerte.
Decepcionado y un poco dolido, intentó retomar el contacto con el resto de sus hermanos, pero tampoco a ha tenido buenas noticias, pues cuando ha logrado encontrar alguno, éste le ha tachado de maldito o adefesio del demonio ya que al parecer los años no parecían pasar por él con la misma velocidad que para los otros, pero aquellos eran secretos que había jurado no rebelar.
Aprovechó la vida cuanto pudo aprovecharla, y cuando ya hubo aprendido lo suficiente, marchó a Paris en busca de más dinero y poder el cual ha obtenido a costo de sangre y otros secretos. Participó en la rebelión por la República y se hizo a conocer rápidamente entre el circulo de “poderosos”, siendo elegido Senador de la República tras la misteriosa desaparición del Senador Soren Makelyne, pero no todo fue dinero y tranquilidad para el viejo pirata. La corona volvió a ganar fuerzas y junto a los otros políticos tuvo que huir para salvar su cuello. No le costó demasiado sobornar a alguno mientras vivía a expensas de otros y así conseguir algo más de protección hasta que finalmente se ha decidido regresar a Francia, aunque con mucha cautela y un apellido que no es el suyo, hasta estar seguro del terreno que pisa.

# Jamás se saca los calcetines cuando está acompañado.
# Posee mala memoria para los nombres y por ello tiende a poner apodos.
# Es doctor y también curandero, entre sus habilidades de hechicería.
# Disfruta de hacer enfadar a los muertos y más de alguna vez éstos han querido pasarle la cuenta.
# Búscalo por su nombre y si tienes suerte le encontrarás, deja una huella de dinero y ahí estará.
# Roba por gusto, es un mercenario, un pirata de los antiguos.