AÑO 1842
Nos encontramos en París, Francia, exactamente en la pomposa época victoriana. Las mujeres pasean por las calles luciendo grandes y elaborados peinados, mientras abanican sus rostros y modelan elegantes vestidos que hacen énfasis los importantes rangos sociales que ostentan; los hombres enfundados en trajes las escoltan, los sombreros de copa les ciñen la cabeza.
Todo parece transcurrir de manera normal a los ojos de los humanos; la sociedad está claramente dividida en clases sociales: la alta, la media y la baja. Los prejuicios existen; la época es conservadora a más no poder; las personas con riqueza dominan el país. Pero nadie imagina los seres que se esconden entre las sombras: vampiros, licántropos, cambiaformas, brujos, gitanos. Todos son cazados por la Inquisición liderada por el Papa. Algunos aún creen que sólo son rumores y fantasías; otros, que han tenido la mala fortuna de encontrarse cara a cara con uno de estos seres, han vivido para contar su terrorífica historia y están convencidos de su existencia, del peligro que representa convivir con ellos, rondando por ahí, camuflando su naturaleza, haciéndose pasar por simples mortales, atacando cuando menos uno lo espera.
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Entre árboles
Recuerdo del primer mensaje :
El día había sido de ir y venir, de allá para acá, los pies de la pobre chica ya estaban doloridos, el cuello parecía que no quería moverse porque perdería un eje, que por si fuera poco, estaba desviado y las manos las tenía lo suficientemente rojas para no querer tocar absolutamente nada. Necesitaba descanso, ella se había buscado estar así, no era que nadie le obligara, pero no podía estar tranquila, si tan siquiera se sentaba un rato se sentía incómoda, creía que era parte de su naturaleza el ir y venir, sentirse útil para quien fuera que estuviera cerca de ella.
Había conseguido una falda larga y una blusa que le quedaban un poco grandes, pero ¿Qué más daba? Eso era lo que había y Lanna nunca había pedido más de lo que podía tener, se contentaba con lo que fuera mientras no tuviera maltratos, algunas veces pensaba que podía ser como una chiquilla que deja de llorar con un dulce y... Así se comportaba, sabía que ambicionar para ella no estaba permitido, ni aquí, ni en cien vidas más, agradecía que su madre le hubiera inculcado el saber cual era el lugar que ocupaba en "la cadena alimenticia".
Después de todo lo que hizo y a pesar de que debía descansar simplemente se dirigió al bosque, era un lugar que a muchos les causaba temor, pero a ella le relajaba escuchar el murmullo de las hojas cuando iban cayendo o uno que otro crujido de las hojas bajos sus pies o bajo los de aquellos animales que pudieran estar sueltos por ahí, era su "paraíso" personal, no podía ir a otro sitio y ese era hermoso ¿Por qué no disfrutarlo?
Al llegar se quitó los zapatos y dejó que el césped rozara sus dedos, era una sensación agradable aquella, sólo había un problema, el sol acababa de dar sus últimos rayos y ver a través de la vegetación le costaba un poco más de trabajo de lo habitual, pero no había comparación, existía una media luna que parecía la cuna perfecta para un niño cansado, se le quedó viendo por unos cuantos segundos mientras que un suave y frío viento hacía que sus cabellos danzaran, para ella eso... Era descansar.
Había conseguido una falda larga y una blusa que le quedaban un poco grandes, pero ¿Qué más daba? Eso era lo que había y Lanna nunca había pedido más de lo que podía tener, se contentaba con lo que fuera mientras no tuviera maltratos, algunas veces pensaba que podía ser como una chiquilla que deja de llorar con un dulce y... Así se comportaba, sabía que ambicionar para ella no estaba permitido, ni aquí, ni en cien vidas más, agradecía que su madre le hubiera inculcado el saber cual era el lugar que ocupaba en "la cadena alimenticia".
Después de todo lo que hizo y a pesar de que debía descansar simplemente se dirigió al bosque, era un lugar que a muchos les causaba temor, pero a ella le relajaba escuchar el murmullo de las hojas cuando iban cayendo o uno que otro crujido de las hojas bajos sus pies o bajo los de aquellos animales que pudieran estar sueltos por ahí, era su "paraíso" personal, no podía ir a otro sitio y ese era hermoso ¿Por qué no disfrutarlo?
Al llegar se quitó los zapatos y dejó que el césped rozara sus dedos, era una sensación agradable aquella, sólo había un problema, el sol acababa de dar sus últimos rayos y ver a través de la vegetación le costaba un poco más de trabajo de lo habitual, pero no había comparación, existía una media luna que parecía la cuna perfecta para un niño cansado, se le quedó viendo por unos cuantos segundos mientras que un suave y frío viento hacía que sus cabellos danzaran, para ella eso... Era descansar.
Lanna- Humano Clase Baja
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Fecha de inscripción : 07/01/2013
Re: Entre árboles
Ella estaba que no cabía de la impresión de que alguna araña o algo más le hubiera picado y él tenía la valentía de reírse en su cara, vaya que era malo este hombre cuando se lo proponía. Aunque por más que ella quisiera estar "molesta " o cuando menos seria, la verdad de las cosas es que cuando le escuchó estallar en sonora carcajada una sonrisa se dibujó en sus labios mientras negaba con la cabeza.
-Sin trampas, se me hace que usted vio mientras yo me escondía...- volvió a replicar una vez más y se le quedó viendo -Vale, ya dejo el drama y seguro que fue un maldito que buscaba mi sangre, soy tan dulce- dijo en tono de broma mientras olvidaba el incidente y el roce que había sentido se olvidaba un poco pues carecía de la mayor de las importancias.
Sintió la cercanía de Akseli y se le quedó viendo fijamente, si ella se giraba le daba más ideas para que él siguiera burlándose de ella -Que malo es usted, pero en algo le ganaré señor, estoy segura...- se mantenía irme en su posición a pesar de que el corazón le comenzaba a latir con fuerza a causa de los nervios, nunca le había gustado que la gente se acercara a ella porque siempre lo hacían para golpearla o zarandearle, así que mejor prefería mantener su distancia.
-¿A qué más juega o qué más hace en sus ratos libres?- preguntó observando los ojos de aquél hombre, era lógico que ninguno de los dos era un niño como para estar en juegos, sin embargo Lanna jugaba cada que podía, ya que cuando era pequeña no era de sus hobbies. A pesar de que ella hablaba y trataba de sonar natural podía llegar a oír el "tum tum" de su corazón al golpear su pecho, algo le hacía poner de nervios pero no sabía bien que era, no creía que él se acercara más pero ¿Miedo? Quizá le daba miedo, pero no quería aceptarlo.
-Sin trampas, se me hace que usted vio mientras yo me escondía...- volvió a replicar una vez más y se le quedó viendo -Vale, ya dejo el drama y seguro que fue un maldito que buscaba mi sangre, soy tan dulce- dijo en tono de broma mientras olvidaba el incidente y el roce que había sentido se olvidaba un poco pues carecía de la mayor de las importancias.
Sintió la cercanía de Akseli y se le quedó viendo fijamente, si ella se giraba le daba más ideas para que él siguiera burlándose de ella -Que malo es usted, pero en algo le ganaré señor, estoy segura...- se mantenía irme en su posición a pesar de que el corazón le comenzaba a latir con fuerza a causa de los nervios, nunca le había gustado que la gente se acercara a ella porque siempre lo hacían para golpearla o zarandearle, así que mejor prefería mantener su distancia.
-¿A qué más juega o qué más hace en sus ratos libres?- preguntó observando los ojos de aquél hombre, era lógico que ninguno de los dos era un niño como para estar en juegos, sin embargo Lanna jugaba cada que podía, ya que cuando era pequeña no era de sus hobbies. A pesar de que ella hablaba y trataba de sonar natural podía llegar a oír el "tum tum" de su corazón al golpear su pecho, algo le hacía poner de nervios pero no sabía bien que era, no creía que él se acercara más pero ¿Miedo? Quizá le daba miedo, pero no quería aceptarlo.
Lanna- Humano Clase Baja
- Mensajes : 90
Fecha de inscripción : 07/01/2013
Re: Entre árboles
Aquella broma humana sobre el dulzor de su sangre, solo me demostraba más lo inocentes e ingenuos que son los humanos, no pude evitar pensar en cual sería su reacción o pensamiento si ella supiera lo que yo era en realidad así como tampoco pude evitar preguntarme si ella hubiera dicho lo mismo si estaba consciente de mi situación. La verdad es que dudaba que actuara o dijera cosas tan descuidadas de aquel estilo si sabía lo que yo era.
- Seguro Lanna, lo que pasa es que tu sangre resulta irresistible para cualquier bebedor de ella - mencione aquello añadiendo humor a mi voz pero en realidad aquellas palabras que simulaban un sencillo juego eran nada más y nada menos que lo que yo pensaba en realidad.
Me mantuve cerca de ella sin alejar mi ser de ella ni un mínimo o hacer si quiera el intento de alejarme. - Pues deberás esforzarte mucho Lanna porque yo no suelo perder ni en las escondidas ni en muchas cosas - no era necesario que entrara en detalles pero ella sería incapaz de ganarme en algo a menos que yo le dejara ser feliz mostrando debilidad fingida en alguna situación solo para darle el gane.
Podía escuchar los latidos acelerados del corazón de Lanna que solo hacían que su sangre resultara aun más deseable para mi. Termine alejando y llevando mi mano derecha hasta mi mandíbula para poner una cara sería y pensativa. - ¿Juegos? - ¿Las peleas contarían como juegos?, ¿y los asesinatos?, ¿perseguir cazadores? - pues me gusta jugar cualquier cosa que prometa ser entretenida Lanna, no es que tenga preferencia por algo - por mi mente cruzo la frase; solo por la sangre, pero no lo dije - y que hago pues… buscar la forma de pasar el tiempo sin morir en el intento - sin morir evaporado por el sol claro estaba - es algo complicado de decir, pero cuando lleves un tiempo con nosotros te darás cuenta de lo que hacemos - la mire quitando mi mano de mi mandíbula, ¿Qué sería Lanna capaz de conocer o aguantar de nosotros?
- Seguro Lanna, lo que pasa es que tu sangre resulta irresistible para cualquier bebedor de ella - mencione aquello añadiendo humor a mi voz pero en realidad aquellas palabras que simulaban un sencillo juego eran nada más y nada menos que lo que yo pensaba en realidad.
Me mantuve cerca de ella sin alejar mi ser de ella ni un mínimo o hacer si quiera el intento de alejarme. - Pues deberás esforzarte mucho Lanna porque yo no suelo perder ni en las escondidas ni en muchas cosas - no era necesario que entrara en detalles pero ella sería incapaz de ganarme en algo a menos que yo le dejara ser feliz mostrando debilidad fingida en alguna situación solo para darle el gane.
Podía escuchar los latidos acelerados del corazón de Lanna que solo hacían que su sangre resultara aun más deseable para mi. Termine alejando y llevando mi mano derecha hasta mi mandíbula para poner una cara sería y pensativa. - ¿Juegos? - ¿Las peleas contarían como juegos?, ¿y los asesinatos?, ¿perseguir cazadores? - pues me gusta jugar cualquier cosa que prometa ser entretenida Lanna, no es que tenga preferencia por algo - por mi mente cruzo la frase; solo por la sangre, pero no lo dije - y que hago pues… buscar la forma de pasar el tiempo sin morir en el intento - sin morir evaporado por el sol claro estaba - es algo complicado de decir, pero cuando lleves un tiempo con nosotros te darás cuenta de lo que hacemos - la mire quitando mi mano de mi mandíbula, ¿Qué sería Lanna capaz de conocer o aguantar de nosotros?
Ackley Hinault- Cambiante Clase Alta
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Fecha de inscripción : 07/01/2013
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Re: Entre árboles
Podía decir que el señor le caía bien, sin embargo algo en su voz hacía que se le erizaba la piel, era como si su inconsciente le dijera que tenía que estar al pendiente de algo, pero su consciente hiciera caso omiso de esto, así que simplemente suspiró con fuerza intentando seguir con aquella sonrisa noble en los labios, aunque las piernas le temblaran -Usted no sabe como es mi sangre- le enseñó la lengua, sabía que las faltas de respeto eran muchas así que bajó la mirada y suspiró -Lo siento, ya me voy a comportar- dijo subiendo suavemente la cabeza para toparse de nuevo con los ojos del hombre y sonreírle un poco, era lógico que no quería hacerlo enojar, no era su estilo, odiaba que la gente estuviera molesta con ella por cualquier razón.
-Vaya... Eso de "morir en el intento" suena feo, perder no quiere decir que uno deba morir, y menos por estar jugando- negó con la cabeza sin llegar a comprender bien del todo las palabras que le habían dicho, a veces odiaba ser tan ignorante y sabía que de tener dinero y poder, lo primero que haría sería ponerse a estudiar, mínimo para aprender a leer y que supiera muchas cosas.
-Ya veo, ¿Y su hermano es como usted?- preguntó ladeando la cabeza, para luego correr hacia el árbol donde había estado y recoger sus zapatos de nueva cuenta, a ella le gustaba estar descalza cuando estaba en el pasto, le agradaba sentir aquella sensación -O sea es amable y todo eso...- encogió los hombros, no quería que él pensara cosas que no eran así que más valía aclarar -¿Seguimos caminando? Ya prometo comportarme- le sonrió de nueva cuenta y se colocó los zapatos, esta vez ya no se los quitaría, o al menos eso esperaba.
-Vaya... Eso de "morir en el intento" suena feo, perder no quiere decir que uno deba morir, y menos por estar jugando- negó con la cabeza sin llegar a comprender bien del todo las palabras que le habían dicho, a veces odiaba ser tan ignorante y sabía que de tener dinero y poder, lo primero que haría sería ponerse a estudiar, mínimo para aprender a leer y que supiera muchas cosas.
-Ya veo, ¿Y su hermano es como usted?- preguntó ladeando la cabeza, para luego correr hacia el árbol donde había estado y recoger sus zapatos de nueva cuenta, a ella le gustaba estar descalza cuando estaba en el pasto, le agradaba sentir aquella sensación -O sea es amable y todo eso...- encogió los hombros, no quería que él pensara cosas que no eran así que más valía aclarar -¿Seguimos caminando? Ya prometo comportarme- le sonrió de nueva cuenta y se colocó los zapatos, esta vez ya no se los quitaría, o al menos eso esperaba.
Lanna- Humano Clase Baja
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Fecha de inscripción : 07/01/2013
Re: Entre árboles
Me encogí de hombros - Tienes razón no se como es tu sangre, no sé como sabe, no sé como huele - sonreí - no sé nada sobre eso, así que no diré nada - no quería llevarle la contraria porque eso implicaría quizás revelar más de lo que yo quería en aquellos momentos.
Solté una carcajada cuando saco la lengua, de verdad que ella me agradaba y no le diría nada porque fuera sincera o le gustara hacer aquella clase de cosas, que en lugar de molestarme solo me hacían verla como una mujer mucho más bella de lo que ya la consideraba - Descuida Lanna, conmigo puedes ser así de natural siempre, no me molestare jamás - en esos momentos tome una postura y una expresión más serias para que viera que aquello que decía era verdad.
Negue para que ella no se preocupara o pensara que me burlaba de ella o algo por el estilo. - No, con eso de morir en el intento me refiero a que pues hago cosas que considero divertidas que otros considerarían tontas o arriesgadas pero que en realidad, no lo son - claro, prácticamente nada de lo que ella consideraba peligroso lo era en realidad para mi porque pues yo ya estaba muerto.
- Continuemos - movi ligeramente la mano para que ella se situara a mi lado mientras reía levemente al pensar en como describir a Jarko - pues veras, mi hermano es bastante diferente a mi Lanna, él es algo más serio - no quería decirle que éramos sumamente opuestos porque Jarko algunas veces solía asustar a los demás - es amable cuando las cosas se hacen a su manera, así que si haces los deberes como él lo indica no tendrás problema alguno y con el tiempo veras que te agarra cariño - sonreí - pero que yo te lo cuente no será lo mismo a que tu lo veas - continúe el camino a su lado manteniendo su paso.
Solté una carcajada cuando saco la lengua, de verdad que ella me agradaba y no le diría nada porque fuera sincera o le gustara hacer aquella clase de cosas, que en lugar de molestarme solo me hacían verla como una mujer mucho más bella de lo que ya la consideraba - Descuida Lanna, conmigo puedes ser así de natural siempre, no me molestare jamás - en esos momentos tome una postura y una expresión más serias para que viera que aquello que decía era verdad.
Negue para que ella no se preocupara o pensara que me burlaba de ella o algo por el estilo. - No, con eso de morir en el intento me refiero a que pues hago cosas que considero divertidas que otros considerarían tontas o arriesgadas pero que en realidad, no lo son - claro, prácticamente nada de lo que ella consideraba peligroso lo era en realidad para mi porque pues yo ya estaba muerto.
- Continuemos - movi ligeramente la mano para que ella se situara a mi lado mientras reía levemente al pensar en como describir a Jarko - pues veras, mi hermano es bastante diferente a mi Lanna, él es algo más serio - no quería decirle que éramos sumamente opuestos porque Jarko algunas veces solía asustar a los demás - es amable cuando las cosas se hacen a su manera, así que si haces los deberes como él lo indica no tendrás problema alguno y con el tiempo veras que te agarra cariño - sonreí - pero que yo te lo cuente no será lo mismo a que tu lo veas - continúe el camino a su lado manteniendo su paso.
Ackley Hinault- Cambiante Clase Alta
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Fecha de inscripción : 07/01/2013
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Re: Entre árboles
Escuchaba atentamente a lo que él le estaba diciendo mientras iba caminando a su lado, de algún modo ese señor le había caído bien y suponía que podían llevarse cordialmente aunque ella fuera una simple sirvienta, seguro que sí. Sonrió -Ya le he ganado, aceptó que mi sangre no tiene buen sabor, así que le gané en algo- le enseñó la lengua de nueva cuenta en ese mismo gesto, debía aceptar que cuando estaba "contenta" era fácil hacer aquello, era algo demasiado natural en ella, pero también recordaba que su madre la reprendía por hacerlo, así que respiró profundo -Pero está mal que lo haga, bueno, eso decía mamá...- murmuró únicamente y encogió los hombros esperando que él no preguntara nada más, no quería hablar de su familia o se vendría abajo y no era bueno aquello.
Seguía lentamente, la verdad es que no podía atreverse a hacer nada, no podía, no debía porque sencillamente no sabía hacia donde iba, ahí mismo se alcanzaba a notar la ingenuidad de la chica mientras era la seguidora de alguien que tenía menos de una hora de conocer -Entonces le tendré que obedecer mucho, no es que a usted no le vaya a obedecer, pero es que yo soy algo rara....- se rascó el cuello mientras entrecerraba los ojos, a veces ella hacía enojar a las personas con mucha facilidad aunque no fuera su intención y nunca sabía bien como había comenzado todo -Así que usted disculpará pero haré las cosas como él me diga y no como usted lo haga- dijo con firmeza aunque sabía que iba a obedecer a ambos, era lo más sano para la salud de los tres.
Seguía lentamente, la verdad es que no podía atreverse a hacer nada, no podía, no debía porque sencillamente no sabía hacia donde iba, ahí mismo se alcanzaba a notar la ingenuidad de la chica mientras era la seguidora de alguien que tenía menos de una hora de conocer -Entonces le tendré que obedecer mucho, no es que a usted no le vaya a obedecer, pero es que yo soy algo rara....- se rascó el cuello mientras entrecerraba los ojos, a veces ella hacía enojar a las personas con mucha facilidad aunque no fuera su intención y nunca sabía bien como había comenzado todo -Así que usted disculpará pero haré las cosas como él me diga y no como usted lo haga- dijo con firmeza aunque sabía que iba a obedecer a ambos, era lo más sano para la salud de los tres.
Lanna- Humano Clase Baja
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Fecha de inscripción : 07/01/2013
Re: Entre árboles
- No esta mal que lo hagas, además eso es algo que dices que decía tu madre y yo no soy ella por lo que podrás notar, así que agradecería que te mostraras lo más natural posible conmigo que si me doy cuenta de que finges entonces si me molestare - la mire de nuevo con expresión sería, no quería que ella se comportara toda sería y con cara de amargada como las sirvientas de otros solo por quedar bien; conmigo nadie tenía que quedar bien así que no había problemas.
Escuche atento cada una de las palabras que salieron de los labios de Lanna, sobre que escucharía a Jarko y no a mi. Aquello era absolutamente lógico, pues ser de cierta manera conmigo no le traería represalias.
- Sé que me obedecerás, pero también sé que lo mejor es que sigas las indicaciones como él te las dará. Bueno, pero cuando nos encontremos a solas - me acerque a hasta su oído - entonces si te comportaras como hasta ahora y no toda sería - me aleje y reí - y eso es una orden mi querida Lanna - nuestros pasos continuaron por la oscuridad de aquel bosque hasta que un olor conocido y el sonido de alguien acercando su presencia hasta nosotros llego hasta mi - Parece que te tocara conocer a Jarko antes de lo esperado - la mire con una sonrisa en el rostro y me detuve, esperando que mi querido hermano hiciera una aparición por cualquiera de los lados - creo que le he oído gritarme ligeramente - aquello era una total mentira, pero no deseaba que fuera sorprendida por la aparición de Jarko de la nada, así que era mejor decir una tontera como esa.
Escuche atento cada una de las palabras que salieron de los labios de Lanna, sobre que escucharía a Jarko y no a mi. Aquello era absolutamente lógico, pues ser de cierta manera conmigo no le traería represalias.
- Sé que me obedecerás, pero también sé que lo mejor es que sigas las indicaciones como él te las dará. Bueno, pero cuando nos encontremos a solas - me acerque a hasta su oído - entonces si te comportaras como hasta ahora y no toda sería - me aleje y reí - y eso es una orden mi querida Lanna - nuestros pasos continuaron por la oscuridad de aquel bosque hasta que un olor conocido y el sonido de alguien acercando su presencia hasta nosotros llego hasta mi - Parece que te tocara conocer a Jarko antes de lo esperado - la mire con una sonrisa en el rostro y me detuve, esperando que mi querido hermano hiciera una aparición por cualquiera de los lados - creo que le he oído gritarme ligeramente - aquello era una total mentira, pero no deseaba que fuera sorprendida por la aparición de Jarko de la nada, así que era mejor decir una tontera como esa.
Ackley Hinault- Cambiante Clase Alta
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Re: Entre árboles
Los años junto a mi hermano han sido demasiados para conocerlo bien, para saber sus formas naturales de ausencia, sus disimulos, sus excesos... todo. De la misma manera me conoce él a mí.
Hace casi un mes que salí de Francia y volví a Finlandia por un objeto olvidado y que necesitaba ahora conmigo, jamás avisé a Akseli porque no pensé tardar tanto y supe que al observar de una mirada mi habitación sabría que había emprendido un viaje y que regresaría en breve. Esta vez me tomé más tiempo del que parecía en principio y al volver regresé a casa de inmediato para comentar a mi hermano algo que había encontrado en aquél lugar por el que vivimos durante años, sin embargo no le encontré esa noche.
Dejé todo sobre mi cama y tras cambiar mi atuendo salí a encontrarle. Nunca hacía este tipo de cosas pero esta vez era diferente, lo que tenía que decirle era de mucha importancia y podría ocasionar el regreso de ambos a Finlandia por un tiempo. Salí sin prisa alguna porque sabía que le encontraría pronto y seguí su tan familiar efluvio que iba en dirección al bosque. Caminé con calma y con las manos en los bolsillos de forma despreocupada y entonces fue cuando noté la diferencia en al aroma. Mi hermano seguía avanzando, pude escucharle hablar con alguien a quien el corazón le latía veloz y era de voz delicada. Me reí para mis adentros al saber que de nuevo estaba con una mujer. La diferencia aquí es que ella claramente humana, parecía tener la sangre aún dentro de sus venas y por la manera de escuchar la voz de Akseli me dio la impresión que por lo menos aún no quería matarla.
Seguí su aroma por un rato y al calcular su rumbo, yo cambie el mío para encontrarlos frente a frente. Sin entender la situación, avancé en ese sentido lentamente para que él tuviera el tiempo suficiente de saber que era yo quien se acercaba e hiciera lo que a bien le pareciera con la humana justo antes de vernos a los ojos. Sin embargo nada cambió, sentí el nerviosismo de aquella mujer y sentí sed por ese corazón en cierto modo llameante pero inaccesible por encontrarse ya primero mi hermano. Acorté por fin la distancia y entonces no sólo mis oídos los sentían sino que mis ojos eran testigos de la presencia de mi hermano y la humana junto a él, como si nada pero tan cerca. Di pasos tranquilos y cuando los tuve a ambos a una distancia conveniente para saludar, lo hice.
-Veo que el bosque de noche no sólo te agrada a ti sino a tu acompañante esta noche, no es verdad, hermano mío?- No mencioné su nombre porque no me pareció prudente, aunque tal vez ella ya lo supiera. -Espero no interrumpir su velada nocturna en la lejanía con mi presencia- La verdad es que eso no me importaba, pero cada una de mis frases, siempre mantenía significados ocultos.
Hace casi un mes que salí de Francia y volví a Finlandia por un objeto olvidado y que necesitaba ahora conmigo, jamás avisé a Akseli porque no pensé tardar tanto y supe que al observar de una mirada mi habitación sabría que había emprendido un viaje y que regresaría en breve. Esta vez me tomé más tiempo del que parecía en principio y al volver regresé a casa de inmediato para comentar a mi hermano algo que había encontrado en aquél lugar por el que vivimos durante años, sin embargo no le encontré esa noche.
Dejé todo sobre mi cama y tras cambiar mi atuendo salí a encontrarle. Nunca hacía este tipo de cosas pero esta vez era diferente, lo que tenía que decirle era de mucha importancia y podría ocasionar el regreso de ambos a Finlandia por un tiempo. Salí sin prisa alguna porque sabía que le encontraría pronto y seguí su tan familiar efluvio que iba en dirección al bosque. Caminé con calma y con las manos en los bolsillos de forma despreocupada y entonces fue cuando noté la diferencia en al aroma. Mi hermano seguía avanzando, pude escucharle hablar con alguien a quien el corazón le latía veloz y era de voz delicada. Me reí para mis adentros al saber que de nuevo estaba con una mujer. La diferencia aquí es que ella claramente humana, parecía tener la sangre aún dentro de sus venas y por la manera de escuchar la voz de Akseli me dio la impresión que por lo menos aún no quería matarla.
Seguí su aroma por un rato y al calcular su rumbo, yo cambie el mío para encontrarlos frente a frente. Sin entender la situación, avancé en ese sentido lentamente para que él tuviera el tiempo suficiente de saber que era yo quien se acercaba e hiciera lo que a bien le pareciera con la humana justo antes de vernos a los ojos. Sin embargo nada cambió, sentí el nerviosismo de aquella mujer y sentí sed por ese corazón en cierto modo llameante pero inaccesible por encontrarse ya primero mi hermano. Acorté por fin la distancia y entonces no sólo mis oídos los sentían sino que mis ojos eran testigos de la presencia de mi hermano y la humana junto a él, como si nada pero tan cerca. Di pasos tranquilos y cuando los tuve a ambos a una distancia conveniente para saludar, lo hice.
-Veo que el bosque de noche no sólo te agrada a ti sino a tu acompañante esta noche, no es verdad, hermano mío?- No mencioné su nombre porque no me pareció prudente, aunque tal vez ella ya lo supiera. -Espero no interrumpir su velada nocturna en la lejanía con mi presencia- La verdad es que eso no me importaba, pero cada una de mis frases, siempre mantenía significados ocultos.
Jarko Nygard- Vampiro Clase Alta
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Re: Entre árboles
Escuchó perfectamente a Akseli y se quedó quieta cuando se acercó a su oído, se comportaba de manera diferente a todos los señores que había tenido antes, se acercaba más, se veía mucho más sociable, pero quizá eso la metería en problemas porque era muy sencillo seguirle la corriente y si su hermano era como decía quizá no estuviera bien así que negó con la cabeza -Ya, que si me regañan diré que todo es tu culpa- le volvió a enseñar la lengua de manera divertida mientras seguía sus pasos, no se notaba muy oscuro, tampoco hacía mucho frío, parecía que comenzaban a salir un poco de la profundidad del bosque.
Sus palabras hicieron que se tensara, sabía que iba a conocer a su hermano, pero no tan pronto, la seriedad le vino al semblante casi de inmediato mientras su corazón comenzaba a latir con demasiada fuerza, era algo inevitable mientras miraba a todos lados, esperaba que ninguno de los dos lograra captar que estaba completamente nerviosa, respiró profundo -¿Te gritó?- preguntó porque ella no había oído absolutamente nada, pero bueno, quizá era porque estaba completamente nerviosa así que podía ser que se le hubieran bloqueado los ruidos ambientales o algo por el estilo ¿Cómo debía comportarse? Aún no lo sabía, pero suponía que pronto.
Por más que aguzó el oído no podía realmente llegar a captar nada hasta que lo tuvo de frente, ella se quedó paralizada, era alto, blanco, con cabellos largos, era imponente, se notaba serio ¿Enojado? quizá así que ella puso las manos a su espalda para poder tronar sus dedos mientras terminaba de oírle -No interrumpe nada, se... Señor- dijo mientras hacía una reverencia con la cabeza dejando la mirada en el piso, toda la diversión de antes se le había esfumado, sentía las orejas rojas por la presión que estaba ejerciendo mientras intentaba que su maldito corazón dejara de latir... Al menos tan ruidosamente. Levantó la mirada y observó a Akseli como si quisiera encontrar alguna respuesta en su semblante, quizá para saber como comportarse.
Sus palabras hicieron que se tensara, sabía que iba a conocer a su hermano, pero no tan pronto, la seriedad le vino al semblante casi de inmediato mientras su corazón comenzaba a latir con demasiada fuerza, era algo inevitable mientras miraba a todos lados, esperaba que ninguno de los dos lograra captar que estaba completamente nerviosa, respiró profundo -¿Te gritó?- preguntó porque ella no había oído absolutamente nada, pero bueno, quizá era porque estaba completamente nerviosa así que podía ser que se le hubieran bloqueado los ruidos ambientales o algo por el estilo ¿Cómo debía comportarse? Aún no lo sabía, pero suponía que pronto.
Por más que aguzó el oído no podía realmente llegar a captar nada hasta que lo tuvo de frente, ella se quedó paralizada, era alto, blanco, con cabellos largos, era imponente, se notaba serio ¿Enojado? quizá así que ella puso las manos a su espalda para poder tronar sus dedos mientras terminaba de oírle -No interrumpe nada, se... Señor- dijo mientras hacía una reverencia con la cabeza dejando la mirada en el piso, toda la diversión de antes se le había esfumado, sentía las orejas rojas por la presión que estaba ejerciendo mientras intentaba que su maldito corazón dejara de latir... Al menos tan ruidosamente. Levantó la mirada y observó a Akseli como si quisiera encontrar alguna respuesta en su semblante, quizá para saber como comportarse.
Lanna- Humano Clase Baja
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Fecha de inscripción : 07/01/2013
Re: Entre árboles
Sonreí de manera tranquila mirando a Lanna, su corazón comenzó a correr desbocado si bien termine de mencionarle que la presencia de Jarko estaba cerca de nosotros. Nerviosismo por conocer al nuevo dueño, no era más que eso. Tome su mano entre las mías para darle segurar y que su agitado corazón se callara un poco, porque si no lo hacía aquel sonido melodioso terminaría llamando demasiado a alguno de nosotros que terminaría con su vida en un parpadeo de ella.
- Sí Lanna, me grito pero fue algo bastante leve, apenas alcance a escucharle - mentía de nuevo para no generar más nerviosismo - tranquila Lanna, mi hermano estará gustoso de conocerte y saber que trabajaras para nosotros - le asegure soltando cuidadosamente su mano para volver mi mirada a donde sabía aparecería la figura de mi hermano mayor.
La presencia de Jarko no se hizo esperar y le sonreí de aquella forma tan infantil y boba que había perdurado en mi a través de los años.
- Conoces a la perfección mis gustos hermano, sabes que el bosque suele traerme recuerdos… agradables y sí, a mi compañera también le agradan estos lugares, si no, ¿Cómo crees que fue que nos conocimos? - mire a Lanna que permanecía sería y firme en su sitio, pero incluso de esa manera fue capaz de responder a Jarko y mirarme. Su mirada parecía preguntarme que era lo que debía hacer en aquellos momentos pero antes de eso mire a mi hermano y di unos pasos hacia él acortando la distancia- Como ya lo ha dicho esta bella señorita, no nos interrumpes además, es un placer tenerte de regreso en casa gran idiota - para quien escuchara la forma tan peculiar en la que nos tratábamos podría ser creer que los hermanos Nygard nos odiábamos, pero la verdad es que aquella peculiar forma era en la que mostrábamos preocupación por el otro, así como el afecto que entre familiares y compañeros de inmortalidad teníamos.
- Lanna - dije de manera rápida estirando mi mano hacía ella para de manera suave jalarla un poco hacia mi - este es mi hermano Jarko - la miraba y hablaba con calma - y hermano, esta dama presente entre nosotros es Lanna; la mujer que se encargada del cuidado de nuestro hogar ya que nosotros somos tan inútiles en ese aspecto - quería dejarle en claro que Lanna no era mi cena, si no que sería parte de nuestro servicio y que por tal motivo no estaba a disposición de calmar nuestra sed de sangre, cosa que deberíamos buscar por otros lados - Bien, las presentaciones por mi parte ya están hechas - sonreí a ambos y le pase la mano a Lanna por los hombros de manera casual mientras miraba a Jarko, esperando ver que era lo que estaba pensando de todo aquello.
- Sí Lanna, me grito pero fue algo bastante leve, apenas alcance a escucharle - mentía de nuevo para no generar más nerviosismo - tranquila Lanna, mi hermano estará gustoso de conocerte y saber que trabajaras para nosotros - le asegure soltando cuidadosamente su mano para volver mi mirada a donde sabía aparecería la figura de mi hermano mayor.
La presencia de Jarko no se hizo esperar y le sonreí de aquella forma tan infantil y boba que había perdurado en mi a través de los años.
- Conoces a la perfección mis gustos hermano, sabes que el bosque suele traerme recuerdos… agradables y sí, a mi compañera también le agradan estos lugares, si no, ¿Cómo crees que fue que nos conocimos? - mire a Lanna que permanecía sería y firme en su sitio, pero incluso de esa manera fue capaz de responder a Jarko y mirarme. Su mirada parecía preguntarme que era lo que debía hacer en aquellos momentos pero antes de eso mire a mi hermano y di unos pasos hacia él acortando la distancia- Como ya lo ha dicho esta bella señorita, no nos interrumpes además, es un placer tenerte de regreso en casa gran idiota - para quien escuchara la forma tan peculiar en la que nos tratábamos podría ser creer que los hermanos Nygard nos odiábamos, pero la verdad es que aquella peculiar forma era en la que mostrábamos preocupación por el otro, así como el afecto que entre familiares y compañeros de inmortalidad teníamos.
- Lanna - dije de manera rápida estirando mi mano hacía ella para de manera suave jalarla un poco hacia mi - este es mi hermano Jarko - la miraba y hablaba con calma - y hermano, esta dama presente entre nosotros es Lanna; la mujer que se encargada del cuidado de nuestro hogar ya que nosotros somos tan inútiles en ese aspecto - quería dejarle en claro que Lanna no era mi cena, si no que sería parte de nuestro servicio y que por tal motivo no estaba a disposición de calmar nuestra sed de sangre, cosa que deberíamos buscar por otros lados - Bien, las presentaciones por mi parte ya están hechas - sonreí a ambos y le pase la mano a Lanna por los hombros de manera casual mientras miraba a Jarko, esperando ver que era lo que estaba pensando de todo aquello.
Ackley Hinault- Cambiante Clase Alta
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Re: Entre árboles
A veces puedo pensar con facilidad que el corazón de los humanos suena delicioso. Creo que ese golpeteo intenso dentro de un pecho femenino es una tentación a la que siempre quiero ceder. Lástima las condiciones, porque de haberla encontrado sola otro rumbo habría tomado la situación.
Avancé apenas un paso más cerca de ellos, dando una mirada no poco disimulada a la humana junto a mi hermano y luego lo miré a él.
-Eso supuse. Aunque es raro ver una jovensita como ella metida en medio del bosque a estas horas.- Regresé de nuevo la mirada a la nerviosa chica. Un poco más y creería que sus dientes castañeaban, pero podía ser el frío más que el temor, pero, ¿Temor de qué? si conocía a Akseli, dudo que temiera por mí, a menos, claro, que él le hubiera dicho o inventado alguna historia, cosa que no me sorprendería, pues bien sabía yo de la picardia característica en mi hermano. De nuevo, miré a mi hermano -Era momento de volver, pero veo que haz ocupado tu tiempo bastante bien. Y eso también es raro.- Dije con cierto humor seco.
Ciertamente los planes para la chica ya habían sido trazados. La presentación no se hizo esperar y asentí como saludo a ella luego que Akseli me exteriorizó sus planes para ella.
-Así que Lanna. Pero... ¿Acaso no es muy joven para dedicarse a la ardua labor que tenemos en casa? No sé si realmente lo resista. Ya sabes como nos va con los jovenes.- Fue afirmación y prueba para ambos. Ya sabía yo que su presencia en casa nos iba a ser útil de cualquier manera, pero llegué tarde a la conversación como para saber que tanto sabía ella de nosotros y que tan complicada era la vida de la chica. ¿Qué tendría Akseli en la cabeza? desee que dejara sus pensamientos libres para mí por si se escapaba algo en la corta charla. Pero, podía ser apenas un capricho de él y yo le daba mucha importancia sólo por el hecho de querer saciarme con la mujer a su lado. No representaba algo difícil de controlar, los años hacen lo suyo y el autocontrol en nosotros se perfecciona; el asunto era tal vez una cuestión de deseos diferentes como nos solía pasar por lo general a ambos.
Mantuve mi distancia de forma prudente para no ponerla más nerviosa y evitar así que el corazón le siguiera bombeando desbocado como un grito en medio de la nada. Usé un tono tranquilo a pesar de la ausencia de sonrisas que no me provocaba la escena y finalmente me crucé de brazos y los observe en busca de lo que yo creía que no expresaban las palabras.
Avancé apenas un paso más cerca de ellos, dando una mirada no poco disimulada a la humana junto a mi hermano y luego lo miré a él.
-Eso supuse. Aunque es raro ver una jovensita como ella metida en medio del bosque a estas horas.- Regresé de nuevo la mirada a la nerviosa chica. Un poco más y creería que sus dientes castañeaban, pero podía ser el frío más que el temor, pero, ¿Temor de qué? si conocía a Akseli, dudo que temiera por mí, a menos, claro, que él le hubiera dicho o inventado alguna historia, cosa que no me sorprendería, pues bien sabía yo de la picardia característica en mi hermano. De nuevo, miré a mi hermano -Era momento de volver, pero veo que haz ocupado tu tiempo bastante bien. Y eso también es raro.- Dije con cierto humor seco.
Ciertamente los planes para la chica ya habían sido trazados. La presentación no se hizo esperar y asentí como saludo a ella luego que Akseli me exteriorizó sus planes para ella.
-Así que Lanna. Pero... ¿Acaso no es muy joven para dedicarse a la ardua labor que tenemos en casa? No sé si realmente lo resista. Ya sabes como nos va con los jovenes.- Fue afirmación y prueba para ambos. Ya sabía yo que su presencia en casa nos iba a ser útil de cualquier manera, pero llegué tarde a la conversación como para saber que tanto sabía ella de nosotros y que tan complicada era la vida de la chica. ¿Qué tendría Akseli en la cabeza? desee que dejara sus pensamientos libres para mí por si se escapaba algo en la corta charla. Pero, podía ser apenas un capricho de él y yo le daba mucha importancia sólo por el hecho de querer saciarme con la mujer a su lado. No representaba algo difícil de controlar, los años hacen lo suyo y el autocontrol en nosotros se perfecciona; el asunto era tal vez una cuestión de deseos diferentes como nos solía pasar por lo general a ambos.
Mantuve mi distancia de forma prudente para no ponerla más nerviosa y evitar así que el corazón le siguiera bombeando desbocado como un grito en medio de la nada. Usé un tono tranquilo a pesar de la ausencia de sonrisas que no me provocaba la escena y finalmente me crucé de brazos y los observe en busca de lo que yo creía que no expresaban las palabras.
Jarko Nygard- Vampiro Clase Alta
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Re: Entre árboles
Ambos la ponían nerviosa, demasiado a decir verdad, era como si no pudiera evitarlo, no sabía porque con Akseli todo era un poco más tranquilo pero el otro hombre, Jarko, en verdad que la ponía con los nervios de punta, se veía tan serio, tan... ¿Enfadado? No sabría exactamente como decirlo, pero no le daba la confianza de comportarse como hacía unos segundos, seguro que la tensión de su cuerpo era evidente mientras los escuchaba conversar a veces podía pensar que ellos se habían olvidado que estaba ahí de no ser porque la volteaban a ver de vez en cuando y eso la hacía tranquilizar y a la vez volverse a tensionar de manera casi automática, era como si quisiera que la tierra se la tragara porque era lo mejor que le podía pasar en aquellos momentos.
-Mucho gusto, señor, estoy para servirle- dijo haciendo una leve reverencia mientras bajaba la mirada al piso para volver a los ojos de Jarko -No, señor...- replicó antes de que Akseli lo hiciera y después, casi de inmediato se mordió la lengua -Yo... Bueno... He trabajado en casas, tienen niños, son muy traviesos, siempre dejan todo tirado, creo que podría servirles...- dijo lo último en un susurro un poco audible, la verdad es que necesitaba ese trabajo y tenía que conseguirlo a como diera lugar o terminaría muerta de hambre en cualquier momento -Si... Ustedes gustan, puedo estar como prueba, pero sé cocinar, lavar, puedo cargar, no importa si es pesado, además no tengo amigos, ni hijos... Ni familia en general...- mencionó alternando la mirada entre Jarko y Akseli, pero ambas iban cargadas de sentimientos diferentes, para el primero era una súplica de una oportunidad y para el segundo una petición de ayuda para convencer a su hermano.
-Señor de verdad...- se acercó un paso a Jarko en un impulso pero así de rápido se alejó -Soy joven, pero soy responsable, no tendrán quejas de mí, necesito el trabajo- bajó la mirada de nueva cuenta y se acercó a Akseli -De verdad Akseli, no soy mala, no tengo nadie que me busque, ni que me quite tiempo...- murmuró mientras lo miraba de nueva cuenta y tomó su mano en un afán de aferrarse a que tendría una oportunidad de salir de las calles de nueva cuenta mientras que su corazón seguía latiendo dentro de su pecho pero con mayor calma que al principio, sin embargo todavía un poco agitado por querer quedarse en aquella casa, aunque no los conocía, eso era mejor que tener nada.
PD. Lamento la demora, el cerebro había sido absorbido por extraterrestres T_T-Mucho gusto, señor, estoy para servirle- dijo haciendo una leve reverencia mientras bajaba la mirada al piso para volver a los ojos de Jarko -No, señor...- replicó antes de que Akseli lo hiciera y después, casi de inmediato se mordió la lengua -Yo... Bueno... He trabajado en casas, tienen niños, son muy traviesos, siempre dejan todo tirado, creo que podría servirles...- dijo lo último en un susurro un poco audible, la verdad es que necesitaba ese trabajo y tenía que conseguirlo a como diera lugar o terminaría muerta de hambre en cualquier momento -Si... Ustedes gustan, puedo estar como prueba, pero sé cocinar, lavar, puedo cargar, no importa si es pesado, además no tengo amigos, ni hijos... Ni familia en general...- mencionó alternando la mirada entre Jarko y Akseli, pero ambas iban cargadas de sentimientos diferentes, para el primero era una súplica de una oportunidad y para el segundo una petición de ayuda para convencer a su hermano.
-Señor de verdad...- se acercó un paso a Jarko en un impulso pero así de rápido se alejó -Soy joven, pero soy responsable, no tendrán quejas de mí, necesito el trabajo- bajó la mirada de nueva cuenta y se acercó a Akseli -De verdad Akseli, no soy mala, no tengo nadie que me busque, ni que me quite tiempo...- murmuró mientras lo miraba de nueva cuenta y tomó su mano en un afán de aferrarse a que tendría una oportunidad de salir de las calles de nueva cuenta mientras que su corazón seguía latiendo dentro de su pecho pero con mayor calma que al principio, sin embargo todavía un poco agitado por querer quedarse en aquella casa, aunque no los conocía, eso era mejor que tener nada.
Lanna- Humano Clase Baja
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Re: Entre árboles
El nerviosismo de Lanna no cesaba, la pobre mujer se tranquilizaba y tensionaba con una velocidad impresionante para los sentidos humanos, pero bueno esa era la situación cuando se estaba a solas en un bosque oscuro con dos hombres, que si bien a mi me conocía un poco más a mi hermano solo le conocía el nombre y ahora de vista. Siendo sinceros tampoco sabía el peligro en el que se estaba metiendo con dos vampiros.
La mirada de Jarko y sus expresiones hicieron que riera, era tan obvio para mi que mi hermano deseaba clavarle los colmillos a la bella humana y succionar aquel liquido color carmesí que corría por sus venas, igual yo en un principio había tenido el mismo impulso pero desistí a tiempo y al parecer Jarko también lo hacía.
- Pero que dices inútil si ella esta aquí es porque sabe lo que hace en estos lugares además esta conmigo y sabes bien que a mi lado no debe de temer - sonreí de manera casi inocente, pues Jarko ya debía de sospechar que si no le había hecho nada en el tiempo que llevábamos en aquel lugar era poco factible que ahora le hiciera algo a la humana. Hice una mueca mientras rodaba los ojos, típico de Jarko pensar que porque estuviera algo lejos no haría nada con mi inmortal existencia.
- Sospeche que dirías algo así pero ya ves, no soy tan desatendido de los deberes que tenemos como para que me consideres tan inservible. ¿O qué?, ¿No te agrada que consiguiera ayuda? - mire a Lanna y le sonreí, para que no se sintiera excluida de la conversación aunque igual parecía que lo estaba.
Cuando finalmente se decidió a hablar con Jarko, me quede observando para ver que era lo que finalmente harían ambos pero claro antes que eso debía refutar la creencia de que Lanna era demasiado joven.
- Bueno hermano la edad no tiene nada que ver en la eficiencia del trabajo - después de eso me quede en completo silencio y cruce los brazos.
Por mi parte la decisión de contratar a Lanna estaba hecha, solo faltaba ver que pensaba mi hermano, pero para mi no eran necesarias pruebas ni nada más, solo saber que estaría ahí para ayudar en lo que necesitáramos en casa lo cual era justo lo que esperaba de ella.
Sus palabras fueron sinceras y tomando su mano la apreté un poco.
-Te creo Lanna y de mi parte el trabajo es tuyo y lo sabes así que no te apures - con un leve jalón hice que se acercara - él también aceptara así que no te pongas nerviosa - susurre en su oído y le solté la mano sonriendo.
La mirada de Jarko y sus expresiones hicieron que riera, era tan obvio para mi que mi hermano deseaba clavarle los colmillos a la bella humana y succionar aquel liquido color carmesí que corría por sus venas, igual yo en un principio había tenido el mismo impulso pero desistí a tiempo y al parecer Jarko también lo hacía.
- Pero que dices inútil si ella esta aquí es porque sabe lo que hace en estos lugares además esta conmigo y sabes bien que a mi lado no debe de temer - sonreí de manera casi inocente, pues Jarko ya debía de sospechar que si no le había hecho nada en el tiempo que llevábamos en aquel lugar era poco factible que ahora le hiciera algo a la humana. Hice una mueca mientras rodaba los ojos, típico de Jarko pensar que porque estuviera algo lejos no haría nada con mi inmortal existencia.
- Sospeche que dirías algo así pero ya ves, no soy tan desatendido de los deberes que tenemos como para que me consideres tan inservible. ¿O qué?, ¿No te agrada que consiguiera ayuda? - mire a Lanna y le sonreí, para que no se sintiera excluida de la conversación aunque igual parecía que lo estaba.
Cuando finalmente se decidió a hablar con Jarko, me quede observando para ver que era lo que finalmente harían ambos pero claro antes que eso debía refutar la creencia de que Lanna era demasiado joven.
- Bueno hermano la edad no tiene nada que ver en la eficiencia del trabajo - después de eso me quede en completo silencio y cruce los brazos.
Por mi parte la decisión de contratar a Lanna estaba hecha, solo faltaba ver que pensaba mi hermano, pero para mi no eran necesarias pruebas ni nada más, solo saber que estaría ahí para ayudar en lo que necesitáramos en casa lo cual era justo lo que esperaba de ella.
Sus palabras fueron sinceras y tomando su mano la apreté un poco.
-Te creo Lanna y de mi parte el trabajo es tuyo y lo sabes así que no te apures - con un leve jalón hice que se acercara - él también aceptara así que no te pongas nerviosa - susurre en su oído y le solté la mano sonriendo.
Ackley Hinault- Cambiante Clase Alta
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Re: Entre árboles
La situación empezaba a tornarse confusa para mí. No entendía del todo como es que mi hermano la quería para nuestro servicio y al tiempo se mostraba tan complaciente con ella, o más bien, parecían amigos íntimos. Seguramente mis gestos hablarían por mí y la ausencia absoluta de una sonrisa que no me provocaba era, a la vez, la antitesis de la reacción de mi hermano.
-Gracias por la aclaración, héroe.- Dije con mi característico sarcasmo que a pesar de frío, jamás fue malintensionado para con mi hermano, pero bueno, eso era algo que él ya sabía bien. -No necesito ayuda, en todo caso si quieres te llevo al veterinario.- Contuve una risa al respecto porque siempre desviaba todo. Es posible que mi humor sea bastante negro, pero entre el gracioso de mi hermano y yo, eso ha logrado que nos soportemos por más de 5000 años. Pero claro, era buena idea la de contar con alguien en casa para hacer lo básico, para que las telarañas y todos los insectos posibles no llenaran hasta nuestros feretros a causa de nuestro descuido o tranquilidad, el nombre que se le de no importa.
La actitud de la joven en todo tiempo llamó mi atención, parecía que realmente quería ocuparse y hasta llegué a pensar que moriría de hambre si no conseguía un empleo, hasta donde le entendí estaba completamente sola y sus palabras fueron a mis oídos más bien como una súplica a la que apenas asentí en principio mientras la escuchaba.
-Es cierto, tal vez la edad sea lo de menos, además, ella se ve bastante sana, o al menos a primera vista lo es.- Respondí a Akseli sin quitarle los ojos de encima a Lanna, incluso cuando mencioné su salud, casi que de forma instintiva mis ojos se dirigieron a su cuello para notar sus venas a través de su blanca piel. Se me antojó por un momento pero al notar aquella cercanía con mi hermano, fruncí el ceño y di mi respuesta sobre su servicio.
- Bueno, señorita. Empiece entonces cuando quiera, pues no tengo problema, sólo un par de detalles que hablaremos luego.- Dicho esto dí media vuelta pero luego me giré y miré a Akseli de nuevo. -¿De dónde dices que encontraste a la chica?- En realidad quería preguntar que si parecían tan amigos como es que la quería para el servicio, pero una cosa es ser frío y otra un tarado imprudente. Aún así, supuse que mi hermano deduciría algo por la manera en que ya me conocía.
-Gracias por la aclaración, héroe.- Dije con mi característico sarcasmo que a pesar de frío, jamás fue malintensionado para con mi hermano, pero bueno, eso era algo que él ya sabía bien. -No necesito ayuda, en todo caso si quieres te llevo al veterinario.- Contuve una risa al respecto porque siempre desviaba todo. Es posible que mi humor sea bastante negro, pero entre el gracioso de mi hermano y yo, eso ha logrado que nos soportemos por más de 5000 años. Pero claro, era buena idea la de contar con alguien en casa para hacer lo básico, para que las telarañas y todos los insectos posibles no llenaran hasta nuestros feretros a causa de nuestro descuido o tranquilidad, el nombre que se le de no importa.
La actitud de la joven en todo tiempo llamó mi atención, parecía que realmente quería ocuparse y hasta llegué a pensar que moriría de hambre si no conseguía un empleo, hasta donde le entendí estaba completamente sola y sus palabras fueron a mis oídos más bien como una súplica a la que apenas asentí en principio mientras la escuchaba.
-Es cierto, tal vez la edad sea lo de menos, además, ella se ve bastante sana, o al menos a primera vista lo es.- Respondí a Akseli sin quitarle los ojos de encima a Lanna, incluso cuando mencioné su salud, casi que de forma instintiva mis ojos se dirigieron a su cuello para notar sus venas a través de su blanca piel. Se me antojó por un momento pero al notar aquella cercanía con mi hermano, fruncí el ceño y di mi respuesta sobre su servicio.
- Bueno, señorita. Empiece entonces cuando quiera, pues no tengo problema, sólo un par de detalles que hablaremos luego.- Dicho esto dí media vuelta pero luego me giré y miré a Akseli de nuevo. -¿De dónde dices que encontraste a la chica?- En realidad quería preguntar que si parecían tan amigos como es que la quería para el servicio, pero una cosa es ser frío y otra un tarado imprudente. Aún así, supuse que mi hermano deduciría algo por la manera en que ya me conocía.
Jarko Nygard- Vampiro Clase Alta
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Re: Entre árboles
¿Miedo? Sí, lo tenía y bastante, no podía negarlo, a pesar de que ambos eran nuevos conocidos, Jarko le daba cierta desconfianza, no sabía por qué, parecía amable, quizá sólo era la seriedad que tenía en la mirada y sus palabras envueltas de misterio, cuando menos para ella, pues Akseli parecía que lo entendía a la perfección, por algo eran hermanos y eso se notaba, sus rasgos eran parecidos, sin embargo en forma de ser no podían ser más diferentes. Respiró profundo mientras se sentía en una clase de examen que temía no iba a poder pasar.
Se llevó la mano al cuello al sentir la mirada del hombre -Estoy sana, no he enfermado en mucho tiempo... Me cuido y a pesar de andar en las calles en ocasiones siempre busco como ganarme la comida de la mejor manera posible- replicó mientras bajaba la mirada, se sentía intimidada y no quería que de nuevo el corazón se le saliera de control como si quisiera cobrar vida propia y dejarla a ella sin una.
Sintió el jalón y asintió a las palabras de Akseli mientras le sonreía con brillante agradecimiento -Gracias- murmuró y besó su mejilla de forma dulce para después ver al otro señor que se encontraba ahí -Cuando usted quiera, señor- hizo una ligera reverencia ante él y se quedó así por un segundo para después devolver la mirada a él -Puede llamarle por mi nombre si le parece más cómodo, señor- parecía que tenía demasiado miedo de hablar, pero es que no podía ocultarlo -Y en serio le estoy completamente agradecida- le sonrió levemente mientras que daba un paso atrás, no quería cometer la tontería de besarle la mejilla al igual que con Akseli, apenas con un par de segundos de conocerlo, se había dado cuenta de las cosas y las aceptaba aunque eso no quitaba que en su interior se dijera que se tomaría el tiempo para conocerlo un poco más y ver porque de su seriedad.
Escuchó las palabras que dirigió a Akseli y frunció los labios parecía que ella había sido sacada de algún sitio donde venden mascotas o algo por el estilo.
Se llevó la mano al cuello al sentir la mirada del hombre -Estoy sana, no he enfermado en mucho tiempo... Me cuido y a pesar de andar en las calles en ocasiones siempre busco como ganarme la comida de la mejor manera posible- replicó mientras bajaba la mirada, se sentía intimidada y no quería que de nuevo el corazón se le saliera de control como si quisiera cobrar vida propia y dejarla a ella sin una.
Sintió el jalón y asintió a las palabras de Akseli mientras le sonreía con brillante agradecimiento -Gracias- murmuró y besó su mejilla de forma dulce para después ver al otro señor que se encontraba ahí -Cuando usted quiera, señor- hizo una ligera reverencia ante él y se quedó así por un segundo para después devolver la mirada a él -Puede llamarle por mi nombre si le parece más cómodo, señor- parecía que tenía demasiado miedo de hablar, pero es que no podía ocultarlo -Y en serio le estoy completamente agradecida- le sonrió levemente mientras que daba un paso atrás, no quería cometer la tontería de besarle la mejilla al igual que con Akseli, apenas con un par de segundos de conocerlo, se había dado cuenta de las cosas y las aceptaba aunque eso no quitaba que en su interior se dijera que se tomaría el tiempo para conocerlo un poco más y ver porque de su seriedad.
Escuchó las palabras que dirigió a Akseli y frunció los labios parecía que ella había sido sacada de algún sitio donde venden mascotas o algo por el estilo.
Lanna- Humano Clase Baja
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Re: Entre árboles
Mire el movimiento de Lanna e instintivamente observe de reojo a mi hermano. Eso que se suponía que él era el serio y el que mejor se comportaba de ambos pero ahora observando a Lanna de esa manera no lucía más que un vampiro tarado y hambriento, uno de esos inútiles recién creados que andaban detrás de todo lo vivo en busca de alimento. Sabía que mi mirada y en cierta manera la sonrisa burlona que se dibujo en mis labios le darían a conocer lo que corría por mi mente; pero también conocía parte de la reacción que tomaría ante aquella burla mía, que aunque era en silencio Jarko notaria a la perfección.
Entonces me volví a Lanna - Luces sana Lanna, es solo que este inútil no sabe diferenciar nada. Así que no debes darnos explicaciones todo esta claro para nosotros ¿verdad Jarko? - quería que aquel descarado hermano admitiera sus errores a menos que deseara que nos quedáramos sin ayudanta.
El acto de ella me tomo por completa sorpresa. Los humanos son algo bastante interesante; muchas veces perfectamente legibles y otras completamente inesperadas. - De nada Lanna - le sonreí, pero su temor parecía haber regresado por lo que me di la labor de intervenir levemente - Te necesitamos desde ahora como ya te lo había comentado, así que de una nos iremos a casa y ya que Jarko a aceptado no creo que vea inconvenientes en eso - observe a mi hermano entonces que después de haber aceptado todo parecía querer irse sin nosotros, solo que antes se dirigió a mi.
La expresión de Lanna dio perfecta respuesta a las tonterías que mencionaba Jarko, aquel hermano mío era tan desesperante… pero no podía imaginar la eternidad con algún tarado más conveniente que él. - Nos encontramos de hecho, al parecer Lanna me esperaba y yo, la buscaba ya sabes; esa clase de cosas extrañas que pasan en algunas ocasiones en la vida - no quería tener que darle explicaciones en esos momentos, después ya podría preguntarme cuanto quisiera.
Comencé a caminar, siguiendo el camino de antes para buscar llegar hasta la casa. - Vamos Lanna, es hora de irnos a casa.
Entonces me volví a Lanna - Luces sana Lanna, es solo que este inútil no sabe diferenciar nada. Así que no debes darnos explicaciones todo esta claro para nosotros ¿verdad Jarko? - quería que aquel descarado hermano admitiera sus errores a menos que deseara que nos quedáramos sin ayudanta.
El acto de ella me tomo por completa sorpresa. Los humanos son algo bastante interesante; muchas veces perfectamente legibles y otras completamente inesperadas. - De nada Lanna - le sonreí, pero su temor parecía haber regresado por lo que me di la labor de intervenir levemente - Te necesitamos desde ahora como ya te lo había comentado, así que de una nos iremos a casa y ya que Jarko a aceptado no creo que vea inconvenientes en eso - observe a mi hermano entonces que después de haber aceptado todo parecía querer irse sin nosotros, solo que antes se dirigió a mi.
La expresión de Lanna dio perfecta respuesta a las tonterías que mencionaba Jarko, aquel hermano mío era tan desesperante… pero no podía imaginar la eternidad con algún tarado más conveniente que él. - Nos encontramos de hecho, al parecer Lanna me esperaba y yo, la buscaba ya sabes; esa clase de cosas extrañas que pasan en algunas ocasiones en la vida - no quería tener que darle explicaciones en esos momentos, después ya podría preguntarme cuanto quisiera.
Comencé a caminar, siguiendo el camino de antes para buscar llegar hasta la casa. - Vamos Lanna, es hora de irnos a casa.
Ackley Hinault- Cambiante Clase Alta
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Re: Entre árboles
Mal miré a mi hermano como era de esperarse. Mi mirada hacia Lanna fue reprochada con burla por él pero sin comprender realmente los motivos. Hace un tiempo me había marchado, era un viaje corto pero en el que no tuve mucho tiempo para alimentarme. Ahora estaba hambriento y la chica que acompañaba a mi hermano tenía un aroma que particularmente se me antojaba. Liberé eso de mi mente, no sin esfuerzo y adopté una postura más fría.
En efecto, retomando la objetividad, la chica se veía sana. Al que no quería ver tan sano era a Akseli, me daban ganas de propinarle un buen golpe por alardear sus plumas como un pavo real frente a un joven hermosa; aunque, al final me causaba cierta gracia. -Ya sé, ya sé, he dicho que esta bien.- Luego vino algo que me produjo de nuevo aquél efecto raro, esa sensación de molestia pero de gracia al tiempo. El beso de Lanna a mi hermano fue extraño y apenas enarqué la ceja limitandome para no acotar nada. Por lo visto mi carácter iba a ser puesto a prueba por ellos en varias ocasiones.
Sin embargo, la muchacha se acercó apenas tras una reverencia acompañada de sus agradecimientos. Desee que no se acercara demasiado porque ya luchaba bastante para controlarme y, por suerte, así fue. -Está bien, Lanna. Te confirmo como ya dije que no tengo problema y no hay nada que agradecer, sé que nos odiaras en cuanto veas lo pendiente.- Lo dije serio, si al menos le hubiera puesto otro tono sería una frase amable cualquiera aunque no era mi intensión. Sabía que podía llegar a odiarnos, o por o menos a mí. Planeaba infundirle temor a mi sola presencia sólo por el hecho que por respeto a mi hermano no podía bebermela.
Quise alejarme de repente como hago siempre. Una despedida simple bastaba, al final nos veríamos en casa. -Como sea, los veo luego.- esa fue toda mi despedida y entonces tomé la delantera para llegar a casa. Yo no tenía más que decir, mi instinto a causa del hambre, sólo quería actuar.
En efecto, retomando la objetividad, la chica se veía sana. Al que no quería ver tan sano era a Akseli, me daban ganas de propinarle un buen golpe por alardear sus plumas como un pavo real frente a un joven hermosa; aunque, al final me causaba cierta gracia. -Ya sé, ya sé, he dicho que esta bien.- Luego vino algo que me produjo de nuevo aquél efecto raro, esa sensación de molestia pero de gracia al tiempo. El beso de Lanna a mi hermano fue extraño y apenas enarqué la ceja limitandome para no acotar nada. Por lo visto mi carácter iba a ser puesto a prueba por ellos en varias ocasiones.
Sin embargo, la muchacha se acercó apenas tras una reverencia acompañada de sus agradecimientos. Desee que no se acercara demasiado porque ya luchaba bastante para controlarme y, por suerte, así fue. -Está bien, Lanna. Te confirmo como ya dije que no tengo problema y no hay nada que agradecer, sé que nos odiaras en cuanto veas lo pendiente.- Lo dije serio, si al menos le hubiera puesto otro tono sería una frase amable cualquiera aunque no era mi intensión. Sabía que podía llegar a odiarnos, o por o menos a mí. Planeaba infundirle temor a mi sola presencia sólo por el hecho que por respeto a mi hermano no podía bebermela.
Quise alejarme de repente como hago siempre. Una despedida simple bastaba, al final nos veríamos en casa. -Como sea, los veo luego.- esa fue toda mi despedida y entonces tomé la delantera para llegar a casa. Yo no tenía más que decir, mi instinto a causa del hambre, sólo quería actuar.
Jarko Nygard- Vampiro Clase Alta
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Re: Entre árboles
De nuevo aquellas palabras que ella no lograba comprender del todo, de nuevo esas miradas que parecían querer penetrarla y hacer que se fuera corriendo sólo porque sentía la latente amenaza de que en cualquier momento la matarían, tuvo que respirar profundo de nueva cuenta para no hacer ninguna tontería como las que acostumbraba, aunque casi nunca salía victoriosa. "Unos minutos más" se dijo a sí misma mientras escuchaba con atención.
Se separó de Akseli al notar la molestia de su hermano y era razonable, ¿Cómo la chica que hace la limpieza se acercaba de ese modo a su señor? Sólo a ella se le ocurría, pero Akseli le había dado la confianza de hacerlo ¿O no? Quizá había malinterpretado las cosas -No creo odiarlos señor, estoy para servirles en todo lo que se les ofrezca desde este momento- mencionó tratando de imaginar la casa, si era grande o si estaba realmente muy sucia.
Miró a Jarko por última vez y se quedó pensando muchas cosas, le costaría demasiado poder ganarse la confianza de él, parecía muy duro y bastante serio... Se mordió el labio -Creo que a él no le ha gustado mucho la idea... ¿verdad?- preguntó sin mirar al hombre que le había ofrecido el trabajo, se había quedado mirando el camino por donde se estaba alejando el otro que parecía tener conflictos con la vida y que alguien en casa le haría las cosas más complicadas -O es que simplemente le he caído mal...- murmuró frunciendo los labios, Lanna era fatalista por naturaleza y nunca podía evitarlo, era lo más normal en ella, su preocupación de siempre quedar bien la hacían pensar que los demás la odiaban, aunque la mirada de Jarko eso era lo que le había "dicho".
-Akseli...- de nuevo un murmuro salió de sus labios y se giró un poco para verlo -Si hay problemas en casa por mi culpa me lo dirás ¿Verdad? No quiero que tu hermano acepté mi ayuda sólo porque tú quieres...- sabía perfectamente que ella no podía poner condiciones u opinar y sin embargo lo hacía porque no le gustaba que los demás la mal vieran.
Se separó de Akseli al notar la molestia de su hermano y era razonable, ¿Cómo la chica que hace la limpieza se acercaba de ese modo a su señor? Sólo a ella se le ocurría, pero Akseli le había dado la confianza de hacerlo ¿O no? Quizá había malinterpretado las cosas -No creo odiarlos señor, estoy para servirles en todo lo que se les ofrezca desde este momento- mencionó tratando de imaginar la casa, si era grande o si estaba realmente muy sucia.
Miró a Jarko por última vez y se quedó pensando muchas cosas, le costaría demasiado poder ganarse la confianza de él, parecía muy duro y bastante serio... Se mordió el labio -Creo que a él no le ha gustado mucho la idea... ¿verdad?- preguntó sin mirar al hombre que le había ofrecido el trabajo, se había quedado mirando el camino por donde se estaba alejando el otro que parecía tener conflictos con la vida y que alguien en casa le haría las cosas más complicadas -O es que simplemente le he caído mal...- murmuró frunciendo los labios, Lanna era fatalista por naturaleza y nunca podía evitarlo, era lo más normal en ella, su preocupación de siempre quedar bien la hacían pensar que los demás la odiaban, aunque la mirada de Jarko eso era lo que le había "dicho".
-Akseli...- de nuevo un murmuro salió de sus labios y se giró un poco para verlo -Si hay problemas en casa por mi culpa me lo dirás ¿Verdad? No quiero que tu hermano acepté mi ayuda sólo porque tú quieres...- sabía perfectamente que ella no podía poner condiciones u opinar y sin embargo lo hacía porque no le gustaba que los demás la mal vieran.
Lanna- Humano Clase Baja
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Fecha de inscripción : 07/01/2013
Re: Entre árboles
Me encontraba hacer rabiar a Jarko, ser el mayor siempre le hacia creer que poseía razón en todo; aunque eso no era completamente cierto sabía que me reprocharía de mi manera de actuarr, pero no existe nada mejor que una buena pelea entre hermanos como bienvenida,
Sus respuestas eran algo cortantes como si deseara evadirse de las cosas que estaban pasando ahí, más específicamente quería huir de Lanna.
Adore la expresión de Jarko cuando Lanna beso mi mejilla y sonreí de forma burlona a él. Como cuando éramos niños y mamá hacía algo parecido para conmigo, solo que ahora no éramos niños u Lanna definitivamente no era mamá, lo que volvía mucho más interesante todo ese asunto.
Hice una mueca a Jarko, seguí diciendo cosas innecesarias a Lanna, ya cuando ella viera la casa podría decidir si quedarse o no.
- Yo espero no nos odies Lanna, se que habrá bastante trabajo pero todo será solo en un principio - puse cara de mártir queriendo convencerla de ignorar a mi hermano - después todo estará bien - Cuando se alejo no hice nada por impedirlo, si quería acercarme lo haría y mi hermano no podía decir nada… al menos no a ella.
- Jarko espera… - le dije antes de que comenzara a alejares pues seguía pareciendo grosero - ¡Ah, no!… - me volví a Lanna - es solo que así es Jarko… es especial pero te acostumbraras a él si no - me reí buscando su mirada - mirame a mi que llevo mucho tiempo viviendo con él - suspire para mostrar pesar - me volveré un ángel por aguantarlo.
Me situe detrás de Lanna para poner mis manos en sus hombros.
- Anda… vamos - le empuje con cuidado para seguir al inútil - Sí Lanna - le asegure mientras le guiaba - yo te diré siempre las cosas solo que ahora te pido que confíes en mi y no te preocupes más - sonreía para calmarla peque nada le pasaría y todo estaría bien; yo me encargaría de eso.
Hasta ahora parecía que tener a esa mujer en casa sería de lo mejor que nos había ocurrido mucho tiempo a ambos. nuestra entretenida estancia comenzaba desde ese momento y ahora solo podíamos esperar para ver que era lo que nos deparaba el futuro… juntos.
Sus respuestas eran algo cortantes como si deseara evadirse de las cosas que estaban pasando ahí, más específicamente quería huir de Lanna.
Adore la expresión de Jarko cuando Lanna beso mi mejilla y sonreí de forma burlona a él. Como cuando éramos niños y mamá hacía algo parecido para conmigo, solo que ahora no éramos niños u Lanna definitivamente no era mamá, lo que volvía mucho más interesante todo ese asunto.
Hice una mueca a Jarko, seguí diciendo cosas innecesarias a Lanna, ya cuando ella viera la casa podría decidir si quedarse o no.
- Yo espero no nos odies Lanna, se que habrá bastante trabajo pero todo será solo en un principio - puse cara de mártir queriendo convencerla de ignorar a mi hermano - después todo estará bien - Cuando se alejo no hice nada por impedirlo, si quería acercarme lo haría y mi hermano no podía decir nada… al menos no a ella.
- Jarko espera… - le dije antes de que comenzara a alejares pues seguía pareciendo grosero - ¡Ah, no!… - me volví a Lanna - es solo que así es Jarko… es especial pero te acostumbraras a él si no - me reí buscando su mirada - mirame a mi que llevo mucho tiempo viviendo con él - suspire para mostrar pesar - me volveré un ángel por aguantarlo.
Me situe detrás de Lanna para poner mis manos en sus hombros.
- Anda… vamos - le empuje con cuidado para seguir al inútil - Sí Lanna - le asegure mientras le guiaba - yo te diré siempre las cosas solo que ahora te pido que confíes en mi y no te preocupes más - sonreía para calmarla peque nada le pasaría y todo estaría bien; yo me encargaría de eso.
Hasta ahora parecía que tener a esa mujer en casa sería de lo mejor que nos había ocurrido mucho tiempo a ambos. nuestra entretenida estancia comenzaba desde ese momento y ahora solo podíamos esperar para ver que era lo que nos deparaba el futuro… juntos.
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Ackley Hinault- Cambiante Clase Alta
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